Me saque la chaqueta y la deje a un lado del sofá, estaba bastante cansado había trabajo toda la tarde y no quería hacer otra cosa que irme a dormir.
-¿Itsuki podemos hablar?- preguntó mi novio.
-dime- dije desde la cocina.
-es algo serio ¿te podrías sentar?
Era extraño que Tenma dijera que quería hablar algo serio, cuando eso pasaba sabía que tenía que preocuparme por qué lo que mediría no sería nada bueno.
-¿qué pasa?- me senté a su lado y le sonreí.
-Quiero un tiempo- dijo con la cabeza baja.
-eh- lo miré tratando de parecer sorprendido- ¿pero por qué?
-sexo Isuki, llevamos tres meses juntos y no has sido capaz de estar conmigo, pensé que si te daba tiempo todo estaría bien pero siempre que quiero ir mas lejos me detienes, soy un hombre tengo mis necesidades.
-solo es eso- lo mire enfadado en estos cinco años era la decima persona que me decía lo mismos, ¿acaso no podían pensar en otra cosa que no fuera sexo?- bueno si tanto te molesta consigue alguien que te de lo que quieres- me levante rápidamente tome mi chaqueta y camine hasta la puerta.
-Itsuki espera tenemos que…
-¡DÉJAME EN PAZ!- grite cerrándole la puerta en a cara.
Camine hasta que me sentí cansado y me di cuenta que había salido casi sin nada de la casa, revise mis bolsillos, tenía mi celular y un poco de dinero, suponía que podría beberme unos tragos. Me acerque hasta un bar que encontré en el camino y me senté en la barra.
-una cerveza por favor- pedí. No me gustaba beber pero unas pocas cervezas no le hacían mal a nadie.
Mire alrededor el lugar parecía bastante lleno y concurrido, pero nadie estaba solo en la barra, eso era bastante deprimente. Acababa de perder a mi novio y no tenía a nadie que llamar por qué no tenía amigos.
-un whisky- un hombre alto de unos treinta años se sentó a mi lado.
Lo observe fijamente mientras bebía mi quinta cerveza, no había probado su whisky, solo lo miraba una y otra vez sin siquiera decir una palabra.
-¿quieres otra cosa?- le pregunte, el también parecía solo y tal vez podría ser una buena compañía - yo invito.
-estás seguro- preguntó no muy convencido.
-me queda algo de dinero así que está bien- dije con una de mis típicas sonrisas.
Acepto mi ofrecimiento y tomó una cerveza junto conmigo. No sabía cuanto había pasado pero estaba seguro que había bebido mucho más de lo normal.
-¿cómo te llamas?- preguntó mirando me fijamente.
-Itsuki- dije acercándome a él- ¿te gusto verdad?
-¿por qué pregunta eso?- dijo alejándose de mí.
-me has estado mirando igual como lo hacían mis ex novios antes de pedirme un cita.
-es solo que me recuerdas a alguien.
-¿y esa persona te gusta verdad?- inferí, el afirmo con su cabeza - ¿qué pasa con esa persona?
-no me gusta hablar de ella- bajo la cabeza
-lo siento- me disculpe- pero si quieres puedo ser su remplazo- le susurre en el oído
-no creo que estés bien en este momento- comentó- has bebido demasiado y dices cosas sin pensar.
Era verdad estaba diciendo cosa sin pensar pero mi cerebro y mi boca estaba funcionado de forma diferente así que por más que quise alejarme de él, lo tome de su camisa y lo acerque hasta mis labios.
-de verdad creo que estás haciendo cosas sin pensar- me ayudo a parame y dejo un poco de dinero sobre la mesa- no estás bien y no soy capaz de dejarte así, ¿me puede decir dónde vives?
-no tengo casa- aclaré.
-entonces te dejare en un hotel para que pases la noche, no creo que sea bueno dejarte así en la calle.
No recuerdo como llegamos a una habitación que no pude observa muy bien por que la luz era bastante molesta. Sentí como me recostó en la cama y luego me quito las zapatillas.
-creo que aquí estarás bien- comentó alejándose de mi cuerpo.
-quédate- lo atraje hacía mi y volví a besarlo- ya te dije que puedo ser un buen remplazo.
-yo no necesito un remplazo- aclaró- pero muchas gracias por tu ofrecimiento.
-te prometo que la pasaras bien-me levante de la cama y me quede mirándolo un largo rato con la cara mas angélicamente sexy que podía hacer.
-no debería hacer esto, eres un muchacho borracho y hacerlo seria aprovecharme de ti.
No le respondí y lo acerque hasta mi, le saque su corbata y comencé a desabotonar su camisa, los músculos en su abdomen estaban totalmente definidos, su piel era perfecta sin ninguna marca o imperfección, me quede mirándolo y él aprovecho de invertir las pociones, se puso sobre mi y delicadamente empezó a subir mi camiseta.
-no tengo un físico tan perfecto como el tuyo- me disculpé.
-me gusta así- dijo acercándose hasta mis pezones para lamerlo.
-ah..-gemí cuando comenzó a juguetera con su lengua.
-eres bastante sensible- rio bajando su mano para tocar mi miembro- ¿aquí también?
-ah... -gemí en cuanto su mano fría hizo contacto con mi piel- ah…- desabotono mi pantalón y bajo mi ropa interior- ah…ah…- masajeaba mi miembro rápidamente- me... me vengo- dije antes de que él me soltara y dejara tomo mi pecho manchado.
-date la vuelta y sube las caderas-ordeno y yo solo obedecí. El hombre del que ahora recordaba ni siquiera sabía su nombre se acerco hasta mi entrada- ¿cuándo fue la última vez que estuviste con tu ultimo novio?- me preguntó.
-eh… no lo recuerdo- metí.
Nunca había estado con ninguno de mis novios, siempre nos masturbábamos y una que otra vez hacíamos otra cosa, pero jamás había dejado que un chico estuviera dentro de mí.
Vi sus dedos acercarse hasta mi boca y di vuelta el rostro para poder mirarlo.
-lámelos- me ordeno.
Obedecí y comencé a lamerlos hasta dejarlo totalmente húmedos, los saco de mi boca y sentí como el primer dedo entraba a mi cuerpo, era realmente molesto, comenzó a hacer un movimiento circular dentro de mí, y sin previo aviso un segundo dedo se adentro en mi.
-ah…- me queje al sentir el dolor
-no te quejes, ya casi estas- siguió con un movimiento de tijeras, para luego meter un tercer dedo
-ah…- una extraña sensación recorrió mi cuerpo cuando con sus dedo toco un lugar- ah… se siente raro
Saco sus dedo y sentí como su miembro se acercaba a mi entrada, con una rápida estocada se adentro a mi cuerpo
-¡AHHH!- grite más fuerte de lo que lo había hecho nunca, esto era horriblemente doloroso- sácalo, sácalo
-no arruines la diversión esto ya se sentirá bien para ti- dijo sin tomarme en cuanta. Tomo mis caderas y comenzó un movimiento lento en mi cuerpo.
De pronto se detuvo y me giro bruscamente para dejarme boca arriba en la cama
-¿qué haces?- me queje
Tomo mis labios y me beso demandantemente, pasado su lengua atreves de mi boca, recorriendo cada lugar, no me quise quedar atrás y sin pesarlo seguí el juego para comenzar con una extraña guerra en nuestras bocas.
-Hideki- dijo mientras seguía moviéndose dentro de mí. Al parecer al alcohol ya estaba haciendo efecto en su cuerpo- Hideki- siguió besándome mientras las embestidas se hacina más rápidas.
-ah...ah…- por fin estos se sentí bien- me aferre a su espalda sintiéndome cada vez mejor-ah…-el hombre tomo mi miembro y comenzó a masajearlo-me vengo...me…- esparcí mi esencia entre nuestro cuerpos y después de un rato sentí como él se corría dentro de mí y caía rendido sobre mi cuerpo. No pude quejare mucho por el peso ya que sin siquiera darme cuenta me dormí.
*
Tome mi cabeza con las dos manos me dolía a horrores, ¿que había hecho la noche anterior?, mire a mi alrededor, estaba en un cama totalmente desnudo.
-ya te despertaste- un hombre de unos treinta me miro fijamente, tenía su cabello mojado y vestía un traje que parecía estar arrugado.
Leves recuerdo llegaron a mi mente, me había acostado con ese hombre, un tipo que ni siquiera conocía y del que nunca había oído nada.
-aquí hay algo de dinero para que pagues el hotel- dijo el hombre sin disimular su preocupación- siento mucho esto, no soy una persona de relaciones de una noche, así que no creo que…
-no te preocupes, supongo que el alcohol nos paso la cuenta- le sonríe, suponía que eso tal vez lo tranquilizaría.
-supongo-bajo su cabeza- hasta siempre- abrió la puerta - por cierto no estuvo mal para ser tu primera vez- comentó antes de irse.
Baje la cabeza avergonzado. ¿Cómo sabía que era mi primera vez?
Me levante lentamente y me di una ducha, tome mi ropa y me vestí rápidamente, aun tenía que ir a buscar ropa limpia al departamento de Tenma y irme a trabajar.