Capitulo 1: El día que las cosas empiezan a salir mal
Su boda había sido una de las fiestas del año, eso no era lo que él había querido pero por darle el gusto a su novio y la familia de este había aceptado y soportado a los periodistas sin maldecirlos, bueno no pero lo había hecho en forma discreta y nadie se entero.
Su luna de miel había sido perfecta su novio ahora esposo era tan guapo tan refinado tan especial que el no salía de su asombro ¿por que lo había elegido a él?
Harry no se tenia en alta estima a si mismo aunque había vencido a Voldemort, y se había convertido en uno de los mas prometedores Auros los traumas de su niñez le perseguían y tenia una pobre imagen de si mismo. No muchos se daban cuenta de sus problemas ya que uno de ellos era ser algo reservado, más cerrado que una ostra, seria la expresión acertada para describirlo.
Se quedaba embelezado de su rubio esposo tan guapo, alto con presencia, de modales exquisitos y tan seguro de si mismo que verdaderamente se preguntaba que había visto este en él, que era demasiado bajito, chiquito, patoso en el ámbito social… pero milagrosamente ese espécimen fantástico que era todo lo contrario a lo que el era parecía quererle y el le amaba o si le amaba.
La vida parecía fluir como miel sobre hojuelas y su única “discusión” en ese viaje fue donde vivirían finalmente. Harry quería hacerlo a orillas del mar, recordaba la cabaña de Bill y Flue, y la protección que esta les dio en la guerra, el oasis de paz que había sido la playa para sanar heridas y recuperar fuerzas. Draco, en cambio quería vivir en una ciudad grande o en sus inmediaciones. Por los negocios a los cuales se dedicaba era importante estar en contacto con la gente además que, como todo Malfoy sabia, su casa era otro símbolo de poder e intimidación útil al fin de negociar. Según su punto de vista podían tener una cabaña de fin de semana a orillas del mar muy romántica para escapadas pero no vivir allí, en realidad Draco esperaba seguir viviendo en la mansión de su familia ya vería como convencería a Harry.
Al arribar a Londres lo hicieron de madrugada y por la hora inconveniente Draco directamente los apareció en su habitación de la mansión, el acuerdo era vivir allí hasta que encuentren el lugar ideal para ellos.
La habitación del rubio impacto un poco a Harry, quien no había convivido con el lujo en forma cotidiana, por supuesto que tuvieron sexo del rico esa noche pero Harry no estaba del todo cómodo sabiendo que sus suegros estaban en la misma casa.
Cuando despertó el rubio le tenia fuertemente abrasado y el hundió su nariz en el cuello de su amado intentando impregnarse de el.
-al fin te despiertas
-me cansaste mucho anoche
-Tenemos que bajar a almorzar, nos hemos salteado el desayuno
-podemos tomarnos un tiempo mas, mientras se acurrucaba perezoso
-vamos Harry que mis padres se lo tomaran a mal si no almorzamos con ellos
Se vistieron entre besos y charla intrascendente, Harry estaba nervioso y no era para menos en cuanto saliera de esa habitación su vida empezaría a cambiar y no para mejor.
Cuando llegaron al comedor sus suegros ya estaban esperándolos
-Se dignaron a regalarnos su presencia, hemos atrasado el horario del almuerzo por ustedes
-Padre
-Lucius, querido son recién casados
Lucius siempre había sido imponente en la cabecera de la mesa se veía aun mas, era un maldito Harry sabia eso pero un maldito con presencia, Narcisa estaba a su lado, Harry tenia la impresión de que siempre le hablaba mirándole por encima, bueno era mas alta que él a favor de ella. En realidad él era muy consiente que le despreciaba. Apechugo un poco y se dijo para si, que era solo momentáneo, en unos días tendrían su propia casa y a sus encantadores suegros los vería para el solsticio y con suerte ni en esa fecha. Draco sintió algo de su nerviosismo porque le tomo la mano y le sonrío
Se sentó al lado de Draco dispuesto a pasar el primer almuerzo con sus suegros. Los platillos que se sucedieron eran nuevos para el, si bien había comido ya con magos ingredientes que solo usan los magos no pasaban de simples guisos de la señora Weasley y esto era totalmente distinto. Los sabores las texturas estallaban en su boca exquisito se quedaba corto, pero el ambiente de tirantes que reinaba no le permitía disfrutar. Se vio añorando a los Weasley y lo distendido de sus almuerzos. La conversación era sobre los eventos sociales del mes a los cuales parecía ser que debían asistir, Harry no quería ni darse por enterado ni participar de la conversación hasta que Narcisa se acordó de él
-Harry, querido ¿Qué evento debemos agendarte este mes?
-¿Evento?
-Si amor, que compromiso no puedes dejar de lado el mes de septiembre le acoto Draco
- Bueno, esta el cumpleaños de Hermione pero solo será una cena familiar y una salida de amigos como siempre supongo.
Harry nunca había pensado en el cumpleaños de Hermione como un evento más bien era la oportunidad de salir todos a guarriar por ahí, siempre fue el más divertido.
-¿Del trabajo no tienes ningún compromiso que cumplir?
-Por favor Narcisa, es un simple Auro ¿que compromiso tendría que cumplir?
-Lucius! También es el salvador del mundo mágico podrían hacerle algún reconocimiento
-Espero que no, acoto Harry dejando a Narcisa contrariada. La mujer como muchos pensaba que la falta de reconocimiento que el ministerio tenía con Potter le afectaba, nada más lejos de la realidad. Harry a diferencia de otros no pretendía sacar ventajas de su fama
Al terminar el almuerzo Draco se fue con su padre para hablar de unos negocios que el rubio tenía que retomar y Harry se quedo con Narcisa sin saber que decirle ni que hacer
-¿Te a gustado tu habitación?
-¿Mi habitación?
-¿Draco no te ha asignado una habitación?
-No, pensé que compartiríamos la de él, inmediatamente que dijo eso se le subieron los colores a la cara
-Debes tener tu propia habitación tu lugar en la casa, me haré cargo de eso
-No nos quedaremos mucho tiempo en la mansión, nos mudaremos a nuestra casa en cuanto podamos
- Bien pero mientras tanto deberás tener tu propia habitación.
Harry no estaba muy seguro que tenia que agradecerle pero lo hizo, él quería seguir compartiendo habitación con Draco, pero pensaba no usar “su” habitación
Draco y su padre tenían una tarde ocupada y Harry decidió ir a visitar a sus amigos y llevarles los obsequios que les había comprado
Se presento en la casa de Ron y Hermione, el trabaja en la tienda de chascos con sus hermanos y Hermione trabaja en el ministerio en la sección de contratos mágicos, era una abogada muy capaz pero recién iniciaba y las cosas le costaban por no tener contactos en el mundo mágico.
-Hola hermano, ¿Cuándo llegaron?
-Anoche
-Harry ven a la cocina que no puedo dejar esto sin revolver
-¿Y cocinas Herm?
La cara de Ron negando sin que lo viera su mujer le hizo gracia a Harry
-Me defiendo, ¿te quedaras a cenar? ¿Y Draco?
-Con su padre discutiendo negocios
-Te compadezco vivir con esos
-No será por mucho tiempo, nos mudaremos a nuestra casa en cuanto la compremos
-Pásame una cerveza Herm, toma una Harry
-¿Y ustedes como están como están todos?
-Bien, la tienda va muy bien, Los Weasley sin problemas de dinero ¿lo puedes creer?
-Me alegro por eso, y tu Herm
-Me esta costando mas de lo que pensé adaptarme al ministerio, tanto favoritismo me exaspera
-Díselo a mi padre que trabajo toda su vida allí
-Y a ti Harry ¿como te va de Auro?
-Me iba bien pero ahora el jefe cambio y veremos
-¿Mckelly se fue?
-Se jubilo
-Y ¿a quien pusieron como jefe?
- A Watson no creo que le conozcas
-No me suena de nada
-Trabajo siempre en regulación, yo le conozco he trabajado con él es algo estirado pero capaz dijo Hermione mientras intentaba quitar algo del condimento que se había caído en la comida
-¡Un burócrata de jefe!
-Exactamente, un burócrata que me quiere más bien poco para colmo
-Cuando te reintegras
-Mañana, haber con que me encuentro.
Harry se quedo a cenar con sus amigos, quería hablar con Draco para invitarle pero le fue imposible el elfo que le atendió tenia ordenes de no interrumpir a sus amos en el despacho y se tuvo que conformar con que les informe de que el no iría a la cena
No volvió particularmente tarde, al día siguiente tenia que presentarse a servicio. Justo cuando el elfo le permitía el acceso por la chimenea escucho a Draco y Lucius hablando en la escalera corrió a encontrarse con Draco después de estar días sin separarse de él una tarde sin verle le parecía demasiado.
Subió atropelladamente y beso a Draco efusivamente
-Potter siempre tan impulsivo, me despido, descansa Draco que mañana debemos estar frescos
Harry tenía ganas de hacerle burla a su suegro como los niños pequeños obviamente se contuvo pero abraso más fuertemente a su esposo
-Espero que no planees dormir le dijo en cuanto el padre de este se había ido
-Lo siento Harry pero papá tiene razón debo dormir para mañana estar alerta tenemos una reunión muy importante por la mañana
-Entonces te haré unos mimitos y te cantare el aroro
-Enserio Harry esta noche tengo que descansar, mamá me dijo que te dio una habitación
-¿No quieres que duerma contigo?
-Harry si te quedas conmigo sabes que no dormiré
-Ni se donde esta mi habitación
-Kutt te llevara, dicho esto llamo al elfo y le dio instrucciones de que guiara a Harry a su habitación
Harry no entendía como de despertar en brazos de su amor en menos de 24 horas termino en una habitación del otro lado de la mansión. Sus cosas ya estaban allí amontonadas sobre un sofá, bueno serian unos pocos días podía aguantar unos pocos días.