Nada estaba bien y a pesar de que Hiroto le seguía insistiendo nada hizo cambiar la actitud del castaño, ni siquiera al darse cuenta como eludía de todas las chicas de su escuela cuando lo saludaban, esto iba de mal en peor.
Hiroto observó como Shou se quedaba paralizado al llegar al salón, la razón era porque se sentaba al lado de una chica y aunque Shou lo seguía negando, estaba seguro que ahora le tenía un miedo horrible a la estudiante.
-Espérame aquí Kohara-kun- le dijo el pequeño para irse hablar con la compañera de asiento de Shou, quien lo miró confundida por la petición del rubio, pero finalmente aceptó el cambio de asiento por parte de Hiroto.
-Gracias Pon- sonrió agradecido el más alto cuando llegó a su asiento y el rubio sólo asintió, si Shou no quería reconocer su problema, él haría todo lo posible para ayudarlo y protegerlo.
-¡Kohara-kun, Kohara-kun!- gritó una chica alegre entrando al salón con una revista en la mano, “mierda”-pensó Hiroto, esa chica era una amiga de Shou, ambos compartían el gran fanatismo de la moda, pero como se lo esperó el más alto la veía aterrado como se acercaba a su asiento- Mira Kohara-kun, salió la nueva edición de Kera, la fui a comprar esta mañana apenas me levanté
-Ahh…gracias- respondió sin mirarla, sintió como comenzaba a temblar nuevamente y el miedo lo dominaba
-¿ehh..Kohara-kun estás bien?-lo miró examinándolo preocupada- Vamos, si quieres puedes verla mira- le tendió la revista en sus manos y vio como el mayor apenas levantaba su mano para tomarla- Vamos Kohara-kun, tómala con confianza, no te preocupes- le agarró el brazo para tenderle la revista pero de inmediato el más alto se levantó de su asiento aparatando la mano de la chica de un fuerte manotazo- Kohara-kun…
-¡ah! Discúlpalo Kaede –chan, Shou está algo enfermo eso es todo- rió Hiroto tratando de calmar los nervios y la preocupación de la amiga de Shou, sobretodo porque ahora toda la clase se había girado a verlos al escuchar el quejido que dio la chica por el golpe.
-¿enfermo?- lo miró preocupada viendo como su amigo temblaba y apretaba sus puños con fuerzas y aún no se atrevía a mirarla- Shou-kun ¿qué te pasa?- tocó levemente su hombro
-¡NO ME TOQUES!- gritó apartándola de un empujón con furia haciendo caer al suelo a la castaña, sorprendiendo a todos hasta al mismo Hiroto, eso de ahí era algo increíble, Kohara jamás se enojaba y la forma en como reaccionó no era de él- ¡¡No me vuelvas a tocar en tu vida!!
-Kohara-kun…- murmuró asustada casi llorando por la forma en que la miraba el más alto y la rechazaba-Lo siento..yo no quería
Al ver las lágrimas de su amiga, pudo darse cuenta de lo que había echo, la golpeó, la hirió profundamente, la había echo llorar, ¡¿qué pasaba con él? ¿Y por qué no podía consolarla ahora? No podía acercársele…el sólo imaginarla tocarla lo aterraba.
¡Mira lo que hiciste imbécil! La hiciste llorar, eres cruel Kohara-kun, ¿y te haces llamar hombre? , eres un insensible-eran de las muchas frases cada vez más hirientes que les decían sus compañeros de clase, sin embargo él permanecía en shock, sin atinar qué hacer ni qué decir.
-¡hijo de puta discúlpate con mi novia ahora!- Kazuki, uno de sus compañeros ahora lo tenía aferrado del cuello de la camisa y Shou seguía mirando a todas esas chicas que lo miraban con odio, su corazón latía con fuerza, debía huir de allí, tenía que escapar de ese lugar.
-¡ya déjalo!-gritó Hiroto empujando al mayor para apartarlo de su mejor amigo- ¡Shou! ¡Shou! Tranquilo no tienes que- pero antes de que pudiera terminar la frase, el castaño salió corriendo de su sala de clases dejando al rubio con la palabra en la boca.
-Puto cobarde- masculló Kazuki ayudando a levantar a su afectada novia que seguía llorando en el suelo, mientras Hiroto miraba con furia al tipo, tenía ganas de contestarle, nadie insultaba a su amigo pero ahora éste lo necesitaba, así que decidió ignorarlo y salir en busca de Shou.
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Estaba algo nervioso, este sería de una nueva etapa para él, había abandonado todo para salir adelante, pero lo que más le había dolido era haber dejado a su mejor amigo.
-¡Oye tú! ¿creíste que te escaparías de mi?- esa voz, se volteó sorprendido al reconocerla y una gran sonrisa se formó en su labios al ver a su querido Hiroto vestido con su mismo uniforme, no podía creerlo-Te dije que te protegería y estaría a tu lado Shou, aunque ahora que estamos aquí, no creo que halla que protegerte de mucho
-¡Pon!- gritó alegre dirigiéndose a abrazar al rubio, estaba enormemente feliz de que estuviera a su lado en esta nueva etapa de su vida.
Después del incidente en su antigua escuela, el pleito llegó a oídos del director, quien se sorprendió mucho que un alumno tan bueno como Kohara hubiera tratado así a una compañera, sin embargo, todo quedaría perdonado si Shou se disculpaba con ella, algo prácticamente imposible, el castaño le aterraba verla, es mas, no podía ver a ninguna de las chicas de su escuela y el director al ver la rotunda negativa de su estudiante y que no daba ninguna explicación a sus actos, no tuvo mas remedio que expulsarlo del establecimiento.
Shou se llevó un gran regaño por parte de sus padres, que constantemente le exigían que les diera una explicación de lo que sucedió, pero Kohara se negó, amenazando que no iría a ninguna escuela sino fuera una donde asistieran sólo varones, finalmente sus padres aceptaron obligados, era eso o que su hijo se fuera de casa, además de que Shou logró quedar en uno de las mejores escuelas del país, lo cual los hizo sentirse orgullosos de su hijo y que el incidente quedara olvidado.
-¿sabes lo mucho que me costó encontrarte?- le reclamaba Hiroto mientras se encaminaban a su nuevo salón de clases
-Lo siento Pon, pero no quería que por mi culpa también te fueras, eras muy querido y popular allá
-¡bah! Eso vale mierda, tú eres más importante para mi que todas esas cosas Shou- le sonrió abrazándolo y provocando un leve sonrojo en el mayor, que se sentía feliz de tener de nuevo a su mejor amigo consigo.
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-¡¿te gustan las chicas?!- gritó sorprendido el rubio, ya había pasado un año desde que estaban en el nuevo colegio y Hiroto no podía creer que Shou hubiera rechazado a unos de los chicos más guapos de su colegio
-Que les tenga miedo no significa que no me gusten-respondió simple tomando de su bebida.
-No entiendo Kohara, apenas se te acerca una chica a hablarte le rehúyes, más bien yo tengo que espantarla, si se llega a enterar Akira me mata- y sólo recordar que tenía que hacerse pasar por el novio de Shou solo para espantar a sus pretendientes lo estresaba, si su novio se enteraba con lo celoso que era, era capaz de matar a su amigo y luego matarlo a él.
-Ya Hiroto que ahora al menos puedo mirarlas, siempre que no me miren a mi y no se me acerquen…mira te explico...es como si admiraras algo a lo lejos, pero si lo tienes de cerca se te hace horrible, que en mi caso se me hace aterrador
-Pues con ese pensamiento no vas a tener novia en toda tu vida- suspiró cansado, ya se había cansado de insistirle a Shou que se viera con un especialista, siempre recibía la misma respuesta- ¿por que no lo intentas con los chicos? Vamos Shou que Ryoga-san si que era muy guapo, harían una bonita pareja
-Pero no me gustan los hombres Pon, además su personalidad era horrible
-baaah no hay caso contigo- se rindió arrebatándole uno de los onigiris del almuerzo de Shou, mientras pensaba en un plan de conseguirle pareja a su amigo.
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-¿el amigo de Reita-san?
-Si, dice que nos vio en el tren y parece que le gustaste, Reita me ha dicho que es muy guapo, y si es amigo de mi Akira, es perfecto para ti
-Pon, ya te dije que no soy gay- le dijo molesto
-Oye que él tampoco lo es
-¿eh? ¿Entonces cómo?
-Según Reita le gustan las chicas, pero dice que tú eres la excepción, de verdad lo dejaste todo baboso, eres todo un don Juan, Shou- rió divertido provocando un ligero sonrojo en el más alto- Mira, mañana en mi casa empezamos con las clases para mi novio ¿no? ahí puedes preguntarle todo lo que quieras de Uruha-san, yo también estoy interesado en saber muchas cosas de él
-¿Uruha-san? ¿No me dijiste que era un chico?
-Es su apodo, le dicen así ¿crees que soy tan idiota para emparejarte con una chica?
-No, no, claro que no Hiro, pero en serio, creo que pierdes el tiempo, es imposible que me guste- rió provocando una sonrisa emocionada en el rostro del pequeño rubio
-Eso ya lo veremos Shou, ya lo veremos
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-¡mira Shou-kun, lo hice!- dijo el chico de la bandita en su rostro, hace casi un mes que Shou se había convertido en su tutor y podía sentir cómo cada vez mejoraba más en las matemáticas.
-De verdad que eres un dios Kohara, lograste sacarle la estupidez a mi novio
-¡Oye!-reclamó el mayor molesto- No deberías tratar a tu pareja así ardillita- lo abrazó con fuerza aprovechando de darle un beso en su cuello.
-Ya Akira avergonzamos a Shou- lo trató de apartar viendo lo rojo que ahora se encontraba su amigo, al ver la muestra de cariño de la pareja.
-No te preocupes por mi Hiroto- le sonrió sincero- Nee Akira-san, ¿cómo está Uruha-san?
-Vaya, ya me estaba extrañando que no me preguntaras por él – lo miró divertido haciendo sonrojar al castaño y de paso acomodando en sus piernas a su novio- Hoy el idiota si que hizo algo increíble, rechazó a la chica más popular de nuestro colegio, casi todos se le vienen encima
-¿la rechazó?
-Más encima frente a todo el mundo Shou-kun, igual se lo merecería la perra creída esa
-¿lo ves Shou? Se nota que Uruha-san esta muy interesado en ti- dijo Hiroto emocionado viendo la linda sonrisa que se dibujaba en el rostro de su amigo, Reita le había hablado tantas cosas de Uruha, que hicieron que Shou se sintiera atraído al instante y que prácticamente todos los días preguntara por él-Parece que te gusta- habló burlón
-¿¿eh?? Claro que no
-Vamos Shou, estás en confianza, nada te pasará por aceptarlo
-yo…no
-Mira si se puso todo nerviosito Hiro-pon
-jejejee, eso veo, vamos Shou, anímate
-Esta bien Hiro, tú ganas, él… sí me gusta
-Uuy si se puso todo colorado lo ¿viste Pon?-rió el mayor, provocando que el sonrojo de Shou fuera más notable- Aunque te digo que tienes pésimos gustos, te he hablado de lo bueno y malo que tiene Uruha y aún así te gusta, si que eres raro
-Pues… tú dijiste que era confiable, cariñoso y protector con sus parejas, eso es muy importante para mí
-Y guapo Shou-kun, ese jodido idiota es terriblemente guapo, para mí, eso es lo único bueno que tiene
-Mmm no creo que a Shou le importe mucho eso-habló Hiroto
-No es que no me importe, es sólo que pienso que no es lo más importante para que te guste alguien, pero si es guapo como dice Reita-san, no me molestaría- sonrió algo avergonzado.
-Ya lo sabía- comentó alegre levantándose del piso- Traeré más combustible, necesito más comida para mantenerme despierto- explicó el mayor antes de desaparecer en la cocina y dejar a ambos amigos solos.
-A mi no me engañas Kohara, a ti Uruha-san te gusta más de lo que Reita piensa ¿eh?- se acercó sonriente, mientras el otro asentía-¿lo quieres?
-…-el más alto negó- Creo que me enamoré de él, Pon- confesó apenas en un susurro que dejó al pequeño en shock
-¿enamorado dices? ¿Pero cómo? ¡Shou ni siquiera lo has visto en persona!
-Ya te dije que el físico no me importa, pero las cosas que me ha dicho Reita-san, me hace pensar que es la persona perfecta para mí
-Reita tiene razón, eres muy raro- suspiró acostándose sobre las piernas de su mejor amigo- Pero cualquier decisión que tomes, sabes que siempre te apoyaré
-Gracias Pon
-¡oigan chicos!- los llamó Reita entrando con un nuevo paquete de frituras para “la noche de estudio”- Mañana les presentaré a Uruha
-¿eh? ¿En serio?- preguntaron ambos emocionados mientras el mayor asentía, mañana por fin conocería a ese chico, Shou no pudo evitar que una gran alegría y ansiedad lo recorrieran, si Uruha era como lo había descrito Reita en cada una de sus conversaciones, era su persona soñada
-“Sólo espero que yo también le guste en persona”- pensó algo nervioso, si bien Uruha lo conocía gracias a los relatos de Reita y porque lo había visto una vez en el tren, no quería decepcionarlo cuando hablara con él.
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-Que baja autoestima te tienes Shou- se quejaba el pequeño rubio mientras se encaminaban a la escuela de Reita- Tú también le gustas ¿no?
-Pero tú ya oíste a Reita, es muy guapo y yo
-Y tú también lo eres, él te vio en el tren y fue amor a primera vista para él
-Pero tal vez me vio de lejos y no se dio cuenta que
-¡ya Shou! Para con tu paranoia- dijo cansado- Ya verás que todo resultara bien y le gustarás tanto como a ti te gusta- le sonrió tranquilizando al más alto, Hiroto tenía razón, debía tener más confianza en si mismo, tenía que verse en el mismo nivel que Uruha para no decepcionarlo, tenía que hacerlo bien.
-¡mira ahí están!-los señaló a ambos chicos que lo esperaban a la entrada de su colegio, Shou observó al compañero de Reita…ese chico…lo miró más atentamente…cada vez que si iban acercando parecía que estaba viendo a ¿una chica? ¿Pero por qué estaba usando uniforme masculino?- ¿ves? te dije que era muy guapo-le habló al oído notando como Shou se encontraba nervioso pero demasiado - ¿Shou? Tranquilo, no pasa nada
-Hiroto yo- pero antes que pudiera decir algo se quedó sin habla al ver que ya estaba frente a ambos chicos, se notaba que el acompañante de Reita también estaba nervioso, pero ahora si que estaba seguro que era una chica, su cuerpo se paralizó de inmediato, estaba demasiado cerca de ella…¿dónde estaba Uruha-san? ¿Por que Reita estaba con una chica a su lado? ¿Por qué Hiroto se veía tan tranquilo? se supone que él sabía su problema, se suponía que sabía que no podía acercarse tanto a una mujer, estaba aterrado, esa chica parecía tener su misma altura y si que era hermosa, pero estaba demasiado cerca de él.
Vio como lo miraba confusa, lo examinaba, lo estaba observando, no pudo mantener su mirada y la desvió, los temblores de su cuerpo se hacían más notorios y Reita y Hiroto comenzaron a notar lo alterado que estaba.
-Etto…Shou- lo llamó preocupado Hiroto, podía notar como leves temblores recorrían su cuerpo, esto era muy raro, esto sólo le pasaba cuando estaba muy cerca de una mujer…¡una mujer! Mierda, pero es que Uruha si parecía una chica con esa linda cara, de seguro Shou lo había confundido, ¿por qué diablos Reita no le dijo que su amigo sería así de hermoso?
-Ah, hola Shou y Hiroto-interrumpió Reita su pensamiento- Les presento a Shima o Uruha, como quieran llamarle-sonrió, pero de pronto todos notaron como la piel de Shou se ponía blanca como si hubiera visto un fantasma, Uruha…Uruha…ella era su querido y amado Uruha, no podía creerlo, la miró con terror, ese no podía ser Uruha-san…¿por qué sus amigos le habían mentido? Se suponía que él conocería un chico, no una chica…no quería…no quería aceptarlo aún, así que como pudo sacó fuerzas para hablar y dirigirse a esa castaña que lo miraba confundida.
-¿Us..ted es Uruha-san?
-…-el más alto asintió con algo de nerviosismo, no le gustaba como lo veía Shou, el pobre chico estaba aterrado, ¿tenía miedo de él? ¿Pero por qué? ¿qué había echo?
Era ella, esa chica era su querido Uruha, ¡se había enamorado de una chica! ¡No podía creerlo y ahora qué haría! No podía soportar ni siquiera mirarla, a pesar de tener estos sentimientos no podía eliminar su miedo por el sólo echo de que Uruha era una mujer, tenía que irse, tenía que largarse de allí.
Retrocedió unos pasos y no le importó salir corriendo, sin importarle los gritos que daba Hiroto para que se detuviera, había sido cruel dejar a Uruha y rechazarla de esa manera, pero no podía seguir al lado de ella, no lo aguantaba más, esa persona…de la que tanto Reita-san le había hablado y por tonto que suene, se había enamorado, se enamoró de su personalidad….Uruha-san…era una chica-.