Se levantó con pesadez, a su lado dormía su inocente novio, sonrió inconscientemente al mirar la carita que tenía Kohara, era verdaderamente adorable dormido. Ayer se habían quedado viendo una película y suerte que tenía la televisión frente a su cama, de inmediato y por la hora que era Shou cayó dormido y se acurrucó instintivamente en su regazo; Uruha le correspondió y lo abrazó durmiéndose también, había tenido un día agotador y hoy tendría una tarde agotadora, suerte que para él y Shou tenían clases en la tarde. Miró la hora, aún eran las 11 de la mañana, era demasiado temprano para sus clases, así que podían dormir un poco más.
Cerró sus ojos y se abrazó aún más a ese cálido cuerpo a su lado, recordó que había pasado ayer, estuvo a punto de hacerlo con Shou, y era un maldito inconsciente y pervertido, sólo llevaban un día de novios y ya quería cogérselo? Bueno, mejor dicho que Shou se lo cogiera a él, pero la situación era la misma, ¿es que acaso Uruha no pensaba con la cabeza? Kohara no era cualquier chico, tenía que llevar las cosas con calma, no tenía que apresurarlo, podía surgir nuevamente el trauma del castaño, Hiroto se lo había dejado muy claro después del almuerzo de ayer.
-¡Shima! Espera tengo que hablar contigo- lo detuvo el pequeño rubio; ya casi todos se habían marchado a sus clases, la hora de almuerzo hace rato ya había terminado
-Vamos Pon, ¿no puede ser más tard?, el vejete me cerrará la puerta en las narices y no me dejará entrar
-Sólo será un momento, ¡onegai!- rogó Hiroto mientras Uruha miraba como su mejor amigo ya se adelantaba a sus clases
-Pero Reita también se va
-No importa, necesito hablar contigo de esto ahora, además tengo suerte de que mi profesor no sea un ogro como el tuyo-
-“maldito enano suertudo”-pensó Uruha molesto, ahora lo castigarían por su maldita culpa y él saldría ileso, pero bueno, tanta insistencia que le mandaba Hiroto que le entró la curiosidad y decidió quedarse un rato más con él-¿y? dime rápido y espero que sea algo serio sino quieres que te asesine ardilla
-¡claro que es importante! Es sobre Shou-kun- el solo escuchar el nombre de su novio hizo que Shima se olvidara completamente del posterior castigo que le daría el vejete que le hacía clases - Shima, verás, yo sé por Reita que tú, bueno…tú eres …ehh en palabras simple un obsesivo, maniático del sexo
-¡oye!-se quejó avergonzado por ese apodo, que aunque lo negara era bien cierto
-¡y no trates en negarlo! Sé bien por Reita que a las pocas horas de salir con alguien te encamabas al primer día- lo miró serio, mientras Uruha se sonrojaba aun más, estúpido Akira que hablaba de más- Y supongo que eso no lo harás con Shou-kun
-¿qué? ¡¿estás loco! Claro que si lo haré, ya no aguanto las ganas de hacerlo con
-¡Uruha! ¡No puedes responderme eso!
-¡¿qué?! ¿pero qué tiene de malo que quiera hacerlo con Shou? lo amo, él me ama, me acepta como soy y yo también …además, ¿tienes idea de cuantos años esperé por este momento?
-¿es que acaso eres idiota o ya se te olvidó el problema de Shou?
-Claro que sé su problema, es por eso que yo no le haré nada y sabes que es un gran sacrificio para mí- mintió, la verdad y aunque a Uruha le costara mucho reconocerlo, le gustaba mucho más hacer el papel pasivo con sus parejas, que él siendo de activo y con Shou, lo único que se podía imaginar su pervertida mente era a Kohara dándole por detrás innumerables veces sacándole esa fiera interna que tenía el tímido diseñador.
-Uruha, estas tomando el problema de Shou como si fuera cualquier cosa- trató de explicar lento porque se notaba que el más alto no tenía idea de cuan serio era el problema con su amigo- Shou no puede tener sexo de ninguna manera posible
-¿eh? ¿Cómo? Ni siquiera siendo de
-Ni siquiera haciendo tu` gran sacrificio´- hizo comillas con sus dedos en esa última frase porque sabía que para Uruha eso no era un sacrificio- Verás, tú no eres el primer chico con que salió Kaza-chan
-¿qué? –gritó casi de espanto, esa sí que era una gran sorpresa, ¡¿así que el desgraciado de Kohara lo había engañado?!- Ese maldito, ¡¿cómo pudo hacerme esto?! Se suponía que yo tenía que ser el único en quien pensara
-óyeme Shima, que tú te metiste con medio mundo, así que no tienes nada que reclamarle- defendió Hiroto a su amigo dejando de inmediato calladito al mayor, Reita se las pagaría por andar ventilando su vida privada con ese enano- Como decía, Shou lo intentó con un chico que se declaró, se llamaba Shin y era su kouhai, empezaron a salir pero..las cosas no funcionaron
-Sí, porque Shou me dijo que era virgen y estoy seguro que no me mintió con eso
-Pero ese no es el punto Uruha, el punto es que Shou aún no está preparado y tú, como ninfómano que eres, no sé cómo lo harás, pero tendrás que aguantarte y darle el tiempo necesario a Shou para que solucione su problema
-Pero ¿cuánto será eso? ¿Días, meses, años?- el sólo ver la cara de seriedad y tristeza del rubio vio en la precaria situación en que estaba, amaba a Shou y lo que más ansiaba era que lo hiciera suyo de una vez por todas, ¿cómo podría aguantarse todo ese tiempo?
-Si de verdad lo amas, lo apoyarás y lo esperarás hasta que Shou esté listo- y con esa simple frase el guitarrista partió a su clase dejando al otro sumamente deprimido, Hiroto tenía razón, si el trauma de Shou era más grave de lo que pensó, Shima tenía que apoyarlo y aguantarse; si Shou no pudo hacer nada con su tierno y pequeño kouhai, con él menos podría hacer algo si era más alto y tenía cara de chica…lamentablemente para Shima y por primera vez, tendría que esperar-.
Pero Shou no le ayudaba mucho con toda la disposición que tenía, ni menos con los gemidos que daba, tuvo que tener una gran fuerza de voluntad para detenerse y no violarlo ahí mismo, porque tal vez al principio Shou podía estar todo dispuesto, pero ¿qué pasaba si se asustaba luego? no quería dañar a Kohara sólo por seguir sus instintos.
-“Tengo que ir despacio”- pensó mientras sentía unos pequeños murmullos provenientes de su pareja, abrió sus ojos y vio la cara incómoda que tenía el mayor- ¿Shou?
-No…Aoi
¡¿Aoi?! ¿Qué tenía que ver Aoi en todo esto? ¿Qué andaba soñando con él? A no ser que…¡ese desgraciado de Aoi le había hecho algo!
Se acabó, hasta ahí había llegado sus buenas intenciones con el peli plateado, rechazado por él o no, nadie se metía con su Shou, le sacaría la verdad a golpes si era necesario, apenas llegara a la universidad hablaría con Yuu, no iba a perimir que se metiera en sus asuntos y si tenía que revelar que Shou era su novio, lo haría, ya no se detendría por sus buenos sentimientos de samaritano de no herir al mayor, a la mierda con eso.
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Dos semanas habían pasado y prácticamente no había tenido tiempo de nada, ni siquiera de hablar con Aoi que apenas lo saludaba y luego cuando terminaban las clases, ese viejo calvo se lo llevaba para sobreexplotarlo…¡así jamás podría hablar con Aoi!
Y las cosas con Shou no iban muy bien que digamos, constantemente se le veía deprimido y ausente, si bien Uruha también estaba muy estresado con los proyectos que le daban, no era razón para que estuviera tan deprimido con él ¿o sí?
-O tal vez ese Yuu le hizo algo- ahí otra vez sus sospechas, miró como rápidamente y otra vez para su desgracia el profesor se iba con el mayor, suspiró, al parecer este día tampoco podría hablar con Aoi.
Tomó sus cosas y sin despedirse de nadie salió del salón, ya se había acostumbrado a ser el antisocial de la clase e incluso a hacer los trabajos solo, ya no tenía a Akira para acompañarlo.
Miró la hora, todavía quedaba para que su castaño terminara sus clases, decidió mandarle un mensaje para esperarlo a las afueras de su campus para que se fueran juntos como siempre.
Se tiró al pasto a pensar, se preguntaba si dos semanas habían sido tiempo suficiente para consumar su relación con Shou…cada vez que intentaban algo Uruha siempre se detenía con cualquier excusa tonta, pero le daba miedo hacer sentir mal al diseñador, ¿que tal si lo rechazaba o lo dañaba? Eso si que no podría soportarlo.
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-Kohara estás muy raro- le habló Tora mientras ordenaba sus cosas y veía como el nombrado suspiraba abatido- Estás así por Uruha ¿no?
-¿tienen problemas?- le preguntó Saga
-No, no, es sólo que…chicos debo hacerles una pregunta- los miró seriamente atrayendo la atención de la pareja- Y quiero que me respondan con toda sinceridad- los dos asintieron- Yo…etto ¿no soy guapo?
-¿¿ah??-exclamaron ambos a la vez, no entendían a qué venía esa pregunta tan rara de Shou y más aún la baja autoestima de su amigo
-¿quién te dijo que no eras guapo?-dijo Tora molesto- ¡claro que eres guapo! Eres muy lindo Shou, sino ¿cómo saldrías con el chico más bello de toda la universidad?
-¿No me digas que has estado toda esta semana deprimido por eso?- el castaño asintió avergonzado a la pregunta de Saga- Cielos Shou-kun
-Es que no entienden..yo….Uruha…creo que a Uruha no le atraigo como antes
-¡¿de dónde sacas esas payasadas?! Está todo baboso por ti –exclamó Tora y vio como su amigo negaba con la cabeza- A ver ¿hace cuánto que no lo hacen?
-Ese es el problema Tora-kun, nosotros…no lo hemos hecho
-Espera, espera ¿estamos hablando del mismo Takashima?-dijo sorprendido Tora mientras Shou lo miraba con la ceja alzada, no entendía a que se refería el pelinegro con eso- Ese es capaz de cogerse de inmediato a cualquier cosa que tenga enfrente
-¡¿ehhh?! ¿En serio era así antes?-preguntó Shou sorprendido mientras el más alto asentía cruzándose de brazos- Bueno, pero ahora no es así Tora y menos conmigo- suspiró deprimido-“De seguro es porque está pensando todavía en Aoi-san”
-Shou, dime…¿no te has puesto a pensar que Uruha tenga algo de miedo?- Shou lo miró sin entender- Uruha está loco por ti, se le nota a leguas lo mucho que te ama pero
-¿pero qué Takashi?- lo animó a continuar su pareja
-Me refiero a que Uruha tiene miedo de causarle un daño a Shou después del trauma que sufrió, tiene miedo de que Shou lo rechace
-¡yo nunca lo rechazaría!-gritó con enojo- ¡yo lo amo! ¿Cómo puede pensar Uruha eso de mi? ¿cómo cree que aún le tengo miedo? si lo tuviera yo no estaría con él
-Tranquilo Shou, mira, si le explicas y le aclaras todo podrían solucionar las cosas, entiende que para Uruha tampoco es fácil- lo calmó Tora viendo como el castaño en cualquier momento lloraría, le dolía pensar que Uruha no confiara en él, pero a pesar de todo Shinji tenía razón, para Uruha no era nada de fácil estar con alguien tan trastornado como él.
-Sólo explícale lo que sientes ¿sí? Sé sincero con él y él lo será contigo- le sonrió Saga animándolo y dándole un abrazo de apoyo-¿lo harás Shou?
El castaño asintió, no quería perder a Uruha y menos lo perdería por algo tan tonto como esto, menos mal que el asunto no tenía nada que ver con su atractivo o con Aoi, sólo era un problema de confianza, un problema que resolvería hoy mismo, se encontraría con Uruha y le confesaría todo.
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Se quedó dormido, finalmente el cansancio le había ganado, además que estaba tan refrescante y cómodo estar bajo ese árbol en donde no escuchaba ningún ruido aparte de los pájaros y las cigarras , que eso lo relajó enormemente, tanto que no supo más del mundo y de sus pensamientos después de unos minutos.
Mientras tanto, Shou había buscado a su novio por todas partes, seguía llamándolo y no le respondía el celular…¿dónde rayos se habría metido?
Sus amigos le habían aconsejado que se fuera, y lo dejara esperando solo por irresponsable, pero Shou no podía hacer eso, sobretodo porque lo único que quería era aclarar urgentemente las cosas con Shima.
Finalmente y después de mucho tiempo andarlo buscando por todo el campus, lo encontró durmiendo plácidamente bajo la sombra de un árbol, observó el lugar, si que estaba muy escondido, ya que por ahí no pasaba gente y a Shou le había costado mucho dar con él.
Se acercó cautelosamente tratando de no despertarlo, si Uruha era bello despierto, dormido parecía casi un ángel, mientras lo observaba descansar y más lo miraba aún no entendía como Uruha se había fijado en él.
Deja tu baja autoestima Kaza-chan
Escuchó nuevamente las reprimendas de su mejor amigo y trató de olvidarse de esos pensamientos, si Uruha estaba con él ¿era por algo no?
Con delicadeza movió su hombro tratando de despertarlo, pero sólo causo un suave murmullo de molestia por parte del más bajo, quien se acomodó inconscientemente en el regazo de Shou.
De inmediato el cuerpo del castaño se tensó, pero al ver la bella sonrisa que tenía su pareja poco a poco se fue relajando y le acarició los cabellos mientras vigilaba su sueño, después hablaría con él, ahora dejaría dormir a su bello Uruha un poco más.
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-mmmhhh ¿Kohara?- abrió sus ojos encontrándose con la linda vista de su pareja arriba suyo- Yo..¿cómo..cuándo llegaste?- le preguntó extrañado levantándose del regazo del más alto y restregándose los ojos para ver si aún estaba soñando despierto
-Hace rato, pero no quise despertarte Shima-kun
-Pues debiste hacerlo, de seguro te moriste de aburrimiento al verme todo el rato roncando
-¿roncando? Tú no roncabas Uruha-kun- rió el diseñador, en ningún momento se había aburrido de observar la expresión tranquila y durmiente de su pareja
-Como sea, perdón por hacerte esperar, pero ahora podemos irnos- dijo tomando su guitarra a sus espaldas, mientras Shou ordenaba sus cosas y lo seguía a la salida de la universidad.
Ahora venía la parte difícil, ni siquiera el rostro angelical de Shima durmiente, lo había hecho olvidar de su propósito inicial…aclarar las cosas con él
-Nee Uruha-san- el nombrado se detuvo y se volteó algo confuso al ver la cara triste del diseñador- Tú…no tienes porque esperar tanto por mi- esto último lo dijo bastante bajo y avergonzado, pero fue perfectamente oído por el pelinegro
-¿eh? No entiendo mucho a que te refieres Shou
-Que estoy listo-murmuró sumamente sonrojado y ahí recién fue cuando el músico entendió y su cara de inmediato se iluminó de la emoción, no podía creerlo, su Shou, su querido Shou le estaba dando el consentimiento de ser el primer hombre y persona en su vida, en serio quería golpearse con un martillo para ver si en realidad estaba soñando o no.
-¿en serio? ¿en serio Shou? ¡Shou como te amo! ¡Gracias, gracias, gracias!- lo abrazó con emocionado besando toda la cara del sorprendido diseñador, ¿tan desesperado estaba el pobre de Uruha?- Siento por ser tan efusivo, pero de verdad, me haces muy feliz
-Me alegra mucho Shima-kun- le sonrió Shou dándole un tierno beso, un anticipo de lo que vendría más adelante.
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-¿estás seguro de esto Kohara?
Ya el castaño había perdido la cuenta las veces que había escuchado a Uruha repetir la misma pregunta, pero no se aburría ni tampoco se molestaba de escucharla, es más, le parecía muy tierno ver esa carita de preocupación e inseguridad de su pareja para no hacerle daño, esa faceta que muy pocas veces se veía al que ya tenía amenazada a media universidad.
Decidió no responderle y le regalo un demandante beso, haciéndole ver que el también estaba desesperado por hacerlo con él y que no tenía ningún miedo al entregarse al músico, era como que si su mente sólo estuviera atento a todas y cada una de las reacciones de Shima, y nada más que eso.
Uruha se sentía en la gloria, sentir como Shou lo acostaba delicadamente en su cama y se ponía encima suyo, acariciando sus costados, mientras le regalaba ese apasionado beso, jamás pensó que Shou pudiera hacer todo esto tan bien, le salía tan natural; mientras que Uruha era un manojo de nervios al principio, pero ya se había tranquilizado y dejado llevar por todas las caricias que el diseñador le entregaba.
Volvieron a besarse pero esta vez Uruha abrió su boca para darle paso a esa lengua que lo volvía loco, Shou cada vez besaba mejor, siempre llegaba a sorprenderlo y ya se daba cuenta que el ambiente comenzaba a tornarse embriagante y las ropas ya era innecesarias.
Con toda la fuerza de voluntad cortó el beso, para luego quedar él encima de Shou, quien gustoso vio como su pareja se sentaba sobre sus caderas y comenzaba a desabrocharle la camisa para luego recorrer a besos su desnudo torso.
-Aahhm Shima-kun-suspiraba cada vez que sentía la traviesa lengua del músico recorrer su piel
-Shou-kun… me excitas tanto con esa cara guarra que pones- le sonrió travieso mientras ahora lamía los pezones del castaño aumentando la agitación de éste
-Yo..aaahh no pongo esa cara- logró quejarse para luego dejar escapar un pequeño grito al sentir los dientes de Shima en su cuello y poco después el músico lamió esa marca enrojecida que le había dejado
-Para que todo el mundo sepa a quien le perteneces Kohara-besó los labios del cantante para luego seguir besando y mordiendo su cuello mientras se restregaba y movía su cadera contra la de su amante, sacándole grandes suspiros al sentir como rozaban sus entrepiernas aún atrapadas en esa molestosa ropa- Mmmhhh Shou-kun eres un pervertido, te pones duro sólo con esto- se burló mientras se movía con más fuerza y besaba y adentraba su lengua a la boca abierta del mayor que le respondía apenas, se estaba volviendo loco de los movimientos que hacia Shima
-Mmmhhh…Uruha-san-gimió al sentir como el mayor lamia su oreja dándole un leve mordisco para luego continuar besándolo, algo de que nunca se aburrirían, siempre sentían que era la primera vez que se besaban-mmhmh
Después fue el castaño quien decidió cobrar venganza sacando a Uruha de encima suyo, sin llegar a ser brusco, para luego comenzar a besar y lamer su cuello, tal y como Shima lo había hecho en unos momentos antes.
-Aquí tienes donde morder más cariño- señaló el más bajo su pecho y Shou no supo en qué momento el otro se sacó su camisa que ni siquiera lo notó, sin embargo sonrió de lo dispuesto que estaba su pareja, acariciándole los cabellos y gimiendo con el contacto de su lengua y sus besos recorriendo su torso- Nnnhhh Shou-kun..espera..yo..yo quiero hacer algo
El otro se detuvo mirando extrañado y casi se desmaya de la impresión al ver como Uruha terminaba de quitarse toda su ropa ante la atenta mirada sonrojada de su pareja.
No podía creerlo, Uruha era verdaderamente hermoso, aún no asimilaba si estaba soñando o no cuando el pelinegro se sentó encima de él con las piernas abiertas y el mismo guió sus manos para que Shou tocara su desnudo trasero, que casi deja en shock al otro.
-Soy todo tuyo Kohara- le sonrió de manera sensual mientras Shou lento, pero seguro, comenzaba a recorrer todo el cuerpo desnudo de su pareja, como si quisiera que el tacto se quedara memorizado en su memoria, cosa que a Shima no le desagradó, le excitaba enormemente sentir las manos de Shou recorrer su cuerpo y sus labios posarse en su piel, era el éxtasis máximo para él.
Volvieron a besarse con ganas pero esta vez y mientras lo hacían, Uruha con un gran habilidad logró desabrocharle los pantalones al castaño quien se sorprendió de este acto y quiso separarse para darle más comodidad a Uruha pero éste no lo dejó y continuó besándolo mientras su mano acariciaba por dentro de la ropa interior el despierto miembro del diseñador.
-Mmmhh..mhhh-gemía dentro del beso, al parecer Shima no quería liberarse de esos labios y se deleitaba al sentir los gemidos de Shou en su boca, pero quería hacer más , no estaba satisfecho con sólo eso, así que levantó sorpresivamente del agitado mayor quien miró confuso como su pareja se agachaba y se ponía frente a su entrepierna.
-Esto te encantará Shou-kun - con una de sus manos agarró el miembro del diseñador quien soltó un gran gemido al sentir como Uruha le recorría con su lengua por toda su extensión- Lo sabía, sabes delicioso Koha-chan
-Shima…¡aaah!- hasta ahí quedaron sus palabras y pasaron en convertirse en sólo gemidos y gritos de placer al sentir como esa boca aprisionaba deliciosamente su pene, era una sensación exquisita, decidió abrir los ojos y vio Shima mantenía los ojos cerrados tratando de abarcar todo su miembro en su boca y lo hizo y fue ahí cuando Shou sintió como tocaba la garganta del menor provocándole una leve arcada, se asustó pero luego vio la cara de placer que tenía Uruha cuando pasaba esto, que el mismo decidió ayudarlo moviendo sus caderas y agarrándole de sus cabellos para imponerle el ritmo.
Uruha una sola vez practicó sexo oral, pero el placer que sintió en ese entonces no era nada con el placer que sentía ahora mismo, como Shou lo tomaba de sus cabellos imponiéndole el ritmo para que su miembro llegara a tocar su garganta, era realmente fantástico. Sabía que Shou estaba a punto de terminar y quería terminar al mismo tiempo con él, así que no tardó en comenzar a masturbarse para llegar al orgasmo junto a su pareja, lo que más ansiaba era que Shou se corriera en su boca y probar todo de él, pero como adivinó, Kohara estaba preocupado y no iba dejar que su novio se tragara su semilla, así que cuando ya estaba cerca, trató de apartarlo avisándole.
-Aaahhh Shima-kun..detente..ya voy
Ni toda la fuerza del mundo lo sacarían de ahí, quería sentirlo, quería sentir como su persona más amada terminaba en su boca y al parecer sus plegarias fueron escuchadas ya que oyó un fuerte grito de placer por parte del mayor y como luego recibía ese delicioso manjar, haciéndolo después terminar a él también
-¡cielos! Shima-kun, perdón, perdón, pero no pude aguantarme- se disculpó avergonzado viendo como su semen había manchado el cuello de Uruha y escurría un poco por sus labios, de seguro para Uruha debió hacer sido asqueroso tragarse todo esto, pero para su sorpresa, su pareja sólo le sonrió acercándose nuevamente y sentándose sobre él, este sólo contacto los hizo soltar un gran gemido a ambos al ahora sentir que sus miembros se rozaban sin ninguna restricción de por medio.
-Baka, lo que más ansiaba era probar todo lo que me brinda mi amado Shou- le sonrió besando el cuello del diseñador y sacándole suspiros de placer, otra vez ambos comenzaban a excitarse- ¿quieres penetrarme?
Esa pregunta a Shou lo dejó helado y luego un gran sonrojo se le vino a sus mejillas que hizo reír a Uruha, a pesar de todo, le sacaría toda la faceta pervertida a su novio.
-Porque mi culo esta desesperado por darte la bienvenida Kohara, quiero que te corras en mí, que me des duro una y otra vez, no tengas piedad- le susurraba al oído sintiendo como el sexo de su pareja comenzaba a ponerse duro nuevamente - Quiero sentirte dentro mío Shou
No necesitó decir más, porque fue el mismo vocalista que terminó besándolo desesperado y poniéndose a recorrer todo su cuerpo, sacándole audibles gemidos de placer al más bajo, por fin se entregaría por completo a Shou, para él , era su primera vez que haría el amor con su persona amada.
Pero…de pronto sintió como Shou se detuvo…y sintió como un gran vacío parecía en su pecho …¿no me digan que se arrepintió?- pensó Shima. Eso si que no, se moría si le pasaba eso, pero… no recordaba que le hubiera hecho algún daño a Shou, ni menos obligado a algo que no quisiera o tal vez…¿todavía seguía con su trauma?
-Shima-kun…tú…yo no sé qué hacer- dijo rojísimo de la vergüenza, sacándole un gran suspiro de alivio al músico, así que era eso, Shou no se había arrepentido es sólo que era su primera vez y no sabía cómo seguir- ¿q-ué sucede?-preguntó confuso Shou al ver la sonrisa de alivio que tenía Uruha y luego como éste lo abrazaba con fuerzas- ¿Uruha-san?
-Te amo..te amo como no tienes idea Shou-confesó sincero sintiendo los brazos de su pareja rodeándolo con cariño, se había quitado un gran miedo al enterarse que Shou no se había arrepentido y no tenía miedo de él, ahora lo que les quedaba era seguir- Tranquilo amor, yo te guiaré ¿bien?-le dio un suave roce para luego levantarse.
Miró fijamente a Shou, no quería, ni tampoco tenía tiempo para prepararse, debía hacerlo de una vez por todas, estaba desesperado por sentirlo dentro, le dolería pero al estar acostumbrado (aunque no quisiera admitirlo) el dolor sólo sería al principio.
Se acercó sentándose nuevamente sobre el diseñador quien gimió al sentir como una de las manos de Uruha tomaban su miembro para guiarlo el mismo a su entrada, gritó de placer al sentir como esa paredes apretaban deliciosamente su sexo y más aún al ver los gemidos que soltaba Uruha, era una sensación magnífica.
-Aahhh…Shou-kun…lo tienes tan grande..me encanta- el nombrado se sonrojó enormemente, aún no se acostumbraba al lenguaje de su pareja, pero luego se olvidó de esto al ver que Uruha se sentaba de una sola vez, y comenzaba a cabalgar sobre él, tratando de hallar ese punto que lo hiciera olvidarse de la molestia del principio.
Shou sentía que moría con la imagen, ver las expresiones que ponía Shima, como se daba impulso sosteniéndose de sus hombros y ver como su sexo se perdía dentro de esa caliente y húmeda cavidad era la gloria la misma, necesitaba más..necesitaba más de Uruha, quería que gritara más, que pidiera por más, enterrarse aún más en su hermoso cuerpo y el mismo Shou fue quien decidió acompañarlo embistiendo con fuerza, en donde de inmediato sintió como los gemidos de Uruha aumentaban, al parecer había encontrado el punto erógeno del músico, quien se sorprendió que Shou lo hallara tan rápido, era como si el mayor conociera todo su cuerpo.
-Aaahh,,..ahí…ahí Shou..dame más fuerte-gemía del placer, sintió como las manos de Shou se enterraban en sus caderas y el sexo ingresaba más a fondo dentro de sí –Eso amor… sigue..más duro
Las embestidas cada vez eran más certeras, Uruha sintió que Shou se lo hacía con más fuerza, cumpliendo con todas sus órdenes; ese tímido diseñador era una verdadera fiera escondida, y lo supo cuando Shou salió repentinamente de él obligándolo a poner su cara contra la almohada, Shima sonrió alzando su trasero encantado, mientras sentía como Shou lo tomaba de las caderas.
-Vamos Kohara, quiero sentirte, no tengas piedad de mí Shou- sonrió al sentir otra vez ese miembro meterse en su interior sin ninguna dificultad, era deliciosos- Aaahahh, así Shou….mételo hasta el fondo
-Aahhh Shima-kun…estás..tan apretado- gimió cuando terminó de entrar y era como si lo hubiera penetrado por primera vez, la sensación seguía igual de placentera que antes.
Rápidamente comenzó a embestirlo y los gritos de placer de Uruha no se hicieron esperar, ahora Shou tenía más movimiento para cogerlo más fuerte, ahora era Shima quien se había entregado por completo al ritmo de Shou, el músico sólo se dejaba hacer, se sentía como un verdadero muñeco entregado a las caricias y bruscas penetraciones que le daba el mayor.
-Ahaahh mmmhaaha eso Shou..párteme en dos…no pares de moverte
No sabía que fuera posible, pero terminó por correrse, era demasiado el placer que sentía y sorprendentemente Shou se aguantó como pudo, ya que la entrada de Uruha se había vuelto demasiado estrecha, pero el mayor tenía cuerda para un rato más, así que sin decirle nada a Uruha hizo lo mismo que él había hecho antes, tomó su pene para masturbarlo, Uruha aún sentía el sexo de Shou duro y grande dentro de su cuerpo, no entendía como él, si era todo un experto, era el primero que se había corrido, al parecer había subestimado a Kohara, pero no pensó mucho en eso y se entregó al placer que le daba la mano de su pareja y poco después de unos minutos estaba listo para la acción.
-Mmmhhhh…así..Shou…sigue así-le alentaba Uruha, ya no salían palabras de su boca, eran verdaderos gemidos y gritos los que se escuchaban, de seguro los vecinos levantarían quejas al día siguiente, pero a la mierda con eso, Uruha estaba teniendo la mejor cogida de toda su vida, ni unas viejas chismosas y solteronas le arruinarían este momento.
-Aaahhh Shima..me voy
-Termina dentro de Shou Mmhhaaah!- gimió cuando en una última embestida Shou tocó con violencia su próstata haciéndolo correrse por tercera vez, y fue ahí cuando lo sintió , sintió esa esencia llenarle las entrañas- Mmmhhh..así..Shou, déjalo todo cariño- al parecer Shou se había corrido doble y eso le encantaba, por fin Kohara lo hizo suyo, por fin eran verdaderos novios en todas sus letras.
El diseñador luego de haber terminado salió delicadamente del cuerpo de su novio, quien estiró sus brazos infantilmente pidiendo un abrazo, Shou sonrió y le dio más que eso, un apasionado beso que casi deja a Uruha sin aire.
-Amo cuando me besas así, estas aprendiendo rápido Kohara- le sonrió Shima besándole el cuello sacándole un leve suspiro al mayor- Y me sorprendiste demasiado
-¿mhh? ¿En serio?- le preguntó confuso mirándolo a los ojos y despejándole unos cabellos que se le habían quedado pegados en la frente de Uruha- ¿En que cosa te sorprendí Shima-kun? No entiendo
-Eso no te lo diré porque me avergüenza mucho decirlo- rió luego ante la cara de confusión del castaño- Además, tú mismo dices que no debería de decir muchas perversiones
-Sí pero
-Confórmate en que me sorprendiste en muchas cosas pervertidas que me hiciste- el otro se sonrojó enormemente- Pero no te diré en cuales ni menos los detalles don pervertido-Shou sólo se escondió en el cuello del músico de la gran vergüenza que sentía, mientras Uruha se seguía riendo de sus acciones, ahora volvía el Shou tierno y tímido que conocía tan bien- Te amo Kohara
-Y yo a ti Shima-kun- sonrió dándole un corto beso, que poco después se comenzó a resultar más apasionado…tal vez…otra ronda no estaría mal, pensó Uruha.