EPILOGO
COMIENZO DE UNA NUEVA VIDA
PARTE II
EL AMOR CURA EL DOLOR
Cuando el dolor invade nuestro corazón solo el amor puede curarlo.
Un año ha transcurrido desde que una gran herida se abrió en lo profundo de su corazón, para curar eso dolor tuvo que aferrarse al amor.
Susuke Uchiha un joven de 16 años apuesto y deseado por mujeres como por hombres, en el trascurso de este año ha perdido su sobrenombre de Don Juan Konoha al entregar su amor a un solo hombre.
Su amado rubio Naruto.
La vida de Naruto también ha cambiado al volver de Konoha siguió el consejo de Namikaze y busco a su padre, tras largos días de vigilar la casa de su progenitor logro encontrarse cara a cara frente al rubio mayor. Hoy en día Minato y Naru son muy unidos, su padre acepto a su novio y se lleva muy bien con él, aunque su tío Jiraya opine lo contrario.
La mañana comenzaba y Naru se estaba preparando para ir a la escuela.
─ Naru-chan listo para irnos. –Su padre lo mira animoso-
─ Hai oto-san. –Una sonrisa adorna su rostro-
Minato Namikaze resulto ser muy diferente al de Konoha, el Hokage era alguien amable, responsable, serio y un genio como ninguno, mientras el millonario de Tokio es mucho más amable, no tiene nada de serio y su inteligencia no era la mejor del mundo por algo su Tutor siempre abusaba de su ingenuidad.
─ Minato. –Jiraya aparece frente a los rubios-
─ ¿Qué sucede tío? –Sonríe animoso el rubio mayor-
─ No olvides que hoy debes firmas el contrato con los alemanes.
─ Tranquilo hay estaré.
─ Bien. –Se da la espalda- Otro contrato.
Jiraya siempre aprovechaba los contratos que hacia su protegido para sacar provechos del mismo.
─ Padre ¿Leíste ese contrato?
─ Tranquilo hijo Jiraya ya se encargó de todo. –Habló despreocupadamente-
─ Entiendo. –Baja la mirada-
─ ¿Qué pasa? ¿Por qué tan preocupado? –Acaricia su rostro-
─ No confió en él. –Mira a su padre- Oto-san por favor lee ese contrato.
─ Hijo. –Se queda pensativo un rato- Está bien lo haré.
La mañana para los rubios paso rápido antes de ir a la oficina Minato lleva a Naru a la escuela donde su novio lo esperaba en la entrada.
─ Buenos días Minato-san. –Se inclina-
─ Hola chico. –Mira a su niño- Hijo me olvide contarte hoy viajare a Kyoto he de llegar noche.
─ Ya veo, que tengas buen viaje Oto-san.
─ Chao chicos.
Minato se aleja dejando a los chicos solos, Naru observa a su novio que estaba pensativo y triste.
─ ¿Amor que tienes?
─ Nada amor, entremos.
Toda la mañana Naruto pasó preocupado por su novio que su mente se encontraba en otro lado, la última hora había llegado una de las más esperadas del grupo.
─ Buenas tardes mis queridos alumnos. –Saluda animoso Oro-sensei-
Luego del accidente con Orochimaru sus compañeros maestros fueron a casa de Oro-sensei y lo encontraron atado en una de las habitaciones en ese momento se dieron cuenta que un impostor fue el que atacó la escuela.
RING.
Cuando se estudia animosamente el día termina rápido, una linda pareja caminaba cerca de un parque en silencio hasta que un rubio lo interrumpió.
─ Susuke me tienes preocupado ¿Qué te pasa? –Naru mira seriamente a su novio-
─ Bueno. –Mira al cielo- Un año. –Susurro-
─ ¿Un año? ¡No me digas que! –Bajo la mirada avergonzado por las dudas que había tenido- Yo…
─ Un año desde que deje a Sasuke. –Sonrió melancólicamente- Ahora ha de ser un gran ninja.
─ ¡Sí! Uno de los mejores. –Se abraza al brazo de su novio-
─ ¿Quieres ir a mi casa? Hoy estoy huérfano. –Con aires del pobre niño abandonado-
─ Pobrecito, yo te voy acompañar para que nadie te robe. –Le da un corto beso-
─ Que lindo novio tengo. –Corresponde el beso-
La linda parejita se encamino a la casa Uchiha para ser exactos a la habitación de Susuke.
─ ¡Terminamos! –Grito emocionado Naruto lanzando sus cuadernos-
─ No exageres amor. –Toma su mano y lo lleva a la cama-
─ Susuke. –Susurro sonrojado antes las acciones del pelinegro-
─ Te amo. –Lo besa tiernamente- Te amo. –Lo vuelve a besar con más pasión-
─ Ahh. –Gimió por la falta de aire- ¿Qué pretendes?
─ Hacerte feliz. –Susurro muy cerca de su oído-
Susuke beso nuevamente sus labios con mucha pasión, bajo por su cuellos besándolo delicadamente, mientras retiraba la camisa del rubio sus labios se posaron en su pecho jugando con aquellos botoncitos rosaditos.
─ Ahh. –Los gemidos salían de la boca de Naruto- Susu…ahhh…
─ Guau acá abajo piden ayudan. –Suavemente retiro el pantalón junto con su bóxer- Que lindo.
─ Ahhh. –Arqueo su espalda al sentir la lengua de su novio en su hombría, Susuke se lo comía lateramente- Ahhh….Susu….ahhh. -Su hombría era embestida dentro de la boca de su novio de una manera frenética- Me….ahhh….-Llego al clímax dentro de él- ¿Susuke? –Miraba avergonzado a su novio-
─ Delicioso. –Susurro lamiendo la esencia del rubio-
─ ¡No hagas eso! Es asqueroso. –Voltea su rostro a un lado-
─ ¿Por qué? Si viene de ti. –Se acerca a sus labios a besarlo-
─ No es justo. –Hace un tierno puchero- Mira como me tienes y tu aun con ropa.
─ Jajaja. –Ríe por la expresión de su novio- Ayúdame Naru-chan.
─ Por supuesto.
Naruto se posesiona sobre el abdomen de su novio, repartiendo besos en su cuello va desabrochando su camisa.
─ Me gustas. –Besaba el abdomen bien formado de su novio- Ahora aquí abajo.
─ Naru….ahh. –Gimió al sentir las manos de su novio sobre su hombría- No lo ahhh… -Sintió como su rubio lamia su hombría haciéndolo estremecer- Ahhh….no…más… -Lo detiene-
─ ¿Qué pasa? ¿Lo hice mal? –Pregunta preocupado-
─ Para nada. –Lo posesiona debajo de él- Solo. –Reparte besos por todo su cuerpo- Quiero hacerte sentir.
─ Agr. –Se queja al sentir un dedo dentro-
─ Gomen. –Besa sus labios, el segundo dedo entra con más facilidad- Te amo. –El tercero se hace presente-
─ Ahh. –Gime de placer- Susu…
─ Amor no te pongas nervios. –Coloca sus piernas sobre sus hombros- Prometo que no dolerá mucho.
─ ¡Ahh! –Gritó al sentirlo en su interior-
Susuke se mantuvo quieto hasta que el rubio se acostumbrara, cuando sintió que su pareja se empezó a mover, inicio con unas embestidas lentas poco a poco iba aumentando la velocidad.
─ Ahh…más…ahhh… ¡AHH HAY! –Gritó al sentir como el pelinegro tocaba su próstata, las embestidas aumentaron de ritmo acercándose cada vez a su límite- Me…vengo…
─ Yo…ahhh…igu…al….ahhh….
─ NARUTO/SUSUKE!! –Ambos chicos llegaron al orgasmo-
Con su respiración lenta y su corazón latiendo desenfrenadamente ambos chicos se miraban llenos de amor.
─ Te amo Naru. –Susuke besa su frente-
─ Yo a ti.
Cansados y agotados se entregaron a los brazos de Morfeo por un momento ya que pronto el padre del rubio interrumpiría tan bello momento.
Mientras esta linda parejita descansa en otra dimensión para ser exactos en Konoha observábamos a otro rubio luchando contra un pelinegro muy habilidoso.
─ ¡Katon Gaton no jutsu! –Una bola de fuego salía de su boca-
─ ¡Kuso! –Esquivaba el rubio con las justas- ¡Teme! ¡Te recuerdo que es solo un entrenamiento! –Gritaba desde el otro lado-
─ No me importa. –Sonríe divertido- Para mí una pelea es una pelea. –Corre hacia el rubio- ¡Chidori!
─ Sasuke ¡Nooo…. –Un pobre rubio volaba contra el árbol más cercano-
─ ¡Gane! ¡Sii! –Saltaba de la emoción de verle ganado por primera vez a su novio-
Sasuke Uchiha una joven de 16 años heredero de uno de los clanes más poderoso de Konoha, para él tambien este año ha sido dificil especial adaptarse a su nuevo hogar y vivir sin su hermano, pero con apoyo de su familia y su novio hoy podía sonreír y combatir mano a mano con cualquier shinobi.
─ ¡No es justo! –Gritaba quien recién se incorporaba- Parece un niño.
─ ¡Niño! ¿Cómo que niño? –Lo mira muy serio- No olvides que soy un Uchiha.
─ Gomen –Naruto suspiraba pesadamente odiaba cuando actuaba como su padre frío y distante-
─ Perdonado. –Sonríe tiernamente-
Bipolar.
Odiaba admitirlo pero desde que su novio había llegado a Konoha se había convertido en alguien bipolar.
─ Naru. –Susurra mientras caminaba a su lado-
─ ¿Qué pasa amor? –Pregunta preocupado al ver su semblante triste-
─ Un año. –Susurra- Hoy se cumple un año desde que mi Aniki se fue.
─ ¿Un año? ¿Si que ha pasado mucho tiempo? –Mira al cielo-
─ Hai.
─ Amor. –Lo abraza- No te pongas triste. –Besa su frente- Susuke pensó que dejarte en Konoha era lo mejor para ti y para tú familia. –Intenta animarlo- Mikoto-san, Fugaku-sama e Itachi durante todo este año te han demostrado lo mucho que te aman.
─ Tienes razón. –Sonríe- Ellos han sido muy buenos conmigo creo que llego el momento.
─ Hazlo se que serán muy felices.
─ Hai.
Ambos chicos se dirigían a la entrada de la majestuosa villa Uchiha.
─ Nos vemos. –Le da un corto beso-
─ Vengo más tarde por ti. –Se despide el rubio-
─ Dobe. –Susurra al ver como se aleja su novio- Eres un tonto. –Se adentra a la villa- No creo que sea tan difícil. –Susurra para mi mismo frente de la entrada de su casa- Muy bien vamos. –Toma aire antes de entrar- ¡Ya llegue!
─ Hola hijo. –Saluda Mikoto con una tierna sonrisa-
─ Hola….
─ Ya está la comida. –Se da la vuelta-
─ Gracias….mamá –Susurro la última palabra-
─ ¿Mamá? –Se volteo asombrada y a la vez emocionada por tan bella palabra dicha por su hijo-
─ Yo… -No sabía que decir era la primera vez que la llamaba así-
─ Mi vida. –Mikoto lo abraza entre lágrimas- Gracias.
─ ¿Puedo llamarte mamá? –Pregunta con duda-
─ ¡Claro que sí! Eres mi hijo y me alegra que me llames de ese modo. –Sonríe emocionada- ¿Repítelo?
─ Mamá. –Contesta algo avergonzado-
─ Mi amor. –Lo abraza nuevamente-
─ ¡Falto yo! –Un pelinegro se une al abrazo-
─ Aniki. –Susurra Sasuke-
─ ¿Aniki? Ohh… ¡Ototo! –Lo abraza con fuerza-
─ Me dejas sin aire. –Susurraba casi morado el pequeño pelinegro-
─ Que bella reunión familiar. –Todos voltearon al observar al líder del Clan Uchiha-
─ Amor bienvenido. –Su esposa se acerco-
─ ¿A qué se debe tanta alegría? –Preguntó al ver las huellas de lágrimas en los ojos de su esposa-
─ Es que…
─ Sasuke aprendido a decir mamá y ¡Aniki! –Gritó emocionado la última palabra-
─ Te felicito Sasuke. –Sonríe de lado-
─ Gracias…Papá –Susurró ante la mirada de su padre-
─ ¿Eh? –Se sorprendió levemente- De nada hijo mío. –Sonrió levemente pero por dentro estaba que saltaba de alegría por esa pequeña palabra-
─ Familia vamos a comer.
Dos simples palabras fueron capaces de alegrar el corazón de la familia Uchiha, cada uno de sus miembros esperaron calmadamente el día que el menor los acepte como familia y la espera al fin dio frutos.
El cielo se empezaba a teñir de colores naranjas y rojizos anunciando la llegada del atardecer un rubio muy bien presentado estaba en la entrada de la mansión Uchiha intentando convencer a su suegro que envié a su novio a una cita.
─ Fugaku-sama le prometo que traeré pronto a Sasuke.
─ No me convences chicos. –Lo miraba seriamente-
─ Papá por favor. –Su hijo estaba a su lado- Volveremos pronto.
─ Está bien puedes ir. –Posa su mirada oscura hacia el rubio- Le pasa algo a mi hijo y no vives para contarlo.
─ No….No le pasara nada. –Contesto nervioso ante las amenazas del mayor-
─ Vamos dobe. –El pelinegro lo toma de la mano- Hasta la noche papá.
Ambos chicos corrían fuera de la villa muy contentos porque conseguir un permiso para el menor de los Uchiha era como lograr un verdadero milagro por lo sobre protector que era Fugaku con respecto a su hijo.
Naruto se había planeado que esa noche esa especial, lo llevo a su departamento que alquilaba con el dinero de sus misiones, el mismo que usaba en momentos especiales o simplemente cuando no quería dormir en la mansión Hokage ¿Por qué lo llevaba a su departamento está vez?
─ ¡¿Naruto?! –Miró su novio lleno de asombro por la cena que estaba preparada-
─ Espero que te guste. –Toma su mano para guiarlo a la mesa que estaba adornada con velas- Se que suena cursi pero quise hacerlo.
─ Gracias. –Se sonroja levemente-
─ De nada amor. –Besa sus labios-
La velada paso sin novedad, ambos chicos comían mirándose fijamente se sentían como que era la primera vez que comían juntos, una vez terminada la cena Naruto tomo la mano de su novio para guiarlo a la pequeña sala.
─ ¿Sasuke? –Se sentía nervioso-
─ Naruto. –El pelinegro lo miraba fijamente-
─ Te amo. –Besa sus labios llenos de pasión-
─ Ahh…dobe. –Se asombra por la intensidad del beso-
─ Sasuke permíteme amarte. –Observa el rostro sonrojado y asombrado de Sasuke que reflejaba la poca luz de la habitación-
─ Yo. –Desvía la mirada- Hai. –Susurra-
─ Ven.
Toma su mano como si fuera la joya más cara y delicada, encamina al pelinegro a la cama entre nervios besa sus delicados labios llenos de pasión y éxtasis, el deseo de sentirse lleva a recostar a su pareja en la cama mientras sus manos retiran la camisa dejando visible aquel blanquecino pecho.
─ ¡Naru! ¡Ahh!
El pelinegro gime al sentir como la lengua de su novio juega con sus pezones mordiéndolos levemente sin causarle daño alguno.
─ Te amo. –Susurra Naruto mientras recorría su cuerpo hasta llegar aquel agujerito-
─ Ahhh. –Arquea su espalda al sentir como una lengua recorre su ombligo simulando pequeñas embestidas- Naru!!
Naruto estaba concentrado en hacer sentir bien a su pareja, poco a poco despojo al pelinegro de su pantalón dejando visible un bulto entre sus piernas, sonrió satisfecho.
─ Ahh!! –Gimió al sentir la mano de Naruto en su entrepierna- Ahh…Naru… -El rubio retiro sus bóxer dejando visible su excitado miembro- Ahh
─ Tranquilo y disfruta. –Metió a su boca aquel delicioso pedazo de carne saboreando cada centímetro del mismo-
─ Ahh….Naru….más…..ahhh… -Sentía como su cuerpo quemaba que cada envestida que su novio le daba con su boca lo llevaba a la gloria- Me voy….AHHHH –Arqueo su espalda al llegar al orgasmo-
─ Delicioso. –Naruto probaba la esencia de su novio-
─ No hagas eso. –Lo mira avergonzado-
─ ¿Por qué si es delicioso? –Besa sus labios- Es mejor que el ramen.
─ Dobe. –Se sonroja-
─ Mi Sasu. –Dirige su mano a la entrada del pelinegro-
─ ¡AH! –Grita al sentir un dedo en su entrada- Du…duele…
─ Tranquilo. –Chupaba sus pezones para excitarlo nuevamente-
─ Ahh…-Aquel dedo que entraba y salida lo llenaba de placer- Ahh. –Gimió al sentir el segundo dedo- Ahh…Naru…
Los tres dedos en su interior se movían con mucha libertad era hora de pasar a un nuevo nivel, el rubio llevo las piernas de su novio a la altura de su hombros, coloca su miembro en la entrada de Sasuke va entrando poco a poco.
─ Ahh…duele… -Pequeñas lagrimas adornar el rostro de porcelana del pelinegro-
─ Gomen entrare todo… -Entra de una envestida-
─ ¡AH! –Grita por el dolor-
─ No me moveré.
Se queda quieto en su interior por un buen rato hasta que Sasuke empieza a moverse, Naruto lo enviste con suavidad hasta que poco a poco entran en calor y aumentan el ritmo de las envestidas.
─ Ahhh….más…ahhh –Sasuke gemía ante cada envestida que recibía de su novio-
─ Ohh Sasuke… -Se movía cada vez más rápido dentro de él-
─ Naru me….ahh….
─ Yo…igual….
─ SASUKE/NARUTO!!!
Ambos chicos llegaron al orgasmo Naruto salió cuidadosamente de su interior intentando no lastimarlo.
─ ¿Estás bien? –Pregunto preocupado por la sangre que salía de su interior-
─ Hai. –Acaricia el rostro de su novio- Estoy muy feliz, te amo.
─ Yo a ti. –Lo besa delicadamente- Vamos a ducharnos antes que tú papá venga y no quede ni el recuerdo de Naruto Namikaze.
─ Jiji. –Ríe bajo- Eres un exagerado.
─ Vamos a ducharnos. –Toma entre sus brazos a su novio llevándolo a la ducha-
─ Hai. –Se aferraba al cuello de su novio-
Volviendo a las lejanías de Japón, el sol de la media tarde iluminaba aquel parque que hacia recordar a Susuke los momentos felices vividos con su hermanitos, aunque tenía a su familia y un bello novio no podía sacar de su cabeza a Sasuke.
─ Ototo. –Susurro mirando el lago-
Para Susuke parecía que fue ayer cuando se veían a él y su hermanito correr por el parque jugando entre risas y alegrías libres de cualquier preocupación.
─ Haría lo que fuera por volverte a ver. –Suspiro deprimido encaminándose a su hogar-
El viento golpeaba su rostro de una forma delicada cerro sus ojos dejándose llevar por la tranquilidad que la tarde le ofrecía, de repente sintió como un peso extra se sumaba a su espalda junto a un grito.
─ ¡ANIKI!
Una palabra.
Un grito.
Hicieron que sus ojos se abrieran impresionados por la persona que estaba abrazándolo en ese momento.
─ Sa…Sasuke. –Volteo encontrándose con ese par de ojos negros que tanto había anhelado volver encontrar-
─ Aniki. –Susurro Sasuke parándose frente de él- Te extrañe. –Sus ojos se cristalizaban-
─ Yo también. –Lo abraza como si el mundo dependiera de ello- No sabes cuánto te extrañe.
─ Aniki.
No importaba lo que él mundo hablara de ellos sus lagrimas eran la expresión perfecta del afecto y la falta que se habían tenido uno al otro, tras un largo año de entrenamiento con el sharingan Sasuke al fin podía realizar aquel Jutsu que lo llevo junto a su hermano.
─ Ahora podre verte cuando quiera. –Sonreía feliz Sasuke-
─ Así será, bienvenido. –Lo volvía abrazar-
Unos ojos diferentes a los suyos eran capaces de unir dimensiones y corazones de dos personas diferentes pero a la vez iguales.
PARTES III
FINAL
Toda buena historia tiene un gran final.
Los años pasan dejando por su camino varios recuerdos entre alegres y tristes que ayudan al humano ha aprender de aquellos tropiezos que se atraviesan a diario.
Cinco largos años han pasado desde que una verdad salió a la luz una verdad llena de tristeza y alegría a la vez, una verdad que separo a dos corazones unidos por la hermanad que los años fortaleció en la vida de dos jóvenes.
Pero toda soledad tiene una recompensa tras un año de lucha y dolor el destino de ambos jóvenes de volvieron a reencontrar.
Hoy cinco años después Susuke y Sasuke llevan una vida completamente normal es lo respecta la palabra.
Desde el momento que Sasuke logro controlar el jutsu espacio tiempo se la pasa en ambos lugares en especial los días que se peleaba con su sexy novio rubio, esos eran los días que Naruto deseaba en lo más profundo de su corazón ser un Uchiha.
FLASH BACK
Era un día tranquilo hace tres años atrás Sasuke había llegado de visita donde su familia a Japón se la paso de lo más divertido y su familia estaba feliz de tenerlo en casa, pero todos se preguntaban.
¿Estar una semana lejos de Konoha no le causaría problemas?
─ Ototo. –Susuke se acerca a él-
─ ¿Qué pasa Aniki? –Lo mira detenidamente-
─ No es que me moleste tú presencia, al contrario me encanta tenerte aquí.
─ ¿A qué quieres llegar?
─ ¿No crees que tu familia se preocupara si no llegas a casa una semana?
─ No. –Respondía de lo más tranquilo- Esta semana tengo libre de mis deberes ninja le dije a Oto-san que lo pasaría aquí. –Voltea su rostro- Lejos del dobe. –Susurro su última oración-
─ ¿Dobe? ¿Qué paso con Naruto? –Pregunta serio Susuke-
─ Nada.
─ Sasuke. ¿Acaso se pelearon? ¿Qué te hizo?
─ Nada. –Volteaba su rostro serio-
─ ¿Acaso dijiste algo para que se enojaran?
─ ¡Yo! ¡¿Por qué yo?! ¡Él tiene la culpa! –Responde enojado- Yo. –Se da cuenta de su reacción- Gomen no quería.
─ Ototo. –Se sienta y lo abraza- Adoro tenerte en casa, pero si es por una pelea con tú novio no está bien huir.
─ Pero…
─ Regresa habla con él, además ese rubio cabeza hueca te ama mucho. –Sonríe-
─ Gracias Aniki. –Lo abraza-
─ No importa si tenemos dieciocho o cien años siempre serás mi hermanito. –Abrazaba gustoso a su hermano-
─ Creo que es hora de regresar. –Sonríe- Pero volveré pronto.
─ Hai
FIN FLASH
Tantas escapadas que se daba Sasuke a lado de su hermano que cada minuto que pasaban juntos su hermandad se fortalecía a cada momento, en todos los momento que sus mentes recuerdan a una en especial que Susuke nunca va olvidar.
El día que casi pierde a su hermano.
FLASH BACK
Hace un año atrás Susuke se encontraba algo intranquilo desde hace algunos días no sabía que ocurría pero algo en su interior lo mantenía nervioso.
─ Amor ¿Qué tienes? –Naru mira preocupado a su pareja-
─ No se, siento como que algo malo está pasando.
─ ¿Qué puede ser?
─ No lo sé. –Siente una opresión en su pecho- Ototo. –Susurra-
─ ¡SUSUKE! ¡NARUTO! –Ambos chicos voltean encontrándose con un rubio alterado-
─ Naruto. –Susurro Susuke aterrado por su presencia y su mal presentimiento-
─ ¿Naruto qué haces aquí? –Pregunta el rubio al ver a su semejante-
─ Susuke. –Se para frente al moreno- Es Sasuke.
No importo explicaciones ni detalles a penas escucho que Sasuke se encontraba herido en el hospital de Konoha corrió lo más rápido atravesando ese portal que lo llevo de regreso aquella aldea donde había dejado a su hermano.
─ ¡Sasuke! –Gritó a penas atravesó la puerta del hospital-
─ ¿Susuke? –Los Uchiha los miraban asombrados por su presencia-
─ ¿Cómo está Sasuke? –Pregunto lleno de preocupación-
─ Estable. –Responde Itachi- Pero aun no reacciona lleva una semana inconsciente.
─ ¿Quiero vero?
─ Claro hijo pasa. –Mikoto lo guío-
Sentía como su corazón se paralizaría en cualquier momento por la imagen que se mostraba entre sus ojos, su pequeño, su niño, su hermanito estaba cubierto de claves y heridas en su cuerpo, se acercaba lentamente al pelinegro tomando su mano.
─ Ototo. –Susurraba- Ototo estoy aquí. –Sentía como sus lágrimas querían salir de sus ojos- Sasuke despierta.
Sus manos apretaban las manos del menor de los Uchiha, Susuke sentía como su mente y su corazón se abrumaban por aquella imagen una imagen que le dolía, pero de repente un pequeño apretón lo despertó de sus pensamientos.
─ ¡Sasuke! –Alzo su mirada para encontrarse con aquellos ojitos negros que durante su infancia lo miraban llenos de ternura-
─ A…ni…ki. –Susurro débilmente-
─ Shh…Tranquilo Ototo. –Besa su frente- Gracias al cielo que estas bien.
Un accidente hizo de su hermandad sea mucho más fuerte.
FIN FLASH
Tantas aventuras vividas entre estos hermanos hoy vivirán una de las más grandes que el ser humano puede cometer en su vida.
Casarse.
Sasuke y Susuke unidos desde su infancia no querían perder la oportunidad de compartir un gran momento de sus vidas.
Claro está que un novio de ellos casi no llega vivo al altar al enterarse Susuke que su amado Ototo estaba embarazado de su novio casi muere el rubio ese día ante las mano de Susuke, de dos Itachi, para rematar su suerte dos Fugaku y Mikoto de Japón, porque la de Konoha estaba feliz con la idea de ser abuela.
Susuke también llego vivo de suerte al altar porque su novio estaba embarazado mucho antes que su hermanito.
Hoy frente al altar estaban dos parejas casi iguales a la derecha estaban Susuke con un traje negro y a su lado Naru con un kimono blanco que ayuda a cubrir sus seis meses de embarazo, a la izquierda estaban Naruto con un kimono tradicional color negro y a su lado su novio con un kimono color blanco que cubría sus tres meses de embarazo.
El sacerdote frente a las dos parejas un sacerdote listo para la pregunta del millón.
─ Susuke Uchiha aceptas como esposo a Naruto Uzumaki para amarlo y respetarlo en la salud y en la enfermedad en la riqueza y en la pobreza hasta que la muerte los separe.
─ Acepto. –Respondió con una sonrisa el moreno-
─ Naruto Uzumaki aceptas como esposo a Susuke Uchiha para amarlo y respetarlo en la salud y en la enfermedad en la riqueza y en la pobreza hasta que la muerte los separe.
─ Claro padre acepto. –Sonrió tiernamente-
El sacerdote se movió donde estaba la otra pareja.
─ Naruto Namikaze aceptas como esposo a Sasuke Uchiha amarlo y respetarlo en la salud y en la enfermedad en la riqueza y en la pobreza hasta que la muerte los separe.
─ Claro que acepto dettayo!!
─ Dobe compórtate. –Sasuke lo repelo-
─ Sasuke Uchiha aceptas como esposo a Naruto Namikaze amarlo y respetarlo en la salud y en la enfermedad en la riqueza y en la pobreza hasta que la muerte los separe.
─ Bueno. –Toca su vientre- No me queda de otra.
─ ¡Teme! –Grita aterrado por su respuesta-
─ Acepto. –Sonríe de lado-
─ Que chicos. –Exclama el sacerdote agotado con ambas bodas- Si hay alguien en esta sala que tenga un motivo para que alguna boda no se realice que hable ahora o calle para siempre.
─ ……. –Nadie dijo nada por suerte caso contrario dudo que hubiera vivido ante la mirada penetrante de los Uchiha presentes en esa boda-
─ Por el poder que me otorga el Hokage los declaro…. –Pensó un momento en la palabra correcta para ellos- Esposos, pueden besar a sus novios.
El gran beso fue un festejo doble, la pequeña fiesta se realizó en los terrenos Uchiha, llegada la medianoche las parejas desaparecieron momentáneamente.
─ ¡Que cansando! –Exclamo Sasuke sentado en una roca-
─ Pero divertido. –Lo acompaño a su lado Naru-
─ ¿Boba doble? Al final no fue mala idea. –Comenta divertido Susuke-
─ Matamos dos pájaros de un tiro. –Ríe Naruto-
Los cuatro chicos quedaron callados mirando el cielo.
─ Hace cinco años que nos conocimos. –Comenta de la nada Sasuke-
─ Todo comenzó con tú misión Nii-san. –Naru mira a Naruto-
─ Una simple misión. –Susurra Susuke-
─ ¿Simple? Para nada fue simple. –Recordaba el día que le entregaron la misión- Nunca pensé que fue tan complicado cuidar a dos temes.
─ ¡Dobe! –Gritaron los pelinegros-
─ Jijiji –Ríe Naru-
─ ¿Qué es tan gracioso? –Preguntan todos-
─ Al fin Naru fueron “Dos temes para un Dobe”
─ Es verdad.
─ Jajajaja –Todos terminaron riendo-
─ Pero no me arrepiento de la misión. –Naruto abraza a su esposo-
─ Yo menos. –Susuke también abraza a su esposo-
─ Porque al final me quede con mi dobe/con mi teme. –Ambos semes hablan a la vez uniendo sus respectivos labios con sus ukes.
Un beso era la unión del amor, lo que todo comenzó con una misión que hacía ver doble a Naruto hoy termina como un cuento de hada porque al final cada dobe tiene su propio teme.
FIN