- Por que tienes cara de tonto enamorado, espera ya se, te topaste al chico del bar de anoche- sonrió con malicia.
- ¿Qué?- aquella pregunta lo descoloco totalmente.
- Qué viste…- no pudo terminar su pregunta al oír al otro contestarle.
- Si, eso si lo entendí- frunció el ceño-además que no te dolía la cabeza, vete de aquí- lo empujo fuera de la cocina.
- Peor si es mi cocina- dijo sin evitar sonreír por la actitud de niño pequeño de su amigo.
- Eso no me importa- dijo dándose la vuelta sin voltear a ver a su amigo.
En casa de Minho
- Ese chico…- se toco los labios, recordando su fugaz encuentro con Key, pero sus pensamiento fueron interrumpidos por el molesto sonido de su celular- ¿Quién será?- tomo su teléfono y vio el nombre de Jonghyun en la pantalla, dejando escapar un suspiro contesto-hola
- ¡Minho!, a que no sabes que acabo de ver- dijo con voz entusiasmada.
- Rodo los ojos- dime.
- Recuerdas al chico de cabello rubio
- Key
- ¿eh?, bueno no importa, el esta justo frente a mi en este momento.
- ¿Dónde estas?- dijo levantándose de la cama, mientras buscaba sus tenis debajo de esta.
- En la librería del centro comercial.
- Voy para allá, espérame ahí- y colgó, por fin encontró sus tenis se los puso y salió de su casa.
- Que lindo- dijo con sarcasmo-bueno al menos si Minho comienza a hablar con el rubio, podre hablar con el-dijo mientras espiaba a Key y a Taemin que estaba en una tienda de ropa.
En un parque estaba Eunhyuk sentado en una banca contemplando el cielo.
- Ahh- suspiro- era lindo.
- Disculpa, ¿me puedo sentar?- le pregunto una voz bastante varonil.
- Volteo para ver quien le preguntaba, pero jamás se espero que fuera SU chico del bar- c...claro.
- Gracias- se sentó y levanto su cabeza, mirando el cielo- es hermoso, ¿verdad?
- ¿Eh?, claro hermoso- se sonrojo un poco y también levanto la vista al cielo.
- Me llamo Donghae- lo volteo a ver mientras en su rostro se dibujaba una perfecta sonrisa.
- Soy Eunhyuk- le dijo sonriendo.
- Bueno, es una lastima que no podamos seguir platicando, pero me tengo que ir- se levanto de la banca y se acerco al rostro de Eunhyuk- espero volver a verte muy pronto- le beso la mejilla, se dio vuelta y comenzó a caminar.
- Estaba en shock total, ¿eso había sido real?, se toco la mejilla mientras sonreía de forma bastante amplia.
En el centro comercial
- Key hyung, ya por favor decídase por una- dijo Taemin, dejándose caer en una silla.
- Es que las dos me gustas mucho- dijo haciendo un puchero.
- Te verías mejor con la blanca- les dijo una tercera voz, haciendo que ambos voltearan.
- Minho…- dijo Key, mientras sonreía de forma coqueta- ¿que te trae por aquí?
- Quería comprarme algo de ropa, o es que no puedo- le dijo mirándolo fijamente, sonriendo.
- Nada de eso- le contesto Key, dándole la camiseta blanca a la chica que los estaba atendiendo, internamente se sentía feliz de poder volver a ver a Minho.
- Tomo una camiseta negra-¿que te parece esta?
- Bien, pero mejor te la pruebas ¿no?- le dijo Jonghyun siguiéndole el juego al mas alto.
- Si, insistes- y fue a los probadores.
- ¿es algo tuyo?- pregunto Taemin con algo de timidez.
- Es mi mejor amigo, pero solo eso-lo volteo a ver y le regalo su mejor sonrisa, haciendo que Taemin al verla se sonrojara un poco, si que es lindo-¿Cómo te llamas?
- Taemin- dijo bajando la mirada-¿y tú?
- Jonghyun, pero puedes decirme Jjong- le guiño un ojo.
- Key volteo a ver donde estaba su hijo, al verlo junto a Jonghyun, sonrió ya que sabia que al pelirrojo le gustaba el bajito.
- Entonces, ¿Qué tal me veo?- dijo Minho llamando la atencion de todos en el local, al verlo mas de uno casi deja caer la quijada al suelo, entre ellos estaba Key.
- Mmm… bien- le dijo con simpleza Jonghyun.
- ¿bien?, se veía jodidamente sensual con esa camiseta negra, que resaltaba su cuerpo trabajado, Key prácticamente se estaba devorando Minho con la mirada. Esto claro que no paso desapercibido por Minho, que al notar como lo miraba el otro sonrió triunfalmente.
- Creo que me llevare esta camiseta- le dijo a una chica que estaba enseguida de el y sin mas se quito la camiseta, entregándosela a la chica, volviendo al probador por su ropa.
- ¡dios!, santos cielos, ese hombre definitivamente tenia que ser suyo, pensó Key ideando un plan para hacer caer a Minho ante el.