Capitulo 3
Los italianos habían insistió en organizarle una fiesta de despedida de soltero a Fidio y los Pequeños gigantes no se podían quedar atrás así que habían terminado organizándole una también a Rococo y los invitados divididos entre las dos fiestas.
Angelo Cabrini y Gianluca Zanardi los instigadores de toda la locura de la fiesta de despedida de soltero habían acabado con todo el equipo Italiano en la de Fidio, mientras que Skid y Dragon Hill que se habían encargado de seguirles el juego con todos los pequeños gigantes habían acabado en la de Rococo mientras los otros invitados se habían dividido. Endo, Kazemaru, Natsumi, Goenji, Fubuki, Tsunami, Tachimukai, Mac Raniejo, Falcao Da Silva y Leonardo Almeida habían acabado con Rococo y los pequeños gigantes celebrando, mientras que Akio, Yuuto, Edgar, Teres, Mark, Dylan, Hidetoshi, Luca y Phillip habían acabado en la de Fidio.
-¿En qué piensas?-se sentó a su lado Endou Mamoru con una cerveza sobresaltando a Rococo que tenía la cabeza en Babia, mientras observaba sin observar realmente a Natsumi bailando con Cain Saito, junto a Goushu y Windy.
-En Fidio- admitió con una sonrisa culpable Rococo.
-Ahh que lindos-se burlo Tsunami sentándose al otro lado de su antiguo capitán-ni siquiera están casados y no pueden pesar en apartarse el uno del otro… ahh el amor-canturreo burlonamente la antigua palmera rosa ya no tan palmera, seguía siendo alto, moreno y de cabellos rosas, pero ahora usaba espejuelos y no llevaba el pelo con tantos pinchos.
-Solo tienes envidia por que yo estoy a punto de casarme con mi lindo delantero italiano, mientras tu aun sigues dando vuelta alrededor de cierto portero sin atreverte a entrarle… cobarde-le sonrió Rococo asiendo sonrojar al chico del surf.
-¿De dónde sacas eso?-balbuceo dándole un trago a su cerveza.
-Venga tampoco te sientas mal, tu gemelo malvado, Skid, tampoco tiene el valor de entrarle a mi pequeño Cain-se rió.
***
-Venga te estás quedando conmigo Fidio-se quejo Angelo. El Italiano negó con la cabeza cruzado de brazos.
-Quiero ir con Rococo-se quejo el castaño.
-Pero se supone que es tu fiesta de despedida-le dijo Gianluca.
-Perfecto hagámosla juntas y todos contentos, tomamos y bebemos-sonrió Fidio como si la solución fuera obvia.
-Pero, pero….-trato de decir Angelo.
-¿Pero qué? Como esos pequeños gigantes se hayan atrevido a llevarle una stripper a mi futuro esposo los reviento a balonazos-dijo Fidio al más puro estilo Goenji Shuuya con un aura oscura a su alrededor.
-¿Qué?-se sobresalto Angelo al ver a la conclusión que había llegado Fidio con una gotita en la cabeza-para nada, ellos y nosotros apreciamos nuestra vida. Admito que Gianluca pensó en traerte una, pero Rococo amenazo con echarlo a los cocodrilos y a mí me gusta tener novio así que evite que lo hiciera-confeso el rubio que seguía pareciendo un angelito aun 10 años después.
-Angelo, ríndete y mejor arrastremos, toda esta comida y bebida al otro pabellón, no ves que Fidio no va a descansar hasta que pueda estar sobre Rococo-rio Mark Kruger la mar de divertido.
Fue así como terminaron cargando todo y cayendo dentro de la fiesta de los pequeños gigantes. La sonrisa de Rococo al ver a su prometido a la cabeza podría haber iluminado el mundo, aunque fue demasiado cuando se levanto y corrió a tomar a Fidio de la cintura alzándolo en el aire y besándolo.
-¿Son siempre así?-pregunto Goenji a Goushu tratando de no romper a reir.
-¿Así de empalagosos?-pregunto Goushu.
-Cada día-le aseguraron Windy y Goushu a la vez.
-A que lindo es el amor-sonrió Kazemaru divertido.
***
Unir las dos fiesta había terminado por ser más divertido sobre todo porque los italiano no tenían vergüenza ni madre por lo que parecía y sacaban a bailar a todo el mundo eran tan sociables y descarados como Fidio, se veía que lo llevaban en la sangre.
-¿Venga te estás quedando conmigo?-Sonrió Teres Tolue a Edgar Valtinas, el ingles de cabellos celestes, alto pero de constitución delicada y ojos de un peculiar azul que hacían juego con su cabello, estaba retando al gran, alto fuerte y moreno ex-capitán de Argentina a un reto de copas. -¿en serio crees que puedes ganarme?-pregunto el argentino la mar de divertido.
Todo esto era culpa de Raniejo que se había puesto a tomarle el pelo a Edgar diciéndole que los ingleses no sabían tomar, que cualquier americano podía tomar el doble que ellos dado que veía que Edgar solo tomaba refresco. Obvio a alguien tan orgulloso como el ex–capitán de Inglaterra no se le podía retar con algo así, así que Raniejo viendo que lo iba a retar a un concurso de copa había señalado a Teres y le había dicho.
-Te apuesto a que Tolue bebe más que tu.
Y ahí había ido él ingles de frente a retarle a un concurso de copas.
-Siempre puede retirarse pero… eso será automáticamente mi triunfo-le recordó Edgar.
-Anda Teres no te dejes-reía Dylan metiendo baza.
-¿O tienes miedo de nuestro Edgar?-metía sisaña también Mark. Ante la presión Teres no pudo más que encogerse de hombros y asentir.
-Qué conste que te di la oportunidad de salvar el orgullo Edgar… esta vez vas a perder-le dijo el moreno sentándose frente a el mientras Fidio que no se perdía detalle traía dos botellas completas de Wisky y dos vasos pequeños poniéndole una botella y un vaso a cada uno enfrente.
-Pueden comenzar caballeros, ¿Rococo estas tomando el tiempo?-pregunto a su prometido que estaba poniendo el cronometro del reloj.
-Si amor, el que más beba en menos tiempo gana-les dijo Rococo.
***
-Ustedes quieren ver a Edgar humillado ¿verdad?-pregunto Phillip Owen con una gotita en la cabeza.
-¡Oye!-se quejo Edgar-más confianza-exigió.
Phillip suspiro sabiéndose perdidos Edgar no aguantaba ni dos copas sin empezar a decir incoherencias… con cinco ya se quería sacar la ropa, con 7 acababa debajo de una mesa desmayado.
-Vale Edgar, aguanta por el orgullo de Inglaterra-sonrió Phillip resignado-representa a los europeos.
-Nos fastidiamos si Edgar nos representa en un concurso de copas ganaron los americanos-le susurro Gianluca a Angelo al oído mientras el angelito de los italianos reía divertido.
-Empiecen-ordeno Rococo. Copa tras copa, Teres llenaba su vaso de shot sin inmutarse, pero Edgar cada vez tomaba más lento y hacia mas mueca, a la 5ta copa su cabeza cayó sobre la mesa mientras balbuceaba incoherencias.
-Gana Teres con 10 chupitos vs 5 chupitos.-anuncio Rococo parando el reloj mientras todos celebraban y Phillip reía resignado ya sabía que eso pasaría.
-Venga Edgar-rió Teres moviéndose para sentarse junto a Edgar y tratarlo de levantar, Edgar le miro con ojos brillantes de borracho y le palmeo la cara con una mano.
-Pero si es Teles-dijo con la lengua enredada-pero que guapo estas-dijo palpando sus fuertes brazos- uhmm mucho musculo así me gusta... shi señor-asintió tambaleándose cuando se intento mover por lo que el Argentino lo sostuvo.
-Suficiente alcohol para usted señor-dijo Teres agradeciendo ser moreno para que no se le notara el sonrojo-será mejor llevarte a dormir la turca-dijo buscando con la vista a Phillip, pero este se encontraba bailando con una prima de Rococo era obvio que no iba a dejar de hacerlo-bueno supongo que te llevare yo-suspiro levantándose y pasándole una mano por la cintura a Edgar para ayudar a caminar al borrachito.-Mark, Dylan-llamo a los dos americanos que se comían la boca el uno al otro, Dylan sentado sobre el regazo de Mark.- Podéis decirle a Phillip que no se preocupe por Edgar que me lo lleve a que duerma la turca-les dijo a los dos que apenas y le miraron asintiendo en su dirección.
-Bueno, bueno-hizo Hidetoshi hacer silencio a todos, haciendo levantar a Luca de su regazo para poderse levantar el también aunque no dejo ir muy lejos al rubio-Quiero brindar-dijo alzando su cerveza estaba un poquito achispado pero ni de lejos estaba borracho apenas estaba… contento-Por la felicidad de los novios. Por nuestro Fidio a quien le afecto tanto nunca haber logrado meterle un gol a Rococo en la FFI que decidió meterle un gol en el matrimonio-dijo en tono pícaro y jocoso haciendo reír a los invitados por el doble sentido de meterle un gol al antiguo portero de los pequeños gigantes.
-Salud-rieron todos alzando sus copas.
-Salud-repitió Rococo-pero en realidad, en esta relación yo me pongo el traje de delantero… soy el que mete los goles-dijo en tono jocoso también asiendo sonrojar a Fidio.
-Solo por ahora, cuando nos casemos yo quiero mi oportunidad de delantero-dijo Fidio con un puchero.
-Vale, pero no te quejes si hago como siempre paro el gol y lo revierto-le beso Rococo la mar de divertido, las pocas veces que su pequeño Italiano había querido ser seme, digamos que Rococo se había encargado de persuadirlo de una forma muy sensual que siempre dejaba al Italiano bajo el rogando por mas.
-Ahhh que lindo, alcen la mano los que creen que Rococo debe dejarse meter un gol-rió Angelo, los de Italia por solidaridad alzaron sus manos mientras los del Congo y los de Japón también, pero solo por fastidiar a Rococo.
-Vale son mayoría-rio Rococo alzando sus manos en señal de rendición-algún día que este lo suficientemente borracho como para no saber mi nombre amor, tal como Edgar después de su concurso de copas mientras piropeaba a Teres, tu me meterás un gol-le prometió a Fidio.
-No te sientas tan mal Fidio… a mi tampoco me dejan meter gol-le consoló Angelo-y mira que lo intento-rió mirando a Ginaluca que se rasco la cabeza divertido.
-¿De qué hablan?-pregunto Natsumi un tanto perdida sin entender la conversación de fútbol con doble sentido.
-Cosas de jugadores-rió Mac quitándole importancia y consolando a Natsumi con una sonrisa divertida-solo los futbolistas podemos entenderlo.
-El portero que se pasa recibiendo goles a diestra y siniestra literalmente es Falcao-rio Dylan acusando al moreno brasileño de rastas y pañoleta en la cabeza.
-Ehh que también e metido gol-se quejo Falcao de lo más tranquilo le gustaba que le metieran esos goles de los que hablaban pensó dándole una mirada divertida a sus compañeros.
-Sera a Leonardo por qué no veo a Mac dejándose-rio Dylan.
-Bueno pero lo he metido que es lo que importa- admitió Falcao que así era la cosa.
-Dios son unos pervertidos-rió Mamoru agarrándose la pansa todos sabían que los tres brasileños vivían en un trío, nadie entendía muy bien cómo funcionaba pero si los otros eran felices así por ellos estaba bien. –Venga Raniejo déjate que los pobres tienen derecho.
-Lo siento Mamoru pero soy pésimo portero prefiero ni acercarme a la portería para que no me metan goles-negó Mac-déjate tu que se que a los porteros les gusta un buen gol de vez en cuando-dijo arqueando las cejas pícaramente.
-Sigue por ese camino y duermes con el perro-bromeo Falcao.
-Que va a Rococo y a mí no nos gusta que nos metan goles nos hiere el orgullo-rió mientras Rococo asentía después de todo eran los mejores porteros ahí.
-Dejemos la conversación de goles y no goles-se quejo Tachimukai-que a mí no me meten uno ni aunque esté dispuesto a dejarme-dijo y se notaba que este ya estaba borrachito mientras miraba acusadoramente a su mejor amigo de cabellos rosas.
-Toma Tsunami directa y sin anestesia-se rio Skid de él, asiendo sonrojar al surfista.
-Paz, paz-rió Saito pellizcando a Skid-Aunque esa si fue directa Tsunami-no puedo evitar también tomarle el cabello a la palmera rosa sabiendo que su amigo bebía los vientos por el pero era muy tímido había que aprovechar que el alcohol le había envalentonado. -Juguemos verdad o reto-propuso y casi todos asintieron asiendo un enorme circulo y acomodándose por donde podían para poder jugar, casi todos se pusieron de inmediato en parejitas menos los solteros que se metieron donde pudieron y los abstemios que prefirieron seguir tomando y comiendo antes de jugar con la bola de montoneros por que jugar con ellos… podía ser peligroso
Continuara…