Capitulo 5: Secuestro
<<1 mes después>>
-Gracias por acompañarme Shun.
Le dijo Afrodita, mientras caminaban llenos de bolsas por el pueblo de camino al santuario.
-¿Y que onda con Julius? ¿Ya se animo para la boda?
Le pregunto Shun divertido, ya estaba próximo a cumplir los tres meses de embarazo y aun no se le notaba y solo llevaba tres semanas casado y al parecer pro las caras de feliz satisfacción que el y Camus portaban por las mañanas, el matrimonio les estaba sentando bien a ambos.
-¿Mascara animarse para que nos casemos? Querido aun no es el Apocalipsis.
Dijo Afrodita con cinismo, arrancándole una sonrisa a Shun. Al pasar por un callejón unos hombres extraños les salieron al paso serrándoles el camino. Afrodita de inmediato e instintivamente se puso delante de Shun.
-¿Qué quieren?
Pregunto el caballero de Piscis duramente.
-Buscamos aun joven llamado Afrodita.
Dijo un hombre que paresia ser el líder y que se adelanto con paso firme. El hombre se quito las gafas oscuras que portaba, igual que los demás tipos vestidos con etiquetas negras y Afrodita casi se atraganto al ver que el hombre era casi una copia al carbón de MM pero con los ojos rojos y el cabello elegantemente amarado.
-Soy yo que quieren.
El hombre se acerco asta Afrodita y estirando una mano le acaricio suavemente una mejilla, a lo que Afrodita por la impresión no pudo reaccionar.
-Así que es por ti que mi hermano a abandonado a su familia y se niega a volver.
-¿Hermano? ¿Eres de casualidad hermano de mi Julius?
-Así es. Soy Pierre.
Afrodita bajo la guardia un poco mas tranquilo, pero eso fue un grave error, por que de inmediato sintió un piquete en el cuello. Pierre tenia en la mano algo parecido a una aguja y se lo había clavado en el cuello, ese objeto impregnado de alguna solución somnífera, corrió rápidamente por el torrente sanguíneo de Afrodita sin darle tiempo a reaccionar.
Se desplomo sin sentido el peliazul, en brazos del moreno italiano que lo recibió. Shun tiro las bolsas al suelo y justo cuando iba a invocar a Andrómeda el hermano de Julius lo miro, poniéndole una navaja en el cuello a Afrodita.
-Un solo paso y lo mato.
-Tranquilo, no hagas ninguna estupidez.
Dijo Shun nervioso.
-Jefe que asemos con el.
-Paréese amigo del amante de mi hermano, ais que traiganlon asi nos aseguramos de que esta preciosidad no intente nada que su amiguito pueda lamentar.
Sonrió el italiano maliciosamente.
Continuara...