NARRADOR.
Después del aquel problemilla —que no paso a mayores. —a la jefa de Sapphire le encargaron hacer la encargada de ir por su sección a Francia, por asuntos de cooperación y distribución, además del intercambio cultural de mangas por las dos partes. Como Yuki era la única que no se despegaba de él, ya hasta comenzaba a extrañarla, pero como además tenía a más amistades, decidió no deprimirse con una si hace mucho que no salía con hombres. Shota, uno de ellos, decidió que este sería buen momento de ir a la librería donde Yukina trabajaba así que aria la promesa que le dio a Ritsu.
-. ¿A dónde vamos?
-. A una librería.
-.qué lugar tan exuberante para ir.
-.es que le prometí a Ricchan que conocería a una persona.
-. ¿Qué, allá?
-.ahí trabaja.
-. ¿De qué hablan?
-.si no sabes, para que venias con nosotros.
-. ¡jum! Si tú me invitaste.
-. Jeje. *pone su cabeza en su nuca* —creo que tienes razón en culparme.
Entraron al edificio, bajando hasta la planta en donde se encuentran los mangas shojo y vieron los inmuebles repletos de todo este género y hasta novelas.
-.de seguro que aquí tienen el nuevo tomo de mi manga.
-.no te aseguro nada, ya que casi todos los departamentos han terminado el ciclo hace algunos días.
Siguieron la mayor de ellos y dieron enfrente de un joven de cabellos también castaños y los ojos del mismo tono solo que él era en proporción más alto y mucho más guapo y fornido que hasta parecía que brillaba donde posaba su divina existencia.
-.Yukina.
-.oh, hola Kisa-san, ¿Qué te trae por aquí?
-.vine… con unos amigos a…
Este vio que los chicos quedaron estrépitos al ver a tal hombre salir con aquel editor mucho mayor que él —según su estimación—.
-.mmm… mejor nos vemos allá afuera. Mi turno esta por acabar.
-.no hay problema, solo se quedaron helados, pero estarán bien.
Este los jala aun hipnotizados por tal belleza del joven.
-.vaya que no pueden ver algo porque se le quedan mirando.
-.Kisa, ¿cómo le hiciste para salir con él?
-.si Kisa-san, cuéntanos.
-.*saliendo del edificio* —bueno, pues… solo sucedieron las cosas.
-.típico —dijeron en unisonó con cara de “esa ni nosotros la creemos”.
ALGUNOS MINUTOS DESPUES…
-.perdona por haber tardado tanto.
-.no hay problema, es tu trabajo y lo entiendo.
-. ¿Y quiénes son ellos?
-.ah, ellos son Ritsu Onodera y Misaki Takahashi.
-.*susurrándole* — ¿Cómo es que sabe mi nombre?
-.*susurrando* —pues porque yo se lo dije.
-. ¿Son solo tus amigos, no? *empieza a caminar*
-.claro que si tonto *le sigue la caminata*
-.*susurrando* —creo que basta con que lo conozcamos, ¿no? Ya deben de hacer sus cosas a solas.
-.*susurrando* —creo que si Ritsu.
-.oye Kisa, me acorde de que tengo que ir a mi apartamento a hacer… cosas.
-. ¡Qué bueno que me lo recuerdas! Yo también tengo que prepararle la cena a mi casero.
-.no es que los dejemos solos, pero… ¡nos vemos! —huyen de ese lugar dejando a los otros viéndolos de manera extraña.
-.son muy raros esos dos.
-.yo creo que no, los conozco.