CAPITULO VIII
CUANDO SE LASTIMA A UN CONSORTE
Las heridas del corazón son las más profundas y difíciles de curar.
Las grandes alianzas siempre naces de acuerdos y amistades entre grandes naciones con el único objetivo de evitar luchas mutuas que afecten a los ciudadanos de aquellos países, pero cuando uno de esos reinos no está de acuerdo con paz afecta a todos aquellos que de una u otra forma se ven afectados.
Wolfram von Bielefeld como consorte de Shin Makoku en estos últimos años se ha encargado de afianzar sus relaciones con los reinos humanos, forjando una amistad con aquellas naciones.
La nueva alianza humano-mazuku es el fin de la cadena de odio y rencor entre ellos y el comienzo de un futuro lleno de paz y unión, dentro de los reinos humano Wolfram supo ganarse el aprecio y amor de cada uno de los reyes en especial de los príncipes y princesas que no perdían las esperanzas de ganarse el corazón de Consorte.
Hoy en Pacto de Sangre se celebra una reunión memorable que por primera en siglos los reyes humanos se reúnen en las tierras Mazokus y en especial porque desde su alianza podrán ver por primera vez al Maou.
Yuuri y Wolfram se dirigían a la reunión con una gran sonrisa mientras avanzaban los reyes iban apareciendo robando la atención del joven Consorte.
─ Lord Wolfram ¿Cómo ha estado? r13;Uno de los reyes de acerca a saludar.
─ Muy bien Lord Steven, ¿Cómo está el reino de Ruminia? Me entere de la terrible tormenta que paso cerca de su reino. r13;Dice preocupado.
Wolfram era alguien que se preocupaba por sus colegas y esa preocupación siempre era muy apreciada por parte de los reyes quien lo veía como un hombre de un gran corazón.
─ Estamos mucho mejor recuperándonos poco a poco, gracias por su preocupación. r13;Sonrió agradecido.
─ No es nada, avancemos a la reunión.
El encuentro previo con los reyes se daba con pequeñas conversación que no salían de protocolo establecido entre ellos, al llegar al salón todos estaban listos para recibirlos.
─ Sean todos bienvenidos. r13;La voz de Wolfram llamo la atención de todos los presentes que estaban en la mesa– Les presento a Yuuri Shibuya, Maou de Shin Makoku.
─ ¿El Maou? r13;Todos se asombraron al escucharlo.
─ A nombre de todos. r13;Se levanta la representante de Caloria– Sea bienvenido Rey Yuuri.
─ Gracias, espero que mi presencia no les incomode. r13;Sonríe Yuuri a los reyes.
─ Al contrario nos alegra tenerlo entre nosotros. r13;Habla Sara.
Ante saludos que mandaba el protocolo, Patrick toma la palabra al ser el rey de unos de los reinos más poderosos de la alianza.
─ Señores y Señoritas, como es de saber nuestra alianza está conformada por todos los reinos de este mundo tanto Mazoku como humanos, pero entre nosotros solo un reino se niega a formar parte de nosotros. r13;Dice seriamente.
─ ¿Cuál reino Lord Patrick? r13;Pregunta el rey de Polonia.
─ El reino de Zuratia.
Ante aquel nombre Yuuri abrió sus ojos asombrados y dirigió su mirada a Wolfram quien sus ojos mostraba dolor al escuchar aquello.
─ Greta. r13;Susurro– ¿Por qué?
─ Zuratia. r13;Toma la palabra otro rey– Ese reino no es dirigido por una niña.
─ Así es Lord William. r13;Afirma Patrick– Es un reino pequeño que no significa ningún peligro para nosotros juntos pero…
─ El solo hecho que querer volvernos una alianza tomando en cuenta a todos los reino es una molestia que Zuratia no se nos una. r13;Interviene Saragueli– Los motivos de la reina, en lo personal son muy infantiles.
─ ¿Cuáles son los motivos? r13;Pregunta el rey de Estolia.
Patrick y Saragueli miraron de reojo a Wolfram quien se mantenía cabizbajo al escuchar que aquella que alguna vez fue su hija, ahora era una enemiga para la alianza.
─ Como dije son muy infantiles. r13;Dice Patrick preocupado por la reacción de Wolfram– No acepta que un rey este dentro de la alianza, para entrar pide que ese reino salga.
─ ¡Qué tontería Patrick! r13;Interrumpe la reine de Almenia– Como puede pedir algo así.
─ Lo sé yo tampoco lo acepto. r13;Suspira al no saber qué hacer.
─ Señores. r13;Wolfram toma la palabra y Yuuri lo mira al saber que él defendería a su hija– Como se lo dije a Patrick el día de ayer si la reina no quiere ser parte de nuestra alianza simplemente será la enemiga de la misma.
─ ¿Wolf? r13;Yuuri la miro asombrado– ¿Cómo puedes…
PLASH r13;De pronto la puerta se abrió sin previo aviso dejando ver a una joven mujer.
─ ¡Bravo! r13;Ella aplaudía sarcásticamente– ¡Bravo! Al fin Lord Wolfram Von Bielefelt muestra sus verdaderas intenciones en la alianza.
─ Greta. r13;Susurro Wolfram al mira aquella que alguna vez llamo hija.
Greta de Zuratia ya no era la niña que solía correr por los pasillos de Pacto de Sangre, ahora era toda una joven de casi 19 años, su rostro mostraba la seriedad de una reina y el claro desprecio hacia el joven Consorte que tenía frente a sus ojos.
─ Reina de Zuratia. r13;Toma la palabra Patrick– Me asombra verla en esta reunión, que solo era para los miembros de la alianza. r13;Dice cortésmente.
─ Lord Patrick, deje a un lado sus formalidades y sea simplemente directo, usted y en especial… r13;Mira a Wolfram– Este no me quieren aquí. r13;Dijo con un claro desprecio hacia al rubio.
─ Con todo el respeto que se merece las palabras sobran en este momento señorita Greta. r13;Habla seriamente Saragueli– Nos haría un gran favor a todos los presentes al retirarse así como vino.
─ Me iré, pero no sin antes decirle algo a este. r13;Mirando a Wolfram– Este….
─ Consorte. r13;Termina Wolfram– Aunque le duela aceptar soy el Consorte de Shin Makoku, alteza.
Wolfram apretaba fuertemente sus puños intentando controlar sus sentimientos, en su interior aún no estaba preparado para este momento, tener a Greta frente a sus ojos tras largos nueve años no era nada fácil luego de todo lo que paso entre ellos.
─ ¿Consorte? Usted no es ningún consorte legal, lo único que hizo fue aprovecharse de la ausencia del rey para usurpar el puesto que ocupa. —Dijo con desprecio– Aseguro que si Yuuri estuviera aquí él…
─ Usted no tiene derecho a opinar en mi reino. —Wolfram la interrumpe– Que se cree que puede venir e interrumpir libremente una reunión y acusarme a mí de usurpador está muy equivocada. —Hablaba firmemente mientras mantenía sus manos hecha puño.
Yuuri estaba completamente shokeado al escuchar la voz llena de odio y rencor de parte de Greta, todas aquellas palabras mostraban un desprecio hacia su Consorte, palabras que en cierto modo podía notar como lastimaban a Wolfram.
─ ¿Cómo puede decir aquello? Luego que usted fue quien se aprovechó de la ausencia del rey para asumir un puesto que no le pertenece. —Hablaba llena de rabia.
─ Yo no me aproveche de na…
─ ¡MENTIRA! —Grito interrumpiendo a Wolfram y asombrando a todos los presentes– Cómo puedes seguir haciéndote en inocente de todo esto, Yuuri no está en el reino y aun así lo hiciste, te volviste su Consorte. —Respiraba agitada por la rabia contenida contra el rubio.
Wolfram tenía sus ojos muy abiertos al sentir todo el odio que le expresaba aquella que alguna vez llamo hija.
─ Greta. —Susurro dolido– ¿Por qué? —Se pregunta susurrando siendo el Yuuri el único que lo escuchara– ¡¿Por qué me odias?! —Grito su pregunta.
─ ¡Te odio! ¡Por aprovecharte de Yuuri! —Respondió con un fuerte grito– Te odio por unirlo a ti a la fuerza, Yuuri nunca te amo, nunca te amara y aun así conociendo esa verdad decidiste hacerte su Consorte. —Hablaba mientras miraba fijamente a Wolfram.
Su mirada iba dirigida a Wolfram con tal odio acumulado que observaba a las demás personas de la mesa incluyendo a Yuuri.
─ Yuuri. —Susurraba aguantando sus ganas de llorar ante cada una de las palabras expresada por Greta– Tú…
─ Greta-sama por favor. —Se levanta Patrick fastidiado por eso– Paremos esto.
─ ¡No! Lord Patrick, quiero que todos los presentes sepan qué clase de Consorte tienen como aliado, un ser despreciable que no merece el apoyo de ninguno de ustedes. —Movía sus manos señalando a todos.
─ ¡Yo no creo nada de esto! —Se levanta enojado Saragueli– Usted no puede juzgar los sentimientos de Yuuri hacia Wolfram, nadie sabe a ciencia cierta que sentía por él.
─ Se equivoca Lord Saragueli, Yuuri no lo amaba por eso se fue, si lo hubiera amado nunca se hubiera ido de nuestro lado. —Baja la mirada triste– Por su culpa perdí a mi padre, siempre siendo egoísta y caprichoso haciendo todo para satisfacer sus propios deseos nunca pensó en lo que lee rodeamos no es más que un….¡maldito egoísta! —Grito fuertemente callando a todos los presentes.
Todos bajaban la mirada al observar el semblante triste de Wolfram y su esfuerzo de no dejarse derrumbar frente a ella.
─ Mentira. —Una voz interrumpió el silencio poniendo de pie junto a Wolfram.
─ Yuuri. —Susurro Wolfram al escucharlo– Tú…
─ Gomen. —Lo tomo de la mano para luego mirar a Greta.
─ ¡Yuuri! —Greta abrió sus ojos asombrada por la presencia del Maou– ¡Estas aquí! —Hablaba llena de alegría.
─ Si para mi desgracia. —Dice molesto y triste a la vez– Nunca pensé encontrarme con todo esto.
─ Lo sé, él usurpo el lugar que tenía reservado para una buena mujer que sería tú reina. —Decía libremente sin tomar en cuenta los sentimientos de Wolfram.
Wolfram mordía su labio sin poder soportar todo aquello, suelta el agarre de Yuuri para alejarse.
─ ¿Wolf? —Yuuri lo mira preocupado.
─ No puedo más. —Susurro– Al final el único que importa aquí es él Maou, sé que contigo aquí Yuuri se puede llegar a un arreglo.
─ Wolf espera…
─ Wolfram no te vayas. —Patrick se levanta– Tú no puedes irte.
─ Lo siento, prosigan sin mí.
Ante la mirada asombrada y preocupada de los presentes Wolfram abandono la habitación, apenas cerró la puerta se dejó caer en la pared más cercana soltando todo su dolor representado en lágrimas.
─ ¡Wolfram! —Gwlendal corría hacia su hermano al notar como el menor iba descendiendo por la pared mientras lloraba– Wolf. ¿Qué paso? —Pregunta lleno de preocupación.
El rubio al notar la presencia de su hermano mayor se lanzó a sus brazos para poder llorar libremente, el mayor lo tomo entre sus brazos para llevarlo al despacho que era el más cercano en esos momentos, para consolar su dolor y averiguar quién oso a lastimar a su pequeño hermano.
Mientras tanto en la reunión todos los presentes se mantenían cabizbajos por la partida del Consorte, las miradas se posaban en el Maou con la duda e inseguridad hacia su persona.
─ Tomando en cuenta. —Greta rompe el silencio– Que Yuuri Heika es quien va tomar nuevamente el poder en Shin Makoku. —Sonríe feliz– Con mucho me uno a la alianza.
─ ¿Qué? —Yuuri abre sus ojos asombrado por el cambio de actitud de parte de Greta.
Todos los reyes estaban asombrado por el repentino cambio de parte de la líder del reino de Zuratia.
─ Alteza. —Se levanta el rey de Polonia– Sus cambio de ideas son muy repentinos. —Dirige su mirada a Greta– Señores. —Mira a los demás– Si Lord Wolfram abandona sus deberes reales como Consorte, en lo personal mi reino no seguirá dentro de la alianza.
─ Con todo el respeto que se merece Heika. —Patrick lo mira– Gran Shimaron tampoco lo hará, pero antes de tomar una decisión precipitada necesitamos saber, ¿Wolfram continuara siento su Consorte?
─ ¿Cómo? —Greta mira a Patrick– ¿Cómo puede pedir eso? Yuuri es el único rey aquí, no necesita a ese aprovechado.
─ ¡Greta cállate! —Yuuri la manda a callar de un grito dejando pasmada– Señores en ningún momento la idea de terminar con mi Consorte ha pasado por mi cabeza, les ruego que esperen, Wolfram volverá, creo que por el momento continuar con la reunión esta demás.
─ Yuuri tiene razón. —Habla Saragueli– Es mejor reunirnos con más calma el día de mañana.
Ante aquel pedido todos los reyes se levantaron para retirarse a sus aposentos, Yuuri fue el primero en salir seguido por Greta.
─ ¡Yuuri! —Grito corriendo a su lado– ¿Dónde vas?
─ Voy con Wolfram. —Responde fríamente– Tú y yo luego hablaremos, primero esta él.
─ Pero Yuuri, él…
─ Espero que en nuestra charla me aclares porque trataste de esa forma a Wolfram.
Sin decir más Yuuri se alejó de Greta para dirigirse al despacho donde de seguro encontraría a Wolfram.
En el despacho las cosas no eran nada lindas, Gwlendal estaba arrodillado junto a uno de los muebles donde su hermano permanecía recostado boca abajo mientras intentaba tranquilizarlo, bajo la atenta mirada de Adalbert y Gunter quien al ver pasar al mayor con el Consorte en brazos no dudaron en seguirlo.
─ Wolf tranquilo. —Palmeaba su espalda intentando controlar su dolor.
─ Shif….Shif… —Seguía llorando sin mostrar su rostro bañado en lágrimas.
Los mayores miraban al rubio, llenos de preocupación al sentir como el dolor del Consorte era tan grande, y sus lágrimas eran la clara muestra de ese dolor.
─ Wolf, por favor dinos ¿Qué paso? —Pide Adalbert una explicación.
─ Yo… —El consorte gira su cabeza dejando ver su rostro bañado en lágrimas.
─ Oh Alteza ¿Quién osó en lastimarlo? —Preguntó lleno de preocupación Gunter.
─ Ella… —Susurro el rubio levemente– Ella volvió…. —Decía mientras sus lágrimas inundaban su rostro.
─ ¿Ella? ¿Cuál ella? —Esta vez pregunto su hermano mayor.
─ Gre…Greta…volvió…
Aquella simple frase fue capaz de shokear a los presentes, todos ellos sabían perfectamente que la presencia que aquella niña que alguna vez fue su hija causaban un gran dolor en el corazón del Consorte, un dolor que a pesar de los años no fue capaz de olvidarse, ya que la herida había sido hecho nada más y nada menos que por su propia hija.
─ ¿Cómo es posible? —Dijo asombrado Gwlendal mientras abrazaba a su hermano quien se había lanzado a sus brazos a llorar nuevamente– ¿Cómo entro?
─ Es imposible. —Esta vez intervino Gunter– Yozak no me dijo nada sobre la llegada de ella, además el último rey en llegar fue el Lord William, él mismo que Yozak escolto personalmente.
─ Llego luego. —Susurro Adalbert– Es la única forma que pudiera entrar, ella llego luego que Yozak regresa al palacio.
─ No importa como entro. —Habla Gwlendal muy serio– Lo único que interesa es saber que te dijo Wolfram. —Miro de reojo al joven Consorte que tenía a su lado.
─ Me ataco. —Baja la mirada recordando lo antes dicho– Con sus palabras. —Suspira profundamente para volver a tomar la palabra– Hablo llena de odio contra mí.
─ ¡¿Cómo puede hacer eso?! —Dice enojado su hermano– Tantos años cuidándola y ahora te trata de esa forma.
─ No importa. —Susurra el rubio– Lo importante que ahora sin mí en la alianza todos los reinos pueden unirse sin problema alguno.
─ Usted no puede decir eso la alianza lo necesita. —Se expresa preocupado Gunter.
─ No Gunter, yo solo interfiero en los planes de la Alianza.
─ Eso es mentira…
Una quinta persona hace que los mayores dirijan su mirada a la entrada del despacho encontrándose con el Maou que miraba a su Consorte lleno de angustia.
─ Yuuri. —Susurro Wolf al verlo.
─ ¿Cómo puedes decir aquello? —Se acerca a Wolfram arrodillándose frente a él.
─ Es la verdad. —Baja la mirada– Contigo aquí mi presencia no es necesaria.
─ Eso no cierto. —Alza la mirada del Consorte dirigiendo sus ojos directamente a sus orbes verdes que estaban empañadas de lágrimas– En este momento sin ti la Alianza acaba de tener muchas bajas todos quieren renunciar. —Sonríe levemente– Al final no soy más que un enclenque no es capaz de mantener la paz entre sus naciones amigas.
─ Yuuri…
─ Wolf. —Toma sus manos– Me preguntaron sobre mi decisión de abandonar a mi Consorte y yo supe responder que no tengo la mínima intención en dejarte.
─ Tú…
─ Si, serás por siempre mi amado Consorte. —Besa una de sus mejillas– Y eso será por mucho tiempo ¿Entendiste?
─ Hai. —Lo abraza llorando nuevamente.
─ No llores mi Wolf, nadie en este mundo merece tus lágrimas. —Corresponde su abrazo– Ni siquiera ella. —Susurro lo último pero lo suficiente audible para el rubio.
─ ¿Ella? —Se separa recordando a su ex hija– Ella me odia. —Dijo mirando a los ojos de Maou– Me odia desde que me convertí en tu Consorte. —Baja la mirada.
─ ¿Por qué? ¿Acaso ella no estuvo contigo cuando te coronaron? —Pregunta el moreno lleno de dudas.
─ No Majestad. —Esta vez tomo la palabra Gwlendal– Ella se marchó antes de ello.
─ ¿Se marchó? —Yuuri dirige su mirada al mayor en busca de alguna explicación.
─ Tal como escuchaste Yuuri. —Wolfram retoma la conversación– Ni a la semana de tú partida todos aquellos que quise mucho me dejaron.
─ ¿Qué? —Yuuri escuchaba sorprendido aquello.
¿Quiénes él quiso?
Aseguraba que una de esas personas era Greta, ¿Cuáles eran las otras?
─ En todo ese tiempo antes de la coronación solo mi Aniwe me acompaño. —Relataba mientras recordaban aquellos meses de soledad.
─ Me disculpo. —Inclina su cabeza avergonzado– Heika su servidor también abandono a su Majestad.
─ Gunter no te preocupes. —Sonríe levemente Wolfram mirando a su consejero– Tú volviste a mí y supiste enmendar tus errores.
─ Wolfram tiene razón. —Habla Yuuri– Les agradezco que cuidaran a Wolfram.
─ No tiene que agradecer Heika, estoy aquí para proteger a Wolf y su hijo.
─ Gracias Adalbert. —Yuuri mira al mayor con una sonrisa– Wolf. —Dirige su mirada nuevamente a su Consorte– Conrad y Cheri-sama, ellos….
PAV!! —La puerta se abrió abruptamente.
─ ¿Cheri-sama? —Yuuri la miro asombrado por su modo de entrar.
─ ¡TÚ! —Apuntaba enojada a Wolfram.
─ ¿Madre que te pasa? —Gwlendal se acerca a su progenitora para evitar que diga alguna cosa que solo lastime más al rubio.
─ ¡¿Cómo puedes seguir haciendo más daño?! —Se acerca donde Wolf quien solo la miraba sin entender lo que hablaba.
─ ¿Qué? —Se preguntó Wolf totalmente perdido de la situación.
─ Cheri-sama disculpe. —Se acerca Adalbert– En este momento Wolfram no puede atenderla.
─ ¡Me niego! No me voy de aquí mientras no hablemos. —Gritaba histérica.
─ ¿Qué te pasa? ¿Por qué gritas? —Pregunta cansado Wolfram.
─ ¿Hasta cuándo? ¿Seguirás con ese odio contra nosotros? Te he pedido perdón tantas veces por lo que hice y aun así se vengas con ¡Él! —Vuelve a gritar enojada– ¡T exijo que lo liberes!
─ ¿Liberes? —Yuuri miro sin entender a Wolfram.
─ Por él. —Susurro Wolf desanimado– Todos tus gritos son solo por él.
─ ¿Qué esperabas? Que me quede sin decir anda mientras mi hijo se hunde en la cárcel injustamente. —Responde llena de enojo.
─ ¿Tú hijo? —La mira Gwlendal– Te recuerdo que Wolfram y yo también somos tus hijos.
─ No lo parece. —Mira a Wolfram– Te exijo que lo liberes, ¡Te exijo que liberes a Conrad!
─ ¿Conrad?
Los ojos de Yuuri se abrieron asombrados al saber que su padrino estaba en la cárcel pero una pregunta acompañaba su duda ¿Por qué estaba en prisión?
─ No. —Respondió secamente Wolfram– Una ofensa contra mí el castigo es la cárcel.
─ ¿Ofensa? No me hagas reír, Conrad nunca te ha ofendido. —Habla con burla en sus palabras– Él solo dice la verdad.
─ ¿Qué? —Wolf la mira directamente– ¿Qué quieres decir con eso?
─ Que mi hijo te trata como eres un embus….
─ ¡Suficiente madre! —El mayor de sus hijos la calla.
─ No aniwe déjala que siga, al final de cuentas para ella y su hijo solo soy un embustero, una puta. —Baja su mirada al borde de lágrimas.
─ ¡Correcto! Como no aceptas que te digan la verdad atacas a personas inocentes. —Lo miraba con desprecio.
El asombro de Yuuri aumentaba a cada momento no entendía como era posible que una madre trate de esa forma a su hijo, alguna vez había escuchado que ella nunca amo al padre de Wolfram como lo hizo con el padre de Conrad, y ese amor se veía reflejado en su preferencia por Conrad sobre él su hijo menor. Poso su mirada llena de decepción contra la madre de su Consorte y también por su padrino.
─ Adalbert. —Hablo Yuuri– Saca a Cheri-sama de aquí por favor. —Se arrodillo junto a su Consorte– No quiero que siga lastimando a Wolf.
─ ¡Heika como puede! ¡Él no es digno de su amor! —Gritaba mientras iba siendo sacada a la fuerza– ¡Suéltenme! ¡Noo liberen a mi hijo!!!
Los gritos de la ex Maou retumbaban por todo el castillo atormentando a cada momento a Wolfram.
─ ¡Basta! —Grita Wolfram desesperado mientras tapa sus oídos y llora– No más…no quiero sufrir….basta.
─ ¡Wolf! —Yuuri se arrodilla abrazarlo e intentar consolarlo– Por favor cálmate.
─ ¡Noo! —Lloraba desesperado en brazos del Maou– No más…
─ ¡Wolf! —Yuuri grito asustado al sentir el peso muerto de su prometido en sus brazos.
Wolfram se había desmayado, en la mente y corazón de Yuuri crecía la decepción y molestia por aquellos que habían causado tanto dolor al corazón de su amado Consorte.