CAPITULO XVI
EL ARREPENTIMIENTO
El perdón es el camino a la paz del alma.
En el camino de la vida siempre nos encontramos con personas que son capaces de lastimarnos sin importarle el daño que llegan a causar, y con el tiempo esas mismas personas se arrepienten de sus actos e intentan arreglar todo con un simple “Lo siento”, pero nuestro corazón que se encuentra tan herido no es capaz de llegar a perdonar verdaderamente.
Ya que perdonar es de corazón no de palabras.
Wolfram tenía frente a sus ojos a las personas que más lo habían lastimado en todos estos años, primero Greta a la que alguna vez amo con la misma intensidad que amaba a su hijo, y luego a su hermano Conrad, Coni-chan a quien tras todos sus problemas en el pasado siempre lo quiso.
El rencor y el repudio los golpes más profundos que recibió su corazón en manos de aquellas dos persona, ahora las palabras de su hijo retumbaban en su cabeza.
Ellos lo habían salvado, habían salvado a su amado bebé.
─ Yo…
No tenía palabras, no sabía qué hacer, como reaccionar ante ellos, su mirada se bajó sin cómo actuar correctamente.
─ ¿Oto-chan? —Su hijo lo quedo mirando– Vamo. —Lo toma de la mano llevando frente a ellos.
Greta lo observaba con una sonrisa y de la misma forma Conrad, para Wolfram ellos se veían diferente a como solían ser, sus miradas no reflejaban el mismo odio de siempre.
─ Yuuri, Wolfram sean bienvenido a Zuratia. —Saludo cortésmente Greta al tenerlos frente a ella– Es un honor tenerlos aquí.
─ Gracias Greta. —Yuuri respondió el saludo– ¿Wolf? —Sintió la mano de su Consorte sujetándola con fuerza– Wolfram.
─ Yo…
─ ¡Wolf-chan!
Un repentino grito hizo voltear a todos al observar que en una carrosa bajaban un castaño acompañado de un rubio pelilargo.
─ ¿Patrick? ¿Sara? —Susurró Wolfram asombrado al ver a sus amigos– ¿Qué hacen aquí?
─ ¡Oh mi Wolf! —Patrick aprovecha que Yuuki está en brazos de Yuuri para correr abrazarlo– ¡Estuve tan preocupado por ti!
─ Patrick. —Susurró nostálgico Wolf correspondiendo el abrazo de su amigo.
─ Está bien Patrick, como vez Yuuki está muy bien en brazos de Yuuri, ahora si deja a Wolfram. —Habla Saragueli muy serio por la cercanía de ellos.
─ Sara-chan no te pongas celoso. —Ahora abraza al rey de Shimaron menor.
─ Quien dijo que estoy celoso. —Se cruza de brazo mirando de lado.
Para los Mazoku era muy normal la reacción del rubio ya que se conocía oficialmente que los reyes de Shimaron mantenían una relación ya desde hace un mes, lo que dejo visible la personalidad posesiva de Saragueli.
─ Sara-chan no te enojes. —Patrick lo abraza– Solo estaba preocupado por Wolfram.
Todos los volvían a mirar con una gota de sudor la actitud empalagosa del Rey de Shimaron Mayor, solo una pequeña risa de parte de Wolfram los hizo poner serios.
─ Perdón. —Se disculpa intentando ocultar su risa.
─ Wolf no te rías. —Dice serio Saragueli– Patrick por favor a lo que venimos.
─ ¿Ah? Es cierto, ¿Qué hacen aquí? —Pregunta nuevamente el Consorte.
─ Yo les pedí que vinieran. —Todos voltearon en dirección a Greta– La Alianza debe juzgar a los que secuestraron a Yuuki-chan.
La seriedad de Greta hacia verla como la verdadera Reina que era, Wolfram la observaba detalladamente notando que hace mucho había dejado de ser la niña que alguna vez consentía, con respecto a lo dicho Greta tenía razón de llamar a la alianza para que determinen el castigo pertinente a Mao y sus secuaces, para desgracia de Yuuri no podía cumplir su promesa que castigar a los que habían hecho sufrir a su Consorte y le tocaba dejar que otro lo hagan.
─ ¿Si puede intervenir aquí la alianza? —Pregunto seriamente Gwlendal– Recordemos que Zuratia no pertenece a la alianza.
─ Si puede, ya que este reino se encuentra dentro de un periodo de prueba en su lealtad y el entregar a los criminales es un punto a favor. —Indicó Patrick.
─ Eso quiere decir que no puedo encargarme de esos tipos. —Dice con fastidio Yuuri.
─ Me temo que no Yuuri. —Interviene con una sonrisa Saragueli– Greta por favor guíenos donde esos criminales.
─ Claro síganme, viene Conrad. —Mira al castaño quien asiente para seguirla.
─ ¿Yuuri y Wolfram también vienen con nosotros? —Pregunta Saragueli.
─ Que vaya solo Yuuri. —Carga a su hijo nuevamente– Yo me quedo con Yuu-chan. —Responde abrazándolo– Aniwe, Adalbert y Gunter fuera bueno que acompañen a Yuuri, él no conoce sobre términos que tiene la alianza con Shin Makoku.
─ Hai. —Los tres hombres le acompañaron.
Los hombres se dirigían a la prisión donde estaban los secuestradores, mientras Wolfram, Cherry, Anissima y Yuuki se dirigieron al jardín para jugar un poco con el menor, quien su padre se negaba a dejarlo por un solo momento.
─ Oto-chan tedo juga. —El menor dirige la mirada al rubio quien no quería soltarlo.
─ Honey-chan déjalo que juegue. —Dice su madre entendiendo lo que pensaba en esos momento– Anissima y yo estaremos pendientes de él.
─ Está bien. —Dejo libre a su hijo de sus brazos.
─ Gacia. —Le dio un beso en la mejilla antes de salir corriendo.
Para un padre ver correr a su hijo libremente siempre es motivo de alegría pero para Wolfram ahora se adueñaba en su corazón un sentimiento de miedo e impotencia, temiendo que nuevamente puedan alejarlo de su lado, Wolf inmerso en sus propios pensamiento no había notado que era observado por una joven castaña quien se acercó y tomo asiento a su lado tomando una de sus manos y regresándolo a la realidad.
─ ¿Greta? —Se sobresaltó al sentir su mano– Yo…
─ No digas nada Wolfram. —Sonríe levemente– Es normal que no sepas que decir ante una de las personas que más te ha lastimado durante estos nueve años. —Baja la mirada observando las manos que tenía entrelazadas al Consorte– Lo siento. —Lo mira directamente– Siento tanto lo que he hecho, sé que eso no basta, sé que mis palabras no tienen efecto para borrar el pasado y quitar todo lo malo que hice por durante este tiempo, fui tan tonta que creí en todas las palabras llena de mentiras que Mao me decía, me puso en tú contra y yo… —Vuelve a mirarlo con los ojos cristalizado– Le creí.
─ Greta…
─ Por favor te ruego que me dejes terminar, luego puedes decirme todo lo que quieras, he pensado tanto que decir desde que Yuuki está aquí, que por más que pensaba sabía que las palabras nunca bastarían. —Ríe levemente– Luego que hice lo que hice hace años una parte de mí siempre se recrimino por lo que hice que no estuvo bien, que algo no cuadraba, hasta que Yuuri volvió él…
─ Por él cambiaste. —Intervino Wolfram soltando su mano.
─ ¡No! —Cruzo mirandas con Wolfram– Yo…él…sí, él me hizo ver en el error que estaba, por primera vez desde que lo conozco me llamo la atención fuertemente, haciéndome ver lo tonta e ingenua que fui, en especial lo injusta que he sido contigo todo este tiempo. —Cerró sus ojos con frustración– Luego que deje Pacto de Sangre busque al que inicio todo, él me demostró que siempre fui utilizada a su antojo, sé que esas escusas no valen para borrar todo el daño que hice. —Cabizbaja.
─ ¿P-Porque salvaste a Yuuki? —Pregunta aun analizando todo– ¿Fue por Yuuri? —Lo mira directamente– Se nota que solo él es capaz de hacerte cambiar.
─ No Wolfram, no lo hice por Yuuri. —Toma nuevamente su mano– Lo hice por ti, en estos meses que me arrepentí reflexione mucho, lo que menos quería es que volvieras a sufrir y si en mis manos podía evitarlo haría lo posible por lograrlo. —Lo mira con una sonrisa– Logre dar con Yuuki gracias a Conrad, fue quien descubrió sin querer del secuestro que había hecho Mao y los planes que tenía contra Yuuki.
─ ¿Conrad? ¿Planes? ¿Qué planes? —Pregunta preocupado.
─ Quería venganza, contra mí, contra Yuuri y en especial contra ti, ya que según él ustedes le quitaron el control que tenía sobre mí y la mejor forma que vengarse contra mí. —Aprieta la mano que tenía sostenida– Es lastimándolos a ustedes y la mejor forma de herirlos a ustedes era…la vida de Yuuki.
─ ¿Qué? —Wolfram abrió sus ojos asustado– Mi niño…no —Busca desesperadamente a Yuuki con la mirada encontrándolo jugando junto a su abuela– Greta lo salvaste. —Vuelve a mirarla.
─ En parte si, aunque quien se lleva el crédito es Conrad. —Mira hacia un lado donde estaba Conrad parado observándolos a pocos metros de ellos.
─ Conrad…
La mirada de ambos hermanos se cruzaron esta vez Conrad avanzo donde ellos, esta era la oportunidad de buscar el perdón de su pequeño hermano.
─ Sé que es imprudente interrumpir una conversación ajena pero. —Sonríe para su hermano como no lo había hecho en mucho tiempo– Me gustaría hablar contigo Wolfram. —Se arrodilla frente a él-
─ Yo… —No sabía cómo reaccionar ante los dos.
─ Te repudie, te odie, te lastime y te ofendido por durante nueve años. —Aprieta sus manos– Soy el peor hermano del mundo, me desquite contigo al no tener a mi lado a Ju…digo Yuuri.
─ ¿Qué quieres decir con tener? —Pregunta sin entender Wolfram.
─ Me obsesione con la memoria de Julia, siempre la ame pero ella no me correspondió, al volver como Yuuri creí que podía tener una oportunidad para amarla pero. —Baja su mirada arrepentido– Julia no era para mí en esta vida tampoco.
─ No es Julia es Yuuri. —Dijo Wolfram seriamente– Yo amo a Yuuri no a Julia.
─ Lo sé, eso me lo dejo muy claramente Yuuri antes de expulsarme de Pacto de Sangre. —Baja nuevamente la mirada– Que yo solo me había obsesionado con él y durante años lo único que hice fue culparte de supuestamente ver usurpado mi lugar a su lado.
─ Yo…
─ Él se enojó conmigo por mi forma de pensar y me di cuenta de mi error. —Toma la mano de su hermano– Te lastime y lo hice mucho tiempo, sé que lo que hice no tiene perdón, por eso deje Pacto de Sangre para reflexionar sobre mis actos e ir frente a ti cuando realmente me haya arrepentido de corazón. —Mira directamente a su hermano– Cuando supe que el niño secuestrado era Yuuki no dude en buscarlo, protegerlo y salvar su vida, solo para evitarte más dolores, la vida fue injusta contigo…No, corrijo nosotros fuimos injustos contigo y eso es algo que nunca lo voy olvidar.
─ Se que falle como hija contigo Wolfram. —Esta vez Greta toma la palabra– Sé que aprovechar que al fin hice algo bien es un abuso, pero de corazón pido disculpas por todo lo hice y dije en estos años, que tú corazón sea capaz de algún día perdonarme.
─ Wolfram sé que mis palabras no pueden borrar el pasado, te pido que me des una sola oportunidad para demostrarte que he cambiado, de poder enmendar mis errores, de ganarme nuevamente tú confianza y algún día tu perdón.
Cuando el dolor de algo pasado no nos deja vivir en paz, es mejor olvidar y seguir adelante por simple instinto de conservación
Anónimo .
Durante años Wolfram había preferido olvidar aquellas personas que lo habían lastimado y de esa forma seguir una vida tranquila junto a su hijo, Greta luego de aquella discusión había desaparecido de su vida, en su mente se había planteado olvidarla para estar en paz, con Conrad era diferente seguía en Pacto de Sangre cada vez que podía lo atacaba por más que lo ignoraba él seguía ahí, que hizo ignorarlo y dejar de tomarle importancia, cada acto solo se dio para mantenerse en paz y no dejarse vencer por el dolor que ellos provocaban a su pobre corazón.
Perdonar.
En su corazón sabía que perdonar era algo muy profundo que no bastaba un “lo siento” era algo que iba mucho más allá, algo que capaz de borrar las heridas del pasado dejando ver las alegrías del futuro, él sabía que ahora no estaba preparado para perdonarlos, pero lo que su corazón si sentía era gratitud, gratitud al ver salvado a su hijo y la clara muestra que ellos si merecían la oportunidad de algún momento ganarse su perdón.
─ Lo siento. —Soltó su mano y se levantó dejando a ambos sin habla– No puedo perdonarlos, sería una mentira para mí mismo decir que los perdono. —Bajo su mirada aun dando la espalda a los dos– Por más que estén arrepentidos no estoy listo para perdonarlos, comprendan que mi corazón alberga mucho dolor y es difícil olvidar cada palabra, cada acto que cometieron contra mí estos años. —Se escuchó un leve sollozo de parte del Consorte– Lo siento no puedo.
─ No te culpo. —Intervino Conrad con sus ojos cristalizados– Es normal que no nos perdones.
─ Conrad tiene razón, te herimos y eso es algo que vamos a cargar toda la vida. —Hablaba Greta llorando– Lo me cansare de luchar para conseguir algún día tú perdón.
─ Pero. —Wolfram se gira mirándolo aun con su rostro bañando en lágrimas y con una pequeña sonrisa– Estoy inmensamente agradecido con ustedes, gracias, gracias por ver salvado la vida de mi bebé, no saben lo mucho que sufrí temiendo por su vida, el hecho de pensar que podía perderlo para siempre, Conrad, Greta gracias. —Decía entre lágrimas– Gracias, Gracias.
─ Wolfram. —Greta se acercó abrazarlo como en año no lo había hecho– No tiene que agradecerme nada.
─ Lo que hicimos fue porque nuestro corazón se cansó de herirte ahora quiso devolverte una alegría. —Conrad se une al abrazo.
─ Lo hicieron. —Se aleja un poco del abrazo– Mi pequeño sol está conmigo gracias a ustedes, solo por eso. —Los mira fijamente– Me doy cuenta que de verdad quieren cambiar y les dejare que lo muestren.
─ Gracias Wolfram te prometo que esta vez no te vas arrepentir. —Greta dice muy feliz.
─ Conrad me gustaría que vuelvas a conmigo a Pacto de Sangre, necesitamos a un soldado como tú. —Sonríe levemente Wolfram
─ Mi lealtad está contigo. —Se inclina– Estaría feliz de volver junto a ti a Pacto de Sangre y servir con lealtad a la pareja real.
─ Hai. —Sonríe aun con pequeñas lágrimas.
─ ¡Oto-chan! —Yuuki llega a la piernas de Wolfram quien se arrodilla a su altura– ¿Poque lloda? —Limpia sus lágrimas.
─ De felicidad. —Lo abraza– De una inmensa felicidad de tenerte nuevamente a mi lado mi bebé.
─ Oto-chan, no soy bebé. —Reclama el menor con un puchero soltándose de los brazos de su papá– Yo soy gande. —Indica con sus brazos hacia arriba.
La risa de los presentes invadió el jardín como una clara muestra que el futuro que les esperaba era uno lleno de alegrías y dicha, para el Consorte y su familia.
─ Que hermosa se ve mi familia. —La voz del Maou se escuchó desde uno de los escalones.
─ Yuuri. —Wolfram se acercó abrazarlo– ¿No estabas en el interrogatorio?
─ Me sacaron. —Gira sus ojos con molestia– Antes que mate a ese tipo con mis propias manos.
─ ¡Yuuri! —Exclama sorprendido Wolfram.
─ No pude evitarlo, te lastimo y eso nunca se lo voy a perdonar. —Dice seriamente emanando un aura azul.
─ Yuuri. —Wolf posa su mano en la mejilla del Maou– Sé que quieres hacer justicia pero esta vez deja que sea la Alianza que lo haga.
─ Mi Wolfram. —Besa con delicadeza la mano del Consorte.
Al notar como el amor que rodeaba a la pareja, Greta y los demás presentes se fueron alejando llevando consigo al pequeño Príncipe con tal de no interrumpirlos, Yuuri luego de besar la mano de su Consorte se acercó a sus labios a besarlos con dulzura y abrazarlo fuertemente.
─ Me alegra tanto verte sonreír.
─ A mí también. —Se aleja un poco de los brazos del Maou.
─ ¿Qué pasa? —Pregunta al notar la mirada seria del rubio.
─ Cuenta ¿Qué hiciste? Para que te echaran del interrogatorio.
Ante una mirada muy seria Yuuri era interrogado por su Consorte sudó frío ya que se imaginaba que al conversarle este se enojaría.
─ Estoy esperando enclenque. —Cruzado los brazos.
─ Pues…luego de nos fuimos nos llevaron a la torre donde estaba y…
─ Con lujos de detalles por favor. —Pide con una linda pero amenazadora sonrisa.
─ S-Si…
(Pov’s Yuuri)
Mi corazón saltaba de regocijo al observar la felicidad que emanaba Wolfram al tener nuevamente entre sus brazos a nuestro pequeño Yuuki, aún se me hace difícil creer que esta alegría se la debemos a Conrad y Greta, se nota que ellos han cambiado y ahora son muy diferentes a cuando regrese a Pacto de Sangre, para mi sorpresa los reyes de Shimaron habían llegado, Patrick y Sara, pero más grande fue mi sorpresa al saber el porqué.
La Alianza se iba encargar de condenar y castigar a los secuestradores de mi hijo, al enterarme de ello algo en mi interior grito frustrado por no poder tomar justicia con mis propias manos.
Wolfram había indicado que Adalbert, Gwlendal y Gunter me acompañen a la celda, todos seguíamos a Conrad quien era el que nos guiaba a la torre más alto del palacio de Zuratia, al llegar Patrick y Sara toman la palabra como miembros de la alianza
─ Me vas a disculpar. —Patrick mira directamente a Conrad– Pero hasta aquí nos acompañas, solo miembros de la alianza pueden pasar al interrogatorio.
─ Entiendo Alteza. —Se inclina levemente– Me retiro tengo al muy importante que hacer.
¿Importante?
Me pregunto si aquello importante tiene que ver con Wolfram, de corazón me gustaría que Greta y Conrad puedan solucionar sus diferencias con él, ya que no me gusta ver sufrir a mi Wolf.
─ Suerte Conrad —Le susurre cuando paso junto a mí.
─ Gracias Heika. —También susurró.
Reí levemente sin dejar de mirar donde se había ido, sin importar el tiempo que ha pasado aun me llama Heika y no Yuuri.
─ Pasemos Yuuri. —La voz de Sara me trajo a la realidad.
─ Hai.
Aquellos pasillos solo iluminados por escasas antorchas, fríos y a la vez tétricos, eran la clara muestra de los miserables destinos que esperaba aquellos que cometían delitos en Zuratias, nos encaminamos hasta la habitación del fondo la que según la información de Conrad estaban los tres secuestradores.
Al abrir la puerta al primero que observe fue al señor Mauritsu, un hombre que por años fue la mano derecha de las dos últimas reinas de Zuratia ahora estaba atado peor que un animal, sus manos colgaban de unas cadenas aferradas al techo, al igual que sus pies atados con cadenas muy gruesas.
─ ¡Que honor el mío! —Empezó hablar el anciano con una voz llena de burla– Si la cúpula principal de la Alianza, el rey Patrick de Shimaron Mayor, el rey Sarageli de Shimaron menor. —Dirige su mirada hacia mí– Oh, el rey de los demonios, el Maou Yuuri de Shin Makoku. ¿Qué los trae a tan asquerosas instalaciones?
La risa de aquel individuo invadió la celda, en mi interior sentía hervir mi sangre al tener frente a mis ojos al tipo que hizo que mi Wolfram sufriera, lloraba por esta larga semana.
─ Nuestra presencia aquí es como representante de la Alianza humana-mazoku. —Patrick tomo la palabra– Para interrogarlo sobre el secuestro del menor Yuuki Von Bielefeld hijo de los reyes de Shin Makoku.
─ Bien por ustedes pero, no tienen jurisdicción dentro de Zuratia…
─ Se equivoca. —Sara lo mira directamente– La reina Greta hace dos meses solicito que se permita a Zuratia formar parte de la Alianza, como voto de apoyo y lealtad ha dejado que seamos nosotros quienes tomemos cartas en este asunto. —Termino con una sonrisa enmarcando su rostro.
Patrick y Sara conocían tanto de los tratados de la Alianza que fácilmente lo habían dejado sin palabras, solo espero que consigan una buena pena para estos tipos.
─ ¡Que lastima Maou! —Dijo de repente riendo ese tipo– Que no puedas hacer justicia como te gusta siempre hacer.
─ ¿Qué? —Abrí mis ojos ante sus palabras– Yo… JUSTICIAAAA…—De pronto sentí como mi interior grito– MATA AL QUE HIZO LLORAR A WOLFRAM.
El Maou gritaba desde lo más profundo de mi ser reclamando justicia, no podía negar yo también quería acabar con la vida de ese maldito.
─ El Maou quedo sin palabras, se nota que no es más que un cobarde con un hijo llorón…oh perdón ni siquiera es tu hijo, es solo hijo de la zo…..
─ CALLATE!!! —El Maou salió a flote juntando el odio de los dos– Tú quien osaste a secuestrar a un niño indefenso solo para satisfacer sus ambiciones.
─ Yuuri Heika cálmese. —Escuchaba como mis colegas intentaban calmarme pero era imposible.
─ NO GWLENDAL! Tú mejor que nadie viste como Wolfram sufrió durante esta semana este tipo lo que merece es morir. —Mi energía se iba juntando en un ataque.
─ Basta!! —Patrick se puso enfrente mío– Por el nombre de la Alianza humano-mazoku, le ordeno a usted Rey Yuuri que se detenga.
─ NO! No pienso detenerme. —Dije muy enojado.
─ Yuuri. —Esta vez Sara está enfrente mío– Si no te detienes y haces justicia con tus manos harás que los demás reinos piensen que no te importa el tratado que tú Consorte firmo, por favor piensa en todo el esfuerzo que ha hecho Wolfram durante estos años.
Wolfram.
En mi interior el Maou y yo nos encontramos frente a frente.
─ Por Wolfram/Por Wolfram. —Repetimos iguales al abrir mis ojos estaba frente a los dos reyes– Perdón. —Gire mi rostro.
Estaba furioso, mi ira estaba contenida desde el momento que Yuuki fue secuestrado y lo que quería era mi propia justicia nada más.
─ Es mejor que se retire Yuuri. —Me dijo Patrick mientras me daba la espalda– Que Gwlendal y Gunter observen el interrogatorio, Adalbert te pediré que esperes en la puerta para que Yuuri no pueda entrar.
─ ¿Qué? ¡No pueden hacerme esto! Estamos hablando de mi hijo, este tipo secuestro a mi hijo. —Dije frustrado por la decisión.
─ Es lo mejor Yuuri, cuando un grupo de la alianza interroga no puede ver sentimientos mezclados. —Explica Sara– No te preocupes, recuerda que nosotros también conocemos a Yuuki y en especial a Wolfram. —Mira a Mao– Haremos que su castigo sea el más fuerte.
Lo había olvidado por un momento que tanto Sara como Patrick conocía a Wolfram y Yuuki, ellos eran los adecuados para impartir la justicia que tanto el Maou como yo queríamos.
─ Está bien. —Me giro rumbo a la salida– Dejo este asunto en sus manos.
Aun frustrado y decepcionado de no poder cumplir mi prometido salgo acompañado de Adalbert.
─ No se decepcione Heika. —Habló Adalbert una vez afuera– Ellos no dejaran pasar todo el sufrimiento de Wolfram. —Sonríe mientras de reojo miraba por la ventana– Porque mejor no va con su familia de seguro estará feliz de verle.
Adalbert tenía razón mi familia estaba primero.
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Wolfram observaba a Yuuri con una gran sorpresa al escuchar el pequeño relato.
─ ¿L-Lo ibas a matar? —Pregunta entre asombrado y asustado.
─ Si, esa fue la promesa que me hice a mí mismo cuando secuestraron a Yuuki, pero no la cumplí. —Sonríe Yuuri.
─ No importa Yuuri, lo importante es que Yuuki está con nosotros sano y salvo. —Mira con dulzura a su hijo jugar– Pero eso no te quita lo enclenque.
─ ¡Wolf! —Yuuri con un puchero– Lo hice por ti.
─ Pero pusiste el riesgo la alianza. —Lo mira seriamente– No te puedo negar que en mi interior también clama por venganza pero no la podemos hacer.
─ Tienes razón no puedo dejar que tus esfuerzo sean en vano, lo importante ahora. —Sonríe abrazando por la espalda a Wolfram– Es que tú estas feliz.
─ Yuuri. —Besa sus labios ante la cercanía– No olvides mi recompensa.
─ Jajaja
La risa del Maou se escuchó en aquel jardín acompañada con la de su Consorte, aunque la justicia no se dio por sus propias manos debía agradecer a Shinou que su hijo estaba sano y salvo.
Gracias Shinou
…….
En el templo Shinou.
─ Hasta que alguien me agradece. —Exclama el primer rey con gran sonrisa llena de orgullo.
─ Exagerado. —Dice aburrido el gran sabio.