KyuHyun ni siquiera terminó de vestirse fue directamente al baño y se metió bajó el agua caliente de la ducha. La noche sí que había dado un giro de 180 grados. Suspiró nuevamente y cerró los ojos dejando que el agua caliente le ayudara a relajar sus músculos. De repente se le vino a la mente la mirada de lujuria que le había dado el mayor, su sonrisa socarrona y sus besos. Abrió los ojos y se dio una palmada en la cara.
-Basta KyuHyun...no puedes estar pensando en ese idiota.
Se bañó lo más rápido que pudo teniendo cuidado porque le dolía el trasero. Maldijo a YeSung unas cien veces mientras se vestía, y una vez se hubiera secado el cabello se metió a la cama. Apenas tocó la almohada Cho se quedó profundamente dormido.
Después de haberse dado una ducha rápida, se encontraba recostado sobre su cama únicamente con unos calzoncillos cubriéndole, uno de sus brazos cubriendo su rostro.
-Soy idiota-dijo sonriendo- un gran idiota-susurró dejándose llevar por el sueño que lentamente comenzó a llenarle.
Sus ojos se abrieron con lentitud siendo rápidamente cegado por la luz que se escabullía por las cortinas, se estiró sintiendo un ligero dolor en la espalda a causa de los rasguños de la noche anterior.
-Hagamos como si nada, total solo fue un acostón-dijo levantándose de la cama, se estiró con tranquilidad mientras entraba en el baño.
Cho se despertó a la una de la tarde, le dolía la cabeza, la espalda baja y el trasero. Se sentía desorientado, había dormido tan bien que no recordaba que había pasado la noche anterior. Bostezó, se quitó las cobijas y trató de pararse pero sintió una punzada de dolor en su espalda baja haciendo que cayera de vuelta a la cama.
-¿Qué rayos?- se rascó la cabeza y por arte de magia las imágenes de los eventos de la noche anterior aparecieron en su mente -¿Entonces no lo soñé?- frustrado KyuHyun hundió la cara en la almohada antes de alcanzar su celular. Le mandó un mensaje a uno de sus compañeros de Sanguine Rose para que le pasaran el número de YeSung. Después de un rato le vibró su teléfono indicando que tenía un mensaje.
Agradeció a su amigo antes de mandarle un mensaje al mayor.
Tengo hambre y no puedo moverme por tu culpa. Así que te estaré esperando en mi cama para que me traigas algo de comer. -KyuHyun
Cuando su celular vibró dentro de sus pantalones se sorprendió al ver un número desconocido, abrió el mensaje y no pudo evitar reír atrayendo la atención del que a partir de ese día seria su manager.
-¿Pasa algo JongWoon?-preguntó el hombre.
-Nada, Kyu me acaba de mandar un mensaje-mencionó como si nada volviendo a guardar el aparato.
-¿Ya se siente mejor?-preguntó porque cuando fue la reunión al no verlo llegar dijo que el día anterior se había sentido mal, y él había terminando atendiendo la junta con los directivos y los de mercado.
-Algo así-murmuró-¿Ya me puedo ir?-preguntó.
-Está bien-suspiró su manager- nos vemos mañana para comenzar a grabar.
Asintió antes de pararse para marcharse de aquel lugar, en su camino de regreso pasó por un conocido restaurante de comida rápida, cuando llegó al edificio subió al décimo piso y caminó hasta llegar frente a la puerta que tenía un 13.
Inhaló y tocó el timbre, recibiendo pocos segundos un mensaje que decía que pasara, tomó el pomo y lo giró.
KyuHyun gruñía mientras cambiaba los canales de la televisión, estaba muy aburrido y no había nada bueno en la tele, sólo noticias y programas tontos en donde invitaban a los artistas más famosos del momento. Fue entonces que KyuHyun se preguntó si su vida sería así a partir de ahora, tendría que asistir a esos programas y tendría que soportar los chismes y a los paparazzis acosándolo.
Suspiró.
-Bueno, al menos valdrá la pena.
Después de un rato escuchó el timbre y supo que era YeSung, le mandó un mensaje para decirle que entrara y en unos segundos ya tenía al mayor en la puerta del cuarto.
-Te tardaste mucho. Me estaba muriendo de hambre maldito hyung pervertido todo esto es tu culpa.
-Por si no lo recordabas mocoso-le dijo rodando los ojos acercándose a la cama, viendo a Kyu acomodarse- hoy en la mañana teníamos junta con los directivos-dijo entregándole la bolsa de papel-no sabía que traerte, así que espero que te guste-le dijo tronando su cuello.
Fijándose en la escasa decoración de aquella habitación.
-Primero que nada, aunque lo hubiera recordado, de todas formas no hubiera podido ir genio. ¿No estás viendo que me dejaste casi invalido?- abrió la bolsa de papel y sacó una hamburguesa, la desenvolvió y le dio un mordisco mientras miraba de manera reprobatoria al mayor. Tragó lo que tenía en la boca y volvió a hablar -¿Cómo esperabas que me fuera de aquí si ni si quiera me puedo parar de la cama?
Su vista volvió al menor y una sonrisa algo sarcástica apareció.
-Ayer eso no pareció importarte mucho-le dijo acercándose a su rostro, viéndolo fruncir el ceño mientras sus mejillas se teñían levemente- ¿O me equivoco?, de cualquier manera no dijeron nada verdaderamente importante-dijo alejándose colocando sus manos dentro de su ajustado pantalón- mañana empiezan las grabaciones.
-Si serás maldito…-murmuró al sentir sus mejillas calientes, y al ver al mayor salir de la habitación lo detuvo -¡Espera! ¿A dónde vas? ¿Piensas dejarme aquí solo? No puedo pararme ¿recuerdas? Así que ne-necesito que me ayudes…
Se detuvo en seco riendo despacio volviéndose a ver al menor quien evitaba su mirada.
-¿Quieres que te talle la espalda acaso?-se burló virando los ojos.
Está bien, si sabía que las primeras veces resultaban bastante dolorosas, entonces sonrió de forma algo malvada acercándose de nuevo al menor.
-Sabes el único remedio para ese dolor- dijo acercando su rostro al del menor hasta quedar a escasos centímetros, dejando que su aliento se envolviera con el del menor- es hacerlo muchas veces.
Kyuyun se sorprendió al tener al mayor tan cerca, cuando le pidió ayuda jamás pensó que YeSung le fuera a decir aquello. Se quedó mirando esos ojos oscuros paralizado por los nervios.
-T-tu lo único q-que quieres es volverme a tocar, no es cierto? Eres un pervertido.
Una sonrisita afloró en sus labios alejándose del rostro del menor.
-¿Y si fuera así?-preguntó cruzándose de brazos frente al menor-¿cambiaría algo?
Las respuestas del mayor lo confundían.
-¿Q-qué?- fue lo único que salió de los labios de KyuHyun antes de que los de YeSung se posaran suavemente sobre los suyos.
Instantáneamente, KyuHyun cerró los ojos, olvidándose por completo de su hamburguesa.