Especial 1.-
No podía dejar de ver el panorama que se mostraba ante sí, y no precisamente porque fuera hermoso y el fuera pintor. El lugar se notaba que era privado, accesible solo a familias adineradas. Enormes mansiones, autos lujosos, rejas en patios grandes y bien cuidados. Miro a su acompañante que parecía completamente indiferente al lugar.
.-llegamos.- anuncio el chofer del taxi que los llevo. Miro el lugar que señalaba el hombre.
.- Adrik… ¿estás seguro que esta es tu casa?-
.- ¿piensas que no sé donde vivo?- murmuro, pagando y saliendo del auto. Lo siguió torpemente.
.-bueno, no… pero creo que pudiste mencionar…- Adrik sonrió mientras abría la reja de la mansión de sus padres. Por supuesto que no le había dicho que su familia era adinerada. Ahora que veía el lugar, pensó que era obvio. Adrik estudiaba en una prestigiosa universidad italiana y tenía un departamento para cuatro personas para el solo en un lugar bonito, además había mencionado algo de una casa en Rusia. Por supuesto, esto era difícil de deducir si cuando se lo dijo, él estaba más interesado en tontear con Adrik.
.- detalles, detalles.-
.- una mansión en un lugar que seguramente es uno de los más caros o exclusivos en este país no son detalles.-
.- ¿a no?, bueno… pues ya lo sabes.- Adrik movió su mano, restándole importancia.
.- nunca me dijiste que eras rico.-
.- mis padres son ricos… yo solo vivo en Italia.- suspiro. Eso fácilmente podía debatirlo.
.- olvídalo… eso tendrá que esperar hasta que regresemos, dudo que podamos hablar.- antes de que dijeran algo más, la puerta de la casa se abrió ¿eso era una mucama?
.- te lo dije.- murmuro Adrik. Y un mayordomo. Eso parecía una broma.
.- ¿están mis padres en casa?- pregunto Adrik, cuando estuvieron cerca
.- ellos… no se encuentran, tampoco informaron que llegaría tan pronto.- la mujer claramente desconfiaba. Los miraba nerviosamente.
.- si, bueno… el vuelo no tuvo contratiempos…. Llama a mi madre si no deseas dejarnos pasar.- frunció el ceño. Adrik parecía más grosero de lo usual, le toco el codo, a modo de advertencia.
.- no… no pasa nada, adelante.- Adrik entro en la casa. Lo siguió, sintiéndose bastante fuera de lugar.
.- ¿Qué fue todo eso?- murmuro.
.- tengo años sin pisar este lugar… no tengo idea de quienes son, y el sentimiento es reciproco.-
.- sigo sin creer que vivas en este lugar… incluso tienen sirvientes.- Adrik resoplo. La casa era enorme, lujosa. Cuadros colgados por las paredes, mueves de madera cara, enormes ventanales con cortinas. Dejo de mirar más de la cuenta. Vio a Adrik mirar ligeramente desorientado, antes de que se dirigiera a la sala.
.- no vivo aquí, y creo que el término que prefieren es empleados, les pagan por limpiar y esas cosas.- Desmond rio. Se sentaron. Unos momentos de silencio. Había algo más que le molestaba de todo eso, algo que no había notado…
.- está bien, solo que estoy sorprendido... ¡eras un niño mimado!- exclamo de pronto, notando que era que lo que le faltaba.
.- ¡¿Qué quieres decir con eso?!- grito a la vez. Desmond comenzó a reír.- no es gracioso.-refunfuño.
.- bueno, el verbo está mal conjugado… -
La puerta se abrió. Una mujer delgada, algo mayor y rubia entro rápidamente. Vestía elegantemente y sus zapatos altos resonaron en la casa.
.- ¡Adrik!- Adrik se puso de pie al tiempo que ella lo abrazaba. Era sencillo saber quién era, con el mismo tono rubio de cabello y los mismos ojos grises, la madre de Adrik.
.-… y es por eso que no estaba aquí, además de haberme informado antes que llegabas, hubiera mandado a alguien a recogerte.- y hasta ahí llegaban las similitudes. La mujer tenía un tono agudo de voz. Al parecer se había perdido un poco de conversación.
.- no me gusta estar en los aeropuertos, lo sabes.- murmuro Adrik secamente. Adrik lo miro dirigiéndole una clara mirada de que eso pasaba seguido.
.- pero tenía tanto sin verte… oh, que descortés…- ella lo miro entonces. Él le sonrió antes de tomar su mano.
.- descuide, después de todo, ver a su hijo después de mucho tiempo, cualquier falta pierde importancia.- Adrik le miro incrédulo. La mujer sonrió también.
.- tú debes ser el invitado de Adrik… creí que serias más… como Adrik.-
.- el… es Desmond, y ¿Cómo se supone que soy?- Adrik se cruzó de brazos. Ambos rieron.
.- deben estar cansados, los vuelos nunca son cómodos… Adrik, lleva a Desmond al cuarto de invitados, les mandare llamar cuando la cena esta lista.-
.- muchas gracias… con su permiso.- paso a su lado para alcanzar a Adrik que ya había comenzado a irse sin esperarlo.
.- ¿Qué fue todo eso?-
.- ¿eh?- Adrik no parecía molesto, pero si incrédulo.
.- todo eso, con mi madre.- explico.
.- bueno… solo trato de ser amable.-
.- ella no es amable con las personas, y no estaba fingiendo.- suspiro.- como sea, esperaba que no le agradaras para regresar pronto.- comenzó a reír ante el tono de decepción de Adrik.
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Desmond se quedó de pie en la entrada de la habitación a la que Adrik lo había llevado, luego de lo cual se había ido alegando algo de su propia habitación. Todo le parecía muy grande y costoso. Suspiro. Mientras se ponía a ordenar sus cosas, tratando de usar el menor espacio posible. Después de un rato, en el que supero su incredulidad al comprobar que la habitación tenía su propio baño, la puerta se abrió.
.- este lugar sigue estando igual.- Adrik se dejó caer cómodamente en la cama.- ¿pasa algo?- pregunto, mirándolo fijamente. Se sentó a su lado.
.- estoy incomodo… este lugar es muy… es demasiado lujoso para mi.- explico. Mentir no le gustaba, mucho menos a Adrik, además mentirle a Adrik no era algo que se pudiera hacer aunque quisiera.
.- no sé qué es lo que te incomoda… pero… puedes estar tranquilo, le agradaste a mi madre, además esta aun es mi casa así que si rompes algo no pasa nada, si aun así no quieres estar aquí, podemos regresar mañana a Italia.- sonrió. Adrik podría ser amable cuando se lo proponía, aunque fingiera que no era algo de importancia. Amaba más el hecho de que Adrik solo fuera así con él.
.- está bien… solo es la sorpresa de ver que vivías aquí.- respondió, mientras se recostaba apoyando la cabeza en Adrik.- nunca lo mencionaste ¿pensabas decírmelo?-
.- algún día, sí. Tú fuiste el que insistió en venir. Yo te dije que no era necesario, esto sería tu culpa.- Desmond rio. Adrik tenía razón.
.- bueno, podría olvidar esto con facilidad si vamos a dar un paseo.-
.- tal vez mañana, dudo que mi madre vaya a dejar que salga pronto.- suspiro.- tengo que ir con ella, supongo que quiere hablar conmigo a solas, tratare de venir cuando sea la hora de cenar, si es que mi madre me deja.- otro suspiro.
.-bien, trata de no ser grosero con nadie más, mucho menos con tu familia.-
.- ¿ahora me das clases de modales?- se puso de pie, sonriendo con sarcasmo.- todos aquí saben cómo soy, al parecer…- Adrik salió, dejándolo solo. Se limitó a sonreír. Suspiro mientras se acostaba con más comodidad en la cama. Aunque no fuera mucho al parecer, el cansancio del viaje se hizo presente, y se quedó dormido. Cuando despertó, la habitación estaba oscura, se encontró desorientado en medio de una habitación que no conocía. Alguien toco la puerta.
.- la cena se servirá en 10 minutos, me pidieron que lo acompañe al comedor.- se quedó inmóvil, antes de suspirar con resignación. Abrió la puerta para encontrarse con otra mucama, que solo le hizo un gesto para que la siguiera. Cuando llegaron al comedor, vio a Adrik leyendo en la mesa. No había nadie más.
.- mis padres vendrán en unos momentos, ellos saben que no están acostumbrado a esto, así que no te pongas incomodo.- no levanto la vista del libro.
.- bien… les dijiste sobre…- bajo la voz, inseguro. Se sentó en la silla de al lado.
.-aún no. Seria… interesante, pero me daría muchos dolores de cabeza.- la puerta se abrió y la madre de Adrik entro seguida por un hombre de la misma edad que ella, castaño y ojos oscuros. Era más difícil ver las semejanzas entre Adrik y su padre. La cena fue mucho más amena de lo que había esperado. Los padres de Adrik estaban bastante interesados en saber que lugares frecuentaban en Italia, sobre sus cuadros, sobre Adrik.
.- ¡¿Por qué es de interés como vivo?!-
.- Adrik, no eres muy sociable, es natural que estemos preocupados.- Desmond trato de contener la risa. Sabía que Adrik le reclamaría en cualquier momento.
.- Desmond, ¿Cómo fue que conociste a mi hijo?- la atención se centró en él. Sonrió, ignorando la mirada de advertencia de Adrik.
.- conocí a Adrik cuando tropezamos por accidente… luego tuvimos algunos problemas con su asma, después de eso comenzamos a interactuar más.- bien, las cosas no habían sido así, pero sonaba mejor.
.- oh, sabes sobre eso, Adrik suele ser muy descuidado con su salud.- la mujer le sonrió. A su lado Adrik solo siguió comiendo en silencio.- es bueno ver que tienes tan buenos amigos, Adrik, desde lo de Natasha…- un silencio pesado se apodero del lugar. Por la reacción supo que habían acordado no mencionar el tema.
.- no importa… además no tengo buenos amigos, solo Desmond… los demás no me agradan.-
.- sabes que hacer amigos te hará bien.- intervino Desmond.
.-te he dicho que no hablare con mis compañeros, así que no sigas.-
.- solo por qué dices que no son buenos por sus colores no significa que no puedas intentarlo.-
.- Desmond tu… tu sabes sobre…- Adrik le miró fijamente, y luego volvió a comer, Desmond lo interpreto como un “tu culpa, encárgate tú de esto”.
.- bueno… si, lo sé. Me entere por accidente más que por que Adrik me lo dijera. Descuiden no me molesta en absoluto, soy bastante curioso y Adrik me parece realmente interesante.- opto por no mentir. Si bien no contaría los detalles reales sobre cómo había terminado por conocer el secreto de Adrik, al menos trataría de mostrar un poco más de interés de lo que un amigo usualmente mostraría.Por unos momentos nadie dijo nada más.
.- eso si es una gran sorpresa… que lo sepas demuestra que Adrik realmente confía en ti… usualmente no hablamos mucho sobre…eso, así que supongo que tenemos que agradecerte también por escuchar a Adrik en ese asunto.- el padre de Adrik le sonrió.- serás bienvenido a nuestra casa, cualquier cosa que necesites, ahora o después, no dudes en acudir a nosotros.-
.- si, si... ¿podemos continuar con la comida y hablar de un tema normal?- Adrik suspiro, dejando a un lado su servilleta.
.- solo quiero agradecer apropiadamente. Y se más amable delante de tu madre.- señalo. Adrik resoplo, y siguió comiendo. La comida era buena, trato de no pensar más en los costos, después de todo no había pasado nada de los clichés sobre gente rica que usualmente circulaban entre la población normal. Finalmente se despidieron y salieron. Esta vez le fue más fácil ubicarse en el lugar.
.- ¿Dónde está tu habitación?- pregunto, al recordar que Adrik no se quedaría en la misma habitación.
.- al final del pasillo, la puerta es la única blanca… tengo sueño, mañana nos vemos.- Adrik siguió su camino. El entro, recordó que Adrik no había dormido aun. Sonrió. Se sentía mejor ahora que había tratado con los padres de Adrik, al menos ya no se sentía incómodo con todo ese lujo. Se iría a bañar y vería un poco de televisión, por la mañana saldría a conocer el lugar con Adrik y tal vez podría intentar algo más estando de paseo… si, serian unas buenas vacaciones.
Especial 2.-
Adrik abrió los ojos y por unos segundos sintió que estaba en su vieja pesadilla. Luego recordó que había viajado a su casa. Se levantó notando que aún era temprano. Ordeno un poco sus cosas y luego se dirigió al baño con ropa limpia. Cuando se estaba abrochando las agujetas, sentado en la cama, escucho que se abrió la puerta.
.- ¿no es muy temprano para que estés aquí?-
.- me desperté temprano, y venía a despertarte… ¿Cómo supiste que era yo?- se enderezo para mirar a Desmond.
.- eres el único que no toca la puerta en esta casa.- sonrió con ironía. Frente a él, el aura de Desmond siguió sin variar sus tonos.
.- vaya, no pensé en eso… ¿Qué planes hay para hoy?-
.-bueno… no parece que vaya a llover, tendría que ver el pronóstico del clima, mis padres no están de vacaciones, pero dijeron que cenarían con nosotros, así que tendríamos que estar aquí para la cena.- Desmond no lo escuchaba. Era notorio aun sin verle el aura- hey.-
.-ah, lo siento.-
.- ¿Qué estabas pensando?-
.- bueno…aún es temprano… pensaba en algo como…- su aura de volvió más oscura, él sonrió antes de que Desmond lo besara. No le parecía mala idea, por lo que se dejó caer en la cama arrastrando a Desmond en el proceso. Se siguieron besando, mientras sentía cada vez más calor.
.- ADRIIIIIIIIIIIIIIIIIK!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!- la puerta se estrelló estrepitosamente y sin aviso alguno, dejaron de besarse.- Aaaaaaaaaaah… yo… eeemm…- cerro los ojos, suspirando.
.- Clarisse.- murmuro, sin moverse. Desmond tampoco se movió.
.- creí que habías dicho que nadie más entraba sin tocar.-
.- de los que viven en esta casa sí, pero Clarisse no vive aquí.- empujo a Desmond, y se sentó. Su prima estaba inmóvil en la puerta, con la boca ligeramente abierta.
.- ¿Qué? ¿No te había dicho ya que estaba saliendo con un chico?- ella parpadeo, en un gracioso movimiento. Su aura se coloreo de un rojo tenue, al igual que sus mejillas.
.- ¡creí que mentías! Siempre estásdiciendo mentiras… no pensé que fuera real… ¡además tu nunca hablas con personas!- hizo un puchero de enojo. Su prima era dos años menor que él, era rubia y de ojos azules,… todo lo que la mayoría de las modelos envidiaba.
.- bueno, ese es tu problema, además tampoco tocaste, las puertas existen por algo…es mi habitación, no tengo que poner un anuncio de no molestar.- sonrió, burlándose de ella.
.-Adrik.- a su lado, el tono usado por Desmond le indico que según Desmond él no estaba siendo amable, o no lo suficiente. No le interesaba se amable con su prima ni con su familia si siempre había sido igual, no es que fuera grosero con ellos.
.- bien, ella es Clarisse, mi prima, Clarisse él es Desmond, él es… algo así como mi novio.-
.- ¿algo así?-
.- ¿te está pagando por eso? ¿O es que te está chantajeando?-
.- ¿eh?-
.- no sé de qué otra forma estarías con Adrik…-
.- Clarisse, mira que tu personalidad es tan retorcida como la mía.-
.- hasta lo admites.- Clarisse no lo decía con mala intención, si algo tenían en común era que ambos decían lo que pensaban con más naturalidad que otras personas y no experimentaban culpa por eso.
Desmond despertó muy temprano y nada cansado. Había descansando bastante bien por la noche y pensaba que la responsable era la cama. Se vistió y se dedicó a ver algunos canales de tv. Cuando considero que la hora era decente para despertar a Adrik salió de la habitación. Le costó poco encontrar la habitación de Adrik pues como lo había dicho la noche anterior, su puerta era la única diferente del pasillo de tres puertas. Sin más abrió la puerta. Adrik estaba inclinado sobre sus zapatos.
.-¿no es muy temprano para que estés aquí?- sonrió. Adrik ni siquiera había levantado la vista.
.- me desperté temprano, y venía a despertarte… ¿Cómo supiste que era yo?- Adrik lo miro, divertido.
.- eres el único que no toca la puerta en esta casa.-
.- vaya, no pensé en eso… ¿Qué planes hay para hoy?-
.-bueno… no parece que vaya a llover, tendría que ver el pronóstico del clima, mis padres no están de vacaciones, pero dijeron que cenarían con nosotros, así que tendríamos que estar aquí para la cena.- su mente divago entre dos hechos: el primero, todos tocaban la puerta, así que no había interrupciones, segundo: estaban solos a excepción de los empleados. Había pensado en reducir sus demostraciones de afecto al mínimo, suponiendo que nadie allí sabía que eran pareja- hey.-
.-ah, lo siento.- Adrik lo saco de sus pensamientos. Lo miraba fijamente.
.- ¿Qué estabas pensando?-
.- bueno…aún es temprano… pensaba en algo como…- se acercó un poco y Adrik sonrió. Su relación con Adrik era mucho más sencilla de lo que podía aparentar. Lo beso sabiendo que Adrik sabía lo que tenía en mente. Terminaron acostados sobre la cama, besándose.
.- ADRIIIIIIIIIIIIIIIIIK!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!- la puerta de abrió estrepitosamente seguida de un agudo grito.- Aaaaaaaaaaah… yo… eeemm…- se dejaron de besar. Se preguntó quién llamaba a Adrik de esa manera y entraba a su habitación de esa manera, además de él.
.- Clarisse.- murmuro Adrik, para sí mismo. Recordó de ese era el nombre de la prima de Adrik.
.- creí que habías dicho que nadie más entraba sin tocar.- comento, tratando se relajar el ambiente.
.- de los que viven en esta casa sí, pero Clarisse no vive aquí.- Adrik le dio un suave empujón se apresuró a sentarse, notando que estaban en una posición que poco dejaba a la imaginación.La chica que estaba en la puerta era bonita, muy bonita. Tenía el cabello rubio, ondulado y largo, ojos color azulclaro, delgada y pequeña, una buena combinación a su parecer. Como una muñeca.
.- ¿Qué? ¿No te había dicho ya que estaba saliendo con un chico?- Adrik se dirigió a ella, sonriéndole burlonamente.
.- ¡creí que mentías! Siempre estas bromeando… no pensé que fuera real… ¡además tu nunca hablas con personas!- ella hizo un puchero de enojo, con la cara roja. Muy tierna. Su voz delicada.
.- bueno, ese es tu problema, además tampoco tocaste, las puertas existen por algo.-
.-Adrik.- Adrik seguía burlándose de ella, no creía que la situación requiriera ser descartes con ella, parecía tan delicada.
.- bien, ella es Clarisse, mi prima, Clarisse él es Desmond, él es… algo así como mi novio.- presento Adrik.
.- ¿algo así?- dejo de mirar a la chica para mirar a Adrik con reproche. Eso había sido un golpe bajo.
.- ¿te está pagando por eso? ¿O es que te está chantajeando?-
.- ¿eh?- miro sorprendido a la chica. Su tono de voz había cambiado, y su anterior expresión tierna había desaparecido.
.- no sé de qué otra forma estarías con Adrik…- bien, tal vez la chica no era tan delicada y tierna como aparentaba.
.- Clarisse, mira que tu personalidad es tan retorcida como la mía.-reprimió un suspiro.
.- hasta lo admites.- exclamo ella, sonriendo.
.- mucho gusto en conocerte emm, Clarisse…- decidió intervenir, conocía cuando Adrik planeaba una larga discusión, y ya que su plan inicial no había funcionado, esperaba pasar el día fuera. Los ojos de Clarisse se enfocaron en el- antes preguntaste… y no puedo dejarte creer que Adrik hace algo como eso, o que yo sea un…actor…-bien, eso no era exactamente lo que quería decir pero se acercaba.
.-Desmond, no te molestes… ella igual creerá lo que quiera.- Adrik se levantó.- vamos a salir. Desmond quiere conocer y yo no quiero estar aquí.- Clarisse, espero que de ahora en adelante toques antes de entrar, no me hare responsable si terminas con un trauma.- salió de la habitación.
.- disculpa.- salió detrás de Adrik.
.- ¿no hablabas en serio o sí?- murmuro.
.- porsupuesto que no, no volverá a pasar, la próxima vez pondré seguro a la puerta.-
.- aunque eso me hace feliz, aun quiero saber que significo eso de algo así como mi novio.-
.-umm.- escucho los pasos rápidos de alguien tras ellos.- nada en especial.
.-Adrik.-
.- bien.- Adrik resoplo.- no creo que el concepto de novio sea suficiente para lo nuestro… además aun es raro presentarte de esa forma a mi familia, solo estaba haciendo la prueba con Clarisse.-
.-claro, como me encanta ser tu conejillo de indias.- Clarisse se interpuso entre ellos, entrelazando sus brazos, miro algo sorprendido la familiaridad con que Clarisse lo había sujetado.- no creo que tengas mucho de qué preocuparte ¿A dónde vamos?-
.- no me preocupo, nadie te ha invitado a ningún lado.- Clarisse lo ignoro.
.- hable con mi tía antes de venir, habla maravillas de ti, además no esperan mucho de Adrik ¿A dónde planean ir? ¿Tienes algún interés en específico?-
.-bueno, yo pinto cuadros, así que planeábamos ir a lugares que pueda pintar.-
.- ahora ella se auto invitara.- Adrik suspiro.- ¿entiendes la palabra cita, clarisee?-
.- una cita también puede ser de tres.-
.-bien, quiero salir a solas con Desmond, largo.- el no supo que hacer. Adrik y ella parecían discutir así todo el tiempo, y ya no estaba tan seguro de que ella fuera tan inocente como parecía.
.- Desmond.- se sobresaltó al escuchar su nombre de la boca de Clarisse.- ¿puedo ir con ustedes?-
.-eeh…. Yo…. Quizá…-
.-ignórala, solo trata de manipularte.-
.- calla, que no hablo contigo.- suspiro. Sabía que ella trababa de acompañarlos usándolo a él, aun así le parecía una descortesía rechazarla.
.- ¿Adrik?...- dudo unos momentos, Adrik suspiro.
.-da igual de todos modos vendrá.- Clarisse sonrió asintiendo.- pero de una vez te advierto, nada de preguntas incomodas, indecentes o que no te conciernan, oh, si y esto sigue siendo una cita, así que no te quejes de sentirte excluida o cosas así.-
.- bien, me comportare, nada de preguntas sobre su vida privada e intimidad, y ya se que seguirán besando, solo espero que no pase lo mismo que en la habitación. Suspiro, ese sería un día muy largo, y apenas comenzaba. El trayecto a la calle fue tal y como esperaba, Adrik y Clarisse seguían discutiendo, en lo que a su parecer era una especie de reencuentro. Por insistencia de Clarisse habían tomado un taxi a una de las plazas principales, a lo que entendió de la discusión con Adrik. Al final habían terminado en un autobús de dos plantas en un paseo turístico por los principales puntos de interés de Londres. En el trayecto Clarisse se centró en su celular. Adrik miraba indiferente todo, y en ocasiones definitivamente no prestaba atención.
.-Adrik… ¿Por qué estamos aquí….?
.- ¿Por qué?... umm no se a lo que te refieres.-
.- no parecen interesados, ella y tu.-
.- vivimos aquí, es normal que esto ya no sea interesante, Clarisse lo hizo por ti… yo solo le seguí la idea. Es la mejor opción para conocer Londres, si tienes algún interés en algún lugar podemos regresar luego.- sonrió, al tiempo que se lanzaba a abrazar efusivamente a Adrik. Cuando bajaron Clarisse los guio a un restaurant. Una vez dentro se vio respondiendo a una infinidad de preguntas por parte de Clarisse. De vez en cuando la veía mirar rápidamente a Adrik, quien se había mantenido en silencio, escribiendo en un pequeño cuaderno. Suspiro. Con el tiempo había aprendido que ese gesto en Adrik significaba que estaba nervioso o algo de importancia le incomodaba. Al parecer Clarisse también había notado el estado de Adrik. Decidió esperar para poder hablar con Adrik a solas, por lo que aprovecho para conocer a Clarisse. Adrik no se había equivocado al describir a Clarisse con una personalidad como la suya, porque claramente la tenía, la diferencia estaba en como la usaban a su favor, mientras Adrik alejaba a las personas de si, Clarisse las usaba a su favor. Saliendo de restaurant Clarisse volvió a enlazar sus brazos con los suyos, por lo que iba en el centro y de nuevo dirigiendo.
.- no conoces los nuevos centros comerciales, los hicieron después de que te fueras y no has vuelto por aquí, considera un favor que los guie.-
.- ¿Qué tienen de nuevo? Venden lo mismo que todos los centros comerciales.-
.- no me molestaría ir a dar una vuelta por allí.-
.- tienen una librería grande.- añadió Clarisse. Adrik no dijo mas, Clarisse le sonrió, guiñándole un ojo, le sonrió de vuelta. Ante su sorpresa entraron primero a la librería. Adrik se perdió rápidamente entre las estanterías.
.- Adrik… él cambio mucho.-
.- ¿disculpa?- miro a Clarisse, aun lado suyo, su voz apenas había sido un susurro.
.- que Adrik está muy diferente a la última vez que lo vi. Desde antes de lo de Natasha.-
.-eso fue difícil para todos ¿no? Cuando conocí a Adrik y sus padres, son muy cuidadosos con ese tema.-
.- Adrik la quería mucho, no lo digo con mala intención, es la verdad. No sé si ella correspondió alguna vez o como fueron en ese tiempo las cosas entre ellos, lo que sé es que si alguien conocía a Adrik perfectamente en ese tiempo era ella, pero cuando ella murió, Adrik no volvió a relacionarse profundamente con alguien más, prefería ser maleducado, incluso grosero con las personas que conocía para que no volvieran a hablar con él. Por eso me alegra que te permitiera estar con el.- sonrió, con la vista perdida en los libros. Él también sonrió, mirando por donde se había ido Adrik.
.-no fue precisamenteque me permitiera estar con él, pero te agradezco que me dijeras eso.-
.- me agradas, mucho. Lo cual es raro teniendo en cuenta que nos acabamos de conocer. Espero que no metas la pata con Adrik, no es de los que da segundas oportunidades si tienes malas intenciones.-
.-… ¿gracias?-
.-Adrik es lo más cercano que tengo a un hermano, no pienso ponerme dramática con eso solo porque sé que Adrik no se acercaría a ti si fueras una mala persona, mis tíos pensaran igual, así que no creo que tengan algún problema con su relación.
.-deja de decir tonterías Clarisse.- Adrik apareció detrás de ellos, sobresaltándolos. Llevaba entre los brazos varios libros.
.- solo digo lo que pienso, no es diferente a lo que tú dices.-
.- claro que lo es, prometiste no decir nada incomodo.-
.- pero si no estaba incomodando a Desmond ¿verdad?- pregunto, girándose hacia él.
.-para nada.- respondió rápidamente
.- ¿Por qué siguen mintiéndome cuando saben que puedo verlo?- murmuro, yendo a la caja para pagar. Ambos rieron. no es que mintieran conscientemente, o eso suponía Desmond, era difícil recordar no mentirle a Adrik, no es que el mintiera mucho y suponía que eso ayudaba bastante en su relación. Recorrieron el centro comercial guiados por Clarisse, salieron finalmente unas horas antes del atardecer.
.-bueno, me voy.- anuncio Clarisse de pronto.
.- ¿Qué?-
.- tengo una cita, no son los únicos que pueden salir en citas.- ella rio y se fue.
.- debo admitir que ella es muy extraña.-
.- solo quería evaluarte a su manera, supongo. No es que me importe mucho su opinión.- sonrió, recordando su conversación en la librería. Tomo la mano libre de Adrik, y el recuerdo de aquellas primeras citas en Italia le hizo sonreír con más alegría.
.-ella menciono algo sobre que no necesitaba conocerme porque tú no dejarías que alguien inadecuado se te acercara.-
.- y aun así no pudo evitar no venir. Además, todos piensan erróneamente que yo deje que te acercaras, aun no olvido que te metiste a la fuerza a mi casa después de un ataque de asma y ya no te quisiste alejar de mí. Y vaya que lo intente.- Desmond rio, recordando también.
.- eso no puedes negarlo, aunque me gusta pensar que no te esforzarte al máximo en eso, ya que después de besarnos ya no lo intentaste más.-
.-uuhmmm.- el silencio de Adrik fue una afirmación. Sonrió
.- ¿Qué diría Clarisse, o cualquiera si supiera lo que pasó entre nosotros en realidad?-
.- no lo creerían… no es algo que haría yo… de algún modo, mi familia te cree más a ti que a mí, así que todos piensan que nos hicimos buenos amigos porque me salvaste de un ataque de asma.-
.- pero eso si paso en realidad.- murmuro, algo resentido. Adrik rio.
.- pero no nos hicimos cercanos por eso… si no mal recuerdo querías pintar la vista de mi ventana, aunque sé que eso no era del todo cierto.- sonrió mientras él se sonrojaba.
.- ¿lo sabias? ¿Y aun así me dejaste entrar?-
.- bueno, quería agradecerte de una manera, además tu aura me gusto, sabía que no eras mala persona, así que no pensé que fuera a pasar…. Lo que paso.-
.- ¿besarnos, terminar en tu cama y de algún modo acabar saliendo?-
.-oh… eso sonó a algo que yo diría.- ambos rieron. Pasaron el resto de la tarde paseando, Adrik solo le soltaba la mano cuando él se disponía a tomar fotografías que probablemente terminarían plasmadas en sus cuadros.
Especial 3
Había pasado ya una semana desde que llegara a Inglaterra acompañando a Adrik a visitar a sus padres. Había pasado algunos momentos de nerviosismo antes del viaje siendo el motivo su relación con Adrik. Adrik le había dicho que no quería decirlo, y las divagaciones del porque le tenían intranquilo. Finalmente cuando llegaron esperaba que en cualquier momento alguien reclamara por eso aunque nadie lo sabía esperaba al menos un trato indiferente, no esperaba que pasara lo contrario. La única que sabía de su relación era la prima de Adrik a la que no había visto mucho después de su salida. Los padres de Adrik lo adoraban, y no era una exageración. Podía pasar horas escuchar lo agradecidos que estaban con él por llevar Adrik a verlos, conversar sobre arte con el padre de Adrik, visitar lugares exclusivos con la madre de Adrik, vamos si incluso lo habían presentado y recomendado con los dueños de varias galerías de arte para exponer sus cuadros. Cuando fue con Adrik al cementerio donde estaba enterrada Natasha, ambos lo felicitaron como si hubiera ganado un premio importante. A él no le molestaba, aunque después de varios días comenzaba a cansarse de tanta atención, Adrik se limitaba a mirarlo burlonamente cuando eso pasaba.
.- eso te pasa por ser tan amable.- Adrik le sonreía desde el extremo de la cama del cuarto de Desmond.- a este paso terminaran adoptándote.-
.- espero que no pase.- murmuro.- si pasara sería extraño
.- solo bromeo.
.- ¿de verdad les agrado tanto?-
.- es verdad. Es comprensible, tú has hecho que venga, cosa que ni Clarisse había logrado en muchos años.-
.- si hubieras venido antes esto no hubiera pasado…-
.- no.-sonrió. El suspiro, Adrik no tenía remedio.- cuando termines de acomodar apaga la luz.-
.- ¿dormirás aquí?- pregunto, alarmado.
.- buenas noches.- Adrik le dio la espalda. Sonrió, no iba a discutir por algo que quería, si bien no intentaría nada esa noche, el dormir juntos le bastaba.
El resto de las siguientes dos semanas pasaron rápidamente y sin incidentes, era la última noche que pasaban allí, y se encontraba guardando sus cosas en la maleta. Adrik lo había hecho durante la mañana y en esos momentos veía la televisión recostado en la cama.
.- debería agradecer a tus padres por la hospitalidad antes de irnos.- menciono más para sí.
.-oh, lo olvide, mis padres quieren cenar con nosotros esta noche. Clarisse también vendrá, se quedara a dormir porque quiere despedirnos mañana.-
.-bien. ¿Estaría bien si la invito a Italia?
.-no.- llamaron a la puerta cuando iba a replicar.
.- la cena está casi lista.-
.-si, si, ya vamos.- Adrik se levantó.- será mejor que vayamos antes que Clarisse decida venir.- salieron en silencio hasta el comedor.
.- mis padres nos llevaran al aeropuerto mañana, probablemente para eso es la cena.-
.- deberías venir más seguido.-
.- si, tambiéndirán eso.- la voz femenina los interrumpió. Clarisse se sentó frente a ellos.- yo también iré con ustedes.- les sonrió. La puerta se abrió y comenzaron a traer la cena. La madre de Adrik entro después de las mucamas, saludo a todos efusivamente.
.- tu padre llegara un poco tarde, comenzaremos sin el.- la plática fue rápidamente acaparada por Clarisse, parecía que ella quería narrar con todo detalle lo que había hecho durante el tiempo que no la habían visto, no se detuvo ni siquiera cuando llego el padre de Adrik.
.- ¿a qué hora sale su vuelo mañana?- pregunto en una pausa que hizo Clarisse
.- a las 11:30.- cont4esto Adrik secamente.
.- ¿están seguros que no se pueden quedar más tiempo?-
.- ya te explicamos que no.- Adrik suspiro.
.- pero vendremos las próximas vacaciones.- sonrió amablemente. Adrik hizo una especie de lamento que solo el escucho debido a los agradecimientos de los padres de Adrik. Adrik lo miro dándole a entender que eso no le agradaba.
.-incluso puedes traer a alguien más, alguna novia tal vez.- la madre de Adrik había seguido hablando mientras pensaba. A sus palabras se hizo un silencio en la mesa, pensó en decirles sobre su relación, siempre podía no regresar a esa casa, y espera a Adrik en Italia. Miro a Adrik de reojo, el negaba suavemente con la cabeza, mirando su plato. Sabía que Adrik había visto su intención y esa era su manera de decirle que dejara las cosas como estaban.
.- Desmond y Adrik están saliendo…. Son pareja.- añadió la a suave y hasta entonces encantadora voz de Clarisse que se escuchó con claridad en el silencio de la mesa. jadeo, sin saber qué hacer, mirando sorprendido a Clarisse, a su lado, Adrik había echado la silla hacia atrás, como si fuera a levantarse, también miraba en shock a Clarisse, quien tenía una dulce sonrisa… no esa definitivamente era una sonrisa malvada, no dulce.
.- ¿e-eso… eso es verdad?- su mirada se dirigió a la madre de Adrik, que lucía sorprendida. A su lado, Adrik seguía en shock, y de haber estado en otra situación su expresión hubiera sido algo bastante gracioso, como lo era para Clarisse.
.- n… l-lo es.- consiguió tartamudear después de considerar que no tenía caso mentir, ambos se habían delatado con su reacción. A su lado, Adrik volvió a sentarse correctamente y mirar de mala manera a Clarisse.
.- ¿Adrik?- Adrik suspiro. Volteo a mirar a su padre.
.- Desmond no está mintiendo. Estamos saliendo desde hace unos meses… y no, no me importa que sea un chico, tampoco lo que piensen los demás.-
.- eso en realidad nunca te ha importado.- Clarisse bebió tranquilamente de su vaso. Adrik sonrió.
.- espero que sepas que no saldrás limpia de esto.- Clarisse le regreso la mirada retadora. El suspiro, pensando en lo milagroso que era que pudieran estar bajo el mismo techo sin herirse de muerte.
.- ¿Cómo pudiste…?- la madre de Adrik parecía a punto de llorar. Se sintió mal… Adrik seguro sabía que eso pasaría y por eso no había querido decirles sobre ellos. No había pensado en lo que pasaría si los padres de Adrik no lo aceptaban, ni siquiera sabía que él se sentiría tan mal. Él había vivido con sus tíos hasta que inicio la universidad y se mudó por su cuenta. Ni siquiera había pensado en ir verlos para presentar a Adrik.
.- yo en verdad quiero a Adrik.- su voz sonó ridículamente fuerte.- no quiero alejarme de él, no me aleje de él, por favor.- a su lado, Adrik llevo sus manos a su boca, conteniendo su risa, con poco éxito. Lo miro confundido.
.- ¿Cómo pudieron esperar hasta la última noche para decirnos?- exclamo entonces la madre de Adrik, haciendo un falso gesto de molestia.
.- ¿eh?- se puso de pie, sonrojándose. Clarisse reía discretamente, Adrik en cambio soltó una carcajada, que aumento cuando su madre rodeo la mesa y lo abrazo.
.- Adrik, que descortés, traes a tu novio y lo presentas hasta el último día que pasas aquí.- murmuraba sin soltarlo.-
.- lo hubieran incomodado mucho, creo que en algún momento olvide mencionar que vivía en una mansión.- consiguió aclarar, con la voz ahogada por la risa.
.- ah, Desmond querido, no te preocupes, en realidad me alegra bastante que hayas defendido lo que sientes por mi hijo.- su cara seguía sonrojada por el malentendido, aunque esas palabras lo tranquilizaron.
.- ¿aun quieren irse mañana? Si es por eso que se iban, pueden quedarse más tiempo, es muy agradable tenerlos aquí.-
.- en realidad si tenemos que irnos.- Adrik respondió ya que él seguía procesado lo que había pasado.
.-bueno, entonces espero que vuelvan pronto.- Adrik resoplo.
.- nos retiramos, aún tenemos que recoger nuestras cosas y prepararnos para mañana.- Adrik se levantó.
.- en ese caso, que descansen.- la madre de Adrik le beso la mejilla y lo soltó. Siguió torpemente a Adrik, que seguía sonriendo.
.- Adrik…-
.- ah, sí, lo siento no pensé que estarías preocupado por cosas como esa… sé que mis padres incomodarían a cualquiera que este conmigo… después de todo soy hijo único.-
.-…. Tú ya hiciste tu maleta.-
.-oh, sí, pero ya no quería estar allí.- sonrió mientras entraba a su habitación. Se sorprendió al ver que sus cosas ya estaban guardadas.- le dije a una mucama que lo hiciera.-
.- ¿pero porque…?- Adrik se le acerco aun sonriendo y lo beso.-
.- tengo mejores planes para esta noche que meter tus cosas a la maleta.- al verse arrastrado hacia la cama por Adrik por fin logro concentrar sus pensamientos. Después de todo, no había salido tan mal como esperaba.
.-Adrik apresúrate, perderán el vuelo.- el padre de Adrik los había llevado al aeropuerto, Clarisse discutía con Adrik, por lo que este se había quedado rezagado en el control.
.-ya voy.- se adelantó.
.-Desmond, no olvides mandar algunos cuadros para la exhibición.-
.- ¿exhibición?-
.-si, entre más pronto los mandes más rápido se arregla, ya nos pondremos de acuerdo en los precios y la forma de pago.- se sintió mareado unos momentos. Desde que se encontraron con ellos en la mañana había pasado de ser un invitado a ser parte de la familia. Al parecer ahora también tenía trabajo y estaba por convertirse en un famoso pintor según las palabras del padre de Adrik. La segunda llamada de su vuelo sonó por los altavoces.
.-que tengan un buen viaje… llámanos cuando lleguen Desmond.- se despido la madre de Adrik.
.-eh...Claro.-
.- ¿Por qué Desmond te tiene que llamar?
.-Porque tú nunca nos llamas, nosotros tenemos que llamar.- reprocho la mujer.- y espero que no ignores nuestras llamadas.
.- como digas.-
.- espero que vuelvan pronto.-
.-vendremos las próximas vacaciones. ¿Cierto Adrik?- Intervino sonriendo. Adrik hizo un gesto indiferente y siguió caminando. El corrió para alcanzarlo antes de que subiera al avión.
.- supongo que me obligaras a venir cada año.- refunfuño.
.- yo pensaba más en cada periodo vacacional.-
.- ni de broma…. A menos que te haya gustado ser también un niño mimado.- dijo con malicia.
.- tus padres son muy amables.-
.-ya te dije que fue por que les agradaste, si les mencionaba ante sobre lo nuestro hubieran insistido para que nos mudáramos aquí… pensándolo bien, probablemente lo intenten durante el año.- murmuro mientras se sentaba en el asiento y sacaba un libro.
.-bueno, siempre podemos contar con tus mentiras ¿no?-
.-claro, me gusta Italia… no pienso mudarme.- le tomo la mano que tenia libre, sonriendo.- ¿has ido a Rusia?-
.-no…-
.- supongo que en invierno te invitaran a Rusia a casa de mis abuelos…. No pongas esa cara, ya murieron.-
.-no podre negarme, ¿cierto?
.- los boletos llegaran sin avisar, te lo aseguro, y conociéndote, no los rechazaras… me hubiera gustado que mi familia no se enterara de eso.-
.-entonces… ¿Rusia?- sonrió al recordar que la primera vez que conoció Adrik pensó que era ruso. Suspiro mientras el avión despegaba. El viaje no había sido tan malo como Adrik había querido hacerle creer, y aunque aun le parecía extraño el trato de los padres de Adrik, estaba feliz por ello, al menos hasta su siguiente viaje.