Le pesaban mucho los ojos ese día, se sentía cansado, al parecer había tenido fiebre durante la noche, al levantarse un fuerte mareo hizo que toda la habitación se contoneara a su alrededor, el día anterior se enteró de su embarazo, había sido un día con tantas emociones, el pensar en él bebe, la gripe, en Aomine, en todo, la verdad era desconcertante, el moreno no se veía por la habitación, Kise aún tenía ciertas dudas, el moreno le había pedido ser su esposo, pero si lo hacía solo por él bebe, no por amor, con un fuerte suspiro decidió levantarse, ya no se sentía tan mal, y tenía un extraño calambre en su bajo vientre que lo estaba molestando, pero al ponerse de pie el calambre se intensifico, volvió a sentarse masajeando su bajo vientre, sabía que si llegaba a embarazarse sería delicado, pero nunca pensó que a ese punto- quizá debo preguntarle a Akashicchi y a Takaocchi, si se sintieron así en algún momento- dijo suavemente, en eso la puerta de la recamara se abrió, dejando ver a un moreno con una bandeja llena de comida, se veía cansado y traía la misma ropa que el día anterior.
-Buenos días…- Aomine quedó con el saludo en los labrios- Ryo… que pasa? que tienes?- el rubio estaba muy pálido y con la mano en su vientre afirmándose de el con fuerza.
- Aominecchi… no ocurre nada, solo tengo una molestia…- Kise se volvió a recostar, en esa posición se sentía mucho más cómodo, el moreno se acercó para dejar la bandeja al alcance del rubio, fue ahí que Kise noto las ojeras que se podían distinguir bajo los ojos de Aomine, entonces empezó a mirar la habitación, a su lado había una fuente con agua y varios paños, el otro lado de la cama estaba sin desarmar y había una silla que no se veía nada cómoda, junto a la cama.- Me cuidaste toda la noche?- Aomine se sobresaltó ante la pregunta – Te volvió a subir la fiebre anoche… me asuste, no quiero que a ti o al bebe les pase algo..- fue casi un susurro, Kise lo miro y le dedico una sonrisa llena de amor, esta sería su familia, con un moreno, un poco torpe con sus sentimientos, pero que lo amaba de verdad.
Esa noche Kise obligo a Aomine a acostarse a su lado, durmieron abrazados y con una de las manos del moreno sobre el vientre de Kise, esa sería su familia, llena de amor.
5 meses después
Era una mañana un poco fría, pronto comenzaría a nevar, el embarazo de Kise iba bastante bien, mejor de lo que todos hubieran creído, recibía visitas de sus amigos casi a diario, Aomine no podía estar siempre al lado del rubio, por lo mismo entre todos se cuidaban, ya que tenían 2 embarazados más entre sus amigos y Kuroko realmente estresado y nervioso, ya que faltaban 5 meses para su matrimonio con el Tigre, no era minuto para dejarlos solos, Kuroko habían decidido mover el matrimonio, para una fecha en que ya no hiciera tanto frio, para que las nuevas mamás y bebes del grupo pudieran estar presentes.
Esa mañana estaban todos en la casa de Akashi, quien con sus ya 8 meses y medio, no se movía con mucha facilidad, a quien decidieron hacerle una especie de Baby shower, pero solo entre los más cercanos, ya que con lo avanzados de sus embarazos no sería para nada cómodo estar entre mucha gente, en la sala de la casa se encontraban Akashi, Kuroko, Kise y Takao, pues sus parejas habían decido ir a comprar los distintos antojos de sus parejas y aunque Kuroko con estaba embarazado, estaba en una etapa de ansiedad demasiado grande provocada por el matrimonio, así que Kagami también le compraba aquellos antojos que el peliceleste tenía.
Kuroko y el matrimonio había sido todo un tema, la sombra se había puesto histérico, al notar que sus amigos no podrían estar presentes el día de su boda, ya que él bebe de Akashi sería muy pequeño, Takao estaría o habría dado a luz hace muy poco y que Kise probablemente estaría muy delicado para salir de casa y cualquier cosa podría provocar un parto de emergencia y lo que menos quería era arriesgar al pequeño Ryoki, la noche en que se dio cuenta de eso, se acostó en su cama a llorar, Kagami lo había encontrado en posición fetal con el rostro en la almohada, el tigre le ofreció entonces mover la boda algunos meses, Kuroko había llorado más después diciendo que tenía el mejor novio del mundo, hasta que por fin se había dormido, luego el estrés de la boda fue peor, ya que todo lo que era para invierno tendría que ser para primavera, todos creían que si la sombra seguía así terminaría con una ulcera, felizmente acepto la ayuda de Momoi y Riko, para poder organizar algunas cosas, junto con su mamá quien lo obligo a descansar y dejar de pensar en la boda por un tiempo.
El embarazo de Akashi había sido muy tranquilo, y no había ningún problema con el niño, según dijo el doctor nacería en la fecha planificada sin problemas, después de lo de Kise, logro mantener en calma su vida, la mayoría de los problemas relacionados con sus antiguos amigos había quedado en manos de Midorima, quien se había comportado como el mejor Sub-capitán, la familia de Akashi estaba feliz de saber que ya habría un nuevo heredero en la familia, en un comienzo Murasakibara no había sido del agrado del padre de Akashi, cuando lo presento como su novio, pero el gigante se lo había ido ganando con el tiempo, aparte que había demostrado que no por su actitud infantil era menos inteligente para los negocios, el padre de Akashi lo había aceptado como su futuro yerno y padre de su nieto con los brazos abiertos, además que los dulces y pasteles que preparaba el peilila eran del completo gusto del padre de Akashi.
Kise no podía realizar tareas pesadas ni bruscas, tenía una alimentación muy estricta, pero el desarrollo era normal, se cansaba mucho más que sus amigos en sus respectivos embarazos a pesar de solo tener 6 meses, pero los cuidados de Aomine lo hicieron tener mucha fuerza, Aomine había entrado en estado de alerta sobreprotector con el rubio, de tal forma que si el rubio se movía un poco más de la cuenta en la cama el moreno se despertaba preguntando si debían ir al hospital o algo, Kise no sabía si sentirse feliz o preocupado ya que el moreno casi no descansaba por eso, pero cuando Akashi le menciono que Murasakibara actuaba igual se sintió más tranquilo.
Aunque el realmente complicado había sido Takao, su embarazo estaba siendo realmente malo, los malestares lo habían llevado a estar en el hospital una vez al mes como mínimo, los padres de Takao no habían reaccionado bien al saber que se había embarazado, su madre lo había rechazado y su padre lo había golpeado, Kise aun recordaba ese incidente, él ya tenía 3 de embarazo, cuando un Kagami muy agitado los llamo diciendo que Takao estaba en el hospital, ya que estaba teniendo un aborto, su corazón y el de Aomine se detuvieron por un momento, partieron al hospital, el ojos de halcón y el peliverde se habían convertido en personas muy importantes para ellos, cuando llegaron la escena los sorprendió, todos estaban reunidos en completo silencio, excepto por Midorima quien se encontraba mirando por la ventana, las vendas de su mano estaban rotas y llenas de sangre, nadie se acercaba, fue ahí que Kuroko les conto, que cuando el Padre de Takao lo había golpeado este había caído al suelo golpeándose el vientre, provocando cierto daño a la placenta, ocasionando el posible aborto, tanto Aomine como Kise sabían a que se referían, era justamente lo que debían evitar que le pasara al rubio, luego Kagami les conto que el peliverde no sabía que su pareja le contaría a sus padres lo del embarazo y que por eso no lo había acompañado, que luego de dejar a su pareja en el hospital y llamarlos a ellos, había salido a quien sabe dónde, pero que había llegado con las vendas de sus manos rotas y con moretones en su rostro, todos pensaron que probablemente había terminado en una pelea con el padre de Takao,
El ojos de halcón se había repuesto satisfactoriamente, él bebe se había salvado, pero el embarazo sería de extremo delicado.
Takao llevaba un buen rato sentado con una pequeña puntada, respirando pausadamente, tratando de calmarse, Kuroko fue el primero en notar que se encontraba muy callado e incomodó, la puntada cada segundo se hacía peor, y los chicos no volvían de comprar, se estaba sintiendo realmente mal, quizá debía ir y mojarse la cara.
Se levantó con la intención de ir al baño, pero justo es ese momento una fuerte punzada lo doblo de dolor, Kuroko se había movido quedando junto a Takao, afirmándolo para que no callera al suelo.
-Takaocchi!- grito asustado el rubio, justo cuando la puerta de la entrada sonaba, al escuchar el grito tanto Aomine, como Midorima entraron velozmente, un charco entre las piernas del ojos del halcón hizo que Midorima se quedar estático, su bebe nacería, todo lo demás fue muy rápido, era un bebe prematuro y el cuerpo de Takao estaba muy delicado, al llegar al hospital la sala de espera se llenó de tensión.
Kise y Akashi en un minuto se aferraron de las manos, entre ellos y protegiendo sus vientres, sabían que lo que le estaba pasando su amigo ellos lo vivirían en poco tiempo, pero también sabía que ese bebe sería el más delicado de todos.
Luego de 5 horas y que las complicaciones en el parto de Takao iban en aumento, Akashi tuvo que ponerse de pie, se sentía algo incómodo y como si tuviera la necesidad de ir al baño, pero justo en ese momento se rompió la fuente, todos miraron atónitos, hoy traerían 2 bebes al mundo, Akashi fue ingresado y llevado a una habitación, justo cuando Midorima salía con la cabeza agachada y los ojos vidriosos, levanto la cabeza y sonrió- es una niña…- lloró- es hermosa…- todos lo felicitaron, su bebe debería estar en la incubadora un par de días y Takao en observación por la pérdida de sangre que presento.
El parto de Akashi fue demasiado rápido, el doctor le dijo que probablemente llevaba un par de horas en trabajo de parto, pero que con le preocupación las contracciones se vieron disimuladas, un niño de cabellos lilas claros, había sido recibido por sus amigos y familia que fue llegando, el gigante tomo a su bebe, que se veía diminuto y simplemente lloro, con una sonrisa en los labios.
3 meses después.
Kise estaba histérico, había tenido tantas falsas alarmas, que el moreno estaba a puertas de sufrir una crisis nerviosa, una noche cerca de las 2 de la mañana Kise supo que su hijo vendría al mundo.
-Daiki…- lo llamo suavemente, ya que los nervios del moreno estaban más que colapsados- Daiki, Ryoki quiere conocerte…- tratando se sonar tranquilo mientras otra contracción lo aquejaba.
-Dile que regrese mañana o que yo lo llamo…- contesto dormido, de pronto abrió los ojos y entendió las palabras del rubio quien se sostenía el vientre, por las contracciones, rápidamente llegaron al hospital, el dolor del rubio se fue intensificando, le dolía hasta respirar, pero se esforzaría por traer al mundo a Ryoki.
2 horas después y con un Aomine en lágrimas supieron que el pequeño Ryoki llego al mundo.
El matrimonio.
Kuroko no podía estar más histérico, había adaptado toda la boda en último minuto para que los pequeños Shinatzu, Ryoki y Seishi pudieran estar presentes, había elegido los trajes de los bebes en último minuto, para que combinaran, todo debía ser perfecto.
La boda transcurrió con normalidad, Kise miró su anillo con mucho amor y anhelo, a pesar de que el moreno le pidió ser su esposo aún no disponían una fecha.-Quizá si vuelvo a pescar una gripe podamos poner una fecha- murmuro el rubio al oído del moreno.
-eeehhh…. Ni se te ocurra… aun no me curo la ulcera del ultimo resfrió- sentencio el moreno en un susurro solo para él y su rubio.- Para nuestra boda solo debemos estar nosotros 3, no necesitamos más –el moreno mirando todo lo que había alrededor, a lo que Kuroko había entregado casi un años de su vida en la preparación.
-No- dijo firme el rubio- en nuestra boda debe estar toda la familia- mirando ahora a las 3 parejas que se encontraban con sus respectivos bebes- fue la mejor gripe de mi vida- besando los labios de Aomine