algo en el cuerpo del pelirrojo se sentía extraño y no era porque tuviera miedo al esquivar unas tijeras las cuales nunca vio sino otra cosa distinta que lo tenía pensando, el cual no era nada más que aquel escalofrió que sintió cuando sus labios rosaron con aquellos suaves y dulces labios de ahora su esposo, aquella extraña pero placentera sensación de tocarlo, aquella que había provocado que quisiera más de aquel tacto, de aquel dulce aroma que había sentido en ese instante pero reprimió aquellos pensamientos y se alejó de aquel ser que por primera vez en su vida y sin entender lo había hecho sentir cosas que nunca había experimentado
Bueno eso es todo nos vemos Ryuunosuke, Taiga-kun-dijo el padre de Akashi haciendo que Kagami saliera de su ensoñación-
Espera en que momentos salimos de la iglesia-pensaba Kagami mientras escuchaba a su padre despedirse haciendo que este lo hiciera por inercia-
Nos vemos Taiga-dijo Akashi antes de subirse a un vehículo haciendo que el tigre se sintiera sin saber porque triste al verlo alejarse de él-
Tranquilo hombre que lo tendrás de vuelta en cuatro días-dijo Ryuu mientras le golpeaba la espalda- ya que supongo que no escuchaste nada de lo que dijo Shoichiro ya que se notaba que estabas pensando en tu esposo te lo repito, dentro de 4 días ira a vivir contigo ya que debe arreglar y ordenar sus cosas primero– le dijo mientras que el tigre estaba bastante sonrojado- vamos que debes de organizar todo para cuando llegue tu amado
n…n…..n…no..e…es…m..mi…a….a…amado-le decía mientras su padre se reía- así que…..en cuatro días-pensó sin darse cuenta que en su rostro se dibujaba una sonrisa mientras seguía a su padre-
durante el día siguiente el tigre se dedicó a ordenar, limpiar, arreglar y comprar algunas cosas que posiblemente harían falta en el hogar, su padre tenía una gran sonrisa al verlo aunque este no se diera cuanta de sus actos
Emi debes de estar feliz que nuestro pequeño tigre esta con la persona que desde pequeño ama aunque conociéndolo más que seguro que se olvidó-susurraba con una sonrisa de alegría y nostalgia al observar una foto de su difunda esposa la cual guardaba siempre cerca de su corazón ya que aquello era su mayor tesoro. después que el tigre terminara con todos los arreglos los cuales termino algo tarde se dispusieron a cenar para después ir a dormir pues mañana debía de levantarse temprano ya que tenía escuela-
Me pregunto cómo será vivir con Akashi- decía en voz baja mientras observaba el anillo de oro blanco con una piedrita de color rojo en el centro- bueno lo único que sé que no debo de hacerlo enojar ya que bastante difícil esquivar aquellas tijeras-soltó una pequeña risa mientras lentamente se quedaba dormido-
Al día siguiente
Sonó aquel ruidoso sonido el cual hizo que de mala gana Kagami se despertara para levantarse y darse una ducha, tras unos minutos salió solo con una toalla amarrada a su cintura mientras tomaba su ropa para comenzar a colocársela recordando que aún tenía el anillo en su mano
Será mejor que lo saque ya que no quiero que comiencen a preguntar-pensó al hacerse una idea de cómo tanto su sombra como sus sempais lo estarían interrogando o molestándolo, pensó guardarlo en la mesita de noche pero decidió mejor colocarlo en su cadena junto con el anillo que compartía con himuro, ya listo se dirigió al comedor en donde se encontraba su padre- viejo te vas-le pregunto al ver las maletas las cuales no recordaba que eran tantas-
No estaré unos días más aquí-le dijo calmadamente mientras le servía el desayuno-
Entonces porque las maletas
Porque me quedare en un hotel hasta que me vaya-le respondió-
Espera porque un hotel si siempre te quedas aquí
Taiga recuerda que eres casado y que en unos días llegara tu pareja y yo no quiero molestar a una pareja de recién casados los cuales harán ruidos por la noche-dijo con una sonrisa mientras que el tigre estaba completamente rojo por lo que había insinuado su padre- Hey esposo se te hará tarde si no te vas-le dijo apuntando la hora haciendo que Taiga la mirara y se parara al instante pues no le quedaba más que 10 minutos para poder llegar a su escuela-
Diablos viejo me hubieras dicho antes-le dijo mientras comía rápidamente su desayuno para después tomar sus cosas y así realizar una carrera para llegar a su escuela-l…..l…lo…logre-decía entre cortado intentado recuperar el aire –
Buenos días Kagami-kun-le dijo su sombra el cual se encontraba al lado suyo-
Kuroko cuantas veces te he dicho que no hagas eso-le reprocho- y buenos días-con una sonrisa mientras ambos se dirigían a sus asientos los cuales al momento de sentarse el profesor apareció dando así comienzo a las clases-
Las clases para el Pelirrojo pasaron bastante rápido a pesar que no estaba tomando mucha atención a lo que decían pues su mente se encontraba en otro lado bueno especialmente en recordar a una persona la cual no sabía porque tenía su imagen gravada en su mente
Kun….Kagami-kun-le dijo Kuroko mientras lo movía-
Ehh…ahhh que pasa Kuroko-le pregunto mientras lo observaba-
Las clases ya terminaron Kagami-kun-le respondió- realmente no entiendo cómo es que pasas los ramos
Suerte quizás-le dijo mientras tomaba sus cosas para dirigirse al gimnasio ya que aquello que le dijo su sombra era un secreto más que escondía pues nuestro querido tigre no era tan estúpido como la gente piensa, si quisiera podría obtener el mayor puntaje en las asignaturas ya que no le resultaban difíciles pero aquello seria destacar demasiado y eso no les gustaba así que prefería tener notas regulares y jugar lo más que podía la basket-
Al llegar al gimnasio se dieron cuenta que estaban todos los jugadores pero faltaba alguien, aquella persona que les hacía realizar aquellos entrenamientos que eran como ver el infierno, todos se miraban preguntándose sobre donde estaba Riko, cuando las puertas se abrieron de golpe mostrando a la nombrada saltando mientras tarareaba una canción con una gran sonrisa en su rostro, los jugadores hasta podían jurar ver como flores salían a su alrededor cosa que hizo a varios tragar en seco pues aquello no traía nada bueno
R…Riko pasa algo-pregunto con algo de temor Hyuuga-
Qué bueno que preguntas-dijo con una gran sonrisa haciendo que varios le dieran ganas de escaparse- saben hace poco me llamaron para realizar mañana un juego amistoso
Esto no es nada de bueno-pensaron todos mientras algunos de primer año comenzaban levemente a temblar
El cual no saben quién será el equipo-dijo aún más feliz-pues nada más que todos los de la generación de los milagros-dijo con suma alegría dejando a todos en shock-
No espere verlo tan rápido-pensó Kagami con una gran sonrisa en su rostro la cual todos interpretaron que el pelirrojo estaba bastante emocionado con el encuentro, los demás estaban a punto de protestar pero se callaron al instante que vieron a Riko con el abanico en sus manos, así que resignados tuvieron que hacerse la idea de aquel tormento además de soportar el entrenamiento el que era mucho peor que los anteriores
El día del juego todas las clases se pasaron volando haciendo que tanto Kagami como Kuroko se colocaran de pie y se dirigieran rápidamente al gimnasio para cambiarse y comenzar a calentar
Kuroko deberías de calmarte-le dijo Kagami al ver que Kuroko estaba algo nervioso
No sé de qué hablas Kagami-kun-dijo con su cara inexpresiva pero sus ojos lo delataban
No me digas que estas nervioso porque veras a aomine-le dijo haciendo que Kuroko se sonrojara levemente-jajaja acerté, realmente puedes ser muy tierno Kuroko-dijo con una sonrisa mientras le alborotaba sus cabellos sin darse cuenta que un pelirrojo de baja estatura lo miraba con el ceño un poco fruncido-