Habían pasado semanas desde que la deidad Enlil se llevara a Din, Naru se había encargado del cuidado de Huwa y de mantenerlo lejos de la morada de las grandes deidades, el pequeño guardián ya comenzaba a desesperarse y a Naru le era más difícil el calmarlo cada día
- Espera Huwa no puedes ir así como así podrías perder tu libertad para siempre – el pequeño era detenido por Naru quien lo tomo fuertemente del brazo deteniéndolo antes de que se fuera
- ¡¡¡déjame no puedo seguir aquí sin hacer nada, ahora mismo la gran deidad debe de estar torturando a Din no puedo quedarme quieto sabiéndolo Naru, no quiero que muera no de esa manera entiéndeme!!! – el pequeño estaba desesperado, cada día que pasaba lo ponía estresado y comenzaba a perder el control sobre sus acciones
- ¡¡¡No puedo hacer eso Huwa tengo que protegerte no voy a permitir que te conviertas en la mascota de esa deidad no permitiré que seas encadenado y sé que Din también pensaría lo mismo sé que el morirá de ser necesario si de esa forma puede protegerte el me mataría si llegase a llevarte a ese lugar no te permitiré ir de ninguna forma!!! – tomo al pequeño de los hombros y acercándose a su rostro planto un beso en los labios del guardián lo cual dejo confundido al pequeño, cuando reacciono lo aparto de él y retrocediendo unos pasos por la impresión
- Naru yo……… yo no sé…… yo no te……
- Lo se descuida Huwa……. Todo este tiempo lo he sabido y pese a ello no quiero rendirme jejeje voy a insistir hasta mi último aliento – el chico le regalo una gran y hermosa sonrisa lo que hizo que el pequeño también sonriera, ambos comenzaron a reír muy divertidos y de pronto Naru sintió como su cuerpo comenzaba a calentarse en la parte de la nuca, luego comenzó a palpitar como si se tratase de un ser vivo, se dio cuenta de que ese era el mensaje que estaba esperando y mirando como el pequeño guardián reía divertido decidió abrazarlo fuertemente lo cual dejo confundido al pequeño
- ¿Qué sucede Naru?, ¿estás bien? – Huwa sentía como el chico lo apretaba con fuerza mientras apoyaba su rostro en el hombro del pequeño, por primera vez sintió que su corazón latía fuertemente y su temperatura aumentaba por la acción del chico – Naru suéltame me estas apretando muy fuerte, me lastimas…
- Solo un poco más Huwa……. quiero gravar en mi corazón tu aroma – el pequeño se puso rojo ante tales palabras y dejo que este siguiera con el abrazo, mientras sentía el calor de Naru se transportó al tiempo en el que su querido cuidador lo abrazaba cada vez que se sentía feliz o lo reconfortaba cuando la tristeza lo inundaba, recordaba cómo cada vez al dormir le daba un beso suave en la frente y acariciaba sus cabellos, su voz, su aroma, su tacto de repente comenzó a recordarlo y unas lágrimas escaparon de sus ojos dándole a Naru un sentimiento de culpa al retenerlo por tanto tiempo
Después de que ambos se calmaran, Naru le comento a Huwa que irían a rescatar a Din ya que no podía verle en ese estado, el pequeño al escuchar eso se sintió un poco aliviado, casi de inmediato ambos salieron hacia el bosque de cedros hacia la morada de las grandes deidades
Una vez se encontraron en las puertas del altar de las deidades ambos fueron recibidos por una deidad menor que los guio hasta donde se encontraba una cascada que parecía que era infinita, no se podía ver donde empezaba ni donde terminaba y un puente antiguo lleno de columnas majestuosas creaba un camino a esta, ambos fueron guiados hasta donde terminaba el puente y era atravesado por las aguas de la cascada, la deidad menor se paró y les dijo que debían de atravesar la cascada que detrás de ella se encontraba la morada de las grandes deidades ambos asintieron y caminaron hasta la cascada, el pequeño guardián trago en seco y entro seguido por Naru que lo tomaba de la mano
Sintieron como sus cuerpos se alivianaban y sintieron una corriente eléctrica recorrer por sus extremidades, finalmente salieron de cascada y una luz cegadora hiso que estos tapasen sus ojos hasta que se acostumbraron a esta, cuando abrieron los ojos de par en par quedaron fascinados ante la escena que se mostraba ante ellos, la morada de las deidades era increíblemente hermosa era como estar en un paraíso, el aire era tan puro, las nubes rodeaban el lugar dándole un toque celestial, las plantas se fusionaban con las estructuras creando una gran combinación y los sirvientes descansaban mientras eran acariciados por sus deidades, también pudieron apreciar como de detrás de la espalda de cada deidad se extendían hermosas alas de diferentes colores haciendo que el lugar resaltase mucho mas
En ese momento Naru sintió como su nuca comenzaba a calentarse y sintió como unos ojos lo miraban, en ese instante una gran deidad se le apareció en frente y reconociéndolos los guio hasta donde se encontraba la gran deidad Enlil
- ¿Naru es necesario que vengas conmigo a ver a la gran deidad? – preguntaba el pequeño recordando lo que le hizo la última vez a su amigo – puedo ir solo Naru no necesitas exponerte al peligro
- Pff jajaja que dices Huwa, vengo porque no voy a permitir que estés solo con esa deidad, además tengo algo en mente así que despreocúpate – el pequeño asintió al ver la seguridad del chico
- Es aquí llegamos, Enlil-sama los está esperando en el jardín – sin más la otra gran deidad se fue dejándolos solos, ambos siguieron el camino que se les señalo y cuando llegaron al jardín vieron a Enlil arreglando unas flores del mismo
- Bienvenidos pequeños – sin darse la vuelta la gran deidad los saludo y dándose la vuelta les sonrió acercándose a ellos – los he estado esperando, ya me estaba cansando y pensaba ir a presionarlos jujuju
- ¿Dónde está Din? – el pequeño no pudo aguantar y lo agarró del cuello mirándolo con mucha rabia – si le hiciste algo me la pagaras con creces
- Jujuju así que el pequeñajo puede ponerse así jajajaja que divertido será muy entretenido el domarte pequeñajo – lo tomo del brazo y bruscamente lo aparto de él empujando a Huwa hacia atrás
- Déjate de tus palabras Enlil, ¿Dónde tienes a Din?, habla si no quieres morir
- Jo jooo eres un mocoso malcriado no deberías decir esas cosas a una gran deidad te puede costar la vida – la deidad le dedico una mirada fulminante pero el chico no retrocedió ni un milímetro causando sorpresa a la deidad
- Jujuju se ve que eres un chico muy valiente pero eso no siempre te funcionara mocoso
- Deja en paz a Naru y dime, ¿Dónde está Din? – el pequeño comenzaba a molestarse cada vez más y de su espalda podía verse una cola que crecía más y mas
- Deja eso pequeñajo sin ese cuidador terminaras perdiendo el control – la deidad se sentó en una mesita ubicada en el centro del jardín el cual estaba cubierto por una especie de cúpula abierta por los lados y rodeando la mesita con enormes pilares blancos de estructura antigua y grabados hermosamente distribuidos – bien…….entonces, ¿aceptaste lo que te propuse pequeñajo?, ¿te convertirás en mí sirviente?
- ¡¡¡De eso nada Enlil, Huwa no se convertirá en tu perro faldero ni lo sueñes!!! – la gran deidad no le prestó atención alguna a Naru le parecía un simple gusano al que debía de ignorar y el pequeño lo miraba mostrando su negativa a la propuesta de la deidad
- Está bien pequeñajo si no quieres hacerlo por las buenas entonces será por las malas – la deidad extendió su mano y del suelo comenzó a emerger una jaula, Naru y Huwa miraron horrorizados como por un lado de la jaula se escapaba un líquido rojo del cuerpo de un bulto de carne destrozado y con heridas por todo el cuerpo, Din había sido torturado hasta mas no poder por aquella deidad, lo que más temía el pequeño guardián esta frente a sus ojos
- ¿por…..qué…? Din no hizo…..no hizo nada malo, ¿Por qué le hiciste eso? – el pequeño intento acercarse a la jaula donde se encontraba su querido cuidador pero fue en vano esta fue nuevamente tragada por el suelo dejando fuera del alcance del guardián
- ¿Qué por qué lo hice?, jajajaja eso es fácil pequeñajo lo hice por ti, sabes una cosa eres un rareza nacida de entre miles y miles de años, eres único y poderoso jujuju si te tengo como mi sirviente no sabes cuánto poder es el que tendría sobre la tierra jajajaja
- ¿y eso que tiene que ver con lo que le hiciste a Din?, no lo entiendo
- ¿no lo entiendes?, bueno eso era de esperarse después de todo ese tonto cuidador te crio sin contarte nada de ti mismo
- ¿a qué te refieres con eso?
- Cuando un guardián nace este forma un pacto con un cuidador el cual lo cuida hasta que esté listo y sea puesto a cuidar del bosque de cedros, esto solo sucede si el guardián acepta al cuidador si el guardián no acepta al cuidador este se vuelve en un sueño hasta que lo vuelven a despertar y esto toma mucho tiempo, ahora lo mismo pasa con los sirvientes los cuales son guardianes fallidos y débiles sin la capacidad del habla estos forman un pacto con una deidad que acepten, en otras palabras no podemos forzarlos a que se conviertan nuestros sirvientes lo hacen por decisión propia, este pacto dura toda la vida del sirviente o de la deidad si cualquiera de los dos llegase a perecer el pacto seria roto y cualquiera que haya sobrevivido tiene la oportunidad de volver hacer otro pacto ¿entiendes? – hizo una pausa y mirando de reojo a Naru prosiguió – en otras palabras pequeñajo tu formaste un pacto con ese cuidador y este no desaparecerá hasta que uno de los dos muera jajajaja
- Ya veo, es por eso que quisiste la muerte de Din Enlil – de nuevo Naru lo miraba desafiante pero al mismo tiempo se sentía como si fuese algo más que un simple humano, pero no le dio mucha importancia y siguió con su convencimiento
- Eso quiere decir que Din……..
- Si pequeñajo no importa lo que hagas matare a ese cuidador para hacerte mío jajajajaja
- Eres muy ingenuo Enlil – esta vez la gran deidad sintió como del cuerpo del chico comenzaba a sentir una presencia conocida más a Huwa esa presencia lo intimidaba
- Ya veo jujuju, ¿desde cuándo estas pendiente de mis acciones Hulner? – la gran deidad se acercó a Naru y lo beso en los labios mostrando una sonrisa traviesa – ¿y bien que es lo que buscas en mis dominios querido mío? – Huwa se quedó sin palabras al ver como su amigo devolvió el beso a la gran deidad y le acariciaba el rostro muy provocativo
- Mi queridísimo y travieso Enlil me conoces muy bien, admito que estoy aquí para pedirte un favor – giro su rostro y se lo dirigió al pequeño guardián que no entendía nada de la situación en que se encontraba
- Si quieres al pequeñajo, lo siento pero es mío y lo convertiré en mi sirviente jujuju – se separó de Hulner y dirigiéndose al centro del jardín hizo emerger nuevamente la jaula donde se encontraba el cuidador – ahora mismo estoy convenciéndolo como puedes ver con esta cosa
- Descuida Enlil a mí lo que me interesa es la cosa de la jaula, puedes hacer con el pequeño lo que quieras me tiene sin cuidado – se acercó a la jaula y la abrió, saco al cuidador que se encontraba inconsciente y lo cargo en sus brazos – si quieres que ese pequeñajo te acepte lo mejor será que me lleve a este cuidador de esa manera no tendrá opción que obedecerte Enlil
- ¿a qué te refieres Hulner?, ¿Qué tienes en esa mente retorcida? – Hulner sonrió ampliamente y poniendo a Din sobre unas plantas que crecieron en forma de colcha puso su mano sobre el pecho del cuidador y un brillo color azul marino ilumino el cuerpo del mismo – Enlil no tienes que matar a este cuidador para convertir a ese pequeño en tu sirviente, es cierto que necesitas eliminar el pacto matándolo pero hay otra manera de hacer que este desaparezca sin lastimar a ninguno
- Jo jooo y ¿Cómo exactamente hago eso?, si el cuidador sigue vivo el pequeñajo seguirá pensando en él y eso no me conviene – la presencia se apartó de Din y el brillo desapareció
- Por eso no te preocupes Enlil eso no pasara
- Se te ve confiado Hulner, ¿Por qué no me explicas en detalle lo que tienes en mente? – la gran deidad se sentó nuevamente en la mesita de jardín y Hulner lo siguió haciendo lo mismo, el pequeño guardián aún estaba observando la situación y no hizo nada ante ella, cuando esa nueva presencia apareció su instinto le dijo que si se movía Din y Naru terminarían muertos
- Veo que eres muy listo pequeño – Hulner le dirigió una mirada y lo llamo con la mano a lo que el pequeño se acercó a él obedientemente, cuando este estaba frente a la presencia esta hizo que el pequeño se sentara en el suelo – si te hubieras movido este chico hubiera pagado las consecuencias, ahora se buen chico como hasta ahora y escu----
- ¿Quién eres? Y ¿Por qué estás en el cuerpo de Naru?, ¿Qué hiciste con él? – antes que la presencia terminara fue interrumpido por el pequeño que lo miraba fieramente
- Vaya vaya eres muy impaciente pequeño, déjame explicártelo – Hulner se volvió hacia la mesita y llevándose una taza de té continuo – este chico vino a mí el día en que su vida fue destruida jajaja era tan ingenuo que termino creyendo que una deidad oscura le ayudaría a solucionar sus problemas jajajaja puedes creerlo quien en su sano juicio pediría la ayuda de una deidad peligrosa como lo soy yo tan solo con el mediocre deseo de vengar a su hermanita a cambio de su vida jajajaja
- ¿qué dijiste, Naru quería venganza?, ¿él quería renunciar a su vida?
- Si eso mismo pequeño, bueno eso era al principio pero van ustedes dos y le devuelven las ganas de vivir me arruinaron completamente – Huwa estaba muy sorprendido al saber que su amigo se encontraba con esos pensamientos y que su corazón albergaba tanto odio y remordimiento, agacho la cabeza y sintió una ira tremenda no contra las deidades frente a él sino contra el mismo por no darse cuenta de ello, se reprochaba internamente el no poder haberle ayudado, mientras que la deidad oscura lo miraba divertido por su semblante sombrío
- Bueno en ese momento me plantee la idea de tomar su vida antes de que recuperara por completo sus ganas de vivir fue ahí cuando me disponía a matarlo cuando lo vi, ese hombre estaba detrás de ese chiquillo cuidándolo y velando por él, en ese momento sentí un escalofrió al ver cuán atractivo era y no solo eso ese hombre tiene una esencia especial, simplemente en ese momento sentí que debía hacerlo mío jujujujuju – la deidad oscura mostraba un rostro excitado mientras decía esas palabras lo cual dejo a Huwa con un escalofrió al pensar que es lo que harían con su querido cuidador
- Entonces eso quiere decir que no necesitas a Naru, ¿no lo dejaras ir? – Hulner lo miro y jalando de los cabellos a Huwa lo atrajo hacia su rostro
- estas de broma pequeño, ¿Por qué habría de dejarlo ir?, su cuerpo es perfecto para mí, desde que perdí mi cuerpo necesito de otro para poder manifestarme y tocar las cosas que quiero y eso incluye el poseer a ese cuidador – esas palabras dejaron helado a Huwa que de solo pensar en que esa deidad oscura tomaría a Din por la fuerza con el cuerpo de Naru, Hulner lo aparto empujándolo al suelo y prosiguió – eres muy divertido pequeño tus reacciones son divertidas jajajaja
- Ya déjalo Hulner – lo llamo la gran deidad atrayendo la atención de la deidad oscura – se supone que hablaríamos de cómo nos repartimos a esos dos y la manera en como lo volverás mi sirviente, enfócate
- Tranquilo Enlil el pequeño no se escapara, tengo a su amigo en mi poder y el cuidador está lejos de poder ser movido si es que intenta escapar con él
- Es verdad pero no me gusta esperar, apresúrate
- Entendido, primero……. – la deidad oscura se paró y se dirigió hasta donde se encontraba Din, se puso a su lado y esta vez puso sus manos a los costados de la cabeza del mediador – es hora de hacer que se olvide de todo – el pequeño al escuchar eso se abalanzo hacia la deidad oscura para intentar impedir que lo tocase, pero fue una mala idea, Hulner lo sintió y antes de que lo tocase las plantas a su alrededor lo atraparon dejándolo inmóvil – creo que olvide decirte que este lugar obedece cualquier orden de nosotros las deidades pequeñajo
- Enlil eso fue de ayuda – las plantas se contrajeron más y más generando un dolor insoportable en el pequeño pero por ningún motivo grito o se quejó – bueno pequeño mira atentamente como los dos que más quieres se pierden frente a tus ojos jajajajajaja – las lágrimas rodaban por los ojos del guardián, la deidad oscura continuo con lo anterior y una especie de burbuja de agua se creaba alrededor de la cabeza del cuidador, la burbuja de agua comenzaba a teñirse volviéndose café luego la deidad oscura comprimió la burbuja café hasta que esta se convirtió en una gota de cristal, tomo la gota de cristal y con gran habilidad la convirtió en un collar que puso en su cuello – listo termine Enlil tu problema ha sido resuelto
- No veo ningún cambio Hulner – en ese momento el corazón de Huwa se oprimió y su semblante palideció, en ese instante en ese preciso instante se dio cuenta de que desde el principio desde su nacimiento su destino había sido trazado, comprendió que las deidades habían estado jugando con él y con todo lo que estaba en el territorio del bosque de los cedros, tan solo eran simples marionetas que los divertían en su eternidad, Naru y su aldea eran simples contenedores para las deidades oscuras, que Din era una herramienta para criar a los futuros sirvientes de las grandes deidades que era desechable y que él había nacido para darle poder a esos seres, lo entendió al ver como el cuerpo de Din se levantó y en sus ojos un vacío se hacía presente, lo entendió al sentir que el vínculo que los unía fue destruido cuando dejo de sentir el alma de su amigo, lo entendió cuando su corazón dejo de sentir esa calidez que tuvo alguna vez, lo entendió cuando vio como la deidad oscura se le acerco y de igual manera lo despojaba de todo lo que vivió junto a Din y Naru dejándolo vacío, Huwa había perdido todos sus recuerdos, una bruma reinaba en su mente no podía ver el rostro de lo que una vez habían sido lo más preciado para el
De esa manera Enlil convirtió al pequeño guardián en su sirviente y la deidad oscura se quedó para si el cuerpo de Naru volviéndolo suyo, se llevó a Din del cual no se supo más nada, ambas deidades lograron sus diferentes caprichos y al final el pequeño y sus amigos fueron la diversión de las grandes deidades y su eternidad