Temari les indicó que debían hacer, aunque mientras lo hacía hablaba muy rápido, lo poco que entendieron logró ponerlos algo nerviosos, tenían que desfilar en pasarela con la colección que ella misma diseñó, sonreír y no perder compostura, paso firme y preciso, encanto y sensualidad, al final deberían posar unos segundos y dejarse fotografiar, usar la ropa que les daba y seguir las instrucciones dadas con precisión antes de salir, las vendedoras también serían modelos femeninas y… otras cosas que según ellos no tenían importancia, tal vez debieron escuchar mejor…
-¿quién será el primero? – habló al fin la rubia llena de emoción la misma que se desvanecía al ver que nadie se ofrecía, jaloneó a su novio para que se levantara – serás tu cariño… - la voz melosa que usó les dio escalofríos a los presentes, no era un buen augurio
-eres problemática… - el pelinegro se levantó con pereza bostezando, ¿no debía ser tan malo ayudarla, o sí?
-mejor cierra tu linda boca y deja que te desvistan – sonrió la rubia mientras empujaba a su novio
-espera dijiste… des…- ni siquiera tuvo tiempo de reclamos ya que algunas de las empleadas aparecieron quitándole la parte superior de su ropa, y diciéndole cosas como “se verá bien” “necesitamos su talla” “levante los brazos” “tiene buen físico”, y otras tantas que lo ponían incómodo, tener varias manos en su cuerpo era extraño generalmente la única que lo tocaba era Temari, no tardaron en terminar y se lo llevaron a Dios sabe dónde, los demás solo lo vieron desaparecer tras una cortina mientras Temari le gritaba “ellas harán todo, no te preocupes… querido”
-Gaara puedes empezar con Kankuro – ofreció la rubia y Gaara le pidió a su hermano que se hubicara en frente de él, el pelirrojo se hallaba rodeado de pinceles y pinturas de diversos colores, sentado en el suelo de la habitación, era impresionante verlo en calma mientras preparaba sus utensilios
-Kankuro solo siéntate y relájate, haz lo que te digo – el castaño solo asintió para enseguida ser derribado por su hermanito que sin darle tiempo a reaccionar le quitó la parte superior de su vestimenta dejándolo expuesto a la alfombra rasposa
-oye ¿qué haces? – se quejó al sentir su espalda rozar con la dichosa alfombra
-silencio y no te alteres – como era su costumbre se sentó en el vientre de su “lienzo” mientras observaba con detenimiento su nuevo espacio de trabajo – Temari ¿qué color crees que estaría bien?
-mmm tal vez algo un poco brillante, algo como un fuxia estaría bien – la mujer se mordía levemente una de sus uñas, estaba bastante nerviosa analizando cada detalle y revisando su celular a cada minuto
-¿Gaara que haces? – se quejó el castaño, su hermano estaba sentado encima de él, era incómodo y de pronto una preguntita adornó su cabecita “¿acaso eso hace con todos sus modelos?”
-dije que estés callado, no protestes y relájate – en seguida el pintor inicio con su tarea sintiendo como su hermano se tensaba al sentir la fría pintura en su cuerpo
-¡pero que rayos!...mgh… ¡esto esta frio! - se quejó ante la leve risilla de los presentes – creo que a ustedes no les ira mejor – regañó el hombre en el suelo que intentaba no moverse mucho ante las frías pinceladas
-bueno Lee…- la rubia sonrió con maldad mientras lo miraba – tu irás con mis ayudantes más calificadas – de pronto dos chicas se llevaron al pelinegro mientras este algo confundido las seguía sin decir nada
- creo que estaré en sus manos señoritas – sonrió nerviosamente ante la duda de qué harían con él
-¡SUERTE LEE! – Sonrió Neji – la necesitarás – bromeó al ver que su amigo intentaba retractarse de su decisión, pero no lo dejaron
-tú no te salvas – la rubia entonces le agarró por el hombro y cuando el mencionado se giró no creyó ver a 3 chicas que lo miraban como a una presa – chicas… ya saben que hacer
-si señorita – hablaron en coro mientras tomaban de ambos brazos al pelilargo llevándoselo a un compartimento que era cubierto con algunas cortinas evitando que se viera el interior y solo se escuche los sonidos provenientes del lugar
-empezaremos… - las chicas no eran para nada tímidas, el pelilargo lo podía apreciar con facilidad, empezaron a quitarle la ropa, Neji estaba incómodo ante esa situación muchas veces evitó el contacto con las mujeres que osaban acosarlo y ahora… simplemente no podía escapar, una le hablaba con una sonrisa, otra le mostraban cintas de medir y la última algo que parecía un atuendo, ¡era un momento caótico!
-disculpen… pero si quieren que me pruebe eso… puedo hacerlo solo – intentó alejarse de ellas de la mejor forma
-claro que no, lo ayudaremos, debemos elegir el mejor – cada una complementaba a la otra, estaban tan coordinadas que hasta parecía que lo habían ensayado
-pero no creo que ustedes me… - de inmediato fue interrumpido, esas chicas… eran del tipo, como decirlo, de aquellas que aprovechaban la situación
-deje de hablar y déjenos lo demás
-pero ustedes… wa… ¿qué hacen? – se había impresionado al sentirse rodeado por las mujeres y ser desvestido con habilidad, los roces en su piel no eran accidentes, él los abía con certeza
-necesitamos tomar sus medidas…. Tiene una linda espalda – alagó una, mientras acariciaba la mencionada
-ah… no haga eso – se quejó el pelilargo enfrentándola pero enseguida sintió otra mano recorrer su brazo lentamente, delineando el contorno del mismo – espere… que…
-creo que deberíamos ver algo que denote los músculos – sonrió otra, al menos una de ellas era razonable y hasta cuidadosa, no se le había lanzado encima y por el contrario se limitaba a observarlo con detalle
-señorita creo que yo… ahh espere – no lo dejaban hablar y por el contrario lo acariciaban sin permiso por todos lados, y cabe decir que estaba sonrojado ante tanta osadía de las muchachas que al hacer su trabajo también estaban aprovechando para tocarlo sin descaro, él podía verlo en sus ojos, ellas lo deseaban y no de buena forma – puedo prepararme solo… ah
-claro que no – regañaron las mujeres
Mientras esto sucedía en aquel sitio, el menor de los Sabaku estaba centrado en su pintura, trazos sencillos y precisos, se encontraba demasiado concentrado como para poner atención… si claro, como si eso fuese posible, por el contrario Gaara escuchaba cada cosa que sucedía con Neji y se estaba enfadando
-Gaara tienes el ceño fruncido – mencionó Kankuro mientras veía a su hermano sorprenderse un poco al verse descubierto, hasta ese momento creyó estar ocultando sus emociones
-parece que Neji es demasiado sensible – se reía la rubia al escuchar los pequeños grititos y quejas de sorpresa por parte de su “cuñadito” – se queja por todo
-Temari no creo que debas decir eso – habló el castaño desde el suelo
-¿por qué? – la rubia se giró a verlos pero…
-porque Gaara, está… bueno él….- el pelirrojo se había dirigido a la cortina que los separaba a ellos de Neji y las 3 chicas, Kankuro ya sabía que su hermano sentía celos, pero no quería ver hasta donde llegaría…
-¿qué haces Gaara? – se asustó la rubia al ver al menor de ellos empezar a abrir la cortina
-esto… - el menor se adentró en medio de todo ante la sorpresa de las chicas – Neji…
- Gaara lo siento… seguro y soy muy ruidoso…- el pelilargo apenas y se fijó que su novio se acercaba a él a paso decidido, estaba concentrado disculpándose, no quería intervenir en el trabajo de Gaara – no quise molestarte – las chicas se hicieron a un lado al presentir el peligro, el pelirrojo estaba enfadado – debes regresar o Kankuro-san se enoja… - sus palabras murieron al sentir las manos del pelirrojo en su rostro, las mismas que lo acercaron al más bajo, se dejó guiar inclinándose un poco – ¿Gaara? ¿Qué…? – en medio de todo, el menor le plantó un beso en los labios, ésta acción dejó de piedra a las mujeres que hace poco estaban tocando al pelilargo, un par de cabezas asomaba en medio de las cortinas y se quedaron boquiabiertos por la reacción del pelirrojo
-…- nadie dijo nada mientras el joven pintor besaba a Neji incluso atrayéndolo a él mientras se abrazaba al cuello del más alto, Neji sonrió ante el inesperado beso y correspondió gustoso, moviendo sus labios al ritmo que Gaara le marcaba, no podía estar más contento, eso solo podía significar que el más joven estaba celoso, y de cierta forma eso le alegraba, al menos así esas mujeres dejarían de acosarlo insistentemente aunque dudaba que el par de hermanos se quedara sin hacer nada, ¿qué le importaba en ese momento?, dejó de lado al mundo entero mientras saboreaba los labios de SU novio, incluso atreviéndose a rodear la cintura del pelirrojo con uno de sus brazos, los dedos del menor se enredaron en sus cabellos haciéndole imposible separarse hasta que se lo permitieran y cuando pasó, ya estaba sin aliento, sintió al pelirrojo separarse lentamente y antes de hacerlo morderlo en el labio inferior causándole una pequeña punzada de dolor – auch… - se quejó cuando Gaara le permitió incorporarse – me mordiste… - pasó uno de sus dedos en la zona afectada, no había sangre pero dejaría una pequeña marca
-fue un castigo – el pelirrojo estaba satisfecho ya que las mujeres presentes estaban pasmadas, sonrojadas y algo confundidas, claro que el rostro del pelirrojo estaba tan apacible como siempre
-Gaara no hagas eso – se quejó la rubia que en ese momento se ganó las miradas de los presentes ya que mantenía la boca de su hermano cubierta, impidiéndole hablar y este a su vez estaba furioso intentando entrar y separarlos – eso es… vergonzoso
-qué demonios… - Kankuro al fin se había podido soltarse del agarre y tenía intenciones de mandar al demonio al pelilargo – como tu…
-Kankuro no pelees por favor – la rubia jaló a su hermano para susurrarle al oído – no hagas una escena
-cómo crees… no permitiré que esos dos…
-ya lo sé pero… apenas y acabas de reconciliarte con Gaara, no te metas en más líos, no lo arruines
-no me digas que ya aceptaste lo de esos dos
-claro que no… pero después hablaremos de eso – la rubia se irguió ante la sorpresa de todos, y sonrió fingiendo que nada pasó – bueno creo que les debo aclarar algo… niñas… Neji ya tiene dueño así que no se sobrepasen
-¿dueño? – susurraron las mencionadas, claro que tenía dueño y éste acababa de demostrarles que no quería que tocaran las cosas de su propiedad, miraron el rostro apacible del pintor que las miraba escalofriantemente y al más alto aun tocando levemente su labio
-y debo decirles que Gaara es celoso – esta vez Kankuro habló con fastidio, chasqueó la lengua y salió de ahí en seguida, no quería volver a pelear con Gaara y si seguía ahí se metería en un gran hoyo negro
-creo que eso ya quedó claro – se burló la rubia mientras veía el sonrojo en el rostro del más alto, al menos él si se sentía avergonzado por el pequeño espectáculo
-no quiero que lo toquen demasiado – el pelirrojo asustó a las chicas al ponerse en frente de ellas – él es mío – declaró antes de girarse hacia su novio – no dejes que se sobrepasen – ordenó
-Gaara… ¿comiste duraznos? – de pronto todas las miradas se posaron en la pareja, ¡que forma de cambiar el tema!
-si lo hice –
-pero no te gustan
-¿cómo sabe que Gaara-san comió duraznos? – preguntó una de las chicas con ingenuidad
-sus labios tienen un rastro leve – respondió el más alto con naturalidad, mientras las demás se sonrojaban – no deberías comer algo que no te guste
-a ti te gustan, quise intentarlo, además es agradable combinar el sabor en el beso
-pero que dices…- sonrió el mayor – no hagas cosas como esa, si no te gusta está bien que no las comas
-pero quise hacerlo, el postre estaba delicioso
-creo que quiero probarlo también – ambos parecían no darse cuenta que no estaban solos, demostrando a las presentes lo bien que se llevaban y a su vez el cuidado meticuloso que el pelilargo tenía con el más joven
-bueno – interrumpió la rubia – niñas pueden seguir con su trabajo… pero no quiero que se salgan del camino profesional, ya quedó claro que ellos son novios
-si… si señorita – las chicas estaban muy tensas
-y para que mi hermanito no se enfade, tendré que advertirles que… si llegan a sobrepasarse tendré que despedirlas, no quiero problemas así que permanezcan al margen de su profesionalismo
-si señorita
-ahora pueden continuar – ordenó mientras suspiraba
-si señorita
-estoy en sus manos – sonrió el mayor más tranquilo, aunque le dolía el labio no se quejó de nada
-las estaré escuchando – advirtió el menor antes de darle un pequeño beso al mayor y retirarse
-bueno señoritas creo que se ganaron un enemigo – se burló Temari mientras se retiraba dejando al grupo en sus labores
Afuera y luego de que Gaara terminara con la pintura en el pecho y parte del rostro de Kankuro ambos hermanos conversaron en voz baja alejándose del grupo, “en verdad que ya los aceptaste” alrededor se cambiaban los puestos ya que Neji se veía arrastrado por las mujeres que se habían llevado a Shikamaru y él a su vez por las que atendían a Neji con anterioridad “claro que no Kankuro, no me gusta esa relación pero…”, la rubia se notaba dubitativa “pero nada Temari” la regañó el castaño “pero solo mira a Gaara… está feliz”, el más joven siguió a Neji, seguramente para brindarles la misma advertencia que a las otras, “me dijiste que solo era uno más de sus caprichos pero… se ven más unidos que antes” se quejó el castaño “ya se… pero… hace cuanto que no ves a Gaara tan entusiasmado, extraño al pequeño Gaara, el que solía sonreír y creo que de a poco Neji lo está regresando a la normalidad” Temari se rio bajito al escuchar que las jovencitas se disculpaban con Gaara “Temari, yo no permitiré eso”, el castaño chasqueó al lengua “¿harás algo?” la rubia suponía que el buen comportamiento de Kankuro no duraría mucho “claro que sí, aunque no se todavía que, no puedo arriesgarme a pelear con Gaara por ahora” por último y antes de irse a preparar sus vestuarios Temari le aconsejó “solo… no te excedas”
Los gritos de Lee se escucharon de pronto mientras salía del cuarto en el que estaba anteriormente, las chicas lo siguieron y todos los demás dejaron sus actividades para averiguar la causa del pequeño alboroto
-jamás, ¡no lo haré! – se quejó el pelinegro que… se veía completamente diferente
-¿Lee?… ¿qué te hicieron? – Neji se acercó a su amigo analizándolo bien
-¿a qué te refieres? – se quejó Lee al ver a su amigo demasiado sorprendido
-te ves… diferente, demasiado diferente – y no era para menos, el joven traía un corte de cabello moderno un poco largo el cual cubría uno de sus ojos y ocultaba con efectividad sus cejas marcadas – ya no te pareces a Gai-sensei
-¿de verdad?, necesito verme al espejo – ya sabía que por alguna razón esas chicas le habían prohibido verse al espejo, se acercó a uno y se quedó mirándose sin reconocerse – me veo… me veo RIDÍCULO… ESTE NO SOY YO – se quejó Lee mientras los demás pensaban que estaba loco, como podía comprar su aspecto actual con el anterior, ¡eso sí era ridículo!
-… - el pelilargo trató de no reírse pero le fallaron sus esfuerzos y estalló en carcajadas – te ves… ridículamente… normal, no puedo creerlo – el mayor trataba de calmarse sin lograrlo y Lee se veía indignado
-cómo pudieron… se acabó… me quitaré esto – intentó sacarse la peluca pero se lo impidieron
-no te atrevas Lee – amenazó Temari apuntándole con uno de sus dedos – aceptaste ayudarme y lo harás, además te ves más atractivo que antes, ¿qué más quieres?
-acaso no entiende que mi apariencia refleja mi personalidad, es lo que soy y no renunciaré a eso – se trató de explicar pero al parecer la mujer enfrente de él no entendía sus razones
-tranquilo Lee – Neji se puso a su lado y pasó uno de sus brazos por el hombro del otro – solo es por una noche, sopórtalo hasta que termine
-¿cómo puedes quejarte del aspecto que te dieron?, ¡te ves genial así! – claro que se veía genial, tenía un aspecto fresco y moderno
-Temari deja al chico en paz, no entenderías el significado de su apariencia – la regañó su novio apartándola del lugar
-¿y tú si lo entiendes? – ¿acaso todos estaban locos por ahí?
-no totalmente pero al parecer Neji si – regresaron a verlos y Neji estaba tratando de convencer a su amigo, mientras el otro negaba insistentemente
-sabes que Gai-sensei es como mi padre, esto es un insulto a su memoria – se quejó el pelinegro y ahora todos entendían el berrinche o por lo menos trataban de hacerlo
-tranquilo Lee, sabes que Gai-sensei siempre decía que debemos mantener nuestra palabra, y no puedes fallarle a Temari-san
-tienes razón
-además así ocultaras de manera eficiente tu identidad, es lo mejor ¿no lo crees? – el pelinegro suspiró mientras asentía con la cabeza – debes pensar bien en las ventajas
-bien… creo que lo haré – se animó Lee pero…- pero lo que ellas quieren hacerme… eso si ¡jamás!
-¡¡es necesario hacerlo!! – se quejaron las jovencitas – Temari-san… el joven Lee no quiere hacerlo
-¿cómo qué no? – en seguida la rubia se alejó de Shikamaru para colocarse e imponer su autoridad
-¿hacer qué? – Neji estaba confundido, pocas veces veía el pánico en el rostro de Lee y ahora estaba tan nervioso que hasta una gota de sudor se deslizaba por su cien
-depilarse las piernas – aquellas palabras salidas de la garganta de Temari retumbaron en el silencio que se formó
-JAMÁS – gritaron los hombre allí involucrados Neji, Lee y Shikamaru
-es primordial que lo hagan, es cuestión de estética – la rubia se mostraba autoritaria y serena, no estaba dispuesta a aceptar un no
-eso no formaba parte del trato – se quejó Shikamaru perdiendo su habitual pasividad
-pero lo harán
-claro que no
-claro que lo harás cariñito
-usted no se quejará Kankuro-san – preguntó Lee al ver al mencionado tan tranquilo mientras estaba sentado al lado de su hermano menor, comiendo algo que parecía ser dangos
-no me metan en eso – habló mientras degustaba uno de los dulces
-pero esa depilación es dolorosa, ¿en verdad no le importa?
-a mí no me harán eso – respondió quitándole un dango a su hermano, el mismo que le quitó otro a él, y empezaron una pelea infantil, era asombroso ver tan relajado a ese par
-¿por qué? – insistió Lee
-porque Kankuro no tiene vello en las piernas – respondió Gaara comiéndose el último dulce del plato de su hermano
-tiene suerte Kankuro-san – se quejó Lee con pequeñas lágrimas fingidas
-la tengo- respondió Kankuro pensando que por lo menos algo bueno tenía el ser doncel, era una de las pocas características distintivas que su cuerpo mostraba y estaba agradecido porque seguramente los 3 sufrirían con ello
Gaara se mantuvo callado durante todo el tiempo en que Temari discutió con los involucrados hasta que terminó obligándolos a aceptar, al amenazarlos con cosas diferentes “no dejaré que Gaara salga contigo por un mes” para Neji, “Shikamaru te haré un escándalo en la oficina por haber faltado a nuestra última cita” para Shikamaru y un “te haré un corte de cabello casual” para Lee, muchas otras amenazas se incluyeron, para al final resignarse a soportar la inminente tortura, cada uno entró en la habitación y la espera era eterna, todos fueron parte de eso y claro que los gritos no se hicieron esperar, en realidad debía ser doloroso, al menos eso pensaba Kankuro, aunque de cierta manera estaba satisfecho con ver el sufrimiento en el pelilargo de nombre Neji
Shikamaru y Lee pasaron por las manos de Gaara que con entusiasmo los usó como lienzo, fascinado porque cada uno era diferente, su respiración cambiaba de intensidad, el color de su piel variaba en tonalidades, las formas de sus músculos le daban mayor dificultad de acoplarse y al final estaba Neji que estaba siendo asesinado por las miradas de aquel par de hermanos a los que no les causo gracia el hecho de que Gaara estuviera sentado encima de él
-¿Gaara de verdad quieres que Himawari sea tu pequeña estudiante? – la pareja conversaba con calma mientras estaban terminando con su trabajo
-me encantaría, sabes… me gusta pasarle a alguien más todas las cosas que mi tío Yashamaru me compartió a mí – el más joven estaba algo emocionado por ello
-entonces ¿está bien que le avise a Hinata sobre eso?
-debes hacerlo
-gracias Gaara
-no tienes por qué agradecer – el más joven se inclinó hasta besar al pelilargo con ternura, sus hermanos estaban a punto de separarlos cuando Lee acudió en su ayuda
-Temari-san, ¿está segura de que solo con esta pintura nos cubriremos totalmente? – les impidió acercarse a la parejita, incluso interrumpiendo su campo de visión
-creo que sí
-Temari sabes que necesito mantener una imagen intacta en la empresa – al parecer Kankuro estaba más preocupado por eso que lo demás, al menos por el momento
-ya pensaré en algo -
Al final del día todos estaban listos, se decidieron a llevar antifaces para estar completamente seguros que nadie los reconocería, ¡era perfecto!
Los nervios no se hicieron esperar y justo antes de salir a escena se les ocurrió la brillante idea de espiar a los asistentes, no eran cientos pero si eran muchos y estaban alrededor de la pasarela montada en la tienda, unos veinte metros de caminata no eran la gran cosa pero… ellos eran principiantes y no tenían idea de que debían hacer, el único que hacia algo parecido era Lee, en los concursos de fisicoculturismo, pero Temari le había dicho que no era cuestión de mostrar su musculatura y por el contrario permanecer relajado y mostrar naturalidad en sus movimientos, demasiado difícil para hacerlo bien y estaban arrepintiéndose de hacerlo, además nunca escucharon con atención todo y eso les trajo problemas
-¿qué tengo que hacer qué? – el primero en preguntar fue Shikamaru
-te lo dije ya, caminas con tranquilidad y en medio de la pasarela te desprendes de la parte superior del atuendo, solo tira de la tela con cuidado, se zafará de inmediato – le mostraba una parte del atuendo largo que debía llevar – cuando llegues al final posa un poco, mantente sereno y con mirada fuerte, después regresa y a la mitad de nuevo te detienes, los miras y te quitas la parte inferior
-me quedaré en ropa interior entonces – ahora tenía un pequeño tic en el ojo izquierdo, cuando le dijeron algo de eso debió prestar más atención
-ese es el punto Shika…- suspiró la mujer – solo haz lo que te digo, lo mismo va para ustedes – a cada uno le dio instrucciones básicas y luego a sus chicas
-Y yo Temari-san – una castaña muy conocida había sido incluida en el desfile, había sido mala idea pasar a ver como estaban sus amigos, al final la incluyeron también y estaba muy avergonzada – también tendré que quedarme en ropa interior
-claro Ten-ten eres muy hermosa, te adoraran, solo ten confianza
-está bien, lo haré pero… espero no caerme
-si quieres puedes Salir sin tacones, será más fácil
-gracias, aceptaré hacerlo así, no me llevo bien con los tacones y menos cuando estoy nerviosa-
La gran hora llegó y cada uno estaba más o menos listo, Gaara también estaría presente ya que él fue el artista corporal de cada modelo, se arregló con un traje hecho por su hermana y mostró con orgullo aquel tatuaje distintivo que adornaba su frente, el primero fue Shikamaru, caminar en la pasarela era difícil ya que tenía todas las miradas sobre si, las luces de las cámaras al fotografiarlo podían llegar a ser muy molestas, al final solo se quedó parado mirando a los presentes y lleno de nervios porque alguien lo reconociera, pero al parecer no fue así y al regresar suspiró aliviado hasta que “corre necesito que te cambies para la siguiente ronda” de verdad ¡no había escuchado nada de eso!, y estaba ahí siendo apresurado por las demás asistentes y casi siendo despojado de toda la ropa de un solo tirón, aunque solo estaba usando bóxer, ¡demonios! eso si era vergonzoso, Lee fue el siguiente, caminó como en los desfiles en los que participó y al final exhibió sus músculos con algo de disimulo, las costumbres no se cambiaban de un día para otro, sonriendo satisfecho al ver la atención sobre sí, disfrutaba la impresión que daba ante los demás, fue fácil para él mantener la compostura y la confianza de despojarse de todo lo que llevaba, para al final mostrar su abdomen marcado y una ropa interior algo ajustada, Ten-ten salió nerviosa caminando despacio y respirando profundo apara agarrar confianza, no podía defraudar a su amiga, al desprenderse de la primera prenda sus mejillas quedaron rojas dándole un toque encantador, al final fue casi cegada por los flashes pero sonrió tímidamente, se desprendió de la última prenda con seguridad ya que nadie la reconoció o al menos eso esperaba, vio a un par de personas que asistieron a la exposición del pelirrojo pero ninguna le prestó la suficiente atención ¡el disfraz era simplemente perfecto!, era el turno de Neji y Gaara lo besó con suavidad para desearle buena suerte, claro que a Temari no le hizo gracia y terminó empujando a Neji que con brusquedad, él apareció en la pasarela algo aturdido pero caminó con seguridad por el sendero blanco que se mostraba, no sonrió para nada y su cabello largo atado en una coleta alta ondeaba a cada paso, dándole un toque de misterio y salvajismo, al desprenderse de cada prenda fascinó a los asistentes, el poderío se denotaba en su cuerpo y cada musculo firme se mostraba al deslizar la tela, muchos pensaron que era un profesional y lo fotografiaban insistentemente, los flashes le molestaban y tuvo que cubrirse los ojos levemente, aunque no fue su intención, la pose fue extraordinaria dándole un aire de espadachín que los espectadores admiraron y aplaudieron, al regresar Temari lo abrazó con fuerza “lo hiciste estupendo, te adoraron, te compensaré después”, Kankuro fue el último y Gaara le brindó apoyo “suerte Kankuro, sonríe al final, te sentará bien” sugirió antes de dejarlo salir, el hombre que se mostró en la pasarela sorprendió a todos, ya que era una figura mixta, un pequeño desfase entre masculinidad y algo de delicadeza, facciones finas pero a su vez marcadas en ciertas zonas, musculatura desarrollada por el ejercicio pero sin sobrepasar la dureza, era un ser interesante ante los presentes y fascinó con sus seguridad al caminar, bueno casi, ya que Kankuro jamás pensó ver a su socio sentado en una de las sillas, el Akazuna estaba ahí aplaudiendo mirándolo como si lo hubiese reconocido “qué demonios hacía ahí”, siguiendo la sugerencia de su hermanito sonrió de medio lado y los aplausos no se hicieron esperar, había funcionado muy bien después de todo él también tenía su encanto, al regresar tomó a su hermana y la sacó de allí “Sasori Akazuna está afuera, ¿tú lo invitaste?”, su hermana se sorprendió “no pensé que asistiría, es uno de los empresarios a los que invité, en verdad lo siento” pero ni eso evitó que Kankuro saliera de nuevo a modelar, se suponía que nadie lo reconocería y esa era su esperanza, porque si no… sería un desastre
Para terminar todos los modelos se presentaron junto con la creadora y el pintor, los aplausos llenaron el lugar y más cuando se mencionó que Gaara había sido el artista autor de tan bellos trazos en los cuerpos de los modelos, al final fue un verdadero éxito y la pesadilla de ellos se había acabado…. O eso creyeron
-Así que eras modelo Kankuro – susurró Sasori para sí mientras conducía su auto hacia su casa – te veías adorable cuando sonreías, creo que tengo algo con lo que molestarte
Por otro lado estaba un peliblanco que unos días después del desfile vio algo interesante en una revista de curiosidades, la fotografía de un pelilargo que logró reconocer como Neji se mostraba en una de las páginas de la revista y eso… lo hizo sonreír “creo que te encontré, pero por ahora no te haré nada, aunque… ya se dónde estas”
Temari le había prometido a Gaara dejar de llamarlo todos los días y eso lo complació demasiado, ahora podía relajarse mientras realizaba sus labores cotidianas, Neji solía estar con él la mayoría del tiempo y cada vez se acostumbraba más a su presencia, pero había algo más que le estaba pasando y comenzaba a inquietarlo, sus sueños estaban cambiando de a poco, solía soñar con su novio en ciertas ocasiones, cada uno de ellos era diferente, pero en los últimos días no solo soñaba con besarlo sino que ahora podía llegar incluso a sentir la piel del pecho de Neji en sus sueños, la necesidad de tocarlo, besarlo y mantenerlo cerca crecía más y más, hasta empezaba a dudar sobre su buen juicio, la única persona con la que podía hablar de eso sin que se alterara era Sai, el cual le había respondido de manera simple “Gaara lo que te pasa es demasiado obvio, incluso tú deberías saberlo… lo que quieres es ir más allá que unos simples besos y caricias… Gaara tú quieres poseer el cuerpo de Neji, en otras palabras… necesitas sexo con él”, si se ponía a analizar un poco la situación, esa era la verdad, el deseaba a Neji de una manera carnal, a pesar de no tener demasiado tiempo juntos, él sentía una atracción demasiado fuerte por el pelilargo, algo que lo incitaba a seguir y no detenerse, pero… ¿cómo hacérselo saber?
Ese día Neji llegó temprano ya que algunas clases se habían suspendido por falta de alumnos, la epidemia de gripe les había llegado y muchos faltaron, según le había explicado Neji a todos los unieron en un solo grupo liderado por uno de los instructores más antiguos
Gaara se quedó viendo la tranquilidad de Neji al jugar con los pequeños felinos, en realidad era perfecto, su cuerpo, su rostro, sus manos, el pelirrojo podía quedarse viéndolo por un largo tiempo, pero claro que Neji no lo dejaría, por el contrario solía acercársele y abrazarlo por la espalda, platicaban de diversos temas y cada día terminaban recostados en el sillón después de la cena
Pero Gaara no estaba dispuesto a seguir el plan, al menos ese día no, tenía algo que comprobar y Neji se convertiría en su presa
-¿te sucede algo Gaara? – el mayor se había fijado en la distracción del artista
-tengo algunas cosas que resolver – Gaara estaba decidido a comprobar si su novio también sentía la misma atracción de la cual él era victima
-¿te puedo ayudar? – pobre ingenuo, no sabía en que se estaba metiendo
-claro – ¡era la oportunidad perfecta!
-entonces dime que hacer – se hallaban sentados en el piso apoyados en el sillón cercano
-solo quédate quieto – ordenó Gaara y enseguida se sentó encima de las piernas del mayor, de tal forma que sus propias piernas quedaron a cada lado de la cintura de Neji
-¿qué haces?... – se sonrojó al tener a su joven novio tan cerca, no podía evitar sentirse atraído por el pelirrojo y desear tenerlo solo para él, sus pensamientos indecentes habían sido calmados debido al ejercicio diario y duchas frías pero tenerlo tan cerca era demasiado para el pobre Neji – Gaara… e-espera un momento ¿Qué vas a hacer?
-quiero besarte, eso es todo – con un suave toque empezó un ósculo tierno, el cual fue profundizado con lentitud, ambos solían disfrutar del romanticismo que creaban entre ellos pero este día sería algo diferente, Neji lo atrajo hacia su cuerpo con ayuda de una de sus manos, la misma que se colocaba en la cintura del más joven, Gaara podía sentir claramente la extremidad de su novio acariciar su espalada con cariño, le gustaba pero… necesitaba un poco más, se aferró al otro pasando sus brazos por el cuello del más alto y separó sus labios para aceptar la lengua del otro que se encontraba lamiendo su labio superior, suspiró al sentir la intromisión, era tan dulce, siempre era tratado con amor como si en algún momento fuera a romperse pero eso no iba a pasar, jugó con picardía explorando cada rincón ya que con el pasar de los días se había vuelto experto en seguirle el ritmo a su acompañante, tuvo mucha práctica después de todo, Neji solía ser tierno pero siempre lo mantenía dominado eso era una rara combinación, enredó sus dedos en las largas hebras y fue deslizándolos con delicadeza, mordió a su acompañante quien soltó un suspiro profundo ante la acción
-me dejarás… una marca – el aire les faltó por un momento y se separaron para recuperarse, el brillo en los ojos del menor eran una escena incitante para el mayor que reanudó el beso con necesidad, deslizó una de sus manos con delicadeza recorriendo toda la espalda del menor quien se estremeció levemente, su piel estaba demasiado sensible, aferrándose fuertemente de la camiseta de Neji, apretándolo más con sus piernas esas acciones eran instintivas, su cuerpo se lo pedía
-eso es lo… que quiero hacer – respondió entrecortadamente mientras deslizaba una de sus manos por el pecho del mayor que se tensó ligeramente cuando uno de los dedos del artista rozó uno de sus pezones
-¿para decirles a todos… que soy tuyo? – sonrió Neji mientras le brindaba pequeños besos entre cada palabra – creo que me gusta la idea – susurró en el oído del menor que se estremeció – ¿puedo hacer lo mismo?
-puedes – sintió como el más alto descendía por su mejilla dejando un rastro de besos pequeños hasta llegar a su cuello el cual lamió levemente y eso le envió una corriente eléctrica a su vientre, era la primera vez que el más alto hacía algo así sin dudar ni un poco, hubo ocasiones en los parecía querer hacerlo pero se detenía antes de empezar, ahora se estaba dejando llevar, una nueva lamida en su cuello lo hizo gemir bajito y apretar sus dedos en los brazos ajenos, pero de nuevo Neji se detuvo de improvisto – ¿por qué te detienes?
-porque yo… - Gaara no le dio tiempo a responder y le robó un beso profundo metiendo su lengua sin descaro, mientras trataba de acercarse más y sentir cada parte del otro, el calor emitido por cada uno, el corazón acelerado en su pecho, y el cosquilleo en su vientre bajo, se sentía más caliente de lo normal y eso era agradable, no sabían cuánto tiempo pasaron besándose pero como era costumbre el más alto lo detuvo, ¿por qué hacía siempre lo mismo? – Gaara… debemos parar
-¿por qué? – estaba comenzando a frustrarse ante tanto recato
-porque yo… no creo poder resistirme – confesó cerrando sus ojos, la vergüenza lo invadía y no quería ver la reacción del más joven, “¿acaso pensará que soy un pervertido o algo así?”
-Neji… quiero que sigas, ¡hazlo! – el pelirrojo sonrió levemente al entender que no era el único sintiéndose de esa manera
-pero Gaara…- el castaño abrió los ojos sorprendido pero sus sentido común le impedía seguir, intentó alejarlo con delicadeza pero solo logró que sus intimidades se rozaran
-aahh… Ne… Neji – el menor tembló por el pequeño contacto, de su garganta salió un gemido leve y se aferró al mayor con fuerza, ese pequeño movimiento le mandó un cosquilleo por todo el cuerpo
-eso fue… Gaara tu… – el mayor había sentido algo diferente en ese pequeño roce, el gemido que escuchó lo tentó a seguir y cuando sintió un pequeño bulto rozarse con su propio cuerpo entendió que su novio estaba… excitado
-Neji… yo… - no se separó ni un momento, estaba avergonzado, sus cuerpo se sentía caliente y su parte baja había comenzado a reaccionar – estoy…
-te duele – la voz de Neji se escuchaba profunda – te has excitado Gaara – susurró en el oído contrario, al diablo su sentido común, no podía controlarse, ese dulce sonido le mostraba que su novio le correspondía
-yo lo siento – se disculpó escondiendo su rostro en el cuello del mayor, sin intención alguna su aliento rozaba la piel de Neji
- me haré responsable – aunque quisiera, ya no podía controlarse, el calor en su cuello estaba comenzando a causarle algunas reacciones que había estado evitando, su temperatura estaba subiendo y ahora… – te aliviaré
-¿lo harás? – el pelirrojo jadeó al sentir una de las manos del mayor deslizarse en su pecho encima de su ropa y bajar con lentitud rozando sus pezones- ah… mgh… Neji
-confía en mi Gaara, solo… quiero aliviarte – con cuidado deslizó sus dedos por debajo de la ropa hasta acariciar la piel delicada del pintor que suspiró bajito sin decir nada – recuerdas que te dije… que te enseñaría algo, en el momento indicado
-si lo recuerdo – Gaara se estremeció al sentir los dedos del mayor deslizándose por su piel y descender lentamente
-ya no puedo detenerme – susurró al oído del menor para besarlo con cuidado, mientras uno de sus dedos acariciaba la piel que se unía al pantalón del artista, la recorrió con lentitud para ingresar uno de sus dedos y empezar a deslizarlo hacia abajo, desabrochando el botón que impedía su paso…
-no te atrevas a detenerte – su voz estaba tomando un tono más profundo, su exigencia fue tomada en cuenta, disfrutaba del pequeño roce en su vientre bajo mientras escondía su rostro en el pecho del más alto y apretaba su agarre en los hombros ajenos – ahh… Neji – se tensó al sentir los dedos de su novio deslizarse entre sus prendas, para ser específicos encima de su ropa interior
-Gaara… si quieres que me detenga… solo debes decirme – el mayor aún tenía dudas en lo que estaba haciendo ¿estaba bien seguir con eso?, sus dedos acariciaban la intimidad del otro, con movimientos suaves de arriba abajo, podía sentir la erección del más joven crecer poco a poco mientras escuchaba los gemidos bajos que salían de los labios ajenos, estaba perdiendo el control y sentía su propia intimidad creciendo entre sus prendas – en cualquier momento
-me siento… extraño – confesó en un susurro, su respiración estaba agitándose poco a poco, la calidez de la mano de Neji y los movimientos lentos lo estaban torturando
-Gaara… mgh…- sin poder evitarlo siguió con su labor, arriesgándose a dejar a su otra mano explorar, metió sus dedos desocupados por debajo de la camiseta del menor, deslizándolos hacia arriba, había soñado con tocar la piel clara de Gaara y no dudó en hacerlo, los omóplatos, su columna, su cintura – si quieres que pare… dilo – insistió con la esperanza que lo detuviera, tenía miedo a cometer una locura, pero no hubo queja alguna y por el contrario el pelirrojo levantó sus rostro mostrándole un sonrojo en sus mejillas y sus ojos cerrados, la respiración entrecortada… lo besó, lo hizo con necesidad, jugando con la lengua contraria y logrando que éste se aferrara a su cuello
- se siente bien…ah… – jadeó el artista entre el beso, no podía evitarlo su voz salía sin permiso, sentía sus mejillas arderle y su corazón querer salirse
- entonces seguiré – el tono profundo que el pelilargo usaba era como música para el pelirrojo que cada vez se sentía más mareado, era una experiencia nueva, después de todo el jamás se había tocado a sí mismo, nunca tuvo esa clase de necesidades a pesar de que tenía suficiente noción acerca de esos temas, sus pensamientos volaban en ese instante pero algo lo hizo volver a la realidad… un dedo se aventuró a acariciar su piel, en esa zona que jamás ningún extraño había llegado a tocar
- mgh…. – Neji se deleitaba con cada expresión del menor, ahora mismo se había mordido el labio inferior y cerrado los ojos, coló un par de dedos más en el bóxer que deslizó hacia abajo, sentir el vello púbico del menor lo hizo jadear, solo un poco más abajo y… - Neji… ah – introdujo su mano acariciando la piel sensible, el miembro del más joven estaba completamente despierto y él se dio el lujo de deslizar sus dedos rodeando aquella zona tan íntima y personal, podía ver los ojos de Gaara, cristalinos y semi-abiertos, sus labios separados debido a la respiración agitada, Neji se relamió los labios ante la escena erótica que se mostraba y lo besó acallando los gemidos que ahora emitía debido a que empezó un suave vaivén en el miembro de Gaara, su mano libre ascendió por el abdomen, apreciando aquella piel de porcelana y memorizando el recorrido, las líneas formadas por las costillas las delineo con cuidado y al final rozó los pezones contrarios, Gaara tembló ligeramente y arqueó su espalda separándose para poder respirar – aahh… Ne… Neji – su nombre pronunciado con tanta lascivia, su respiración también estaba agitada, sentía su miembro ser apresado por el pantalón pero ahora solo se concentraba en hacer disfrutar al menor, el agarre de Gaara en sus hombros era un poco doloroso, la presión que ejercía debido a la desesperación era intensa pero no le importaba, jugó con el botón entre sus dedos al mismo tiempo que su mano masturbaba el miembro que empezaba a gotear, haciendo que el sonido morboso se escuchara en la habitación, Gaara gemía ante tantas sensaciones dejando caer ligeramente su cabeza hacia atrás y Neji no desaprovechó, se inclinó para besar el cuello expuesto, lo lamió con lentitud, succionó levemente para no dejar marca alguna, recorrió toda la extensión dejando un camino de saliva y mordió con cuidado el mentón del pelirrojo, ascendió y tomó posesión de esos labios que ahora se veían rojos – Neji… yo… - las caderas del menor se movían en sentido contrario del vaivén impuesto por el mayor, lo hacía para intimar aún más el contacto
-Gaara… yo te amo…mgh…- usó su pulgar para apretar la punta y el pelirrojo soltó un gemido sonoro y profundo, los temblores ligeros se intensificaron y el mayor aumentó el ritmo de su mano, masturbando a su novio con más rapidez a la vez que jugaba con el otro pezón desatendido hasta ese momento, lo pellizcó con suavidad y besó el cuello, todo al mismo tiempo
-Neji…. A-algo… vi…viene… yo – trató de advertir que algo venía, se sentía desesperado, muchas sensaciones en su piel, arqueó su espalda y sintió todo su cuerpo ser inundado por corrientes eléctricas, gritó con fuerza al sentirse liberado, se aferró con fuerza a los hombros ajenos y dejó que el calor abandonara su miembro y por un momento su mente quedó en blanco, todo en su mundo se borró, parecía que alcanzó el cielo y caía estrepitosamente, pero en realidad se apoyó en el cuerpo de Neji quién lo abrazó con dulzura, no podía respirar con normalidad y al parecer su acompañante no estaba en mejor situación, podía escuchar el jadeo contrario y pequeños gruñidos guturales, la mano de Neji aún no lo liberaba y él temblaba, el orgasmo fue extraordinario, jamás experimentó tal sensación, cerró sus ojos y descansó en el pecho de su novio
-¿E-estás… bien? – la voz profunda de Neji salió con delicadeza mientras retiraba su mano que ahora estaba manchada de aquella sustancia viscosa, lo que acababan de hacer… era demasiado excitante
-s-si… lo… estoy – una leve respuesta por parte del pelirrojo, no tenía fuerzas para nada más, solo se quedó quieto
- descansa… me encargaré… de lo demás – Neji besó los cabellos rojizos, mientras recomponía las ropas del menor, se separó un poco para tener la suficiente libertad para levantarse cargando al más joven y depositarlo en el sofá, le brindó un pequeño beso en los labios y le sonrió, estaba a punto de irse cuando una mano temblorosa lo detuvo
-¿a dónde vas? – le reprochó el pequeño
- iré a limpiarme… y traeré algo para… limpiarte también – sonrió levemente al notar el sonrojo del más joven – no tardaré – se alejó, dejando el sonido de sus pasos que evidenciaban su caminata hacia el baño
- no tardes – susurró antes de cerrar sus ojos, estaba cansado y sin pensarlo dejó que el sueño lo invadiera y reposó con tranquilidad
-mgh… acabo de… - en el baño estaba el pelilargo, aún estaba agitado, no creía lo que acababa de suceder – debo… mgh… - había un pequeño detalle y es que él no había terminado, tenía su erección aprisionada en el pantalón, se sentó en el suelo y vio su mano manchada por la esencia de su novio, zafó sus propias prendas y usando esa misma mano se masturbó, sus jadeos retumbaban en el baño, trató de acallarlos pero le fue una tarea difícil, necesitaba correrse con urgencia, todas las cosas que apenas acabó de hacer lo tenían demasiado ansioso, sentir la piel de Gaara, el miembro goteante entre sus dedos, los gemidos sonoros, el rostro sonrojado… todo eso, Neji se vino a los pocos segundos soltando un gruñido profundo, aliviando toda su tensión, se liberó de manera grata y suspiró profundamente, no había podido continuar con lo que su mente planeaba hacer, no quería dañar a la persona más importante que tenía y sabía muy bien que si en ese instante no se detenía terminaría perdiendo el control y sus instintos primitivos lo hubiesen invadido, no se hubiese perdonado si dañaba a Gaara por su falta de autocontrol, bastaba con que el pelirrojo lo hubiese disfrutado, estaba satisfecho, no pedía más
Se limpió rápidamente evitando dejar demasiadas evidencias y fue directamente hacia la sala en donde encontró a su joven novio dormido, con respiración calma y sus ojos cerrados, se veía tan tranquilo y eso lo alivió, al menos no había la posibilidad de que lo hubiese escuchado en el baño, se encargó de limpiar también al más joven ya que pequeñas gotas traviesas se habían escapado y posado en las prendas, se quedó a su lado, admirándolo sin decir nada, en verdad amaba al artista, lo amaba demasiado… esperaba que nadie se lo arrebatara y que al fin la vida dejara de darle malas jugadas… rogaba porque esa paz que sentía durara por un largo tiempo
Continuará…………