Llegó la hora acordada y Sasuke llegó a la casa de Naruto con unos pantalones negros, una playera blanca, un tenis blanco y un chaleco café. Naruto, tenía unos pantalones entubados café, una camisa blanca y unos zapatos blancos. Sasuke se sonrojo un poco al ver a Naruto tan hot :v, pero no pasó a más, los dos fueron al cine y vieron una película de miedo x), salieron del cine y decidieron dar una vuelta. Todo iba muy bien, llegaron a un parque y se sentaron a platicar ahí.
- Naruto, yo… agradezco que hayas venido conmigo –dijo Sasuke volteando a ver hacia otro lado-.
- Está bien Sasuke, de todos modos hoy no tenía planes y quería salir con alg… -Sasuke lo interrumpe con un beso en los labios- N/A: ¡Kyyyyyyyyyaaaaaa! xD.
- -Separándose de Naruto- Naruto… yo… siento algo por ti pero no sé qué es… es como si me… me gustaras.
- Sasu… Sasuke… -suspirando-, lo siento, pero nosotros no podemos ser nada –recordando los acontecimientos de hace algunos años-.
- ¿Por qué Naruto? ¿por qué somos hombres? –levantándose-.
- No Sasuke… es otra razón de la cual no puedo hablar contigo ¿está bien? –Dijo Naru alzando la mirada para ver a Sasuke-.
- ¿Por qué? ¿Te gusta alguien más o algo así?
- No, tranquilo. Es sólo que…
- ¡Cállate! Tú y tu hermano son iguales, por algo mi hermano odia al tuyo, ahora lo entiendo –dijo Sasuke sin pensarlo- ¡Se lo merecen!
- ¿¡De qué estás hablando!? Tú ni siquiera sabes nada, me culpaste de algo de lo cual yo era inocente, me tuve que ir por años por tu maldita culpa, no sabes cuánto te odio y para que te quede claro lo que siento por ti escucha bien lo que te diré: ¡ASCO,DESPRECIO Y ODIO! Te detesto, porque por querer salvarte a ti, me eché a perder a mí, quédate con tus tonterías yo no te necesito –Dijo Naruto sin pensarlo y se marchó caminando rápido-.
- P… ¿Pero de qué estás hablando? ¡Naruto! ¡Ven para acá!
- Olvídalo, Sasuke. Olvida todo, dejemos por la paz esto, yo tampoco quiero recordar –le gritó Naruto desde un poco lejos sin voltear a verlo.
A unos cuantas calles de ahí se encontraba un azabache riendo con un pelirrojo. Se habían citado para reunirse los dos y la estaban pasando muy bien. Ya iban de camino a casa después de estar fuera todo el día cuando el azabache se percató de un rubio que oba muy enojado, se sorprendió un poco y quiso saludarle, sin embargo éste no le vio y cruzó la carretera sin percatarse de que una camioneta venía a alta velocidad. Todo pasó muy rápido, el azabache estaba llorando y el pelirrojo estaba marcando para que una ambulancia viniera, pero tal vez ya era demasiado tarde.
- Naruto, Naruto, por favor reacciona. Soy Sai, aquí estoy, no nos dejes Naruto, por favor –decía el azabache sin parar de llorar-.
- S… Sa… Sai… Dile a Sasuke que… le amo, nunca pude… odiarle… A… adiós –dijo cerrando sus ojos y con una lágrima saliendo de ellos-.
Sai se llevó a Naruto en una ambulancia directo al hospital, no sabía qué hacer, le dijeron que a Naruto no le quedaba mucho tiempo, necesitaban un trasplante de corazón en menos de una hora, pero ni con todo el dinero que tenían podría conseguir un trasplante en ese tiempo
- Sai, cálmate, dime que es lo que pasa que no te entiendo –dijo Itachi que estaba preocupado en su casa-.
- Na… Naruto tuvo un accidente, Naruto, dicen que si no conseguimos en menos de una hora un trasplante de corazón… él… morirá –dijo Sai llorando aún más-.
- ¿Na… Naruto? No… no te preocupes –llorando silenciosamente-, iré para allá ahora mismo y le avisaré a sus padres y a Deidara, no te muevas de ahí Sai, llegamos en un momento.
- ¿Qué es lo que le pasa a Naruto, Itachi? –Dijo Sasuke notablemente preocupado-.
- Él… Naruto, sufrió un accidente, las probabilidades de que sobreviva en estos momentos son escasas…
- ¿Qué tan escasas Itachi? –sin embargo el azabache mayor no respondió- ¿¡Qué tan escasas!?
- Son… menos de un 1%, conseguir un trasplante de corazón es casi imposible…
- ¿Pero qué?... ¡Itachi, vamos! Vamos con Naruto, yo… yo puedo darle mi corazón, no me preocupa.
- ¡No, Sasuke! ¡Tranquilízate! Encontraremos una solución, vamos, sube al carro –saliendo de la casa y subiendo al carro para después marcar un teléfono-. ¿Si, Minato-sama? Lo que pasa es que… Naruto… sufrió un accidente automovilístico y necesitamos un trasplante de corazón en menos de 45:00 minutos porque si no se lo damos él… morirá.
- ¡Voy para allá! Gracias, Itachi –dijo Minato-sama colgando y viendo a su esposa que lo veía llorar-. Kushi, afrontaremos esto juntos ¿está bien?
- -Corriendo hacia los brazos de su esposo- ¿Y por qué no le damos nosotros la vida nuevamente Minato?
- Haremos lo que se pueda Kushi, no te preocupes… Ve por Deidara y vamos al hospital inmediatamente, no podemos perder tiempo en una situación así.
Cuando tú estabas aquí antes
No pude mirarte a los ojos
Eres como un ángel, tu piel me hace llorar
Flotas como una pluma en un mundo hermoso
Desearía ser especial
Tu eres tan especial
Pero soy extraño, soy raro
¿Qué demonios hago aquí?
Yo no pertenezco aquí.
Todos llegaron al hospital, Kushi estaba desesperada y triste, sólo tenía dos opciones… perder a su hijo o perder a su esposo. Minato no la dejó si quiera opinar, dijo que siempre era mejor tener una madre a un padre, además de que él era un poco dobe y no podía hacerse cargo de unos niños tan rebeldes, dijo tratando de animarla. Deidara estaba acabado, no paraba de llorar e Itachi estaba con él, le acaba saber que Naru estaba en una situación así y, por otro lado, le acababa ver al chico que amaba de esa manera.
Sasuke estaba desesperado, ya que estaban preparando todo para la cirugía, no paraba de caminar de un lado a otro mientras Sai lo veía muy preocupado, Gaara también estaba ahí con Sai, tratando de animarlo. Minato sólo sonreía ante todo tratando de que todos se animaran, sin embargo tampoco lo querían perder a él, era una situación crítica.
Sasuke, por su lado, no paraba de echarse la culpa, pensando que si hubiera aceptado las razones de Naruto, él no habría tenido ese accidente, Era un imbécil, ahora entendía todo, entendía cuanto amaba a Naruto. Con él fue que conoció la paz, que lo hizo sentir bien, que le hacía sonreír, sentir celos, ponerse nervioso, sí, se había enamorado.
Todo el ambiente estaba tenso, ¿cómo había sucedido eso?, ya todo estaba bien, nadie sabía el porqué de las cosas, sin embargo ya no podían regresar el tiempo, sólo quedaba una cosa y esa era que Minato se sacrificara por su hermoso hijo.
Ya era hora de la cirugía, los doctores ya casi acababan de poner todo cuando un azabache con ojos color carmesí apareció. Era un chico un poco alto, de una edad más grande que Itachi pero menor que Minato, tenía una mirada seria que reflejaba demasiadas cosas y a la vez nada, sí, era Shisui Uchiha.
Había aparecido en el momento más crítico dejando a todos helados, no le conocían pero era tan parecido a un Uchiha de sangre.
- Buenas noches, Shisui Uchiha, un trabajador más de la mafia, el cual conoce a Naruto. Yo… yo haré el trasplante de corazón, por favor, Minato-sama, cambie de ropa, no me gusta verle así.
Todos quedaron helados ante tal presentación. ¿Uchiha? ¿Conocía a Naruto? ¿Daría su vida por la de Naruto? Nadie sabía quién era, ni cuál era su relación con Naruto. Él, sin embargo, les brindó una sonrisa que verificaba que definitivamente si era de los Uchiha.
- Sólo que antes de esto… Quiero hablar con ustedes. Creo que aún están un poco sorprendidos por mi actitud. Pero cuando les expliqué todo entenderán. Tiene que ver co el accidente que pasó hace aproximadamente 10 años, supongo que lo recuerdan perfectamente, pues… el que provocó todo eso fui yo.
Tan descaradamente, como si ese accidente no hubiese sido nada más que un simple pasatiempo, sí, así se expresó de ese suceso que hirió a la familia Namikaze como a la familia Uchiha. Itachi ni siquiera lo pensó dos veces, se abalanzó contra él tratando de golpearlo, sin embargo Minato-sama lo apartó, indicando que el azabache desconocido debía hablar, era el momento de saber la verdad.