No quiso dar explicaciones de nada, y terminado la pequeña indagación de la policía regresaron de inmediato a su hogar, era verdad que ciertos grupos de homofóbicos atacaban de vez en cuando y eso pudo usarlo a su favor, ni siquiera se preocuparía por el muchacho en la cárcel, fue muy estúpido como para dejarse atrapar y seguramente nadie lo sacaría de allí y tampoco hablaría de los sucesos ya que teniendo como superior a Kimimaru lo único que le esperaba si llegaba a traicionarlo era un muerte dolorosa, se estaba preocupando demasiado por ese… mocoso, niño idiota o lo que fuese, después vería que hacer, además los que salieron mal parados fueron ellos “seguro pensaban que atacarme iba a ser sencillo”, en los pocos minutos que peleó pudo romper algunas costillas y una nariz más, el maldito se lo merecía por hablar estupideces, estaba furioso a que no lo dejaron cumplir los tres días que había deseado, todo su plan había fallado y ahora solo tenía pocas horas para dejar todo y unirse a ellos
Los pensamientos de Neji estaban llenos de frases que podría llegar a decirle al pelirrojo para terminar su relación, pero no se atrevía a pronunciar ninguna “creo que esto no va a ningún lado, debemos terminar” “es muy complicado” “no te amo, solo te usaba” “solo quería experimentar” “soy un asesino podría hacerte daño” “quiero largarme y dejar todo esta mentira”… por más que pensaba solo se odiaba a sí mismo, al final lo único que podía hacer era irse sin decir nada, seria doloroso pero… era lo mejor, al menos eso creía
Gaara se concentró en curar las heridas del mayor quien evitaba mirarlo, con delicadeza colocó los vendajes en las muñecas que tenían marcas antiguas, supuso que era por las prácticas así que no preguntó, por primera vez sintió un silencio incómodo mientras Neji se mordía levemente el labio y permanecía encerrado en sus propios pensamientos
-¿te sientes mal? – se atrevió a preguntar cuando terminó la curación
-no… deja que te desinfecte esa herida – evitó la conversación, no se sentía preparado aún, pero los minutos corrían y el necesitaba… - debe dolerte
- no mucho – sintió un suave beso en la herida sonrojándose un poco, el ardor del alcohol en su piel fue incómodo pero se distrajo viendo una pequeña lágrima recorrer la mejilla del mayor – ¿Neji?
- lo siento – estaban sentados en medio de la sala en el departamento de Gaara y solo se escuchaba el pequeño tintinear de kichi y su juguete en el otro cuarto – parece que no soporto el alcohol – mintió sin descaro, estaba al borde del llanto pero debía sostenerse
- estas actuando muy raro – limpió aquella gota salada con su mano libre
- es solo que jamás pensé pasar por algo así, me sentí culpable por tu herida – confesó mientras terminaba la curación y le brindaba un nuevo beso en la muñeca – lo lamento
- eran muchos como para que saliésemos ilesos, además eres muy bueno peleando
- es algo de lo que no estoy orgulloso Gaara – suspiró profundo al sentir la culpa envolverlo, culpa por haber disfrutado de la riña con esos tipos – es lo que aprendí con mi aniki, cuando era joven
-por eso te veías diferente – habían muchas cosas que ni siquiera podía imaginarse que existieran y el sufrimiento de Neji en conjunto con su pasado era una de esas cosas
- no me gusta hacerlo pero era inevitable si quería protegerte
- lo entiendo – acarició el rostro ajeno para lograr un contacto visual – Neji… gracias
- ¿por qué?
- porque fuiste capaz de defenderme de todos ellos –
- jamás permitiría que te hicieran daño, nunca – repasó con sus dedos las facciones del pelirrojo sintiendo la amargura dominarlo “no quiero dejarte” – haré lo que pueda para que nada te pase
- hoy me lo probaste – susurró acercándose al rostro del mayor
- pero no fue totalmente efectivo – acortó la distancia rozando sus labios con los del más joven
- es… solo un raspón – mordió el labio del más alto escuchándolo suspirar
- te amo… Gaara – lamió el labio inferior cercano, y un pequeño beso fue depositado, los labios contrarios se separaron en señal de que podía seguir, dejó que su mente se despejara y se concentró en introducir su lengua sintiendo cada parte húmeda que tantas veces exploró, suaves caricias en la cavidad contraria escuchando los pequeños suspiros acallados por sus propias acciones, sus movimientos acompasados, sencillos… llenos de amor
Por alguna razón el pelirrojo sintió algo diferente en ese beso, no sabía cómo explicarlo pero parecía un ambiente melancólico, al menos por unos instantes, después esa extraña sensación desapareció, se aferró al cuello del mayor para profundizar el ósculo y sintió una de las manos de Neji acariciando su espalda, se separó un momento para recuperar el aliento robado y admiró ese brillo de deseo en Neji, su cuerpo vibró al saber lo que seguía, tal vez en esa ocasión lograra que…
-eres muy bello… ¿sabías? – sonrió levemente ante el rubor del artista y de nuevo lo atacó, se estaba dejando llevar y no planeaba detenerse, si ésta era la última vez que lo vería… quería tener un motivo para regresar, quería que Gaara fuera su meta, el “algo” que no lo dejara rendirse por más difícil que fuera la situación – recuéstate – susurró mientras presionaba el cuerpo fino para que poco a poco fuera recostándose en el piso de la sala, no dejó de besarlo, sin dejar de morder el labio inferior, sin dejar de ver el rubor en las mejillas ajenas, Gaara era su todo… si él lo estaba esperando, tendría la suficiente fuerza como para seguir con todo ese plan
- Neji… ¿qué haces? – se sintió indefenso al estar recostado, sintiendo levemente el peso del castaño sobre su cuerpo, como respuesta solo sintió leves caricias en sus piernas
- flexiona tus piernas… y – admiró la sorpresa en el menor pero su mente estaba llena de hipótesis acerca de su futuro, trataba de borrarlas y solo cuando sentía el cálido aliento de su novio, podía hacerlo –… y sepáralas – vio que Gaara obedecía sus pedidos con algo de duda mientras lo observaba con detenimiento pero se detuvo antes de empezar a abrirse, el castaño usó sus manos para separar las extremidades, con cuidado y brindándole caricias logró su acometido admirando la hermosa imagen de sumisión de su pareja, la respiración agitada y la mirada deseosa , sonrió al ver el pequeño bulto en el pantalón contrario, aunque él tampoco estaba en mejores condiciones – tranquilo – susurró posicionándose en medio y acercándose al rostro del menor, brindó besos pequeños en el cuello expuesto llegando a su objetivo, aquellas labios rosados y algo brillantes por la saliva que compartieron
-Neji… ah – gimió levemente al sentir el miembro duro de su novio rozarlo, se aferró a los hombros ajenos – estas… ah – la presión anterior fue placentera pero ahora sintió una leve embestida ente sus nalgas, no pudo evitar gemir ante la expectativa , el movimiento se repitió de nuevo pero no podía gemir con libertad, los labios contrarios devorando los suyos propios se lo impedían, se abrazó al cuello de Neji y estrujó la cabellera castaña entre sus dedos, su propia erección le dolía, necesitaba algo más
- … te amo – la voz del castaño estaba cargada de deseo y su cuerpo se calentaba con rapidez, dejándose llevar por la necesidad del contacto físico no dudo en simular embestidas, pequeñas, suaves, excitantes, pero necesitaba algo más… dejó las embestidas y decidió friccionar ambas erecciones en movimientos lentos y tortuosos, mordió levemente el cuello del pelirrojo que empezaba a gemir bajito con vergüenza, deslizó sus dedos levantando las prendas del menor y mostrando el blanco pecho que subía y bajaba con rapidez, pellizco levemente uno de los botones rosa y vio al artista morderse el labio de la forma más erótica que había visto
- ah… Neji – la voz del pelirrojo era suave y casi suplicante, podría ser la perdición de cualquiera y Neji cayó al abismo de la lujuria, detuvo la fricción para cambiar de tarea, besó varias zonas de la piel expuesta soplando ligeramente sobre el pezón derecho, lo lamió un par de veces sintiendo el cuerpo delgado tensarse y le dolió las uñas incrustadas en sus hombros pero no se quejó – se… siente… bien – con aquella inocente aprobación siguió con su tarea, succionó el pequeño botón, sostuvo el mismo entre sus labios por unos instantes hasta morderlo levemente, podía sentir lo duro que se había puesto y sonrió satisfecho, repitió la acción con el otro que rogaba por atención, cuando le pareció que era suficiente se detuvo para admirar el fruto de su trabajo, los labios semiabiertos, la respiración agitada, el rubor intenso y los ojos cerrados levemente – bésame – Gaara necesitaba más y en cuanto tuvo aquel cuerpo escultural encima de si, sintiendo como lo besaban con lujuria y necesidad dejó sus dedos deslizarse por el pecho ajeno, bajando sin descaro hasta el pantalón que aprisionaba el miembro del castaño, sus manos temblaban un poco pero no se detuvo, el sonido del cinturón y luego del zíper, sus dedos acariciaron la calidez…
- te amo – sentir aquel atrevimiento solo lo excitó más, los dedos finos que generalmente sostenían un pincel ahora se movían encima de su ropa interior amenazando con introducirse de repente, él no se quedaría atrás y con agilidad se deslizó encima de las prendas, un roce fino en el miembro del más joven lo hizo jadear, acarició el bulto con suavidad, desató las prendas al mismo tiempo que el más joven lo liberaba de su prisión, lo imitó con rapidez tomando entre sus dedos el goteante pene y empezando un vaivén tortuoso
- ah… mgh – no quería quedarse atrás y también masturbó al castaño, sentirlo palpitante y duro, la mala experiencia había valido la pena, si su recompensa era ésta
La mente de Neji estaba en blanco, solo podía escuchar los gemidos de su novio y los suyos propios, era glorioso sentir aquellas caricias desvergonzadas, empezó a frotarse con la erección contraria escuchando como los gemidos aumentaban, moviendo sus caderas y haciendo que sus fricciones los llevaran a la locura, obligó al menor a sostenerse de sus hombros y él incremento el movimiento de su mano aprisionando ambos miembros a la vez, el cálido aliento del pelirrojo en su cuello, quería que nada de esto acabara pero los temblores ajenos le mostraban que pronto Gaara se correría, sonrió mientras aumentaba los movimientos besando las mejillas, cuello y lo que estuviera a su alcance para aumentar el placer, no esperó mucho antes de que un leve grito acallado por un beso profundo diera la señal de que las esencias se derramaron y el orgasmo invadiese sus cuerpos
-Neji… Ne… ji – quería seguir, el castaño lo deseaba con desesperación al igual que su compañero, Gaara se abrazó al mayor que se sostenía apenas, tratando de no colocar todo su peso encima del artista, podían sentir la mezcla de sus esencias regadas por sus propias prendas y pieles, no podía importarles menos
- Gaa… ra – llevó sus manos hacia la prenda a medio retirar, acariciando el flácido miembro del artista, planeaba seguir, empezó a deslizar la ropa hacia abajo pero… “NO ESTÁ BIEN” su conciencia lo golpeó y usando su fuerza de voluntad devolvió los bóxer y pantalones a su posición correcta, se mordió el labio mientras se separaba con rapidez y se acomodaba también
- Neji – su cuerpo había disfrutado del orgasmo pero al ver que no continuaría su decepción fue notable – ¿por qué te detienes?
- no puedo… – sostuvo su frente con fuerza, mordiéndose el labio, de repente todos sus problemas tomaron el control de su mente “no puedo hacerlo, no puedo dejarte así como así… no puedo robar tu virginidad y luego marcharme como un maldito”, su frustración, sus dudas, sus miedos – no puedo hacerte algo así, no ahora – sentía la culpa llenarlo, dentro de unos minutos se iría y ni siquiera sabía si podría regresar… vivo
- Neji… - suspiró mientras se levantaba tomando la mano del castaño y tratando de que lo mirara – ¿de nuevo piensas que necesitamos protección?
- yo solo… - en ese momento la protección le importaba una mierda, en ese momento le deseaba la peor de las muertes a Kimimaru, ese momento ni siquiera tenía el valor de ver a su novio a los ojos, lo sentía cerca, se podía embriagar con su aroma, se quería quedar con él, abrazarlo, tomarlo en cuerpo y alma y no separarse nunca pero…
- yo quiero estar contigo, podemos continuar – susurró con cariño mientras besaba con dulzura los labios del mayor
- Gaara – lo abrazó con fuerza – nunca olvides que te amo – debería terminar pero no podía… le dolería más que nada en este mundo – por eso no puedo continuar
-pero
-terminemos – besó los cabellos rojizos sintiendo un nudo en la garganta, era hora de… abandonar todo – lleguemos solo hasta aquí
- esta… bien – se resignó, no podía enfadarse con aquel hombre, lo amaba
-debo irme – besó por última vez al más joven y de inmediato se levantó – si me quedo… bueno… necesito irme – no hizo contacto visual alguno mientras se alejaba – descansa
-pensé que te quedarías – algo le parecía extraño en ese comportamiento
- terminamos… descansa Gaara – no se atrevió a mirar al pelirrojo – te amo… cuídate – salió del departamento sin esperar respuesta alguna, era un cobarde, sintió sus lágrimas caer y es que su desesperación era enorme, casi corrió hacia su propio hogar, ingresó con prisa dejando que su llanto saliese, odiaba al mundo, en ese instante odiaba todo, y se odiaba a el mismo
Gaara se quedó sentado admirando la extraña salida de su pareja, tal vez solo estaba evitando que la tentación le ganara, pero ¿por qué parecía que se estaba despidiendo?, suspiró evitando pensar demasiado, se lo preguntaría al día siguiente
Neji estaba exaltado, demasiado, necesitaba dejar que sus emociones salieran, solo conocía una forma de calmarse , desordenó todo lo que había a su paso, su habitación de instrumentos fue la más afectada, tiró cada cosa que se le cruzaba, golpeó la pared un par de veces, en su cuarto tiró lámparas, libros, documentos, muebles, al final se quedó recostado en su cama respirando agitadamente limpiando el rastro de lágrimas traicioneras, pero debía continuar, debía hacer algunas cosas antes de condenarse, debía… dejar todo
No tomó nada más que las llaves de su motocicleta y sus documentos guardándolas en una pequeña bolsa, ¿ropa? ¿Para qué?, después pensaría en ello, además seguramente el maldito de Kimimaru le daría todo nuevo para que según él se liberaba de la peste de la sociedad
Ahora tenía que visitar a algunas personas…. Para quedarse en paz…
Aquel demonio en la tierra, le hizo la vida imposible…
Kimimaru llegaba al sitio adecuado, para ser específicos a un bar que tomaron de su propiedad en la ciudad en la que residía el castaño, fue recibido con un gran variedad de bebidas e ignoró a todos mientras enviaba un mensaje a ese maldito que lo hizo enfadar “te mando la dirección, más te vale llegar a la hora correcta, pagarás por hacerme desperdiciar mi tiempo”, en ese momento no estaba de humor para aguantar a nadie, apartó a las mujeres que osaban acercarse y a sus aliados los fulminaba con la mirada, todos sabían que es lo que significaba, el pequeño grupo que había organizado la cacería de Neji se dirigió a una habitación apartada y solo cuando todos estuvieron dentro Kimimaru ingresó
-empiecen – el peliplata se adentró con paso firme y de porte elegante, no miró a nadie y ocupó el único asiento en la habitación
- le hemos dado su mensaje Kimimaru-san – el azabache se encontraba al frente de todos y era el encargado de rebelar lo acontecido
- ¿y que ha respondido?
- estará aquí a la hora acordada, como puede ver no le ha gustado nada que lo hayamos interceptado – gruñó molesto ante el recuerdo de la bestia en que se había convertido, podía claramente recordar el dolor de cada golpe que recibió, su labio hinchado era una prueba viva de eso
- al parecer no ha perdido esa maldita costumbre de destrozar al que estuviera frente suyo – sonrió de medio lado de forma escalofriante, solo imaginarse que él podía dominarlo era… - ¿eso es todo?
- no señor… nos ha roto varias costillas, y un par de narices – se detuvo ante la mirada llena de molestia que le daba su superior
-que me importan ustedes, si terminaron así solo significa que son demasiado débiles aún
- uno de los nuestros ha sido capturado – se calló al escuchar el fuerte golpe en la pared
- me importa un carajo que un maldito gusano haya sido capturado pero si llega a hablar yo mismo lo mataré – volvió la mirada al grupo para que continuaran
- fue culpa de un niño que lo acompañaba – dijo nervioso uno de los tipos, se notaba el terror en su voz
- ¿y quién era? – tenía curiosidad
- no sabemos con exactitud, pero el castaño lo protegía como a un cachorrito – admitió otro veterano de ese equipo mientras sonreía divertido ante la mirada asesina de su jefe y escuchar el leve temblor de miedo del jovencito a su lado
- ¿así que no saben nada?
- debe ser uno de sus alumnos, porque fue capaz de romperle la nariz al idiota de aquí – habló el más calmado mientras golpeaba el hombro del afectado – apenas y volvimos del hospital, debería estar descansando
- ya veo… pueden irse, esperare aquí, no quiero que nadie me moleste y preparen todo porque en cuanto el novato llegue dejaremos este lugar, borren evidencias y cualquier rastro de la organización
-si señor –
Era hora del juego, solo podía imaginarse varias formas de torturar al querido ototo del maldito de Kidomaru, sería verdaderamente divertido verlo llorar…
Neji… lloró
Condujo con cuidado entre las calles, sabía perfectamente el orden en la que necesitaba realizar las visitas, desde la más calmada hasta la más difícil, y ahí estaba estacionado en frente del departamento de cierta castaña, bastó con tocar un par de veces como para que la animada amiga lo abrazara e invitara a pasar “es raro verte aquí Neji, te invitaré un postre que acabo de preparar” una plática simple, algo extraña ya que varios reclamos le fueron dados “Ten-ten debes cuidar bien a Lee, sabes que se comporta como un niño a veces” trató de ser lo más normal posible pero estaba claro que no era así “sabes que lo haré, pero es extraño que me digas algo así de repente, ¿pasa algo?” ella no se merecía tener más problemas de los que ya había enfrentado “claro que no, solo que… necesitaba hablar con alguien, parece que mis pesadillas no me dejarán en paz en un largo periodo, y me recordaron el pasado” rieron, comieron, y al final solo un “cuídate mucho, siempre se precavida y confía en mi” la chica no entendió bien lo que el castaño quiso decirle pero al fin y al cabo eran unas palabras muy lindas acompañadas de una dulce sonrisa, ¿Quién sospecharía?
Mientras dejaba que la fría noche lo acompañara pensaba en su juventud, Lee era su mejor amigo, siempre estuvo a su lado e incluso aguanto varias humillaciones para al final simplemente ayudarlo a levantarse “oye Lee, ¿por qué no buscas pareja?, sería mejor si tuvieras alguien que te cuide bien” cuando llegó a la casa del mencionado se sintió más relajado “estoy bien así, ya veré que es de mi vida amorosa más adelante”, unas pequeñas cervezas y una plática amena llena de recuerdos , eso era lo que más necesitaba y al parecer Lee podía ayudarlo con todo eso “sabes Lee, te quiero como a un hermano, debes cuidarte bien, ganar muchos premios y cuidar de Ten-ten hasta que llegue a casarse”, las mejillas rojas del pelinegro demostraban que estaba ebrio “ tal vez se quede solterona, después de todo siempre ha sido muy explosiva, como esa rubia… ya sabes la hermana de Gaara” sonrió ante las palabras de su amigo que apenas podía mantenerse en pie, lo ayudó a llegar a su habitación “eres un caso perdido… Lee debes cuidarte… y cuando comprendas lo que voy a hacer… no me sigas, estaré bien, lo prometo” seguramente con lo ebrio que estaba Lee no lo entendería pero tal vez lo hiciera después de un buen descanso, “parece que te vas a la guerra… no olvides el fusible” su carcajada sonora por el comentario contagió al pelinegro, y lo dejo allí, dormido en su cama, extrañaría tantas locuras
Por mucho que lo pensó no encontró forma correcta de realizar la siguiente visita y se decidió por ser bastante directo, un par de segundos le bastó para que le contestaran “¿Neji?, ¿por qué me llamas?, ¿le paso algo a Gaara?” la voz de la rubia se notaba tan exaltada como siempre y le gustaba de cierta forma, a ese par de hermanos les confiaría la seguridad de su mayor tesoro “no es nada, Gaara está bien… pero necesito hablar con su hermano y si es posible con usted también, podría darme la dirección de su casa” la sorpresa de la chica fue evidente “de acuerdo… te enviaré la dirección a tu celular, pero ¿de qué se trata?” calculó una media hora hasta llegar al lugar, la mansión que ocupaban, su respuesta dio a entender que no era nada grave pero para él sería… admitir su derrota y romper una promesa.
Fue bien recibido por la servidumbre y en poco tiempo se vio ante la atenta mirada de ese par de hermanos sentados en los sofás lujosos de su estudio, Neji estaba fuera de lugar, su ropa sencilla, sus ojeras apenas visibles, y un semblante bastante deprimente
-Dime que quieres, y ni se te ocurra decirme que quieres llevarte a Gaara o algo así – advirtió Kankuro con un semblante serio
-déjalo hablar Kankuro – aconsejó la rubia que también estaba expectante – parece que es serio, ¡solo míralo!
- el asunto es bastante sencillo, no tardaré mucho – suspiró el castaño antes de continuar – acepto su voluntad – se paró en frente del par de hermanos con el rostro serio
- ¿voluntad? ¿A qué te refieres? – Kankuro se veía confundido, al parecer Neji estaba ebrio o algo así
- yo de verdad amo a su hermano menor… pero me veo en la obligación de separarme de él
- pero si lo amas, ¿no le dijiste que estarías a su lado? – critico la rubia levantándose de repente
-explícate – exigió el castaño con tono amenazante
-yo… dejaré a Gaara bajo sus cuidados – se inclinó ante los presentes – por favor cuiden de él – sentía una opresión en su pecho, estaba rompiendo su promesa
- ¿pero cómo?, ¿así de fácil? ¿Qué paso? – por un lado la rubia estaba feliz pero ¿y Gaara?
- ¿ya se lo has dicho? – escrutó Kankuro que tenía un mal presentimiento, no era nada normal que un tipo testarudo como ese estuviera ahora bajando la cabeza frente a él
- no – levantó su cabeza para mirarlos fijamente – es algo que decidí solo
- ¿por qué? – el Sabaku necesitaba una buena razón
- entendí que no es bueno que permanezca a mi lado – su mirada no escondía la melancolía que sentía pero a su vez mostraba la decisión y la verdad ante cada palabra – por favor cuiden de él, yo no puedo hacerlo
- ¿por qué no se lo has dicho tú mismo?, se supone que no rompías promesas – regañó el castaño mientras fruncía levemente el ceño
- porque no tengo el valor de hacerlo
-ahora resulta que eres cobarde
- solo les pido una última cosa, traten de todas las formas posibles de que se mude de nuevo con ustedes
- ¿por qué me pides eso?
-Kankuro-san, usted es el mejor para cuidarlo, bajo su protección nada malo le ocurrirá
-claro que sí es obvio, pero así de repente ¿por qué cambias de opinión?
- nunca deje que salga solo, manténgalo vigilado
- ¡responde a mis dudas! – era demasiado extraño
- pronto lo sabrá, pero si me permite no seré yo quien le informe
- eso me suena muy grave – habló la rubia que estaba un poco decepcionada de su ex cuñadito
- por favor – de nuevo hizo una reverencia marcada – cuiden bien de Gaara – al levantarse esbozó una sonrisa forzada – ahora me retiro, tengan una buena noche –
- oye quiero explicaciones – la rubia impidió el paso del pelilargo pero…
-espera Temari, déjalo –ordenó Kankuro
-pero quiero saber
- ya lo escuchaste… ya nos enteraremos después, ahora solo ponte feliz ya que Gaara estará bajo nuestro cuidado de nuevo
- tendré a mi hermano de nuevo –sonrió victoriosa, al menos por ahora
Neji salió sin dar explicaciones, “es lo mejor” se repitió mentalmente tantas veces como para que de cierta forma él mismo llegara a creerlo, era horrible, sentirse tan impotente pero era lo mejor y ahora solo le faltaba un lugar, uno solo y la noche lo acompañaría, no quiso saber la hora pero seguramente pasaba de la media noche, o tal vez la madrugada, que importaba, lo único que sabía es que el sol aun no salía y eso solo quería decir que tenía suficiente tiempo
En cada cruce podía recordar fracciones de su pasado, su hermana fue la única que le tuvo la suficiente paciencia como para ayudarlo cuando nadie quería hacerlo, Hinata se merecía ser feliz y vivir en paz, y él… solo la puso en peligro, daba gracias a Dios que Naruto se quedara con ella, al menos él podía protegerla cuando fuese necesario, antes solo eran un par de maleantes adolescentes los cuales no se soportaban, no sabía cómo diablos terminaron llevándose tan bien, ese rubio despistado era como su hermano, y en ese momento al único al que podía llamar “¿puedes salir un momento?, no le digas a Hinata ni a los niños”
- ¿qué demonios quieres a las 2 de la mañana?, Neji idiota – un somnoliento rubio estaba parado en frente a él con cara de pocos amigos
- lo siento pero era urgente – sonrió ante el ceño fruncido del blondo – ¿y Hinata?
- le dije que quería comer ramen, saldría un momento a buscar una tienda abierta… pero a ti que te interesa eso, habla de una maldita vez – se quejó estirándose y bostezando para espabilarse un poco
- he bebido y no puedo conducir – palmeó un par de veces la motocicleta que se mantenía a su lado – guárdala por mi
-estamos muy lejos de tu casa, ¿dónde demonios fuiste? – Se quejó mientras admiraba la bella motocicleta – tranquila pequeña yo te cuidare ttebayo – dramatizó divertido
- tenía que despejarme un poco y no medí las consecuencias – sonrió
- no me jodas, ¿qué tienes?, cuéntame –exigió en tono duro
- Naruto cuida de Hinata y los niños
- ¿te lo prometí no?, sabes que jamás incumplo mi palabra
-lo sé pero…
-te ocurre algo mas ¿no?, ¿es grave? – de repente se puso serio, ahora aparentaba ser maduro
- prométeme que no dirás nada, solo habla con Hana de esto
-si es con Hana significa que…
-si Naruto, es sobre Orochimaru –admitió esperando un grito que nunca llegó
-demonios, pero no estaba en prisión – se tiró levemente la cabellera
- oye escúchame y cálmate
-cuenta, cuenta
- me iré con ellos – y antes de que el otro lo golpeara terminó la explicación – es un plan con Hana
- igual te golpearé, ¡por descabellado! – lanzó un puñete lo suficientemente fuerte como para resonar en las calles desoladas – ¿acaso estas demente?
- es la única forma de detener esto y lo sabes, tengo que destruirlos desde adentro – se frotó la zona afectada, el rubio tenía mucha fuerza
- pero ellos… no lo hagas
- ya lo decidí, me esperan hasta mañana… tranquilo lo haré bien
Entre amenazas, golpes, reclamos, en el fondo lo entendía bien, si cambiaran de lugares probablemente haría lo mismo, pero ¡era una locura enorme!
-sabes que ellos no son un juego, si te descubren
- no lo harán, tengo que regresar en una sola pieza, pero necesito tiempo y seguramente se preocuparan
- ¿y Gaara?
- lo abandoné
-mentira, jamás lo harías, se nota que lo amas demasiado
- no le dije nada, no sabía cómo, además no tiene que enterarse, lo dejé a cuidado de sus hermanos
- pero
-a ti te encargo a los niños y a Hinata
- me encargaré pero ¿y tú?, Neji esto es una locura
- oye tienes que apoyarme, al menos dime que me cuide y que regrese a salvo
-cuídate y regresa ileso… te acompaño
-jamás… idiota si vienes conmigo ¿quién cuidará de los niños?
- pero tu
-lo hare solo, Hana cuidara de mí, estaré en contacto con ella, no te preocupes
-aunque me digas eso – suspiro derrotado – debes cuidarte mucho, no tardes o se preocuparan
-no le digas a nadie, y… deséame suerte
- suerte hermano, cuñado, amigo, lo que seas – bromeó mientras se abrazaban con fuerza
- gracias
-oye, toma, es mi collar de la suerte, devuélvelo cuando todo termine –
- esta perla… es un recuerdo de tu padre, ¿estás seguro?
- te protegerá, tómala y vete antes de que me arrepienta
- gracias, mil gracias
Continuará…