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El "nya" que nos unió por 1827kratSN

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Notas del capitulo:

Hola!!!

Me disculpo por tardar tanto pero tuve semana de trabajos y exámenes, fue una época dificil que se extendió ya que realicé un viaje y bla bla bla

 

Sin importar nada más les traigo la actualización

 

FELICCES FIESTAS

 

y a leer

 

 

Los líos legales eran inevitables, la única diferencia era que Kankuro tenía evidencias contundentes, testigos de lo sucedido y el Uchiha solo tenía los golpes para denunciar a Neji, pero todo terminaba en que el culpable era Sasuke… sería difícil de arreglar todo con simples manipulaciones o contactos en el tribunal, las familias que pelearían serían Uchiha y Sabaku, ambas tenían la fama ya establecida pero solo una debía ser la ganadora, a pesar de todo lo que podría suceder, estaba claro que la guerra empezaría si un acuerdo no se instauraba

 

 

 

 

Gaara despertó después de varias horas en aquel hospital, vio a Neji a su lado dormitando levemente, estiró su mano para acariciar la herida ahora vendada, el castaño se despertó casi de un salto “Gaara… estaba preocupado” sonrió mientras acariciaba el rostro un poco pálido del paciente, el pelirrojo tembló levemente mientras cerraba sus ojos, sujetó la mano de su novio mientras de nuevo sentía las lágrimas empezar a deslizarse por sus mejillas, con cautela el mayor lo abrazó, el artista se sintió protegido, se aferró a su pareja en un abrazo demandante, temblando ligeramente mientras sollozaba, para el menor había sido una experiencia demasiado horrenda como para soportarla, sentirse impotente mientras era testigo consiente de las cosas que el Uchiha le hacía, el querer gritar y no poder hacerlo, la desesperación por quitarse ese peso de encima… se aferró a Neji ocultándose en su pecho, quería quedarse a su lado, que jamás tuviese que separarse del ser que lo protegía “tranquilo… ya pasó todo” escuchaba esos susurros mientras su cabello era acariciado con ternura, los brazos protectores le brindaban el calor que necesitaba, la caricia en su espalda le hacía sentir amado “no te preocupes… no dejaré que nadie te dañe” no podía parar de derramar lágrimas amargas, se sentía despreciable aunque no tuviese la culpa de nada… pero aquella sensación seguía en su piel

 

 

Neji se quedó cuidando de Gaara toda la noche, la madrugada, incluso media mañana, no podía pensar en nada más que en la persona que amaba, le susurraba que no pasó nada grave, que no tuvo la culpa, que lo perdonara por dejarlo solo sabiendo de la amenaza latente… besó las manos de su novio una y otra vez, limpió las gotitas saladas que brotaban sin control en algunas ocasiones, el menor no tenía el valor de hablar y eso lo estaba asustando un poco pero trataba de aparentar la calma que poco a poco estaba perdiendo, Neji estaba totalmente cansado pero se mantenía en vigilia, presente en los exámenes que tomaban para comprobar los efectos de la droga administraba, atendía a un exaltado Kankuro que plantó la demanda apenas la agencia de policía en ese país pudo atenderlo, también se enteró por Matsuri que los trámites legales estaban dándose en su país natal con una orden de restricción, no entendía mucho de esos procesos legales, tampoco le daba un buen sabor de boca hablar de esos detalles, la rubia parecía querer golpear a cualquier azabache que se le acercara por el simple hecho de recordarle al Uchiha, Shikamaru a pesar de ser una persona calmada y hasta desinteresada estaba completamente tenso, enfadado, incluso ayudando al propio Kankuro con todos los trámites, todo eso le recordaba que no fue capaz de matar al tipo que se atrevió a dañar a SU pareja… se tenía que morder el labio cuando sentía la ira empezar a brotar, no quería que su pelirrojo se asustara más, debía tener la cabeza fría y ser el apoyo del más joven, ahora lo veía dormir de nuevo y es que las pesadillas del más joven lo atormentaban cada par de horas, acarició los cabellos rojizos con suavidad, besó su frente, tomó la mano del menor entre la suya acariciándola con el pulgar, reposó su rostro en la sábana, su cuerpo le demandaba descansar y así fue como se quedó dormido

 

 

Lo que siguió después de eso se puede describir en una sola palabra “guerra” los Sabaku mayores se encargaron de que la demanda ante el Uchiha menor tuviera todas las de ganar, lo destrozaron con tan solo un día, la prensa ayudó a ese hecho, después de todo los fotógrafos en la galería hicieron de las suyas, una imagen del Uchiha siendo golpeado por un hombre de cabello largo y castaño se mostraba en los estantes con el título “Cazador… desvergonzado, el que ha sido golpeado ¿se lo merece?” las llamadas en el departamento de Deidara, el celular de Sasuke y también el de Itachi empezaron a sonar como locos, al punto de que tuvieron que apagar esos benditos aparatos para quitarse un poco de estrés, Deidara golpeó aún más al Uchiha menor la misma noche, los gritos llenos de amargura de Itachi se escucharon en el departamento, los reclamos de un pelirrojo de ojos marrones no faltaron, Sasuke también peleó aunque sus palabras ya nada de sentido tenían, todo lo que los demás entendían era simple “obsesión enfermiza” el apoyo para el menor ya no existió, incluso su propia sangre lo rechazó… se quedó solo a enfrentar ese infierno “te daré un abogado pero nada más” le había dicho Itachi quien azotando la puerta se había marchado seguido por un rubio y un enfadado pelirrojo, ahí terminó tantos años de unión familiar, de ceguera… de hermandad. Itachi lloró en medio de las escaleras del edificio, lo hizo debido a la rabia e impotencia al presenciar lo bajo que su hermanito  había caído y de donde al parecer no quería salir, solo sus amigos se quedaron vigilándolo de cerca, escondidos un piso más arriba y dejando que se desahogara solo

 

 

 

Todo ese alboroto causó muchos problemas, el primero fue para la galería, al parecer ese cuarto había sido anti sonoro debido a la antigua utilidad de salón de ensayos para los cantantes y jamás se vio acondicionado adecuadamente, el propietario se había disculpado personalmente al día siguiente del escándalo, después estaba el anuncio acerca de la cancelación de la gira del talentoso artista, Sai a pesar de estar con la cabeza al pendiente de su amigo también tenía que velar por la seguridad económica, terminó aceptando que las pinturas del artista fueran exhibidas, él se encargaría de todo pero Gaara jamás estaría presente, todos se lo tomaron con calma después de todo, tremenda desgracia no era tan simple, también estaba la prensa que quería entrevistas con el afectado pero claro que eran rechazados y arrojados a patadas fuera del hospital, ellos también querían saber del chico que defendió al artista… las cosas cada vez se ponían difíciles, Kankuro entonces tomó la decisión final “nos regresamos a Japón inmediatamente” para ese momento Gaara ya estaba en capacidad de responder “quiero irme a casa” había dicho el artista mientras se levantaba de la camilla en la cual se recuperaba. Para una persona sobreprotegida toda su vida, como lo había sido el pelirrojo menor el suceso que no debe ser nombrado fue demasiado perturbador, incluso el psicólogo del hospital les advirtió que necesitaba una terapia, dependiendo de cómo evolucionara el cuadro del artista tomarían las medidas necesarias, tal vez para algunos eso sonaría a exageración pero ¿y si se ponen en los zapatos de Gaara?

 

 

 

El pelirrojo solo podía sostener la mano de Neji para sentirse protegido, su estado de calma había regresado, ni una sola expresión facial por los hechos anteriores, era una especie de letargo que mantenía…  era malo, todos solo podían dejarle el resto a Neji quien era el que podía acercarse sin restricciones al menor, su llegada a Japón fue en secreto claro estaba, querían evitarse un lío con la prensa de su país… llegaron al anochecer, se trasladaron en silencio, Neji llevó a Gaara al departamento, todos se despidieron dejando a la pareja sola “trata de volverlo a la normalidad… te lo encargo” fueron las palabras de Temari quien le daba un beso en la frente a Neji en muestra de confianza, Kankuro solo lo miró asintiendo levemente con su cabeza, el pelilargo los vio marcharse demasiado tristes, aunque él tampoco estaba mejor, cuando regresó a la sala halló a Gaara sentado en medio de todo, abrazando un cojín y apretando el juguete de hule rosa que a kichi le gustaba

 

 

-Gaara… ¿quieres comer algo? – se sentó a su lado admirando la tristeza en aquella mirada turquesa

-no gracias – susurró mientras encogía sus piernas hasta abrazarlas

-entonces prepararé el baño, te ayudará a relajarte – le sonrió mientras deslizaba su mano por el cabello rojizo

-no quiero hacerlo – murmuró mientras dejaba el juguete en el suelo y levantaba su vista para enfrentar al mayor – solo quiero dormir un poco

-claro – sonrió mientras se entristecía al ver las ojeras que marcaban esa piel clara, lo había visto con problemas al dormir, él también había sufrido esas secuelas, sabía lo agotador y frustrante que era – vamos entonces, me quedaré contigo hasta que puedas conciliar el sueño

-bien – Neji lo ayudó a levantarse y guio al pelirrojo hasta la habitación, a pesar de todo Gaara jamás dejó de sujetar su mano, el mayor lo trató como a un niño pequeño, preparándole todo para la noche… incluso le besó la frente mientras se sentaba al borde de la cama y esperaba a que Gaara se durmiese, acariciando aquellas hebras de fuego – Neji… podrías recostarte también

-si… lo haré – con cautela se recostó al lado de su pareja, aún tenía ese temor de espantarlo pero Gaara se abrazó a él de inmediato

-no te alejes – le susurró el pelirrojo mientras ocultaba su rostro – quiero que estés conmigo

-pensé que todavía no era momento – lo abrazó con cautela mientras disfrutaba de aquel contacto, era verdad que evitaba caricias demasiado intimas por temor a que Gaara no lo soportara – lamento haberme comportado así

-solo tú… solo tú puedes tocarme – susurró el artista

-¿quieres hablar de eso?... – el menor asintió levemente, con temor – Gaara sé que fue difícil pero no es tu culpa

-lo sé pero… cada vez que recuerdo todo me frustra el hecho de que no pude defenderme… podía ser consiente de todo pero debí evitarlo desde un principio – se separó un poco para ver directo a aquellos iris perla que le gustaban tanto

-él te drogó – con la punta de sus dedos acarició las mejillas del pelirrojo

-antes de que lo hiciera pude defenderme… pero sentí pánico

-es normal, tienes un pequeño trauma, además has vivido sobreprotegido

-tenía miedo… solo quería que vinieras a detener todo

-te dejé solo… lo siento – besó la frente del menor que trataba de ocultar el par de lágrimas que surcaban su rostro – eres fuerte Gaara, pero el miedo vuelve débil a cualquiera

-no quiero que pase eso de nuevo

-no lo hará

-pero me siento inútil ante esas situaciones – confesó mientras tomaba una de las manos de Neji apretándola entre las suyas

-no lo eres, solo recuerda que le rompiste la nariz a uno de los tipos que nos atacó hace mucho tiempo – le sonrió al recordar ese suceso – pero en esta ocasión era “ese” tipo… el miedo te invadió

-no quiero sentir eso de nuevo

-te ayudaré a olvidarlo

-cada vez que veo estas marcas lo recuerdo – Gaara se tocó el cuello con rabia, las mordidas le dolían aún

-esas marcas se borrarán

-pero mi memoria… eso no lo hará

-estoy aquí Gaara… te ayudaré a que ese miedo se vaya

-gracias – susurró mientras sentía el latir de su pecho, una sensación cálida que extrañaba, era todo lo que necesitaba, tenerlo a su lado

-borraré esas marcas – susurró mientras se acercaba levemente, rozó sus labios con los del menor – jamás permitiré que te dañen – pudo percibir el leve estremecimiento del artista

-te amo – susurró mientras besaba con ternura al mayor – no me dejes solo – se acercó aún más hasta sentir el calor ajeno, sintió el brazo de Neji rodear su cintura, entrelazó sus dedos con los de su pareja, lo miró con detenimiento analizando el bello rostro que tenía – Neji… yo

-no haré nada – sonrió el mayor mientras besaba con castidad los labios ajenos – solo duerme, tenemos suficiente tiempo juntos… todo el tiempo que queramos – abrazó al menor para que se acurrucara en su pecho

-quiero a kichi y momo, a los pequeños también – susurró el pelirrojo por último mientras sonreía al sentir los besos en sus cabellos

-iremos por ellos mañana – susurró, mimó al menor con cariño hasta que logró escucharlo respirar suavemente, evidentemente se había quedado dormido y se dio el lujo de hacerlo también, perderse en el descanso que le brindaba la noche

 

 

 

 

Esa plática aunque sencilla fue lo suficiente como para acercarlos más, esa mañana Neji se quedó recostado observando al menor dormir, se había despertado un par de veces en la noche a lo cual él logró calmarlo mediante caricias y besos, ahora se alegraba de verlo dormir con calma, en verdad los largos meses separados le costaron superar, había sido duro no lo negaba pero ya todo había acabado, nunca esperó que Sasuke hiciese algo como… prefería no recordarlo, dejando todo eso de lado se sentía muy feliz, al saber que ahora tenía a su pelirrojo consigo, podía abrazarlo y disfrutar de su aroma, besar su frente y sus dedos, cuidarlo sobre todas las cosas

 

Ambos disfrutaban de desayunar juntos, platicar cosas sin sentido, quedarse en silencio escuchando el televisor encendido, besarse de vez en cuando, tomarse de las manos mientras caminaban hacia la habitación, alistarse sin apuro para ir a recoger a sus pequeños, era el día de descanso de Ten-Ten quien se asombró al tener a los invitados en su casa, abrazó con efusividad a ambos, reclamando por el hecho de que no le avisaron de su regreso, muchas cosas habían pasado en ese tiempo, pero la chica solo se limitó a sonreír mientras los dejaba pasar, Lee también estaba allí quien completó la bienvenida con su vivacidad, en fin, todo se limitó a una mañana ajetreada de bienvenida, Gaara se veía feliz al tener a su pequeño kichi quien ronroneaba sin contenerse al tener las cálidas manos de su amo sobre su pelaje, los pequeños imitaban a su madre, momo se mantenía al margen como queriendo dejar que el ambiente no se rompiera con su presencia, era gracioso de cierta forma, porque a igual que Neji se mantenían alejados de esa pequeña reunión familiar, Ten-Ten se había reído cuando los vio, ¡esos felinos eran la viva imagen de sus dueños!

 

 

Nadie había tocado el tema de Italia, respetaban el silencio de la pareja, además nadie podía hacer más… solo esperar a que Gaara se recuperara en totalidad, aún podía mostrar rasgos de desconfianza o incomodidad ante el contacto físico, pero al parecer su mejoría sería más rápida de lo que se imaginaban ya que apenas tenía la oportunidad se acercaba a Neji, lo abrazaba con cautela o solo acariciaba su mano, cualquiera se daría cuenta que esa pareja podía superar cualquier cosa si permanecían juntos, Neji era sumamente cuidadoso en cuanto a Gaara se trataba y a su vez el menor se dejaba cuidar con el mayor de los placeres, a veces incluso Lee y Ten-ten les tenían envidia, de la sana claro está, ya que el amor invadía el ambiente cuando ese par estaban juntos

 

Se decidieron por preparar el almuerzo en conjunto, nadie tenía trabajo ese día, así que era como una reunión entre amigos, Lee se había encargado de traer las cosas que hacían falta, Ten-Ten y Neji se habían puesto manos a la obra con la preparación, Gaara se había quedado con ellos, observándolos y ayudando cuando fuese necesario, admitía que sus habilidades en la cocina no eran lo suficientemente buenas como para meterse en algo tan complicado como en lo que los chicos preparaban, cuando Lee llegó se quedó platicando con el artista, Gaara permanecía jugando con los felinos en la sala e incluso escuchando las historias que el pelinegro relataba acerca del torneo en que participaron hace poco o de las lecciones que Gai-sensei dejó como legado antes de viajar, disfrutaron de la comida mientras reían al escuchar del acoso permanente de Temari para que Ten-ten o Lee participaran en sus locuras, aunque no les molestaba de sobremanera a veces la rubia podía ser demasiado insistente, hasta el punto de volverse mandona, Gaara sonreía de vez en cuando causando que los presentes se sintieran dichosos, les gustaba que el menor entrara en confianza. Solo el celular de Neji mató el ambiente, el pelilargo se disculpó para retirarse un momento, se alejó de grupo y solo se escuchó “lo lamento en verdad… si… pero será en otro momento, ahora estoy con mi familia… lo siento en verdad … disculpe pero hablaremos después” un suspiro se escapó involuntariamente atrayendo la mirada de cierto pelirrojo que presentía que algo no andaba tan bien como debería “¿Quién era?” decidido a averiguar todo el artista intervino, a pesar de que el castaño trató de no responder, al final y ante la insistencia se resignó a confesar “era la secretaria de mi auspiciante… el hombre que me ayudó a viajar quiere hablar conmigo” los presentes se tensaron un poco, después de todo nadie quiere que un escándalo afectara a su empresa, y los periódicos con la foto de Neji, a pesar de que nadie sabía que era el modelo anónimo que solía aparecer en las portadas en Japón, era un riesgo muy grande, cualquiera que investigara un poco podría enterarse de todo, sería un gran caos si eso llegara a pasar “deberías ir y explicar todo” fue lo que el menor dijo “lo haré pero… confieso que tengo un poco de temor, pero por ahora solo disfrutemos de esto un rato más” , solo unas horas más fueron suficientes como para que Neji tuviera el valor de enfrentar todo, no sabía cómo reaccionaría aquel hombre pero no tenía nada que perder, decidió entonces ir a verlo, era buena oportunidad ya que Gaara quedaría con sus amigos, por el momento no quería dejarlo solo ni un solo instante, el menor quiso acompañarlo pero sabía que no era necesario, era su problema y debía afrontarlo solo

 

 

 

-el señor lo espera – fueron las palabras de una mujer pelirroja, la secretaría lo veía con mala cara después de todo Neji le había cortado hace algunas horas atrás

-en verdad lamento, no debí ser grosero y… - la chica solo lo miró con enfado y el pelilargo se calló de inmediato, aquella mujer tenía un carácter fuerte, no era buena idea hacerla enojar más

-solo entre ahí y arregle esto – el jefe del lugar, la secretaría y algunos empleados más eran los únicos que sabían que él era el modelo anónimo, siempre fueron cuidadosos de mantenerse en incógnito, Neji respiró profundo antes de entrar al lugar, saludó con asombro ya que Temari se encontraba en el lugar también, eso no se lo esperó

-hasta que te dignas a venir – un hombre de cabellera platinada estaba sentado en frente de un enorme escritorio lleno de papeles, la rubia permanecía ocupando uno de los sofás en el lugar, consumiendo un café caliente, ambos estaban demasiado serios admirando al recién llegado – entra y toma asiento – el pelilargo solo obedeció

-Tanaka-san creo que le debo una explicación – sonrió Neji mientras observaba la serenidad del mencionado

-no hace falta, Temari me ha contado todo – de pronto el hombre se levantó, con paso calmado atravesó la distancia hasta sentarse al lado de la rubia quien consumía su café

-creo que debí decirle todo yo mismo – añadió el muchacho

-¿cómo crees que me siento ahora? – habló el hombre mientras peinaba sus cabellos con sus dedos

-seguramente está enfadado conmigo, un escándalo es lo que menos desearía tener, a pesar de que pocos saben que yo…

-¡eres la portada en las revistas! – habló la rubia por primera vez – atraes la atención por doquier, nunca hubiese imaginado que un asunto tan… horrendo se convertiría en ¡esto!

-todos quieren saber quién fue el hombre que atacó a un Uchiha sin importarle nada – Tanaka sonrió divertido de pronto, matando ese tenso ambiente – eres el primero en atreverse a hacer algo así, el apellido Uchiha es bastante reconocido y que alguien no se dejara intimidar por algo así es… extraño

-estaba furioso y no medí las consecuencias de mis actos, lamento eso – se disculpó el pelilargo de inmediato, aun sin entender porque aquel hombre se reía bajito y Temari lo acompañaba

-¡ese escándalo fue lo máximo! – mencionó la rubia mientras dejaba su taza en la mesa del centro – el maldito se lo merecía

-concuerdo con Temari, fue increíble que le hubieses maltratado de ese modo, vi un pequeño reportaje acerca del estado de Sasuke Uchiha, a pesar de que quieren mantenerlo en secreto, algunos ya han descubierto que ese tipo estaba hospitalizado – el hombre observó a Neji mientras reía – unas costillas rotas, hematomas, un labio partido y el orgullo por el suelo fue la noticia del momento

-¿entonces no está enfadado porque yo haya causado tal escandalo? – Neji en verdad no entendía ese razonamiento pero al ver sonreír maliciosamente a Temari supo que estaba en un lio

-claro que no lo está – explicó la rubia mientras el hombre asentía – si tomamos provecho de la situación todo vendrá a nuestro favor

-solo imagínate esto – el par de empresarios veían a un Neji que confundido  trataba de entenderlos – ahora todos quieren saber quien defendió a uno de los mejores artistas en aquella exposición, el enigmático hombre que se atrevió a lastimar a un Uchiha, el único que causó un alboroto en Italia… un lio tan grande que incluso el dueño de aquella galería tuvo que disculparse en una rueda de prensa a nivel nacional… en Italia eres la noticia del año

-la verdad no entiendo nada – Neji tenía un mal presentimiento, bueno no era eso sino… un escalofrío que le decía que la sonrisa de Temari le causaría un giro de noventa grados a su vida

-si podemos sacar provecho de esto, nuestras empresas se alzaran en la cima – se exaltó la mujer – solo imagina, pedimos entrevista en una de las mejores revistas, le damos toda la información necesaria, tomamos toda esta oportunidad para…

-un momento – interrumpió Neji – usted quiere decir que… yo… ¿quieren que yo salga a la luz?

-esa es la idea – Tanaka sonrió divertido al ver la duda en la mirada perla – si todo esto pasó es solo cuestión de tiempo antes de que te encuentren, ya no serás ningún anónimo, pero si sacamos partido de esto estaríamos en el mejor momento

-pero el acuerdo fue que yo jamás fuera revelado, no me gustaría estar en la boca de todos

-escucha Neji… tu sola presencia en los desfiles o portadas ha sido un éxito, todos querían saber de ti – la rubia explicaba como si tratara de convencer a su hijo que las nubes no estaban hechas de algodón de azúcar – lo evitamos como pudimos pero ahora que has salido en las portadas, los periodistas investigarán a profundidad, cualquier cosa que te relacione con tu participación en Japón es un riesgo, pronto descubrirán todo, serás el punto de discordia, todos te odiarán o te amarán según las cosas que escuchen de ti, un Uchiha herido puede decir cualquier tontería, así que si nos adelantamos a todo, podemos evitarnos miles de mal entendidos

-escucha Neji, puedo aprovechar esto a nuestro favor, te presentaremos como la nueva adquisición de esta empresa, revelaremos los motivos de tu anonimato como simple precaución para evitar que tu privacidad fuera invadida, serás el chico tímido que es un modelo sin igual, un simple deportista que no quiso revelar su identidad, diremos que llevas amistad con Gaara porque se conocieron a través de Temari quien te descubrió hace algún tiempo, podemos mantener su relación en secreto por el momento y podrán revelarla cuando deseen – sonrió el hombre peliplata con la mayor de las calmas – pero debemos hacerlo si es posible hoy mismo, no podemos perder tiempo

-todo esto es demasiado para mí – se quejó Neji suspirando mientras negaba ligeramente y usaba sus manos para recoger su cabello – yo no…. La verdad no me imagino enredado en todo esto, yo solo…

-escucha Neji, esto es una buena oportunidad para ti – el hombre estaba completamente calmado – ganaras reputación y así en un futuro nadie tendrá nada que decir con que admitas una relación con Gaara, un modelo exitoso como el novio de un artista aclamado en Europa, eso suena bien – sonrió finalmente

-ni siquiera estaba en mis planes que usted se enterara de mi relación con Gaara – se quejó Neji mientras trataba de asimilar las cosas – se supone que yo solo hacia esto porque ustedes ayudaban a mi jefe con el gimnasio y… no quiero ser famoso ni nada, solo quiero una vida tranquila

-la tendrás si hacemos las cosas correctamente – apoyó Temari – si te damos un nombre… como decirlo, un pseudónimo y aclaramos que no quieres persecuciones, además de ocultar algunas cosas de ti, podemos hacer que tu vida sea como la de Gaara, relajada y sin acosos

-eso suena una promesa que no se puede cumplir – se quejó Neji, dudando de todas aquellas cosas

-no tienes opción Neji – añadió el hombre – si no hacemos algo rápido y pensando las consecuencias, se enterarán de ti y ahí no tendrás escapatoria del acoso de la prensa, es mejor darles lo que quieren manipulando la situación en nuestro beneficio

-me parece que lo están disfrutando

-no te equivocas – sonrieron los involucrados, después de todo los beneficiados en mayoría eran ellos

-esto si será una locura – admitió Neji suspirando

-¿eso quiere decir que podemos empezar a planear todo? – se entusiasmó Temari

-no tengo opción – admitió Neji – solo… no quiero ser la presa de todos esos medios de comunicación, quiero seguir con mi vida lo más normal posible

-¡eso déjalo en nuestras manos! –

 

Neji dudaba que todo fuera tan fácil pero no quería saber nada por el momento, tenía muchas cosas que resolver ahora, la primera era hablar con Gaara sobre esto, lo demás vendría con la explicación a la prensa, no sabía cómo iba a salir de esa, pero se limitaría a seguir las ordenes de Temari, esperaba que ellos supieran ayudarlo, aunque sabía a la perfección que su paz se había terminado por completo, además de que su pasado estaba en riesgo de salir a la luz, suspiró al momento de salir de esa oficina, le dijeron que lo llamarían para informarle de todo, en ese instante solo quería escapar de todo pero no era la mejor idea, ahora solo esperaría

 

 

 

Siete días después la locura estaba a un nivel demasiado alto para Neji, primero, Gaara no se lo tomó muy bien que digamos, ya que no quería que nadie le quitara la atención del pelilargo, la prensa se volvió loca al enterarse de que Temari revelaría detalles de los acontecimientos recientes solo a una revista prestigiosa, Neji tuvo que dar una especie de entrevista a una mujer que parecía querer acorralarlo contra la pared mientras lo entrevistaba, Neji daba gracias al cielo que Temari estuvo con él para mantener a la reportera a raya y ayudarlo cuando se atoraba en las respuestas, la publicación de esa información fue una bomba de la cual no pudo escapar, todo llegó al punto en que ni siquiera podía acercarse a la empresa de Tanaka-san porque los reporteros esperaban encontrarlo, optó por no arriesgarse e incluso excusarse en el trabajo, eso fue suficiente por los primeros días, pero cuando tuvo que ir a un desfile organizado por Temari, casi fue cazado por los periodistas, tuvieron que hacer una rueda de prensa improvisada en los que se limitó a responder solo lo necesario, ahora ya no usaba antifaz, aunque el color de sus ojos, o el de su cabello era cambiado permanentemente para ocultarlo un poco, no reveló su relación con Gaara, al menos no dijo que eran pareja, solo que se conocían bien, pasado eso, pensó que terminaría ahí pero al final incluso Lee y Ten-ten salieron a la luz, por un pequeño descuido de los organizadores uno de los investigadores los descubrió en la tienda de Temari y ahí empezó el caos.

 

El acoso al gimnasio llegó a ser horrible, incluso la policía tuvo que echar a varios de los periodistas, las cosas iban muy mal para el séptimo día y Neji estaba estresado al límite, Temari se disculpaba por teléfono con Gaara ya que era demasiado pronto como para tenerlo en esa situación “Temari-san dejo todo en sus manos” fue lo que le dijo Neji mientras tomaba el teléfono para hablar y aunque la rubia quiso una explicación, el pelilargo colgó con enfado, llamó a Ten-ten, Lee e incluso a su jefe, les dijo algo como “creo que desaparecer por un tiempo será buena idea” se disculpó infinidad de veces con el jefe del gimnasio quien se debatía si estar feliz porque los alumnos estaba aumentando o estar enfadado por los acosadores que venían por información acerca de sus trabajadores, Lee y Ten-ten estaban al borde de la desesperación, acordaron hacer algo parecido a lo que había dicho Neji “Gaara… viajaremos un tiempo” sonrió el pelilargo mientras apagaba su teléfono y desconectaba el de su hogar, el pelirrojo solo sonrió mientras lo imitaba, sería interesante huir de todo, debía admitir que iría a cualquier lado si junto a él tenía a Neji, así en un par de horas ambos tenían sus maletas listas, acomodaron a los felinos en el auto y partieron con una sonrisa, sería interesante ser fugitivos por una sola vez en su vida

 

 

 

 

Más de quince días habían pasado desde que sucedió el incidente en Italia, Kankuro estaba feliz de que el Uchiha pagaría una condena en prisión por intento de abuso, aunque no era mucho tiempo, bastaría como escarmiento, además que estaba condenado a hacer labor social, pagaría lo que fuese por verlo en esas circunstancias pero le bastaba con saber que esa era la condena, se aseguró de que jamás se volviese acercar a Gaara de nuevo ya que con Itachi hicieron un trato, si Sasuke se mudaba a otro país Kankuro no tomaría represalias contra el menor, eso incluía hundir los negocios que los Uchiha mantenían, Itachi al parecer no quería problemas, el mayor de los Uchihas parecía no querer defender a su hermano, era razonable después de todo lo que hizo, así las cosas eran más sencillas.

Asunto aparte Gaara había llamado a Kankuro para decirle que estaba huyendo de la prensa junto con Neji, el castaño se había reído mucho cuando Temari lo llamó después para suplicar por información de aquellos dos, estaba al tanto de lo ocurrido y jamás creyó que ese asunto se saliera de las manos, llevaban mucho tiempo sin tener noticias del nuevo modelo, al menos no formalmente porque Gaara se encargaba de tomar fotografías y enviarlas para que los dueños de aquella empresa las usaran como portada o lo que desearan, Kankuro solo podía reírse de la situación, la locura de esa pareja no tenía limites a su parecer, pero en el fondo los entendía, no era fácil huir de todos esos periodistas, pero ellos llevaban días sin ser descubiertos, respetaba ese talento los dejaría así por el momento, pero una semana más y les exigiría que regresaran, huir de los problemas no siempre era bueno

 

 

 

 

Kankuro por su parte estaba contento, regresó a Estados Unidos en cuanto terminó con aquel problema, Kano había mantenido todo en correcto orden, los niños lo recibieron con la mayor de las sonrisas, Nagato estaba cada vez más… embarazado, incluso había empezado a comprar pequeñas cosas con las ganancias que obtenía por pequeños trabajos que realizaba en el hospital en donde Kankuro jugaba con los niños, aquel pelirrojo tenía la habilidad de calmar a cualquier persona, podía involucrarse con cualquier paciente y tras algunos minutos de platica cualquiera se sentía mejor, hablar de los problemas los ayudaba a clamarse, Nagato solía permanecer en el hospital para las revisiones y ahí empezó a descubrir que podía entenderse muy bien con cualquier persona, aliviar sus temores un poco, después los médicos le empezaron a  pedir que participara en charlas con los pacientes con problemas similares a él, así empezó todo el proyecto que Kankuro estaba dispuesto a apoyar, habían encontrado un lugar cercano al hospital, un pequeño edificio departamental de tres pisos que estaba en venta, Nagato se veía emocionado cuando le comentó su idea a Kankuro, el castaño por su parte se vio interesado en la propuesta “un centro de ayuda a los que más lo necesitan, sé que usted piensa hacer un centro de atención para pacientes de escasos recursos pero también puede incluir un centro de ayuda para aquellos donceles o mujeres que se han quedado embarazados y sin apoyo de nadie, al menos brindarles cuidados hasta los tres meses después del parto… después ellos sabrían que hacer” Kankuro se había planteado esa posibilidad en varias ocasiones, al haber experimentado una desesperación parecida entendía los problemas que esa dolorosa situación conllevaba,  permanecieron charlando sobre el tema una noche entera sin darse cuenta, pero al final incluyendo “seis meses estaría bien para que un pequeño esté sano” de parte de Kankuro habían planeado todo, incluso sabían a que empresa pedir colaboración para esa ayuda social, los financiamientos también estaban siendo planificados, sería un asunto demasiado complicado en un principio, pero si salía bien, los beneficiados serían muchos, podían incluso hacer que los mismos donceles o mujeres que fuesen ayudados en ese lugar se convirtieran en empleados de la empresa en apogeo, sonaba bien, por esa razón Kankuro aceptó el reto, Matsuri se ofreció para coordinar todo con ayuda de Nagato que sonreía cada vez al ver que su problema inicial se volvería inspiración para ayudar a muchos más.

 

Lo que más le gustaba a Kankuro era saber que todo estaba tomando forma y que pronto con la navidad podrían darse un descanso placentero, faltaban un par de días apenas y su viaje de nuevo estaba presente, incluso paró todo el trabajo para que cada uno de sus empleados fuera a visitar a su familia, los vería de nuevo en año nuevo, después de todo él también tenía planes para todos esos días, solo bastaba con ver los pasajes en el escritorio para sonreír

 

 

-Kankuro, está todo listo, podemos salir sin apuro alguno – la voz de Nagato resonó en la sala en donde Kankuro permanecía meditando lo que había pasado últimamente

-Nagato creo que deberías acostumbrarte a usar “san y kun” – Kankuro sonrió mientras se disponía a levantarse y estirar un poco su cuerpo – en Japón es necesario usarlos, es una forma de respeto

-lo se Kankuro-san – sonrió el pelirrojo divertido mientras acariciaba su abultado vientre – pero será difícil ya que aún no puedo hablar su idioma con total fluidez, ¡es difícil! – mostró un ligero puchero mientras se dirigía a la cocina

-te acostumbrarás cuando llegues ahí, de todas formas hablas y entiendes lo necesario, con eso bastará, tampoco nos quedaremos allí para siempre – sonrió mientras despeinaba al chico

-aun no estoy seguro si debo ir también, su familia puede creer que me quiero aprovechar de su amabilidad –

-ya hablamos de eso Nagato-kun – sonrió el castaño – ya les expliqué todo, ellos entienden lo que hago, así que deja de preocuparte por eso, además no iremos solo los dos, Kano y Matsuri irán con nosotros, no es nada raro o algo de lo que te tengas que avergonzar, simplemente son cosas que pasaron y ya

-suena muy sencillo cuando lo dices, pero aun así me sentiré incomodo

-tampoco te dejaré aquí, tengo que cuidar de ti y del pequeño, me sentiré más calmado si estás con nosotros

-te ves más feliz de lo normal – aseguró el pelirrojo mientras tomaba los boletos de la mesa observándolos con curiosidad – creo que no me has contado todo lo que haremos allá

-no es necesario que lo sepas, solo disfruta de esos días, será divertido

-quiero conocer a tu hermano, leí sobre sus obras, quiero verlas – de pronto el rostro del pelirrojo se iluminó, Kankuro se había enterado que ese joven adoraba las artes pero por muchas razones jamás aprendió nada de su gusto

-Gaara estará feliz de mostrártelas, últimamente esta emocionado por saber la opinión de los demás

-Kankuro-san, Nagato-kun el taxi está esperándonos – de repente el rubio entró al departamento con una sonrisa tierna mientras se quitaba la nieve de su traje – Matsuri ha dicho que nos esperará en el aeropuerto para entrar juntos a la revisión

-es hora de irnos entonces – sonrió el castaño tomando las maletas junto con Kano, las ultimas en el departamento, no llevaban mucho por lo que apenas eran tres, uno por cada miembro de ese departamento, Kankuro sonrió feliz al ver como Nagato se colocaba el abrigo mientras acariciaba su vientre, susurrando que tendrían un viaje ajetreado y que se calmara, doraba el cariño que mostraba ese pelirrojo

 

Navidad… sinónimo de compartir…

 

 

 

Cierta rubia estaba deprimida en su sala, mientras bebía chocolate caliente suspiraba repetidas veces, incluso sus empleadas trataron de animarla pero ella no respondía, Temari jamás pensó que su casa se viera tan vacía en esas fechas, muchas cosas habían pasado, ahora tenía a sus hermanos lejos, su novio vendría más tarde, pero estar sola a esas horas y admirando el árbol que reposaba en la esquina la llenaron de nostalgia, hace varios días que su hermano desapareció debido al desastre que fue la presentación de Neji a los medios, no había podido hablar con ese par ni siquiera un poco y podía estar casi segura que la odiaban, eso solo la deprimía cada vez más, bebió de un solo trago el contenido de su taza, estaba pensando sinceramente en ponerle un poco de wiski a esa bebida, justo cuando estaba a punto de levantarse para buscar un poco de ese líquido, el timbre resonó asustándola y poniéndola tensa, seguramente era Shikamaru quien la regañaría por deprimirse tanto, así que susurrándole a una de las empleadas para que dijera que estaba dormida, corrió a su habitación, pero decidió quedarse cerca de las escaleras escuchando un poco el alboroto que seguramente se haría, escuchó los típicos “bienvenidos”  le dio curiosidad, ¿quién podría venir junto con Shikamaru?… trató de escuchar algo más y en ese momento odió que su casa fuera una mansión, no podía escuchar bien, pero reconoció varios pasos diferentes, resonando en el lugar, de pronto una de las empleadas cruzó cerca e intentó llamar su atención fallando completamente, tenía que decidir si bajar y averiguar o esperar un poco hasta estar segura, pero de nuevo su timbre sonó asustándola, casi cayó al suelo por la impresión, cualquiera que la viera la compararía con una niña escondiéndose de su madre por haber realizado una travesura y en verdad se sentía de esa manera, las voces eran diferentes, ella solo tenía más curiosidad así que poniendo su mejor sonrisa bajó a paso lento un poco ansiosa, a la vez nerviosa ¿Quién llegaría así de repente?

 

 

 

-WAAAA – la rubia gritó como maniaca debido a la impresión y los presentes se espantaron como nunca – ¡¡¡maldición!!!... Todos… yo

-deja de asustarnos así – se quejó cierto pelinegro de coleta – eres problemática como siempre

-Shikamaru… solo te perdonaré por esta vez – se quejó la rubia mientras empezaba a cristalizar su mirada – ¿por qué todos están aquí? – estalló en grititos pequeños mientras corría a los brazos de su hermano menor – ¡¡¡Kankuro!!! Me alegra verte de nuevo

-mejor abraza a el más joven – le susurró mientras Temari lo veía un poco confundida – mira allá tonta – le susurró en tono burlón mientras la empujaba un poco

-¡¡Gaara!! – Temari saltó de alegría al ver a su hermanito ingresar por la puerta con una maleta pequeña, se le lanzó encima para abrazarlo emotivamente – pensé que no vendrías, que estarías enfadado conmigo – se quejó mientras lo apretaba

-solo un poco – el pelirrojo correspondió el abrazo sin problemas – pero es navidad, dejaré eso de lado por estos días

-haré todo para que me perdones – sollozó la chica mientras sonreía

-el que tiene que perdonarte es Neji – susurró el pelirrojo mientras su hermana se separaba y se lanzaba a abrazar al mencionado pidiendo disculpas y a la vez exigiendo que no volviese a desaparecer así nada más. Pasaron varios minutos en los que la chica saludaba a los recién llegados incluso abrazó a Kano quien solo sonreía divertido, pero Temari se detuvo al ver a alguien desconocido entre ellos

-etto… no sé quién eres pero… ¡bienvenido! – sonrió la rubia mientras lo abrazaba y se daba cuenta de algo, se separó un poco admirando el abultado vientre del joven doncel – tu… - el chico estaba un poco avergonzado mientras sonreía algo nervioso

-mucho gusto – habló el pelirrojo captando la atención de todos, su voz sonaba dudosa pero trató de mantenerse calmado

-¡no me digas que eres la pareja de mi hermano! – se exaltó la rubia mientras alternaba su mirada entre el pelirrojo y Kankuro quien se golpeó la frente – o por Dios y tienes a mi sobrino aquí – la chica se alteró hasta el punto de asustar a un confundido Nagato que apenas entendía lo que la chica decía con rapidez, la verdad el pelirrojo perdió pista de lo que decía a partir de la mitad, solo se giró para buscar ayuda en Kankuro quien negaba levemente

-Temari – trató de hablar el castaño Sabaku pero la rubia ya estaba abrazando nuevamente al pelirrojo recién llegado quien solo sonreía sin entender nada – escúchame Temari

-KYAAAA… seré tía – sonreía la chica mientras los demás solo suspiraban y algunos solo reían

-¡Temari escucha! – le exigió Kankuro mientras la apartaba para que no molestara al invitado – estás asustando a Nagato, además apenas entiende el japonés… trata de entender la situación

-pero si lleva a mi sobrino quiero saber más de el – se quejó la rubia como si fuese una niña pequeña, se giró hacia el chico que solo le sonrió dándole una reverencia – ¿cuál es tu nombre?

-mi nombre es Nagato – sonrió el chico mientras observaba a Kankuro en busca de respuestas

-te hablé de Nagato, ¡Temari compórtate por favor!... lo traje para que libere estrés, no lo agobies – Kankuro se puso serio mientras guiaba a Nagato dentro para que descansara en el sofá, ordenaba a las empleadas atenderlo mientras el pelirrojo solo admiraba el ajetreo sorprendido por ver la mansión, Kankuro le explicaba la situación con paciencia, los demás solo sonreían mientras dejaban sus cosas a los empleados, serían días divertidos si situaciones así se vuelven a repetir

 

 

Nagato sabía que Kankuro era adinerado pero al ver la mansión se sintió insignificante en todos los sentidos, apenas entendía lo que platicaban  pero por alguna extraña razón no se sentía tan incómodo como imaginó, tal vez la compañía de Kano lo relajó lo suficiente, con paciencia le había explicado lo que había ocurrido, al enterarse se había reído también, era una familia interesante, cada uno de los presentes se había presentado con él, eran muy amables a su parecer, eso le gustó, Kankuro se veía feliz al compartir con todos a pesar de que con el chico de cabello largo se comportara muy arisco, algo que no había visto antes, dejando eso de lado daba gracias a Dios que tal y como dijo Kankuro se estaba acostumbrando al idioma, ahora podía entender un poco más, bueno también ayudaba las clases personales que Kano le había dado, en verdad ese idioma era interesante de muchas formas

 

Nagato pensaba que era en realidad hermoso compartir con la familia de Kankuro, se sentía muy bien ya que perdió a su familia… al menos eso quería pensar, creyó que esas fechas la pasaría en soledad pero ahora se sentía feliz de que no fuese así, tal vez ese era el plan del castaño, Neji lo había tratado muy bien, era una persona amable y le daba curiosidad el hecho de que Kankuro lo tratara diferente a los demás “es porque no me quiere alado de Gaara” esa explicación sencilla le dio risa, no pensó que el castaño fuera tan infantil en esos aspectos, no estaba de acuerdo con esa actitud “usted es agradable, no entiendo a Kankuro…san”  a veces se le hacía difícil usar las palabras adecuadas pero le tenían paciencia, ni siquiera se dio cuenta que sonreía mucho esa noche, era la cena navideña y cada uno de los integrantes en esa familia parecía más animado de lo normal, por lo que sabía más personas vendrían y se puso algo nervioso incluso su pequeño hijo pateaba inquieto “tranquilo, solo son un par de amigos de la familia” Matsuri siempre lo ayudaba cuando las cosas se ponían difíciles y le estaría eternamente agradecido por eso

 

 

 

Gaara se enteró de que Nagato quería ver sus obras y con calma platicó con el chico, Nagato le inspiraba ternura, tal vez porque la barriguita era como un recordatorio de lo que soñaba, un hijo era lo que deseaba, incluso pidió sentir las patadas que el pequeño daba de vez en cuando, no pudo evitar emocionarse al sentirlas, cerró los ojos para apreciarlas, golpes suaves que daban aviso de lo vivaz que era esa criatura, el artista no dudó en hacer un cuadro, quería plasmar esa emoción que lo invadía, mientras los demás estaban ocupados en los preparativos él se llevó al pelirrojo, quien le ganaba por un par de centímetros en altura, se encaminaban para la que antes era la habitación de Gaara, aun tenia algunos materiales que podía usar, hizo algo sencillo, solo retrató las partes más significativas del chico, y antes de la cena había hecho un hermoso retrato que acentuaba el embarazo de Nagato “un hijo es mi sueño también” comentó mientras Nagato derramaba un par de lágrimas al apreciar el trabajo terminado “es muy hermoso” había mencionado el joven mientras se disculpaba, las hormonas lo tenían muy sensible a esas cosas, se sentía conmovido y los caminitos de lágrimas en sus mejillas lo demostraban

 

 

 

La cena estuvo llena de variedad, Nagato se sorprendía por los sabores que jamás había probado, conoció a Kiba quien era… ¿cómo decirlo?... una copia, en cuanto a  personalidad, a Kankuro, Hana quien era una mujer fuerte pero cariñosa a la vez,  Lee quien sobresalía por la energía que emanaba de cada poro que tenía, muchas veces Nagato rio al verlo o cuando lograba entender lo que decía, Ten-ten era una chica divertida, demostraba que conocía a Neji desde su infancia, las travesuras realizadas por Temari para enfadar a su hermano menor, las historias que contaba Shikamaru para avergonzar a la rubia, el pelirrojo podía percibir el amor que se tenían ese par, en el fondo le recordaba al cariño que solía sentir por el padre de su hijo, Nagato tuvo que sacudir un par de veces su cabeza para desechar aquellos pensamientos amargos que arruinarían su noche, quería disfrutar de todo y así lo hizo, simplemente fue una noche encantadora en la que todos compartieron en la enorme familia que se habían convertido, las cosas iban mejorando

 

 

 

-la boda será el 29 de este año – se emocionaba la rubia mientras abrazaba a Shikamaru quien sonreía disimuladamente

-es por eso que hemos venido – añadió Kankuro mientras explicaba a Nagato lo que ocurría – es hora de ayudar en esta locura, además el deseo de ver a mi hermana casada se hará realidad –

-¡oye!... eso suena a una burla – se quejó la rubia

-pues todos creemos que se tardaron mucho – añadió Gaara mientras acariciaba a kichi y momo, además de otro pequeño felino blanco exceptuando por sus dos patas delanteras que eran negras completamente

-y yo creí que tenías más gatos – advirtió Kankuro para calmar un poco a la rubia que empezaría a pelear, sería un caos si ella se ponía en plan de guerra

-cada uno ya tiene su hogar – añadió Neji mientras cargaba al felino más pequeño que era tan dócil como momo quien no se separaba de su amo – solo falta esta pequeña – sonrió al escuchar el maullido del peludo animal

-en verdad es bonita – Lee se acercó para acariciar a la pequeña – lástima que no pueda tenerla en casa, trabajo mucho y no es bueno tenerla encerrada todo el tiempo

-pues encontraremos un hogar – sonrió Neji dejando a la pequeña en el suelo quien ronroneaba mientras daba pasitos en la sala donde todos disfrutaban de un descanso mientras platicaban entre si – como lo hicimos con los demás durante el viaje

-linda – susurró Nagato mientras estiraba su mano moviéndola para atraer la atención del animal, la pequeña curiosa se acercó y casi de inmediato ronroneaba por las caricias del chico quien se había sentado en el suelo a pesar de la dificultad que tenía por su abultado vientre – que linda – susurró nuevamente  mientras sonreía

-¿quieres conservarla? – preguntó Lee acercándose un poco para curiosear al felino – parece que le agradas

-… - Nagato no entendió lo último que el pelinegro le dijo pero le sonrió mientras afirmaba con la cabeza – Kankuro-san – miró al mencionado en busca de respuestas pero fue Kano quien se lo explicó

-parece que te adora – sonrió Lee mientras trataba de llamar la atención de la felina sin éxito – parece que quiere que seas su dueño

-puedes conservarlo si quieres – proclamó Kankuro al ver la ilusión en los ojos de Nagato – pero cuídalo bien

-felicidades – sonrió Neji al pelirrojo que sostenía al felino, Nagato solo asintió mientras cargaba a su nueva mascota – ahora tienes un nuevo hogar – las palabras de Neji retumbaron en la mente de Nagato, tal vez se refería al felino pero… cuando el chico observaba a todos, podía sentir que su vida iba a mejorar, que tal vez ese pequeño felino sería el primer escalón hacia su felicidad, hacia su nueva familia

 

 

 

Luego de esa noche y a pesar de que todo parecía normal… ¡nada lo estaba!, Temari aparentaba calma mientras llegaba el gran día pero en realidad el estrés la estaba matando poco a poco, la novia pendiente de cada detalle, era normal pero ella se estaba excediendo, las ojeras lo evidenciaban, muchos intentaron que se calmara pero ella no lograba hacerlo, incluso Ten-Ten lo intentó, la ayudaba en lo que podía pero los nervios de la novia se evidenciaban, Nagato solo podía permanecer en casa tratando de calmar a Temari cuando tenía oportunidad, tenía habilidad en eso y funcionaba pero por breves momentos, en cuanto terminaban de hablar la rubia empezaba de nuevo, Shikamaru estaba cansado de repetirle a su prometida que todo saldría bien, Kankuro estaba estresado al verla así, Neji y Gaara decidieron quedarse en la mansión hasta que todo terminara, al menos así la chica parecía dejar un poco su tensión  “novias todas son iguales” se había burlado una de las sirvientas más antiguas quien tomó el control de las cosas al estar cansada de ver intentos fallidos por calmar a la rubia dueña, así que obligó a todos a marcharse mientras ella se encargaba de terminar con los detalles para el día esperado, simplemente ingresó en la sala junto con otras cuatro muchachas y empezó a empujar a todos fuera de la mansión, aunque Temari protestó, Shikamaru al darse cuenta de lo que planeaba la sirvienta, casi  arrastró a su novia para que salieran  de paseo, los demás hicieron lo mismo confiando en la sabiduría de la mujer quien sonreía de forma maternal, Neji y Gaara decidieron ir de visita a su departamento, estar a solas sería bueno después de tantos días estresantes, Ten-Ten tenía planes al parecer, ya que se excusó de repente, Kankuro también hizo lo mismo tras recibir una llamada, Kano aprovechó para ir de visita donde su familia y así fue que Lee de alguna forma invitó a Nagato a conocer la ciudad, sería divertido hacer turismo en sus días de descanso

 

Boda….

 

 

 

La boda sería sencilla, al menos ese era el plan, los trajes tradicionales emocionaron a Nagato que estaba fascinado al ver a los novios, empezaba a adorar aquella cultura, la misma que adoptaba tradiciones extranjeras pero mantenía ese toque natural del país,  la ceremonia fue sencilla, nada del otro mundo, nada comparado con la fiesta que se llevaría a cabo después, pensaron que solo los familiares y amigos estarían allí como en la ceremonia se dio, pero cuando se descuidaron por unos minutos, las personas empezaron a llegar, Temari estaba emocionada hablando con todos, al parecer la mayoría era conocidos suyos, Shikamaru recibía a varios hombres de porte formal, eso era razonable ya que era un empresario, Kankuro reconocía a muchos de ellos ya que en el campo laboral trataba con ellos, al menos mientras permanecía en Japón, Neji fue reconocido por algunas personas, Gaara, Ten-ten y Lee también, eso se volvió un incómodo momento cuando los negocios y preguntas fuera de lugar salieron, claro que los involucrados cortésmente huían del sitio, Nagato se sentía un poco abrumado en ciertas ocasiones y agradecía a Matsuri o a Lee quienes lo acompañaban cuando era necesario… una noche ajetreada de verdad

 

 

-jamás pensé que fueras tan popular – Sasori también se encontraba en aquella fiesta, siendo  invitado por la propia Temari; Kankuro suspiró al verlo allí parado en frente de él – todos quieren hablar contigo

-es normal, soy un Sabaku – gruñó el castaño mientras tomaba una copa que un camarero ofrecía

-pues yo soy un Akasuna – imitó el pelirrojo con una sonrisa burlona haciendo que el ceño de Kankuro se notara – pero debo admirar tu mansión, es bastante grande como para toda esta gente – sonrió al ver a todos esparcidos bailando, platicando o disfrutando del bufet que se ofrecía, se detuvo al reconocer a alguien entre los asistentes

-deja de mirar a Nagato de esa forma – se quejó el castaño – te lo dije ayer, solo cuido de él

-me sorprendió que aceptaras salir conmigo – sonrió el pelirrojo recordando el día anterior, había sido divertido llevar a Kankuro a la playa, a pesar de la negativa inicial, ambos la habían pasado bastante bien – fue divertido

-fue porque necesitaba escapar del estrés de mi hermana – sonrió mientras observaba a Temari bailar con entusiasmo con Shikamaru que se veía de lo más contento – al menos ahora está feliz y todo este asunto terminó

-así que me usaste para divertirte – fingió estar horrorizado

-idiota – susurró, pero aunque no lo admitiera en verdad disfrutó la salida, era raro pasear con alguien, sin que ese alguien intentara seducirte como en anteriores ocasiones

-hay que repetirlo – añadió el pelirrojo mientras observaba a Nagato quien platicaba con Lee

-deja de observar a Nagato – repitió Kankuro – ¿lo vas a maldecir o qué?

-siento envidia de él – miró al confundido Kankuro – ese chico tiene toda tu atención, la que yo quiero robar

-no empieces con eso ahora, estamos en una fiesta y ya tengo suficiente con todas esas miraditas asqueadas de los muchos invitados dirigidas hacia Nagato, solo quiero echarlos de aquí – gruñó bajito mientras observaba a cierta mujer cuchichear algo con otra mientras observaban al doncel

-¿cuándo dará a luz? – Sasori cambió de tema inmediatamente, no quería pelear

-pronto

-te encariñarás con él… me abandonarás por él – parecía un niño pequeño dudando de su futura escuela, de cierto modo a Kankuro le pareció divertido y no pudo evitar reírse

-nunca… pensé que vería ese lado de ti – susurró controlándose un poco

-no te burles, yo solo… no quiero que me aparten de ti

-¿estás inseguro?... no lo puedo creer, eras todo un mujeriego con exceso de confianza y ahora tú... – el castaño reía bajito sin creer lo que escuchaba

-es porque ya cometí errores contigo – Sasori se puso seriod e  pronto logrando que el castaño parara de reírse – no quiero volver a sentir cómo me abandonas – confesó mientras consumía su bebida, estaban apartados de todo así que podía hablar lo que se le diera la gana, confesarse si quería

-sí que has cambiado… escucha, yo… - ¿cómo podáis explicarse sin decir nada que lo comprometiera?, Kankuro permaneció callado unos segundos antes de mirar a esos iris marrones

-de verdad te quiero conmigo – mencionó mientras con disimulada calma acariciaba la mano de Kankuro, el castaño se tensó levemente – no soportaría si me apartaran de ti

- yo no quiero a nadie más – suspiró mientras entrelazaba su meñique con el del pelirrojo que sorprendido solo se quedó quieto – estás a prueba, así que esfuérzate – se separó de inmediato fijándose en que nadie lo hubiese visto, una acción arriesgada que no sabía de dónde había salido… solo fue un impulso

-eso fue tierno – mencionó el pelirrojo sonriendo mientras acariciaba la espalda del castaño con disimulo – a tu forma, pero fue tierno

-nunca pensé que tendría que subir tu nivel de confianza – se burló el castaño apartándose, quería unirse a los que bailaban – si sigues así… me decepcionarás – sonrió al ver la divertida forma de bailar de Lee que hacia sonreír a Nagato quien se sostenía el vientre levemente, debía agradecer a ese muchacho en cuanto tuviera la oportunidad

-no lo haré, solo quería escuchar unas palabras de aliento, a veces es bueno

-entonces debiste grabarlas, no las repetiré – sonrió antes de unirse a la fiesta nuevamente

-en verdad me vas a hacer sufrir – sonrió Sasori – pero valdrá la pena

 

 

 

 

Baile y alcohol, los invitados lo disfrutaron a niveles inimaginables, Temari estaba contenta de que todo fuese un éxito, Shikamaru intentaba calmarla de vez en cuando, pero era mucha emoción que hasta él se contagiaba, Neji y Gaara se retiraron en cuanto las cosas se ponían intensas, Ten-Ten bailaba alegre con sus conocidos y con algunos que conoció ese día, Nagato fue ayudado por Kano y Lee para retirarse cuando se sintió completamente cansado, Matsuri compartía la emoción con Temari, en fin, cada uno disfrutó a su manera, algunos incluso tuvieron que quedarse en la mansión debido a lo cansados que estaban, otros en cambio con sus choferes se retiraban en la madrugada, Kankuro ayudaba a despedir a los últimos invitados y al final, Temari alistaba todo lo faltante para su viaje de luna de miel,  cuando estaba dispuesta a irse era las 6 de la mañana y la familia los despidió con los mejores deseos, los regalos quedaron en casa, luego resolverían eso, ahora sus días de descanso eran prioridad, con alegría la rubia abrazó a todos, Shikamaru se despidió solo con un gesto y después solo se perdieron en el firmamento, así eran las cosas… los recién casados necesitaban privacidad

 

 

-al fin se casaron – mencionó Gaara haciendo que pequeñas risas se escucharan

-estaba cansado de esperar – bromeó Kankuro – al menos queda en buenas manos

-espero que no peleen mucho – sonrió una de las empleadas quien feliz recogía las ultimas cosas – la señorita se merece ser feliz

 

 

Felicidad…

 

 

Felicidad, era simple si lo veías de esa manera, una vida en pareja, una salida en familia, un beso en la frente, comer un postre, una noche de películas, mirar a los ojos de la persona que amas, compartir con todos, la felicidad era compleja también, dependiendo de cómo la vieras como por ejemplo cumplir tus metas a través de tu esfuerzo constante, ganar una medalla tras entrenar años, vencer tus limitaciones con la ayuda de todos… tú decides como interpretarla

 

 

 

-¿estás pensando en algo especial? – Neji admiraba al pelirrojo observar el cielo y la nieve que empezaba a caer, todo detrás de la ventana, los rayos del sol eran débiles pero aun así alumbraban el lugar

-solo me preguntaba porque la sociedad es tan conservadora – respondió Gaara mientras sentía el abrazo cálido que ahora Neji le daba

-¿lo dices por Nagato? – susurró mientras besaba la mejilla del menor

-¿viste las reacciones de hoy? – entrelazó sus dedos con delicadeza buscando un poco de calidez o consuelo

-parecían incómodos al verlo embarazado – suspiró el mayor al entender a lo que se refería Gaara – pero a Nagato parecía no importarle

-aun así es doloroso – se dio vuelta para abrazarse a Neji – ¿reaccionarán así conmigo también?... si llego a llevar en mi vientre un pequeño o pequeña yo…

-no permitiré que te miren así – susurró mientras acariciaba los cabellos pelirrojos – y si lo hacen… nos iremos de ahí

-Lee fue muy bueno al hacer reír a Nagato cuando se sentía incómodo – sonrió al recordar todo lo que el pelinegro hizo para que Nagato no prestase atención a las miradas posadas sobre él

-Kankuro también se molestó y escuché que les reclamó a varios de ellos – Neji guió a Gaara hasta la cama para sentarse allí y ver el cielo más cómodos –

-¿por qué no aceptan que dos hombres se enamoren o que uno de ellos sea doncel?

-no lo sé, tal vez tienen  miedo a lo que es diferente – reposó su mano en el vientre de Gaara acariciándolo con cariño

-eso es estúpido… tampoco dejan que nos casemos, apenas y permiten que los hijos de donceles lleven en el registro a sus dos padres – suspiró profundamente debido a la frustración

-la sociedad no está preparada todavía

-eso es injusto

-¿pensabas en el matrimonio de Temari?

-estoy feliz por ella

-me refería a que… ¿le tenías envidia, al menos un poco? – apretó más su abrazo

-creo que si

-¿entonces por qué no nos casamos? – sonrió levemente

-eso no se puede – se quejó un poco desilusionado

-tal vez no legalmente pero puede ser algo representativo – sonrió mientras besaba la mano de su pareja – además en mi pueblo lo celebramos en grande

-eso no lo sabía

-si quieres podemos llevar a Nagato con nosotros, sería bueno que estuviese en un lugar en donde se sienta aceptado completamente

-lo seria – una leve sonrisa adornó su rostro al recordar la sonrisa de ese joven, o la emoción al ver el cuadro que le dedicó

-¿entonces? – giró a Gaara para verlo de frente mientras sacaba algo de su bolsillo – ¿quieres casarte conmigo? – sonrió mientras mostraba un anillo

-eso es…

-es algo que compré hace un tiempo – sonrió Neji mientras colocaba el objeto en el dedo indicado – pero aun no en respondes

-¿cuándo?

-estaba pensando en decírtelo en año nuevo pero las cosas se adelantaron – adoraba ver la impresión en el rostro de su novio – Gaara… ¿te casas conmigo?

-… - sonrió al ver aquella joya en su mano – me encantaría – con delicadeza posó un beso casto en los labios del mayor – gracias

-el que tiene que agradecer soy yo – susurró mientras disfrutaba del aroma del menor, lo besó también, uniendo sus labios para sellar el pacto que con ese anillo… estaba completo

 

 

Continuará… 

 

 

 

Notas finales:

¿Qué les pareció?

la verdad me coincidió la fecha con lo que estaba escribiendo jajajaja

también aviso que me concentraré un poco en Kankuro y... ¿leyeron algo sospechoso en el capítulo?... si alguien lo vió me lo dice jejejeje

 

Les deseo feliz navidad y tal vez nos veamos de nuevo antes de que acabe el año, pero no prometo nada

 

Los amo y les envio besos y abrazos

Se cuidan 

Besos!!!

 

 


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