_se puede saber qué diablos hacen en mi casa_ pregunto intentando controlarse_
_ayudar Aomine-kun
_y ¿en qué?
_soy médico, puedo encargarme de su herida nanodayo_ menciono el peli verde mientras entraba al hogar_
_yo se cocinar Mine-chin, cosa que tú no sabes hacer_ agrego mientras se dirigía a la cocina en donde podía escuchar algunas risas
_Aominecchi recuerda que antes de ser piloto fui modelo así que puedo conseguir toda la ropa cómoda para Kagamicchi_ menciono mientras al igual que los otros entraba al hogar_
_sabes lo que yo puedo hacer Daiki_ menciono para luego entrar
_y yo Aomine-kun estoy aquí para que no te aproveches del pobre Kagami-kun además de ayudarlo en lo que pueda_ dijo cierta personita haciendo que el moreno diera un salto al escuchar la voz en su espalda
_maldito Tetsu deja de hacer eso
_ ehh hola chicos, es extraño verlos a todos fuera del jardín_ escucharon una angelical voz haciendo que todos miraran en donde provenía aquella dulce melodía_
_venimos a ayudarte Taiga así no estás solo, más cuando estas herido
_no deberían de haberse molestado, pero realmente gracias_ dijo con una gran sonrisa que hizo que los corazones de los mayores latieran aceleradamente al verlo, tan lindo con su gran sonrisa y sus mejillas un poco sonrojadas
_Kaga-chin y el resto la comida esta lista_ menciono con su típico tono mientras los demás se dirigieron al comedor_
Como pudieron se organizaron para poder comer, pues los pequeños querían estar con su querido profesor y bueno los padres también querían poder compartir aquellos momentos con la persona que amaban.
Al terminar de cenar, los pequeños se ofrecieron a ayudar al tigre a bañarse, cosa que los padres no pudieron hacer nada, pues al momento que iban a hablar sus hijos ya se llevaban al tigre al baño con una gran sonrisa en sus rostros y ellos no eran tan egoístas para destruir la alegría de sus hijos
Había pasado una semana en donde los seis padres con sus hijos cuidaban al pelirrojo, por sugerencia de Akashi se habían cambiado a una casa más grande, a saber cómo lo había conseguido el pelirrojo menor pero el lugar era perfecto, todo el lugar era como estar en casa más si cuando despertaban podían escuchar la angelical voz de su amor diciéndoles buenos días. Su relación con su amor era más estrecha, esos días habían aprovechado para conocerlo más y que el pelirrojo supiera más sobre ellos. Sus hijos, bueno estaban maravillados de poder estar todo el tiempo con su querido profesor, amaban tenerlo cerca de ellos y que este se preocupara de ellos y los cuidara siempre, además de sentir aquel calor tan tranquilizador cuando dormían con él.
Los pequeños habían decidido algo en todo ese tiempo, habían discutido hasta llegar a una conclusión, algo en que todos estaban de acuerdo y que por nada del mundo dejarían que aquello no se cumpliera. Por ello una noche en donde se habían despertado viendo por unos minutos como su querido profesor dormía tranquilamente. Se levantaron con mucho cuidado procurando no hacer ningún ruido para poder salir de la habitación y dirigirse a la sala de estar
_padre queremos decirles algo_ menciono la pelirroja haciendo que los seis hombres que en ese momento estaban hablando de a saber que, se quedaran callados en espera lo que dirían sus hijos, pues cada uno se encontraba completamente serio, por lo que el tema suponían que debía de ser sumamente importante para que sus hijos mostraran aquella expresión
_¿qué pasa?
_queremos que Taiga-sensei sea nuestra mamá_ mencionaron los seis pequeños haciendo que los padres se sorprendieran_
_no queremos que Taiga-sensei se vaya de nuestro lado, por lo que decidimos que compartiríamos así todos estaremos con Taiga-sensei_ menciono Nao con una sonrisa al igual que los demás pequeñitos al pensar en la brillante solución que dieron_
Los padres se encontraban en silencio tras haber escuchado toda la explicación de los menores sobre la solución a sus problemas además de dejar de competir entre ellos. Vieron como sus hijos con una sonrisa se despidieron para volver a los cálidos brazos que los esperaban dejando a ellos en un estado y en un silencio que nadie se atrevía a romper. Solo se escuchó un suspiro de parte de Midorima y Kise haciendo que los seis se miraran mostrando una pequeña sonrisa, sabiendo con solo la mirada la decisión que habían llegado
Dos semanas habían pasado y para el tigre han sido las mejores semanas de su vida, se sentía tan bien estar en aquel lugar, junto con aquellos pequeños y sus padres…sus padres, aquellos hombres que con cada día que pasaba lograban entrar en su corazón, sabía lo que pasaba, aunque había veces que buscaba alguna excusa para dejar de pensar en aquello, estos volvían con más intensidad haciendo que no pudiera negar lo inevitable
el día de descanso paso lentamente para el tigre pues ninguno de los mayores se encontraba en el hogar. Cuando se despertó se dio cuenta que ninguno de ellos se encontraba en casa haciendo que una tristeza naciera. Siguió con pequeñas labores que ya podía realizar, viendo como los pequeños lo ayudaban en todo y le dedicaba tiernas sonrisas. Por el hermoso día que había habían decidió descansar en el jardín junto a los pequeños que se encontraban encantados con la idea
Veía como las niñas jugaban con las flores del jardín armando coronas y otras cosas mientras que los pequeños traviesos jugaban a las escondidas, realmente le gustaba estos días pero sabía que aquello se terminaría cuando estuviera completamente recuperado, todos aquellos momentos se irían.
_Taiga_ escucho sacándolo de sus pensamientos, viendo como seis hombres se encontraban frente a él, a unos cuantos metros. Se colocó de pie viendo como los chicos estaban algo tensos y los pequeños miraban de un momento a otro con una pequeña sonrisa_
_¿pasa algo?
_ bueno…nosotros….nosotros…TE AMAMOS POR ESO SE NUESTRO NOVIO_ terminaron de gritar por los nervios que sentían en ese momento, habían creado una buena declaración para aquel momento, pero al tener a la persona que amaban frente a ellos fueron las únicas palabras que lograron decir. El tigre estaba que no se lo creía, con un sonrojo y una sonrisa dio su respuesta
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_Nao no estés de vago que no falta nada_ menciono cierta joven pelirroja de unos quince años_
_ya voy querida emperatriz_ menciono el nombrado siguiendo en lo que estaba realización_
_nee donde esta Kaito nanodayo_ preguntaba una joven_
_Shiemicchi esta con su papá terminando el pastel_ menciono un rubio de la misma edad de las joven llevando un hermoso adorno floral_
_ya todo está listo solo falta que llegue_ menciono un joven peli celeste con una sonrisa_
_cierto solo falta que llegue Wataru_ mencionaron los demás jóvenes viendo su obra_
_chicos ya viene_ dijo Kaito haciendo que los chicos se escondieran rápidamente_
Cada uno desde su escondite veían entrar a un lindo pelirrojo asombrado por la gran decoración que había en el jardín haciendo que una gran sonrisa se le dibujara en el rostro, aquellos seis jóvenes no pudieron aguantar más y salieron corriendo de sus respectivos escondites para lanzarse a los brazos del pelirrojo
_Feliz día mamá_ gritaron los seis abrazando fuertemente a su querido pelirrojo, escuchando las risas y las gracias de parte de él_
_ellos nunca cambian
_ya sabes Aominecchi no importa eso siempre se comportaran como unos niños cuando están con Kagamicchi
_no importa que hayan pasado 11 años desde que Kagami-kun nos aceptó ellos siempre han estado bastante apegados a el
_ni me lo recuerdes Tetsu, esos bribones no soltaron a Kagami como 4 años, ninguno de nosotros podía estar aunque sea una hora con él ni mucho menos dormir con él
_quieren demasiado a Gami-chin, ellos siempre se esfuerzan mucho en su cumpleaños y el día de la madre
_sí, ni que se diga de los celosos y posesivos que son_ agrego el emperador haciendo que cada uno mostrara una pequeña sonrisa, pues tenía razón, los chicos eran bastante celosos y posesivos, no dejaban que ningún hombre o mujer se acercara al pelirrojo_
_Daiki, Shintarou, Seijuuro, Tetsuya, Ryouta, Atsushi vengan de una vez_ escucharon, viendo como su amado sonreía junto a sus hijos, con la misma sonrisa que los enamoro, aquella sonrisa que vieron por primera vez, comenzando con esta los momentos más hermosos que han y compartirán con aquel hermoso pelirrojo que los volvió a la vida convirtiéndola en una más divertida y llena de colores_
fin