El día era brillante, el cumpleaños del más joven de los príncipes, aquel en que su futuro se le revelaría y con ello la responsabilidad de su puesto en la familia, un evento importante, la ciudad se vistió de flores y brillantes colores por el regocijo que sentían ante la festividad y la llegada de las nornas a sus tierras, el palacio alzado en lo alto como un gigante erguido ante su oponente, imponente, carismático.
Los sirvientes corrían de un lado a otro preparando la festividad Frigga la madre del festejado ordenaba al sin fin de trabajadores como tenía que estar acomodado todo, Odín ni siquiera prestaba atención a lo que sucedía ensimismado en sus deberes como actual regente de la ciudad dorada, pero para Loki eso no le quitaría importancia a su día, Thor estaba a su lado arreglándose para la ceremonia principal en donde recibiría su yelmo y con él, el honor de ser parte de las filas de guerreros Asgardianos que cumplían con su destino.
Era un guerrero a ojos de su hermano y de su madre, un hechicero consumado y predilecto en estrategias, Thor sabía que sería un gran general alguien que dirigiría a las tropas y levantaría en alto el orgullo de su familia y de Asgard, se miraron una última vez al espejo
-¿estás listo?- cuestiono al moreno quien sonrió
-yo siempre he estado listo- respondió como siempre, Thor le palme el hombro en muestra de afecto y salieron al salón principal a la primera ceremonia, Odín les esperaba en su trono cuando entraron Thor se colocó a un lado de su padre y Rey
-Pueblo de Asgard- dijo levantándose con su cetro en una mano y la otra extendida –es un privilegio presentar al menor de mis hijos- Loki se hinco ante su rey y Padre –que en este día se convierte en un hombre y guerrero para defender a su pueblo, honrar a su familia y enaltecer su reino- un sirviente se colocó al lado del monarca, el joven llevaba en sus manos una caja grande la cual al abrirse se revelo el yelmo que portaría Loki y distinguiría, todos quedaron asombrados por el casco que resaltaban dos cuernos –con tu ingenio y dotes de liderazgo guía a tu gente a la victoria justa- coloco el casco sobre la cabeza del moreno
-lo prometo- concluyo la primera ceremonia de la mañana, por la tarde todo era risas charlas amenas, en los jardines los nobles y reyes de otros reinos junto a sus familias pasaban un buen rato, esperando la llegada de las nornas, cuando una trompeta se alzó con su llamado Loki junto a su familia se dispusieron a entrar al palacio a recibir a las mujeres y juntos sin más que la familia real y las diosas se metieron a la sala donde las tres diosas reverenciaron a los presentes
-siempre es un honor venir a su hogar y dar nuestras predicciones- dijeron las diosas al mismo tiempo –un día en el que se goza de alegría y felicidad pues nuestro joven príncipe a alcanzado su mayoría de edad….- Loki se acercó a ellas extendiendo sus manos al frente mismas que tomaron las mujeres –de tu linaje cuatro creaturas se alzaran- dijeron entrando en trance –ellas el Ragnarök presidieran, tu familia morirá a tus manos que serán manchadas con la sangre de seres inocentes tanto por tus hijos como por ti mismo, pero todo esto será redimido por la sangre de tu sangre concebida por un corazón puro, pero solo si tu olvidas tu dolor y te aferras a la esperanza que traerán a tu vida- Loki sintió una punzada en su corazón volteando a ver a su hermano y padres, para abrasarse de su madre negando
-no… no… me niego a un futuro tan desdichado… como osan creer que mataría a mi familia con mis manos… a que mis hijos provocaran la destrucción… seres impíos, infames largo, fuera aléjenlos de mi- dijo el moreno aferrándose a su madre quien le susurraba al oído palabras de consuelo, Odín ensombreció su mirada colocándose a espaldas de Loki y colocando su mano en la espalda baja de este
-yo Odín Padre de Todo, creador de todo te despojo de la semilla procreadora de tu linaje, seguirás siendo hombre pero no podrás traer vida como tal- las nornas se vieron mutuamente negando bajaron su mirada al suelo mientras el joven príncipe se retorcía de dolor aferrándose a su madre para terminar desmayado en sus brazos.
Aquella fiesta que debió de estar llena de júbilo se convirtió en la desdicha del menor de los hermanos, Loki no salió de sus alcobas sino meces después instado por Thor y su madre, caminando a paso lento sin ánimos fue dirigido a los jardines donde tomarían un refrigerio, Loki parecía más pálido de lo normal y su tristeza se hacía palpable en la mesa
-hijo mío todo es reversible… cuando tu padre compruebe que aquello solo es una falacia todo volverá a ser como antes- intento convencer Frigga al menor quien negaba
-mi destino fue marcado y manchado… mi estirpe a muerto antes de conocer el sol o la luna- un par de lágrimas rodaron por sus pálidas mejillas y Thor sentía que aquello le descorazonaba, se propuso hablar con su padre y abogando por su hermano recibiendo negativas y rechazos.
Pero el tiempo es cruel, y mientras las lunas pasaban, las estaciones comenzaban y morían, los meces se fueron haciendo años y bien dice que el tiempo cura toda herida pero una nueva estaba por abrirse ante sus ojos, había amado y le habían amado tanto hombres como mujeres le adoraban hasta que le conoció, una tarde a las afueras del palacio era alto sus ojos grises su cabello negro, la piel quemada por el sol pero tenía una sonrisa que le atrajo al instante y al parecer fue algo mutuo pues no podían dejar de mirarse, Svadilfari era su nombre y su porte de guerrero fue una de las cualidades que llamo su atención, meses de cortejo entre ambos luchando por sus posiciones.
No faltó decir que el príncipe cedió su posición por primera vez dentro de la cama, pero sintió el calor de su cuerpo recorrerle cada centímetro y como vibraba ante la imposición del guerrero, lo disfruto el tenerlo dentro el recibir su amor, pero eso trajo consecuencia y no gratas pues el mareo, náuseas y dolor eran fuertes en su cuerpo, cuando Odín supo se encerró a Loki no sin que antes viera como su amado a quien se había entregado era decapado ya que Odín no estaba dispuesto a dejar vivo a alguien que pudiera engendrar vida dentro del menor de sus hijos.
Loki sufrió encerrado en una torre sin compañía con el dolor de saber muerto a quien amaba y que en su interior crecía el único recuerdo de él, le cantaba y susurraba palabras de cariño, muchas noches incluso Thor escuchaba el canto de su hermano acurrucando a su pequeño aun en su vientre, amaba a ese ser quien era su única alegría y esperanza le prometía que sería feliz y que su vida sería apreciada, le hablaba de su padre y del fuerte guerrero que sería al crecer, tenía tantas ilusiones y lucharía contra la profecía de las nornas, el criaría a su hijo en los preceptos de Asgard y aria de él alguien de bien.
Loki le llamaba al pequeño Sleipnir desde su quinto mes en el que le dijeron que era un barón, la ilusión se acrecentó aún más al saber que su primer hijo sería un hombre, su príncipe, fue una tarde calmada cuando los dolores del parto empezaron Loki se dobló por la primera contracción apretando la mandíbula, fueron horas de incontable sufrimiento para el moreno, el dolor no había menguado ni un solo segundo y Padre de Todo había prohibido utilizaran cualquier sedante o poción que ayudara a disminuir el dolor, esa sería su penitencia y escarmiento para que no tuviera más hijos y cuando por fin nació el pequeño Odín lo tomo en brazos y salió sin que Loki le pudiera ver.
Lloro, desconsolado se aisló de todo contacto con cualquier ser ni siquiera Thor le había podido ver, tenía el alma destrozada y todo su ser se sentía marchito, ahora fue más tiempo hundido en un mutismo y la obscuridad que le rodeo como un manto que le diera paz, fueron años los que pasaron antes de que el moreno diera algún signo de salir de su depresión y solo fue para enfrentar la ira de Odín quien arto de las suplicas de Thor y Frigga lo obligo a asistir a una cena.
No toco alimento ni hablo, Thor podía ver la tristeza en su mirada y Frigga en su corazón
-de ahora en adelante asistirás a cada comida- exigió Odín al menor quien no dijo o hiso nada simplemente miro al frente como si su mente estuviera en otro lugar uno que le protegía, pero Padre de todo no fue indulgente puesto que todo había sido culpa de Loki y había tomado su mutismo como un desafío el cual pagaría caro el menor de sus hijos –si no quieres volver a hablar te concedo tu deseo- al día siguiente le condeno a durar con los labios cosidos por más de un año, fue doloroso.
Thor fue el encargado de tan indigna tarea él le cosería los labios al menor por haber desafiado a su padre, no pudo negarse y ante la atenta mirada del consejo y Odín le cosió los labios, Loki lloro aun aferrándose a esa pequeña luz y esperanza de poder en algún momento ver a su hijo o de al morir ver a su amado, pero la muerte no era algo sencillo de obtener y se dio cuenta cuando una tarde lo intento, se paró en la cornisa sintiendo el aire fresco de Asgard pasar por entre sus brazos, piernas y cabello, cero los ojos y se lanzó al vacío donde el mar eterno le abrazaría y hundiría en sus frías y trémulas aguas, pero no conto con que Thor le viera y así como él se lanzara a rescatarlo.
Y con una nueva afrenta a Odín Loki se quedó ciego bajo la magia y ordenes de Padre de todo, y en su mutismo y cajera encontró un nuevo amigo, la locura que se adueñó lentamente de su ser inmortal corrompiéndole desde adentro y creando un odio e ira que sentía le consumirá sin dejar nada de su cuerpo, cuando los castigos fueron retirados Loki se reincorporo a las tropos Asgardianas, esperaba morir en el campo de batalla honrado a su hipócrita familia para poder descansar por fin, pero solo encontró más desdicha y dolor.
Durante una campaña junto a algunos guerreros de Asgard en los obscuros bosques de Svartálfaheim fueron emboscados y lucho como un guerrero pero sus cobardes tropas de jóvenes recién salidos de la academia no pudieron hacer nada contra los seres siniestros de aquellas tierras, fueron atrapados y encarcelados y durante su estadía en aquellas tierras como comandante e hijo de Odín su tortura se volvió física y psicológica, los días se volvieron tortuosos y su cuerpo se convirtió en una piltrafa de lo que era, cuando fueron rescatados por una de las tropas principales guiadas por su hermano y regresados a Asgard, Loki ya tenía dos meces de embarazo.
Loki lloro como nunca, y esta vez fue más doloroso y terrible, estaba desnutrido y apenas si podía mantenerse de pie, Frigga junto con un sanador le cuidaban de día y noche sin dejarlo a solas en ningún momento, pero Loki temía por la vida de esa nueva creatura que a los cuatro meses supo eran dos, los gritos de Odín retumbaron por todo Asgard su ira crecía aún más ante la nueva progenie del moreno y las nubes negras que pronosticaban dolor, desdicha y pena para el menor de los príncipes se cernieron sobre el palacio
-déjenme morir- rogo a su madre una tarde donde sentía que sus fuerzas se habían terminado, Frigga le miro llorando mientras le trasfundía de su propia energía
-no nos dejes mi pequeño- sollozo la mujer quien le dedicaba una mirada de dolor tan grande –no soy tan fuerte como para superar el dolor de tu perdida mi niño- Loki ya no la miro pensando en sus palabras “fuerte”, ¿era como el veía su madre al haber perdido a Sleipnir?, no realmente él no se veía así se sentía aún más débil y roto, pero sus plegarias llegaron a oídos sordos, la muerte no le alcanzo y cuando por fin tubo a sus dos pequeños al igual que con el primero sin ayuda de ninguna pócima para el dolor Odín los tomo en brazos y se los llevo.
Loki no volvió a hablar de sus hijos o de nada mas ese día había muerto como debió de haberlo hecho hacía mucho tiempo atrás y ese ser obscuro que había engendrado Padre de Todo se movía con su piel, hablaba como el pero no era el, ya no mas Loki aprendió a actuar a ser una pieza dentro del tablero pero se auto dirigía no tenía rey, ya no cada movimiento tan fría y cruelmente trazado para sus propios propósitos para su bienestar, sonreía con encanto, se movía como un príncipe pero aun así su padre le temía a la progenie que había engendrado
-tendrás otro hijo más- dijo ese día por la mañana frente a la familia, Thor se atraganto mientras Frigga veía a su esposo con odio, Loki no expreso emoción alguno
-¿y de quien sería esta vez el engendro?- cuestiono calmado atento a la mirada incrédula de su hermano y madre mientras mordía un pan
-de un ser puro de corazón… honesto- fueron las palabras de Padre de Todo, Loki le miro sonriendo de lado con sarcasmo
-por tu casería… si es que llegases a encontrar a algún ser como el que describes- levantó su copa hacia su padre degustando del vino que inundo su paladar
-le he encontrado- le vieron incrédulos a lo que Odín sonrió triunfante –mi hijo… mi primogénito será quien sea la contraparte- apunto a Thor quien se levantó tirando la silla
-Padre- exclamo con horror mientras Frigga solo le veía suplicante
-no puedes… son hermanos- arrojo la soberana recibiendo una mirada de advertencia de su esposo quien parecía decidido
-¿y deseas estar presente para estar seguro que fue él o mandaras a Heimdall a que sea nuestro testigo de tal aberrante unión?- cuestiono Loki con sarna observando a Odín con un brillo en su mirada
-basta… es una orden de su rey- grito fúrico
-Padre te lo pido esto no es correcto- rogo Thor pero la decisión había sido tomada y a pesar del llanto de Frigga, la negativa de Thor y la poca cooperación de Loki, Odín lo había decidido y nadie podía contra ello.