El sabia que había arruinado su mas grande felicidad, simplemente no pudo explicarle a Kangin quien era aquel chico pues lo supuso y se aparto de el.
Sin dejarle explicar, el mas grande decidió renunciar y se fue dolido.
En esos momento se encontraba en shock, esto no se lo imagino ni en sus peores pesadillas.
Acababa de perder sus dos oportunidades de ser feliz, no podía reaccionar en ese momento.
Habían pasado 7 horas desde aquello y el no tenia animo de salir de aquella oficina..
Debió haber escuchado a Yesung cuando este le dijo que era momento de detenerse, pero su terquedad gano y al final perdió.
Se había prometido a si mismo terminar con todo aquello una vez dijera el "si" pero nunca espero que la primera visita de su prometido fuera aquel día.
Intento culpar a su secretaria pero sabia que el único culpable era el mismo. creería creer que su mente le había jugado una mala pasada pero sabia que era la realidad y había que afrontarla.
Estaba renunciando a Kangin pues lo único que pasaba por su mente ahora el rostro de Heechul una y otra vez, no podía sacar esa mirada rota y al mismo tiempo de odio de aquel rubio.
Sabia que tenia que hablar con el menor a como de lugar, así tuviera que ir a buscarlo a su casa y enfrentar a sus guardias solo quería hablarle.
Bajo corriendo las escaleras de su edificio y al llegar al estacionamiento se sorprendió y molesto al mismo tiempo.
Esto sin duda era una infantería de alguno de los dos..
Su automóvil tenia el vidrio roto completamente.
-Heechul..- Susurro cerrando sus ojos, no podía reclamar nada pues sabia que merecido se lo tenia.
-No sera fácil..- Susurro saliendo de la empresa para tomar un taxi.
Tardo cerca de 30 minutos en llegar a la casa del rubio, la cual estaba completamente cerrada.
-¿Qué se supone que le diré?- Se pregunto mentalmente con una mueca en su rostro.
-Se que lo que hice no estuvo bien y me deje llevar por alguien más, se que falle pero por favor, fue solo un error, se que te engañe y de verdad lo siento pero.. no quiero perderte..- Susurro aun sin creerse a si mismo.
Toco el timbre después de armarse de valor.
La cara del rubio salio en el la pantalla del timbre y al verlo solo susurro con odio.
-Vete a la mierda Jungsoo.-
El mayor siguió tocando pues sabia que de no hablar con el hoy, no volvería a hacerlo por lo rencoroso que era el rubio.
-Adelante..- Dijo después de 2 horas el rubio.
Leeteuk se confió y comenzó a caminar a la puerta del rubio, entre aquel enorme jardín pero grande fue su sorpresa de que de la nada distintos perros enormes de seguridad comenzaron a salir, en su intento por salvar su vida lejos de esos perros, pudo ver al rubio sonriendo complaciente en un enorme ventanal.
-Jungsoo reconocen a los de su misma especie, no les tengas miedo, no te harán nada que no te merezcas!!- Grito abriendo aquella ventana.
-Solo quiero hablar!!!- Grito el mientras uno de los perros lo mordía.
-¿Terminaste de revolcarte con aquel mugroso?- Grito con molestia.
-Por favor solo necesito hablar..- Grito este intentando safarse de los perros.
-Me importa una mierda lo que tengas que decir, te daré 5 minutos libres de mis cachorros para que te largues y no vuelvas.- Dijo viendo sus uñas y sonando un silvato.
Después de aquel curioso sonido, todos los perros se formaron y soltaron al mayor.
-Te quedan 4 minutos!!. Grito viendo su reloj
Teuk se puso de pie, sacudió su saco y se quedo viendo fijo al el rubio.
Heechul sonó el silbato de nuevo y al escucharlo Leeteuk corrió a la salida pues los perros nuevamente le correteaban.
Los perros realmente le hicieron heridas superficiales pues así lo había decidido Heechul al entrenarlos, no podía realmente lastimarlo completamente aun cuando lo deseaba.
Claro que esa fue sin duda una advertencia para Teuk, cosa que sin duda tomo, esperaría un tiempo hasta que el rubio se calmara.
Sabia que merecía todo su odio, pero quería recuperarlo, al final de cuentas se había enamorado de aquel carácter del rubio, es por eso que aguantaría lo que fuera necesario.
El mayor se dio 1 mes lejos del rubio, pensando día a día el como conseguir su perdón, supuso que después de ese tiempo al fin accedería a hablar con el, por lo que nuevamente fue a esa inmensa mansion.
En aquella ocasión encontró la mansión abierta, por lo que entro hasta la elegante puerta de madera y llamo por unos momentos, hasta que alguien le abrió.
-Hola Jungsoo, no eres bienvenido en mi casa.- Dijo el señor Kim de forma fría.
-Señor se que cometí un error pero por favor puede permitirme hablar con su hijo..- Suplico.
-¿Te estas escuchando? ¿Como dejare que el cobarde que engaño a mi hijo vuelva a si quiera intentar de nuevo hacerlo?- Dijo frió.
-Se que fue un error señor, se que le falle pero de verdad lo quiero y es por eso que estoy aquí...- Dijo haciendo una inclinación.
-Cuando alguien ama realmente jamás hace esas tonterías.- Dijo frió.
-Usted sabe que yo por el me desviví, se que ha pasado un tiempo desde el día aquel en que no pensé las cosas y de serle infiel, es por eso estoy aquí dándole cara al problema.- Dijo sincero.
-Le rompiste el corazón a mi Hijo!!! El sera un chequeado, histérico, único pero siempre que te insultábamos en la familia el daba la cara por ti, nunca te fue infiel entonces ¿Porque?- Pregunto enojado.
-Tampoco tengo idea señor, supongo fue un momento de debilidad y no sabe como me quema la conciencia por aquello, le juro que con el quería un gran futuro y por idiota lo he perdido.- Dijo viendo el piso.
-Tienes razón Jungsoo lo has perdido.-Dijo intentando cerrar la puerta el señor Kim pero fue detenido por otra persona detrás de esta.
-Supongo no te cansas pero ¿Acaso el otro ya te perdono y es por eso que ruegas por tu otro juguete?- Dijo frió Heechul ahora en su cabello con un tono negro.
-Eso fue un error y no sabes como lo lamento día a día..- Dijo arrodillándose por perdón, haciendo a un lado su orgullo Teuk.
-Levántate, conmigo no sirven esos trucos de mierda.- Ordeno recargado en la puerta.
-¿Qué puedo hacer para que me perdones?- Pregunto con lagrimas intentando salir.
- Nada cambiara la triste realidad pero si de verdad lloras mi perdón te perdono..- Dijo viendo fijamente al mayor.
-¿De verdad?- Pregunto Teuk con sorpresa.
-Si pero no regresare contigo hoy, ni mañana, ni jamas dime ¿Como confiaren alguien que te lastimo?!! ya no hay vuelta atrás se termino lo nuestro tu te vas, yo me voy y cada quien por su camino.- Dijo directo y con una mirada por demás fría.
-Heechul por favor..- Dijo de nuevo Teuk
-Te deseo lo mejor de corazón sincero, hoy te digo adiós se termino todo lo nuestro y largo de una vez o sacare de nuevo a mis perros.- Dijo señalando la salida.
-ah..- Suspiro cansado Teuk.
-Si de verdad me llegaste a amar, aléjate por completo de mi vida.- Dijo cerrando la puerta en su cara.
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Yesung por su parte estaba peor que el Jungsoo pues el menor le había dejado en claro que no deseaba volver a hablarle en su vida, sinceramente intento comprenderlo, sabia que lo merecía pero simplemente el castaño se había impregnado en su día a día.
Día a día le pedía perdón a aquella imagen del menor por lo que pasó, juraba que lo que ocurrió no fue mi intención
Tenia tanto que decirle al menor, quería volver a esos tiempos donde todo estaba bien, antes de conocer a Ryeo, aquel momento donde solo era el y el castaño.
Siendo sincero, la verdad no había dejado de pensar en lo que hizo y en todo lo que provoco y aunque sabia que ya era muy tarde, no pensó en olvidarle ni un momento.
-Kyu no sabes lo mal que estoy por no tenerte..- Susurro llorando y tomando otra botella de vodka del que ya se había vuelto adicto.
Su empresa seguía de pie gracias a su familia, pero el jefe de la enorme compañía Kim estaba de rodillas en aquella esquina llorando, aunque nadie realmente lo veía de esa manera pues al salir de su departamento se hacia el fuerte.
Tras dar un tiempo y no aguantando más, decidió por fin actuar, intentar hasta el cansancio porque el menor regresara.
Aquel día envió a la casa del menor una caja de chocolates con una nota pequeña hacia el menor.
"Extraño trasnochar contigo, hablarte todos los días, tomar tu mano y sonreír solo al sentir que tu eras mío, pero con mis actitudes tú sufriste y de verdad no sabes como lo lamento.."
Claro que al regresar de su oficina aquel día, encontró en su puerta el paquete de chocolates completamente roto y la carta arrugada.
Ese era un paso, seguiría intentando mucho más.
La siguiente semana este envió un disco de música favorito del menor junto a otra nota.
"Tengo rabia de pensar en toda mi ineptitud, mi orgullo mato al amor y hoy descansa en un ataúd de recuerdos, lugares, cartas, palabras y emociones"
En esta ocasión el disco regreso roto y junto a este una nota del menor.
"¿Puede irse a la mierda hyung? :)"
Y a pesar de ser simples palabras, el mayor pudo apreciar el enojo del menor en ella.
Pero nuevamente no se rindió y siguió mandando cartas y artículos por cerca de 1 mes más, la mayoría de los objetos regresaban a su entrada en mal estado y ya no había vuelto ninguna nota del menor.
Para el 10° intento, mando una bufanda junto con una nota.
"¿Algún día me perdonaras?"
Esta nuevamente regreso a su entrada rota en pedazos junto una tarjeta del menor.
"Intenta repararla sin dejar marca alguna, de conseguir eso, ven a mi, pues sera imposible unir algo roto, es mejor te compres otra y te olvides de esa"
El mayor intento el reto de reparar aquella bufanda, pero a pesar de haberlo intentado y habla unido, esta quedo con pequeñas puntadas y comprendió un poco a Kyu, aunque al final había recuperado la bufanda y no seria la misma, nunca la cambiaría.
Siguió mandando más cosas, una de ellas fue una chamarra del grupo favorito del menor original, junto a una nota nuevamente.
"Solo quiero pedir perdón por el daño que te hice, fui incoherente al lastimar a la persona que tanto quise y mi meta de ser feliz se que nunca estará completa pues ya solo te podré amar en historias de mi libreta..."
Esta vez Kyu no le hizo nada a la bufanda, la regreso tal cual la había mandado y añadió una nota nuevamente.
"hyung le regreso esto que por obvias razones supongo no era para mi sino para el enano aquel, pues es talla chica siendo que usted y yo somos mediana, por favor deje de molestarme a menos que me regrese aquella bufanda como se la pedí"
Poco después envió unas rosas azul zafiro las cuales para su suerte no regresaron a su entrada ni tampoco la nota.
"Te pido perdón por lo que pasó...Deshice este gran amor y no puedo evitar ni un instante pensar en cómo poderlo arreglar.."
Siguió mandando cosas a la casa del menor y por alguna razón estas ya no volvían como solía hacerlo antes, no sabia si alegrarse porque el menor las tuviera o temer porque era posible que el menor las tirara.
En este momento había llegado al punto de creer que era mejor dejarlo de una buena vez ser feliz, si con el no quería serlo podía serlo con otra persona pues era una grandiosa persona aquel castaño.
Compro un enorme ramo de rosas azules y en lugar de escribir una nota como antes, ahora enviaría por ultima ocasión esto, una carta y aquellas flores que sin duda sabia eran las que el menor amaba.
Querido Kyu:
Me entregaste tu corazón y te lo regresé roto por ser un maldito idiota, se que me amabas tanto como yo, aunque no lo creas..
Solo me queda de ti cada una de nuestras fotos porque por mi culpa ya no quieres nada entre nosotros, se que de tus hermosos ojos hice que brotara el llanto y me arrepiento tanto, no te imaginas cuanto!!
te ofrezco una disculpa, aunque es demasiado tarde, no sé qué me pasaba, pero era un cobarde...
No debí ilusionarte si no te iba a valorar porque, aunque te quería no lo supe demostrar..
Recordarte cada día será mi mayor castigo Kyu, recordando que pude haber sido muy feliz contigo, al final quiero dejarte claro lo que siento pues hasta siento tu aroma cuando me sopla el viento Que, aunque me veas reír estaré muriendo por dentro sabiendo que estarás con alguien más sonriendo, viviendo momentos felices, no tristes como los que te he dado, por eso creo que ya me has soportando demasiado y no quiero seguir interfiriendo en tu camino, yo fui el culpable de todo y lo acepto completamente.
Siento las molestias que te he dado, por fin me detendré y te dejare ser feliz..
Att: El idiota infiel.
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Kyu recibió todos aquellos regalos del mayor, rompió todos aquellos desquitando su rabia e incluso le agradaba ver la cara de tristeza del mayor, no sabia realmente como es que podía continuar rogando por el, cuando había dejado claro que no lo quería.
Quedo sorprendido por aquel ramo de rosas azul zafiro, pero lo hizo aun más al leer la carta.
Quería preguntarle al mayor el por que de aquella carta en unos cuantos minutos su corazón rompió, sintió un nudo en la garganta y un dolor tan fuerte que no asimilo aun, no le deseaba ningún mal aun que por dentro es lo quería, esto era tan confuso para el menor, sabia que le quería pero su cabeza no comprendía, su cabeza estaba confusa, quería parar su corazón, necesitaba ayuda, necesitaba que alguien le despertara de esa amarga pesadilla..
Amor despiertame y abrasame como lo hacías, dime que solo es sueño y todo estará bien que me amas demasiado y siempre has sido fiel pero por mas que lo desee es una cruda realidad..