Capítulo 7 "Quien obra mal no espere el bien"...
En el episodio anterior...
-¿Quién anda ahí?- pregunta al rubio inquieto.
La chica abrió la puerta de la ducha y sin dudarlo se apoderó de los labios de un impresionado Draco.
-¿Qué pasa?... sintiendo por completo el peso de la menor de los Weasly.
-No me digas Malfoy que sólo te van los hombres, sí te has casado con Parkinson- lo estrecha contra su cuerpo.
-Estás loca Weasly, la única que pierde aquí eres tú- le dice con ironía.
-Y tú, ¿qué perderías?, ¿tienes miedo de una gryffindor?, tú, el príncipe de las serpientes rastreras y ponzoñosas.
-Te das todo este trabajo para apartarme de Harry, no puedes tolerar que él no te quiera, que te haya dejado por mí.
-Hablas demasiado, sé que te gusta esto- le besa en el cuello.
-No pierdas el tiempo conmigo, no funcionará este tipo de tácticas- la toma por las muñecas.
-Veo que estás reaccionando... dime si te puedes resistir a esto- lo besa con fiereza, baja hasta su entrepierna y comienza a masturbarlo.
-¡Ah!- gime el rubio ante la oleada de placer.
-¿No me tomarás?- apartando la mano del erguido miembro del rubio.
-¿Estás segura?, podrías salir lastimada.
-Estoy corriendo el riesgo, ser lastimada es sólo parte de ello- dejando que el rubio se pusiera encima de ella, recorriendo con sus manos la otra figura...
-Lo haré si tanto lo deseas- la penetra y la pelirroja se aferra a su cuerpo, gime a causa del dolor... tú lo querías- le dice al oído.
HABITACIÓN MÚLTIPLE...
-¿Por qué siento tantos mareos?, estas náuseas parecen de embarazadas... todo el cuarto me da vueltas... creo que iré al baño para refrescarme la cabeza... sale del cuarto y camina por el pasillo hasta entrar al baño, ni siquiera se percató de los extraños ruidos que provenían del interior...
Y ahí los vio... Draco, estaba poseyendo a su ex novia, en el baño y parecían pasarlo muy bien los dos...
-Esto...- se le cae un vaso donde habían hartos cepillos de dientes al lavamanos.
-Harry- murmura Draco.
-¡Rayos, esto no estaba dentro de mis planes!
Los actores involucrados, ninguno atinaba a hacer nada, era tanto el estado de shock que pasaron unos minutos antes de que el rubio se levantara del suelo y se tapara con una toalla y la pelirroja, roja de vergüenza, tomara su ropa para salir del lugar... el moreno de ojos verdes, estaba con el corazón destrozado... ella había sido su novia, Draco había llegado demasiado lejos... ya era bastante que estuviera casado con Parkinson como para aguantar que ahora fuera Ginny, su nueva conquista...
-Lamento la interrupción- dijo secamente para darse vuelta e intentar marcharse.
-Harry, ella fue la que me sedujo, yo no la traje para acá- se intentó defender.
-¿Se trata de tu nueva técnica?- con voz molesta- a tí nadie te importa que no seas tú mismo, ¡TE ODIO!- gritó- ¡SUÉLTAME!, ¡NUNCA MÁS VUELVAS A PONERME UN DEDO ENCIMA!... ¡Ah!- cayó de rodillas al suelo.
-¡Harry!, ¿qué pasa?- dijo preocupado el sly.
-No me toques- le apartaba las manos- duele... duele mucho... se quejaba y se retorcía en el suelo
Un charco de sangre se comenzó a formar, y recordó que lo mismo, le había pasado a su esposa.
Harry, más blanco que un papel, se desmayó... estaba tan débil que apenas podía mantener los ojos abiertos.
-No morirás Potter, no aquí- lo tomó en brazos y se lo llevó a la habitación múltiple.
-¡Ginny!, ¡Ginny!, ya nos vamos- gritaba Molly desde abajo de las escaleras.
-¡Ya voy mamá!, me iré a despedir de Harry- contesta, ya vestida- sale de su cuarto, camina por el pasillo y entra a la otra habitación. Su impresión fue enorme cuando vio a su "amor", empapado en sangre, aparentemente más muerto que vivo.
-¡Harry!, lo siento, perdóname, has algo Malfoy o Harry morirá- lo mira desafiante.
-Llama a tu madre y que ella llame a mi padrino, él es el único que puede lidiar con esto- le ordena.
La chica reaccionó y salió corriendo por el pasillo, la culpa no la dejaba en paz.
-¿Qué pasa hija?, pareciera que hubieras visto un muerto- le dijo Molly- vamos a comprar para la cena- le dice.
-¡Mamá!- exclama- Harry está... Harry, está... al borde del llanto.
-¿Qué le pasó?, habla niña.
-Harry está desangrándose- se larga a llorar como una magdalena.
-Hay que llevarlo a San Mungo- sube las escaleras y entra al cuarto.
-Llame a mi padrino, él lo salvará.
-Pero eso es muy arriesgado, tu padre...
-Mi padre nada, Harry se está muriendo y yo no voy a esperar que eso suceda, sálvelo- la miró con súplica en sus ojos, desesperado.
-Está bien, primero hay que darle a beber una poción para cortar la hemorragia, luego llamaré a Severus para que lo revise.
El rubio se queda tranquilo, espera a que Molly baje hasta la cocina y busque el frasquito con la dichosa poción, el tiempo había comenzado a correr.
Los labios del pelinegro estaban amoratados, al borde de la muerte... sus manos, albas y con algunos moretones, frío como la nieve.
-¡Aquí está!- abre el frasco y le da de beber al moreno.
Poco a poco la sangre se cortó, pero eso no cambió el estado de gravedad del moreno, quien debía debatir por sobrevivir.
-Estoy contigo- le susurraba el rubio- no te vayas, tú eres el único que le da un significado a mi vida, si tú no estás, ¿con quién voy a pelear?...
Ginny por otro lado se sentía más que fatal, en el fondo sabía que en su afan por separarlos, le causaba daño a Harry, fue tanto su ceguera que eso le estaba quitando la vida, si él moría, ella no podría cargar con esa culpa, no podría vivir con ello... ¿cómo pude causarte tanto daño?... se sentó en el suelo, con la mirada perdida, los ojos apagados... jamás podria perdonarme que tú pagarás por mis faltas... ahora me doy cuenta lo mucho que lo amas, lo que él te ama... ya no podría verte nunca más a los ojos, al menos estar cerca de ti...
Él está aquí, lo se... sus fríos brazos me rodean brindándome protección, me sentía tan seguro a su lado, estos días juntos, han sido maravillosos, incluso, pareciera que otro corazón latiera dentro de mí... te casaste con ella, te vi irte de mi lado, me sentí tan lejos de ti, aunque estábamos en el mismo mundo, me separaste de tu vida como un libro que para en la basura, no dudo de tus sentimientos, incluso, al principio, cuando fue el primer beso, tuve mis dudas, sobre cuánto duraría, con cuántos habrías hecho lo mismo, pero me equivoqué, fuiste sincero y conocí a Draco Malfoy en toda su extensión, en toda su humanidad... dejé de creer en los cuentos con final feliz, ya que la vida se ha encargado de lo contrario; sin embargo, que tú hayas sido parte de ella, fue lo mejor, jamás me arrepentiré de cada segundo pasado contigo, de cada frase dicha, de cada discusión sin sentido... te convertiste en esa luz, que tanto había anhelado tener... me protegiste, me consolaste, ahora es tiempo que cierre mis ojos, este dolor va cediendo, pero estoy tan cansado, que prefiero mantenerlos cerrados, cualquier mirada tuya me hiere el corazón.
-Ahora hay que dejar que descanse- dijo Severus.
-Padrino, ¿qué pasa?- preguntó confundido Draco.
-Estás en un grave problema, tu padre me ha indicado que debes irte esta misma noche de la madriguera- le dice serio.
-¿Qué pasó?
-Tomaron a tu madre prisionera, Luicius ya no tiene más excusas para no presentarte frente a tú-sabes-quien, y lo otro, tu esposa ha escapado de San Mungo sin dejar pistas.
-¿Cómo?, ¿qué pasará con Potter?
-Él estará bien, ha perdido mucha sangre, pero me las arreglaré para llevarlo y traerlo de San Mungo sin que lo reconozcan...
-¿Qué es lo que tiene exactamente?
-Debes preocuparte más por tu familia que está en peligro, antes que del salvador del mundo mágico, aquí lo cuidarán, hablaré con los Weasly y ellos tomarán las medidas que sean necesarias, para que se recupere lo antes posible- llega hasta la puerta- debes pemanecer con vida, alguien te estará esperando- le dice y cierra la puerta.
-Sé que el tiempo que estuve aquí fue corto, ojalá lo hubiera podido prolongarlo aún más... no puedo permitir que mi familia sea asesinada, tampoco puedo dejar que tú salgas lastimado, de seguro, con tu compejo de héroe, etapa avanzada, me dirías lo mismo, sé que esta no será la última vez que nos veamos, pero también sé, que no será como amantes o algo por el estilo, seremos enemigos, como siempre debió ser... descansa- le da un casto beso en los labios y otro en la frente- te esperaré en Hogwarts, como de costumbre, cuando pase el verano- se aleja del cuerpo del moreno y lo contempla un rato, evitar ese nudo en la garganta fue difícil, pero las lágrimas estarían de sobra, sólo había un camino que escoger, y no podría aplazarlo más...
Buscó su ropa, la ordenó dentro de la maleta, vio por última vez a Harry y lo dejó solo en el cuarto.
Mientras que en otro lado de la madriguera...
-Granger, ¿qué haces por aquí?- pregunta Blaize.
-Nada, sólo pensando- se sienta en el suelo.
-¿Qué se siente ser la sabelotodo?
-No es nada que no puedas sobrellevar.
-Algo te traes entremanos, ¿qué es lo que quieres?
-Iré directo al grano, ¿cuánto amas a Ron?
-¿Por qué debería contestarte?
-Porqué necesito saberlo.
-Siempre supe que tú estabas enamorada de él, ya sabes, las cosas no siempre resultan como uno quiere.
-Lo retienes a tu lado con chantajes, eso es propio de serpientes.
-Un slytherin también puede enamorarse, seguimos siendo humanos, que sentimos, sufrimos... Ron fue capaz de romper todas mis barreras mentales, cualquier razón por la cual no hacer lo justo o injusto para tenerlo conmigo.
-Hay veces en que el amor toma caminos insospechados.
-¿Estás dispuesta a luchas por él?
-Sí, no daré mi brazo a torcer.
-Pierdes tu tiempo Granger, ríndete, no tienes oportunidad, ese león ya tiene dueño.
-¡Ni de broma!, prepárate Zabini que no sabes con quién te estás metiendo.
-¡OH, qué miedo!, la gran sabelotodo de Granger ha sacado las garras- dice con tono mordaz.
-No sabes de lo que soy capaz de hacer o hasra qué punto puedo llegar cuando algo me interesa- se levanta de golpe.
-Las mujeres son terribles cuando se enojan y tienden a perder el control.
-Eso es lo que más tengo, eres tú quien debería controlarse y dejarte de comer a Ron con los ojos.
-Llegas tarde, le he hecho de todo y siempre me pide más.
-¿Y tú?, siempre eres tú quien toma la iniciativa, ¿qué hay de Ron?, jamás ha sido él quién te abraza, quién te bese... qué triste tu vida, te arrastras a sus pies, mendigas un poco de su atención.
-¿Y tú?, jamás has tenido lo que yo obtuve, los medios no fueron ortodoxos, ni santos, pero he recorrido un camino que a ti te ha tomado años, en unas semanas, quizás horas.
-Sí tanto dices amar a Ron, sólo lo dejaré bajo una condición... deberás intimar conmigo.
El sly no podía creer lo que sus oídos escuchaban, pero la mirada de la castaña era de total decisión.
-Veo que estás completamente decidida a hacerlo, y si esa es tu condición para que no te inmiscuyas entre nosotros, lo haré sin dudarlo- la besa y se acerca hasta ella para ponerse encima... le besa el cuello, recorre su cuerpo por debajo de la ropa, la quita lentamente.
La castaña estaba incómoda, su opinión personal sobre él no había cambiado, salvo en éste último hecho... era capaz de acostarse con su rival a cambio de permanecer al lado del pelirrojo, entonces, no resultaba tan malo alejarse para que él se quede definitivamente con su esquivo león.
La chica también participó, le sacó la polera, se aferró más al otro cuerpo, mientras él la terminaba de desnudar... no había lugar que no había sido tocado, besado...
-No sabes tan mal... Granger, incluso, si no me interesara Weasly, podría considerar, quedarme contigo- la penetró y sus cuerpos se tensaron, pero es no detuvo la seguidilla de embestidas, que le provocaron un enorme placer... no reparó en reprimir los gemidos, más bien, eran sofocados, con besos que la enloquecieron... cuando llegó el clímax, un cálido líquido quedó en su interior, por un momento creyó que no fuese real, pero poco le duró eso, cuando Zabini salió de su interior... ambos estaban exhaustos y respiraban con rapidez, hasta que poco a poco, se calmaron.
Draco se fue de la madriguera, muy a su pesar. Su padrino, Severus Snape, había conseguido hospitalizar a Harry en San Mungo, sin que lo reconocieran... le hicieron las transfusiones de sangre correspondientes para combatir la creciente anemia.
El Médico de turno, le confirmó sus sospechas... el paciente estaba embarazado y había sido un milagro que no lo perdiera... ahora, más recuperado, el moreno, quién permanecía conciente, recibió la noticia.
-¿Yo?. eso parece ser imposible- rebatió.
-No lo es, lo han confirmado... no podrás sobrellevar este proceso solo, el padre es fundamental, o sino, ambos pueden morir- comenta Severus.
-Eso no pasará- se toca el vientre- estaremos bien, así que Draco puede marcharse si quiere.
-Si pasas los tres primeros meses, eso ya sería un milagro- dice con ironía- quieras o no quieras, él es el padre y necesitas de su magia para mantenerlos vivos, aunque seas precisamente "tú", quien lleve a su hijo- se adelanta a la puerta- en unos días los Weasly vendrán a recogerte.
-Lo haré, viviremos sin Draco, así que es mejor que regrese con su "esposita", nunguno de los dos lo necesitamos.
-Como te dije antes, si sobreviven tres meses sin la magia de Draco, será un milagro, nadie, excepto el padre, puede darte la magia que necesitas.
-Malfoy y su magia que se queden con él, yo no quiero nada que tenga que ver con su familia.
-¿Qué es lo que te hirió tanto?, la otra vez, Lucius lo azotó al enterarse que estaban juntos, y ahora, lo odias.
-Lo odio a él... este hijo es mío, por fin algo que es completamente mío... te juro que nada te faltará mi amor- susurra y acaricia su vientre.
-Ya veremos- abre y cierra la puerta dejando a la futura madre a solas.
Un hijo... te juro que sobreviviremos, lucharé por ti, para que crezcas sano y feliz, jamás te abandonaré... mis padres estarían muy contentos... un hijo, es un lazo que nos unirá para siempre, pero yo no lo quiero cerca de mí, ni menos que se sienta obligado por nosotros... yo te mantendré vivo, con mi magia... ya encontraré alguna solución para ello, al fin y al cabo, cuando nos volvamos a ver, no será como amantes, sino como enemigos, defendiendo ideales muy diferentes entre sí.
FIN...
BONUS TRACK...
-Al fin has llegado- dice Voldemort levantándose de su punto.
-Mi Lord- hace una reverencia el primogénito de los Malfoy.
-En un principio. no tendrás la marca Tenebrosa, sino que una transitoria... cuando cumplas con todo lo que te encomiende, será la definitiva- termina de decir, mientras paseaba a su alrededor.
-Usted mande, mi Lord- responde obediente.
-Debilita a Potter, tanto que no pueda usar magia, por último, tráelo hasta aquí, lo acabaré frente a tus ojos.
Un dolor agudo se apoderó del corazón del rubio.
-¿Te has quedado mudo de la impresión?
-Todo se hará como usted quiera, mi Lord- responde al fin.
-Puedes retirarte por ahora, luego te llamaré para marcarte.
Draco se levanta del suelo y sale del lugar para reunirse con su madre.
-Tu esposa se ha escapado de San Mungo.
-Ella no debe andar muy lejos de aquí, a lo mejor, regresó a Malfoy Manor.
-En caso de cualquier cosa, los elfos darán aviso a tu padre.
-Esa mujer enloqueció.
-¿Cómo estás hijo?
-Sólo abrázame madre, por favor- se deja rodear por los brazos de su madre, mientras una traicionera lágrima rueda por su mejilla, la cual es quitada- los Malfoy, no lloran- se repitió hasta cansarce.
FIN BONUS TRACK...
Después de una larga y extendida plática entre mi muso inspirador y yo, llegamos a un acuerdo y es el siguiente (redoble de tambores), se viene la tercera temporada de este fic, "quién juega con fuego, baby", espero sea de su completo agrado.