A la mañana siguiente desperté con un horrible dolor de cabeza, mis ojos estaban hinchados por haber llorado tanto el día anterior, en cuanto me levante me meti a bañar para despertar bien, despues baje a desayunar.
-Buenos días-saludo Claire, la chica del aseo que me estaba preparando el desayuno.
-Buenos días-le regrese el saludó con una sonrisa, no solía hablar demasiado con ellas pero siempre eran muy amables conmigo y con Annet, eran agradables así que esa vez aproveche para indagar un poquito.
-¿Oye Claire?
-¿Que pasa?
-¿Eric té contrató directamente?
-No, sí le soy sincera joven, yo nunca he visto el rostro del señor Sammet, a nosotras nos contrataron por fuera y cuando él se queda en casa no podemos entrar a la habitación.
-Ya veo, no lo sabía, ¿la paga es buena?-se río un poco
-Lo es, es bastante buena…¿tu eres su hijo adoptivo verdad?-hice una mueca.
-Masomenos-tampoco iba a decir que éramos amantes-soy su obra de caridad, ¿tú sabes lo que es él?
-Mmmh, veamos, nosotras tenemos un contrato de confidencialidad muy estricto, no se nos permite hacer preguntas ni hablar de nada de lo que pasa en las casas que nos contratan, pero bueno, el nombre del señor es muy conocido y he oído muchísimos de los rumores que lo rodean, pero nada de eso me importa, yo trabajo para el empresario, el resto es asunto de él, pero si lo preguntas, ¿es verdad?, ¿es un vampiro real?
-Lo es-me miro sorprendida, sonreía, lo que decía era cierto, Eric tenía muchos negocios "legales" ella trabajaba para él en su faceta de empresario, el hecho de que trabajara como un famoso mafioso era un secreto a voces, Eric tenía un pinche imperio enorme que yo no imaginaba, hoteles, casinos, etc, pero también al igual que a Claire no me importaba mucho que se diga.
-¿Oiga joven?-me sirvió la comida y se sentó conmigo-¿es cierto que el señor es muy guapo?-ambos reímos
-Lo es, más de lo que puedes imaginar, pero tiene un pésimo carácter.
-Se nota que lo quiere mucho-suspire
-Lo hago, tu lo viste, él ha estado salvando mi vida desde hace tiempo-sonreí de nuevo, digo en parte el tenia culpa de algunas cosas que me pasaban pero tampoco tenía la obligación de levantarme, yo era el mayor responsable de arruinar mi vida
-Si, lo hemos visto, usted se ve muchísimo mejor comparado a cuando llegó esta ultima vez, tambien se ve más animado… a nosotras tambien se nos restringe un poco el contacto que podemos tener con usted, no son groseros para nada, pero es una orden que nos dieron, sin embargo es imposible no preocuparse por un niño, aunque no hablemos mucho, durante todo este tiempo, por lo menos a mi me ha hecho bastante feliz ver como se ha repuesto su salud, cuando lo trajeron en serio creíamos que iba a morir.
-Estuve a punto...gracias por preocuparse y atenderme-agache la mirada un poco avergonzado, ella río y continuó con sus deberes de la cocina, yo tome mi desayuno con calma.
Más tarde, como a las 11:30 llegaron 2 sujetos y me pidieron que les indicara dónde estaban las maletas, Eric había dejado todo acomodado en la sala que en sí era muy poco, el dijo que solo llevará lo necesario ya que el me compraria todo lo que quisiera estando allá, uno se las llevó y el otro me dio información, muy útil por cierto ya que Eric me dijo que según el vuelo era a las 12 y pues obviamente no sería así porqué ya era tarde y nadie me decía nada, bueno, me dieron bien los horarios, el vuelo saldría a la 1am y llegaríamos a Japón a las 7pm, Eric cálculo todo para salir y llegar de noche.
Pues bien, con ese cambio mi dia resulto ser bastante aburrido ya que no vi a Annet y no sabía cómo matar el tiempo.
Cuando por fin oscureció, Dag y Eric salieron de sus respectivas habitaciones, yo estaba en la sala comiendo golosinas que me habían dado las chicas.
-Ay Chris, te dije que quería carne pero moderada, así como vas te pondrás como un cerdo.
-Es mi cuerpo, y que te valga madres, si engordo aun así puedes comer-los dos se rieron.
-¿Estas listo?
-¿El vuelo es a la 1am no?
-Si, pero debo hacer un par de cosas antes de irnos, me acompañas o vengo por ti más tarde.
-Vamos, estoy aburrido y me quiero despedir de Jade.
-Vámonos entonces, ¿vinieron por las cosas?
-Sí
-Bien-camine detrás de ellos a pesar de que me encantaba agarrarme del brazo de Eric o tomarlo de la mano, pero decidí que desde ese momento cuando estubiera Dag presente no seria tan ensimoso con Eric por respeto, aunque él lo negara sabía bien que le resultaba incómodo vernos tan pegados y yo no quería lastimarlo.
Nos fuimos al bar, yo estuve un buen rato con Jade y Charles, Eric resolvió sus pendientes y empaco algunas cosas que le hacian falta del bar como su laptop, un par de sobres con documentos y no se que mas, luego, a las 10pm un auto pasó por nosotros.
-Listo mocoso, vamonos-salimos por la parte de atras-ahi te encargo Dag
-Claro
-Adiós Dag-le dije antes de subir al auto
-Cuidate mucho bombón
-Lo intentaré-reí, Eric me empujó para entrar él también al auto
-¿Bombón?, no me jodas, ¿ahora son mejores amigos?
-¿Estas de mal humor?, Dag no me gusta si es lo que piensas-si se veía un poco irritado, pero no tanto, de seguro había discutido con alguien-osea si esta bien rico, pero obvio no te engañaría con tu hermano-me dio un golpecito en la cabeza-¿que te pasa?, ¿estas celoso?
-¡Pues claro!, tu agujero es de mi propiedad-me jaló y me dio un besó, lo empuje y le rasguñe la cara
-Estabas mucho mas lindo anoche, ¿que tienes?-lo mire algo enojado-no arruines esto-suspiró.
-Estoy estresado, no tengo paciencia hoy y luego rematas yendo a coquetear con Dag, no quiero que estes de zorra con él-me apretó las mejillas y me dio un beso, le arañe la cara por segunda vez.
-Tch, ya te dije que no es eso, somos amigos no te portes como un hijo de puta, creí que estabas cambiando-guardó silencio un rato
-Ya, ya, olvidalo, van a ser 11 horas en un avión, no quiero pelear-me beso esta vez me deje-y Chris, yo no cambió-eso ultimo lo dijo en un tono más seco, me entristecí y suspire, mire hacia la ventana, tras unos minutos sentí su mano sobre mi pierna, me acarició despacio.
-¿Qué?
-Ven-me jalo de la pretina de los Jeans para que me acercara, lo hice, se agacho y me besó de nuevo, cerré los ojos y me deje.
-¿Porque estás estresado?
-Tengo demasiado trabajo, estoy caliente y que mi pinche amante ande buscando a mi hermano no me ayuda en nada-mire de reojo al chofer, su cara era de imprecion, me reí.
-Si estabas caliente a noche me lo hubieras dicho-lo besé
-No iba a coger un un niño lleno de mocos y lágrimas
-Tch-fui yo quien acarició su pierna esta vez, me separo-¿puedo ayudarte ahora?
-No, estate quieto-rei y me levanté un poco para darle un beso, el resto del camino fue muy tranquilo.
Eric bajó del auto cuando llegamos al aeropuerto, me agarre de su brazo y camine junto a él, me sentía demasiado nervioso, él sonreía.
De inmediato una chica nos guió por el aeropuerto hasta una pequeña sala bastante elegante, nos ofrecieron de todo, bebidas, bocadillos, ¡masajes!, mientras revisabán que todo estuviera listo para el vuelo.
-Todo está listo señor Sammet, pueden pasar por aquí-nuevamente la chica nos guió hasta una puerta que conducía al interior del avión, sujete la mano de Eric con fuerza, como bien dijo era un vuelo totalmente privado, el interior del vehículo era super lujoso, había dos sofás comodísimos junto a las ventanillas y una mesa enmedio, una televisión muy grande e incluso una cama, quedé impresionado era como una habitación normal, bueno de alguien rico, yo esperaba un avión comercial como los de la televisión y aún así yo hubiera estado fascinado.
-¿Estas feliz?
-Más bien impresionado, ¿esto es tuyo?
-No, es rentado, las ventanas las arreglaron para mi, para que la luz no me hiera pero tú puedas mirar, no necesito un avión.
-Señor Sammet perdone la interrupción, el vuelo saldrá a la 1 en punto, su equipaje ya fue abordado
-Gracias
-¿Gusta que le traiga algo?
-No, todo está en orden, agradecería que nadie me moleste hasta esa hora y solo si es necesario.
-Así será señor, si necesitan algo pueden llamarme por el teléfono de ahí-señaló una de las paredes, luego se retiró, yo me senté en el sofá, teníamos 40 minutos aún, Eric instaló su computadora y sacó unos papeles.
-¿Trabajarás todo el vuelo?
-Quizás
-¿Quieres hacerlo?-me volteo a ver alzando una ceja-estoy nervioso y tu estresado, hay 40 minutos antes del vuelo, creo que nos puede servir a ambos.
-Que considerado y estratégico, ven, me parece bien-se sentó en el otro sofá, me acerque a besarlo, me abrazó de la cadera, yo de su cuello y estuvimos así largo rato, comiéndonos las bocas a besos, Eric de repente comenzaba a acariciarme la espalda y las piernas, luego de poco tiempo pasó a desabrochar mi pantalón y a bajarlo
-Demonios Chris, se supone que debes viajar cómodo-Mis pantalones eran muy ajustados y le costaba trabajo quitarmelos estando de pie, me reí, me separe de él para acercarme y sentarme sobre la cama.
-Se me ven bien, es lo que importa, ¿o no te gusta?
-Me da igual-me acosté y me los quite con un poco de esfuerzo, ambos nos reímos, luego Eric se paró y se fue encima de mí y efectivamente pasamos un buen rato, él se veía mucho más relajado y yo, bueno, yo había tenido un maravilloso orgasmo...mis nervios no se fueron.
-Ve a asearte mi amor, falta poco para el vuelo-me meti al baño, era un poquito más grande de lo que imaginaba y más cómodo, me lave un poco y la verdad me quede en boxers, si quería estar cómodo.
Unos minutos antes de despegar nos informaron por un intercomunicador que debíamos tomar asiento y abrochar nuestros cinturones hasta que se nos indicará, en la pantalla de televisión comenzó un video con indicaciones de seguridad, sentí que se me bajó la sangre a los pies y de inmediato cumpli las ordenes, Eric se rió pero igual lo hiso.
Encendieron el vehículo, el sonido no era molesto pero mis piernas comenzaron a temblar y mis manos se aferraron al asiento de piel.
-Mierda-cerré los ojos, el avion comenzo a andar
-Relájate mocoso
-¿Esta cosa es segura Eric?
-Pues si, lo normal-siéntate bien y relajate-la velocidad bajó un poco para después aumentar de golpe.
-¡Mierda!.... ¿Y si se cae?
-Prometo enterrarte en un lugar con sombra
-Estupido-el vehículo comenzó a elevarse, yo cerré los ojos, después me asomé por la ventana, de nuevo los cerré, osea, queria ver pero mientras nos alejabamos del suelo más pánico me daba, mientras alcanzaba su altura máxima se sintió espantosa la sensación en mi estómago, pero luego se estabilizó y pude relajarme un poco, una luz verde nos indico que ya podíamos quitarnos los cinturones, miré a Eric con duda pero al ver que el lo hacia yo también decidí imitarlo.
-Sigues siendo un niño
-No te rías de mí-de nuevo me asome, las luces de la ciudad eran tan bonitas y pequeñas, aunque no dejaba de perturbarme un poco la altura.
-Cuando amanezca podrás ver todo desde la otra cabina, las nubes, debe ser hermoso, estas ventanas lo oscureceran un poco-asentí, los horarios se iban a cruzar y si, nos tocarian unas horas de luz.
-¿Cuanto dura el vuelo?
-Como 11 horas
-¡Es demasiado!
-Cuando gustes te puedes bajar-reí con sarcasmo
-Que divertido eres-me pare a su lado y le di un beso.
-Ya en serio Chris, tengo una junta en línea en un rato, ponte a ver televisión, duérmete, pide algo de comer o jalatela pero déjame trabajar en paz.
-No te pongas de grosero
-Te lo estoy pidiendo bien, ya te dije que si te portas bien cuando termine mis asuntos te regalare tiempo.
-Bien, seré bueno-me fui a acostar y encendí la televisión, termine viendo una serie donde hacen parecer las drogas divertidas, sí, de esas donde una bola de adolescentes se hacen los graciositos mientras van por la vida de fiesta en fiesta, sin consecuencias tan graves, ojalá la realidad fuera así.
Dormite un poco pero no logre perderme por completo, aun me sentía un poco estresado por el asunto de volar, por ahí de las 2:00 am Eric comenzó su reunión por videollamada, con quien sabe quienes, yo no estaba en el campo de visión, pause mi programa para no hacer ruido y me recoste de frente a él para poder observarlo, se veía tan serio y profesional, su expresión era neutral, tanto que me daba miedo hacer cualquier ruido y enfadarlo, no hablaba ni en alemán ni en japonés, parecía francés, me preguntaba si era algo muy importante, ah, se veía muy guapo, quería que me hablara al oído en otro idioma; me quede dormido gradualmente mientras lo veía.
Dormí como 6 horas, desperté por un ligero dolor de oídos, Eric seguía en el ordenador, ahora estaba leyendo, me levanté y me acerque a él.
-¿Que quieres?
-¿No vas a dormir?
-Nos quedan como 3 horas de vuelo, llegaremos como 7:30, ya no le hayo caso.
-Afuera hay sol aún-me asome por la ventanilla, como el vidrio estaba tratado se veía más oscuro-¿Cuanto dormí?
-Como 6 horas-me senté en sus piernas, jale mi playera de la manga y le limpie un grueso hilo de sangre que salía de su nariz.
-¿Te sientes mal?-negó
-El cambio horario y el cruce de día y noche siempre afectan mi organismo, en un dia se me pasara.
-¿Entonces cuando lleguemos en Japón serán las 7pm?
-7, 7:30 masomenos.
-¿Sientes dolor?
-Más bien incomodidad-volví a limpiarlo, me dio un besito en la boca
-¿Cuántos idiomas hablas Eric?
-Muchos
-No seas mamon
-Como 13
-¡Wow!, ¿enserio?-asintió
-¡Increíble!-me besó, me supo a sangre asi que hice una mueca la cual le causo gracia-tengo hambre
-Por el teléfono de esa pared puedes pedirle a la azafata que te traiga algo de comer.
Así lo hice, comí y el resto del viaje me la pase sentado frente a Eric mirando por la ventana ya con el cinturón puesto ya listo para cuando aterrizará el avión
Ya como a las 8 estábamos saliendo del aeropuerto de Tokio, estaba muy fatigado a pesar de que si dormí, Eric se veía hiper fastidiado, seguramente por las reacciones de su cuerpo.
-¿Oye Eric, no pudiste haber viajado dormido?
-Pude, pero quería avanzar unas cosas, además hubiera sido como dejarte viajar solo-sonreí, lo había hecho por mi mas que nada.
-Señor, el auto esta listo, su equipaje también.
-Gracias, vamos Chris-lo seguí, subimos al auto, Eric cerró los ojos durante el camino, a pesar de que era de noche su nariz no dejaba de sangrar aunque era menos.
El auto nos condujo al centro de la ciudad a un hotel impresionante, Eric se acercó a la recepción a comprobar el registró, una señorita se acercó a mí, me ofreció una toalla caliente para limpiarme las manos y una bebida, agradecí con una inclinación de cuerpo y me apresure a ir al lado de Eric.
Luego de confirmar el número de habitación un muchacho nos llevó al ascensor, otro subió el equipaje por otro lado.
Yo me quede con la boca abierta, las instalaciones eran increíblemente lujosas, nada que ver con los hoteluchos de mala muerte a los que me llevaban los clientes.
Entramos a la habitación, había gruesas cortinas que impedirian el paso de la luz por la mañana, la cama era gigantesca, había una sala entera frente al televisor, una estación de bebidas, el baño también era enorme y ¡por dios! Un jacuzzi en el interior.
-¿Te gusta la habitación?
-¡Es increíble!-me dio una tarjeta
-No vayas a perder esta llave
-¿Llave?
-Si, es la llave de la habitación y tiene un registró, con ella vas a poder usar cada una de las instalaciones del hotel, gimnasio, restaurantes, entrar a actividades y espectáculos y obviamente regresar a la habitación-Eric comenzó a quitarse la ropa-voy a tomar un baño, voy a salir
-¿Ah?, creí que ibas a descansar aunque fuera un poco
-Tengo cosas que hacer, regreso al amanecer, lo primero que haré será ir a comer.
-¿Quieres beber de mí?
-No, el desajuste de horario me puso un poco mal, necesito mas de "un poco", si comienzo me será difícil parar.
-Vale…¿puedo acompañarte?-lo seguí al baño, me senté en el lavabo mientras el se comenzaba a duchar.
-Mejor usa el hotel como más te plazca, disfrutalo
-Quiero ver a Atsushi.
-Tu y tu pinche Atsushi, vas a tener tiempo de sobra y en vez de disfrutar lo lujoso de este lugar prefieres ir a que te regañen...pero ok, vamos-sonreí
-Entonces también me daré un baño-me desnude y cuando él salió yo entré, él regresó a la habitación para vestirse.
Cuando salí él ya estaba listo.
-Chris, quiero que esta semana te portes bien por favor, no voy a poder cuidarte porque estaré ocupado-me entregó una segunda tarjeta.
-¿para qué es esta?
-Es una tarjeta de débito, con tu ID y con ella vas a poder comprar lo que se te dé la gana, no me preguntes ni te limites, si quieres tenerlo pagalo, ropa, comida, zapatos, juguetes, tours, lo que sea, tiene un límite de dinero, si te llegas a acabar todo solo avisame y te deposito mas ¿bien?.
-Si Eric-suspire, me iba a dejar sólo; me levanto la cara y me beso-vistete rapido y quita esa cara, ya te dije que cuando termine tendremos tiempo a solas-asentí con una sonrisa.
Le obedecí y me vestí, también me coloqué una mochila con las tarjetas y los papeles que le mandaron a Atsushi, tuvimos que movernos en Taxi, el era mas rapido solo pero tenía que moverme a mi tambien y ni modo.
Llegamos a una clinica mas pequeña que la de Alemania, además estaba en un distrito rojo o algo así dijo Eric, ni siquiera parecía clinica, mas bien un edificio normal.
-Aqui esta tu pinche Atsushi-nos metimos a un callejón que daba a la puerta trasera-hasta parece que andas buscando otra cosa.
-No parece-le guiñe un ojo-me encanta que ni él ni el contador me vean con ojos de depredador sexual, los quiero, pero por otro lado también éso me atrae-frunció el ceño y suspiró.
-Te repito que voy a andar ocupado, cuida bien tus nalgas Chris, no quiero ni un solo rasguño en ti ¿ok?-me acorralo contra una pared y me besó apasionadamente-si te vas a estar paseando por aquí recuerda que no estamos en casa, a las putas no les gustan los extraños en su territorio, y aqui nadie sabe que eres de mi propiedad, tampoco que Eric Sammet esta aqui, es mas, aun no es mi territorio, no muchos me conocen por lo que aquí mi nombre no vale mucho asi que cuidate si vas a menear la cola por aquí-asentí y lo segui besando, metió su rodilla entre mis piernas, luego me dio una navaja-por si acaso, aunque prefiero que no la uses.
-Si Eric-me la guarde, y continúe con el beso
-¿O prefieres esta?-me mostro su pistola,
-No, no asi esta bien
-Ok-acercó su cuerpo al mío y me dio un arrimón, luego, se quitó en menos de un segundo y alzó la vista, un balde de agua fría me cayó encima
-¡Mierda!
-Par de maricas
-¡Vale verga Atsushi!, casi me mojas, ¿a esto querías venir?-oí la risa del doctor, yo aun estaba en shock y claro un poco molesto, Eric se dio la vuelta y desapareció.
-¡Déjame entrar!
-¿Para que o que?
-Vine a verlo-estornude, el se río y entró, después de un par de segundos abrió por fin la puerta.
-Quítate los zapatos, no quiero que mojes la entrada
-¡Es su culpa!-de nuevo río, entré y me quite la chamarra para que se secara, no estaba tan mojado hasta éso, solo por encima.
Pasamos al consultorio y saque mi sobre.
-Tenga, son mis papeles, se los mando Dan.
-Yo esas porquerías no las quiero-lo mire indignado, me revolvió el cabello y sonrío-solo bromeo, te ves bastante bien Chris, eso me alegra muchísimo-sonreí un poco apenado.
-Eric está contento
-¿Como vas con las drogas?
-Llevo más de un mes limpio
-Felicidades niño, estoy muy feliz por ti-se sentó frente al escritorio y empezó a revisar mi expediente
-Gracias-se sentía bien escucharlo de su boca
-Annet se hace cargo de ti ¿cierto?
-¿Ustedes se conocen?
-Naturalmente
-¿Oiga?-me senté a lado de él
-¿Si?
-¿Usted desde cuando conoce a Eric?
-Desde los 24, cuando acabe la carrera, ¿por?
-Nada, Annet me dijo que a ella la conoció igual muy joven y me dio curiosidad, además se tienen muchas confianzas, eso de arrojarle agua es cavar una tumba.
-No, yo sabía que lo esquivaria-río-a Eric le gusta trabajar con gente de carácter, tiene achichincles débiles, pero no confía al 100% en ellos al contrario de los que pueden mantenerle la mirada.
-Wow...y usted cuando era joven, ¿ también durmió con Eric?-me dio un fuerte pellizco en mi brazo-¡Joder! Le preguntaba en buen sentido
-No soy puto niño, ya te lo he dicho muchas veces-asenti y suspire.
-Dios….usted solo cuida de mi porque le pagan ¿verdad?, ¿odia a los homosexuales?, yo lo quiero mucho-suspiró.
-No los odio, pero no me gusta que digan que lo soy, y no me gusta tener tanto trato con ellos, es incomodo-me entristecí-pero tu estas bien-de nuevo revolvió mi cabello, también te quiero mocoso
-me sentí un poco decepcionado, en el fondo a mi me gustaba Atsushi de "gustar gustar" y ahí iban mis esperanzas de que alguna vez quisiera estar conmigo-a todo esto Chris, este no es lugar para ti, ¿porque no te quedaste en el hotel?, ya es tarde, pudiste venir mañana.
-Enserio quería saludarlo y Eric va a estar ocupado así que debía saber cómo llegar...quería que usted viera lo mucho que me he esforzado
-Me siento orgulloso de ti -sonreí y lo abrace.
-¿Me veo mas atractivo?-rodó los ojos-usted acaba de romper mi corazón con lo que dijo, tenía esperanzas, por usted la verdad si dejaba a Eric-ambos reímos.
-Dejalo y desaparece-forcejeamos un poco, me quería apartar-eres tan molesto
-Que cruel… gracias por todo Atsushi-sonrío.
-Vaya, no le conocía esos gustos doctor-un rubio alto salió de una habitación hablando alemán, solté a Atsushi.
-Si te sientes mejor puedes largarte.
-Solo bromeo, ¿quien es ese precioso cachorro?, ¿es una puta nueva?-sonrío y me recorrió con la mirada.
-¿Tu eres una?-le mostré mi dedo medio
-¿Quien crees que eres mocoso?
-¿Quien crees que eres tu? No me hables con tanta confianza hijo de puta-me pare con firmeza frente a él, a primera vista me habia caido mal, me miró bastante feo, Atsushi se río.
-Tranquilo Chris, ¿te acuerdas de tu amigo Luka?
-Tch
-Este es su compañero aquí en Japón, y a ti Derek, ¿te suena el nombre de Eric Sammet?-abrió los ojos con sorpresa, yo sonreí.
-Cl...claro
-Bueno, este jovencito de aquí es el amante directo del señor Sammet, si no quieres problemas no te acerques a él-me acerque y lo jale del cuello para que se agachara y me mirara directo a los ojos, si el tal Derek era amigo de Luka, merecía mi desprecio.
-¡Ya escuchaste cabron!, hablame bonito si me ves o perderás la cabeza literalmente-sonreí, me sujetó con fuerza la muñeca y me empujo sin soltarme.
-Por más amante que seas sigues siendo una puta, no te creas tanto-me rei, en menos de 3 segundos el arma de Atsushi estaba apuntando a la cien de Derek, y mi rodilla incrustada en sus huevos.
-Su cabeza vale más que la tuya y la de Luka juntas, el señor está en la ciudad asi que andate con cuidado muñeca-Derek nos miró con furia, luego se marchó-no estés provocando mafiosos , y si vas a estar de fastidioso mejor largate.
-¡No!, seré un chico bueno, mejor inviteme la cena
-Esta bien-me miró mal, después salimos y me llevó a un lindo lugar donde comí hasta hartarme.
-¿Te gusto la comida?
-¡Demasiado!-fue muy agradable cenar en compañía humana, era como cuando comía con Jade o Annet y no como con los vampiros que solo soy yo y un sujeto mirándome fijamente.
-No se porque te descuidas tanto si eres bien tragon-me rei
-Es culpa de la droga, pero ahora que estoy limpio me da mas hambre
-Oye niño, recuerda que no estás en Alemania y no sabes leer japonés, no quiero que te estés saliendo sin supervisión del hotel ¿ok?, deberias quedarte ahi en lo que Eric se desocupa.
-Estar solo es aburrido, si me pierdo solo debo encontrar el camino, además puedo comunicarme, escuché: "se como preguntar por el baño", "también por comida", "cómo regresar a mi hotel"-le dije en un muy mal japonés pero que lograba entenderse, me miró muy sorprendido.
-¡Mira esto!, ¿de dónde has aprendido tú a hablar japones?
-Cuando era pequeño, había un maestro, él me enseñó a leer y a escribir, el era japonés así que también me enseñó un poco de su idioma, solo hablado, a la letra no le entiendo ni mierda, me gustaba aprender, y a él enseñarme, también me enseñó un par de palabras y frases en inglés
-¿Qué ocurrió?
-No lo se, mis padres se enteraron y me prohibieron visitarlo, luego de un tiempo supe que se marchó, y no piense mal, ese hombre era un buen tipo, fue el único adulto amable de mi infancia y jamás me hizo nada
-Estoy sorprendido-me reí-aun así, no te metas en problemas, no seas necio.
-Vale, ¡oiga!, podría enseñarme el camino al hotel, a la clínica y al bar, así si me meto en problemas sabre a donde ir.
-¿Al bar?, no creo que tengas autorización de eso
-Ya estube ahi, solo que no recuerdo el camino
-No seas mentiroso Chris, no has pisado ese lugar porque no existe, aquí es distinto a alemania
-Tch...ok, mentía, enseñarme el camino a la clínica solamente-rodó los ojo
-Yo tengo mucho trabajo Chris, no soy guia turistico
-¡Por favor! Solo esto, no lo molestare a menos que sea una emergencia-me impulse sobre la mesa con los brazos.
-¡Bájate de ahí!, la gente nos mira, tú ganas te mostraré el camino, pero en serio Chris no te quiero metido en mis asuntos todo el tiempo.
-Si, si
-¿Cuanto tiempo se quedarán?
-No sé, traje muy poca ropa, Eric me dio una targeta, dijo que puedo comprar absolutamente todo lo que yo quiera y no me dio fechas-se puso más serio
-¿Como te trata ese hombre?-trajeron el postre y empecé a comerlo.
-Mucho mejor que al principio, desde que ocurrió lo de Jason, osea de que nos dejamos y me fui a vivir con el otro chico, Eric me trata mejor, no he ido mucho al bar y pues no he hecho nada para irritarlo, Annet me mantiene ocupado todo el dia, a veces ni lo veo despierto, cuando él llega yo ya estoy dormido y él regresa todo el tiempo al amanecer.
-¿Se está quedando en casa?
-Si, la mayoría de las veces, duerme conmigo, es cuando pudo verlo, aunque eso es más reciente
-¿No te ha pegado?-negué
-¡Oh!, tambien conoci a Dag-rodó los ojos e hizo una mueca de desagrado, me causo gracia-¿lo conoce?
-Obviamente
-Me agrada, es buen tipo
-¿Buen tipo?, recuerda que la mafia no reparte flores Chris, mucho menos un vampiro.
-Lo sé, me refiero a fuera de eso...si usted odia la mafia ¿porque está metido en ella?
-Yo soy doctor niño, le salvó la vida a quien me póngan enfrente sea malo o bueno y si Eric me paga una fortuna no veo el porqué no trabajar para el, atiendo a su gente y puedo ayudar a quien me plazca, como a sucios chiquillos locos.
-Por mi cobra un chingo asi que no se queje….¿si no fuera así, me hubiera atendido?, digo ¿aunque Eric no me hubiera llevado a usted?
-¿Quién sabe?, si alguien hubiera tocado a mi puerta contigo en el estado en que llegaste la segunda vez que te vi, obvio lo hubiera hecho, es mi deber como médico y hasta yo siento dolor de ver gente en tan malas condiciones, pero si no hubieras estado con Eric lo más probable es que jamás te hubiera conocido niño y estarias muerto en alguna fosa común-suspire-pero como Eric te llevo yo aproveche y cobre bien-ambos reímos.
Salimos del restaurante y Atsushi me mostró los dos caminos que le pedí, luego me devolvió al hotel, ahí nos despedimos.
Ahora les platico, no vi a Eric como en 8 dias, pero no fue tan malo, en la recepción del hotel compre tours para que me pasearan por todo Tokio, entendía poquito pero no al 100% y menos si hablaban tan rápido asi que tambien pedi a un guia que hablara Alemán, me pasee de lo lindo por la ciudad y alrededores, el instructor era muy amable y como yo estaba tirando el dinero de Eric a la basura hice que los Tours fueran más largos y exclusivos para poder visitar y comprar a gusto.
Me gustaba Japon, habia demasiadas cosas que ver, todo era super pintoresco y había tiendas de todo, compré dulces de todo tipo y a montones, comía todo lo que se me atravesará en frente.
Otra cosa que ame de ese país es que en ciertas calles se reunían grupos de personas con diferentes estilos de ropa, maquillaje y peinados, era grandioso y muy llamativo, había hombres con ropas bastante llamativas y reveladoras pero no eran prostitutas ni travestis, eran grandiosos y algunos me parecieron bastante guapos, el instructor me platico sobre las diferentes tribus urbanas en Japón y las corrientes de estilo que llevaban, me dejo fascinado, por supuesto compre docenas de prendas para mi, zapatos, accesorios, ¡todo!, me sentía bastante cómodo mostrando piel sin que me vieran de una manera sucia, al contrario, como era extranjero y sinceramente me veía bastante bien con esas ropas, les llamaba la atención principalmente a las chicas, se acercaban a alagarme y algunas hasta a tomarme fotografías, me sentía bastante bien.
Por la tarde me devolvía el chico al hotel y bueno, ahi tambien disfrute a lo grande, tomaba masajes largos y me sumergía por horas en el agua.
Pero ok, todo lo perfecto cansa en algún momento, como al noveno dia yo me empezaba ya a aburrir, quizás si hubiera tendido compañia lo hubiera disfrutado aún más.
Y bien, podría resumirles el viaje entero en "pasee un chingo, comí un chingo y gaste un chingo", pero no solo fue eso, y esque en ese viaje conocí a alguien especial, yo Christopher Sammet hice un amigo o algo parecido por mi cuenta y segun yo nivele mi karma, y al decir amigo no hablo de un drogadicto o alguien peligroso si no alguien buena persona, pero dejenme les cuento bien.
A Eric lo vi solamente una vez en toda la semana y ni siquiera cruzamos palabra, decidí molestarlo un poco para ver si me prestaba atencion asi que me meti al distrito rojo en busca de un camello, quería comprar alguna droga solo para hacer que Eric se preocupara, no la iba a ingerir realmente, pero Ah, estúpido Chris, como llevaba el dinero expuesto el maldito camello al que encontré intentó asaltarme, yo traía la navaja que me dio Eric y por querer defenderme el maldito hombre me hizo una cortada en el costado izquierdo con una navaja igual, no se como pero logre huir, la herida no era tan grave pero sí podría desangrarme si la dejaba sin atención así que de inmediato corrí a la clinica de Atsushi recriminandome mis pendejadas, no daré muchos detalles del asalto porque es irrelevante.
Al ver que nadie abría por el frente y que se me iban las fuerzas, me quite las botas y me metí por una ventana de la parte trasera de la clínica, a Atsushi no le gustaba que pisara su consultorio con mis zapatos lodosos.
-¡Atsushi!-grite, no salió, iba a volver a hacerlo pero una cara bonita llamó mi atención, unos ojitos cafes obviamente rasgados me estaban mirando con atención, el dueño, un chico como de mi edad con una cara fina, piel lisa como porcelana y cabello castaño que pude ver solo en la raíz, bastante maltratado y decolorado para intentar llegar a un tono parecido al mio natural, pero en general era un chico bastante lindo aun sin maquillaje, porque vamos, hay asiáticos muy feos, el punto es que me pareció precioso y eso que a mi me gustan los hombres mayores-hola, ¿quien eres?- pregunte en japonés y alargue la frase segun yo para que sonara seductor, la falta de sangre comenzaba a apendejarme.
-Hola...me yamo Kurama-respondió, su voz también era linda-¿tu?-pregunto con timidez
-Me llamó Chris ¿dónde está el doctor?-lo pensó un poco, mi japonés era muy malo supongo-me apreté la herida para evitar que sangrara más.
-No sé
-¡Atsushi!-grite de nuevo
-¿Que te paso?
-Nada...habla más o voy a desmayarme, ¿Que te paso?-no estaba sangrando demasiado pero si llevaba ya un rato haciéndolo
-Me intoxicaron-respondió despacio para que pudiera entenderle-casi muero
-¿Eres puta?-fui directo al grano, no había otra razón de que él estuviera ahí, se sorprendió y pestañeo un par de veces.
-Si
-¿Con quien estas?, ¿Quien es tu chulo?
-De...Derek y Luka
-Hijo de perra-me refería a Luka
-¿Los conoces?-asenti-¡Atsushi!-grite más fuerte, ya no resistía el dolor, Kurama me miró asustado por la sangre que empapaba mi ropa, por fin apareció el doctor.
-¿Que haces aqui Chris?
-Ayudeme-me quite las manos de la herida, se sorprendió al verme, pero tambien se molesto, de seguro tenia mucho trabajo y lo interrumpi
-¿Qué te hiciste?
-Un idiota quiso asaltarme y no me deje
-¿Y qué ocurrió?
-¡Lo mate, ahora ayúdeme!-Kurama nos veía sin entender de nada ya que de nuevo hablamos en alemán pero se veía muy sorprendido.
-Ven-me jalo hasta una camilla y cerró la cortina, me quite la camiseta y me limpie las manos con ella.
-Me arde
-¿Vienes drogado?
-¿Cómo cree que llegué aquí sin desmayarme?-fui sarcástico, obvio no iba drogado pero la falta de sangre me estaba poniendo idiota-comenzó a curar la herida.
-Te dije que no te metieras en problemas
-¡No fue mi culpa!-me apretó un poco y grité
-¡No sea bruto!, me duele, Eric pagará.
-No fue grave, hasta suerte tienes, te rasgo pero fue superficial, necesitarás descanso Chris...y espero mi paga, no he visto a tu novio desde que llegaron.
-No se preocupe, le pago yo-le guiñe un ojo, quería vengarme por el apretón pero obvio me salió alrevés; abrí mis piernas-le puedo pagar con este de aquí-pasé mi mano sobre mi entrepierna, Atsushi me volvió a presionar la herida, me aparté de él y hasta las lágrimas se me escaparon por el dolor-que cruel, me duele mucho
-No seas corriente-me jalo hacia él de nuevo para continuar la curación-hoy vienes mas fastidioso que nunca.
-Lo siento, pero es que si dejo de hablar siento que me desmayare-me limpie las lagrimas y sacudí la cabeza-¿Que le pasó al chico bonito de ahí afuera?
-Kurama...veamos, tu mejor amigo lo intoxico con una chingadera llamada "Black Stone", luego lo relleno de alcohol por un agujero que no debería tener alcohol dentro ¿recuerdas esa cosa, la Black Stone?-un escalofrío recorrió mi espina dorsal.
-¿Cómo podría olvidarlo?, si no es por Jade yo me hubiera muerto-a Eric no le va a gustar esto.
-¿Vas a ir de bocaza?
-Ah pero claro que voy a ir
-¿Crei que eran amigos?-él sabía que no era así, solo quiso distraerme, había empezado a coser mi herida.
-Amigos mis huevos, se cree bien macho y es una perrita que le abre las piernas a Eric.
-Y tu a el.
-Jamás volvería a estar con el
-Listo, no seas tan brusco, cuidate la puta herida
-Si
-¿Me puedo quedar?, ¿por si me da fiebre?-se río
-Ok, pero al primer ruido te saco...por cierto ¿Y Eric?-me encogí de hombros
-Casi no lo he visto asi que no se
-Bueno, seguiré trabajando-salió de la habitación, yo me puse de pie y regrese a donde Kurama, me senté a su lado y sin más le acaricie el rostro, se quedó quieto, yo estaba bien apendejado por la pérdida de sangre.
-¿Luka te lastimo?-asintió-¿Y tu pie?-traía una férula en la pierna
-Me tiraron-me acerque y lo besé, se sorprendió pero no me separo, me sentía atraído por él, tenía una cara tan bonita y una mirada tan triste.
-Le haré daño a Luka, solo espera-sonreí y volví a besarlo, no lo hacía por él, pero quizás se beneficiaria y yo quedaría como un buen chico de la mafia-volví a besarlo, como me lo permitió metí mi lengua en su boca, lo empuje con suavidad y me subí a él, no estaba pensando mucho y bueno, el me estaba dando permiso al corresponderme, incluso iba a empezar a meterle mano, pero en eso, Atsushi me bajo de un tirón de la camilla.
-¡Aquí no es hotel, no le faltes el respeto a mi lugar de trabajo!-me apuntó con una pistola
-¡Ya, ya lo siento!
-Respeta mi clínica, te dije que descansaras.
-¡Demonios!, lo siento Atsushi…¡me exite un poco lo siento!-guardó el arma, si se trata de su clínica cambia de personalidad, me levante , Kurama estaba muy alterado
-Acuéstate mocoso, ignora a este demonio-le obedeció de inmediato, yo me fui a acostar también y Atsushi se fue refunfuñando
-¿Quien es Eric?-escuche de repente, el escucho que lo mencionamos.
-Eric es el jefe
-¿El jefe?
-Si, de Luka, de Derek, tuyo también
-¿Y tu?
-Ya ni sé, soy como un amante-me gire para poder verlo a la cara-¿creíste que era un loco?-negó de una manera muy tierna.
-¿Enserio mataste a alguien?, ¿cuantos años tienes?
-15...si no mataba me mataban-recordé a Takumi, lo de ese dia fue una mentira, no pude defenderme, quizás el camello seguia buscandome-suspire-tu debes conocer el infierno tan bien como yo ¿verdad?, ¿que edad tienes?-analizaba mis palabras para medio entenderme, yo a su vez hablaba despacio.
-Tengo 16, ¿lo disfrutas?-sonreí, yo estaba en un proceso de recuperación, claro que no había disfrutado ni un poco mi niñez, pero quería impresionarlo.
-Lo hago, fui prostituto y drogadicto, ahora con el jefe tengo muchísima libertad para muchas cosas, así que intento disfrutar, ¿tienes familia?-asintió.
-Vivo para ellos, los amo.
-Esa es la diferencia entre tu y yo, yo nací en el infierno, tu caiste en él, lo siento mucho-se quedó pensando, yo me quedé dormido.
Desperté a la mañana siguiente sintiéndome mucho mejor, me incorporé despacio y revise mi herida, luego vi como Kurama estaba inmerso en sus pensamientos mirando a través de la ventana, era un chico lindo enserio, me gustaban sus ojos rasgados y su pequeña nariz respingada, sus hombros y cadera eran estrechos, quería volver a besarlo, me gustaba; al percatarse de mi mirada sonrió con nerviosismo y me miró a los ojos.
-¿Pasa algo?
-No, solo pienso que eres muy lindo-se río un poco y un sonrojo apareció en sus mejillas.
-¿De donde eres?, ¿el jefe es Japonés?
-No, es Europeo, no sé de dónde...yo soy alemán
-También eres muy lindo Chris-sonreí; me gire hacia la puerta, alguien nos miraba, me levanté y fui a sentarme a lado de Kurama.
-¡Anda! Pasa, ya te vi bastardo.
-¿Qué haces aquí?-me pregunto, yo abrace a Kurama y sonreí, él entró a la habitación, el puto Derek, apenas y lo conocía y me caía bastante mal.
-¿Que te valga verga?-le hable en mi idioma materno, me entendió a la perfección-¿vienes a lastimarlo mas como Luka?, pelea conmigo, eres una basura, lo hieres y luego juegas al héroe, ¿de que vas?-Kurama nos observaba discutir entre mis brazos en silencio.
-¿No convierte a Eric Sammet en alguien igual que yo?-me rei, según yo Derek no conocía a Eric en persona y se atrevía a hablar mal de su jefe, que estúpido.
-No te compares con el, Eric es el más grande hijo de puta del mundo, no le llegas ni alos talones cabron-baje la vista hacia Kurama y le plante un beso en los labios-¿está bien si te dejo con el?, estaré aquí a lado
-Si, esta bien, no te preocupes.
-Cuidado Derek-me dirigí a la salida-no soporto a Luka y si se me pone me los llevo a los 2 a la mierda ¿ok?-me miró con rabia y no respondió.
Me salí a comer, cuando regrese el rubio idiota ya se había ido.
Volví a quedarme en la clínica, Atsushi me curo de nuevo la herida y pues era por ahora más interesante pasar tiempo con Kurama que en el hotel aunque era un poquito difícil comunicarse.
Me contó que se había enamorado de Derek y que al parecer el tambien se habia enamorado de él recientemente, también me habló de su familia, tenía 2 hermanos, uno pequeño y otro que era su gemelo, su mamá había muerto.
-Derek va a llevarme con él, saldremos de aquí, seré libre Chris.-Su sonrisa era muy bonita, no quería romperle sus esperanzas pero Eric no iba a dejar que eso ocurriese.
-Kurama...esperen un poco por favor, yo hablare con Eric, solo deja que aparezca, el no dejara ir a Derek tan fácil, Eric no es un hombre nuevo.
-El lo planeó todo...Chris, no me delates-me agarró ambas manos, su mirada de cachorro me causó dolor-¿somos amigos?... No nos delates.
-No lo haré, te lo prometo...pero enserio, yo podría ayudarte, asi solo te pondrás en peligro, a Eric no le gusta que pasen de él.
-Derek prometió que no pasara nada.
-Vale...supongo que debes creerle-sonreí.
-Tu estas con el jefe, debes entenderme, estás enamorado ¿verdad?
-Lo amo, pero a veces deseo matarlo-se sobresaltó, yo no pude evitar reírme.
Más tarde Derek regreso, me salí a fumar, aclaró que tabaco normal, quise dejarlos a solas, no me caía bien Derek pero podía empatizar con él, era similar a mi hisoria, ambos nos enamoramos del tipo equivocado.
Pasaron los minutos y los vi salir, me sentí triste y desee con todo mi corazón que todo saliera bien.
-¿A dónde te lo llevas perra?
-Lejos de toda esta mierda
-Kurama...yo puedo arreglar esto
-Gracias Chris...estare bien-lo mire xon con preocupación, antes de decir cualquier otra cosa el doctor me jaló al interior de la clínica.
-No seas metiche Chris
-Me gusta ese chico y me agrada, pero esta estupidez quizás les cueste la vida
-Sabias palabras de alguien tan estúpido, dejalos, ese mocoso está bien enculado.
-Estoy aburrido, ya quiero volver a Alemania, ¿sabe algo de Eric?
-No
-Quiero contarle lo de la Black Stone, hacer que elimine a Luka y que me de amor.
-¿Tu solo piensas en sexo?
-Fue culpa de ese niño
-Vete al hotel,pide una enfermera en recepción para que te cuide la herida, ya no te quiero por aquí.
-No sea malo...por lo menos coma conmigo, ya turistee hasta hartarme y me deprime estar solo.
-Ok, pero mañana, enserio ya lárgate, tengo trabajo aún.
-Joder...me perderé en las calles a ver si por lo menos asi Eric me busca…es más, ¡voy a conseguir un cliente!, necesito atención y nadie me la da.
-Haz lo que quieras, pero no me aburras a mi.
-Tch-me fui de inmediato, por puro berrinche intente conseguir a un pobre diablo que quisiera comprarme, pero no tuve suerte, termine durmiendo en un parque arriesgando que me arrestaran ya que por alguna razón es ilegal en Japón.
Al día siguiente terminé por volver a la clínica, había dejado mi mochila con la llave del hotel y con la tarjeta de crédito.
-¿Otra vez aquí?, ¿Qué quieres niño berrinchudo?, vete al hotel.
-Deje mi mochila en su consultorio, no he comido porque no tengo dinero y muero de hambre
-¿No ibas a vender tu sucio cuerpo?
-No pude.
-Toma tus cosas y ve al hotel a descansar y a curarte la herida.
-Deme de comer por favor
-No soy tu niñera, aun no me pagan lo de tu curación, ve a descansar al hotel, te lo digo por última vez.
-No he visto a Eric, ya se lo dije, y ya le ofrecí otra forma de pago.
-No empieces con tus vulgaridades, hueles mal Chris y yo ahora estoy muy ocupado.
-Bueno, voy por mi mochila y regresare al hotel-entre rápido a la clínica medio decepcionado, el cerro la puerta, luego se subió el cubrebocas que llevaba en el cuello, me iba a meter directo al consultorio pero lo vi a él girar a otra habitación al fondo, lo seguí por curiosidad.
Entre detrás de él, estaba realizando un servicio forense, sobre la mesa metálica estaba el cadáver, me acerqué.
-No vengas Chris-lo ignore
-Quiero ver
-¿Ahora eres necrófilo?
-Depende de cómo esté el individuo podría intentarlo-rei y me acerque aun mas
-¡Christopher, te estoy hablando, ya vete!-me iba a empujar pero fui más rápido, jale la manta blanca que cubría el cuerpo y me quedé en Shock.
La persona que yacía sobre la plancha metálica no era nadie más que Derek, su cabeza estaba perforada por una bala justo en la frente, mi shock fue tanto que lo único que atine a hacer fue acercarme y tocar el agujero en su frente con mi dedo índice-no seas sucio-me aparto de un manotazo-tiene muchas bacterias, me lo trajeron hace un par de horas-volvió a cubrirlo
-Lo…¿lo arreglaras?
-Si...tengo que entregárselo a su familia
-¿Luka?
-Asi es-mi ceño se frunció inconscientemente, una mezcla de angustia y lástima se apoderó de mí, mi ritmo cardíaco aumento.
-¿Y Kurama?-respire profundo
-No lo se y no me interesa-intente calmarme, sentía como si me fuera a dar un ataque de ansiedad, cerré los ojos e intente bromear.
-¿Puede regalarme la bala?
-¿Si te digo que si te marcaras?-Me estaba dando la espalda-de nuevo descubrió el cuerpo para empezar a desnudarlo-Chris, no te quedes callado, ve por tu mochila y vete, no estés de morboso-no le hice caso, mire fijamente el cadáver, no era por morbo, varias imágenes se agolparon en mi mente, la muerte de Sting, el cadáver de Takumi, Eric bebiendo sangre, la cara del mismo destrozada, yo con heridas importantes; mi cabeza comenzo a doler y mis extremidades a temblar, ya había visto demasiadas muertes pero jamás había contemplado tanto tiempo un cadáver, pensé en la muerte, en mi muerte, ese podría ser yo, en cualquier momento alguien podía acabar con mi vida y no habria mas, jamas hice nada de mi vida, fui un asesino...yo maté a Takumi y alguien podría matarme a mí, ¿A donde iría?-¡Chris!, ¡Chris!-retrocedí un poco, me sentí mareado de repente, tenía miedo, me agache y vomite en el suelo.
-¡Hijo de perra!, ¿hasta ahorita te da asco?....alce la mirada y lo vi directo a los ojos, pareció comprender que no era asco, no estaba bien, estaba aturdido, su expresión se suavizó.
-Lo...lo limpiare
-Sobre mi escritorio hay café y pan, recuestate un momento y luego comelos-asentí sin dejar de verlo a los ojos, me sujete el abdomen, de nuevo reaccione después de unos segundos.
-Perdón-me salí y obedecí esta vez, pensé en el pobre Kurama, debía estar muerto o muy deprimido...maldito Luka, él era el causante actualmente de 2 de las escenas más traumantes de mi vida, Eric y mi infancia seguian siendo el número uno en ese campo pero a Luka lo odiaba de corazón.
Como Atsushi me indico me recoste en el sofá un buen rato e intente pensar en otras cosas, respiraba profundo y nombraba en voz alta los objetos de mi alrededor para distraerme, me dormí un aproximado de 15 minutos y tras despertarme ya más calmado me comí lo que Atsushi me dijo, el café estaba ya frío pero rico, lo que quería era asentar mi estómago.
Cuando termine de comer me volví a dormir, esta vez en el piso de la oficina y al parecer al doctor no le molesto porque jamás fue a correrme a pesar de que dormí lo suficiente para que alguien tuviera que despertarme y por ese alguien me refiero a Eric que por fin apareció.
-Te he estado buscando durante días-escuche su voz sarcástica, era obvio que no era asi, abri mis ojos lentamente cuando sentí su helada mano sobre mi frente.
-No te burles de mí-me giré despacio para poder abrazarlo y besarle los labios.
-Tuviste una crisis
-¿Te contacto?
-Si
-Me alegra porque te extraño, pero estoy bien, no fue nada-suspiro y me beso, me caía mal por abandonarme pero era cierto que lo extrañaba a horrores.
-No quiero aquí sus mariconadas, ya te tuve aquí mucho rato, adiós-Eric lo miro feo-yo no entro en tu territorio así que fuera del mío
-Tch-se levantó y me ayudo a mi a hacerlo-gusto en saludarte viejo-dijo a regañadientes mientras salíamos, yo me reí bajito y lo tome de la mano-pinches doctores si no los ocupara yo mismo…
-¿Porque desapareciste?, no me gusta estar solo en un país que no conozco-me acarició la cara, me froté contra su mano cariñosamente, me sentía algo sensible por lo de Derek, Kurama debió sufrir muchísimo cuando lo mataron, de nuevo pensé en cuando Eric estuvo herido por culpa de Sting y aunque sabía que era muy difícil que mataran a un vampiro sabía que si Eric moria yo sufriria demasiado y odie pensar en eso.
-¿Que pasa?, creí que estarías molesto, y estás lindisimo-se agacho a besarme, le acaricie yo también el rostro y le correspondi, fue un beso largo pero suave-vamos al hotel gatito-me dio otro beso.
-Espera...antes de eso, hay algo que debo decirte.
-¿Si?
-Luka está comercializando Black Stone-me separó de él un poquito brusco
-¿Que?
-Es en serio-su expresión cambió a una más irritada
-¿Y tu como sabes?
-No me veas así, conocí a un prostituto, él fue un conejillo.
-Hijo de puta...esos chiquillos no son de mi propiedad y esa madre no vale la pena.
-¿Te desharás de él?-sonreí-si quieres yo…
-No, lamentablemente lo ocupo y tu no te vas a meter en problemas aquí mocoso, solo hablaré con él-apreté los dientes.
-No es indispensable, lo puedes reemplazar rápido, como si no lo supiera-ahí estaba su bipolaridad otra vez, obviamente la noticia que le di lo enojó y yo me iba a llevar el insulto.
-Si, quizas tienes razon, pero tampoco me voy a deshacer de alguien que me es útil por el capricho de un pinche niño nalgas meadas que no puede dejar el pasado en su lugar, tus riñas con Luka me valen madre ¿ok?-le rasguñe la cara de ambos lados.
-¡Vete al demonio!, ¡no me insultes!-me apretó las mejillas y me beso, le mordí con fuerza la lengua y le escupí en la cara, él como respuesta se río
-Enserio eres precioso, me encantas, cuando volvamos a casa bebé dejaras de verlo y olvidaras este odio otra vez asi que relajate.
-¿Cuando volvamos?, vuelve tu solo cabron, no te quiero ver mas-estaba enojado por su actitud.
-Chris, se me complicaron unas cosas y voy a estar ausente otra vez, no quiero que estemos enojados, vamos al hotel, te voy a atender bien y hay que olvidar a Luka ¿Si?
-¡Vete a la mierda!, te lo estoy pidiendo por favor
-Y yo te estoy diciendo que no
-¿Te importa más ese hijo de perra?
-No tengo tantas razones para matarlo y punto, relájate
-¡No me digas que me relaje!-me eché a correr lo más rápido que pude, me iba a deshacer de Luka e iba a vengar la muerte de Kurama, ese bastardo tenía que dejar de joderme la vida directa e indirectamente, además ahora también era por capricho, cómo era posible que prefiriera a ese pendejo sobre mi.
Me desapareci semana y medía, no quería verlo, y si se enojaba por mi mejor, por lo menos que se esforzara poquito en buscarme, me relacione el poco dinero que me quedaba en la tarjeta para comer y seguí durmiendo en parques, un día de esos cuántos logre que un tipejo comprara mis servicios, gracias a eso pude meterme a un hotel y asearme.
Al finalizar la segunda semana decidí regresar a donde Atsushi, estaba harto de dormir en la calle aunque las calles de Japón eran más tranquilas y seguras que las de mi pueblo.
También estaba enojado porque mi berrinche pasó desapercibido, Eric no me buscó para nada.
Cuando llegue a la clínica no había nadie así que me dormí al pie de la puerta, me despertaron de una patada, no fuerte, más bien fue un empujón con el pié del mismísimo doctor.
-¿Qué haces aquí?
-No tengo en donde pasar la noche y me termine el dinero.
-No me importa, aste a un lado
-Déjeme pasar la noche aquí
-No, regresa al Hotel con Eric, yo ya me voy a mi casa.
-No quiero ver a Eric
-Tengo órdenes de no dejarte entrar
-Lléveme a su casa
-Ya Chris, compórtate, ¡ve al hotel!-se metió a la clínica y me cerró la puerta en la cara, me pare y de nuevo deambule por la calle pensando en qué hacer, la verdad es que ya tenía hambre y me quería bañar así que decidí regresar al maldito hotel a fin de cuentas, pero justo cuando iba a tomar ese rumbo alguien me llamo.
-Kurisu-reconocí la voz, obvio era la única persona que conocía en Japón y la linda forma de pronunciarlo era inconfundible
-¡¿Kurama?!-lo miré emocionado-vi…¿vienes del trabajo?-asintió, sus ojos estaban tristes, me hizo muy feliz saber que estaba vivo.
-Sí, ¿tu a donde vas? Es muy tarde.
-¿Quien sabe?
-¿No haz encontrado a Eric...al jefe?
-Me pelee con él, lo estoy evitando
-¿Y como te va?
-Mal, ya no tengo dinero, estoy sucio y aquí no me puedo prostituir, creo que voy a empezar a robar.
-Si no tienes a donde ir ven conmigo.
-¿Seguro? ¿No temes que te robe?-se encogió de hombros y sonrío aunque sus ojos seguían tristes, ah, qué bonita cara tenía, le devolví el gesto.
-No tengo nada de valor de todas formas, vamos-asenti y lo seguí.
-¿Me dejarías darme un baño en tu casa?, llevo días sin bañarme
-Claro-de nuevo me sonrió.
En cuanto llegamos a su casa me ofreció una toalla limpia y me prestó una playera, yo aproveché esto para lavar mi ropa.
-Puedes dormir en el sofá, iré a dormir perdona si te dejo solo-negué
-Gracias
Luego de ducharme me sentí en la gloria, me tire sobre el sofá para dormir, su casa era pequeña como la mia pero muy ordenada y limpia, además tenía una vibra tranquila, logré dormirme rapido.
…
-¡Hey!, ¡Hey!-alguien me movió para despertarme como a las 6am, yo aun dormido jale a la persona frente a mi y hable en una horrible mezcla de alemán con japonés.
-Gracias Kurama, pero déjame dormir un poco más ¿Si?-lo abracé con fuerza y lo gire con intención de besarlo, pero me dio un golpe en el pecho y por ende lo solté haciéndolo caer al piso, abrí los ojos para ver qué ocurría.
-¡Suéltame!, ¿Quien eres?-lo observe con cuidado aun adormilado, era la misma carita preciosa de Kurama pero no era él sino su hermano gemelo, la diferencia estaba principalmente en que este no tenía el cabello decolorado, y no daba ternura cómo su hermano, de ahi en fuera eran idénticos.
-Soy Chris-me senté y bostece-soy amigo de Kurama-frunció el ceño
-¿Que?
-¿De donde lo conoces?
-De una clínica, él me dejó pasar la noche aquí, ¿Cómo está el?, supe que Derek fue asesinado pero no quise mencionarlo, yo le dije que esperara pero no me escucho.
-¿Todo el mundo sabía que él se iba menos yo?-pregunto enojado al aire, se sentó a mi lado, se veía afligido-¡joder!, quizás hubiera sido lo mejor-dijo para sí mismo, yo bostece.
-¿No te preocupes si?, yo voy a darle su libertad
-¿Porque lo dices?
-Me deshare de Luka
-Tch-rodó los ojos, no me creyó ni un poco, sonreí-tengo que irme, si Kurama dejo que te quedaras esta bien.
-Si no me creés esta bien, pero ya lo veras-me acosté de nuevo en el sofa
-Adiós-se marchó y yo caí dormido de nuevo.
Cuando desperté fui y me asome al cuarto de Kurama, este dormía desparramado sobre la cama, hasta dormido era lindo, se veía muy cansado; mis tripas rugían por hambre así que decidí hurgar en la cocina, preparaba el desayuno para ambos, bueno, para los 3, él me había contado que tenía 2 hermanos y el segundo se hizo presente, era un niño pequeño muy muy lindo que me miraba tímidamente desde la entrada de la cocina, me percate de la mirada del niño y me gire a verlo.
-Hola, que lindo-me agache y acaricie su carita, el me miraba confundido, como si yo fuera un loco.
-Me llamo Sou-me contestó en voz baja-¿Tu quien eres?-su voz era lindísima
-Me llamo Chris, soy amigo de Kurama-no pude evitar abrazarlo y cargarlo, tenia como 4 o 5 años, pensé en Klass aunque obviamente él era mucho más pequeño que el niño frente a mi-eres muy lindo-se removió entre mis brazos un poco nervioso, lo había asustado, lo senté sobre la barra de la cocina-lo siento, no quería asustarte
-¿Eres amigo de Kurama?, Kurama es mi hermano
-Sí, él me dejó dormir aquí, ¿tienes hambre?-asintió con sus bonitas mejillas sonrojadas, yo quería un bebé así-ven, vamos a desayunar-volví a cargarlo, la herida de mi costado aun me dolia poquito, senté al niño en una silla y le serví, Kurama tenía suerte de tener familia-mein liebe, ¿crees que Kurama tenga hambre?-me miró con duda lo cual me causó mucha gracia.
-No...no sé, creo que esta enfermo, él por las mañanas ha vomitado o se marea, entonces come más tarde-sonreí pero me dio pena, el niño se veía triste y preocupado por su hermano; terminamos de desayunar, luego deje al pequeño mirando televisión y fui a ver a Kurama, lo encontre aun recostado mirando al techo con su mano sobre la frente.
-¿Quieres desayunar?... Perdón, use tu cocina
-Esta bien, pero no quiero, ahorita no tengo hambre.
-Tu hermanito me dijo que no te has sentido bien-me senté junto a él, me agache y le di un beso en los labios, me lo permitió, su cara se sentía húmeda, se había lavado el rostro, su piel era suave, me sonrió-supe lo de Derek, lo siento muchísimo.
-No te preocupes, no puedo hacer nada, y no estoy enfermo...creerás que estoy loco por lo que te diré-sonrió con tristeza
-Vivo en un mundo de locos, dimelo-acaricie su mejilla, por dios, Kurama me gustaba muchísimo, volví a besarlo.
-Voy a tener un bebé, no es enfermedad, yo estoy embarazado-abrí los ojos con sorpresa y sonreí, no podía creerlo, él era como yo, otro chico que podía concebir.
-Ya veo…¿y lo quieres?-asintió con ternura
-Estoy casi seguro que es de Derek-se acarició el vientre, volví a besarlo, estaba sintiendo demasiada atracción por él, lo deseaba en ese instante.
-Me alegra que no estés enfermo-bese su mejilla y de nuevo sus labios, intentó cortar el beso perl se lo impedi, más bien profundice el beso, metí mi lengua y acaricia la suya, terminó cediendo y correspondiendome, luego de unos segundos involucre también a mis manos y le acaricie un poco el torso, me acomode un poco para subirme a él con lentitud, como pidiéndole permiso; su cuerpo era delgado, sus proporciones eran parecidas a las mías aunque un poco más finas supongo, Kurama era como 2 años mayor que yo, tambien teniamos la altura similar, me estaba excitando rápido, más porque él también comenzó a tocarme.
-Chris, espera-me empujó-afuera esta mi hermano-un sonrojo bastante notorio coloreó sus mejillas.
-Tienes razón-me levanté y fui cerrar puerta con seguro, su sonrojo se intensificó, sonreí y regrese a su lado, se sentó y volvimos a besarnos, de nuevo lo derribe y me puse arriba, quería impresionarlo, en mi cabeza yo pensaba "vamos Chris, que él te vea como todo un hombre", la realidad es que contra Derek yo no era rival, aun así yo me sentía lo máximo porque al parecer también lo atraía-lo siento Kurama pero no me gusta quedarme caliente-así es, dije algo que Eric hubiera dicho, ahora hasta me da pena admitirlo-él asintió, lo bese otra vez, despues le quite su playera, de inmediato me imito y me quito la mía, él también ya estaba excitado; fue cuestión de minutos para que ambos estuviéramos totalmente desnudos tocandonos y besandonos, el miraba mi cuerpo, pasaba sus dedos por encima de mis cicatrices y se relamía los labios, yo besaba la piel a mi alcance, su cuello, pecho, clavículas, su oreja, ¡todo! Era la primera vez que yo tomaba un rol activo por voluntad propia y lo estaba disfrutando mucho, aunque tampoco me imaginaba repitiendolo con alguien más, digo era el primer chico que llamaba mi atención que no fuera un tipo que me saqué por lo menos 20cm, y bueno, aunque ser activo estaba siendo grandioso, mi lugar favorito era contra el colchón con las piernas abiertas para recibir a Eric, pero me desvío, sigo, estaba siendo una maravillosa experiencia, acerque mis dedos a su boca para que los lamiera, los recibió sin ningún problema, gemí ante la imagen-desde que te vi en la clínica me gustaste-dirigí mis dedos hasta su ano y comencé a dilatarlo un poco, oírlo gemir fue tan rico, me hinchaba el ego, me sentía bien al hacerlo sentir bien a el, me beso y me mordió el labio inferior
-Mmmh, Chris, se siente bien-me abrazó, saque mis dedos de su interior y me acomode entre sus piernas, no es necesario decir que yo ya estaba por completo erecto, estaba ansioso por tenerlo, abrí un poquito sus piernas y lo sujete de los muslos para después por fin penetrarlo.
Intente entrar despacio, pero termine entrando de una vez hasta que sentí como chocaba mi pelvis en su trasero, gimió fuerte y clavo un poco las uñas en mis brazos, digo tampoco es que tuviera yo un pene muy grande si lo comparaba con el de Eric, pero escucharlo gemir y pedir más me hizo muy feliz y me exito bastante-Chris, por favor, muévete-lo besé y comencé el vaivén de inmediato, se sentía genial, el calor en mi miembro, sus paredes anales apretandome, sus gemidos y su piel perlada por el sudor son algo que jamás olvidaré.
Kurama tiraba despacio de mi cabello, ambos gemiamos, me gustaba su voz, no era como la de esos asquerosos hombres mayores que se excitaban con un niño, hubo muchos besos y caricias, yo quería complacerlo, aumente la velocidad de mis embestidas lo más que mis piernas y cadera me permitieron, sentía el orgasmo cerca.
Por un momento tuve la fantasía de que yo era una persona normal, como si ese encuentro sexual hubiera sido el primero de ambos, como debía ser, adolecentes de secundaria teniendo ssexo por primera vez, ésa pequeña fantasía me hizo feliz.
Luego de un rato logre llegar al orgasmo y me corrí dentro de él, lo bese una vez más antes de salir de su interior y recostarme a su lado, me sentía muy relajado pero cansado, había sido un grandioso orgasmo, Kurama me acarició el pecho y me beso la mejilla, se acomodo a mi lado, luego bajó su mano hasta mi abdomen y me acarició sobre las ya cicatrizadas heridas, no preste atención, aún estaba regulando mi respiración.
-¿Quien te las hizo?...¿Eric?-Sonreí y agarré su mano
-No, él no suele ser tan violento, a veces me muerde, pero nunca me ha hecho heridas importantes, mis cicatrices son de peleas, de clientes y algunas hechas por mis padres.
-¿Tienes padres?-me miro atento
-Muertos ambos, mi mamá murio hace 2 años de sida
-Lo siento
-Esta bien, desde que murió estoy mejor-¿Que hay de ustedes?
-Mi mamá también murió hace 2 años-de nuevo se entristeció, lo agarre de la nuca y lo bese otra vez
-¿Y tu padre?
-No se quien es, mi mamá fue prostituta, en ambos embarazos fue un accidente-¿y el tuyo?
-El también está muerto, era un maldito alcohólico-mire al techo, Kurama me abrazó con cariño, yo me sentía como si lo conociera de mucho tiempo, siempre quise un amigo así como el-fue mi primer hombre-cerré los ojos sintiendo dolor-abusó de mí y me metió en el mundo de las drogas, lo mataron hace 5 años-Kurama no respondió pero me abrazó, bese su hombro y correspondió el abrazó, durante un par de minutos solo se escucharon nuestras respiraciones, su calor corporal era reconfortante.
-¿Tendrás al bebé entonces?-bese su mejilla y rompí el silencio
-Deseo tenerlo… yo amo a Derek y si puedo tener a su bebé eso sería maravilloso, no tengo mucho pero quiero amarlo y que el me ame a mi, igual que mi mamá lucharé por él-sonreí y finalmente me separe de él, Kurama era como yo, quizás por eso fue mi atracción por él tan fuerte, era como si fuéramos las dos caras de una sola moneda, el bueno y yo malo, él parecía no sentir odio y yo estaba lleno de él, por eso mismo ahora si iba a tomarlo personal, quería ayudarlo, que fuera libre para poder parir a su bebé, si Luka seguía en su vida tarde o temprano terminaria muerto; me senté en el borde de la cama y comencé a vestirme mientras de nuevo la idea de quedar preñado me asaltaba, si tenía el amor de un bebé, un amor incondicional iba a poder resistir cualquier cosa, incluso el abandono de Eric.
Al parecer me quedé en silencio por mucho tiempo, Kurama me abrazo por la espalda sacándome de mi ensimismamiento, me gire para besarlo.
-Me gustas Kurama, somos como las dos caras de una moneda-me reí pero él asintió como si estuviera pensando lo mismo-me alegra haberte conocido-alce un poco mi cadera para poder subirme los calzoncillos y el pantalón-esta vez fue él quien me besó.
-Te iras ¿cierto?, ¿no te veré más?
-Kurama, te prometo que después de hoy serás libre, en serio te lo prometo, podrás tener a tu bebé y serás feliz ¿bien?, por lo mismo debes dejar de frecuentar a la basura como yo, además yo tengo que volver a mi casa, no creo volverte a ver...pero estoy feliz.
-¿Somos amigos?-asentí con una sonrisa-yo no pienso que seas basura-me beso
-Gracias, pero no me conoces tan bien-lo separe de nuevo y termine de vestirme, el también cubrió su desnudez-¿puedes darme la direccion del bar?-asintió un poco dudoso, la escribió en un papel y me la dio-¿tienes armas?-me miró sorprendido y luego de unos segundos asintió
-Chris
-La necesitó...no te asustes, tengo un plan, prestamela-salió de la habitación y tras un par de minutos regresó con una vieja pistola, la revise, estaba cargada, era obvio, muchas prostitutas están armadas por si acaso, Kurama se veía asustado, su cara era muy linda, perdonen que lo repita tanto pero el enserio me gustaba y aun le tengo cariño aunque no lo volví a ver.
Nos despedimos con un último beso, lo hice lento y suave, acariciando sus labios con mi lengua, profundizando un poco sin llegar a ser un beso sucio, luego sin decir más me marché.
En la entrada de la casa sentado en la banqueta estaba el otro hermano, el que era totalmente castaño, estaba con el pequeño, me vio con desprecio cuando salí, le sonreí.
-No me veas así, solo nos despediamos-seguramente nos escuchó compartiendo amor, se sonrojo, él también era lindo, quise molestar-¿quieres un poquito de amor también?, me rei
-No eres bueno para él, no regreses
-Que cruel, no lo obligue, fue mutuo asi que no te enojes-me rei, su sonrojo aumento-pero no te preocupes, no volveré-me puse serio-y no te preocupes, te prometo que le daré su libertad a Kurama-me levante la camisa y vio la pistola, se sorprendió pero antes de que dijera algo me marche.