Sentía que no podía respirar y que no se podía mover, poco a poco comenzó a recobrar el conocimiento, entre abrió los ojos para ver donde estaba metido, sintió como un líquido viscoso recorría todo su cuerpo, se tallo los ojos para poder ver un poco mejor, fue ahí donde entendió que estaba en una cámara de regeneración, el cristal del que estaba hecho la maquina le dejo ver que sus sospechas eran ciertas, estaba en el laboratorio de su casa-base, puso las manos contra el cristal y busco con la mirada a Dib, el cual no tardó en encontrar sentado frente a él, parecía que se había quedado toda la noche en vela, pues precisamente estaba sentado en una posición que le permitía ver la cámara de recuperación para monitorear la recuperación del alíen.
Pero al parecer el sueño y el cansancio vencieron al humano que yacía dormido en la silla, recargando su rostro contra su mano izquierda, Zim sonrió para sus adentros, al parecer había ido a buscarlo, pero esa sonrisa duro poco, ahora recordaba el por qué estaba en la cámara de recuperación, inmediatamente mando una orden mental a su PAK para que drenara el líquido y así poder salir.
-“Drenando cámara de recuperación”-. Dib despertó inmediatamente al escuchar a la computadora, vio como la cámara era vaciada y a Zim estando consiente, rápidamente cogió una bata para dársela a su alíen cuando salió de la cámara, Zim se la puso rápidamente y encaro a Dib.
-¿Dónde está Zib?-. Pregunto, aunque creía saber la respuesta a esa pregunta quería escucharla directamente de Dib, el moreno agacho la mirada con tristeza.
-Se la han llevado-. Le dijo con seriedad, Zim solo agacho la mirada.- Hace una hora la computadora detecto a una nave Irken saliendo del sistema solar-. El de piel verde apretó sus puños y frunció el ceño.
-Computadora, prepara el Voot-. Ordeno mientras se quitaba la bata que le había dado el humano y comenzaba ponerse su traje de invasor.
-En seguida amo-. Respondió la voz computarizada de su base.
-Computadora, cancela esa orden-. Zim volteo sorprendido, ¿Acaso Dib había hecho cancelar una orden de Zim?, Frunció el ceño, y ante esto Dib hizo lo mismo.- ¡Estás loco!-. Le grito antes de que el alíen dijera algo.- Si vas por impulso ellos no tardaran en localizarte y…-. A Dib se le hizo un nudo en la garganta.-… No puedes irte así como así-.
-Es mi hija y la traeré sin importar que-. Zim le dio la espalda al humano.
-También en mi hija, pero no dejare que a ella o a ti les pase algo por una incompetencia tuya-. Dijo con enojo, Zim apretó sus puños y volteo a ver al humano.
-¡Dices que es tu hija!-. Lo encaro casi con lágrimas en esos ojos magenta.- ¡¿Entonces por qué rayos no has hecho nada para traerla de vuelta?!-. Le dijo con rabia mientras se acercaba a él y lo tomaba por las solapas de la camisa que traía.- ¿Por qué no has hecho nada?-. Dib tomo las manos de Zim con delicadeza y acerco su rostro al suyo.
-¿Quién dice que no he hecho nada mientras te recuperabas?-. Pregunto con una sonrisa, Zim abrió los ojos sorprendido.- Computadora llevamos al hangar, y prepara todo para partir en media hora-. Ordeno el moreno.
-En seguida-. De nuevo la computadora hablo, el piso sobre el que estaban parados se elevó, llevándolos al ático de la casa donde se encontraba la nave que los llevaría a ambos a Irk.
-¿Qué…que es esto?-. Pregunto el alíen sorprendido al ver su nave completamente modificada, Dib se puso a su lado.
-Le hice algunas modificaciones a tu Voot, ahora puede viajar más rápido-. Zim se acercó a su nave para apreciarla mejor viéndola totalmente sorprendido.- Hice algunos cálculos y si viajamos a la máxima velocidad, estoy seguro de que llegaremos a Irk en una semana-. Dib sonrió.
-Entonces que esperamos, vámonos-. Zim quiso entrar corriendo al Voot para partir en ese mismo instante pero fue detenido por Dib.
-Tal vez tú aguantes toda una semana sin comer Zim-. Le dijo con el ceño fruncido.- Pero yo soy humano, así que necesito comprar comida para el viaje-. El de piel verde se cruzó de brazos, era verdad si partían sin llevar comida, lo más seguro es que Dib se muriera de hambre en la ida y Zib en el regreso. Suspiro con cansancio.
-Está bien, pero trae comida para Zib también, y rápido que no tengo todo el día-. De inmediato el humano salió dejando a Zim en el hangar.- Ojala no sea demasiado tarde para cuando lleguemos-. Decía con algo de esperanza.
**** En algún lugar del espacio ****
-¿Qué crees que Los Más Altos planean hacer con ella?-. Pregunto el Irken copiloto al otro.
-Lo más seguro es que la quieran solo para molestar a Zim-. Le dijo sin preocupación.
-“¿Molestar a mi Papá?, ¿Solo me quieren para eso?” -. Zib ahora estaba acostada en el piso de una celda al final de la pequeña nave en la que viajaba, fingía estar inconsciente aun para recolectar aunque sea un poco de información para ver cómo actuar y así poder salir de ahí y regresar a la tierra.
La hibrida abrió un poco sus ojos dejando ver su humana mirada ámbar para recorrer con la vista la nave en la que la tenían secuestrada.- “Se parece al Voot de Papá, no será un problema manejarlo”-. Sonrió de medio lado.- “El problema será darle vuelta a esta porquería y volver a casa”-. Se sentó y comenzó a meditar.
-Mira Bok-. La voz de uno de los Irken la saco de sus pensamientos.- Ya despertó-. Zib frunció el ceño, se puso de pie y comenzó a darle patadas al campo de fuerza que la mantenía encerrada en esa celda.
-Basura alienígena, déjenme salir de aquí-. Ordeno la morena con enojo, los Irken temblaron un poco ante la acción de la menor, pues sabían lo agresiva que era.- ¿Me han escuchado?-. Zib saco sus patas biónicas y comenzó a golpear con ellas la “puerta” de su celda.
-Lo…lo sentimos pero son órdenes directas de nuestros líderes-. Dijo Bok con algo de miedo, pues la mirada que tenía la menor era de furia total.
-No me interesa si es una orden de sus inútiles líderes-. Contesto con enojo.- Quiero que me saquen de aquí, ¡Ahora!-. Los Irkens la vieron con temor, Bok solo apretó un botón el cual accionaba la puerta que dividía la celda de la cámara de control, encerrando aún más a Zib.
La menor no tardo en ponerse más furiosa de lo que ya estaba.
-¡Malditos Irkens de mierda!-. Escucharon un grito proveniente del otro lado de la puerta, seguidos de unos cuantos golpes, ambos Irkens suspiraron de alivio, al menos esa gran muralla de acero los mantendría alejados de esa hibrida malhumorada.
-Entonces, ¿Qué crees que hagan con ella?-. Volvió repetir su pregunta, Bok miro a su compañero.
-Antes de que nos mandaran hablar, escuche que Los Más Altos querían raptarla para convertirla en una invasora-. Contesto a su compañero.- Si eso es lo que pretenden Los Más Altos, lo más seguro es que le borren la memoria de la PAK y la obliguen a ir al planeta de entrenamiento invasor-.
-Pero eso no sería mucho para ella, digo ni siquiera es una Irken en su totalidad-. Bok ya no contesto, simplemente se encogió de hombros.
Dentro de la celda, Zib había sacado de su PAK un amplificador de audio, había escuchado toda la conversación que habían tenido esos dos, frunció el ceño cuando escucho lo que pretendían hacer con ella.
-Borrar mi memoria ¿eh?-. Se dijo para sí mientras volvía a guardar el amplificador en su PAK.- En ese caso tendré que tomar medidas extremas-. Inmediatamente quito el PAK de su espalda y comenzó a hacerle unos ajustes.
**** Tierra ****
-Apresúrate Larva-Dib, que mi hija sigue en manos de esa basura alienígena como tú la llamas-. Zim ahora estaba sentado en su Voot, y estaba apurando al humano para que partieran de una buena vez.
-Ya voy, solo termino de hacer los últimos ajustes al motor-. Decía el moreno mientras cerraba la escotilla que tenía dentro el motor de la nave ya recalibrado para el viaje.- Listo, enciéndelo Zim-. Le dijo al de piel verde mientras se subía la ahora amplia nave.
Apenas el alíen escucho la orden del humano, encendió el motor, el tejado de la casa comenzó a abrirse dejando ver el cielo nocturno, el humano no tardo en tomar su lugar como copiloto de la nave, pues bien sabía que aunque él hubiera modificado la nave, Zim no lo dejaría conducirla por el simple hecho de que la nave Voot le pertenecía a Zim y no al él.
-¿En serio tardaremos una semana en llegas a Irk?-. Pregunto Zim cuando salieron de la órbita del planeta, volteo a ver a Dib que presionaba algunos botones, de inmediato varias pantallas aparecieron ante el humano.- Dib, te estoy hablando-. Le dijo con algo de molestia.
-Te escuche la primera vez-. Seguía sin mirarlo.- Según mis primeros cálculos, tardaríamos una semana en llegar a tu planeta-. Le dijo el humano mientras volvía ocultar las pantallas que había sacado.- Pero, ¿Estás seguro de que Los Más Altos están en el planeta?-. Le pregunto a Zim, el de piel verde lo miro sin entender.
-No te entiendo, ¿Qué quieres decir con eso?-. Dib volvió la vista a los monitores de la nave.
-Lo que te estoy preguntando es que si estás seguro de que llevaran a Zib al planeta Irk-. Zim lo medito un poco.
-No lo sé-. Dijo al fin.- Tal vez si-. Volvió para ver a Dib.
-Computadora, localiza a La Inmensa-. Ordeno el moreno, de inmediato la computadora de la nave comenzó a hacer un escaneo.
-¿Qué pretendes Dib?-. Pregunto Zim mientras se acercaba al humano.
-Yo no creo que lleven a Zib al planeta Irk-. Le dijo sin dejar de ver el monitor que le indicaba que se estaba llevando a cabo el escaneo para localizar a la nave Nodriza del imperio Irken.- En el laboratorio me dijiste que Los Más Altos ordenaron directamente capturar a Zib-. Zim asintió confirmando lo que decía el humano.
-¿Y luego que?-. Pregunto.
-Si fue una orden directa, ¿Por qué llevarían a Zib al planeta Irk?-. El alíen comenzó a razonar hasta que le vino una idea a la cabeza.
-Los Más Altos siempre viajan en La Inmensa-. Le dijo al humano.- Podría ser que la llevaran ahí en lugar de a Irk-.
-Exacto-. A Dib se le dibujo una sonrisa en el rostro al ver el resultado, La Inmensa no estaba muy lejos de ellos.- Iremos directamente con Los Más Altos y reclamaremos a nuestra hija-. Le dijo a Zim mientras colocaba las nuevas coordenadas en el Voot para ir directamente a la nave Nodriza.- No solo se han metido con la tierra, sino que también con mi familia, y eso no se los perdonare, pagaran con sangre si algo le ocurre a mi princesa-. Zim sonrió ante lo dicho por su humano, inmediatamente tomo su lugar en la nave y puso la nave a la máxima velocidad.
-Lamentaran el día en que desterraron a Zim, pero más lamentaran haberme robado lo que más amo en la vida, me vengare por todo lo que me han hecho, porque… ¡¡¡YO SOY ZIM!!!-.
**** En algún lugar del espacio ****
-He terminado-. Se dijo la morena mientras comenzaba a ponerse al PAK de vuelta, en ese preciso momento, la puerta de su celda fue abierta, dejando ver a través de ella a los dos Irkens que la habían secuestrado.
Zib de inmediato se puso en guardia para enfrentar a esos Irkens, pero los muy desgraciados la electrocutaron con ayuda de un brazo metálico para poder inmovilizarla, en cuanto la menor cayó al suelo a causa del choque eléctrico, los Irkens le colocaron unas esposas en sus muñecas y también un cable que neutralizaba su PAK para evitar que sacara sus partes biónicas.
-Esto evitara que te puedas defender-. Le dijo Bok, Zib solo le dedico una mirada llena de ira.
-Créeme cuando te digo que cuando me libere de esta y elimine a la escoria alienígena de sus líderes, tú serás el primero en mi lista que recibirá un baño de agua hirviendo-. Lo amenazo, ambos Irkens retrocedieron ante lo dicho por la menor, pero aun así se acercaron a ella, pusieron a la menor de pie y la escoltaron hasta el hangar de la que ahora era La Inmensa.
Al bajar de la nave varios Irkens se le quedaban viendo, algunos solo le llegaban hasta la cintura, ¿En verdad esa especie era tan bajita?, siguió mirando al frente, ignorando todas esas miradas violetas y rojas en su persona, comenzó a temblar pero de rabia.
-¡¿Qué demonios miran?!-. Pregunto enojada, su voz resonó en todo en hangar, y ante esa reacción los Irken se apartaron de ella con algo de miedo y dejaron de bombardearla con sus mirada, la hibrida bufo molesta y siguió caminando hasta llegar a los pasillos de la nave.
Al igual que le paso en el hangar, en los pasillos también había Irkens, solo que estos le llegaban hasta los hombros, igualmente estos la miraban fijamente, ella simplemente frunció el ceño, eso era en verdad molesto.
Llegaron a una enorme puerta, la cual se abrió de par en par ante la presencia de los Irkens que la escoltaban, parecía ser la cabina de mando de esa nave, a Zib no le tomo mucho tiempo averiguar en donde se encontraba ahora.
-“Esta es La Inmensa”-. La hibrida frunció el ceño.- “Esto será más difícil de lo que creí”-. Llegaron a la parte más alta de la cabina de mando, frente a ella se encontraban dos grandes asientos, al estar a un metro de distancia entre las sillas y ella, los Irkens se detuvieron y se arrodillaron.
-Invasor Bok-. Dijo uno.
-Invasor Gorf-. Dijo el otro.
-Reportándose-. Dijeron los dos al unísono, la hibrida solo se les quedaba viendo, hasta que una voz llamo su atención.
-Estábamos esperándolos invasores-. Era uno de los líderes, El Más Alto Purpura, este sonrió ante lo que tenía enfrente, Zib solo pudo apretar sus puños mientras veía esa estúpida sonrisa asomándose en la cara de ese Irken, el cual era más alto que ella, Zib apenas y le llegaba a los hombros.- Vaya, no creí que fueras tan alta-. Ahora se refería a la menor, Zib no contesto.- ¿Por qué no te inclinas ante tus líderes?-. Pregunto serio, pero no recibió respuesta por parte de la chica.
-¿Acaso no escuchaste a tu líder?-.Ahora era Rojo el que aparecía detrás de Purpura, Zib solo bufo.
-Ni crean que porque son los líderes de esta estúpida nave me inclinare ante ustedes, basura alienígena-. Les dijo con una media sonrisa, esto ocasiono enojo en el rostro de Rojo.
-Tu, pequeña insolente…-. Rojo estaba a punto de golpearla, pero fue detenido por Purpura.
-Tranquilizare hermano-. Le dijo a Rojo, Purpura sonrió.- Parece ser que has aprendido ese lenguaje de esa humana que tienes como madre-. Zib frunció el ceño.
-Para ser “avanzados” el recaudar información no es lo suyo, ¿Verdad?-.Les dijo con una media sonrisa, Los Más Altos fruncieron en ceño ante la insolencia y la falta de respeto por parte de la menor.- Para su información Zib…-. Se apuntó a si misma.- No tiene madre-.
-Entonces simplemente eres un embrión de laboratorio-. Purpura se cruzó de brazos.
-¿Y que si así fuera?-. Lo reto con la mirada.
-Mira niña, para hacerte el cuento corto, eres hija de un Irken, por lo tanto eres parte del imperio, así que brindaras tus servicios a favor del Imperio y te convertirás en invasora…-.
-Oh, claro que no-. Los interrumpió la menor, de nuevo Zib frunció el ceño.- Yo no soy propiedad de nadie, y menos del imperio que traiciono a mi Papá y lo desterró-. Sonrió con prepotencia.- Además yo no tengo rango de invasora-. Los Más Altos la miraron con duda.
-¿Qué quieres decir?-. Pregunto Rojo.
-Yo no soy una invasora, yo soy una guerrera-. Le dijo con seriedad.- No por nada me considero una guerrera, busco venganza en nombre de mi Papá y la obtendré y lamentaran el día en que secuestraron a Zib Membrana-. Purpura frunció el ceño al principio, pero después sonrió con cinismo, Zib sentía que algo no estaba bien.
-Eres igual de testaruda que Zim-. Le dijo con una sonrisa.- Ahora no me sorprende que seas su hija, son tan idénticos-. Escupió con oído lo último.
-Pero apuesto a que mi Papá no haría esto-. La menor sonrió, de un momento a otro la imagen de la hibrida desapareció ante ellos, era un holograma, los líderes se quedaron sorprendidos, ¿En qué momento había escapado? Y delante de sus narices.
-Sellen toda la nave-. Ordeno Rojo.- Encuéntrenla y tráiganla ente nosotros-. Ordeno a los dos invasores que la habían traído, ellos solo asintieron y de inmediato salieron de la cabina de mando.- Esa niña…. Ahora dudo que en verdad sea hija de Zim-. Dijo Rojo con el ceño fruncido.
-Quieres calmarte-. Le pidió Purpura.- Ella ni siquiera ha salido de la cabina de mando-. Rojo vio a Purpura con duda.
Purpura abrió uno de los gabinetes de la ventilación y de ella saco…
-¡Suéltenme!-. A Zib que se mantenía oculta, la menor pataleaba y tiraba golpes con la esperanza de que alguno de ellos se estrellara contra el Irken que la sostenía de su PAK.
-Eres una hibrida muy escurridiza-. Sonrió con burla Purpura mientras sostenía a Zib por la PAK.- Pero eso está a punto de cambiar-. Saco un cable de la computadora principal.- Computadora reinicia la memoria del PAK conectado-. Ordeno Purpura, de inmediato Zib intento desesperada mente soltarse del agarre del mayor.
-¡No!, ¡No te atrevas!-. Pronto sintió como la computadora invadía el sistema operativo de su PAK y comenzaba a borrar la memoria guardada, pudo ver como pasaba toda su vida frente a sus ojos, sus momentos en familia con su Padre Dib y su Papá Zim, los momentos de las clases en la Skool, cuando jugaba con GIR, todo eso era borrado de su PAK, hasta el momento en el que Purpura la había conectado a la computadora, sintió como sus ojos comenzaban a cerrarse y lo último que vio fue la cínica sonrisa de Purpura.
-Re inicio del PAK, completo-. Aviso la computadora principal.- Instalando recuerdos de protocolo-. Purpura libero a Zib de su agarre, la hibrida que aún tenía los ojos cerrados estaba de pie delante de ambos Irkens.
-¿Funciono?-. Pregunto Rojo que estaba detrás de Purpura viendo todo, Purpura solo sonrió, de pronto los ojos ámbar de Zib se abrieron, dejando ver seriedad en ellos.
-Saludos Mis Altos-. Se inclinó ante ellos.- Invasora Zib reportándose al servicio-.