Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Si el plan A no funciona por HeartBreakerGirl

[Reviews - 161]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

¡¡Hola!! Aquí estoy reportándome. Sé que no actualicé la semana pasada. Estuve enferma por lo que no pude escribir. La uni me tiene agotada, pero bueno...eso es otra historia. Originalmente pensaba en subir el capítulo en la mañana, pero para mi mala suerte se me fue la luz todo el día. Por lo que recién puedo subirlo. Veo que tratar de cumplir el horario de las actualizaciones es difícil con la uni y todas las cosas imprevistas que me pasan Por eso he decidido darles mi Twitter para que estén más informadas de mis actualizaciones. No me queda de otra XD Así que aquí está. Es este para los que no me conocen: @unniepanda. Ahí me pueden encontrar ^^

Sé que les debo un  capítulo. Cuando tenga tiempo, me pondré al corriente. Por último. Disfruté escribiendo este capítulo. Espero que les guste. Aún estamos en la letra C, así que no hagan conjeturas sobre la letra D.

Eso es todo. Les deseo una bonita semana ^^

“Cuando estás cansado, levanta la cabeza

Me verás tendiéndote mi mano a tu lado e iremos una vez más”

Only One-JYJ

 

Uno de los momentos mágicos de día era sin duda el amanecer que en ese preciso instante Ji Yong estaba siendo testigo. Los característicos colores que conformaban el cielo eran extraordinarios y un deleite para la vista de cualquier espectador despierto a esa hora de la mañana. El rubio como nunca se había despertado a las seis de la mañana. Sin motivo alguno el sueño se le había ido y él contra eso no podía hacer nada. Ni siquiera renegó por ello, incluso se preparó una taza de café que ahora tenía en sus manos y lo tomaba poco a poco mientras se dedicaba a pensar en los acontecimientos del día anterior. Mejor dicho el acontecimiento que sin lugar a dudas capturó su corazón y eso era la sonrisa de alguien llamado Choi Seung Hyun. Sonrió al pensar en ello. Era consciente que no había sido una completa sonrisa por parte del mayor, pero era suficiente para él. Pensó en la última sonrisa sincera que había vislumbrado en rostro del pelinegro e inmediatamente su mente obtuvo la respuesta. Fue hace cuatro meses, en esa cena en que él había decidido dejarlo ir para siempre de su vida, sin que Seung tuviera conocimiento de ello. No obstante, también se puso a pensar cuál había sido la última vez que había sonreído para él y también obtuvo una respuesta rápida. Incluso tenía fotos, como prueba y el recuerdo de aquel día memorable… exactamente hace un año y cinco meses.

 

FLASHBACK

 

 ¿Por enésima o quinceava vez? Ji Yong no lo recordaba, pero se encontraba estresado. La canción no le salía como lo quería, sabía que faltaba una pieza importante. Lo que más le daba dolor de cabeza… es que él en un principio pensó que tenía la canción hecha y solo había que agregar la parte de Seung, sin embargo tardíamente se había dado cuenta que a su composición no era la que esperaba. Se sentía apenado por haber hecho venir a Seung… cuando evidentemente su canción no estaba lista. Suspiró de frustración. ¡Rayos! Al parecer no iba a ser un buen día, quería golpear su cabeza contra la mesa… ¿tal vez así encontraba lo que faltaba? Nahh… ni con eso podría arreglar su problema. Empezó a rayar el papel que tenía al frente furiosamente sin darse cuenta. Su maldita parte perfeccionista no le dejaba estar conforme con lo que había escrito.

 

-Heyy… Ji. Cálmate- dijo Seung con una sonrisa torcida.

 

-¿Ehh…?-la habitación por mucho tiempo había estado en silencio y escuchar la voz del más grande le descolocó por unos segundos- ¡No puedo! ¡Se supone que la canción estaba lista, Seung!- Ji Yong arrugó el papel y lo botó por dónde sea.

 

- Ese es el papel número cincuenta que tiras, Ji Yong. Creo que ya fue suficiente- Seung habló tranquilamente. Mientras el menor se volteaba para verlo sorprendido- Sí. Es la respuesta a la pregunta que anda rondando por tu mente-una leve risa salió de los labios del mayor- Los estuve contando toda la hora que estuve sentado escuchando música.

 

-Incluso contaste cada papel que boté y tienes razón-Ji Yong miró el suelo y veía una cantidad considerable de bolitas esparcidas por toda la habitación- Lo siento, hyung- murmuró apenado.

 

-Hey… ¿por qué lo sientes? No te preocupes- el tono de voz de Seung fue cálido.

 

-Pero te hice perder tu tiempo.

 

-Nada que ver. Al menos pasé tiempo a tu lado… lo que necesitas es relajarte, Ji Yong.

 

-¿Relajarme? No creo que sea prudente- Ji Yong habló con indecisión.

 

-Eishh… menos mal que tienes a tu hyung para animarte. ¡¡Así que vamos!!-el pelinegro se levantó de su silla muy animado y jaló la mano de su mejor amigo. Arrastrándole hasta la salida del estudio.

 

-¿Adónde me llevas?

 

-Ya lo verás. Tú solo sígueme- la sonrisa enigmática que se formó en el rostro de Seung, le provocó más curiosidad al líder del BIGBANG.

 

-Aigoo… hyung- Ji Yong se dejó arrastrar mientras Seung reía divertido por su respuesta.

 

Llegaron a un establecimiento que Ji Yong nunca había visto en su vida. Miró a Seung con ojos dubitativos. Él solo se limitó a encoger sus hombros, respondiéndole de esa manera. No tuvo más remedio que seguirlo, incluso pudo escuchar a Seung silbando alegremente durante todo el camino hacia el lugar.

 

-¿Es mi parecer o alguien está muy contento?- hablo Ji Yong con un tono divertido.

 

-No lo creo.

 

-Si tú lo dices…

 

-Es que pienso en lo que vamos hacer y será divertido.

 

-Y no me lo piensas decir, ¿verdad?- Ji Yong rió.

 

-¡Exacto!

 

-¡No es justo!- el menor no pudo evitar hacer un tierno puchero.

 

-No seas impaciente- se escuchó una risa jovial por parte del mas grande.

 

-No soy impaciente, hyung. Solo me gusta saber las cosas…. es distinto- habló solemnemente su mejor amigo.

 

-Sí, claro- el tono de burla de Seung era evidente- Para tu buena suerte ya llegamos. Adelante.

 

Ji Yong le hizo caso a su mejor amigo, conteniendo la emoción que sentía. Entró sin demorarse al lugar. Quedando sorprendido al instante y se giró para encarar a su mejor amigo.

 

-¿Paintball?- aún con un rostro estupefacto y enarcando una ceja habló. Veía que Seung tenía una sonrisa divertida en su rostro.

 

-¡Claro que sí! Tengo un amigo y nos puede reservar un lugar solo para nosotros. ¡¡Así que a divertirnos!!

 

-Bueno… un día de diversión… no le hace mal a nadie, ¿no?- Ji Yong sonrió.

 

-Tú lo has dicho.

 

Con una mirada cómplice por partes de ambos se comprometieron a tener un estimulante y excitante juego. ¿Quién de ellos ganaría? Lo sabrían más adelante.

 

Después de una jornada de juegos. Dónde Ji Yong se había vestido de rosa y Seung de verde, debido a los colores de las pinturas del juego. Se dispusieron a descansar. Ambos respiraban agitadamente por el esfuerzo físico que habían hecho. Si bien todo había sido diversión, no podían negar que estaban exhaustos. Ji Yong no pudo evitar sentir que se habían trasladado a su niñez cuando usaron los comunicadores para retarse, tratar de encontrarse y eliminarse mediante los disparos. ¡Qué bonitos recuerdos de su infancia! Tenía una gran sonrisa plasmada en el rostro de solo pensarlo.

 

-¿En qué piensas?- preguntó curioso el mayor.

 

-En cuando éramos niños. Solíamos jugar con estos-Ji Yong agitó su comunicador- Era divertido. Aún lo es.

 

-Te doy toda la razón, Ji- Seung rió- Hacíamos buen equipo, ¿recuerdas?

 

-Sí. Aún lo somos. Bueno ahora formamos parte de un grupo.

 

-Lo sé. De alguna manera cumplir nuestros sueños nos llevó a esto.

 

-¡Exacto! Estoy pensando si debemos invitar a los demás, así hacemos equipo y les ganamos.

 

-No es mala idea Ji- Seung rió- ¿Ahora… te sientes más aliviado?

 

-¿Te refieres al estrés?- Seung asintió- Sí. Esto me hizo bien. Gracias, Seung.

 

-De nada, Ji. Para eso estoy aquí. Eres mi mejor amigo- la sonrisa del mayor se mostraba sincera- Procura no estresarte y siempre recuerda algo.

 

-¿Qué?

 

-Ji… ¿recuerdas lo que me dijiste cuando se formó el grupo?

 

-Sí.

 

-Me dijiste: “Mi razón para saltar a este mundo de la música es una sola palabra… el…”

 

-Destino- Ji Yong completó la frase. Seung sonrió.

 

-No lo olvides, Ji.

 

-No lo haré.

 

FIN DEL FLASHBACK

 

Seung Hyun ese día le hizo pasar un momento muy agradable, que lo conservaba nítidamente en su memoria. No podía creer que inclusive recordara esas palabras que le dijo cuando el grupo se formó de manera definitiva. Admitía que en su momento había pensado que tener un hombre así como mejor amigo valía mucho, ahora pensaba de otra manera aunque lo esencial se conservaba. Solo se limitó a quitarle la palabra mejor amigo y tener. La cambió por el hombre que amaba. Mantenía firmemente que amar a un hombre como Seung valía la pena y otra vez volvía a sus pensamientos originales: La sonrisa de Seung. No negaba que aquello había causado un enorme efecto sobre él. Lo sucedido era una prueba innegable que él iba por buen camino y que sus esfuerzos tenían frutos. Aunque lo más importante era la recuperación de Seung. Lo que significaba al final de cuentas que él seguiría arriesgándose por Seung, aunque su corazón saliera lastimado en cada intento. Porque él era capaz de correr a través del fuego por Seung, como si nunca hubiera salido quemado. Porque le iba a dar todo lo que tenía, cada minúscula parte de su ser y sobre todo, le seguiría amando como sin nunca le hubiera lastimado. Todo había empezado desde el momento en que su corazón había decidido latir por él, le había dado un nuevo sentido a su vida. Sin esperarlo se enamoró perdidamente e irremediablemente de Seung, eso era algo que no entraba en discusión. Quizá Seung no había sido la primera persona de la que se había enamorado en su vida, pero con él las cosas habían sucedido de manera distinta y eso incluía en amarlo intensamente como nunca lo había hecho con nadie. Incluso si el perdía todo en ese proceso, todavía tenía mucho que dar. El coraje es lo que le movía en ese momento a tomar ese tipo de decisión. Algunos le llamarían ser estúpido o tonto, pero él lo veía de otra forma. Ponía su corazón en una línea frontal, en un acto de valentía y él no iba a tener miedo, sería fuerte por dos personas: Él y Seung. Haría de cuenta que él nunca había perdido en su travesía para la recuperación de Seung y si en caso que volvía a suceder, se levantaría de nuevo. Seguiría intentándolo. Todo se reducía seguir amándolo y muy dentro de él, sabía que era para siempre.

 

Dejó la taza de café en la mesa, subió sus piernas a la silla donde se encontraba sentado y abrazó sus piernas, mientras colocaba su cabeza encima de las rodillas. Parecía un niño, pero era su manera de observar el panorama con toda la tranquilidad del mundo. Aunque ahora en ese momento empezaba a sentir calor. ¡¡Era increíble!! Ni en Corea el verano era de esa manera… según el pronóstico del tiempo que había leído. ¡¡Estarían 48 grados!! Bufó de frustración.

 

-Buenos días- escuchó la voz que conocía perfectamente.

 

-¡Oh, hyung despertaste! Pensaba que dormirías un poco más - Ji Yong miró su reloj- Son las siete. Es temprano para ti. Demasiado diría yo- Ji Yong se rió.

 

-El sol no me dejaba dormir y el calor tampoco-Seung se sentó en la silla contigua de Ji Yong. Había hablado con tono cansado. Se le podía notar la mirada triste.

 

-Ohh… bueno. Pediré el desayuno. Hoy tenemos un día ocupado y no quiero caras largas-Ji Yong miró de reojo a Seung.

 

-Me arrastraste aquí, Ji- habló con calma el mayor. Ji Yong le dio una mirada de advertencia- Lo que sea- Seung suspiró.

 

-Eso está mucho mejor. Sé que no te arrepentirás de esto Seung. Pediré la comida- Ji Yong se levantó de su asiento para llamar al servicio del hotel.

 

-Supongo-murmuró el pelinegro.

 

-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

 

Seung Hyun después de muchos años estaba vestido con ropa de verano propiamente dicha. No le quedaba de otra. El clima en Indio era inaguantable, no estaban a las temperaturas a las que estaba acostumbrados en el verano en Corea y lo entendía, después de todo… estaban en el desierto. Vestía un polo blanco y una bermuda de color beige complementándolo con sandalias, lentes negros y un gorro para cubrirse su cara. En ningún momento se le olvidaba su condición como celebridad, era mejor prevenir que lamentar. La elegancia que destilaba aún vestido de esa manera, no pasó desapercibido para Ji Yong. El menor recordaba la sonrisa que había puesto al verlo así después de años. El rubio con toda seguridad se atavió con prendas sencillas, sin perder el toque característico de él. Solo tenía puesto un pongo blanco manga cero con una camisa manga corta de color celeste encima y unas bermudas parecidas a las del mayor, la diferencia era que llevaban muchos bolsillos. Complementó todo con un gorro parecido a los que usaban los pescadores, lentes negros y unas zapatillas. Ji Yong checó su celular por la hora y se dio cuenta que estaban bien con el tiempo. Miró de reojo a Seung, parecía que el mayor estaba observando el lobby del hotel. Sin motivo aparente el rubio se encontró sonriendo. Meneó suavemente su cabeza.

 

-Bien. El hotel nos ofrece un bus de transporte para el festival. Está a unos veinticinco minutos de acá. Así que… ¿vamos?

 

-¿Un bus?- Seung se giró para ver el rostro de su mejor amigo- No creo que sea prudente. Tenemos que ser precavidos.

 

-¿Entonces qué propones?

 

-¿Un taxi?

-Nos costará más, pero no importa tenemos dinero de sobra, ¿cierto?- Ji Yong rió suavemente- Vamos por un taxi.

 

Enseguida empezaron a caminar hacia las afueras del hotel, siendo recibidos por el imponente sol y un cúmulo de gente que salía del lugar. Al parecer la ciudad había sido invadida por una distinta variedad de personas.

 

-¿Para qué llevas ese bolso?- preguntó curioso el mayor mientras observaba como el rubio tomaba un taxi.

 

-Ya lo verás Seung. Entra- Seung hizo caso.

 

-A Coachella, ¿cierto?- el conductor con una sonrisa habló.

 

-Sí, señor- Ji Yong habló en su poco inglés que sabía manejar. Luego se dirigió al rapero- ¿Seung?

 

-¿Qué?

 

-Hoy no quiero verte con una cara de fastidio. No te voy a obligar a sonreír, pero procura por un momento de olvidarte de las cosas y disfrutar el festival, ¿vale? Eso es lo único que te pido.

 

-Entiendo- Seung suspiró.

 

 

Veinte dólares le había costado llegar a la localización del Festival. Tampoco Ji Yong se podía quejar, como lo había dicho anteriormente… el dinero no era un problema para ellos. Exactamente ahora se encontraban parados frente al “Empire Polo Field” y sentían que la temperatura del desierto había aumentando. Ji Yong incluso se quitó su camisa y ahora andaba en polo manga cero.  Llevaba su camisa en la mano. Se quitó los lentes para observar el enorme letrero que anunciaba el “Festival de Coachella”. Una radiante sonrisa se formó en su rostro.

 

-Aquí estamos.

 

-Eso es obvio- Seung habló con sarcasmo. Ji Yong le escrutó con la mirada- ¿Qué?

 

-Seung se trata de nuestro sueño. ¡¡Por fin lo cumplimos!!- la emoción era nítida en el tono de voz del menor.

 

-Lo sé- Seung habló de forma neutral- Nuestro sueño Ji.

 

-Ya sabes lo que tienes qué hacer- Ji Yong volvió a sonreír.

 

-Lo sé. No sonreiré de nuevo, pero intentaré disfrutar el festival.

 

-Esas son las palabras que quería escuchar de ti, Seung. ¡Vamos!

 

Ambos empezaron a caminar un largo tramo, parecía que nunca iba a acabar. Solo por ello ya se encontraban sudando. Prácticamente habían cruzado uno de los grandes estacionamientos que había en el Festival, luego por un lugar… que al parecer era la zona de los revendedores de boletos. Eso era lo que Ji Yong había entendido con el poco conocimiento de inglés que tenía, incluso les habían ofrecido entradas. El rubio había reído ante la situación cómica, si supieran que habían ofrecido aquello a un par de los cantantes de uno de los grupos más influyentes de Asia… no lo hubieran hecho. Además ver la cara de confusión de Seung, le había causado más risa. Haciendo que el mayor frunciera el ceño. También había pasado por las caballerizas del lugar hasta llegar al sitio que Ji Yong quería. No le extrañó ver una cola inmensa en esa área.

 

-¿No me digas que formaremos nuestra cola?- Seung se quejó. Solo el hecho de haber visto semejante cola sentía que el alma se le iba a los pies.

 

-No. Esa cola es para la compra de boletos. Nosotros tenemos los nuestros, ¿recuerdas?

 

-Entonces… ¿qué hacemos aquí?

 

-Nosotros iremos por acá- Ji Yong se volteó y señaló un área específica del lugar.

 

-¿Camping Area?-la característica voz ronca del mayor pronunció en inglés.

 

-Pagaremos nuestra estancia aquí.

 

-Eso quiere decir…

 

-¡¡Que pasaremos la noche aquí!!

 

-¿Y el hotel?

 

-Bueno lo reservé en caso que no te gustara la acampada, pero dejemos de perder tiempo y compremos nuestra área- Ji Yong sin dar tiempo de replicar al mayor lo arrastró hacía el lugar.

 

-Pero… Ji… no tenemos carpa- murmuró Seung entre dientes.

 

-Claro que sí la tenemos… ¿por qué crees que traje el bolso?

 

-Siempre andas preparado con todo- el mayor volvió a mascullar entre dientes mientras se quejaba. Ji Yong solo atinó a reírse.

 

-Seung ya me conoces.

 

-¡Eso es obvio!- el mayor rodó los ojos. Escuchándose entre el gentío nuevamente la risa del rubio.

-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

 

El reloj decía 6:30 a.m y Ji Yong suspiró de frustración. No podía dormir, se daba vueltas con su sleeping en plena carpa intentando de esa manera para que sus ojos pudieran cerrarse y nada. El problema no es que no tuviera sueño, porque si lo tenía. El problema era que el maldito sol en Coachella salía a esa hora. Toda la madrugada se le había pasado durmiendo congelado y ahora sentía calor gracias al sol, pero no podía dormir. Bueno… solo había podido hacerlo cinco horas, así que era mejor eso que nada.

 

-Deja de moverte. Está de más que lo hagas. El sol ya salió, ¿recuerdas?- Seung murmuró con los ojos cerrados.

 

-Eishh… pero quiero dormir.

 

-Yo también, pero no se puede.

 

-Este es nuestro último día en Coachella. Mañana dormiremos todo el día en Los Ángeles- Ji Yong abrió los ojos mientras se sentaba bostezando de sueño.

 

-En eso tienes razón. Estos días no hemos podido dormir mucho, pero ha sido agradable tener otro ambiente.

 

-Sabía  que ibas a caer-Ji Yong rió. A los segundos recibió un almohadazo de Seung Hyun- ¡¡Hey!! Mejor hay que levantarnos. Sabes que dentro de una hora las áreas de aseo personal estarán llena de colas inmensas y a ti no te gusta eso, ¿verdad?

 

-Acertaste- Seung abrió sus ojos y rápidamente se paró con sleeping puesto- Te veo afuera.

 

-OK. Te ves gracioso así- Ji Yong se rió. Seung le dedicó una mirada envenenada y salió de la carpa.

 

Ji Yong sonrió ante el gesto del mayor. Tal como lo había predicho. En esos tres días que llevaban acampando en Coachella, Seung no había vuelto a sonreír. Recordaba el día que había llegado y separado su área de acampar. Era increíble la eficiencia equitativa del festival para todas las áreas del campamento. Aunque ellos se encontraban en la zona VIP, recibían en mismo buen trato que las demás zonas. Ni bien habían comprado su área, una persona les había sido asignada para decirle dónde podían acampar y colocar tu carpa enorme de acampar, incluso se había ofrecido a armarla si es que ellos no sabían cómo hacerlo. Ese tipo de servicio impresionó a Ji Yong, pero no lo aceptaron. El rubio tenía la idea de que esta vez Seung Hyun le ayudase armar la carpa y él con todo el fastidio del mundo había accedido hacerlo. Esa fue la única vez que Seung Hyun puso esa cara. Sus facciones en esos tres días que se encontraban ahí, habían sido neutrales y amables. Esto último se debía a unas personas con los que entablaron un poco de amistad.

 

-¡Apúrate!-escuchó gruñir al mayor por lo que sonrió, se apresuró a quitarse el sleeping y coger sus artículos de aseo.

 

-Por uno minutos sin mí no te vas a morir Seung- Ji Yong salió de la carpa diciendo aquello.

 

-No voy a morir por ello, pero por la cola sí- Seung habló con tono de fastidio. Ya no tenía el sleeping puesto. No era una sorpresa para el rubio, el calor que estaban empezando a sentir era la respuesta ante ello.

 

-Eres un gruñón, hyung. ¿Lo sabías?

 

-No me importa. ¿Nos vamos?

 

-Sí- Ji Yong se rió.

 

Los dos caminaron en dirección al servicio de las regaderas. Ambos iban a bañarse primero, la lección aprendida por su error que cometieron desde el primer día se les había quedado grabada en su cerebro. Eran cinco enormes trailers que conformaban las regaderas. El sistema había sido adaptado para hombres y mujeres. En diez minutos, ni más ni menos… llegaron a su destino, aún estaban somnolientos. Sabían que una buena ducha les quitaría eso.

 

-Ji Yong, Seung… madrugaron- una voz conocida les habló- ¡Buenos días, chicos!

 

-Heyy… Greg. Buenos días- habló Ji Yong con una sonrisa, mientras se tallaba los ojos.

 

-Buenos días, Greg- el pelinegro también saludó- Hemos aprendido la lección.

 

-Aprenden rápido- Greg rió.

 

-En eso tienes razón- Ji Yong avanzó en la cola al lado de Seung- Somos ese tipo de personas.

 

-¿Han visto a Valentín?- preguntó.

 

-No- habló Seung- Seguro que seguirá durmiendo, seguro que Marie le tiene retenido.

-Puedo ser- Greg se rió entre dientes- ¿Irán al concierto de Queen?

 

-¡¡Eso no se discute, bro!! No nos lo perderíamos por nada del mundo, ¿verdad Seung?- Ji Yong tenía un tono emocionado en su voz.

 

-Si- Seung fue parco en sus palabras, no mostró un signo de emoción.

 

-Buenos nos vemos más tarde. Es mi turno.

 

-Sí- respondió el rubio. Ambos raperos se despidieron con un asentimiento en la cabeza. Luego Ji Yong se dirigió hacia el mayor- ¿Podrías emocionarte un poco? ¡Estamos hablando de Queen! ¿Uno de los cantantes que admiras?

 

-Será un placer verlo en vivo- habló Seung de una manera gentil.

 

-Eishh… sigues siendo el mismo babo de siempre-murmuró el rubio entre dientes- Al menos no me podrás engañar que valió estar la pena aquí, ¿no? Incluso hiciste amigos. Bueno no es la palabra exacta, pero te llevaste bien con nuestros vecinos.

 

Lo que Ji Yong decía era cierto. Coachella por ser uno de los festivales más influyentes de la música, presentando diversas gamas de géneros musicales, recibía miles de extranjeros cada año. Los vecinos de carpa de ambos raperos, habían resultado ser personas peculiares y de distintas nacionalidades. Desde mexicanos, canadienses, londinenses, franceses, brasileros, ecuatorianos, escoceses hasta venezolanos, hindúes y los propios americanos. En fin, el festival parecía una reunión de la Torre de Babel. Algo gracioso si Ji Yong se ponía a pensarlo. Se comunicaban en inglés con los pocos conocidos que habían hecho y en el caso de Greg, que era canadiense, lo hacían en coreano… al parecer sabía el idioma. Había sido una grata sorpresa para ellos, al menos no se sentían tan solos en el festival.

 

-Tengo que ser educado y parecen buena personas.

 

-Ahhh…

 

-Es tu turno. Apúrate. Luego tenemos ir a los lavabos.

 

-¡Ya, hyung! ¡Una pregunta más!

 

-¿Qué?- Seung suspiró.

 

-¿Adónde quieres ir después de desayunar? ¿Al  mini-mercado? ¿Al área de internet? ¿Al área de relajación o nos vamos a refrescarnos? Ohh… tenemos que sacar dinero de los cajeros automáticos- Ji Yong había mencionado todos los servicios que ofrecía el área de campamento. Todo era prolijo, seguro y coordinado.

 

-Después de escoger nuestro desayuno en el buffet, hablamos. ¡Ahora… vete a bañar!

 

-Definitivamente eres un gruñón en las mañanas- Ji Yong habló antes de escapar a su regadera.

 

Seung sin más, entró a la suya. No podía perder más tiempo. Ya verían que hacían, después de todo el Festival abría horas más tarde.

-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

 

Más de 190 artistas suelen presentarse en uno de los más grandes e importantes de la industria musical. Es obvio que a una persona jamás tendría tiempo para observar y disfrutar todas las presentaciones. El rock, punk, folk, hip-hop, electrónica, pop e indie…eran los colores que más caracterizaban al festival. Exactamente ochenta mil almas, formaban parte de la historia ese momento. Ji Yong y Seung tenía muy claro aquello, ellos dos formaban parte de esas almas que disfrutarían las diversas presentaciones del lugar. Hoy era su tercer día de la estancia de aquel sitio y tenían que sacar el mayor provecho de ello. Ji Yong lo había pronunciado en voz alta, aunque Seung no… sabía que muy en el fondo de su corazón tenía que hacerlo. Era parte de su curación.

Ni bien al mediodía, de una manera puntual y cabal, abrieron las puertas del “Empire Polo Field”. Entraron y caminaron bajo el caluroso clima. Felizmente estaban protegidos con bloqueador  y tenían el itinerario del día en su mente.

 

-Espera- Ji Yong se paró de improviso.

 

-¿Qué?

 

-Observemos la vista desde aquí. Es la última vez que veremos estas carpas y ese gran escenario- el menor tenía un brillo intenso en su mirada. Ante ellos se extendía las carpas de Sahara, Gobi y Mojave imponentes ante toda regla, pero sin duda lo que más destacaba era el Escenario Principal

 

-¿Extrañas el escenario, cierto Ji?

 

-¿A qué viene esa pregunta?- el líder de BIGBANG estaba confuso.

 

-Vi tu mirada. Lo siento, por mi culpa…- Seung empezaba a tener una voz melancólica- Pero… mejor no hablemos de eso.

 

-¡Exacto! ¡¡ Porque estaba a punto de matarte Seung!!-Ji Yong le reprochó. Se supone que habían quedado en no poner caras largas y ánimos depresivos-  Es nuestra último día, finjamos que estamos en una burbuja dónde las cosas están bien.

-¿Y qué hago al final del día? Cuando se rompa la burbuja. Esto tiene un límite de tiempo.

 

-Estaré ahí para sostenerte Seung- Ji Yong habló dulcemente tomando su mano- ¿Vamos? Tenemos que ir a la carpa de Mojave.

 

-Supongo que la burbuja empieza ahora, ¿verdad?

 

-Sí- respondió Ji Yong, enseguida caminaron entre el gentío cogidos de la mano.

 

Solo vieron una de las presentaciones del festival. La banda inglesa Savages, hizo una buena performance de cincuenta minutos. La energía derrochadora que habían transmitían en el escenario había sido contagiante para ambos mejores amigos. Ahora solo se dirigían a almorzar. Estaba de más decir que la temperatura había subido considerablemente. Ji Yong se preguntaba a este punto cómo habían podido sobrevivir en el desierto. Se sentía como si estuvieran en la playa. Las chicas llevaban diminutos bikinis o shorts pequeños con topless. Los hombres con shorts y polos manga corta… sobrevivían en el lugar. Todos tenían la intención de estar lo más cómodos y frescos posibles. Solo por disfrutar un buen espectáculo y Ji Yong reconocía que valía la pena. Las bebidas energizantes, el agua y la cerveza estaban a la orden del día. Esas tres cosas eran la más requeridas del ambiente festivo en el que se encontraban. No sabía cómo Seung Hyun había soportado el estar en un lugar abarrotado de gente, suponía que estaba poniendo de su parte.

 

- ¿Seung?

 

-¿Sí?

 

-Gracias.

 

-¿Por qué?

 

-Por quedarte. Sé que has puesto todo tu esfuerzo en esto.

 

-Tenía que hacerlo. Además… ¿recuerdas que estoy en una burbuja dónde no suceden cosas malas?- Seung Hyun habló sinceramente.

 

-¡Cierto, la burbuja ayuda!- Ji Yong murmuró.

 

Seung Hyun siguió caminando mientras el rubio pensaba en lo que había escuchado del mayor. Había caído en la cuenta… si estaba bien por esa vez fingir que todo estaba bien con Seung. Reconocía que Seung había puesto de su parte, a regañadientes, pero lo había hecho. Se había instalado esa máscara para no tratar de arruinar el ambiente esos días. La música había ayudado… es cierto, pero… si él se guardaba las cosas… ¿eso no sería nada bueno, no? No sabía la razón, pero se le dio por pensar en ello. Súbitamente quería saber qué había detrás de todo lo exteriorizaba Seung en esos días… quería saberlo. Quizás… se estaba haciendo un mundo, no lo sabía… pero mejor decidió no pensar en ello y sacar a relucir el tema más adelante.

 

 

La noche había caído después de una tarde llena de formidables presentaciones. Ji Yong y Seung habían visto al cantante Sixto Rodríguez después de almorzar. El rubio estaba casi seguro que las canciones de aquel eminente músico mexicano le habían gustado al mayor, pese a que no mostrara signos de ello. Lo sabía porque a él, siendo músico de otras influencias, ese hombre había logrado estremecerlo con algunas canciones. En su momento pensó si tal vez sería bueno cantando un poco de rock. Ahora ya había terminado la presentación de uno de los más grandes gurús de la música electrónica: Kraftwerk. Había sido un espectáculo impresionante sin precedentes. Había sido una completa sincronización de iluminación, audio y video. Un show de calidad presentado por cuatro hombres perfectamente vestidos elegantemente tocando sus temas clásicos. No se había movido a otra carpa porque el presentador del evento había dicho que tendrían un invitado sorpresa y la curiosidad le carcomía a Ji Yong. Esa era la razón por la que habían decidido perderse la presentación de The Evens, si resultaba siendo esa sorpresa agradable.

 

-Son las 6:15 le presentamos a la sorpresa de esta tarde Wu-Tang Clan- Ji Yong al escuchar eso abrió los ojos desmesuradamente.

 

-Dijo….

 

-Wu-Tang Clan- habló Seung. Sabía de sobra que su mejor amigo estaba impresionado y feliz de escuchar el nombre.

 

-Pero… pero… ¿Cómo ellos están aquí?- el rubio murmuraba como tonto ¡No lo podía creer! Ellos habían sido su razón por la cual ahora se había convertido en rapero.

 

 - ¿Vinieron en avión?-habló con sarcasmo Seung. Luego suavizó el tono de su voz- Lo sé, uno de sus álbumes es una Biblia para ti.

 

-¡¡Esto es uno de los mejores momentos de mi vida!!- Ji Yong parecía un niño emocionado.

 

-Lo sé, Ji.

 

-Shhh… silencio. Esto se pone cada vez mejor- Ji Yong le dio un ligero codazo a Seung, lo miró por un momento y luego regresó la vista al escenario… en ese instante los miembros del grupo imponiéndose entre la audiencia. Seung a partir de ese momento no dijo nada, después de todo era el momento de Ji Yong.

 

Wu- Tang Clan fue una de las presentaciones más aclamadas de la noche. Habían dado una formidable presentación de dos horas y media. El colectivo de una de los grupos más famosos del hip-hop a nivel mundial había venido a hacer el escenario suyo y dejar en claro la razón por la cual eran los mejores. Habían roto todas las reglas posibles de la música y de las presentaciones… llevando a la audiencia al clímax. Ji Yong como un niñito que recibía su regalo de navidad. Saltó, cantó e incluso gritó como cualquier fan. A Seung Hyun se le hizo mucha gracia verlo de esa manera, aunque no sonreía era agradable ver a Ji Yong en una faceta como una persona común. Prácticamente se había olvidado que era una celebridad y esa era una de las cosas que le gustaba de su mejor amigo. Él tenía que reconocer que la presentación del grupo americano de hip-hop había realmente energizante, lo que confirmaba su acierto de que valió la pena haber comprado su primer disco cuando estaba en la escuela primaria. No sabía si era una coincidencia o no, pero justamente ese álbum era el favorito de Ji Yong y la razón por la cual había empezado a rapear. A veces la vida tenía cosas realmente curiosas, ¿no?

 

-No me arrepiento de haber venido hasta aquí. Es una de las mejores noches de mi vida-la emoción aún permanecía en  el tono de voz de Ji Yong.

 

-Sé que lo es.

 

-Tú también lo disfrutaste Seung. A mí no me engañas.

 

-Fueron buenas presentaciones.

 

-Siempre te sales por la tangente- Ji Yong rió- ¿Entonces vamos a cenar?-el rubio miró su reloj- Tenemos media hora para cenar hasta que veamos la actuación de Portishead y luego iremos a ver a Queen.

 

-Está bien- Seung suspiró.

 

-Hey…. Comeremos pizza, ¿de acuerdo? Cambia la cara. ¡Hoy se presenta Queen y cerrará el festival a lo grande! Así qué… aún la burbuja no se ha roto… ¿recuerdas?

 

-Tienes razón- la característica voz grave del rapero fue escuchada por el rubio.

-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

 

Casi siempre Ji Yong acertaba en las cosas y esta era una de ellas. Queen había cerrado con broche de oro uno de los mejores espectáculos que había producido Coachella a lo largo de su historia y ambos raperos habían sido testigos de ello. El escenario principal había estado abarrotado completamente de gente, tanto así que ni siquiera un alfiler podía haber entrado. Eso hablaba de lo tan esperado que había sido en concierto. Entre apretones y empujones; Ji Yong y Seung se había colocado en una buena parte de la zona VIP. Pudieron disfrutar el concierto con suma tranquilidad. Siendo más de la una de la mañana ambos salían del recinto de una manera ordenada y con sendas sonrisas en sus rostros. Quizá… Seung un poco más y no era por el concierto, si no porque Seung estaba tomado. Ji Yong no había podido controlarlo. La cerveza se había vendido como cancha durante todo el concierto y Seung, en un momento de descuido del rubio, había comprado una. Y así empezó a comprar varias. Ji Yong no podía comprar todas las malditas cervezas del lugar para que el mayor no siguiese tomando más. Así que con frustración se había dedicado a minimizar los riesgos de que Seung estuviese completamente ebrio.

 

Lo llevaba abrazado a él, Seung se había pegado como chicle a Ji Yong. Lo que no le extrañaba, siempre era cariñoso cuando estaba tomado. El rubio a duras penas lo arrastraba hacia las afueras del local. En su camino vio a la gente comentando el concierto con entusiasmo, otros comprando souvenirs o polos oficiales en los stands del festival. Ji Yong sonrió ante ello. El camino hacia la casa de acampar iba a ser un poco largo, pero no le importaba. Muy aparte del hecho de que sentía feliz, le preocupaba Seung… se supone que el mayor no había debido tomar y ahora se encontraba así. Pese a que era cariñoso pegándose a él, podía percibir su tono de tristeza en su voz mientras murmuraba cosas que no eran entendibles para él.

 

-¡Ji Yong!-Seung alzó la voz.

 

-Shh… hyung. Baja la voz. Aquí estoy a tu lado, no me dejes sordo- el rubio rió- Pesas mucho, ¿sabes? Me debes una grande.

 

-Eishh… solo te quería decir que la burbuja se rompió-Seung habló melancólicamente- Lo que significa, que puedo ser el de antes. Eso es genial, ¿no?

 

-¡Ohh… no empieces!

 

-¡Tú!-el pelinegro señaló con el dedo al rubio- Tienes que tomar responsabilidad de lo mal que me siento ahora- Seung Hyun empezó a sollozar- Dijiste…. Dijis…te… Que me sostendrías.

 

-Lo haré. No te dejaré que caigas- Ji Yong tragó su saliva en un intento en no empezar a sentirse mal a causa del mayor.

 

-¡Mentira! ¿Sabes por qué?-Seung rió amargamente- ¡¡Porque ya estoy hundido!!

 

-Sabía que no era buena idea que reprimieras tus sentimientos- murmuró Ji Yong apenado entre dientes.

 

-No puedo permitirme se feliz- el corazón del rubio se estrujó al escuchar aquellas palabras

 

-¡¿Por qué dices eso?!- le reprochó.

-No lo merezco…

 

-No hables así. Tú si te mereces.

 

-Hay cosas que no sabes…- Seung rió amargamente. Luego miró a la noche- El cielo anda tranquilo… Hmm… -Seung se removió un poco más para estar cerca del rubio- ¿Cuánto falta?

 

-Poco.

 

-¡Ohh… quieroshh… cerveza!

 

-Creo que tomaste suficiente Seung. Estábamos hablando de otro tema- habló en tono molesto el rubio.

 

-Necesito la cerveza.

 

-¿Para qué la necesitas?

 

-Para sentirme bien. ¿Eres tonto o qué?- Seung de manera seca y estrepitosa.

 

-No lo necesitas.

 

-¡Sí!- Seung hizo un mohín- Así que vamos. ¿Sí? ¿Sí? ¿Sí?

 

Ji Yong estuvo escuchando todo el resto del camino a Seung Hyun tratando de convencerlo. Algunas palabras de Seung le habían hecho daño, pero no podía quejarse… ¿no? Había decidido amarlo y hacer de cuenta que no le lastimaba porque valía la pena. Se aferraba mucho a aquella sonrisa que había visto hace tres días. Incluso tuvo que soportar que el mayor llorase algunas veces durante todo el camino. Le partía el alma verlo así. Al menos se sentía aliviado que ya había llegado a su parte del campamento. Solo lo pondría en su sleeping y lo haría dormir. Olvidaría esas palabras de aquella noche.

 

-¿Ji Yong?-preguntó Greg- ¿Necesitas ayuda?

 

-No, Greg. Gracias… solo que hoy se puso muy feliz.

 

-Me imagino. Hoy fue una gran noche- Ji Yong al escuchar ello, ya no estaba tan seguro. Si nada hubiese sucedido después del concierto, sin duda alguna hubiese estado de acuerdo.

 

-Es una bonita noche- respondió. Optó por salirse de la tangente. Además no mentía. Técnicamente decía la verdad. El panorama nocturno era bello.

-No te interrumpo más. Lleva a Seung a descansar. Por cierto con los demás chicos, estábamos pensando invitarlos a desayunar a modo de despedida, ¿quieren?

 

-Hmm…- Seung se removió.

 

-Me parece perfecto- Ji Yong volvió acomodar al mayor- Si me disculpas… me retiro. Pesa un poco este muchacho- Greg rió- Buenas noches.

 

-Buenas noches, Ji Yong.

 

Seung seguía removiéndose, tenía los ojos cerrados… parecía que se había quedado dormido. No había mentido sus hombros se sentían cansados de sostenerlo. Cuidadosamente lo tiró sobre su sleeping, prendió la lámpara que había comprado en el mini-market hace unos días y procedió a quitarle las sandalias.

 

-Aigoo… Seung… ¿qué haré contigo?- Ji Yong suspiró tristemente.

 

-Déjalo, Ji. Lo puedo hacer solo- la voz del pelinegro se escuchó en la habitación. Se le levantó a duras penas- No siempre tienes que estar detrás mí.

 

-¿Estás despierto?- Ji Yong habló incrédulo.

 

-Se me quitó el sueño- inexplicablemente una lágrima rodó por la mejilla del mayor- Supongo que esto tenía que pasar.

 

-No sé la razón, pero siento que me hablas en códigos. Dijiste que hay cosas que no sé… ¿de qué hablas? No mejor dicho… ¿qué hay detrás de todo lo que aparentas? Recuerdo que en el ring me hablaste de que tenías tú alma destrozada. Sé que es por ella… ¿por qué te veo tan destruido? ¿Fue malo haberte traído hasta acá?

 

-Solo has visto el reflejo de mi depresión, Ji- Seung volvió a reír con acidez. Aún apestaba a alcohol. Después de muchos intentos sacó una cajetilla de cigarrillos y encendió uno. Empezó a fumar.

 

-Pensaba que ya no fumabas-en ese momento Seung se había vuelto un enigma para Ji Yong, le había hecho tantas preguntas y no habían sido respondidas. Probablemente quizá nunca tendrían respuesta- Creo que no es oportuno tener esta conversación. Duerme Seung.

 

-¿Qué no es oportuno? Hay algunas cosas que no suceden en el momento correcto de esta vida. Créeme aprendí la lección- Seung empezó a derramar lágrimas mientras cantaba una canción sin sentido.

 

-OK. Suficiente-Ignorar el dolor que sentía en ese momento, era difícil… Ji Yong había dicho que lo iba soportar….pero nada es fácil como parece- Estoy seguro que el concierto que vas hacer no será apreciado por nuestros vecinos-hizo un intento de bromear, aunque no estuviera de ánimos para ello- Empezarás por apagar ese cigarrillo.

 

-¡No!- Seung lo esquivó a Ji Yong parecía un niño encaprichado. Se paró de la enorme carpa. El rubio había comprado de esas carpas en forma de tienda de campaña dónde cabían como diez personas. Estaba dividida en dos zonas. Ellos se encontraban en la trasera- ¡No quiero! Hmm...- hizo un puchero.

 

-Vamos… Seung. Se supone que ya no fumas. Lo sé porque…- el rubio calló lo que iba a decir- Mejor dame la cajetilla- cautelosamente avanzaba hacia el mayor. Le iba a ser fácil atraparlo temprano, llevaba la ventaja… ya que Seung estaba tomado.

 

-Continúa lo que ibas a decir, Ji. Puedes hacer fue a causa… de ella. ¡Ahora puedo hacer lo que quiera!- Seung perdió el equilibrio y cayó al suelo. Esto fue aprovechado por el rubio, rápidamente le quitó la cajetilla y lo metió a uno de los bolsillos de su bermuda- Upss… me caí. ¡Duele!

 

-Eso te pasa por ser tan babbo. Sé buen chico y entra a la bolsa de dormir. Necesitas descansar- Ji Yong le regañó dulcemente, aunque se sentía mal.

 

-¿Tú me quieres Ji?- Seung hablaba medio somnoliento.

 

-Claro que sí, eres mi mejor amigo. ¿A qué viene esa pregunta?- el rubio le respondió sabiendo que no lo decía con intenciones románticas. Aunque sintiera que el corazón se le saliera del pecho.

 

-¿Entonces me prometes algo?- Seung hablaba como niño.

 

-¡Por supuesto, Seung!

 

-Nunca me vas a dejar, ¿verdad? Nunca… nunca… nunca…. Estarás para siempre, ¿cierto? ¡No te irás a así de la nada!- ¡Joder! ¿Por qué le hablaba así? Ji Yong tenía la certeza que nunca lo iba a dejar… pero el para siempre tenía una significado diferente podría prometerlo,  pero no estaba en su mano si iba a poder a cumplir esa promesa. Sabía la razón por la que Seung le decía eso, quería asegurarse que no iba a morir y dejarle… como lo hizo Seo Hwa… ¡Maldita sea! ¿Y ahora qué respondía?

 

-No te voy a dejar caer y siempre contarás con mi amistad- Ji Yong encontró una respuesta adecuada a la pregunta del mayor.

 

-Eres buen hombre y mi mejor amigo. Me alegra haberte conocido Ji.

-A mi también… pero creo que te estás poniendo sentimental- Ji Yong rió. Lo hizo para sacarse el peso que sentía- Así que a dormir… ¿vale?

 

 Seung se arrastró hacia su sleeping de una manera graciosa y se metió a él. Por primera vez en la madrugada le hizo caso al rubio. Ji Yong hizo lo mismo y se metió en el suyo. Apagó la pequeña lámpara que iluminaba esa zona de la carpa.

 

-¿Ji?

 

-¿Qué Seung? Duerme-Ji Yong estaba cansado y quería descansar.

 

-¿Crees en fantasmas?

 

-No. Es tan raro que me preguntes esto.

 

-No hablo de ese tipo de fantasmas-la voz de Seung cada vez se hacía más baja y triste. Ji Yong tuvo que agudizar su oído- Siento que hay un fantasma en mi interior, un fantasma de lo que fui… es como si fuera el reflejo de mi alma triste. He fumado a veces…en estos meses… a veces no he podido dormir, los recuerdos me persiguen Ji. La soledad absoluta que siento… me está empezando a cansar, pero no puedo quejarme… ¿sabes? En medio de todo esto no puedo evitar seguir pensando en ella. No me atrevo a olvidarla… tengo miedo y ella no merece que la olvide.  Es por ello que es lo mejor no tratar de ser feliz, merezco eso.

 

-¡¿Puede dejar hablar de ello?! En serio Seung, esto me enoja. Sí mereces ser feliz. Descifrarte hoy ha sido toda una hazaña. No quiero discutir contigo- Ji Yong se sentía herido y enojado.

 

-¿Quieres saber un secreto?- Seung ignoró lo que había dicho el rubio. No escuchó respuesta de él por lo que continuó hablando- Ella… ella… estaba embarazada…

 

 Seung empezó a llorar al decir esas palabras. Ji Yong abrió los ojos abruptamente… ¿había escuchado bien? ¡Mierda! ¡Sabía que algo no estaba bien…! Enseguida lágrimas se deslizaban por sus mejillas… mierda… mierda… las cosas era más serias de las que pensaba y tenía el presentimiento que eso no era lo único que había por saber. ¿Qué era lo que realmente había detrás de Seung? Detrás de esas lágrimas, de esa fragilidad que le demostraba, detrás de lo más profundo de su alma. Al parecer... a él le faltaba mucho por saber.

 

 

Notas finales:

¿Le gustó? Espero que sí. Escribí esto de todo corazón. Por cierto esta semana estaré a full con los exámenes, espero llegar a tiempo a actualizar. Me gustaría saber que es lo que opinan de este capítulo, no sé si me pasé de la raya XD... así que las veo en los reviews. ¡Muchas gracias a las que lo hcieron la vez pasada! Y a las personas que siguen mi fic. Eso es todo. Hasta el próximo capítulo. Piensen en la letra D....

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).