Nico se dirigió a la cabaña de Poseidón y vio a Tyson salir de allí, se notaba muy mal y se fue muy cabizbajo, lo cual alivió a Nico pues ya no quería hablar con nadie más que no fuera Percy (había hablado demasiado con Quirón) tocó la puerta de la gran cabaña pero nadie le abrió así que solo entró y se dirigió a la habitación de Percy, tocó suavemente la puerta y escuchó:
-No quiero ver a nadie-
Nico no fue muy obediente con lo que escuchó y como no podía entrar con la puerta asegurada, realizó un corto viaje sombra hasta dentro de la habitación de Percy, este se encontraba sentado en un silla solitaria en medio de la habitación, todo estaba en orden, no había basuras, ni cosas tiradas, ni papeles, nada fuera de su sitio (lo cual es un grave síntoma en un chico).
-Debí saber que esa advertencia no serviría para ti Nico-
-Acabo de llegar al campamento-
-¿Te enteraste de lo que pasó?-
-Sí, Quirón me conto todo-
-¿Es irónico verdad?, enfrentamos al titán más fuerte, sobrevivimos juntos el Tártaro, logramos enfrentar a la diosa tierra y luego muere simplemente así, como una humana normal-
-Algunas cosas solo pasan-
-Como tú viniendo hasta aquí, ¿acaso vienes a consolarme?,…. Jajaja…, la verdad ya no sé ni lo que digo-
-Si te dijera que vine justo por esa razón, ¿Qué harías?-
-Vamos Nico, tú no eres así-
-Tienes razón, la verdad es que solo vine por curiosidad, ya me voy-
-Espera-Percy sujetó la muñeca de Nico antes de que este pudiera ir hasta la puerta de la habitación.
-¿Podrías escucharme antes de irte?-
-No tengo nada más que hacer,… si quieres conversar, adelante, te escucho-
-Esto es algo que no le he contado a nadie; creo que realmente quiero decirle a alguien… Annabeth y yo no estábamos en muy buenos términos antes de que ella fuera en ese viaje-
-Se habían peleado- Nico no estaba preguntando, por alguna razón podía saber parte de lo que pasó
-No habíamos peleado exactamente, la verdad es que al regresar del enfrentamiento con Gaea volvió a centrarse en la reconstrucción del Olimpo y empezó a estudiar los últimos datos de la computadora de Dédalo que pudo salvar-
-Te sentiste solo-
-Sí, por eso cuando me pidió para viajar con ella en avión me molesté; ella sabía que odio viajar con aviones, también sirvió como una venganza; quería que se sintiera un poco como me sentí yo durante esos días… Y luego pasó el accidente-
-Fue lo justo…-Murmuro Nico
-¿Dijiste algo?-
-No, hablaba conmigo mismo; continúa-
-¿Qué piensas al respecto?-
-Tú no quieres mi opinión, además solo me dijiste que escuchara-
-Tienes razón, desde que me entere de la noticia he estado en un caos, me siento triste por lo que pasó…-
-Es normal, después de todo era tu novia-
-Lo sé, la verdad es que cuando me dieron la noticia sentí como si una parte de mi corazón hubiera muerto junto con ella, quería gritar, quería culpar a alguien, quería llorar, pero por alguna razón las lágrimas no fluyen, no es que no este triste, simplemente no puedo llorar-
-Pero lo que paso te dejo muy deprimido-
-Sí-
-Tú estás solo ahora, sientes que tienes que ser un líder mejor para el campamento mestizo, debes demostrar fuerza y coraje aun en esta situación difícil-
-Sí-
-Percy, ¿las lágrimas no fluyen, o solo eres tú el que no las deja salir?-
-No lo sé-
-Percy, pese a todo aún eres solo un joven de 17 años, tu novia acaba de morir, tú la amabas-
-Sí, aunque estaba enojado últimamente con ella, aun así la amaba-
-Ella ya no está Percy, ya no la veras más, tan solo deja salir tus emociones y llora, así te sentirás un poco mejor-
-Pero, no puedo…- en ese momento Percy vio a Nico mirándolo fijamente a los ojos, por alguna razón se sentía tranquilo al conversar así con Nico y luego de todo lo que le dijo simplemente sintió que las lágrimas venían a él y lloró, lloró desconsoladamente; Nico lo vio cuando agachó la mirada, sintió un gran deseo de consolarlo, el verlo sufrir así le rompió el corazón, toda esa situación parecía la oportunidad perfecta para él, pero no quería…, no, él no podía aprovechar esa oportunidad, al menos eso le decía su cerebro, sin embargo su corazón gritaba porque lo consolara. Viéndolo llorar allí, Nico estaba en una lucha contra su mente y su corazón, finalmente su deseo de consolarlo fue más fuerte y se acercó más a Percy y le brindó su hombro para que llorara. Percy lo acepto y lloró un largo rato, cuando se calmó un poco de repente sintió sueño, al parecer no había dormido en varios días, Nico se dio cuenta de lo que pasaba y lo ayudó a dirigirse a su camarote; se quedó allí hasta que Percy se quedó dormido y luego salió de la cabaña y se fue del campamento mestizo.