TU INFAME ENGAÑO
“Perdonemos por el pasado Duo”
W…wufei - aquella mirada llena de impresión como si de un fantasma se tratara le hizo apresurarse a cerrar la puerta-
Duo… por favor tenemos que hablar – el brazo del chino impidió que aquella puerta terminara por cerrarse entrando sin si quiera pedirlo-
No tenemos nada de qué hablar –
Duo… por favor –
De que quieres hablar… de Zech… del cómo te burlaste, de cómo se burlaron de mi?- las lágrimas del trenzando no se hicieron esperar- no quiero escuchar nada de lo que tengas que decir.. vete
Duo…- nuevamente repitió el nombre del trenzando antes de acercarse y limpiar aquellas lagrimas- perdóname… fui un completo idiota, yo te amo
Por..que?- sus ojos amatistas veían con decepción- porque ahora… ahora que tengo algo, que estoy estable – la mirada confusa de Wufei le hizo seguir hablando- cuando estaba devastado y completamente solo con tantas dudas sobre mi cabeza, esperando que todo fuese una mala broma…. Ahí te necesitaba, yo te ama… te di todo de mi Wufei! Y te burlaste de mi
Maldición duo! Yo no la eh pasado mejor que tu, tenía miedo- su desesperación le hizo alejarse del trenzando- no se lo que paso… no se lo que vi en el, te hice daño lo se, pero te necesito a mi lado, juro no… prometo que esto no va a pasar de nuevo
Tan seguro estas…? Creíste que te esperaría toda la vida? – la sola presencia del pelinegro le causaba un revuelo de sentimientos que escapaban de lo más recóndito de su ser- el mundo no gira a tu alrededor…y yo ya no se que es lo que siento
No te creo… lo nuestro fue especial…. No es algo que se olvide de la nada – las manos de Wufei tomaron las mejillas del trenzando de forma suave-
Antes de que duo pudiera decir algo, los labios de Wufei atacaron los suyos, aquel beso que de ser suave se volvió a uno más profundo, nuevamente poseía aquellos dulces labios que no debieron alejarse y que le correspondían de la misma forma e intensidad hasta que el aire le hizo falta separándose de el
Aquellas emociones que le gritaba el que aun ama al chino salieron a flote, estaba loco, todo aquello por lo que había escapado se derrumbaba justo frente a el
Porque…- las pálidas manos del trenzando cubrieron sus labios llenos de dudas, acompañados de la vergüenza- Wufei…
Dame una oportunidad… duo…, solo una déjame demostrarte que puedo cambiar, de ser el hombre que conociste-
Estúpidamente duo termino por aceptar sin si quiera pensar en lo que haría una vez que el aceptara aquello, y sin más, el “si” definitivo junto con un beso mas fueron los únicos testigos en aquel apartamento en un día nevado
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Era un nuevo día, las semanas habían pasado de forma rápida como agua entre sus dedos, la esperanza de Heero a que el trenzando regresara al trabajo era casi nula, sus manos se encontraban apoyadas a un empañado cristal viendo aquella ciudad que iniciaba su día a contra de aquel lluvioso amanecer, de forma inconsciente sus labios susurraron el nombre del trenzado
Traiz por su parte estaba algo cansando de aquella actitud deprimente de su hermano “ Ese chico si que le dio durísimo” fue su primer pensamiento antes de seguir mordiendo la goma de aquel lápiz ante el estrés que el mismo Heero le causaba
Traiz… deja de tragarte la goma del lápiz con horribles dientes – fue lo primero antes de arrebatarle aquel instrumento ante estrés-
Ah… que llorón,.. pero bue… hey! –chasqueo los dedos como si la brillante idea curara la enfermedad más extraña del mundo- porque no vas a la casa de Duo para corroborar que todo este bien
Que…? – la mirada cobalto se quedó fija en su hermano-
Eres sordo o que… dije PORQUE NO VAS A LA CASA DE DUO PARA VER EL PORQUE NO SE AH PRESENTADO A TRABAJAR –
Aquel derrotado ser, le causo tanta histeria que casi empieza a rascarse y arrancase los pelos
Pero ni siquiera se donde vive- dijo el ojicobalto de forma convencida-
Vive a tres cuadras de aquí, recuerdas aquella casita donde solíamos ir a tirar huevos en fechas festivas…¿?- Heero asintió- pues cerca de ahí, es la estúpida casa azul cielo, creo es la mas…a..jaj..jaja – algo nervioso al ver la mirada matadora de su hermano con su ceño fruncido provocando esa alerta de peligro-
Traiz… como demonios sabes donde vive!- el grito de Heero le hizo tapar su oídos-
El cachetadon con la carpeta amarilla sobre las manos de Traiz sobre la mejilla del castaño le hicieron ver lo más obvio del mundo
Pues todo está aquí en su currículo- señalo la carpeta amarilla-
Idiota – tomo aquella carpeta, su chaqueta saliendo de la oficina-
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En aquella amplia cama el trenzando y un pelinegro se encontraban acostados cubriendo sus cuerpos desnudos con aquellas sábanas blancas, duo se encontraba recargado sobre el pecho del pelinegro quien dormía de forma tan satisfecha, aquella mirada amatista mostraba confusión pero…porque? A un el chino le hacía sentir lo más bello que pudiera sentir, había decidido ya no ir a trabajar, quería vivir cada momento con el pelinegro, recuperar los días, quizá buscando que todo regresara a como era y como debió ser, una pequeña sonrisa sobre sus labios se formó al pensar en que Quatre lo mataría cuando mimo se lo dijera, aquella sonrisa se borraba con la culpa que lo invadía al pensar en aquel ojicobalto… porque tenía que pensar precisamente en Heero, empezaba a gustarle..? y si era eso…que era lo que sentía por Wufei? Aquellas dudas sobre sus sentimientos tan similares le hacía punzar su cabeza hasta que la mano del chino acaricio su cabello y le hizo cerrar sus ojos
Ya es tarde… deberíamos levantarnos – se movió un poco de forma cuidadosa-
Un poquito mas.. si? – se cubrió con aquellas sabanas al sentir un poco de frio-
Anda duo, a demás debo ir a trabajar… a un tengo un par de negocios que cerrar-
El rostro del trenzando cambio, sus ojos se vieron llenos de tristeza y Wufei lo noto acercándose a el depositando un suave y tierno beso en sus labios- vas a acompañarme verdad? Vas a despedirme como solías hacerlo –dijo aquello mirándole con una sonrisa al ver el cambio tan radical de Duo-
El tiempo paso de forma rápida, ambos desayunaban de forma tranquila, Duo dejo los platos en el lavabo, acomodo la corbata del Wufei y salieron de forma tranquila tomados de las manos cerrando la puerta
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Heero caminaba con paso apresurado aquel enorme parque, debía hablar con el trenzando, hacerle entrar en razón, quizá… explicarle y declararle su amor como un idiota que empezaba a enamorarse nuevamente, aquellos pasos empezaron a disminuir lo suficiente como para saber que aquella habría sido la idea más estúpida en su equilibrada vida, su mirada fría se clavó en aquellos que se besaban de forma tan amorosa que casi vomita por aquella mentira tan irreal que la imagen daba a percibir, la sonrisa de Duo cuando siendo obsequiada a otro joven, los copos de nieve en aquel nevado mes le hicieron nublar su vista, su corazón agitado por aquella caminata le emitió una pequeña punzada sin saber si era eso, un paro cardiaco, o el sentimiento de verse en una horrorosa situación
La voz del trenzando le hiso salir de aquellos tormentosos pensamientos
H..Hero..-
Sorpresa?... lo era, no esperaba encontrarse tan pronto frente y justo a el, viendo aquella mirada tan fría como el clima escaneándoles, de forma neutral, el trenzando se acercó hacia el estoico ser sacudiendo la nieve sobre sus hombros
Que haces aquí…- por un segundo aquellas miradas se encontraron, haciendo reaccionar al moreno-
Porque ya no regresaste…-ignoro por completo al acompañante del trenzado-
Bueno lo vi innecesario y –
El carraspeo de la garganta del chino, le hizo darse cuenta de que se había olvidado del el, Wufei no pudo ignorar aquellos celos y la molestia de ver tan cerca a su Duo con aquel hombre
Wufei… soy Wufei chan – se presentó con aquel porte serio y seguro de lo que había obtenido-
Heero giro su vista hacia la amatista quien no pudo sostenerla, el sabia sobre el nombre, sobre la historia del trenzando, la sorpresa en su rostro y la decepción fueron notables
Heero Yuy por lo que veo Ex jefe de Duo y amigo –
Wufei abrazo de forma repentina al trenzando con una sonrisa como de quien se gana el premio mayor restregándolo sobre el chico
Lástima Duo no necesita de nadie más que ami-
Alguien que deja a al persona que ama y vuelve arrastrándose no es confiable- aseguro viendo el ceño fruncido del pelinegro- no imagino cuanto vas a tardar en volver a engañarlo, las alimañas como tu no cambian
El chino no soporto más y se lanzó a los golpes a un desprevenido ojicobalto quien no se quedó atrás respondiendo aquella agresión
Basta! Que mierda creen que hacen!! – era la primera vez que Wufei veía a Duo tan molesto separándolo de aquel idiota- Heero porque estás haciendo esto…
Porque soy tu amigo! Y te protejo de esta escoria-
No necesito que me protejas, amo a Wufei y voy a estar con el-
Limpio la sangre que broto sobre su labio roto, una sonrisa hipócrita se formuló sobre estos- no pensé que tu serias tan estúpidamente egoísta, pensé que eras distinto… tan fácil de…- aquella cachetada por parte del trenzando le hizo callar-
No quiero verte , vete… no lo entenderías… tu no eres un amigo –
Bien! Me largo! Fue una lástima y pérdida de tiempo, lo que teníamos era especial y lo sabes – ignoro por completo el cómo sostenía los brazos de Wufei-
El trenzando lo vio marcharse, su voz no salía sobre sus labios, quería pedirle que no se fuera, quería gritar su nombre, los brazos de wufei nuevamente le rodearon
Ese sujeto ya no te molestara mas-
El silencio del trenzando le irrito un poco, pero no podía darse por vencido, se notaba en aquella mirada amatista el interés sobre aquel sujeto, y termino por arrastrarlo junto con el
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El hermano mayor revisaba alguno de los documentos del dia, aquella mesaba se ahogaba de trabajo, el portazo y la presencia de su hermano le hicieron girar su vista
Wo wo wou que rayos te paso – ignoro el semblante frio y estoico del castaño-
Lo perdí –
Quien te atropello? –
Su expareja y el regresaron-Traiz se encogió de hombros-
Bueno te dije, fue tu culpa, nunca le dijiste de forma sincera lo que sentías por él-acomodo uno de los documentos sobre un cajón- lo más probable es que solo este confundido, solo piénsalo, está solo en una ciudad desconocida, no tiene nadie, agrégale que el fue su primer amor… a un que dudo sobre la fidelidad del sujeto – giro la silla para quedar frente a su hermano- los hombres como el no cambian
Me dijo que ya no quiere verme mas-
Heero… Heero… Heero… no comprendes para nada, el rgresara… eres la única persona confiable que conoce y seguramente volverá-
De donde sacas tanto drama-
Uh… de revistas y novelas súper dramáticas- se levantó de la silla dándole pequeñas palmaditas sobre el hombro de su hermano-
Heero se mantuvo en silencio, estaba dolido y seguramente solo el tiempo seria su único aliado, debía intentar olvidarse del trenzando y con esa idea, el tiempo se fue volando tan rápido
Cinco largos meses en los que se había encerrado en trabajo ignorando de alguna forma aquellos sentimientos que le molestaban, el trenzando se había metido tanto en su mente y quizá hasta cierto resentimiento, si ya era una persona araña y fría, se había vuelto insoportable