La luz del sol atraviesa las delgadas cortinas de su habitación. Hace ya dos semanas que no he regresado a casa pero a mis padres no les molesta, siempre han pensado que Ji es la mejor influencia para mí, es un chico trabajador, inteligente y sumamente responsable, no se parece nada a mi que soy flojo, dependiente y muy infantil. Anoche las cosas se pusieron muy interesantes pues al parecer el chico peliazul de nuevo hizo enfadar a mi querido Ji por lo que desquito su coraje llevándome al cielo de tanto placer, lo único malo es que mi cuerpo no puede moverse, creo que estoy un poco lastimado pero no importa cada moretón es una prueba de que nos entregamos el uno al otro sin restricciones.
Me levanto y me dirijo a la pequeña cocina, nunca en mi vida tuve la mínima habilidad culinaria pero si quiero conquistar el corazón del hombre al que amo tengo que esforzarme. He practicado un par de recetas sencillas para un almuerzo decente, preparo un par de huevos duros y un poco de arroz frito para él, una vez listo me voy a dar una larga ducha, después de todo aunque me apresure de más me será imposible llegar a tiempo al instituto, tal vez llegue a la ultima clase.
****En el instituto Yaza******
Los pasillos y casi toda la extensión del instituto esta vacía, suele ser así en horas de clase, de echo si algún profesor me ve merodeando por aquí seguramente me traerá problemas, después de todo llegue mucho antes de lo que esperaba pero no tengo muchas intenciones de entrar a ninguna de las clases. Así como he llegado me dirijo hacia el edificio en que estudia Ji, las ansias por verle me comienzan a devorar, eso y que quiero contemplar la cara de ese tipo cuando me vea llegar directo a los brazos de mi amado.
Aun esta en clases por lo que decido esperarlo sentado en el pasillo, quiero sorprenderlo. Suena la campaña que avisa el cambio de clases es mi señal y me pongo de pie, con la pose más angelical y dulce que tengo me planto al frente de su salón, se que soy un chico, muy dulce, todo el mundo me lo dice ya sea de frente o lo comentan a mis espaldas tengo un encanto angelical, que sabré aprovechar.
- ¡¡JIII!! - Grito tan solo verlo salir. Levanta su mirada sorprendida y un poco angustiada, tal vez aún cree que no se nada del peliazul ese.
- ¡Seung! ¿Pero que haces aquí?- me pregunta al tiempo que me toma del hombro para apartarme del camino.
- Te extrañaba - le digo formando un puchero con mis labios - no te despediste de mi esta mañana -
- ¿Qué cosas dices? - me reprende enfadado, no se a que se deba su enfado pero me fascina - ¿Y que paso con tus clases? No andes vagando…-
- No estoy vagando… bueno si solo un poco. Pero de verdad quería verte …- se que tal vez exagero mi actuación pero tengo que lograr que sienta ternura de mi debilidad - además … -
- ¡Que lindo Ji! Tu hermanito ha venido a dejarte tu almuerzo - me interrumpe esa profunda y raposa voz. Levanto la mirada que hasta hace unos momentos concentraba en el suelo y me encuentro con un par de ojos celestes realmente impresionantes- Este chico es muy tierno…- Dice al tiempo que me dedica una cálida sonrisa. Una sonrisa hermosa de verdad.
- ¡¡Hyun!! - Ji voltea realmente asustado por la presencia de este chico. No puedo ocultar mi enfado en especial por que este tipo tiene su mano recargada en el hombro de mi querido GD - Etto… es… el no es .. Mi … -
- No soy su hermanito …- completo la frase que se atora en los labios de mi amor - Soy su…. -
- Vaya que pena… - me vuelve a interrumpir y mientras habla se acerca sigilosamente al rostro de Ji. Con una de sus manos toma su mentón y lo gira para darle un discreto beso en la comisura de sus labio, lo que me hace hervir la sangre - … entonces ¿que relación tienes con MI NOVIO?- noto como sus ojos se afilan amenazadoramente.
Nunca creí escuchar eso de sus labios tan repentinamente. "MI NOVIO" sus palabras rebotan en mi interior y lo único que puedo hacer es mirar a GD que se limita a agachar la mirada como un pequeño conejo acorralado, aquella expresión me resulta totalmente desconocida. Mi querido Ji jamás se había mostrado así ante mí.
- Yo … - no se que decir. No esperaba que este chico actuara así - … me tengo que ir. Toma dejaste esto en la cocina - miento y le entrego el almuerzo que le prepare, me siento extrañamente derrotado y no se que hacer. Comienzo a caminar hacia la salida del edificio y me doy cuenta de que nadie me sigue, Ji no esta aquí….
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Aquel chico sin duda es él que siempre viene a buscarlo y que he escuchado de boca de otros compañeros que es algo más que un amigo de Ji Yong. Tal vez fui un poco rudo con él, después de todo la cosa no va contra él ni contra nadie más que GD, pero si quiero ganarme su corazón debo aferrarme a él y defenderlo como si realmente me importará. Es un poco extraño pero la sensación de sentir mío al pequeño pelirosa me hizo sentir magnifico.
- Nos veremos mañana Darling - le digo al tiempo que beso sus labios temblorosos. Creo que le afecto más de la cuenta lo que le dije a aquel chiquillo - ¿Sucede algo malo?-
Levanta su mirada un tanto preocupada, no dice nada pero sus ojos no me mienten esta realmente perturbado. Sonrió de lado de entera satisfacción al verlo así, parece que las cosas marchan como lo esperaba. Sin dejar de mirarme mueve su cabeza en signo de negación.
- Bien. Te quiero Ji - digo como la cereza en el pastel, sus ojos se dilatan y deja caer su mirada al suelo. Creo que este día podre descansar por la tarde ya que de seguro no me buscará hasta mañana.
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Estoy a punto de llegar a mi apartamento y en cierta forma no quiero entrar. No quiero llegar y verlo ahí, extrañamente me afecto mucho lo que Hyun dijo en la tarde. Fue extraño ya que realmente no somos pareja o a menos eso creí, jamás nos habíamos referido el uno al otro de esa manera. Además Ri no tenia por que saberlo y esa fue la forma menos indicada de hacérselo saber.
Anoche estuve con él como siempre, lo bese, recorrí cada parte de su cuerpo y lo hice mío con tanta pasión como siempre; y hoy se ha enterado que tengo una relación con alguien más. Me preocupa mucho lo que pueda pensar, el siempre fue consiente de que lo que había entre nosotros no era más que una relación carnal para satisfacer los deseos de ambos. No debe preocuparme entonces lo que piense ya que se que él lo entiende perfectamente, él me entiende mejor que nadie pues es el único amigo que tengo ¡Así es! Es mi amigo y nada más.
A pesar de que sé esto tengo un poco de nerviosismo de llegar y verle ahí, no puedo sacarme de la cabeza la expresión de sufrimiento que en ese momento tenia su pequeño rostro.
Abro la puerta con precaución. Todas las luces están apagadas por lo que sé que no esta, dejo escapar un profundo suspiro y entro dejando todas las cosas en el piso como es mi costumbre, ya tendré tiempo de recogerlas mañana. En este momento lo único que quiero es recostarme en la cama y no pensar en nada. Todo se va tiñendo lentamente de negro, me quedo profundamente dormido.
Entre sueños tal vez percibo un ligero aroma a fresas, conozco muy bien ese perfume pues es él que yo le di en su ultimo cumpleaños. Abro los ojos lentamente y me doy cuenta de que entre mis brazos se encuentra el pequeño cuerpo de Ri acorrucado completamente embonando perfectamente en la cuna que forma mi cuerpo. No quiero despertarlo. No quiero que habrá sus ojos y me vea con aquella deprimente expresión en su rostro. No lo quiero ver triste.
El reloj digital de mi buro marca las 3:54 A.M. No se que tiempo lleva aquí a mi lado. Entierro mi rostro en su espesa cabellera y me dejo llenar los pulmones con aquella deliciosa fragancia, inmediatamente mi corazón comienza a acelerar el ritmo del palpitar y mi cuerpo empieza a hormiguearme por todas partes. Hacia mucho, realmente muchísimo tiempo que no tenia a Ri así entre mis brazos. No se en que momento fue que me comencé a sentir de esta manera con el pequeño Seunghyun.
Creo que después de tenerlo de todas las maneras posibles, físicas y espirituales, me acostumbre tanto a él que nunca le puse atención a lo bien que conseguía hacerme sentir. Me gustaría permanecer de esta manera por mucho más tiempo, tenerlo así estático, perfecto y solamente mío por más tiempo, sin tener que responder a nada ni a nadie. Hundiéndome en estos pensamientos comienzo a perder la conciencia y justo antes de quedarme dormido de nuevo, una imagen me arranca el sueño completamente. El rostro felino de Hyun acechándome con aquellos exóticos ojos celestes a juego con su tupida cabellera. Después de esto paso lo que me resta de noche en vela.
Después de varias horas el pequeño Ri comienza a moverse entre mis brazos.
- Amm… Buenos días Ji - dice con un ronroneo casi inaudible.
- Buenos días Ri - respondo y deposito un breve beso en su cabello. No tengo ánimos de decir nada más y parece que él tampoco. Permanecemos en esa posición por un buen rato más. Hasta que mi cuerpo se comienza a adormecer - Creo que….- pero me interrumpe.
- Voy a preparar un rico desayuno para ti - se pone de pie y por primera vez en mucho tiempo me sonrojo de ver su cuerpo semidesnudo alumbrado por la luz de los pocos rayos de sol que consiguen colarse en la ventana.
- ¿Qué sucede Ji? - me dice al darse cuenta de mi expresión avergonzada.
Desayunamos en silencio. Ninguno de los dos tenemos gran animo de hablar. Salimos de casa y caminamos juntos hasta el Yaza aún en completo silencio. En la entrada en aquel lugar en que se dividen los edificios de la preparatoria con la universidad se gira hacía mí y me da un pequeño beso en la mejilla, consiguiendo alterar mi corazón. No le quito la mirada hasta que se pierde entre todos los demás alumnos que de igual manera van llegando. Una extraña sensación que estruja mi corazón me hace querer ir tras de él para devolverle el beso en sus pequeños labios.
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Parece que las cosas resultaron mejor de lo que esperaba. Desde que llego no deja de suspirar y su rostro se ve bastante intranquilo, en consecuencia este día e estado tranquilo sin tener que soportar sus arrumacos y caricias indiscretas, incluso me hace extrañar esa parte de él. Suena el timbre que indica el final de las clases.
- ¿Me acompañas a casa?- le digo tentadoramente - Mis padres salieron de nuevo, me haría bien un poco de compañía…- sueno bastante provocador, sin embargo el se limita a levantar la mirada y responder sin mucho entusiasmo.
- Lo siento no estoy de humor - se cuelga la mochila en su hombro derecho y sale del salón. Una ligera risa de satisfacción al verle en ese estado se asoma en mis labios.
Aprovechando que no esta conmigo, como la mayoría del tiempo, iré a estudiar un poco a la biblioteca. Busco el libro más grueso de estadística y comienzo a leerlo, es realmente bueno estar un momento a solas, sin que te estén manoseando o teniendo constantemente el aliento de alguien más en el cuello. Parece que he actuado bien hasta el momento ya que Ji Yong parece estar en medio de una situación difícil que no lo deja estar en paz. No cabe duda que sentirá lo que muchas veces ha hecho sentir a otros sin detenerse a pensar en las consecuencias. La alarma campana que avisa que ya son las 7:00 PM suena estruendosamente en el vacío del edificio. No puedo creer que sea tan tarde, no es que en realidad estudiase mucho, el tiempo se me ha ido pensando en lo que sucede con GD.
El cielo esta pintándose de naranja pálido hace mucho que no disfruto un fresco atardecer como este. El sol me da en los ojos pero consigo percibir la silueta de un chico que esta parado en la reja principal, creí que por hoy me habría librado de sus perversiones pero creo que no tengo tanta suerte. Sigo avanzando despreocupadamente hasta que me encuentro lo suficientemente cerca como para darme cuenta de que no se trata de Ji Yong.
- Creí que no saldrías nunca - me dice con un tono de voz bastante diferente al de la ultima vez - Soy Lee Seunghyun.
Centro mi mirada en sus pequeños y redondos ojos cafés, su mirada me indica que este encuentro no será en lo mínimo amistoso, intento pasar de largo, no estoy de humor para conflictos ni nada por el estilo.
- Ya sabía que no eras educado. Solo vengo a decirte una cosa - hace una pausa en la que puedo notar como su cuerpo me dice que va enserio.- No me importa quien seas o que relación pretendas tener con Ji Yong… él es solamente mío -
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Aprieto mis manos con suficiente fuerza a mis costados, inhalo un poco de aíre antes de continuar - Voy a hacer lo que sea necesario para que Ji regrese a mí lado, no eres la primera ni la ultima persona que tratara de alejarlo de mí… así que no creas que las cosas te resultarán fáciles. Recuérdalo Ji es y siempre será mío - gruño con fuerza reafirmando mis palabras.
Imagine todas las posibles reacciones de este sujeto menos lo que hizo a continuación. Giro su cuerpo en mi dirección y exhalo una sonrisa cínica, dio un par de pasos con ese porte cuadrado que hizo que mi corazón temblara ligeramente, es una persona muy imponente pero no me importa, me propuse luchar por el único chico que he amado realmente, no me importa si esta lucha requiera de un duelo físico, hare lo que sea necesario para defender a mi verdadero amor. A pesar de que me propuse luchar mi cuerpo retrocede entre más se acerca el tipo que es mas alto que yo, retrocedo discretamente hasta que la pared me detiene, entonces él se inclina para quedar a mi altura.
-No seas estúpido niño. Luchar por la persona a quien amas a pesar de ser consiente de que él no te ama a ti - su voz es suave muy diferente a la usual - Creo que lo notaste la ultima vez que nos encontramos… él esta enamorado de mí - esas palabras me calan hasta lo más profundo de mi ser provocándome el dolor intenso de la realidad - Pero…. Si dices estar dispuesto a luchas por su amor. Yo también tengo algo que decirte…- hizo una pausa mientras pegaba aun más su rostro al mío - No dejare que te lo lleves tan fácil - su pesada mirada y su aliento me impregnaron tan profundamente que me fue imposible moverme o hacer algo, no se que tiempo fue el que se paso reteniéndome en esa posición pero para mí fue eterno el momento de debilidad y clara desventaja ante él.
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Desde el lugar en que me encuentro no me es posible escuchar nada pero la atmosfera que se percibe entre ellos es realmente sofocante, tanto que desde el momento que gire la esquina de la calle y los vi hablando, me quede petrificado ante aquella imagen. Algo en mi interior me había advertido que no debía regresar al instituto, pero me preocupo no ver a Ri en mi departamento y cuando llame a su casa el ama de llaves me dijo que había ido al instituto a ver a un amigo. Jamás imagine que se tratará de Hyun… tan solo verlos ahí la imagen del rostro herido de Ri invade mi cabeza y los profundos ojos de Hyun que son capaces de paralizar a cualquier persona me llenan de ansiedad.
Me gustaría acercarme e intervenir, no parece que la cosa este muy bien, por el contrario parece que estuviesen a punto de iniciar un combate. Al verlos ahí siento como mi corazón se retuerce de miedo ante que alguno de ambos salga lastimado, siendo la razón por la cual en cuanto me doy cuenta de que Hyun se acerca peligrosamente a Ri un alarido casi inaudible escape de mis labios. Quisiera correr y detenerlos pero, eso solo complicaría las cosas, además no me siento capaz y sobre todo… no se a quien detendría de ambos. De repente Hyun se separa dejando a Ri de pie con la cabeza agachada, sin dirigirle una mínima mirada comienza a caminar en mi dirección, por lo que antes de que me vea, me doy la vuelta y salgo corriendo cobardemente.
No presto mucha atención en la dirección que tomo, lo único que en ese momento me preocupa es alejarme de ahí. Se que lo que pasa es culpa mía por no aclarar las cosas con Ri y por aferrarme caprichosamente a Hyun pero simplemente no puedo tomar partido, no se por que pero algo en mi me impide decir o hacer algo. Después de correr por bastante tiempo mi cuerpo me exige descansar, me detengo y me siento de golpe sobre el suelo.
Me doy cuenta de que en aquel momento debí correr a su lado y defenderlo, resolver esta situación dejando las cosas claras entre ellos para dejar en claro que la persona que quiero es … no puedo continuar esa frase, ya que hay bastantes lagunas que carecen de lógica. No puedo elegir a alguno de ellos porque se que ninguno de ellos representa nada para mí. Siempre lo he dicho jamás mezclare implicaciones emocionales en mis relaciones, es absurdo ser vulnerable ante una persona por simple cariño o peor aún amor… O a menos eso creí siempre.
Pero si es así ¿Por qué me siento de esta manera? Se muy bien que Ri es simplemente mi leal y querido amigo de la infancia con quien he sabido saciar mis necesidades y que nunca se ha negado a mi, solo eso, pero si es así ¿Qué demonios fue lo que sentí esta madrugada al tenerlo entre mis brazos sin intensiones sexuales? Por otro lado Hyun es un chico guapo, de ese tipo de personas que me gusta ganar como trofeos, por capricho y por que me hacen sentir bien … pero cuando estoy con él a pesar de que no he conseguido que me entregue su cuerpo… siento algo diferente, como si necesitará de su presencia para continuar.
¿Qué rayos pasa conmigo? No puede ser que … es algo ilógico. Jamás me enamorare de nadie… y aunque estoy seguro de eso. No puedo dejar de sentirme así por ninguno de ellos.
CONTINUARA…