Capitulo 23: ¿Quieres vivir conmigo?
Hope intentaba detener a su esposo, no debía espiar a su hijo pero tan cabeza dura como era, no podía hacer mucho.
Lyall se encargo de abrir solo un poco la puerta, conocía el buen oído de su hijo. Solo vio dos cuerpos en la cama de su no tan niño, Remus. Le dedico una sonrisa a su esposa para luego estrecharla en sus brazos y besarla.
—¿Qué ocurre?— pregunto alegre.
—Nuestro hijo será feliz— fue todo lo que respondió para luego besarla más lentamente, transmitiéndole todo lo que sentía en ese beso.
Sirius sintió el aroma dulce de unos hotcakes, una taza de café y algo más. Trato de incorporarse cuando unos brazos y un gruñido se lo impiden.
—Remus creo que tus Padres están despiertos—
Remus se quejo y apretó el cuerpo de Sirius contra el suyo. Sirius no pudo evitar reírse, Remus era adorable en la mañana después de… ¡Auch! Recordó el dolor punzante en su parte trasera.
Levantándose con cuidado y luego de sobornar a base de besos a Remus, pasó frente al espejo de cuerpo entero que tenía Remus en la muralla. Sorprendido regreso y se vio la espalda.
¿De dónde tenía esas marcas? Unas mordidas, dedos y chupones. ¿En qué momento dio la vuelta? ¿O fue el Lobo mientras dormía? Giro un poco mas y pudo ver una mordida en su nalga izquierda. Por extraño que parezca le pareció sexy.
Se baño un largo rato, relajando el cuerpo de los ejercicios de anoche. Unos brazos en su cintura lo hicieron saltar.
—Bebe esto— le entrego una pócima —me ayuda con los dolores, espero que no te haya hecho daño— Sirius negó y Remus se relajo.
Después del baño, pese a las quejas de Sirius, Remus no quería tentar la suerte, se vistieron para bajar a desayunar.
En la mesa de la cocina estaba su Padre leyendo el periódico y su Madre resolviendo los juegos que traía el desarmado periódico, todos los días era lo mismo. Su Padre quería leer tranquilo y su Madre quería la sopa de letras.
—¿Cómo durmieron?— pregunto Hope.
—Bien…— dijo Remus a punto de cambiar de color hasta que Sirius hizo un adorable puchero.
—¿Entonces?— pregunto su Padre.
—Somos… pareja— informo. Ambos Padres asintieron.
Se sentaron. Remus golpeo la mesa de adrede para que no se viera la incomodad de Sirius al apoyar ese… bueno al sentarse. Sus Padres lo dejaron pasar.
—¿Qué harán ahora?—
—¡Lyall!—
—Pero cariño son jóvenes deben vivir y disfrutar—
—Lo sé— sonrió. Ahora Sirius sabia de quien heredo esa cautivadora sonrisa Remus. Lyall y Sirius miraron embobados la sonrisa. Remus rojo los ojos —pero si ellos quieren hablar de algo lo harán en su momento—
—Hablando de eso suegrita— Remus lo golpeo en la cabeza —Señora Lupin— se corrigió —¿le molestaría que me llevara a Remus?—
—Mientras lo hagas feliz, Sirius…— hablo Lyall viéndolo severamente.
—Disfruten— añadió Hope. Sirius sonrió y se giro a Remus.
—¿Y…?— espero una respuesta. Remus lo miro molesto y Sirius rio —¿Quieres venir a vivirte conmigo?—
—¿Otra vez?— dijo en broma. Sirius le golpeo el brazo —Claro que si Paddy—
Sirius tomo la mano de Remus bajo la mesa y le volvió a sonreír —Gracias Moony—
Terminaron el desayuno en conversaciones, Sirius conto de su vida, de Hogwarts y sus amigos. Como se enteraron de lo de Remus y lo excelente alumno que era. Después les conto que estudiaba para ser Auror y que tenía un pequeño piso cerca de donde se supone que Remus estudiaría.
También le explico del apoyo de su hermano y su pareja, junto con otros Sly. Los Padres de Remus abrieron increíblemente los ojos al saber que Regulus Black salía con Barty Crouch Jr.
Finalmente ambos se mudaron juntos, teniendo los típicos problemas de pareja y las excelentes reconciliaciones que venían después. Jamás sospechando lo que se vendría en un futuro cercano.
Continuara...