*------ Ichigo ------*
Veo como mi hijo corre emocionado por todas las secciones del cuarto escuadrón, en cada puerta salta lo más alto que puede buscando a su madre, incluso intenta ver debajo de las puertas, sigue buscando sin importar que le diga que no es esa habitación, no hace más adelantarse y corretear por todas partes, hasta llego a abrir un bote de basura buscando a Toushirou.
Ichigo –
Rápidamente me doy la vuelta encontrándome con Rukia la cual carga a su pequeño hijo Kay, un niño pequeño de cabello negro y un poco alborotado con ojos color miel, hace unos dos años ella y Rangiku se casaron, a los dos meses se enteraron de que Rukia estaba embarazada, no tengo idea de cómo y la verdad no quiero saberlo… es un niño educado y obediente pero… el muy idiota le coquetea a mi hijo… ni de coño le doy a mi hijo… ni muerto ¬_¬ es MI hijo…
Rukia… hola -
¡¡¡Kay-chan!!! –
Mi hijo corre feliz y contento hacia nosotros mientras levanta su manita en forma de saludo, de inmediato Rukia baja a su hijo el cual corre hacia mi hijo y prácticamente se le tira encima haciéndolo caer al piso para luego robarle un beso de los labios, mi hijo se sonroja fuertemente mientras yo intento controlarme para no matar a ese maldito mocoso.
Sí que se llevan bien… tal vez más adelante lleguen a ser novios <3… -
Ni de broma –
Eso es cruel… ni que mi hijo fuera mala persona… -
No pienso dejar que se quede con mi hijo –
Pero Ichigo… –
Pero nada –
Lo siguiente que pasa es que Rukia comienza a actuar, llorando falsamente mientras yo no le hago ni caso, lo único que le digo y que le aseguro es que mi hijo es solo mío… punto final a la conversación.
¡¡¡Papi!!! –
Veo como mi pequeño hijo me jala el pantalón para llamar mi atención.
Sucede algo –
Lo cargo en mis brazos mientras le me hace un tierno puchero.
Deja de hablas paja y vámonos ya –
Me quedo mirándolo fijamente al igual que Rukia hasta que desvía la vista orgulloso… de verdad se parecen…
Está bien, pero hasta donde se no te has despedido –
Por un momento voltea verme molesto para justo después volver a desviar la mirada.
…Adiós… -
Rukia se ríe por lo bajo mientras toma a su hijo en brazos el cual también tiene un tierno puchero, pero obviamente mi hijo es más tierno y le luce más, se despide con una seña, hago lo mismo y de inmediato me dirijo a la habitación de mi esposa… ¿Cómo estará hoy?...
Rápidamente me pierdo en mis pensamientos recordando todo lo que vivimos juntos, todo lo que nos pasó, como comenzamos a salir, nuestra vida en pareja, me distraigo tanto pensando en momentos tan hermosos que para cuando me doy cuenta me encuentro justo delante de su habitación, entro como puedo sintiendo a Ishiro removerse ansioso, siento que estoy a punto de llorar, mi corazón se entruja, siento un nudo en mi garganta mientras lo miro dormir, gracias a que le doy reatsu muy seguido se mantiene sano y fuerte, sigue tan hermoso como siempre, siento como Ishiro se remueve aún más fuerte entre mis brazos hasta que logra bajarse, gatea hasta quedar en el regazo de mi Ángel, lo mira fijamente hasta que sonríe.
¡¡¡Mami!!!... Mami… Mami… Háblame mami… Mami… -
Miro como lo mueve un poco buscando que le responda, no puedo más, siento como las lágrimas caen de mis ojos.
Ishiro…-
Mami… porque no me miras ¿No me quieres?... –
Siento que me corazón se rompe en mil pedazos
Ishiro… no digas eso –
Mami despierta… ¡¡¡Mírame!!! –
¡¡¡No más, Ishiro!!! –
¡¡¡NOOO!!! ¡¡¡MAMI!!! –
Tomo a Ishiro entre mis brazos, de inmediato lucha para soltarse mientras llora fuertemente, de repente para de lleno solo para volver a intentarlo con más fuerza, lo dejo ir, sin embargo escucho otro llanto uno más maduro y adolorido que le de mi hijo, siento algo especial, levanto mi mirada viendo lo que tanto soñé durante estos tres años, me quedo mirándolo, abraza contra su pecho a nuestro hijo, puedo ver como unas largas y tristes lagrimas caen de sus ojos mientras que en su labios hay una sonrisa dibujada.
I… shiro –
Mi pequeño hijo levanta su cabeza y se miran entre sí.
Tienes… mis ojos –
Toushirou le asiente
Estas muy grande… y lindo –
Ishiro lo mira con curiosidad hasta que sonríe, aun con lágrimas en sus ojos
Me gustan mis ojos, son muy bonitos y únicos… -
A mí también me gustan tus ojos –
Ishiro vuelve a hundir su pequeña cabecita en el pecho de su madre, me acerco con un poco de miedo, de inmediato voltea a verme… me sonríe de manera dulce
Toushirou… -
Ichigo… - Sin esperar más lo abrazo fuertemente, lloro mientras lo aferro a mi cuerpo – Te amo – Sus palabras me hacen inmensamente feliz siento que todo lo malo que pasamos se desvanece.
Yo te amo más – Siento como él también me abraza, me despego solo para tomar su rostro entre mis manos y besarlo, siento como me besa con amor, yo con felicidad y alegría, y finalmente, después de tantos años siento que ahora mi vida vuelve a estar completa. Vuelvo a tenerlo entre mis brazos.