- No creas que he olvidado que tenemos una cena pendiente.
- Pero, pensé que ya te habías olvidado de mí.
- Eso no podría hacerlo, mi querido amigo.
Pero, Beyond Birthday no fue el único al que, ese tono dulce y esa risita, le preocupó.
- ¿Hoy, a las 9?
- Sí, perfecto.
“Alex, tiene una cita con Light”
- ¿Seguro que te encuentras bien, hermanito? ¿Qué fue lo que dijo el Doctor Parker? ¿Ya está todo en orden? – Elle mantenía muy apretado el auricular en la mano mientras Near se resignaba a contestar por millonésima vez la misma pregunta, del otro lado de la línea.
Eran más de las 9 de la noche, y el nuevo hogar del bello modelo pelinegro se encontraba sin nadie además de él. Aunque esa no era la razón para querer alargar la conversación con el niño peliblanco, y sus otros hermanos. Realmente, se sentí muy inseguro sobre su situación, desde su último escape. El menor pudo percibirlo, y aquello le despertó (de nuevo) un gran sentimiento de culpa, y lo resolvió al complacerlo, de la siguiente manera:
- Ya no corro ningún peligro grave. Y ya le prometí al Doctor Paker, y a todos aquí, que tomaría más en serio mis tratamientos y sus horarios. No puedo hacer más. Así que, por favor, ya no estés tan preocupado y relájate un poco. Según me dijiste, ya te mudaste con tus amigos ¿no? Bueno, ¿por qué no sales con alguno de ellos y haces algo divertido?
“¿Algo divertido?” - Esa última palabra, hizo que la encantadora imagen de Alex y Light, riendo en un lugar romántico y elegante, le circulara por la cabeza.
Elle sabía que eran muy buenos amigos y ya había aceptado que tenía envidia por eso, y que estaba condenado a sólo sufrirlo en silencio, entonces, ¿por qué, ahora, esa sensación al saberlos juntos, le era tan insoportable? ¿Acaso sus sentimientos por el castaño habían aumentado desde que comenzaron una relación real? ¡Si era así, era algo terrible!... ¡Y ahora, ese algo, lo estaba haciendo rabiar contra Alex! A quién quería casi como a un hermano… Demonios, ¿de verdad existía alguna posibilidad de que fuera a pasar algo serio entre Alex y Light?... Sin duda, era esa cuestión la que más lo torturaba, al permanecer sin una clara respuesta… Después de todo, Alex era lindo, amable, talentoso, inteligente, y Light… ¡No había más que mirarlo!... ¿Qué pensaría alguien que no los conociera?... Y si la respuesta resultaba afirmativa, ¿qué sería más importante para Elle?... ¿Su amistad con Alex o sus sentimientos por Light?
- … ¿Eh, hermano?... ¿Sigues ahí?...
- … ¡Sí! – (“¡Qué susto! Por un momento, sentí un gran coraje hacia Alex.”) – No me siento con ganas de salir. Ahora, pásame con Naomi, quiero hacerle unos encargos. Sé bueno y no des problemas.
- Está bien. Adiós. Te quiero mucho.
- Y yo a ti, Near. Nos veremos.
“Yo amo a Light, Alex. Tú no me harías esto ¿verdad?”
- ¡Light, por favor disculpa mi tardanza!
Fue lo primero que dijo el menor, al llegar con el joven fotógrafo, que lo esperaba fuera de un modesto pero bonito restaurante, por llegar casi media hora después de lo acordado.
Pero, Light no estaba molesto por eso, y lo recibió con una gran sonrisa:
- No te preocupes, ya me imaginaba que tendrías problemas con Birthday para venir. – Alex se sorprendió un poco (“¿Cómo lo supo?”) – Pero, aun así estás aquí. Te lo agradezco mucho, mi querido amigo.
- … No. Soy yo el que debe agradecerte.
Y un silencio muy cómodo se formó entre ellos.
Y, Light lo tomó del brazo para hacerlo pasar.
- Pues no esperemos más. Vamos.
- Sabía que preferirías el sitio más apartado de todos los demás, por eso lo reservé. – dijo el mayor, mientras tomaban asiento en su mesa, y el menor se despojaba de la bufanda, que siempre vestía hasta la nariz para ocultar quién era. – La fama no deja hacer nada con tranquilidad ¿verdad? No me imagino cómo lo toleras.
- Si supieras que no tengo opción. – murmuró Alex sin darse cuenta.
- ¿Eh? ¿Qué quieres decir? – Y Light se mostró desconcertado.
- … Nada importante. – agregó el menor, con rapidez.
(“Aún no estoy seguro de esto”)
- Está bien – dijo Light con amabilidad, para por nada del mundo crear un ambiente incómodo. – Quiero que disfrutes esta velada lo más que puedas. No te preguntaré nada, y podemos hablar de lo que tú quieras.
- Y si no sabes cómo empezar ¿Qué vas a ordenar?
Ambos jóvenes pidieron platos diferentes, y los recibieron de inmediato. Mientras tanto, hablaron de cosas sin importancia, casi ridículas, que habrían dejado claro, a cualquiera que los oyera, que sólo podían estar entretenidos por su compañía (cómo el clima y el tráfico), mas, luego, de manera sorprendentemente cómoda, pasaron a cosas serias e interesantes (como la historia del arte y la literatura). No cabía duda de que Light había hablado en serio respecto a lo anterior, y eso ayudó a Alex a convencerse de lo que había pensado mucho, horas antes de llegar a la cita. Pero, aun así, resultaba algo difícil de abordar ¿Cómo hacerlo? Necesitaba ayuda para idear la forma correcta… ¿Y por qué no?
- … Oye, Light ¿Te puedo pedir un consejo?
- Claro – dijo el castaño luego de pasar un bocado de su comida - ¿De qué se trata?
- ¿Qué haces cuando quieres hablarle de algo muy serio a alguien, pero te preocupa el no poder manejar su reacción?
“Vaya, ¡qué interesante pregunta!”
- Una vez quise hacer algo así con mi padre, y se me ocurrió esto: Primero le conté algo muy grave, pero no tan grave como aquello que temía contarle. Observé su reacción, y así supe si entendería lo siguiente… Desgraciadamente, no me ayudó.
Alex quedó muy sorprendido por esa respuesta.
- ¡Qué brillante! – dijo, luego de analizarla.
“Eso puede ser ¡exactamente lo que necesito!”
- La trama de mi libro es la siguiente. – dijo de pronto, convirtiendo a Light en el sorprendido. – Un joven increíblemente hermoso tiene una vida perfecta con su familia en una prospera hacienda. Su vida transcurre mientras ve satisfechos todos sus caprichos, y hasta tiene un amor secreto viviendo bajo su mismo techo, que varias ocasiones le regala noches de pasión en un granero.* - El castaño puso toda su atención en esto. – Pero todo esto se termina el día de su cumpleaños 18, cuando los enemigos de su padre deciden quemar la gran casa con todos adentro, y hasta su gran amor es acribillado delante suyo. Entonces, el chico es puesto en venta para pagar las deudas que quedan de su familia. Todos quieren comprarlo para poseerlo por su gran belleza. Y finalmente un hombre mayor lo hace… Pero este no quiere al ángel para eso. Este hombre acaba de sufrir la gran pérdida de su esposa, a manos de los mismos hombres detrás de la desgracia del joven, y le propone a este un trato. Él pondrá el dinero para agregar a su belleza pura la educación de un noble y la dignidad de un príncipe, y luego él, así transformado, irá en busca de sus enemigos para atraerlos a la ruina, y luego a la muerte, usando sus encantos como una carnada mortal. El ángel acepta, y con el tiempo llega a disfrutar el presenciarlos asesinatos. Tanto, que lo que era un ángel ya no se puede llamar más así, y termina por tomar el nombre de demonio. Es aquí cuando entra el verdadero protagonista. – (¡Justo cuando Light pensaba que no podía sorprenderse más!) – Aquel que se enamora del ángel, no por su apariencia sino por lo que una vez fue, y sufre tremendamente al ver que no tiene otra salida más que aprender a amar a un demonio para curar su pena, porque el camino que ese ser ha tomado es uno sin retorno. Por eso es el título: “Amando a un demonio”
“Alex, yo te creía un angelito ¿Por qué me haces esto?”
Beyond Birthday (que por ese entonces se encontraba en un parque desolado) estaba confundido por dos cosas. Una, porque no había conseguido convencer a su adorado compañero de que no asistiera a esa cena. Y dos, porque estaba ahí parado sin ánimos de ir a casa, dónde estaba solo el hermoso Elle Lawliet.
¿Y todavía no podía decidir a cuál de esos dos niños realmente amaba? ¡Era un perfecto idiota!... ¿Cuándo fue que su dulce Alex empezó a cambiar? ¿Cuándo empezó a revelarse y a manifestar sus deseos con tanta terquedad sobre los suyos? No era que quisiera tenerlo sometido todo el tiempo, pero tampoco podía tolerar que alguien tuviera más influencia sobre él… Sin duda, Light Yagami estaba detrás de todo ¡Maldición, cómo odiaba a ese hombre!... Pero, ¿de verdad, era el verdadero culpable?... ¿Por qué al cuestionárselo se le venían a la mente los momentos en los que había estado más cerca del modelo pelinegro? Los momentos en los que lo besó y le dijo “mi amor” ¿Podían ser esos, los culpables reales?... Tendría que analizarlo todo con la mente fría para saberlo, y últimamente le era muy difícil hacer eso y sobre todo cuando se trataba de Alex… Su Alex
- … ¿Tu amigo, eh?... ¿Y yo, qué soy?...
- Tú eres la persona más importante para mí.
- Pero, creo… que yo no lo soy para ti.
“¿Será posible, que empezara a perderte cuándo me empeñé más en conquistar a Elle?... Tiene más sentido, pero ¿por qué nunca me di cuenta?” – Llegar a esos pensamientos le tomó casi media hora de control emocional, pero lo logró – “Siempre has estado conmigo. Eras como mi sombra, y por eso dejé de preocuparme por que te fueras a ir… Y ahora, gracias a Yagami, y a Teru Mikami, me doy cuenta de que, sin importar cuantas veces te bromeé acerca de eso, no quiero y ¡nunca permitiré que lo hagas!... ¡No puedes ser de nadie más que mío! y por recuperarte… Por ello, estoy dispuesto a renunciar a lo demás.”
Beyond sintió entonces un retorcijón dentro, que lo dejó muy asustado, y sorprendido, pero no pudo hacer nada. Su corazón ya había elegido.
Elle Lawliet ya era parte del pasado.
Y, ¡¿por qué seguía ahí parado?!
- Tienes que prometerme que seré de los primeros en tener una copia. – dijo Light luego de un momento, para continuar con la conversación y disimular su asombro.
Alex jamás le había hablado de su libro a nadie (¡Ni siquiera a Birthday!)
¿Qué podía querer decirle que fuera más importante que su única obra?
- Tiene una parte de mi pasado. – dijo el menor de pronto (cuando ya estaban por terminar el postre), y Light se preparó para sorprenderse más. – Cuando yo tenía 16 años, mis padres murieron en un accidente de coche. Hasta ese entonces yo no lo sabía, pero mi padre tenía muchas deudas. Y pronto sus socios empezaron a buscarme… Al igual que mi personaje, acabe en una subasta de carnes… Un hombre me compró, y me llevó a su casa para abusar de mí. – Light contuvo el aliento, presionando el mantel bajo sus manos. – Pero alguien me salvó. – continuó Alex, oportunamente. - Alguien a quién, desde ese instante, y sin darme cuenta, convertí en el centro de mi universo.
“Beyond Birthday” – Light lo adivinó sin más ayuda.
- Ya todo está bien. No voy a hacerte daño.
- … ¿Cómo te llamas?...
- … A-Alexander Llynch…
- … ¿Alex, eh? Es bonito
- Yo me llamo Beyond. Y estoy encantado de conocerte.
- Mi salvador se ofreció a ayudarme con la deuda, para que… eso no volviera a ocurrir. – Alex siguió narrando su historia. – Pero era demasiado y aquel socio de mi padre siempre había estado obsesionado conmigo… Entonces, apareció ella… - (“LillyAi Nagame” – Light tragó saliva, entonces) – La Srta. Nagame había estado persiguiendo a Beyond desde hacía mucho tiempo para que trabajara para ella, pero no tenía con que convencerlo. Entonces, cuándo se enteró de lo que intentaba hacer por mí, y me conoció en persona, nos propuso el siguiente trato: Que ella compraría la deuda (y se encargaría de ese hombre) a cambio de que ambos le regresáramos todo y con intereses en años de trabajo en su revista. Yo no tenía opción, pero Beyond también aceptó… Desde entonces, siempre hemos estado juntos. Y es esa la razón por la que no puedo dedicarme a otras cosas, aún ahora ¿Quién sabe cuánto más me tome regresarle todo a la Srta. Nagame? Ya no puedo preocuparme por eso… Pero, en fin, necesitaba contarle alguien de esto, Light. Y tú eres perfecto… Últimamente, he llegado a pensar que tengo que empezar a acostumbrarme a una vida sin Beyond, porque no podré soportar lo que vendrá a continuación con él… ¿Me entiendes, no?
Light sí entendió y perfectamente: ¡Por eso Alex siempre había estado detrás de Birthday! ¡Y además estaba enamorado de él!... El ojisangre era un perfecto idiota ¿Cómo podía lastimarlo así sin darse cuenta?... En fin, él nada podía hacer por él, más que seguir brindándole su amistad y su apoyo, los cuales, sin duda, iban a crecer más, a partir de ahí
- Siempre podrás contar conmigo, Alex. Te lo prometo.- agregó, tomándole las manos. – Y para decirme lo que sea.
Alex sonrió muy feliz, un poco apenado.
¡Así que todo eso le había pasado! Light empezaba a pensar que nadie trabajaba para esa mujer sin tener una razón oculta. Y también se detuvo en el detalle de que ahora sabía porque Alex estaba tan acostumbrado a cuidarse de los secuestros ¡No sólo sus fans lo querían secuestrar, sino que ya había pasado por lo que fue un intento de violación! ¡Su valor era digno de admirar!
La cena terminó. Y los dos amigos se dirigieron a casa del menor para despedirse en la puerta de su apartamento. Había sido una velada muy agradable y que, sin duda, había llegado a fortalecer su lazo, mucho más de lo que cualquiera hubiera imaginado. La verdad, Light ya no quería imaginarse la vida sin él ¡Ojala pudiera ayudarlo con algo más!
- Light. Casi lo había olvidado.- dijo Alex, antes de entrar a su casa. – Ahora, tú también tienes que decirme tu secreto.
- … ¿Qué? ¿De qué estás hablando?
El fotógrafo se sorprendió mucho (otra vez.)
¿Cómo sabía ese niño que tenía un secreto?
- Por favor, confía en mí – continuó Alex, con una dulce sonrisa. – No se lo diré a nadie. Y tienes con que asegurarlo.
Light no supo qué pasaba en ese momento.
Pero lo que ocurrió después, lo asombró más.
- ¡Alex, entra inmediatamente! ¡Necesito hablar contigo!
Los amigos se separaron con el susto (ya que estaban a sólo unos centímetros) y se encontraron con una imagen que nunca habían visto.
Elle “L” Lawliet completamente sonrojado y furioso.
- ¿Elle? – lo nombró el menor, muy confundido - ¿Qué te pasa?
- ¡Tiene que ser a solas! ¡Despídete de una vez, la cita terminó!
- ¿No me vas a saludar, Elle? – Light se atrevió a preguntar eso.
(Y al instante se arrepintió.)
- ¡Vamos ahora, que es muy importante! – agregó el pelinegro, sin dejar de mirar con reproche al joven fotógrafo, que ahora sí se preguntaba ¿Qué le había hecho?
- … Está bien. – acabó por responder Alex (temiendo que si no lo hacía, la cosa se pondría peor) – Adiós, Light. Espero que podamos repetir esto.
- Cuenta con ello. Lo podemos discutir mañana, amigo.
- Sí. Yo te llamaré.
- Sí. Está bien.
- ¡¡Ya!!
¡Elle tomó del brazo a Alex y luego cerró la puerta en la cara de Light!
**
- ¡¿Qué pasa contigo?!
- … ¡Necesito saberlo!
- ¿Qué es lo que hay realmente entre tú y Light?
**
Sin embargo, Light no tuvo tiempo para analizar lo ocurrido con su Dios.
Pues, había alguien esperándolo también, en la entrada de su edificio.
Alguien que jamás habría esperado ver. Ni esa noche, ni nunca.
- … ¿Papá?
*¡Esta es una trama que tengo en mente para un nuevo Fan Fic! ¡No sean duros con ella!
**¡Estas escenas serán extendidas en el siguiente episodio! ¡Nos quedamos sin espacio! (Otra vez)
