“Novena consecuencia: Frustración”
Severus llevaba un rato la vista perdida en su armario, no es que le importara realmente lo de salir con Thompson, solo era porque no tenía nada mejor que hacer, simplemente era eso…
-Sev, solo escoge algo con lo que te sientas cómodo-opino Regulus que se encontraba sobre la cama de Snape leyendo un libro desde hace un rato.
-Déjalo crecer Regulus-Lucius estaba sentado en el piso mientras se apoyaba contra la cama, tenía la misma expresión de aburrimiento de siempre-ya está grande, debe tomar sus decisiones por él mismo.-comento Malfoy con sorna, una mueca divertida apareciendo en su rostro.
Snape se giró con una expresión amargada y frustrada, que hubiera servido bastante si no estuviera sonrojado-¿podrían callarse?-Snape tenía apretado algo contra su mano y ambos Slytherin sabían que esa era su varita, mejor no arriesgarse.
Black siguió con su lectura y Lucius siguió medio aburrido pensando. Severus suspiró agradecido porque le hubieran hecho caso. Miró su ropa por un rato y suspiró frustrado, no encontraba nada que le gustara, a decir la mayoría de su ropa no le gustaba. Ya estaba harto de esa mierda, iría a comer tenía hambre, además era mañana, no importaba, elegiría cualquier cosa.
-Voy a comer-mencionó distraídamente mientras empezaba a caminar hacía la puerta, Regulus se puso de pie casi al instante y se fue detrás de él.
Lucius siguió también se puso de pie, aunque con tranquilidad. El rubio empezó a caminar por el lugar, hasta llegar a la Sala Común, busco cierta cabellera rubia y la encontró. Malfoy se sentó junto a Narcissa que dibujaba tranquilamente apartada del rubio-necesito un favor-murmuró el de ojos grises. Los ojos de Narcissa brillaron curiosos mientras asentía, después de todo, era la primera vez que Narcissa Black miraba a Lucius Malfoy pedirle un favor a alguien.
~
Regulus seguía leyendo el libro mientras caminaba junto a Severus, los dos iban callados, en realidad de Severus era normal, Snape era muy callado, en cambio si Regulus se parecían en algo con su hermano era en el hablar, le gustaba hacerlo, aunque solo con ciertas personas, él no era un charlatán como Sirius. Black suspiró mientras cerraba el libro cuando se sentaron en las mesas. La hora de la cena era esa, el Gran Comedor se encontraba completamente lleno.
-Es extraño que Lucius no haya venido con nosotros-Regulus miró lo que había de comer y empezó a elegir lo que más le llamaba la atención.
-Tampoco está Narcissa- comentó tranquilamente Snape mientras elegía algo de comer, casi no tenía nada de hambre.
-Merlín-Black suspiró- con razón estás tan delgado, debería comer más, es malo para ti el no hacerlo-Regulus se inclinó un poco mientras le echaba ciertas cosas en el plato a Severus que rodó los ojos.
-No tengo hambre-se quejó el pelinegro mientras empezaba a comer-demonios Regulus, pareces una madre-el de ojos negros suspiró frustrado.
Black sonrió divertido por la comparación que había hecho el mayor-solo come, Severus.-el heredero de la Noble y Ancestral Casa de los Black ni se inmuto por el par de ojos que se encontraban matándolo con la mirada, ya sabía que era su hermano y Potter quienes lo hacían, al parecer los dos andaban inquietos desde el principio del día, estaba seguro que se habían dado cuenta de la cita de Severus. Regulus escondió una sonrisa con la copa de la que estaba bebiendo jugo.
~
Sirius miraba frustrado la escena que montaban su hermano y Snape. Su lindo hermano no dejaba de pegársele a Severus. Sirius suspiró frustrado intentando no romper otro tenedor de nuevo, como venía haciendo desde hace un rato. Intentó calmarse al ver la mirada de Remus sobre sí mismo.
¡Merlín! Era desesperante, puso su cara sobre la mesa. No tenía ni la menor idea de que hacer, por lo que sabía la cita de Snape con el estúpido de Evans era mañana, y seguía sin ideas, era tan malditamente frustrante… Nunca se había sentido así y lo odiaba por completo, estaba acostumbrado a que las chicas cayeran a sus pies con solo mirarlas, una sonrisa a lo muchos. Pero, ¡Mierda! ¡¿Por qué cojones le tenía que gustar un hombre?! Era extraño y nuevo, bien, incluso sabía que no se tenía que esforzar mucho aunque fuera un hombre, es decir… ¡Él era Sirius Black! ¡Sirius Black! Se dio un cabezazo contra la mesa intentando tranquilizarse, no podía exasperarse, debía pensar bien en lo que tenía que hacer. ¿Qué podía hacer? Alzó su cabeza un poco, una expresión frustrada más.
Remus cerró el libro que llevaba leyendo desde hace un rato y miró a Sirius, bien dejaría el enojo a un lado-¿Qué pasa Sirius?-sabía que no era un tema que podían tratar en el Gran Comedor.
Sirius se puso de pie-vamos-Lupin asintió mientras empezaba a seguir a Sirius por la puerta, tenía que tener paciencia.
~
James se encontraba comiendo desde hace un rato en silencio, necesitaba pensar, cuando termino de comer y acribillar un poco a Regulus con la mirada, se puso de pie con las intenciones de buscar otro lugar donde poder pensar, el ruido del Gran Comedor no era su mejor aliado en esos momentos. Metió las manos en sus bolsillos y se fue, empezó a caminar por los pasillos de Hogwarts, busco los más desolados, y rápido llegó a una de las salidas de Hogwarts se sentó debajo de un árbol completamente solo. Apoyo la cabeza contra la corteza del árbol, una sonrisa triste se posó en sus labios, había estado pensando mucho. Es decir, sabía que le gustaba Severus, era demasiado obvio como para intentar si quiera negarlo, además ese no era su estilo. El punto radicaba es que se sentía raro intentar enamorarlo, no porque no creyera que no pudiera hacerlo, sino porque…-No lo merezco…-Potter alzó la mirada, no había ni una sola estrella y la luna estaba creciendo. Eso le recordaba que dentro de poco tendrían que ir a la Casa de los Gritos. Suspiró de nuevo mientras se quitaba por un momento los lentes, en verdad que Sirius tenía razón, sin ellos estaba completamente ciego. Rio un poco, una risa floja y sin gracia.
-No pensé que fueras de los que se rinde rápido Potter-Lily salió de su escondite y se sentó junto a James.
James ni se molestó en decir algo para aclarar la situación, era obvio que Lily lo sabía, es decir la chica se la paso dándole indirectas que después de un rato había captado-no lo soy.-Aclaró el de cabello castaño oscuro.
-¿Entonces?-la pelirroja cerró los ojos, estaba haciendo una brisa agradable.
James suspiró mientras se ponía los lentes de nuevo-no lo sé Lily, es diferente, se siente diferente- Potter desvió la mirada al suelo, Evans sonrió con tristeza.
-Por ello mismo deberías hacerlo-la muchacha de ojos verdes se puso de pie con una sonrisa en el rostro-es mejor arrepentirse de lo que se hizo a quedarse con la duda-Lily alzo un dedo en el aire mientras soltaba una risita.
James asintió levemente, Lily tenía razón, no se iba a quedar de brazos cruzados, ese no sería James Potter-Lily, ¿Quieres ir mañana a Hogsmeade? -Potter mostró una sonrisa amplia.
La pelirroja parpadeo confundida por un momento-¿He?
~
Severus se despertó sobresaltado, alguien le había quitado las sabanas de un tironazo. Su cabello negro se encontraba algo alborotado y tenía una expresión adormilada en el rostro-que tierno…-frunció el ceño, esa voz aburrida solo le pertenecía a Lucius.
-Tienes razón-el ceño de Snape se frunció un poco más al detectar la voz de Regulus.
-¡No lo distraigan! ¡Es hora de comenzar! ¡Así que largo!- Severus suspiró al ver como Narcissa echaba por la puerta a Lucius y Regulus a base de empujones.
-Narcissa…-susurró el pelinegro intentando no matar a alguien.
Black se giró con una sonrisa brillante en el rostro, la muchacha tenía un poco de ojeras, cosa que extraño al menor-al baño querido Severus-la rubia lo empujo contra la puerta del baño-¡Traje mucha ropa que te puede quedar bien!-Snape se tensó al escuchar eso-¡Pero tranquilo, Lucius no me dejo traer ningún vestido!-el de ojos negros no sabía si sentirse aliviado por eso. El chico suspiró y se metió debajo de la ducha. El pelinegro se bañó con tranquilidad hasta que otro golpe en la puerta lo saco de su ensoñación-¡El primer conjunto está colocado sobre el retrete!-después de eso no escucho más.
Severus miró con desconfianza la ropa, negó con la cabeza mientras se la empezaba a poner, no era como que iba a salir desnudo de ahí. Cuando salió del baño, algo incómodo, Narcissa tenía las mejillas levemente sonrojada-esto es extraño-la voz del pelinegro salió irritada.
-¡Me encanta!- bramó la chica-pero debemos probarte muchos más para estar completamente seguros-la chica de ojos celestes empujo al chico al baño de nuevo mientras le pasaba otra ropa-aquí te espero Sev-la rubia se encontraba completamente feliz, se notaba que lo estaba disfrutando. Severus normalmente los mandaría a la mierda a todos, pero sabía que Narcissa tenía esas ojeras por su culpa, así que no podía ser así. Solo esperaba que eso terminara pronto.
~
Thompson se acomodó un poco la bufanda color gris, llevaba el cabello negro como cuando lo conoció, el Ravenclaw tenía la mirada perdida en algún punto. Severus caminó hacia su lado, llevaba un rostro serio y algo huraño, pero tenía un sonrojo tenue en su cara que intentaba ocultar con la bufanda azul que llevaba. Cuando estuvo a su lado Evans se lo quedo viendo por un lado absorto, después sacudió la cabeza un poco y le sonrió-pensé que no vendrías-comento Evans mientras se ponía de pie para dirigirse a los carruajes con Severus a su lado.
Severus se quedó mudo por momento-no voy a dejar pasar una extorsión tan a la ligera-Snape se alzó de hombros y Thompson se rio.
-Bueno, hora de irnos-Evans ayudo a Snape a subir. Momentos después el carruaje empezó a moverse.
~
-Severus se ve muy bien-Regulus subió a un carruaje, después de que Lucius y Narcissa subieran.
-Soy una experta, además Severus se veía lindo con todo-Narcissa suspiró soñadora.
-Bueno es hora de ir a espiar, además parece que no seremos los únicos-Lucius miraba afuera del carruaje como Potter y la pelirroja subían a uno, mientras que por otro lado Black y Lupin subían a otro. Lucius sonrió levemente.