Mientras más los acerco, mas se alejan.
Al día siguiente sus amigos vieron a Remus saliendo con Aaron en una actitud muy acaramelada.
Arlette quería golpearse la cabeza contra un muro de piedra… había arreglado las cosas antes de irse. Ya en vacaciones con Remus, hablo de Sirius con él y le insinuó algo… ¿para qué? Ahora estaba de nuevo con ese.
Se había contactado con Sirius… si, estaban en la Sala de Menesteres todas las noches antes de irse a la habitación , conversaban de Remus y lo que podrían hacer, lamentablemente cada cosa salía mal, ya sea por castigos, alguien interrumpía, mala suerte, sabotaje sin intención y estupidez.
—Podríamos hacer Felix Felicis y ver qué ocurre— aporto Arlette luego de un largo rato de ver el techo y pensar en algo.
—Ríndete… hemos intentado todo y nada funciona… quizás sea una señal— decía un cabizbajo Black.
Arlette no quería resignarse, si las cosas no se dieron antes y ahora resultaba que se amaban, haría lo que fuera para que estuvieran juntos.
—Solo la poción y si no… bueno, se acabo— con un suspiro Sirius acepto.
Pues Arlette no era idiota, arreglo las cosas con Severus. Porque le echaba de menos y que además era el mejor en pociones.
—La poción… ¿vienes solo por eso?— obviamente se reservo la otra pregunta.
—Malfoy… ¿sigues hablando con ese?— ¿Por qué lo decía? Ni idea… últimamente no pensaba mucho, más bien actuaba… lo cual era muy peligroso.
—Si… hablo con Lucius y bueno… la poción estará lista en unas semanas— por la cara de Arlette entendió que no sabía el tiempo de preparación —legalmente son seis meses—
—¡¿Qué?!
—Pero… ya tengo poción hecha desde antes y según mis métodos puedo tardarme solo dos… tampoco necesito que otros se enteren de esto— advirtió lo último.
Pues si, en ningún momento escribió en su libro -Arlette investigo bien- que lo lograba en dos, solo hacia más fácil la elaboración.
—De acuerdo… en unas semanas…— con eso siguieron estudiando algunas cosas o simplemente poniéndose al día.
Dos semanas, en donde todo el mundo envidiaba a la pareja perfecta. Dos semanas en donde el “personaje” -versión masculina de Arlette, enamorado de Sirius- escribía a Black, pese a todo siguieron con ese plan, había dado resultados antes de irse de vacaciones, quizás ocurriera algo mas importante ahora.
Finalmente llego el día.
Arlette tenía todo preparado, hablo con Severus y le dijo el plan, no sabía quién saldría involucrado y en que terminaría. Mismo para Regulus y Barty quienes estaban molesto porque ella “ponía mas intenciones” que el mismo Black pero ellos no sabían todo.
Espero un fin de semana en enero.
22 de enero, domingo a solo dos días de Luna Llena. Todo se definiría ahora.
Supuestamente, “personaje” le había enviado un pequeño obsequio a Sirius, la poción. El plan era que Remus se enterara de esa parte.
Así se encontrarían -“personaje” y Sirius- en la salida de ese día.
Pues bien, Sirius la bebió frente a todos y se aventuro a la vida, no sabía cómo actuaria la poción, traería suerte… ¿Cómo? Ese era un motivo bastante importante.
Salió de la sala común sin esperar a sus amigos, no sabía que Lupin le seguía, se encontró con unos alumnos que se lo comieron con la mirada. Fue a los terrenos para caminar, despejarse y luego acercarse a los carruajes que los llevarían a Hogsmeade.
En el carruaje iban Regulus y Barty, sabiendo lo de Sirius le comentaron lo bien que se veía, todo en apariencia forzada por “educación”.
Y es que Sirius se veía bien. Como nunca se puso unas zapatillas de James que ya no quería, las arreglo y aumento en tamaño, cambio el color quedando rojas. Llevaba unos pantalones jeans azules con secciones blancas y en la orilla estaban deshilachados como los bolsillos. Se puso una polera típica de su estilo, negra con alguna banda Muggle -obsequio de Dumbledore, en la navidad pasada- un poleron verde oscuro con gorro y una chaqueta oscura sin mangas con detalles plateados y no hay que olvidar un pañuelo rojo para cubrirlo del frio -pese a que la ropa estuviera hechizada-, tampoco los infaltables guantes de cuero sin dedos.
El pelo revuelto y suelto, el frio se lo ondulaba y no era para mal, al contrario le daba un aire más deseable y con esa apariencia Muggle era… uff…
Llegaron a Hogsmeade, se bajo y dio unas vueltas, se fue a Zonko donde sorpresivamente -sospechoso- se encontró con Smith.
Al parecer fue a juntarse con unos amigos allá en Hogsmeade para luego irse al Callejón Diagon, por “x” motivo termino allá solo ya que sus amigos lo dejaron plantado, aprovechando el momento fue a Zonko, en donde lo reconoció.
Sirius paso la mañana intentado alejarse de Smith, no era la idea hacer enojar mas a Moony de lo que estuvo el último tiempo pero el tipo no entendía de indirectas.
Ya en un momento se puso cargoso y Sirius quería solo hechizarlo.
¡HABIA DEJADO SU VARITA! Y el otro, era obvio, que la tenía lo cual no era bueno y se notaba que aun estaba sobrellevando la curadera de la noche, al parecer no durmió.
Logro evitarlo o más bien perderlo en un momento, mas tarde se dio cuenta que entraba a cualquier tienda. Se topo con un chico de su edad, era simpático y se veía bastante bien, su acompañante era un poco tímida pero ambos muy amables. Por lo que pudo apreciar eran Squibs pero conocían bastante del uso de la varita y de cómo molestar a un mago que la olvida en su habitación.
Ya logro despedirse de ambos porque la chica tenía que volver con sus Padres y el la acompañaría a una chimenea.
Estaba caminando cerca de Cabeza de Puerco cuando alguien lo acorrala en un callejón anexo, sorprendido observo el lugar y a su atacante. ¿Quién atacaba a plena luz del…? El cielo estaba negro. No se dio cuenta cuando ya era de noche, al parecer pasó rápidamente toda la tarde con esos dos.
Asustado -sin varita- empujo a la persona, pensando que era alguien de Slytherin -en ningún momento pensó en Remus y celos, no-, eso no fue suficiente la persona se le volvió a acercar y le quito el pañuelo de un tirón, terminando en la nieve.
Un golpe al rostro y un quejido. Smith. Se lo volvió a acercar y lo beso. Sirius cabreado del tipo le mordió la lengua y lo pateo, en eso siente algo raro en su cuerpo. ¡Lo había hechizado!
¡No era una maldita nenaza para que le ocurrieran estas cosas!
Su cuerpo parecía gelatina y de su garganta no salía ningún sonido, pensaba en alejarse o moverse pero el cuerpo después de un momento dejo de responder.
Sintió unas manos que lo recorrían por completo.
Quería acción pero no con ese y menos terminar violado. ESTUPIDA POCIÓN.
La falta de equilibrio logro botarlo. Con suerte emitió un quejido y escucho un bufido para después ver la varita, un hechizo y por la luz de este ver la cara de Smith. Tenía tanta ganas de lanzar un Avada.
Automáticamente siente como todo su ser se mueve por sí solo. Intenta pararse pero cae nuevamente, se escucha un ruido y un quejido. Ya después se le nublo la vista, todo ruido lo sentía como lejano y como en un murmullo inentendible, cuando logro estar de pie se lanzo al cuerpo frente suyo.
Lo beso, mordió, toco, chupo y exploro como le dio la gana. O eso quería. Maldita sea la poción. Al menos podía imaginar que era Remus pero los gemidos eran muy extraños para Lupin.
Si, lo había espiado y gracias a eso lograba pajearse en la ducha. Imaginándose que lo hacía con él y no con ese Aaron.
Ya en un momento empezó a masturbar a Smith… ¿Cómo termino haciéndole un oral? Ni idea. Recuerda masturbarle y besarlo, chupársela y luego estar en las Tres Escobas conversando con el mismo chico de la tarde cuando ve entrar a Moony con los otros.
Remus se separa y va donde Aaron, no sin antes observarle.
Maldita sea Dumbledore y sus pociones challas. Nada de buena era de MALA SUERTE.
Al otro día despertó con una resaca.
Según James se emborracho y fue a meterse con el chico de las tres escobas. Según Peter bebió y bebió. Según la perra -Arlette- ahogo las penas en el alcohol con el chiquillo de ayer.
Sea como sea, despertó y pudo ver la mirada decepcionada de Remus para luego escucharle que no llegaría a dormir a la noche.
Bien… olvidaba a Dumbledore.
NOLAN era el objetivo de toda su ira, celos, rabia, enojo… otra vez se convertía en súper nova.
Más tarde en el comedor se encontraron a una Arlette igual, según ella al parecer se acostó con alguien… no recordaba.
No, definitivamente no era el día de ese par. No FUE el día de ese par…
Continuara...