Malfoy. Me siento humillado. Púdrete Black.
James pasó toda la mañana con Sirius en la sala de los Menesteres para aclarar ese asunto de una vez por todas y hablar en forma clara con su hermano. Sabía que actuaba raro el último tiempo y ahora Sirius cantaría todas las cosas, quisiera el chucho o no.
Así fue como James se entero o confirmo dependiendo del caso que se fue con Arlette a pasear por Londres muggle esa navidad. Como se dio cuenta de que estaba enamorado de Remus, el porqué lo celaba y también que no había tenido sexo con ninguna chica. Para este minuto James no paro de hacerle burla, por tal motivo Black contraataco diciendo que Evans se enteraría de todo aquello -y ciertas cosas extras- si es que James no se sentaba CALLADITO a escuchar.
Remus por otra parte estaba confundido… ¿Quiso violarse a Black? O ¿El chico de la noche quiso violarse a Black?
Pues sí. Remus fue quien salvo a Black de Smith en cuando reconoció su aroma junto con el de Sirius. El lobo quería sangre y vaya que si lo golpeo antes de que Sirius se levantara y besara para luego… eso, aunque para estas alturas creía que todo fue producto de su imaginación pero ahora no estaba seguro.
¿Sirius se sentía atraído hacia él?
¿Qué paso con el muchacho de la noche? ¿Era verdad lo que dijo James...? ¿Tuvieron sexo ese par?
Esa pregunta le carcomía.
Sea como sea tenia clases este día, por suerte solo en la mañana. Agradecía no compartir Runas Antiguas con los otros. No así Estudios Muggles, que pese a que no estuvieran James y Sirius, Peter la tomaba y no quería hablar con ninguno de sus amigos. Si ellos sabían que estaba mal serian capas de obligar a Peter a que sentara junto a él durante la clase y averiguar que le ocurría.
Remus jamás odio tanto una clase como la de ese día. Bathsheda Babbling podría ser buena profesora pero no entendía porque hoy su clase fue la más aburrida, latera, idiota y la más innecesaria de todas.
Como nunca salió y se fue hacia la mazmorra, tenía una leve impresión de que se encontraría allí con Arlette.
Si su día fue un asco terminaría como los mil demonios. Había visto la cabellera de Malfoy en la esquina del final del pasillo, sabía que se dirigía en la misma dirección pero no pensó verlo besarse con Black y al parecer ambos lo disfrutaban.
Y es que Remus se sintió humillado. Con solo esta imagen confirmo lo que tenía “ahí”. Estaba enamorado, no.
AMABA A SIRIUS BLACK pero también sabía que ese amor seria maldito, estaría envenenado no solo por la parte Black si no por el mismo Remus.
Lo único que vio antes de girarse fue a Severus con una cara que probablemente era similar a la suya.
Sin más, camino y camino. Cuando fue consciente de nuevo, estaba destrozando una de las habitaciones de la Casa de los Gritos. No quería ver a nadie pero también reconocía que si hablaba con alguien todo se aclararía más rápido.
Cuando regreso al castillo, vio a sus amigos y paso de largo. Imagino que buscaría a Arlette, jamás a Severus.
Ambos habían terminado en la Casa de los Gritos, despotricando contra Malfoy y Black por diferentes y mismas razones.
Odiaban al otro que se beso con su amigo.
Y odiaban a su amigo por besar a ese y no a él.
—Espera… ¿Qué?— Remus no sabía si escucho bien o mal.
—Lo admito… ¿contento Lupin?— pregunto con sarcasmo —estoy enamorado del maldito rubio oxigenado de Malfoy por eso odio tanto a Black en estos momentos… Y… envidio a Reg y Barty— suspiro lo último.
—Ponte a la cola— dijo Remus con una sonrisa.
—Que sea amigo de Arlette no significa que olvide lo que me hicieron en quinto— advirtió.
—Yo tampoco creo olvidarlo— la mirada que tenia Remus casi doblega la manera de ser de Snape pero no dio a su brazo a torcer, ya era suficiente con una escenita el día de hoy —sabes…— empezó Remus luego de un momento —yo… yo recién asumo esto y bueno… no pensé que en verdad pasaría—
Severus bufo.
—Es obvio Lupin, actuaban como un par de recién casados, teniendo o no pareja el otro siempre lo celaba inconscientemente— Lupin abrió los ojos sorprendido —no me vengas con esas miraditas— advirtió —es más que obvio que te mueres… me atrevería a decir que desde cuarto, por los huesos de Black— se acerco y Remus se asusto. Jamás pensó ver como Severus hacia una cara insinuante —y Black desde un año antes—
Con eso se alejo y se fue a sentar no sin cierta reticencia a unas sillas que estaban en la habitación.
—Pero como siempre… ninguno daba su brazo a torcer, al contrario, salían con otras personas y es más que obvio que esto los hería mutuamente— Remus bajo la vista, todas las palabras de Severus eran ciertas y… ahora que lo escuchaba —el asunto Lupin— le llamo la atención —es preguntarte… ¿Qué harás?—
—Nada… no empezare con algo que nos destruirá de apoco— con eso salió de la habitación.
Severus bufo mientras negaba. Lupin podía ser un chico inteligente pero también le afectaba juntarse con ese par. Era un idiota pero Severus no le diría nada. Si las cosas le salían bien, ya otros se alegrarían y si no es que en verdad ninguno se esforzó.
Al terminar de pensar en esto sintió culpabilidad pero desecho eso inmediatamente. Su situación era diferente a la de Remus.
El estaba enamorado de Malfoy y sabía que tenía que resignarse. Se casaría con Narcissa y con la suerte de él, terminaría siendo el Padrino del hijo de ambos. Viendo a su amor desde lejos y consumiéndose en la miseria de apoco, tal como llevaba lo de Lily.
La amaba pero también reconocía que por sus palabras y acciones la perdió, ya estaría con alguien mejor que la mereciera. Por esto odiaba a James por estar con Lily y no ser suficiente para ella. Severus creía que Potter tendría que demostrarlo con hechos y acciones, no solo palabras y “poemas” que decía en cualquier momento, fuera el adecuado o no.
Para la noche ninguno vio a Remus. Sirius estaba preocupado por lo que fue a buscar a Arlette, solo al verla dormida se entero de lo ocurrido.
Llevaba casi un mes con problemas para descansar, pareciera que algo la consumía de apoco y que esto le agotaba.
Por lo que dormía la mayoría del tiempo.
Remus vio salir a Sirius pero se obligo a no preguntarse la razón. No quería saber nada acerca de él.
—¿Qué pasa Remus?— pregunto Peter que estaba en la cama sentado leyendo una historieta cuando Lupin entro.
—Le odio Pet… y no pensé que odiaría tanto verle besándose con esa serpiente pero tranquilo… jamás me veras compartiendo esos labios. Que Sirius Black se vaya a la mierda— con eso cerro los doseles y hechizo su cama.
Peter quedo helado sin entender nada. Llevaba tiempo estudiando por los EXTASIS y ahora resultaba que… ¿Remus estaba enamorado de Sirius y que este se beso con una serpiente? Ya debería hablar con James para entender que ocurrió pero antes… a practicar el ultimo hechizo.
—DIRECTOR— alzo la voz Sirius para despertarle, con suerte la gárgola se corrió.
Unos pasos y algunas cosas se escucharon al interior y un cansado y ojeroso Albus abrió la puerta.
—¿Qué ocurre muchacho?— pregunto antes de bostezar.
—Estoy preocupado por Arlette— Albus asintió.
—Trabajo en eso…— Sirius entendió el porqué la apariencia de Dumbledore, asintió más tranquilo pero antes de marcharse una mano en su hombro le hizo detenerse —debes explicar lo sucedido… al parecer el joven Remus con alguien más estuvieron en la tarde en la Casa de los Gritos desahogándose— sin más cerro. Albus y sus incertidumbres.
Sirius abrió los ojos y corrió para llegar a la habitación. ¿Remus le vio?
Cuando abrió la puerta busco la cama de Remus pero todos los hechizos que se veían dejaban en claro que no quería que le molestaran. Resignado fue a dormir, tendría que si o si hablar con él en la mañana.
—¡¿Sirius qué?!— chillo Peter cuando James le explico todo.
Black nuevamente fulmino a su amigo. Estaban en el comedor en el almuerzo. Sirius llevaba toda la mañana queriendo hablar con Remus pero este le evitaba.
—REMUS— dijo molesto.
El mencionado le ignoro. Estaba a cuatro puestos alejado de los otros Merodeadores.
—Calma Sirius. Remus ayer te vio con Malfoy y ahora te odia y se aleja de ti ya que asumió y declaro que no tendría nada contigo pese a que te quisiera— los otros dos abrieron los ojos —un pajarito me explico un poco mas y me dejo de informante— sonrió.
—Arlette— dijeron dos de los otros tres (si contamos al que estaba cuatro puestos más allá).
—Espera…— empezó James.
—¿Me amas?— dijo un ilusionado Sirius. Remus le mostro el dedo medio —¿QUÉ OCURRE CONTIGO REMUS LUPIN?— pregunto cabreado.
—¿QUÉ OCURRE CONTIGO, BLACK?— pregunto en respuesta Lupin.
—Pues que te amo y recién ahora vengo a aceptarlo y decírtelo a la cara— se paró molesto de la mesa solo para verle.
—Extraño que lo aceptaras luego de tener la lengua de Lucius en tu garganta— contraataco.
—Pues ahora te lo confieso a ti y te lo digo mirándote a los ojos.
—Eso no sirve de nada… ahora te llamo la atención Sirius pero reconócelo… en un tiempo más te aburrirás y buscaras a alguien más.
—Si fuera por eso… hace años que… ¡tendría PAREJA!
—Claro… y por eso ahora vienes a declárate, ahora que termine con Aaron por TU culpa— Sirius abrió los ojos extrañado… ¿su culpa?
James y Peter miraban a uno y luego al otro. Mejor no decir nada por ahora.
—¿MI CULPA?— pregunto sínicamente —¿Cómo, si se puede saber?—
—De la misma forma que has saboteado todas mis relaciones… ¿no te parece?— completamente seguro no estaba en estos momentos pero confiaba en lo que le dijo Severus.
—Si— admitió.
—Y lo dices así… tan… tan tranquilo— el sarcasmo y cinismo se apoderaban de la lengua de Lupin.
—Claro… odiaba verte con otra persona que no fuera yo y no sabes cómo me puse cuando te vi con una ¡MUJER!— levanto los brazos indignado.
—Lo dice quien ha pasado con la mitad del alumnado femenino— peligro, peligro…
—¡QUE NO HE ESTADO CON NADIE…!— grito colérico y luego tomo a Remus del uniforme cuando este rodo los ojos incrédulo —¡QUE SOY VIRGEN POR LA MIERDA…!—
—Yo igual— dijo con sarcasmo —como todo Hogwarts— alejo la mano de Black que lo retenía —entiéndelo Sirius, serás mi amigo pero te conozco y pese a todo, te conozco muy bien… y para que ahora tengas un puto síndrome de Estocolmo queda más claro lo poco que te importo. Seamos honestos, esto no durara—
—VERAS QUE SI— amenazo.
Remus negó.
—Lo siento Sirius pero no puedo seguir con esta farsa…— con eso se marcho.
—Huyes como un cobarde— escupió a lo que Remus se volteo.
—Huyo porque en comparación tuya yo te he hecho menos daño y no olvidemos que lo que has hecho es por culpa de otras personas o de tus propios monstruos o miserias… imagina lo que ocurrirá si es que llegamos a estar juntos. Lo siento Black… pero yo no podre mi vida en riesgo por ser solo tu simple juguete…—
—No eres mi juguete…
Remus rio —Recuerda todo desde que empezamos Hogwarts, como me trataron al principio por no ser como ustedes, tuvieron que llegar a segundo para entenderme y que paso… adoptaste un perro para que la mascota de mis Padres no estuviera sola pese a que sabes que podría morir. Solo he sido tu entretención Sirius… mejor vete con tu familia…—
—Mi familia es la mierda que no quiero… entiéndelo.
—Entiéndeme tu a mí, no quiero sufrir por tu culpa, no más de lo que ya he sufrido— dijo un muy mal Remus —no soportaría tener que pasar por lo mismo— Sirius entendió que hablaba de su secreto.
Sirius despertó cuando James lo empujo para sacarlo del comedor y dejar de ser el centro de todas las miradas.
Mal lugar para hablar de todo eso.
Cuando Arlette se entero por parte de una compañera de cuarto de lo sucedido, se odio. Podría haber ayudado pero ahora resultaba que Remus estaba mal y que Sirius no sabía cómo arreglar la situación y demostrarle que pese a todo, la relación vale la pena, que no es como los demás y que aun en las noches de Luna Llena, llora siendo Padfoot por todo lo malo que ha hecho y por todo lo que debe sufrir Remus.
Y Arlette sabe que el mismo Moony llora por tener que dejar las cosas así, cuando ya reconoció un Remus que ama a Sirius, quizás aun no tanto como se aman Moony y Paddy.
Continuara...