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La cuenta regresiva, la vida sin ellos por DanyNeko

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Notas del capitulo:

Aquí traigo la primera secuela de “No es un adiós, sino un hasta pronto”
Yugi, Ryou y Malik empezarán una nueva vida, ahora todos juntos en Domino, empezarán las clases, llevaran una vida normal como estudiantes, el único problema con eso es que ellos no son chicos normales, son hikaris y sin sus yamis no está completa su vida. Tendrán que superar muchos sentimientos antes de tomar su decisión. Tendrán que aprender a vivir sin ellos. Será una prueba para sus almas. ¿Serán capaces de superarla?

Ni las canciones que utilice ni Yugi-oh! No me pertenece si fuera así esto lo estrían viendo como capítulos en televisión xD

En el capítulo anterior

─No quiero.

─ ¿Qué cosa Koi?

─No quiero que te vayas.

─Ni yo quiero Koi, pero por ahora no hay nada que hacer al respecto. No te pongas así mi niño. No desesperes, algo me dice que pronto alcanzaremos el final feliz de esta historia.

─ ¿qué te hace pensar eso?

─Es… un presentimiento.

─Tú y tus muy precisos presentimientos, si lo dices de verdad entonces así será.

─Ten fe de que así será aibou, así será.

─Te amo.

//

─ ¿Tú también?

─ ¿Bakura?

─ ¿Qué? ¿Esperabas al ojón?

─ ¿Alguna idea de lo que hacemos aquí?

─Estamos igual de informados que tu Marik a menos que aquí, su majestad sepa algo que nosotros no.

─Han sido traídos aquí porque los hikaris no son los únicos ligados a las pruebas, en esta ocasión se trata de ustedes.

─ ¿De qué hablas?

─La siguiente prueba será llevada a cabo.

─ ¿De qué se trata en esta ocasión?

─Esta vez ustedes regresaran a su inicial forma de espíritus ligados a los artículos del milenio, pasarán el día con su contraparte pero ellos no se enterarán.

─ ¡¿Qué?!

─Ellos no podrán escucharlos ni verlos de ninguna forma, como en una primera oportunidad su comportamiento fue evaluado en esta ocasión será con ellos.

─Entendido.

─Esto pronto llegará al final… para bien o para mal.    

//

─Mmmm ¿neko?

─ ¿vas a decirme que te pasa?

─ ¿Cómo sabes que me pasa algo?... quise decir…

─ ¿me crees ingenuo o algo? Se te nota en la cara perro.           

─Seto… ¿Qué… qué soy yo para ti?

─…serás solamente mío ¿te quedo claro? soy muy territorial y no pienso compartirte con nadie ¿aun así… serías MI cachorro?

─Si tú eres MI Neko.

─lo tienes.

─Mi amado Neko.

-o-

Yami abrió sus ojos luego de notar que la cegadora luz que lo había envuelto junto a Bakura y Marik había cesado, miró a su alrededor viendo un lugar en el que hacía mucho tiempo no estaba, el laberinto que era su habitación mental en el rompecabezas del milenio. Se sentía realmente extraño el volver a estar allí después de tanto tiempo, se acercó a la puerta principal y salió viendo frente a él la habitación mental de Yugi, con algo de timidez la abrió y entró, viéndola diferente a las veces anteriores, no sabía exactamente que era pero notaba algo diferente, incluso la sentía más cálida y acogedora.

Se acercó a una pequeña mesita que había en el lugar, sobre esta había varios portarretratos de un tamaño considerable. Tomó uno celeste: estaba Yugi con la pandilla, todos con traje de baño. Tomó otro blanco: Yugi con sus primas y los gemelos. Tomó otro amarillo: Yugi con Malik y Ryou, los tres enseñando orgullosamente sus artículos milenarios (N/A: *-* https://41.media.tumblr.com/39ce6ef5eaf12d7b44300eb422d49ff1/tumblr_mhc3wuk3Wn1s3idxeo1_500.jpg ) frunció un poco el ceño. Tomó uno diferente, tenía forma ovalada y era rojo, sus ojos se abrieron como platos: Era una foto compartida, una era de él y Yugi muy juntos con los gemelos en brazos, los cuatro tenían los kimonos de año nuevo y la otra de él solo con Yugi abrazados y notoriamente acaramelados. El marco estaba cubierto de corazones en tonalidades blancas y plateadas.

Yami miró las fotos un poco más con una dulce sonrisa hasta que sintió un pálpito en su pecho y la presencia de los otros dos yamis cerca, dejó el portarretratos en la mesa para salir del rompecabezas.

Apareció detrás de Yugi, quien caminaba entre Ryou y Malik con la mirada algo decaída, dos segundos más tarde Bakura apareció tras Ryou y Marik tras Malik. Ambos yamis le miraron, parecía ser que entre ellos si podían verse, lo que no pasaba con los hikaris.  

─ ¿esta noche nos quedamos en mi casa? ─preguntó tímidamente el albino mientras iba con sus mejores amigos camino a clases, llamando la atención de los cinco.

─Por mí no hay problema ─le respondió Malik con una sonrisa, Marik frunció un poco el ceño.

─Claro, pero yo los alcanzaré más tarde ─se excusó el tricolor menor, Yami lo miró atento.

Malik y Ryou lo miraron curiosos ─ ¿y eso? ─preguntó el moreno.

Yugi jugueteó un poco con sus dedos índices al responder ─voy… voy a ir a pasear con Uky después de clases ─respondió.

Bakura y Marik soltaron las carcajadas y los comentarios de burla para con Yami quien solo gruñó audiblemente molesto -cofcof celoso-

─ ¿Vas a salir con él? ─preguntó Ryou enfatizando el “salir”.

─Si ─respondió, luego se dio cuenta del doble sentido en las palabras de Ryou ─… bueno, salir de manera literal, no es una cita ─se defendió.

─Si tú lo dices ─Ryou compartió una risilla con Malik cómplice.

Yugi hizo un puchero antes de recibir un abrazo de sus mejores amigos olvidando rápidamente el asunto, cosa que claramente no ocurrió con los yamis; Bakura y Marik seguían molestando a Yami, quien tenía que hacer uso de toda su paciencia.

─ ¿Y donde van a ir? ─preguntó Malik.

Yugi se alzó de hombros ─ni yo lo sé, anoche me mandó un mensaje diciendo que pasaría por mi después de clases y me llevaría a pasear ─relató ─le pregunte donde y solo me respondió “es una sorpresa” ─dijo haciendo las comillas con los dedos ─él siempre fue mucho de hacer eso ─recordó con una sonrisa.

Los tres entraron en la escuela sin tener ni la más mínima idea de que sus yamis estaban con ellos.

Durante el transcurso del primer bloque de clases los tres hikaris se notaban sumamente distraídos, en especial Malik y Yugi, por otro lado Joey había llegado con más energía que nunca.

La ultima clase antes del receso era artística, el profesor parecía estar de mal humor por lo que dejó a sus alumnos hacer un dibujo libre mientras él salía del salón a hacer sabrá RA qué.

De inmediato en el salón se formaron los clásicos grupitos de amigos, la pandilla se juntó enseguida. Joey, Tristán y Duke estuvieron parloteando mientras hacían tonterías, Ryou tomó los audífonos de su móvil, los conectó y le pasó uno a Malik que era el más cercano a él viendo que Yugi estaba “entretenido” garabateando algo en la parte de atrás de algún cuaderno.

Llevado por la música Ryou terminó dibujando un par de cisnes en un estanque, cuyos cuellos entrelazados formaban un corazón. Al verlo Bakura sonrió un poco y recostó su frente por la espalda de Ryou, el menor no lo sintió para nada pero si sufrió un pequeño escalofrió. En el borde del dibujo con letra muy chiquita escribió el nombre de su yami, algo ruborizado.

Malik, por su lado, dibujo una bella puesta de sol tras una cadena de montañas. Marik lo observaba recostado en la espalda de su luz, pasándole los brazos por sobre los hombros, Malik tampoco lo sentía pero si se mantuvo con una pequeña sonrisa todo el tiempo.

Yugi, después de garabatear un poco el rompecabezas del milenio y el nombre de Yami en la parte de atrás de su cuaderno de historia se decidió por dibujar el oasis que había visitado en uno de sus sueños-visiones con Yami. El faraón lo observaba con una sonrisa y de vez en cuando dejaba suaves besos en las mejillas de su novio. En cada una de las ocasiones que Yami le besaba, Yugi sonreía levemente aunque no lo sintiera realmente, eso a Yami le bastaba por ahora.

Habiendo terminado su dibujo, Yugi se giró a ver hacia la ventana apoyando el mentón en su palma derecha, cuyo brazo apoyaba el codo en su escritorio.

Ryou que ahora solo se distraía en la música desvió la mirada hacia su amiguito tricolor y lo vio en esa posición con una expresión decaída y pensativa, le miró preocupado, codeó a Malik disimuladamente y cuando obtuvo su atención cabeceó hacia Yugi. Malik se giró a verlo sintiendo la misma preocupación, regresó su vista al albino pensando en que hacer para ayudar a su amiguito. Ryou le quitó el audífono y le susurró algo al oído, Malik asintió y Ryou le volvió a acomodar el audífono.

Bakura y Marik gruñeron al ver la complicidad que tan naturalmente demostraban sus luces. 

La campana sonó anunciando el periodo libre a todos los estudiantes, los del salón 2b entregaron sus dibujos en la mesa del profesor, justo cuando este venia entrando.

Fueron a comprar sus almuerzos pero Malik y Ryou se excusaron con los demás llevándose a Yugi con ellos hacia la azotea. Los yamis vieron la escena extrañados.

─ ¿Qué pasa? ─preguntó Yugi una vez llegaron al lugar.

─Eso deberíamos preguntarlo nosotros ─dijo Malik mientras los tres se sentaban en el lugar, abrieron una bolsa de galletas y las dejaron al alcance de los tres.

Yugi les dio una pequeña sonrisa decaída que no le llegó a los ojos ─nada nuevo para un día como este ─les respondió a sus amigos.

Ryou y Malik le miraron con comprensión. El albino, que estaba sentado a su derecha le paso un brazo por la cintura y lo atrajo hacia sí, dejándolo casi recostado contra él.

─Ryou, no es… ─quiso zafarse pero su amigo no se lo permitió.

─Tu quisiste animarme la vez pasada ─le dijo recordando como Yugi le había recibido en brazos cuando estuvieron en casa de Malik ─déjate consolar ahora que lo necesitas ─le dijo en un suave murmullo, meciéndose levemente.

Los ojos de Yugi temblaron y sin decir más se acomodó mejor en el abrazo de Ryou, Malik que estaba a su izquierda se acercó un poco más acariciando los mechones del tricolor.

─Todo estará bien, ya verás que si ─le murmuró el egipcio. Yugi sólo se acurrucó más en Ryou soltando unos ahogados sollozos.

Bakura se sentó en el piso al lado de Ryou recostándose a su costado, el menor volvió a sufrir un leve escalofrío. Marik hizo lo mismo al lado de Malik, el chico cerró los ojos con una pequeña sonrisa. Yami sólo se quedó arrodillado frente a Yugi con una expresión preocupada e impotente.

─Aibou.

─Se ha dormido ─comentó el albino, efectivamente el menor se había quedado dormido en brazos de Ryou.

─Hablando de llorar hasta quedarse dormido ─dijo con algo de gracia Malik. Ryou le dio un pequeño beso en la sien al tricolor para luego recibir un par de galletas de manos de Malik para evitar moverse y despertar a Yugi.

Estuvieron así el resto del descanso, de vez en cuando Ryou retomaba su mecer y le tarareaba alguna tonada a Yugi.

…El sonido de la campana despertó a Yugi de su cómoda siesta en recostado en Ryou, se restregó los ojos y bostezó tiernamente, se estiró un poco y le agradeció a sus amigos el haberlo cuidado mientras dormía, se comió unas pocas galletas que quedaban y regresaron a clases.

-o-

Estaban en la última clase: música, pero ni la suave melodía del piano relajaba a Yugi. Seguía garabateando el nombre de Yami junto al suyo en la última hoja su cuaderno. Yami se recostaba contra él acariciando el cuello de su luz con los labios y la nariz. Yugi de vez en cuando se llevaba la mano izquierda al cuello acariciándose inconscientemente sintiendo pequeños estremecimientos.

La ultima campanada sonó al fin y con ella los alumnos de la preparatoria Domino se dispusieron a salir del lugar. Yugi desvió un momento la vista por la ventana mientras guardaba sus cosas en la mochila, y alcanzo a ver una larga cabellera verde claro en la entrada de la institución, dejó lo que hacía y se apegó a la cristalera de la ventana viendo a su amigo esperándolo ─Uky ─murmuró.

─Grrrr ─gruñó Yami viendo también al oji-naranja.

─ ¿Qué? ¿Ya vinieron por ti? ─le dijo Malik con una risilla, pasándole su mochila ya lista. Ryou también rio por lo bajo.

Yugi enrojeció un poco e hizo un puchero tomando su mochila ─graciosos ─les sacó la lengua infantilmente antes de dirigirse a la salida seguido por ellos.

Al llegar al portón Ukyo lo esperaba recostado casualmente contra la pared, vestía una camisa magenta bajo la larga chamarra negra y un pantalón negro, además de su boina, llevaba una mochila en un hombro y usaba unas gafas de sol de marco plateado, cuando vio a Yugi acercarse se retiró las gafas y le regaló una sonrisa. Yugi avanzó los últimos paso corriendo y al llegar frente a él lo abrazó por el cuello con una bella sonrisa ─Uky nii-chan ─saludó.

─Owww como extrañaba escuchar eso ─le dijo el peliverde alzándolo y dándole un giro al menor entre risas ─ ¿Cómo está mi pequeña estrella? ─preguntó.

─Bien ─le dijo con tranquilidad separándose del abrazo ─ ¿y tú?

─Feliz de verte mi dulce ototo* ─le da un beso en la frente.

─No se tu pero me da que ya te tienen remplazo A-tem ─se burló Bakura enfatizando su nombre. Marik rio y el faraón gruño.

─Permíteme ─le tomó la mochila y se la puso al hombro libre ─ ¿vamos? ─Yugi asintió.

Los cuatro se pusieron en marcha.

─ ¿Qué tal las clases Yuu? ─preguntó el peliverde.

─Normal─le respondió el menor ─ ¿qué hay de ti? ¿Estás en último año, no? ─Ukyo asintió ─ ¿no deberías estar en clase? ─sonó más a un regaño que a una pregunta.

Ukyo ahogó una risilla ─hoy y mañana no tengo clases Yugi, por eso mismo vine a acompañar a mi padrino ─le dio un guiño.

─ ¿Qué está haciendo mi tío hoy? ─quiso saber.

Ukyo fingió un estremecimiento y puso los ojos en blanco ─estaba de acaramelado con su prometida ─dijo con gracia ─no quise importunarles su ‘intimidad’ por eso también quería salir contigo el tiempo que pasara aquí ─explicó ─ pero no quisiste salir conmigo ayer ─le reprochó con un puchero.

Yugi soltó una risilla ─lo siento pero ya tenía planes de pasar todo el día con Atem ─dijo alzando el mentón.

Yami mostró una sonrisa de superioridad al oír a su aibou.

Ukyo torció levemente el gesto ─hablando de eso ¿Dónde están los otros tres chicos que estaban con ustedes anteayer? ¿Qué no estudian contigo?

Yugi negó ─nop ─respondió sencillamente. Ukyo arqueó una ceja, quiso preguntar más pero fue interrumpido por los dos hikaris que venían unos pasos atrás de ellos, metidos en su propia conversación.

─Bien, nos vemos después ─habló Malik cuando llegaron a la intersección de siempre.

─Si, los llamaré más tarde ¿ok? ─respondió Yugi, yendo a darles un abrazo a sus amigos.

─Okey, hasta la noche Yugi, ten cuidado ─pidió el peliblanco.

─No tienen de que preocuparse, les prometo que voy a cuidarlo bien ─les dijo el oji-naranja con un guiño pasándole un brazo por los hombros a Yugi. Los dos hikaris se despidieron de Ukyo con la mano. El tricolor y el peliverde siguieron su camino con Yami al pendiente, quien estaba más aliviado de no tener las constantes burlas de los otros dos yamis.

─ ¿Te preocupa? ─preguntó Malik a Ryou mientras veían a los dos chicos alejarse.

─No sé, eso solo…  como un presentimiento ─le respondió, miró el camino a su casa y suspiró con desgano. Malik lo miró comprensivo y le pasó un brazo por los hombros ─ ¿Malik?

─ ¿Quieres venir a mi casa? ─preguntó con algo de timidez. Marik frunció el ceño ─po-podríamos dar una vuelta por el parque más tarde ¿no crees? Mientras esperamos que Yugi termine su ‘salida’ ─hizo las comillas con sus manos causando la risa de su amigo.

Ryou lo miró curioso, parpadeó un par de veces para luego mostrarle una bella sonrisa a su amigo ─Si, muchas gracias Malik ─le dijo dándole un abrazo y un beso en la mejilla.

Así ambos hikaris se dirigen a la casa Ishtar totalmente inocentes de la molestia de sus yamis, sin embargo tras apenas haber caminado una cuadra alguien les llama la atención.

─ ¿Ryou-san? ─oyeron a sus espaldas, ambos chicos se dan la vuelta imitados por sus yamis, se puede ver a un chico un poco más alto que Malik con el mismo uniforme azul de la preparatoria, llevando una playera gris pálido debajo y unos tenis del mismo color, su cabello era corto y alborotado de color vino tinto y sus ojos grises. Los yamis lo ven intrigado pues sus hikaris parecían reconocerlo. Malik se puso serio de repente.

─ ¿Hmm? ¿Aizawa-kun? ─”saludo” Ryou reconociendo al chico de tercer año. Bakura lo observó con una fiera mirada de cazador.

─Hola ¿Qué hacen por estos lares? ─preguntó amablemente el chico mirando especialmente a Ryou.

─Íbamos camino a casa ─respondió Ryou viendo la poca comunicación del egipcio a su lado.

─No sabía que vivas por aquí, Ryou-san.

El albino negó ─en realidad voy a casa de Malik.

─Así es ¿se te ofrece algo? ─preguntó con cierta evasividad el egipcio pasándole un brazo sobre los hombros a Ryou de forma territorial, atrayéndolo hacia sí.

─Si sigue viendo de esa manera a Ryou voy a arrancarle los ojos ─gruñó el yami albino, sus manos empuñadas temblaban.

─No, no quise importunarlos, mis disculpas ─en todo el rato el chico no apartó la vista de Ryou, no miraba para nada a Malik.  El egipcio menor tensó la mandíbula casi gruñendo, incluso enseñó parcialmente los dientes ─nos veremos después… Ryou-san ─le dedicó un insinuante guiño al albino antes de tomar su camino. Ryou lo despidió con una mano.

─Maldito hijo de… ─Marik tuvo que coger de los brazos a Bakura pues parecía que el yami albino estaba a punto de saltarle encima al estudiante y ninguno era consciente de lo que podrían llegar a hacer aun en esa forma.

─Cálmate ya bolita de nieve.

─ ¿Eso era necesario? ─le pregunta Ryou a Malik arqueando una ceja.

─Contigo, sí ─respondió aun algo tenso. Ryou lo miró indignado ─por favor Ryou, ese chico te come con la mirada cada vez que te ve, es como si le parecieras comestible ─le reclamó mientras retomaban su andar.

─Bien dicho Malik ─murmuró Bakura apenas zafándose del agarre de Marik.

─Eso no es verdad Malik ─le refutó el albino frunciendo apenas el ceño.

─Por supuesto que lo es, es tan descarado que casi te desviste con la mirada ─respondió relajando un poco su postura ─y no me mires así, yo solo te cuido.

─Nota mental: agradecerle a Malik ─susurró para sí.

─Pero…

─No ─le detuvo ─Piensa que hubiera sido Bakura con quien estabas, él le fuera dicho un par de cositas bien dichas a ese chico.

Ryou abrió la boca para decir algo pero se detuvo, fuera cierto o no lo que decía Malik, Bakura era realmente celoso y no hubiera dudado en plantarle cara a su compañero.

Ryou asintió ─pero tienes que admitir que eres un exagerado, Aizawa-kun no me ve de esa manera ─insistió.

─Yadonushi ─negó con la cabeza ─Eres demasiado inocente con estas cosas.

─Tienes razón, no te ve de esa manera ─Bakura y Ryou lo miraron extrañados ─ ¡si no mucho peor! ─Bakura asintió de brazos cruzados

─ ¿Podríamos dejar de lado esto? Por favor ─enfatizó el ‘por favor’.

Malik suspiró ─está bien Ryou ─dijo viendo que ya llegaban a su casa ─pasa ─dijo abriendo la puerta.

-o- Mientras con Yugi.

─ ¿Qué te causa gracia Uky? ─preguntó Yugi viendo a su amigo contener una risita.

─Solo recordé algo ─le respondió, pero Yugi le miró insistente ─cuando éramos pequeños e íbamos a jugar solo tú y yo Akari nee-san siempre te decía “ten cuidado” y tú le respondías “no te preocupes porque Uky nii-chan me cuida”.

Yugi enrojeció un poco y Yami gruñó ─Y bien ¿vas a decirme a donde me llevas?

─De momento a tu casa ─dijo riendo.

─ ¡Uky! ─reclama con un puchero.

─Lo veras cuando lleguemos mi pequeña estrella.

Yugi resoplo inconforme pero no pudo decir nada más puesto que llegaron a la casa-tienda ─ ¿vamos por aquí o entramos por la tienda? ─ofreció.

Ukyo ladeó la cabeza unos segundos ─por la tienda, quiero saludar al abuelo Motou.

Yugi acepto y se dirigieron a la puerta de la tienda.

─Estoy en casa ─se anunció Yugi.

─Hola Yugi… ¿oh?

─Abuelo Motou ─saludó el peliverde con unas sonrisa─ ¿Cómo está?

─Ukyo, muchacho, que de tiempo ─saludó el anciano yendo a abrazarlo ─ ¿Qué tal estas? ¿Y tu madre?

─Muy bien todo, gracias.

─Me alegra oír eso ¿Qué andas haciendo por aquí?

─Vamos a dar un paseo, si no le molesta que me lleve a Yugi un par de horas ─dijo amablemente Ukyo.

─A mí sí me molesta.

─Para nada muchacho, espero que se diviertan.

─Bien, yo iré a cambiarme ¿me esperas o quieres venir mi habitación? ─ofreció Yugi.

─ ¡¿Qué?! ─rugió Yami.

A Ukyo le brillaron los ojos ─quiero ver tu cuarto ─dijo con emoción.

Yugi asintió y fue al interior de la vivienda seguido de Ukyo, subieron las escaleras y el menor abrió la puerta de su cuarto y dejo pasar a su invitado. Ukyo se adentró hasta el centro de la habitación observando cada detalle con una sonrisa.

─Que lindo ─le dijo a Yugi quien se había sentado en la cama ─es muy de ti.

─ ¿Qué se supone que significa eso? ─preguntó divertido, alzando una ceja. Ukyo fue a sentarse a su lado. Yami se sentó tras Yugi rodeándolo con sus brazos mirando de mala manera al peliverde.

─El azul rey siempre ha sido un color muy de ti, te gustaba por el mar y el cielo nocturno, de pequeño tu habitación era del mismo color y tenía nubes y estrellas estampadas ─dijo viendo el color en las paredes (N/A: sé que las paredes del cuarto de Yugi son de color celeste tirando blanco pero… digamos que lo remodelo xD) Luego se giró a ver a Yugi con una sonrisa, viéndole directo a los ojos.

Yugi parpadeo un par de veces y se sintió algo incómodo con la intensa mirada de su amigo por lo que le puso ambas manos en el pecho haciendo un poco de presión ─bien, sal ya, voy a cambiarme ─pidió el menor tomando su mochila.

─Lo oíste, salte ya ─gruñó Yami viendo con malos ojos la escena.

Ukyo se irguió y le dio un guiño ─claro, te espero abajo con el abuelo ─se inclinó a darle un beso en la mejilla y salió cerrando la puerta. Yami se puso rojo de molestia ante ese gesto.

Yugi soltó un suspiro, se levantó a poner el seguro de su puerta y luego fue hasta su armario para elegir su ropa.

─Yuuuuuugi ─la voz de Yami sonó como un pequeño lamento, era más duro de lo que pensó el estar con su aibou sin que este lo notara, Yami lo miraba desde la cama con los parpados caídos y unos ojos como de cachorro perdido ─Mi Kooooooi.

Yugi se sacó la chaqueta azul y empezó a rebuscar entre sus prendas. Hizo un puchero viendo unas tres remeras de manga larga, no sabía que ponerse y no quería hacer esperar mucho a Ukyo. Se probó por encima las tres frente al espejo.

Yami frunció el ceño ─ ¿Por qué te arreglas tanto para ir con él?

Finalmente Yugi se decantó por una remera negra en la parte superior que se degradaba hasta el plateado en la parte del vientre, tomó también un pantalón azul oscuro ceñido. Dejo todo en la cama para desvestirse. Apenas empezó a sacarse la playera negra que traía bajo la chaqueta del uniforme Yami se recostó bocabajo en la cama con cierto rubor en las mejillas. Por sobre todo el respeto a su aibou.

Espero unos tres minutos en lo que Yugi se ponía ambas prendas antes de darse la vuelta, Yugi se puso frente al espejo ajustándose la correa oscura de su cuello y poniéndose los aretes que Malik le había regalado, se puso unas manillas negras y plateadas en las manos y un cinturón plateado de doble hebilla (N/A: http://k37.kn3.net/taringa/5/6/8/5/8/8/9/adriangoes/B4D.jpg?3317 ) Miro unos instantes su cinturón extra de duelista con ambos mazos pero resolvió dejarlo en casa. Se arregló los mechones dorados y sonrió al espejo acomodando la cadena del rompecabezas. Tomo la pirámide dorada entre sus manos y la puso a la altura de su rostro. Yami al verlo se levantó para ir a su lado.

Yugi cerró los ojos y le dio un pequeño beso al artículo del milenio ─mi querido Yami ─el mayor se estremeció ─Ten siempre presente que te amo… mi faraón.

─Mi Yugi ─Yami lo envolvió entre sus brazos con fuerza, deseando que su pequeño lo sintiera, o tan siquiera poder decirle que también lo amaba ─yo también te amo, mi precioso niño.

Cuando Yugi abrió los ojos alcanzó a ver cierta sombra borrosa en el espejo a su alrededor, se sorprendió un poco y puso una mano en el espejo, pero aquello desapareció ─ ¿Yami? ─el faraón se sorprendió ¿su aibou lo había visto? ¿Qué significaba eso? Yugi agitó la cabeza para aclararse ─creo que un día de estos me vuelvo loco de tanto extrañarte… koi ─dijo con burla para sí mismo ─bueno, creo que va siendo hora de que baje ─acomodó una vez más su rompecabezas, tomó sus cosas y salió de la habitación para regresar a la tienda con Yami ‘flotando’ tras él, abrazándole por los hombros.

Al llegar Ukyo y el abuelo estaban conversando amenamente.

─Estoy listo ¿nos vamos? ─preguntó el menor haciéndose notar.

Ukyo lo miró y le silbó a modo de piropo ─Wow ─dijo con una sonrisa ─te ves muy bien ─aduló.

Yugi se sonrojó un poco ─Gracias Uky.

─Bien, vamos. Nos vemos abuelo Motou ─se despidió el peliverde.

─Tengan cuidado y diviértanse chicos ─se despidió el abuelo con una sonrisa viéndolos salir. Ver a su nieto con Ukyo le recordaba viejos tiempos, cuando ambos jugaban de pequeños y su hijos estaban bien y con vida (el papá y la otra tía de Yugi)

-o-

─ ¿Tienes hambre? ¿Te apetece algo de comer? ─preguntó Ukyo.

Yugi se llevó una mano al vientre recordando que apenas y había comido en el descanso por haberse quedado dormido en brazos de Ryou ─de hecho sí.

─ ¿Hamburguesas? ─tentó con una sonrisa. Yugi le respondió devolviéndole un sonrisa apenada ─bien vamos.

Ukyo los condujo a un pequeño restaurant de comida rápida a unas pocas cuadras y pidió por ambos, a sorpresa de Yami pidió la favorita de Yugi sin siquiera preguntar.

─Es tu favorita ¿o me equivoco? ─Yugi le miró con una sonrisa negando.

─Me sorprende que recuerdes detallitos como ese ─comentó mientras esperaban su orden.

─Recuerdo perfectamente todo sobre ti mi pequeña estrella ─le respondió mirándole con una sonrisa ─cuéntame de ti ¿Cómo te ha ido en estos años? ¿Cómo conociste a esos chicos?

─Bueno, estos últimos casi dos años han sido toda una locura, los torneos de duelo de monstruos y todo lo del ‘rey de los juegos’ ─le relató ─Ryou estaba en mi clase desde ultimo de secundaria pero no empecé a tratarlo sino hasta que fuimos al ‘Reino de los duelistas’ de Pegasus donde también conocimos a Bakura ─sonrió por un instante ─A Malik y Marik lo conocimos durante el torneo de Ciudad Batallas de Kaiba.

─ ¿Qué hay con ese Kaiba? ─preguntó apoyado el mentón en su palma ─Parece muy pesado, tengo entendido que los has vencido más que un par de veces y sigue empeñado en pelear contigo.

Yugi respondió con una risilla nerviosa asintiendo ─pesado no, lo siguiente ─dijo entre risas. La mesera llego con sus platos, le hizo un guiño al peliverde que fue ignorado por este al estar atento a Yugi.

─ ¿Qué hay de ese colgante? ─señaló al rompecabezas ─Es…

─Es precioso ¿verdad? ─lo tomó con una mano luego de darle un bocado a su hamburguesa.

Ukyo también dio un mordisco a la suya ─yo diría… algo peculiar ─respondió indeciso.

─Se llama Rompecabezas del Milenio, siempre lo llevo conmigo ─le dijo ─es mi tesoro, es algo preciado para Atem y para mi ─dijo con cariño sin darse cuenta.

─ ¿Quieres decir que él te lo obsequio? ─Yugi cruzó los dedos índice y medio tras su espalda con una sonrisita ─se podría decir que sí ─sonrió dulcemente. Yami también sonrió. Ukyo iba a preguntar algo, pero Yugi se le adelantó ─estas a poco de graduarte* ¿Qué quieres estudiar? ─preguntó antes de seguir comiendo.

─Como recordaras, amo la música mi pequeña estrella ─Yami gruñó como cada vez que el peliverde llamaba a Yugi así.

Yugi asintió recordando las muchas veces que ambos cantaban juntos, o que Uky le arrullaba para dormir ─ ¿estudiarás música? ─dedujo. Ukyo asintió con un brillo en los ojos, se notaba que la música le apasionaba.

Ambos terminaron su comida y pidieron la cuenta.

─Déjame ─hizo un puchero cuando Ukyo no le dejó pagar su parte.

─No ─alzó la palma ─Yo te traje, yo invito ─dijo pagando la comida. Yugi hizo un puchero pero no tuvo más remedio que resignarse. 

Salieron del lugar y Ukyo los condujo por otro camino ─ ¿Me dirás ya a dónde vamos?

─Ah, ah ─canturreó negando con un dedo y sonriéndole ─no seas impaciente, ven aquí ─le pasó un brazo por los hombros atrayéndolo en un abrazo cuando una ráfaga de brisa sopló con fuerza.

─Grrrr. Él es MIO ¡Yugi!

Cuando el viento dejo de soplar Yugi se separó de Ukyo para subirse al borde de una jardinera elevada, levantando los brazos para hacer equilibrio. Yami se elevó a su lado y le tomó la mano derecha. Yugi sonrió apretando leve e inconsciente esa mano.

─Ten cuidado Yuu ─le pidió el peliverde. El menor asintió.

─Y dime ¿dónde vives ahora? ─preguntó sin apartar la mirada del bordillo donde caminaba.

─En Tomoeda, como mi padrino ─respondió.

─ ¿Tomoeda? Eso está como a poco más de dos horas de Domino ¿cierto?

─Sí ¿Cuándo vas a visitarme ototo? ─preguntó con una sonrisa.

─Hmmm si no mal recuerdo cumple en Septiembre ¿verdad? ─Ukyo respondió afirmativamente ─bien, iré para tu cumpleaños Uky nii-chan ─prometió.

─ ¡Genial! Yo también intentaré venir para tu cumpleaños ─dijo el oji-naranja ─le pediré a mi padrino que me eche una mano.

─Me encantaría ─respondió Yugi. Pero a Yami no parecía agradarle mucho aquello.

Al llegar al borde de la jardinera Ukyo se adelantó y se puso de espaldas a Yugi ofreciéndole que se apoyara en él para bajar. Yugi apoyo ambas manos en los hombros de Ukyo y dio un brinquito pero antes de llegar al piso él lo sujeto por las piernas y se lo encimo en la espalda. Yugi se vio obligado a aferrarse de su cuello.

─ ¿Pe-pe-pero que haces? ¡Uky! ─le reclama el tricolor revolviéndose. Ukyo sigue caminando con una sonrisa mientras Yami lo fulmina con la mirada totalmente furioso.

─ ¿Quién te crees? ¡Bájalo ya!

─ ¿Qué te pasa? De pequeño te gustaba que te cargara.

─Ya no soy un niño ─reprocha mientras sigue revolviéndose ─ ¿quieres no hacer esto en plena calle? ¡Qué vergüenza! ─le golpeó levemente los hombros ─ ¡Uky-nii ya bájame! ─le gritó al oído.

Ukyo se vio obligado al soltarlo por el grito, Yugi se bajó y le miró molesto de brazos cruzados y Yami se apresuró a abrazarlo mirando mal al peliverde.

─Sigues teniendo eso buenos pulmones ─se quejó con gracia cubriendo el oído afectado con una mano ─No me mires así ¿Qué pasa con esa reacción?

─No vuelvas a hacer eso en público ─se quejó.

─ ¿Ósea que en privado si puedo? ─le bromeó con una mirada picara.

¡¿Qué?! ─gritaron ambos tricolores a la vez, Yugiapenado y sonrojado, Yami molesto e indignado.

Ukyo rio ─Jajaja pequeño que fácil te apenas ─señalo sus mejillas ─ ¿seguimos? Ya no falta mucho ─indicó. Yugi le miró aun molesto y siguió caminando tres pasos lejos del peliverde ─Oh encanto no te molestes conmigo ─intentó acercársele pero Yugi se le adelantó. Ukyo suspiro y sólo siguió caminando metiendo sus manos en los bolsillos de su chamarra.

─Mi adorado aibou ─se abrazó más a él.

A las pocas cuadras llegaron a un amplio parque, el sol se iba poniendo.

-o- Con Malik y Ryou.

En casa de Malik, él y Ryou jugaban con a Tennis de mesa de Wii Sport Resort con la Wii del moreno (N/A: un regalito de mi parte para Malik xD)

─Toma eso ─dijo Malik moviendo el control, lanzándole la pelota a personaje de Ryou.

─Hay te va ─le responde el albino agitando su control regresándole la pelota.

─Vamos en... empate ─dice volviendo a golpear la pelota con cierta dificultad.

─ 23 a 23 ─concuerda el oji-marrón ─el siguiente en anotar… ¡gana! ─dijo casi gritando la última palabra cuando, por poco, se le escapa la pelota.

Mientras tanto los dos yamis los observaban desde la cama.

─Gana mi hikari.

─Claro que no, gana mi yadonushi.

─Que no, va a ganar Malik.

─Y yo te digo que gana Ryou.

─Mi ángel es mejor con los deportes ─argumenta Marik.

─Ryou tiene más experiencia con los videojuegos ─rebaté Bakura.

─ ¡Game Over amigo! ─celebra Ryou cuando en la pantalla lo anunciaban como ganador.

Malik suspiro bajando los brazos para luego sonreírle a su amigo ─gran partido Ryou ─estira la palma.

─buena partida Malik ─le choca palmas con una sonrisa.

─ ¡Ja! ¡Te lo dije! ─se regodea Bakura.

─Fue suerte.

─Siiiii claro ─responde sarcástico rodando los ojos.

─ ¿Una partida de bolos? ─preguntó el albino.

Malik negó mientras movía el hombro derecho en círculos, Ryou hizo lo mismo, llevaban ya cierto rato jugando ─no, ¿vamos al parque? ─vio por la ventana que el sol estaba a nada de ponerse.

Ryou le vio curioso ─Claro, pero ¿Por qué tan de pronto quieres ir al parque?

Malik tomó de su escritorio un volante y se lo pasó ─el otro día me dieron esto, quería ir ─explico, los yamis se acercaron a Ryou para ver el papel.

Ryou miró el volante, anunciaba la presentación de una película al aire libre ese día después de la puesta de sol en el parque ─Suena muy bien ─dijo Ryou con una sonrisa ─hace tiempo que no voy a una de estas.

─ ¿Has ido antes? ─preguntó el moreno buscando algo en los cajones.

Ryou asintió ─en Halloween del año antepasado presentaron un par de películas de terror alrededor de la media noche, a Bakura le llamó la atención y fuimos a verlas.

─ ¿Películas de terror? ¿Te gustan?

Ryou sonrió algo apenado ─de hecho sí, lo que no me gusta es verlas sólo ─respondió.

Bakura sonrió recordando aquel Halloween, Ryou había pedido hacer el cambio durante las películas y se quedó muy apegado a él mientras ambos veían los films. Eso era lo que más le gustaba de ver una película de miedo, Ryou siempre se abrazaba a él o se le acurrucaba o cosas así, y al dormir siempre le pedía que se quedara en la cama con él.

─Ten ─Malik le tendió una remera verde azulado a Ryou, el albino la había dejado la última vez que hicieron pijamada en la casa del moreno.

─Gracias ─Ryou fue al baño a cambiarse. Malik ya tenía puesto una remera dorada y un pantalón de mezclilla.

Malik sacó sus cosas de su mochila para meter una manta dentro, un mantel para picnics. La puso en su escritorio y se sentó en la silla del mismo a esperar a Ryou, sin darse cuenta una de sus manos viajo hasta el colgante milenario, balanceando entre sus dedos el reducido dije.

─Mira, creo que está pensando en ti ─dijo con burla Bakura fingiendo estar conmovido. Marik hizo un gestó pero lo ignoró.

Al poco rato salió Ryou del baño, tomo un cepillo y se sentó en el borde de la cama de Malik a arreglar un poco su pelo, Bakura se le sentó detrás de inmediato. Ryou empezó a tararear una tonada Malik lo miraba con una sonrisa.

─ ¿Ángel? ─murmuró Marik para sí al ver a su hikari mirando fijamente a Ryou. Bakura miró a Malik con ojos fríos.

─ ¿Por qué me miras así? ─preguntó de repente Ryou.

Malik le sonrió más ampliamente ─me gusta verte cuando te pierdes así… porque empiezas a cantar sin darte cuenta ─explicó.

Ryou, algo sonrojado, se llevó una mano a la boca ─ ¿estaba cantando?

─Estabas tarareando ─corrigió.

─Oh ─Ryou abrió su boca en un perfecto círculo apenado. Malik soltó una risilla divertida.

-o- Con Yugi y Ukyo.

Yugi, ya más tranquilo y Ukyo estaban en los columpios, Yugi se mecía sentado mientras el peliverde lo hacía de pie en el asiento del columpio. (N/A: súper típico el chico que se mece de pie en el columpio ¿no? Por aquí sí xD) Ambos conversaban de los más ameno mientras el cielo ganaba tonalidades moradas y azules, declarando la proximidad de la noche. Las frías corrientes de aire mecían ambas cabelleras a su gusto mientras los dos chicos recordaban viejos tiempos. Yami mientras escuchaba atento muchas cosas de la infancia de su novio.

─Jajaja claro que me acuerdo de eso ─decía Ukyo ─estabas asustado y dijiste “me subiré solo si Uky nii-chan sube conmigo”.

Yugi hizo un puchero ─era la primera vez que subía a uno de esos.

─Al final te termino gustando ─le recordó.

─Si, fue divertido ─Yugi rio y el peliverde le acompañó.

Ukyo miró su reloj de muñeca ─bueno, creo que ya va siendo hora ─dijo con una sonrisa.

─ ¿Vas a decirme ya de que esa ‘sorpresa’ tuya? ─preguntó el tricolor.

─Te lo voy a mostrar ─se bajó de un saltó y le tomo de la mano ─vamos.

Yugi solo se dejó hacer, Ukyo lo llevó hasta el otro lado del parque donde un gran claro estaba siendo ocupado por una amplia pantalla blanca sobre una ‘pared’ y un reproductor de video, había como 4 manteles de picnics con parejas con grupos de 4 o 5 amigos. Cerca de la pantalla había una caseta donde 3 personas uniformadas parecían estar encargados de lo que parecía ser la presentación de una película.

Yugi observo todo feliz.

─ ¿Qué dices Yuu? ¿Te gusta? ─le preguntó Ukyo con una sonrisa.

─ ¡Hai nii-chan! ─dijo Yugi saltando a darle un abrazo al peliverde.

─Me alegra Yugi ─Ukyo le dio un besito en la mejilla.

Entre ambos acomodaron el mantel para picnics que Ukyo había traído en su mochila en un buen lugar ni tan cerca ni tan lejos de la pantalla y se acomodaron a esperar el inicio de la función.

Por otro lado Ryou y Malik iban camino al mismo parque…

Continuara… xD     

*Ototo: hermano menor.
*Si no voy mal, en Japón el año de clases termina a final Mayo: a finales de primavera.
          

Notas finales:

(28-02-2015: Quiero hacer una nota aquí, estoy escribiendo la parte de inicio de la ‘cita, no-cita’ de Ukyo y Yugi y tengo en la mitad de la pantalla la película de Chucky, es la primera vez que la veo y os juro por RA y todos los dioses egipcios que estoy psicoseada o.O)
¡Día de hacer sentir triste a Yami! Pongan #BullyingAYami  en los rws y animen al pobrecillo faraón.
YY: TnT Por que la coges conmigo?
Yo: por qué es divertidísimo xD

Jajaja, un saludo a Rina que me acabo de enamorar de su nuevo fic ‘Practical Jokes’ (Os lo recomiendo totalmente) y que gracias a ella mi petición sobre agregar a Yami Marik y a Yami Bakura a la lista de personajes de la página se ha cumplido *-*
B: ¡Ya era hora!
YM: ¡Gracias Rina!
Yo: ¡eres increible nena! Te Ilovieu mucho <3 Un gran abrazo!
Bueno, adiosa mi posdata y muchas gracias a todas las que me apoyaron con ella =3

Bueno, eso es todo por ahora.

Aquí estoy porque eh venido
Porque eh venido, aquí estoy
Y si no le gusta mi canto
Como eh venido. Me voy!

Nos leemos


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