Los sentimientos encontrados en el instituto van en aumento, las relaciones se van definiendo y nuevos retos se presentaran ante ellos, en el instituto Celes, la vida cotidiana, su paz y armonía a acabado desde el inicio de las eliminatorias para ser de los 10 seleccionados en participar en el torneo de magia en Azogar.
Las batallas se llevaban a cabo y los hechiceros y magos del instituto daban todo de sí, mas no solo el interés por participar en tan glorioso evento es el motivo principal, un rubio platino tiene planes con ciertos Hogo-sha que pertenecen a unos jóvenes magos de nivel mágico superior al estándar, en todo el instituto. Por lo que debe ser cauteloso y ver la manera de como arrebatarle a sus dueños a dichos Guardianes, mas él, no es el único interesado en estos Hogo-sha, un ser misterioso y tenebroso se oculta en las sombras, esperando el momento adecuando para capturar al Kuro-riu y el ultimo de los Heraldos, ¿su meta? Conseguir la espada del trueno a como dé lugar.
Las semifinales estaban a la vuelta de la esquina por lo que la tención crecía, el grupo liderado por Yuui estaba tranquilo sabiendo que tenían todas las de ganar, cada uno conseguiría su puesto en el torneo, mas también había varios competidores independientes que ansiaban llegar a la final y ser uno de los 10 mejores de Celes, Takahashi Misaki está en la recta final , venciendo aun y en contra de las expectativas de muchos a sus rivales, tal parece el joven oji verde se ha aplicado estas últimas semanas y gracias a las clases especiales de el gran Akahiko Usami, uno de los profesores del instituto con un nivel avasallador en las artes místicas, con sus técnicas de tele transportación y telequinesis ha hecho que muchos caigan a los pies de Misaki, pues el joven pupilo a mostrado ser digno sucesor de tan extraordinario telepata y hechicero.
Otro que ha dado un giro de 360° ha sido otro oji verde con sus grandes e increíbles conocimientos en alquimia y hechizos milenarios, su sinodal se ha dado a la tarea de prepararle rigurosamente, Onodera Ritsu ha dado un despliegue de gran domino de las artes obscuras, después de tantos y tantos entrenamientos intensivos por parte de su sinodal, el joven castaño a demostrado ser digno representante del instituto, su tutor el gran alquimista e investigador de los hechizos milenarios y secretos ocultos de la magia, el único e inigualable Takano Masamune, se siente satisfecho por el evidente avance de su protegido, mas sabe que aun no es suficiente por lo que lo tiene en constante entrenamiento.
Los favoritos y obvios para pasar sin ningún problema son el sucesor de el legendario mago Clow, el joven de ojos azul-mar Hiraguizawa Eriol y la inocente y bella Kinomoto Sakura, dado que esta ultima resulta ser la elegida por su familia para ascender al trono y tomar el lugar de su padre, para esto dicha pequeña deberá adquirir gran conocimiento de la magia, la alquimia, la cartomancia y la quiromancia, pues siendo ella una intérprete de sueños y premoniciones, dicha jovencita se le ha catalogado como la favorita de los Dioses, para llegar hasta ganar el torneo en Azgard.
En última instancia y no menos importante, esta un trió de chicos que han demostrado con grandes habilidades su dominio de los conjuros y ejecución de maleficios, al igual de grandes técnicas y control de los elementos, un futuro sacerdote espiritista y protector del reino de Nipón su hogar, el imponente Doumeki Shizuca, quien con su arco lanza grandes conjuros de disolvencia energética, creando grandes portales para eliminar así a sus oponentes enviando a sus Hogo-Sha a otra dimensión; seguido muy de cercas por uno de los favoritos de la directora del plantel , la gran hechicera de las dimensiones, la única y poderosa Ichihara Yuuko, esa bella mujer tiene todas sus expectativas puestas en él y un día no muy lejano llegara a ser su sucesor, un joven de ojos azul intensos, un chico que a pesar de su gran poder y dominio de las artes espiritistas, el control de demonios y seres obscuros, sigue comportándose como un chico que se niega a aceptar su destino y convertirse en el futuro director del instituto Celes, el excéntrico hechicero Watanuki Kimihiro, gracias a sus sensacionales pócimas y conjuros, así como por el potente poder que habita dentro de sí, ha conseguido nominar para ser uno de los 10 que irán a Azgard. Y el ultimo, pero no por ello menos importante, Li Xiao Lang el joven hechicero, proveniente de la casa Li y descendiente sanguíneo del gran Clow, un gran guerrero, con dominio en el control de invocación de los dioses de los elementos, así como el manejo de la espada espiritual, su gran determinación y absoluta concentración a la hora del combate le ha conseguido un puesto en aquella tan gran codiciada lista de los 10 mejores de Celes, Li se ha convertido en un duro adversario para todo aquel que intenta ostentar un lugar para ir al torneo, pues no piensa ceder ni un solo centímetro de su puesto, aun si con ello deba ganarse enemistades en todo Celes, a él eso no le importa, su único objetivo vencer y ganar el torneo, su gran decisión y su seguridad en sus habilidades lo hacen uno de los rivales más fuertes de vencer. Los elementos están bajo su mando y con su gran espada y su Hogo-Sha un lobo de fuego pretende ganar sea como sea el torneo a como dé lugar.
En uno de esos días tan tensos que se Vivian en Celes, un oji plata decidió dar un paseo para despejar su mente y librarse por un momento de su celoso y bello Amo Yuui, decide salir al pueblo para ver las novedades y quizás comprarse una que otra golosina que tanto le fascinan, mientras en el Instituto el bello anglosajón se le hacia un ocho el estomago, del entripado que le causaba saber que su Hogo-sha se fuese sin avisarle, a pesar de ser el su prometido y de que era su dueño, el pequeño de ojos plata simplemente seguía con su actitud de ser libre y sin rienda que lo frene, si quería salir salía, si quería algo lo hacía y si no deseaba hacerlo simplemente no lo hacía, aun y a pesar de los enojos y reclamos de su bello amo de ojos de cielo, Yuui D’ Flourite.
-----Estúpido, conejo blanco, pero que ni crea que esto se quedara así, ¡¡Ya verá ese desgobernado orejón!!, ¿Quién rábanos se cree que es para dejarme así sin avisarme? -
--¡¡Estúpido, estúpido, idiota!!---
- decía el rubio mientras caminaba por los pasillos del instituto, cuando se le presenta un retador inesperado quien le solicita un duelo, Yuui realmente estaba furioso y deseaba desquitar su frustración con alguien, más su retador solicito que el encuentro fuera solo con los guardianes, por lo que Yuui estaba en problemas ya que su muy amado Heraldo estaba fuera del instituto y no tenía ni la más remota idea de cómo llamarlo a su lado, ya que cuando le llamaba por la gema mágica simplemente nunca aparecía dicho chiquillo de ojos plateados.
----Si no llamas a tu Hogo-sha date por vencido, mi reto, mis reglas. --
---Si tu cobarde guardián, está oculto por ahí, evitando el encuentro, entonces olvídate de estar en la lista de los 10 grande de Celes------
Decía aquel chico con un tono de burla en su manera de hablar, Yuui le miraba con enojo e impotencia, ¿Cómo era posible que perdiera sin siquiera haber luchado? El rubio empuña sus manos y cierra los ojos conteniendo su frustración, esta por darse por vencido, dado que no tenía la mas mínima idea de cómo llamar a Owen, da un apesadumbrado suspiro y esta por rendirse; cuando como rayo cayó del cielo un extraordinario heraldo de alas platas, quien al aterrizar con aquella potencia que llevaba en su vuelo creó un cráter en el piso del instituto, sacando una enorme sonrisa a Yuui y sorprendiendo de sobre manera a el retador de su amado oji azul.
---Mis disculpas mi amo, heme aquí a vuestros pies para lo que ordene mi buen señor.----
Dijo con toda elegancia y seguridad el bello heraldo quien mostraba su apariencia original, mostrando aquellos largos y plateados cabellos, con sus imponentes alas y un físico espectacular, llevaba puesta una armadura plateada con detalles en negro, Yuui está encantado con aquella espectacular apariencia de su amado oji plata, el heraldo esta de rodilla en tierra a las ordenes de su amado amo, quien esta embelesado con su bello guardián, el retador de Yuui al ver tremendo Hogo-Sha duda en actuar, mas ya están en pleno reto por lo que no puede echarse para atrás.
La justa se llevo a cabo y en un abrir y cerrar de ojos el poderoso heraldo venció sin ningún problema a su oponente, haciendo correr al retador de Yuui al momento de ver cómo era vencido su Hogo-sha, Owen al vencer a aquel oponente de tan bajo nivel da un pesado suspiro, mas está molesto de que hayan osado retar a su adorado ojos de cielo cuando él no se encontraba presente, por lo que fue endemoniadamente cruel al momento de eliminar a su adversario, Yuui pareciera haber olvidado que estaba molesto con Owen, después de todo, el verlo en su manera original simplemente lo hacía alucinar, estaba tan encantado con tenerlo así que parecía estar flotando, se abraza a su Heraldo de su brazo derecho y le regala una gran sonrisa, ¡Owen esperaba todo menos que el rubio estuviese de buenas, pensó que lo retaría y le daría tremendo sermón quizás y hasta sus noches de pasión estarían en juego! Mas nada de eso paso, Owen debe dar gracias a vuestros padres por hacedlo tan buenmozo y sobretodo que el oji azul este completamente enamorado de su apariencia origina, que quizás si hubiese presentado con aquella tierna carita de no rompo un plato le hubiese dado un buen de retos que ¡¡dios os guarde la hora!!.
Owen opto por seguir así un por un rato más, así complacía a su bello anglosajón celoso y salvaba su pellejo, quizás de un terrible castigo por salir sin siquiera decir ¡agua va!, lo que apenas va conociendo Yuui de su querido heraldo es que el , es un alma libre, jamás ha sido un chico que le guste estar a las faldas de nadie, quizás sea disciplinado en sus deberes, pero su persona es un ser libre, alegre, que no permite le pongan frenos a sus acciones, si él quiere estar con Yuui a su lado lo hará, mas también si el apetece salir y despejarse, simplemente se marchara sin decirle a donde o porque, Yuui no es la clase de persona que este tampoco al constante de las personas, ni hostigarles, pero pasa algo muy interesante cuando se trata de su conejo blanco, solo con él y solo a él, lo cela y le molesta que alguien más le mire, lo desea solo para él y quisiera tenerlo atrapado en su regazo cual Golum con su precioso anillo. Mas el oji plata no es de ese mismo sentir, el si lo cela , pero solo con Ashura; pues sabe que ese hombre significa algo demasiado, mucho muy importante en la vida de sus ojos de cielo y eso le causa un gran coraje y no puede evitar querer borrar del mapa a ese pelinegro de ojos misteriosos.
Mientras que la parejita de rubios pasaban tiempo de calidad en los jardines del instituto y salvaba su ser el oji plata de la furia de su amado, otro rubio sufría de un ataque de celitis aguda, pues su muy querido amo Shibuya, se pasaba mas del día con el nuevo compañero de estudios Saralegui que con él y eso le reventaba el hígado, el oji verde no ve con buenos ojos a aquel rubio platino pero ¿como separar a su muy adorado amo de aquel hechicero? El ojos de felino, mira vigía a su azabache quien pareciera estar fascinado con el peli largo aquel, siente como le hierve la sangre quisiera hacerlo trizas, mas tiene que contenerse, sube a la copa de un árbol para buscar algo de calma y tranquilidad, mas eso no sería posible, el rubio platino se dio cuenta de que los observaba y en un movimiento más que accidental hace que Yuuri tropiece y caigan ambos; el azabache encima del peli platino, sus rostros quedan a escasos centímetros uno del otro, Wolfram no puede mas y estalla en celos, como de rayo baja de aquel frondoso árbol levantando a Yuuri de aquella comprometedora situación, con una venita a punto de estallarle en la sien, el oji miel le mira malicioso al rubio que lo mira con gran enojo, Sara sonríe parece que gracias a los terribles celos y lo estúpido de Shibuya podrá conseguir hacerse del Hogo-Sha de fuego y así conseguir al heraldo, pues ambos hermanos son muy unidos y casi puede jurar que lo que haga el oji verde le seguirá el oji plata.
---¡¡¿¿PERO QUE MIERDA CREES QUE ESTAS HACIEDO ESTUPIDO HENACHOKO??!!---
Le grita con gran molestia, mientras lo zarandea como si se tratase de un muñeco de trapo, le tiene sujeto por la solapa de su uniforme, sacudiéndole con fuerza mientras con sus hermosos ojos verdes casi se lo quiere devorar, para Saralegui esto es una oportunidad extraordinaria , sabe hora el punto débil de aquel demonio y solo basta un par de hechizos para hacer que caiga en su trampa.
---¡¡ATETETETETETETE!!! ¡¡NADA WOLF, TE JURO QUE NADA, SOLO TROPESAMOS FUE TODO!!---
responde con enérgica y potente voz, librándose del agarre de su Hogo-sha, si algo no tolera Shibuya es que lo hostigue de esa manera su guardián, le ama pero esos celos son demasiado asfixiantes y el no está para esas escenas, el oji negro está realmente molesto por el comportamiento de su Hogo-Sha.
----¡¡¿¿NADA??!! A ESO LE LLAMAS NADA, MALDITO TRAIDOR , TRAMPOSO, INFIEL!! ¿¿CREES QUE ESTOY CIEGO O ESTUPIDO?? SI TE ACABO DE VER ESTABAS A NADA DE BESAR A ESTE ESTUPIDO AFEMINADO!!!--
- decía con coraje el demonio, señalando a Saralegui; quien no le pareció para nada esa despreciativa descripción, por lo que frunce un poco el seño, Yuuri logra ver el descontento de su ahora nuevo amigo y enfurece en contra de su amado Hogo-sha, llamándole la atención.
---¡¡BASTA!!! YA ME TIENES ARTO CON TUS ESTUPIDOS CELOS, NO QUIERO QUE SIGAS A SI, O SINO YO…---
---¿¿TU QUE MALDITO PROMISCUO??--
--reta el oji verde a su amo.
---¡¡O SINO TU Y YO TERMINAREMOS DEFINITIVO!!---suelta aquello como balde de agua fría en la cabeza de rubio, que al escuchar que terminaría su relación fue un golpe bajo al amor incondicional que le tiene el oji esmeralda a su amo de ojos negros, el rubio aprieta los puños y los dientes tratando de ahogar sus reclamos y enojo, mientras no puede evitar temblar un poco con la simple idea de terminar su relación, realmente le dolería dejar a su amado oji negro, pero el simple hecho de verlo con aquel otro; simplemente los celos le cegaban.
El oji verde baja el rostro y es cubierto por bellos mechones dorados, mientras en un tono muy bajo le responde-
----Cuándo quieras terminar conmigo, no utilices escusas... simplemente di que no me amas, no será la primera ni la última vez que me lo digas, si ese es tu deseo... yo... yo, lo puedo cumplir ahora mismo.-----
Dicho aquello el moreno logro ver como un par de perlas cristalinas rodaron por las mejillas de su demonio, minutos antes que él se envolviera en una enorme llamarada roja y entrara al rubí del colgante de Shibuya, dejando al moreno con una sensación de vacío y angustia tan grande que hasta le dolía el corazón, sujeta con fuerza aquel colgante aprisionándole a su pecho sintiendo un terrible remordimiento que le rompe en pedazos el corazón, ha hecho llorar a su muy amado Hogo-sha y eso lo devasta. No tardaron en caer aquellas perlas cristalinas al pasto cuando sintió un oji plata un terrible palpito, escucho el corazón dolido de su muy amado Onii-chan. Se levanta de su acogedor lugar junto a su amado ojos de cielo, voltea con preocupación y un terrible presentimiento Yuui le mira extrañado.
---¿Qué pasa amor?--
- pregunta el rubio a su oji plata, quien solo dice con un deje de preocupación-
--O-Onii-chan…---
-sin pensarlo dos veces el heraldo despliega sus formidables alas y sale a toda velocidad, dejando a Yuui preocupado, el oji azul no piensa dejar que se valla solo esta vez y el también despliega sus alas y va a su encuentro, Yuuri está totalmente cayado mirando el pasto donde cayeron aquellas lagrimas de su amado Wolfram, ignorando completamente Saralegui, quien le observa con malicia y una sonrisa de lado en su rostro, mientras esta maquilando la manera de separar a aquellos dos. En eso Yuuri con su magia recolecta aquel par de brillantes lagrimas, convirtiéndolas en hermosos diamantes, los empuña en su mano mientras se dice para sí.
---¡Perdóname Wolf!, yo… no, no quise decir aquello, yo… por favor Wolf, no quiero volverte a ver llorar, ¡soy un estúpido!---
-- decía Shibuya, mientras Sara rodaba los ojos al ver lo ridículamente enamorado que estaba de aquel demonio, él deseaba que se separasen, quería para sí al demonio, lo ha buscado por largo tiempo y no piensa dejarlo ahora por un estúpido sentimentalismo, por un imbécil que aun no se da cuenta que tiene a uno de los Hogo-sha legendarios, Yuuri seguía lamentándose la manera que hizo sentir mal a su amado cuando de golpe llega un bello heraldo de ojos plata, aterriza a escasos milímetros de Shibuya, le mira con recriminación y un gran coraje se hace latente en sus lunas plateadas, Saralegui ha quedado ampliamente complacido al ver la verdadera forma del heraldo, esta extasiado con aquella poderosa presencia, el legendario jinete del dragón del trueno, el portador de la increíble espada Reí no satsujin-sha.
Yuuri voltea lentamente a ver a Owen, el cual esta colérico, sabe lo que tiene en sus manos, empuñando con fuerza cercas a su corazón, lo sabe bien, pues ese par de diamantes pertenecen a esos ojos que tanto adora, las lagrimas de Wolfram le queman el pecho a Owen cada que este las derrama, pues son hermanos y ellos tienen un vinculo único, que va mas allá de solo una complicidad de hermanos, Wolf le ha dado parte de su ser al alimentar con su sangre a Owen, por lo que ellos saben que siente el uno y el otro, Owen no ha dicho ni una sola palabra, solo le mira fijamente con aquellas lunas plateadas, al poco tiempo aterriza Yuui, está confundido no comprende por qué salió así de tempestivo y sin decir razón de su lado y menos el que ahora mismo vea con aquellos ojos llenos de furia a Shibuya, Owen aprieta sus puños está a punto de tumbarle todos los dientes a Shibuya de un solo golpe, Yuui se ha quedado petrificado al ver la furia que reflejan aquellos ojos de su amado Owen, Sara sigue fascinado con el espectáculo que le brindan estos dos, esta por asestar el golpe, mientras Yuuri sigue mirándole sin mover ni un solo musculo, cuando esta a escasos milímetros el puño de Owen del rostro de Shibuya, una enorme llamarada roja envuelve a Yuuri, protegiéndole de todo mal, apareciendo Wolfram detrás de Yuuri rodeándolo con uno de sus brazos y con el otro detenía el potente ataque de Owen, la mano de Wolf tiembla por la energía que está tratando de diezmar, para así detener el ataque de su hermanito.
---¡¡¡NO TE ATREVAS OWEN!!!!--
-- el oji plata escucha la voz de su Onii-chan, que le replica por intentar lastimar a Yuuri, el oji plata se contiene y detiene su furia contra Shibuya, Yuuri escucha y siente el brazo protector de su amado demonio, le toma su mano mientras le sigue protegiendo, da un pesado suspiro Shibuya y gira un poco su rostro hasta donde el de su oji verde quedando casi de frente a él.--
----No lo detengas Wolf, después de todo me lo merezco, te he lastimado, es lo mínimo que merezco.---
-- dice Yuuri con una mirada tan triste, Wolf le mira con gran dulzura y suelta la mano de su hermano para poder abrazar mejor a su querido azabache---
- ¡¡No Yuuri, yo jamás permitiría que alguien te haga daño, así te lo merezcas por cabezota!!!---
- dice uniendo su frente a la del oji negro y rodeándole con sus delgados brazos, el moreno se gira y se abraza a su demonio, mientras se contemplan uno al otro, mientras un oji plata da un pesado suspiro y regresa a un aspecto más dócil, convirtiéndose en aquel chiquillo de grandes ojos y dulces facciones, Sara sonreía aun mas encantado por lo que ve, le agrada tanto verle de esa manera, desea abrazarlo es como ver a un tierno animalito de ojos expresivos, esta por tomarle del hombro cuando en eso Yuui desde su sitio llama a Owen.
--¡¡¡Ow-chan!!! ¿¿Me puedes explicar que fue todo eso??---
- dice colocando sus manos a la cadera y mirándole fijamente, el chiquillo de rubios y rizados cabellos le sonríe y va a su encuentro se abraza a su ojos de cielo y simplemente le contesta:---
-- ¡Nada mi amor, no pasa nada!! ¡¡Cosas de familia mi vida, pero parece que e ya todo o está resuelto!!---
- seguía abrazado a su bello anglosajón, mientras refugiaba su rostro en el pecho de Yuui, este simplemente corresponde al abrazo, mas no deja de mirar asía donde Wolfram, le inquieta saber qué clase de vinculo es el que tienen esos dos y porque Owen reacciono así contra Shibuya.
Aquel momento tan incomodo paso, dejando a los hermanos más tranquilos, Saralegui se retira a sus habitaciones para iniciar con su plan de separar a Shibuya de Wolfram y conseguir también los favores de su adorable hermanito, ya después pensara como hacerse del Kuro-riu.
Y hablando del monumental dragón negro, el cual estaba cómodamente enredado en el grácil cuerpo de su muy amando jinete, que ya empezaba a notarse su embarazo, pues como ya una vez explico Owen, dependiendo del riesgo de extinción de los dragones, su gestación puede acelerarse y dado que Kurogane está siendo vigilado por aquellos seres, la intuición del dragón nunca le falla; sabe que los cazadores están cercas del instituto, es por esa razón que permanece las 24hrs al lado de su rubio y se ha acelerado su embarazo, mostrando el rubio un claro embarazo de 5 meses, la barriga del rubio es notoria dado que su cuerpo es delgado y el tener a aquel Kuro-rin en sus entrañas le hace brotar aquel abultado abdomen, el cual lo hace lucir endemoniadamente lindo, su tez se ha puesto más suave y radiante, sus mejillas siempre lucen con un carmín y sus labios un coral seductor, sus ojos se muestran con más brillo y el azul de sus iris es avasallador, es como sumergirse en la profundidad del inmenso mar, con aguas cristalinas y azules cual zafiros, el bello mago realmente se ha puesto de rechupete, a demás que su apetito tanto sexual como los antojos han aumentado considerablemente, claro su dragón no podría estar más feliz y complace cada absurdo capricho a su amado jinete y madre de su futuro hijo.
---- ¿¡Oye Kuro-tan!? ¿En verdad es normal que tenga esta barriga tan abultada?, según mis cuentas, debería apenas tener 3 meses y esta barriga parece de mas y siento que el bebe se mueve mucho, es como si estuviese intranquilo, ¿tu no sabes que es lo que le ocurre?------
Decía Fye a su adorado Kurogane, mas este se hacia el dormido para no dar explicaciones y angustiar de mas a su jinete, el sabe que todo lo que le acontece es porque corre peligro su vida y es preferible que muera el dragón a que su jinete y su hijo mueran, da un resoplido Kurogane y se retuerce en el cuerpo de Fye, el cual solo parpadea, mientras camina por los pasillos del instituto, justamente está por llegar a los salones donde se encuentra el profesor Kinomoto, cuando de la nada sale un tipo encapuchado, totalmente de negro y con una enorme espada, le mira con malicia, mientras que Fye se queda por un momento paralizado, se toca su barriga y da un paso hacia atrás.
---Por fin te encontramos Kuro-riu------
Dice el tipo refiriéndose a Kurogane, el cual abre sus destellantes ojos Rubí y de un refulgente destello, lanza al atacante del camino de su jinete, Fye mira sorprendido a su Kuro-tan, el cual aun sigue en su forma de dragón pequeño enroscado en la grácil anatomía de su jinete.
---No te preocupes ni te asustes, yo me encargare de este insecto, hazme un favor y ve de regreso a la habitación, estaré de regreso contigo en cuanto termine con esta alimaña----
Le dice telepáticamente el mini-dragón a su jinete, Fye esta contrariado, no sabe si deba dejar solo a Kurogane con aquel tipo y como es que entro al instituto? Fye da un paso asía atrás, regresando a la habitación cuando un segundo tipo se presenta, Fye detiene sus pasos y mira con angustia a su atacante, el tipo se avecina con todo en contra del oji azul, que por su estado actual le prohibió usar su magia o podría adelantar el parto o causar un aborto espontaneo, Fye suda frio de pensar que si no hace algo, podría ser atravesado por aquella espada y si decide usar su magia, podría provocar un aborto espontaneo y perder a su querido hijo, en eso Kurogane toma su forma humana y con rápidos movimientos, enviste al atacante de su muy amando oji zafiro, quien esta aun angustiado por aquel inesperado ataque de esos sujetos, Kurogane arremete de inmediato contra sus agresores, utilizando su espada sagrada y utilizando uno de sus fastuosos y letales ataques, "el dragón celestial", arrasando con parte de la arquitectura del instituto y pulverizando a sus agresores.
Fye da un suspiro, aliviado de que el peligro había pasado, mas no la angustia y el sobresalto; pues al terminar de dar aquel suspiro siente un punzante dolor en su vientre, haciéndolo caer de rodillas, al parecer la impresión y la mortificación de que algo le pudiese pasar a su bebe causo que este reaccionara, causándole contracciones, el dolor que siente Fye es realmente agudo, se sujeta su vientre mientras trata de llamar a Kurogane, en eso el moreno va de regreso a donde Fye y al ver a este en el piso con ambas manos en su estomago lo pone en alerta, llega rápido a donde Fye y coloca su mano en el vientre de su rubio, un resplandor rojizo se presenta en el abdomen de Fye, apaciguando un poco el intenso dolor que siente, Fye mira con gran angustia a Kurogane, tiene miedo de perder a su hijo, Kurogane toma en brazos a Fye y lo lleva a donde a galena del instituto mientras que el rubio se refugia en el pecho de Kurogane y empieza a sollozar.
----¡¡Kuro-rin… no quiero perder a nuestro bebe!! Me duele mucho, Kurogane… date prisa y llama a Yuui, o a Owen, el ya paso por esto el me puede ayudar, por favor Kuro- pon, salva a nuestro hijo!!---
-- decía mientras se aferraba al cuerpo de Kurogane mientras soportaba el dolor, con lagrimas en sus ojos el rubio temía por la vida de su hijo, llega Kurogane donde Gisela, el médico de Celes, la chica ve como esta Fye, de inmediato lo ingresan pues al parecer Fye presentaba signos de un aborto espontaneo, la galena revisa al rubio con su poder mágico y en efecto al parecer aquel encuentro con aquellos tipos a pesar de que este no utilizo su magia provoco en él y el bebe una gran conmoción, causando en el feto que este sintiese una gran angustia y el deseo por salir y proteger a su madre. Ingresan a Fye a una habitación especial donde lo recuestan en una especie de bañera de cristal, el rubio mira con preocupación a la medico quien le trata de tranquilizar, le conecta unos catéter y con su poder induce en el rubio un sueño profundo, cayendo este en la inconsciencia, aquella enorme bañera es llenada con un liquido tibio de color ámbar el rubio es sumergido en este y un resplandor aparece en este, mientras termina de ser conectado a unos extraños artefactos mágicos que monitorean el corazón del bebe y el de Fye.
----Mientras este el aquí, no corre riesgo de perder al bebe, pero solo será esto posible mientras sientan ambos tranquilidad, dígame ¿Qué disparo la angustia de ambos?--
- Si se hubiese tardado un poco mas quizás y se hubiera perdido el producto en el vientre del joven Flourite---
--
----Unos tipos desconocidos nos atacaron en los corredores del instituto, supongo que eso impresiono y angustio a Fye y repercutió en el bebe---
-
Decía Kurogane realmente serio, con una mirada fija en su querido oji zafiro que descansaba bajo aquel liquido ámbar manteniéndolo en una especie de animación suspendida.
----¿¿Unos desconocidos??---
--¿¿ Que los atacaron en el instituto?? ¡¡¡Eso es imposible!!! Nadie pueda pasar la barrera de restricción de la directora Ichihara!!---
- decía la medico mientras miraba preocupada al rubio que a pesar de estar en aquella animación suspendida empezaba a quejarse y moverse dentro del liquido ámbar.
---¿Qué esta pando?---
- le pregunta Kurogane a Gisela al ver que aun su bello jinete seguía retorciéndose de dolor.
----Esto es muy complicado, tenemos que trasladar al joven Flourite a un hospital mágico de inmediato, hare los papeleos correspondientes y llamare al portal transdimensional, para así transportarnos de inmediato---
-- dice Gisela realmente preocupada por la salud del oji zafiro, Kurogane se queda contemplando impotente como sufre su adorado jinete, la galena intenta realizar el conjuro para abrir el portal mas este no se abre, una fuerza misteriosa interfiere en la realización de dicho conjuro.
---¡¡¡N-No puedo hacer el conjuro!!! … ¿Por qué?...---
- la mujer intenta más de una vez y en todas aquellas veces la ejecución de dicho llamado a la puerta transdimensional es imposible.
---¿Dónde queda ese Hospital? cada minuto sin que Fye sea atendido corre riesgo mi familia!!---
- decía angustiado Kurogane.
--Es muy lejos los carruajes no podrán llegar a tiempo y necesitamos…¡¡¡¿¿Qué hace??!!--
-- dice sorprendida al ver que con su catana Kurogane desconecta el extraño aparato donde estaba Fye y lo saca de este, capturando su ser en una esfera dorada que asimila las funciones de dicha cámara.
---Usted se viene conmigo, no tenemos tiempo para charlas estúpidas!---
- dice el Kuro-riu y toma de la mano a Gisela la lleva arrastras, saliendo de la enfermería hasta llegar al patio central del instituto, estando allí, la acerca a su cuerpo y le dice con aquella mirada seria y intimidante que posee.
---Me guiaras hasta ese sitio, no temas y sube a mi espalda, cuando este convertido en dragón no podre comunicarme contigo así que limítate a decirme a donde debo ir y cuida de mi familia----
La suelta y la empuja lejos de su ser, también aparta la esfera dorada donde Fye se encuentra, tratando de contener sus males y evitar que su hijo nazca antes de tiempo, la oji verde se queda impactada al ver la transformación de Kurogane, un enorme e imponente dragón negro se ha hecho presente en el patio central del instituto, imposible no notarle, Yuui y Owen lo ven desde la aula 2-f donde estaban repasando unos hechizos de sanación, al ver que Kurogane salía a gran velocidad con una esfera dorada en una de sus patas y una mujer peli verde en la espalda, intuyeron que se trataba de algo serio, Yuui no pierde tiempo y sale por la ventana invocando sus alas y emprendiendo el vuelo, Owen por su parte se une a su amado oji azul, escoltan a Kurogane mientras ven en la esfera que se encuentra Fye muy mal.
---¡¡¿¿¿Qué ha pasado???!! ¿¿A dónde vamos??----
- decía preocupado por su hermano aquel chico de tez blanca y rubios rizos, la galena le mira y le sonríe tratando de calmar su inquietud.
---Vamos a un hospital especializado en Natalidad, para que puedan revisar al joven Flourite, no se preocupe por su hermano vamos a buen tiempo, no s preocupe aun hay tiempo.----
Kurogane mira de reojo a la galena para que le indique el camino, la mujer le señala asía el sur, Kurogane no lo duda ni un segundo y acelera su vuelo, para Yuui aun es difícil seguirle el rito le cuesta trabajo seguir volando a esa velocidad y empieza a agotarse .
Mas esta cerca del su adorado oji plata quien le toma en brazos, Yuui oculta sus alas y se aferra al cuerpo de su conejo blanco, alcanzando en un tris tras a Kurogane, la velocidad que llevan forzar a Yuui y la galena a cerrar los ojos, Kurogane logra divisar a lo lejos una edificación blanca resplandeciente con una enorme marca roja en forma de ala en el centro, Gisela ayudada de sus manos voltea a ver el hospital y sonríe, le indica a Kurogane que este es el sitio haciendo que este aterrice a la puerta de dicha institución.
Bajan Owen y Yuui mientras Kurogane cambia su aspecto regresando a su forma humana, en eso Gisela entra corriendo a las instalaciones medicas y llama a un equipo de emergencia, los paramédicos mágicos llegan a auxiliar a Fye, entran Gisela y Fye al hospital les sigue Yuui realmente preocupado mientras que Kurogane y Owen se quedan a las afueras del edificio.
---¿¿Los viste?? ¡Están cerca!--
- dice Kurogane y desenfundo su espada, Owen por su parte se prepara para lo que pueda avecinarse, saca de su mano un arco mágico y sube a lo alto del edificio aguardando a que lleguen los cazadores, Kurogane sabía que estaban cercas. Los seguían desde que salieron de Celes, Kurogane está atento a lo que se presenta, cuando de pronto en un abrir y cerrar de ojos una flecha dorada pasa por su costado, develando así la presencia de uno de los cazadores que se ocultaban a la vista del dragón bajo un manto mágico.
El cazador logro esquivar la certera saeta del heraldo y con la misma regresa el ataque del oji plata. Llegando a escasos centímetros para perforarle el pecho, el rubio le mira desde lo alto y nuevamente vuelve a disparar su arco asestando en el cazador, la flecha que fue disparada desde lo alto del hospital cayo justo en el pecho del cazador, desintegrándolo en un gran resplandor dorado, esparciendo su ser en miles de partículas, que al soplo del viento se dispersaron.
Kurogane sigue atento, cuando ve una irregularidad es otro cazador que tras el disfraz de invisibilidad pretende ingresar al hospital y llevarse al rubio para así someter al dragón a los designios de su amo, mas el moreno está decidido a no permitir el paso a ningún ser viviente que amenazara el bienestar de su amada familia.
De un par de cortes magistrales elimina al cazador quien no tuvo tiempo de reaccionar y cayó ante los movimientos precisos del gran Kuro-Riu.
---¿Por qué te están siguiendo estos cazadores?---
- baja de las alturas Owen, mientras mira fijamente Kurogane el cual sigue atento a su entorno.
---Desde hace días me percate que los Cazadores me seguían los pasos, es por eso que me he quedado al lado de Fye todo este tiempo, pero esta vez esos malditos se arriesgaron mas y por su culpa ahora Fye y mi hijo corren peligro, no se los perdonare… ¡¡no les perdonare que quieran arrebatarme a mi familia otra vez!!---
Decía Kurogane apretando mas los puños y sus ojos resplandecían con ira, en su mirar mostraba esa tétrica mueca de frustración y coraje, Owen comprende a la perfección y decide quedarse como centinela en la entrada del hospital.
---Kuro-rin, ve donde Fye, el te necesita hoy más que nunca, no te preocupes yo me quedare aquí a resguardar el lugar, te prometo que no dejare ni que una mosca pase .---
Le regala una franca sonrisa y coloca su mano en el hombro de Kurogane, el moreno le mira por un segundo y toma la mano de Owen con fuerza y contesta.
---¡Te lo dejo en tus manos, sé que no me fallaras Ow-chan!----
- Kurogane le regresa la mirada y le mira fijamente, cualquiera que les viera en ese momento pensaría que e entre esos dos hay algo, por suerte y fortuna del oji plata su celoso Yuui está dentro , junto a su hermanito y no puede presenciar aquel acto de confianza y apoyo entre amigos, Kurogane suelta la mano de Owen e ingresa al hospital donde se encuentra su adorado Fye, mientras tanto a las afueras del Hospital. Owen lanza una saeta dorada al cielo creando un campo de energía alrededor de toda la edificación, se sienta en posición del loto al frente del hospital para mantener aquella barrera erigida y ningún enemigo pueda entrar.
Mientras tanto en la sala de urgencia los sanadores y hechiceros médicos utilizan todo su poder para poder calamar los evidentes signos de aquel aborto espontaneo, Fye sufre de terribles dolores, su bebe quiere salir, la angustia que le transmitió su madre fue grande y ahora el niño quiere emerger, mas aun no es el momento ideal para que dicho crio nazca por lo que tratan a toda costa que el producto permanezca allí por más tiempo.
----¿Cómo sigue, ya lo estabilizaron?----
dice Kuro mas que preocupado, angustiadísimo, su semblante es más que serio, es un aspecto tétrico entre enojo frustración e impotencia, Kurogane no puede más, le desespera estar en la sala de espera e ingresa a la área de urgencias donde Fye se retorcía de dolor, de entre su s piernas un par de hilos rojos empezaban a surgir corroborando efectivamente que el aborto era eminente, si tan solo el rubio pudiera mantener la calma por un momento podrían retardar el proceso de parto hasta que llegue a buen término.
Kurogane coloca su mano en la frente de Fye y la otra en el abultado abdomen de su amado , mientras trata de calmar su angustia, una calidez empieza a experimentar el agitado y afligido cuerpo de Fye, esa tibieza lo hace descansar y apaciguar sus temores, el bebe que se movía en el vientre de su madre se ha calmado, los galenos se sorprenden de ver que ese moreno consiguió calmar a su pareja, le pide que por favor abandone la sala y espere que ellos a partir de ese momento estarían a cargo de Fye.
Mientras aquello ocurría entre Kuro y Fye, en el instituto las cosas empezaban a tornarse peligrosas, los duelos eran mas coléricos y poderosos, lo que restaban por ser seleccionados hacían de todo por conseguir un lugar en la lista de la directora Yuuko.