Capítulo 3: Aburrido
Suspiró.
Miró.
Comió.
Pensó.
Orinó.
Pensó otra vez.
Volvió a mirar.
Aburrido
Naruto no estaba en casa. Salió a acompañar a Itachi a comprar un auto, shikamaru no se molestaba si Iba con Itachi solo, sin el hermano menor. La verdad es que apreciaba a Itachi y sentía admiración por él, sabiendo de antemano que no atacaría a su rubio.
Caminó hasta la Wii a jugar La leyenda de Zelda, entretenido con el juego pensaba en muchas cosas, todavía la espina de lo que había pasado con el Uchiha estaba ahí. Se le ocurrió una idea muy buena, visitar a su vecino para preguntarle eso pero el juego estaba muy entretenido y tenía muchos corazones y había roto varias vasijas
Iré en otra ocasión – dijo mientras rompía vasijas con su espada
*
¡Itachi! ¡Está genial ese auto! – Naruto observaba fervientemente y con jocosidad los automóviles
¿Ese amarillo dices tú?- preguntó Itachi mirándolo con mucha dulzura, le recordaba cuando Sasuke tenía cinco años.
¡Si si! ¡Compra ese! – insistió jalándole el hombro
No pequeño, voy a comprar ese negro de allá – señaló – Ya no quiero andar en la moto
Pero la moto es bonita, a mi me gusta – expresó con mucha emoción
Pequeño, vamos a entrar, ¿Te parece? – acarició paternalmente sus cabellos
Naruto miraba y aprobaba con gran admiración a Itachi, él de todos sus amigos era el más fuerte mentalmente, Naruto siempre quería seguirle los pasos, imitándolo en varias cosas, una vez se lo confesó matando de ternura a Itachi quien no se esperaba dicha confesión. Cuando Itachi decía algo o lo llamaba para enseñarle cualquier tipo de cosa el dejaba lo que hacía e iba para allá, le emocionaba estar con él y es que, con mucha vergüenza de decir que cada vez que intentaba recordar a su padre solo le venía la imagen de él a su cabeza, desde pequeño lo veía como alguien grande, fuerte, se le guindaba de la pierna fuertemente como un modo de pataleta, estaba compartido entre él y Sasuke pero su hermano menor no le daba demasiada importancia.
Al finalizar la compra del auto Naruto le comentó a Itachi que quería darle una sorpresa a shikamaru, pero no sabía que. Le regaló el mes pasado un libro de sudoku y lo resolvió, le regaló un libro de enigmas mentales y lo resolvió, todo se lo devoraba en cuestiones de semanas después de llegar de su trabajo, le regaló la wii para que jugase Zelda, su juego favorito. Eran cosas que no le aburría.
Itachi lo miró pensativo y conduciendo su nuevo automóvil se dispuso a llevar a Naruto a comer, tenían muchas cosas de las cuales hablar, insistió para que viniese shikamaru a lo cual le telefoneó, éste se negó, dándole pena admitir que le daba vergüenza estar al lado de Itachi, le respetaba demasiado y no quería ser una molestia además de que era bueno que se reuniera con el moreno con más intimidad.
Excusándose por lo ocurrido, insistió en el regalo, shikamaru adivinaba todos los pasos siendo algo bastante perturbador ya que nunca los decía. Itachi le expresó que era en exageración expresivo, lo cual hacía que se delatase con mucha anticipación. El rubio preguntó por Sasuke, el moreno contestó que bien, que anda en sus aventuras locas por la vida. Hizo una pausa y preguntándole con mucha curiosidad sobre el hecho que ocurrió que ambos se distanciaran.
Naruto suspiró, contándole despacio lo que pasó. Encontró a Sasuke borracho y con otra persona. Desde ese momento terminaron su relación, pasó tres meses y empezó a salir con shikamaru porque –alegando graciosamente – no lo engañaría por ser tan flojo, cosa a la que ambos rieron. El moreno sabía que era por algo así, no disculpaba ni defendería a su hermano, Sasuke simplemente lo arruinó.
Nuevamente con el regalo se le ocurrió de comprarle otro juego, pero Itachi le aconsejó que lo sacara a cenar, que le comprara algo de ropa y salieran a dar un paseo, el con mucho gusto le presaría el carro – las facciones del rubio cambiaron a ilusión al escuchar eso – a Shikamaru.
¿Shikamaru? – Gruñó – Yo quiero conducir
Itachi lo dejó en su apartamento. Abrió la puerta encontrándose con su amor
Shikamaru lo miró se levantó y lo abrazó flojamente, alegando que la soledad lo tenía aburrido y que una casa con chillidos narutescos, es mejor que vivir en un completo silencio. Naruto lo abrazó intensamente. Se miraron a los ojos y shikamaru sonrió pícaramente acariciando el trasero de su amor, Naruto le gritó fuertemente la palabra pervertido dejando una expresión de extrañez por parte de Shikamaru, ¡Eran novios vivían en la misma casa! ¿Y no podía tocarle el trasero a su novio? ¡Claro que podía!
Naruto lo miró desconfiadamente, con ese moreno hay que estar en guardia, nunca se sabe que podría estar pasando por esa mente maestra que poseía.
¿Qué quieres? – cortó el silencio
A ti… - susurró en su oído seductoramente
Vale… - besó a shikamaru tiernamente en los labios
A partir de ese momento no sería nada aburrido estar en casa