La búsqueda fue inmediata, a penas el patriarca había recobrado las fuerzas encargo a Aioros la distribución de los escuadrones, no le fue necesario ingresar al templo de la virgen para saber que su guardián no se encontraba dentro, el silencio y la falta de serenidad eran el mayor indicador para saber que Shaka no se encontraba ni siquiera cerca del santuario. Pero tenía que ganar tiempo.
Las jornadas de búsqueda por los alrededores del santuario fueron cortas, aproximadamente dos horas después del accidente era evidente que el caballero de virgo no se encontraba en los alrededores, Aioros suspendió las actividades hasta hablar con el patriarca y que este les diera instrucciones. El caballero de Sagitario sugirió que se llamaran a los caballeros en misión y continuaran con una búsqueda más extensa, tal vez alguno de ellos tendrían alguna idea de hacia donde pudo ir Shaka, pero debido a que las relaciones diplomáticas entre los tres reinos aun no terminaban, Shion tomo la decisión de que firmar los tratados de paz eran más importante que la búsqueda de un Santo que él bien sabia no quería ser encontrado. Después de todo, lo que sucedía entre aquellos dos era únicamente problema suyo, y si mi Milo quería encontrar a Shaka tendría que hacerlo por su cuenta antes de que un simple problema personal se convirtiese en uno para la orden entera
No tenía completamente claro que era lo que pasaba en el matrimonio de esos dos, pero la cara desencajada y culpable del escorpión le había dado una idea del porque Shaka había desaparecido tan abruptamente, eso y que Death Mask seguía metiendo prostitutas al santuario aun después de su advertencia, el problema era que la demanda por infidelidad era seguida por oficio en el santuario debido a que una persona que no le era fiel a su pareja difícilmente podría serle fiel a Atena.
El juicio seguiría su curso aun si virgo se encontraba o no presente y si Shaka no presentaba pruebas a su favor la diosa le declararía culpable, Shaka de Virgo sería expulsado de la orden y su cosmos seria sellado para siempre. Una verdadera perdida para sus fuerzas.
Esa era la razón por la que no le permitió a Aioros llamar a los demás caballeros dorados, aunque no negaba que la desaparición de Shaka era por si misma alarmante después de semejante desequilibrio en su cosmos podía causar problemas serios y por eso mismo los tratados de paz debían ser firmados lo antes posible.
Se habían convertido aun más en la prioridad del patriarca porque si Hades o Poseidón descubrían que estaban a punto de expulsar a su pieza clave en la defensa santuario podrían lanzarse a una nueva guerra por el control de la Tierra antes de firmar nada. No era que Shion desconfiara de las capacidades de los demás santos pero a excepción de Mu y Afrodita los demás estaban especializados más en el ataque que en la defensa y la posición de Shaka junto con sus técnicas eran estratégicas en la ubicación de las doce casas.
Siempre había sido así. Por eso virgo siempre era alguien centrado y analítico.
El tesoro del cielo del virgo era el segundo punto de defensa que completaba el muro de cristal en Aries y el camino de rosas sangrientas en Piscis. Ataque y defensa que imposibilita al oponente ya que este pierde todos sus sentidos, una técnica que pocos han podido superar y por eso era importante, por eso virgo estaba en medio.
Sin enbamrgo, no podía arriesgar la seguridad del santuario por la búsqueda de un solo hombre, por más importante que este fuese así que si los caballeros querían buscarle, lo tendrían que hacer organizadamente y por su cuenta... fuera de sus obligaciones. Sólo esperaba que Shaka se encontrará bien donde quiera que estuviese.
Kanon no desaprovecho la primera oportunidad que tuvo de enfrentar a Mascara de la Muerte, le fastidiaba ver como el guardián de cáncer se vanagloriaba de haber sido él quien le “abriera” los ojos al Milo y el escuchar como satirizaba el sufrimiento de Shaka solo aumentaba sus ganas de molerlo a golpes.
Además gracias al italiano los chismes sobre la desaparición abrupta de Shaka y la acusación de infidelidad por parte de Milo no dejaban de perjudicar el proceso en contra del rubio, era claro que el cangrejo algo sabia y aunque Atenea siendo la diosa de la justicia jamás permitiría que cosas como esas se utilizaran como pruebas legales en el juicio eso no quitaba que todo el rio de chismes que abundaban en el santuario denigraran la imagen del que estaba ausente, y ya había escuchado hablar a uno que otro caballero de alto rango sobre aquello que se murmuraba.
Así que cuando el italiano cruzaba su templo después de una de las tantas correrías a las que estaba acostumbrado a asistir lo tomo por el cuello de la camisa y le estrello contra el muro más cercano, sin darle siquiera la oportunidad de levantarse presiono el antebrazo en el cuello del menor y le demando que hablara. Claro que MM soltó una carcajada irónica que buscaba únicamente enfurecerlo más, y cómo era de esperarse lo logro.
- Habla de una maldita vez- rodeno Kanon presionando el cuello de italiano y evitando la entrada de aire- que es lo que has hecho para poner en contra de Shaka a Milo
- Yo solo le mostré lo que sus ojos se negaban a ver- rió el de cáncer- Milo por fin vio a la porquería con la que se había casado
- ¿De qué diablos estás hablando?-
- Oh no! Kanon – la carcajada de DM encrespó al gemelo- ¿crees que voy a ser tan idiota como para darte pistas y defenderlo? Y te piensas que yo voy ayudarte, que voy a permitir que le revuelvas las emociones a Milo y lo hagas echarse para tras
- ¿Qué ganas haciendo esto?- la voz de Kanon se oía un tanto desesperada- ¿Por qué quieres separarlos?
- Porque ese maldito no se los merece - grito el italiano mientras forcejeaba con el agarre del mayor- porque no voy a permitir que juegue con ambos, no los merece, ni a Milo ni a él, así que si se va del Santuario ya no podrá estar con ninguno de los dos.
Kanon no supo que más hacer, simplemente soltó el agarre y observo como DM salía del templo de géminis ¿Qué era todo aquello que había dicho?
El tiempo pasa rápido y lo cura todo, sobre todo si lo haces pegado al cuello de una botella. O eso era lo que pensaba Kanon cuando veía a Milo vagar por el santuario y la aldea cercana de parranda en parranda sin importarle si Shaka aparecía o no.
Habían pasado un par de meses o un poco más desde el accidente en Virgo y aún no lograba comunicarse con el rubio por ningún medio, ni la misma Atenea enterada de lo sucedido había podido contactar o arrancar una respuesta del hindú y para su desgracia el tiempo se acababa.
El juicio por adulterio seguía su marcha y las únicas pruebas presentadas eran las de Milo, todo porque el patriarca Shion se negaba a dejarle ver la demanda sin el consentimiento de alguno de los involucrados. Y a nadie parecía interesarle, Milo hacia semanas que había dejado la búsqueda y comenzado a beber, en un principio pensó que lo hacía por desesperación pero tras encontrándoselos una vez en la única posada del pueblo y casi observar cómo se follaba a una puta se dio cuenta que el escorpión había tirado la toalla y había vuelto a su vieja vida.
Lo preocupante era que el anuncio del juicio público había sido pegado aquella tarde en el coliseo y faltaba poco, muy poco para que todo acabara, de la forma en que lo hiciera.
Resignado volvió a su templo cansado de que las estrellas se negaran a contestarle y fue allí donde lo sintió. El cosmos invadiendo la sexta casa, Shaka había regresado.
*-*-*-*
Como flores hermosas, con color, pero sin aroma, son las dulces palabras para el que no obra de acuerdo con ellas*, como esas flores en etapa gloriosa fue el amor que tu boca pronuncio, que tus manos entonaron y que tu corazón jamás sintió. Es difícil aceptar que el hombre al que juraste amar ante la ley de tu diosa dudase de ti a la primera prueba, el que su ego propio, aquel al que cree has manchado con tu conducta, le impidiese mirar la verdad tras las cortinas de mentiras e insidias, y que, muy por el contrario, profanara el sagrado templo al que solo a él le habías permitido el ingreso, traicionándote… destrozándote el corazón en el proceso.
El silencio que se siente en el templo es solo un reflejo del vacío que creaste Milo, tus acciones han rebelado más de lo que por amarte me fue imposible ver. No, no dudo de tu amor, dudo de la intensidad con la que decías amarme y cómo no hacerlo si apenas han pasado tres meses desde mi partida y tu ya has continuado con tu vida, con aquella que tenías antes de las guerras ¿a cuántas mujeres has pasado por tu lecho? Por aquel que compartirse conmigo y aun no soy capaz de recordad sin sentir esta angustia paralizante, sentir, quiero volver a sentirte Milo.
Tocando mi piel.
Acariciando mi cuerpo.
Enterrándote tan dentro de mí que me hagas suplicar… y besarte, besarte hasta llegar al nirvana.
Y es ese querer, el quererte sólo mío nuevamente, lo que me ocasiona este sufrimiento, porque no hay incendio cómo la pasión, esa pasión que tu despertaste y no hay ningún mal cómo el odio, aquel que inundo mi alma cuando te vio con esa ramera y no miento cuando digo que quise matarla, matarte a ti por hacerme aquello y es por eso Milo, que podre perdonarte, de hecho ya lo hice, pero no, no puedo olvidar. Eso jamás.
*-*-*-*-
El juicio se celebro una semana después, Shaka no presento pruebas de su inocencia y el veredicto fue claro, las palabras de repudio fueron pronunciadas, durante todo el camino soldados y aldeanos así como unos cuantos aprendices arrojaron piedras que Shaka no se molesto en esquivar y el trayecto del templo de Atenea hasta el coliseo en donde el culpable sería castigado con el más grande deshonor se le hizo eterno a Kanon.
Solo una sonrisa con un leve gracias le fue dirigida antes de que los azotes comenzaran, a partir del decimo octavo ningún ruido penetro el silencio mientras que Shaka en ningún momento emitió palabra o gesto de dolor.
Cuando el castigo físico termino la sangre del rubio empapaba su túnica y Kanon fue el único en acercarse pero el cosmos de su diosa le detuvo, todos sabían lo que venía, para sellar el cosmos de un santo dorado cómo lo era Shaka, este tenía que extraerse del cuerpo debilitado del acusado, aquello fue algo espeluznante de ver, el grito del hindú que no se había escuchado durante los azotes rompió el silencio de semejante forma que ninguno de los presente jamás lo olvidaría, era cómo si Atenea separar el alma del cuerpo mallugado y el cosmos hasta ahora relajado de Milo se altero.
Ninguno de los presentes, jamás, había presenciado una cosa así, la estela de luz que salía del cuerpo delgado de Shaka se iba almacenando en una pequeña esfera en las manos de la diosa y cuando ya no hubo nada más que absorber la esfera desapareció y Shaka cayó al suelo.
Después de eso su cuerpo desapareció.
El tratado de paz fue firmado meses después y la batalla entre Camus y Milo cuando el galo se entero de lo sucedido solo pudo ser detenida por la misma Atena.
Y ahí, justo en aquella tarde tan espectacular donde el clima siempre caluroso del santuario descendió hasta nevar, fue cuando toda la verdad salió a la luz, el adulterio jamás fue cometido e más únicamente se trataba de un regalo sorpresa para el peli azul.
Milo sin creerlo, lloro. Pero era tarde, muy tarde.
- Desde entonces las únicas noticias que llegaban de Shaka eran tres cartas personales enviadas cada año, una para a mí y las otras dos para los caballeros Kanon de Géminis y Camus de Acuario, hasta que las estrellas señalaron a su primogénito como sucesor de la octava casa y el ex caballero de Virgo se negó a enviar a su hijo para el entrenamiento- continuaba hablando el patriarca mientras que Milo volvía de su leve desmayo- hasta que como ya he dicho, hace una semana Camus recibió el comunicado de un hospital en Budapest informándole que Shaka y su esposa habían fallecido en un accidente carretero y que sus tres hijos habían quedado huérfanos y siendo él el tutor esperaban que se hiciera cargo de ellos.
Milo observo al niño frente a él, ahora fue capaz de notar el rencor en su mirada oculto tras el dolor.
Y sus ojos no hicieron más que recordarle el final que viera en la mirada de Shaka hacia tanto tiempo.