Había pasado ya 15 días desde los acontecimientos con Sasu, Naru y Dei, Kushina estaba mucho mejor, sabía al menos que todo el estrés de su hijo mayor se había ido, lo medicaron con vitaminas y mucho reposo, aunque él se negaba a estar mucho tiempo en el hospital, ella lo había convencido, por el momento también había tomado el mando de la empresa de sus hijos, no era por nada pero ella la conocía muchísimo mejor que sus pequeños ya que antes de que nacieran ella trabajaba hombro con hombro con su amadísimo Minato, pero ahora estaba preocupada porque a Dei ya al fin lo darían de alta, aunque desde hace ya varios días podía moverse la mayoría de las veces se le encontraba en la habitación de su hermanito cuidándolo, no lo quería perder de vista y por lo mismo había solicitado que pusieran una cama a lado de la de su ototo, obvio se negaron pero tuvieron que acceder debido a que se escapaba con frecuencia y se retiraba el suero lo cual causaba lesiones en su piel y no permitía el tratamiento adecuado.
Estaba en la habitación de sus hijos y los observaba, no podía creer que los querían, por más que pensaba, esa obsesión con ellos no encontraba respuesta, y aunque le dolía tenía que hacer algo lo más rápido posible…..
- Hola ma, como estas, te sientes bien,- decía Deidara desde la cama, la había visto pensativa y estaba 100% seguro de saber que pasaba por su mente…
- Hola amor como te encuentras,- decía Kushina tratando de sonreír para su hijo, aunque no tenía ganas por ellos haría hasta lo imposible.
- Bien ma, pero ya quiero irme de aquí, tengo mucho trabajo atrasado y no quiero dejarte todo a ti, tengo que hacerme responsable,- decía su hijo con cara de angustia, ella no quería que su hijo supiera que ella manejaba la empresa pero sin querer había escuchado una plática con Kakashi y aunque se opusieron ambos no tuvieron más remedio que aceptar debido a que el peli plata estaba trabajando en la búsqueda y seguridad de ambos.
Sin darse cuenta ambos miraban hacia la cama donde estaba Naru con su ventilador, después del ataque que tuvo y de que verificaran que su cerebro estaba bien, lo mantenían sedado complemente, no tenían explicación por el ataque que había tenido pero lo más seguro es que el aun pensaba que estaba en problemas, y por eso lo mantenían sedado todo el tiempo.
Había mejoría en cuanto al estado de Naru, pero no querían despertarlo por las consecuencias que tendría pero ambos sabían que ya era tiempo de que le quitaran el ventilador.
----------------------- Mientras tanto con Itachi------
Me encontraba en la habitación de mi ototo, había mejorado notablemente, ya no necesitaba el oxígeno la mayor parte del tiempo pero aun así lo tenía a la mano por cualquier imprevisto, y como lo había dicho el medico no recordaba nada del incidente que ocurrió hace 15 días atrás, lo miraba comer plácidamente en su cama y sabía que se moría de ganas por ver a Naru, pero con Deidara y con la máxima seguridad que les habían impuesto, le era imposible el ir a verlo, todavía continuaba con el yeso en la pierna, y sabía que esta le dolía de vez en cuando pero todo por salir de allí se aguantaba el dolor, yo venía todos los días a verlo un rato que generalmente era por las tardes pero siempre que entraba a su habitación me pedía que investigara el estado de su rubio, el cual siempre le decía que no podía verlo pero que su estado era reservado, por obvias razones el médico me lo había indicado que no le mencionara la gravedad de Naru pero como siempre mi ototo insistía, y yo le mentía a mi hermanito, si entraba a ver al Kitsune porque yo también estaba preocupado por él y por mi amor mi hermoso Dei, el cual había sido internado el mismo día del ataque de ambos, eso era lo que quería averiguar y se lo había mencionado a mi rubio, que era muchísima coincidencia que ambos hubieran reaccionado el mismo día y con pocos minutos de diferencia.
Estaba perdido en mis hipótesis que no había visto que mi hermanito me hacía señas con insistencia ya que yo no le prestaba ni la más mínima atención.
- Itachi, Itachi, hey ITACHI…… - gritaba Sasuke para llamar mi atención.
- Que paso Sasuke, porque gritas si estoy aquí, sé que ya quieres irte del hospital pero no es la mejor forma de hacerlo,- decía Itachi con una sonrisa, tenía que sonreír, no quería que supiera todas las hipótesis que rondaban por mi mente y por la de Deidara.
- Es que te estoy hablando y no me pones la más mínima atención, quiero pedirte algo,-decía Sasuke, tenía que ver como lo obligaría a que cumpliera su pedido.
- Que necesitas, te duele algo???.- decía Itachi, ya sabía lo que me iba a pedir pero no podía hacerlo, no podía llevarlo a ver a Naru, simplemente no se podía pero él no admitiría un NO por respuesta.
- Es que quiero ir a ver a Kushina-san,-decía Sasu, tenía que convencerla primero a ella para poder estar cerca de Naru, y ya después de eso ya se sentiría más confiado de actuar con mayor libertad.
- Con Kushina- san??? pensé que me pedirías que te llevara con Naruto, no sé porque me pides eso?? .-Decía Itachi totalmente desconcertado.
- Es que quiero convencerla de que me deje ver a Naruto, porque quiero comprometerme, quiero que sea mi ESPOSO!!!.- Decía Sasu con tanta determinación que supe que hablaba en serio.
- ¿Queeee? , decía Itachi.
No podía creer lo que me estaba diciendo pero sabía que lo había decidido, ya que yo también quería hacer lo mismo con Dei pero una lo estaba pensando y no porque no quisiera sino porque primero estaba lo primero que era encontrar a los que querían a nuestros amados, además también estaba nuestro padre que desde que habíamos llegado a Inglaterra no se ha comunicado con nosotros de manera personal ya que yo le enviaba mensajes desde la empresa de Inglaterra diciendo que todo estaba bien, además el tío óbito nos ayudaba bastante, por lo tanto no sabía que Sasuke había sido parte de un atentado.
Y eso me estresaba pero tenis que tener la cabeza fría porque si no terminaría en la misma condición que mi amor Dei.
----------------------- Kakashi--------------------
Se encontraba frustrado, no podía dar con los enemigos, pareciese que se los había tragado la tierra, seguía estando atento a todo lo que pudiese pasar, pero no podía concentrarse, estaba muy estresado, muy cansado y decepcionado de él mismo, no podía dar más estaba fracasando no estaba cumpliendo con la promesa que le había echa a su mejor amigo, aliado y amo Minato Namikaze.
Por su parte Iruka no podía soportar en ver a su amor así de decaído, triste y sin ganas él no era así, por lo que decidió ayudarlo, no por nada era su novio.
- Kakashi amor, quiero que vengas conmigo, necesito decirte algo,- decía Iruka quería que fuera con él y se encargaría de quitarle cualquier estrés, de eso estaba seguro.
- Iru mi amor, que necesitas, en estos momentos estoy ocupado, darán de alta a Deidara y quiero tenerlo todo listo para que llegue a casa bien,- decía Kakashi, sabía que no tenía permitido que pasara lo mismo que la última vez.
- Ven te necesito, decía Iruka sabía lo necio que podía llegar a ser Kakashi en cuanto a la seguridad se refiere y el tampoco quiero que pasara lo mismo pero si estaba estresado podía volver a ocurrir por no estar concentrado.
Todo lo tenía ya planeado, estaba en su alcoba ahora lo difícil seria convencer a Kakashi pero de eso se encargaría el, mientras el peli plata lo buscaba él le llamaría a Kushina para explicarle la situación él sabía que no se opondría ella también estaba preocupada por él, y tenía muchas preocupaciones al menos le quitaría una menos, porque si todo funcionaba tendría que preocuparse menos.
- Ok gracias señora le prometo que estará bien y le llamare cuando ya esté listo,- decía Iruka a Kushina en ese momento entraba Kakashi por la puerta.
- Que estará listo, Iruka y con quien hablabas,- lo miraba con el ceño fruncido, no le gustaba que hablara con la otras personas, sabía que se estaba paranoico pero no le importaba.
- Con nadie amor, ahora tu y yo estaremos ocupados, y n quiero un no por respuesta…..- decía Iruka, mientras se acercaba a Kakashi insinuándosele, y arrinconándolo.
- No, amor no puedo,- decía Kakashi, ya tenía mucho que no tenía relaciones con su amado pero la situación lo superaba por momentos.
- No digas nada y solo déjate llevar,- decía Iruka mientras lo besaba.
Y mientras Kakashi se relajaba todos lo demás estaban preparando lo necesario para que llegara Deidara Namikaze a la mansión.
----------------------------con los amigos de Naruto y de Sasuke------
Hacía tiempo que se hospedaban en mansión de Inglaterra de los Uchihas, cortesía de Sai Uchiha y de Itachi Uchiha, ya que al saber que su primo y sus amigos estaban en el país no le dejo desamparados y contaban con las comodidades.
Habían salido heridos los hombres por tratar de ayudar a Naruto y Sasuke, ya estaban mejor y visitaban a Sasuke de vez en cuando, la mayoría de las veces lo veían sedado, y con Naru definitivamente era totalmente imposible acceder a verlo, al menos por las enfermeras y por Itachi sabían que estaba mejorando pero no como les gustaría a todos pero ya era algo.
Pero eso no quería decir que habían desistido en ayudarlos, ya sabían que se amaban y que al menos ya el primer paso estaba dado, ya que ese rescate de Sasuke por Naruto el correr desesperado por él les daba la seguridad de que el azabache lo amaba y demasiado.
Todos estaban siendo atendidos por sus parejas, no se les despegaban y los mimaban, y daban todo su cariño.
Estaban tranquilos por lo menos un tiempo ya que pues Naru no estaba en condiciones, pero eso no les impedía planear, para que cuando saliera del hospital fueran una pareja totalmente, aunque Sai estaba un poco preocupado, ya que su tío no era una persona convencional, no entendía razones y todo para él era siempre conveniencia..
Al menos sabía que desistió de casar a Sasu con Sakura Haruno, lo cual agradecía bastante ya que las veces que la había tratado era totalmente odiosa, fea y más plana que una tabla, no causaba nada de atracción.
--------------con Sakura-----------------
Por fin había dado con su amor su azabache, sabía que estaba hospitalizado por un rubio, no sabía quién era pero lo haría pagar por dañar a su futuro, y ahora era cuando entraría a la acción, le quitaría a su azabache ya que sabía que él no ayudaría a alguien si no sintiera algo por él, y no quería meter las manos al fuego pero tenía la ligera sospecha de que Sasuke sentía algo por ese rubio oxigenado.