Izuki-sempai y su bebé no duraron mucho tiempo en la enfermería de la escuela. Un par de horas después ambos fueron trasladados al hospital par que terminaran de ser valorados y les dieran el visto bueno. Gracias al tío Midori, de nueva cuenta, fueron dados de alta horas después y ahora estábamos en la granja con el nuevo bebito.
Déjenme decirles que Nijimura-sempai estaba hecho un ser de baba y ternura, que hasta daba miedo, porque nunca pensamos que el sádico, macabro, tenebroso, cruel y despiadado Nijimura-sempai pudiese ser un consentidor, amable, tierno, cariñoso y amoroso recién estrenado papá. Cargaba al pequeño Shuusei-kun con tanto amor y cariño mientras le mecía con suavidad en lo que Izuki-sempai descansaba por el parto, sin anestesia, para reponerse. Nijimura-san estaba así o peor tomándole muchas fotografías a su pequeño nietecito y peleándose con Nijimura-sempai porque lo dejara cargar al bebé.
—Shuuzou, déjame cargar en este preciso instante a mi nieto. Shun-chan se durmió desde hace dos horas y dijiste que me lo ibas a dejar un ratito. >0<- el mayor tenía muchas venitas en la frente-Déjame cargar a mi nieto ahora o…
—O ¿Qué harás, papá?- mi sempai le miró fiero como león a quien le quieren arrebatar a su cachorro.-¿Con qué planeas amenazarme?
—Le enseñaré a Shun-chan las fotografías vergonzosas que tienes de cuanto eras un niño.-sonrió de manera macabra- Y muchas de ellas. Hasta videos jaja ÒuÓ
-…maldición.- masculló entregándole al bebé no muy convencido.-Esta vez ganas, papá, pero a la próxima no te lo daré. Te voy a extrañar mucho, mi amorcito T-T
—No seas dramático, hijo, te lo devolveré en unos instantes.- Nijimura-san bufó mientras le hacía unos cariñitos al bebé-Parece que nunca lo volverás a ver.
—Es que mi bebé no está en mis brazos. No está en los brazos seguros, amorosos y cálidos de su padre TOT
—Qué dramático es Nijimura-sempai- me susurró Kagami-kun y luego salió despedido hasta chocar contra una pared.
—¡Taiga! ¡Maldito cejas partidas! ¡Por esto tu castigo será el triple de pesado!
Me reí un poco viendo a los demás bebés en las cunitas movibles estando dormiditos. Sus respectivas madres les vigilaban de manera cercana sin despegar sus miradas de ellos. Uno de ellos comenzó a lloriquear, esta vez fue el pequeño Kou-kun, y con ello desató el llanto de los demás bebitos los cuales fueron levantados para ser arrullados de inmediato.
—Que hermoso, muchos nietos por montón.- suspiró mi tío Midori de manera boba con el tío Hinata abrazado a su cintura-Tenemos muchos nietos Hinata ♥u♥
—Sí, Midori, tenemos muchos nietos ahora. ^^-luego se giró hacia Furihata-kun y hacia mí- solo quedan ustedes dos, chicos.
— Sí, estoy un poco nervioso por el parto.- murmuró Furihata-kun mientras estaba sentado y peinando el cabello de Reo-san.-Tengo un poco de miedo.
—No se preocupe, bocchan, el pequeño Akashi y usted van a estar bien.- Kotaro-san se aproximó a él y le despeinó los cabellos-Le juramos que íbamos a estar con usted hasta que nuestros cuerpos sean alimentos para gusanos.
—No seas vulgar, Kotaro, no asustes a Kouki-bocchan.- Reo-san le dio una patada sin moverse demasiado.-No se preocupe, bocchan, tenemos que cuidar de nuestro pequeño emperador.
—Pero Reo-sempai, aunque también deben tener sus vidas. Por ejemplo tu: ¿Qué pasará con Hyuga-sempai?- ante la pregunta Reo-san se puso triste hasta el punto de derramar unas cuantas lágrimas.
—N-no creo que l-lleguemos a algo concreto…
—Maldito mocoso cuatro ojos,-siseó Akashi-sama apretando sus puños mientras veía como Furihata-kun abrazaba a Reo-san ya que este se soltó a llorar- si lo tuviera frente a mi lo descuartizaría por hacer sufrir a Reo.
—No te exaltes, Seitarou-san, no ganas nada con ello.- el pelirrojo se relajó un poco por el toque de Furihata-san- No podemos hacer mucho pero tenemos que apoyar a Reo-kun en esto y en la decisión que tomará con respecto al asunto.
—Opino que le demos un susto al infeliz.- todos miramos a Takao-kun el cual le daba de comer a su bebé- ¿Qué? No es justo que jueguen con los sentimientos de Reo-chan.
—Yo le doy con mis piñas, ¡Hagamos sufrir al maldito! ÒoÓ
—Miyaji, tranquilo- susurró el alto sempai de Takao-kun el cual trató de sentar al rubio el cual ya sacaba las piñas- ni siquiera está aquí.
—Eh, chicos, ¿De qué hablan?- murmuró Izuki-sempai todo adormilado. Como si eso fuese un llamado, su bebito comenzó a gimotear buscándole hasta que Nijimura-san lo depositó en los brazos de su madre.-Hola, Shuusei, ¿Me extrañaste, bebé? ¿Extrañaste a mamá?- un ligero carraspeo hizo voltear a Izuki-sempai hasta que vio a Nijimura-sempai a su lado-A ti también te extrañé, Shuuzou.- le dio un beso y poniendo feliz a mi sempai de paso.-¿De que hablaban?
—Hablábamos de que Hyuga es un tonto por hacer sufrir a Reo- habló Kiyoshi-sempai mientras veía a su hijo alimentarse- Hyuga es una persona que no suele expresar mucho sus sentimientos. Es un torpe sin remedio, como Kagami.
—¡A mi no me metas, sempai!
—Pero Hyuga si está interesado en Reo, él me lo dijo poco tiempo después de finalizáramos la copa de invierno.- todos vimos a Izuki-sempai el cual también le daba de comer a su bebé con la mirada boba de Nijimura-sempai sobre él- Solo que no podía aceptarlo por su orgullo herido.
—¡Qué mezquino! ¡No merece tener a Reo-nee! ¡No merece tener a una persona tan linda, hermosa, delicada, que cocina rico y madrea bonito como Reo-nee! - chilló Nebuya-san con el asentimiento de todos. Excepto el de Reo-san- quien seguía llorando-, el tío Hinata y sorpresivamente el tío Midori.
—Bueno, chicos, no podemos juzgar esto: también debemos darle un voto ciego al chico para que sea sereno conforme a su futuro.- habló el tío Hinata sabiamente- Si no deja su orgullo de lado, él será el único culpable de su sufrimiento.
—Además, los sentimientos de Reo-chan por este chico son muy fuertes. Son como los de mi bebé por ese mocoso insufrible de Haruka- el tío Midori vio a la pareja mencionada haciendo temblar a Haruka-san por la mirada súper sádica que le dirigió. Luego se acercó a Akashi-sama y le palmeó el hombro- Sé lo que siente, Seitarou, se lo que se siente que nuestros bebés se fijen en unos desgraciados malditos buenos para nada…
—No le eches más leña al fuego Midori- murmuró el entrenador de Rakuzan mientras tomaba el té- sabes de sobra como es Seitarou de vengativo. Ahora buscará a ese mocoso con sus katanas. Y me llevará de paso ToT
—Jejeje me vale xD. Así será un maldito roba hijos menos.
—Lo mejor será que vayamos a descansar, ha sido un día largo para todos.- murmuró el tío Rintarou- Ya mañana será otro cantar y podrán planear las venganzas que quieran.
Kagami-kun y yo nos habíamos ido a nuestro cuarto, puesto que éramos los únicos junto con Nijimura-sempai y Kiyoshi-sempai que podíamos dormir con nuestras parejas, para descansar después de pasar por todo esta situación. La realidad, estaba muy agotado y mi espalda me mataba mucho; me dolían los pies y únicamente quería dormir. Kagami-kun ni bien tocó la cama cayó rendido mientras que yo demoré un poco en retomar mi ritmo de sueño ya que no sentí al bebé moverse mucho y eso me preocupó.
Me desperté en la madrugada con un fuerte dolor en la espalda y en el vientre, traté de respirar para aminorar el dolor un poco pero no pude ya que este iba en aumento. No habría que ser muy listo para no saber lo que indicaba ese dolor: eran contracciones. El bebé iba a nacer.
Una contracción me hizo ahogar un grito mientras me esforzaba en levantarme de mi sitio para despertar a Kagami-kun el cual roncaba como lavadora descompuesta. Al lograrlo, comencé a moverlo y a darle de almohadazos para despertarlo al ver que se estaba haciendo difícil eso.
—K-Kagami-kun, Kagami-kun despierta-le aventé manazos y hasta jalones de pelo-¡Despierta con un demonio!
—Mmmm, ¿Qué pasa, Kuroko? Estoy durmiendo ZoZ
—¡¡Tu hijo ya viene Kagami-kun!!
—Dile que se espere, tengo sueño Z-Z
Una venita se me puso de inmediato en la frente de coraje y rabia. Solo esperé a que la contracción se me pasara para atinarle una patada y tirarlo de la cama para que se terminara de despertar.
—¡¡MALDITO CEJAS DE TIJERA!! ¡¡¿QUÉ ACASO NO ENTIENDES QUE TU HIJO YA VIENE?!! ¡¡ESTOY EN TRABAJO DE PARTO MALDITO DESCONSIDERADO!!- bramé fuera de mi y más cuando sentí otra contracción venir- ¡¡AHORA VE POR MI TÍO O ME ASEGURARÉ DE QUE TORA TE CONOZCA PERO SOLO POR FOTOS!! ¡¡PORQUE TE SEPULTARÉ HASTA EL CENTRO DE LA TIERRA JODIDO CABEZA DE CERILLO!!
—¡¿Qué?! ¡¿El bebé ya viene?!- por fin Kagami-kun despertó y se puso como histérico a dar vueltas por la habitación-¡¿Qué hago?! ¡¿Qué hago?!
—¡¡QUE VAYAS POR MI TÍO, CON UN CARAJO!!- le aventé un zapato y asustándolo de paso- ¡¡TODO ES TU CULPA, BAKAGAMI!!
Kagami-kun salió pitando y casi después de su partida vinieron entrando en filita india las demás madres junto con Reo-san y Kaname-san. De inmediato, Kise-kun junto con Izuki-sempai me ayudaron a acomodarme mejor y los demás fueron arreglando la habitación para que pudiera nacer el bebé.
—Tranquilo, Kurokocchi, todo saldrá bien. Trata de respirar- Kise-kun me dio un masaje en la espalda baja que hizo que el dolor aminorara un poco- ya verás que tu bebecchi estará bien.
—No pierdas la calma y trata de relajarte, te ayudará para sobrellevar esta situación.- Kaname-san hizo lo mismo pero con mis piernas- Cuando menos quieras, ya lo tendrás en tus brazos.
—Sí, solo piensa en que pronto tendrás a tu bebito en brazos Tet-chan- Reo-san me limpió el sudor que caía a chorros por mi frente y cuello- Kouki-bocchan fue a avisarles a los demás chicos.
—Nosotros escuchamos tus gritos y de inmediato lo supimos.- Izuki-sempai acomodó unas almohadas bajo mi espalda para que estuviera más cómodo-Kagami debió estar demasiado dormido para que tuvieras que despertarlo a punto de patadas.
—Ayudemos a Kuroko-kun a cambiarse de ropa, pongámosle un pijama más suave y ligero.- Sakurai-kun junto a los demás me cambiaron de ropa ya que la mía estaba muy sudada.
Instantes después entró el tío Midori trayendo como perrito a Kagami-kun y luciendo todo desarreglado: el cabello estaba hecho un nido de pájaros, tenía muchos chupetones en el cuello, el pijama lo tenía mal abotonado, estaba descalzo, luciendo una que otra mordida en el cuello y en el hombro, y con una cara de frustración total.
Kagami-kun estaba hecho la mar de nervios: no sé si por el hecho de que nuestro hijo ya vaya a nacer o por el hecho de que interrumpió al tío Midori en su madrugada llena de pasión con el tío Hinata.
—¡Tetsu-chan!- el semblante del tío Midori cambió de manera drástica y luego de aventar a Kagami-kun lejos, se acercó a mi para evaluarme-No te preocupes, bebé, mi nieto y tu están en las mejores manos. Osea las mías X3.
—Kuroko, mi amor- en segundos también tuve encima a Kagami-kun todo nervioso, asustado y angustiado. Tuve un poquito de compasión ya que es un poco torpe para expresar sus sentimientos.- t-todo va a estar bien. E-estoy contigo, no te dejaré solo.
—Kagami-kun…- solté un grito por la contracción que sentí en ese momento: fue muy dolorosa. Tanto que apreté la mano de Kagami-kun para que sintiera mi dolor-Estás más que muerto, Kagami-kun, me las vas a pagar.
—¡¡Mi mano, Kuroko!!
— ¡¡Esto es el apocalipsis!! ¡¡Lo veo y no lo creo!!-chilló Takao-kun-¡¡Kuroko se ha pasado al lado negro!!
—No exageres, Takao-san, debe estar diciendo todo eso por los dolores que siente.- vi a Furihata-kun entrar con su suegro y su padre- Así estuviste tu cuando te tocó dar a luz.
—Tetsu-chan, todo marcha bien. Estás dilatando rápido así que tenemos que prepararnos todos para recibir al pequeño.- vi al tío Midori marcharse a donde el tío Hinata le tenía todo preparado para que se esterilizara y vistiera apropiadamente- Hinata te pondrá algo para el dolor.
—Que alivio- murmuré minutos después de que el tío Hinata me pusiera las medicinas que me aminoraron el dolor solo un poco.-Kagami-kun, l-lo siento…
—No te preocupes, Kuroko, te entiendo.- sentí sus labios sobre los míos y luego despeinó mis cabellos- Tienes que concentrarte en traer a nuestro bebé al mundo. Estamos juntos hasta el final.
—Tetsu-chan, al parecer mi nieto ya quiere salir. Este es el momento en el cual comienzas a pujar.
Vi al tío Midori ponerse entre mis piernas y cuando me lo indicó comencé a pujar con todas mis fuerzas, me dolía a horrores. Pero no podía detenerme, no hasta que mi bebé esté conmigo.
—¡¡TE ODIO KAGAMI-KUN!! ¡¡POR TU CULPA ESTOY ASÍ!! ¡¡MUERETE MALDITOOOOOO!!
—¡¡Mi mano!! ¡¡Me rompiste la mano!!
—Hombres, y eso que ellos no están pujando ni sufriendo contracciones.- masculló Hanamiya-san mientras arrullaba a su bebé- Que sufra el condenado.
—Makoto, no ayudes en el sufrimiento de Kagami.
—Vamos, Tetsu-chan, ya queda poco.- susurró el tío Hinata mientras me secaba el sudor de mi frente- tu puedes cariño.
—… ¡Nunca me volverás a tocar, Kagami-kun! ¡El próximo lo tendrás tú! ¡Maldito!
—Tetsu-chan, ya está.
Miré al tío Midori con los ojos llenos de lágrimas junto con Kagami-kun, vi como mi tío sostenía a un bebito que lloraba tenuemente mientras el tío Midori lo limpiaba con una toalla limpia. Después de ello me lo pasó y lo abracé torpemente llorando como nunca. Por fin, por fin después de nueve meses lo tenía en mis brazos. Kagami-kun le cortó el cordón, llorando como una magdalena, y después uniéndose a nuestro abrazo.
—Es perfecto, Kuroko, es igualito a ti.
Y en cierta manera, él tenía razón: nuestro bebé era blanco con una fina pelusa color celeste en su cabecita. Eso sí, bien cachetón y un poquito regordete. Gimoteó un poco cuando el tío Hinata se lo llevó para vestirlo y vi a Kagami-kun sonreír demasiado.
—El nombre, chicos, el nombre.- el llamado del tío Hinata nos hizo salirnos de nuestro momento especial para luego mirarnos. Ambos asentimos conforme al nombre que habíamos escogido para nuestro bebito.
—Kagetora, Kagami Kagetora.
—¡Mi nieto llevará mi nombre!- el tío Midori silenció aventándole un pavo, que no sé de dónde sacó, al entrenador de Seirin dejándolo bien noqueado.
—No jodas, viejo, el nombre de mi nieto no tiene nada que ver contigo. No te robes el show.- el tío Midori se rascó el cabello y luego nos miró- El momento en que la luz y sombra se han unido para ser una sola. ¡Que frase! ¡Debería escribir una novela!
—Midori, ya escribiste una: fue best-seller y aún seguimos cobrando regalías.
—¡Es cierto, Hinata! ¡Jojojo! ¡Debo hacer otra y hacerme más rico de lo que ya soy! xD
—Kuroko, yo…te amo tanto…gracias por darme un hijo…gracias por dejarme ser tu luz…
¡Plaf!
— ¡Alguien levántelo! ¡Ya azotó peor que Nebuya-chan!- chilló Takao-kun y haciendo énfasis a Kagami-kun el cual ya había azotado como res por la impresión. Entre risas, Haruka-san y Tokiwa-nii lo levantaron para recostarlo en un sillón mientras yo miraba embelesado a mi precioso bebito recién nacido.
—Ya decía yo: de tales palos tales astillitas.- murmuró Kagami-kun sobándose el chichón en su cabeza y con la otra mano acariciando los cabellitos de nuestro bebé el cual estaba en la cama.- Y más estas astillitas.
Después de haber dado a luz, me refiero a que ya era por la tarde, las demás madres habían puesto a sus bebes en la cama grande para tomarles fotografías. Los bebés actuaban justo como sus progenitores: Taiyou-kun estaba muy perezoso, Sorato-kun se veía muy calmado, Kazuo-kun estaba inquieto, Yuuki-kun estaba sonriendo, Taiki-kun chillaba, Kou-kun estaba dormido, Shuusei-kun se movía tranquilo y nuestro bebé no hacía nada.
—Aww son tan lindos…esperen: ¿Es mi idea o es amor infantil?- murmuró el tío Hinata y vimos el porqué de ello: Taiyou-kun se había movido, a como pudo, hasta donde estaba Shuusei-kun y quedó justo a su lado con una manita sobre su bracito- ¡Que hermoso!
—¡¿Qué?! ¡Mocoso tragón! ¡Deja en paz a mi bebé!- Nijimura-sempai saltó como fiera al ataque en defensa de su bebé, como todo buen padre celoso. Miró al bebé, el cual también lo miró feo, y luego este comenzó a sollozar.-Aun estando así conoce su lugar, ni siendo bebé se atreve a retarme.
—Ya decía yo que los bebecchis no tardarían en hacer de las suyas.-murmuró Kise-kun agarrando a su bebé- ¿Con qué sorpresas me saldrás, Taikicchi?
—Aún son pequeños, tenemos toda una vida para ver lo que les depara.- suspiró Himuro-san levantando al pelimoradito para mecerlo-Tengo el presentimiento de que ellos nos superarán.
—Como no: son los herederos de la Kiseki no Sedai y de los Generales Destronados.- las palabras de Akashi-sama nos pusieron a todos a pensar- Ellos serán aún más fuertes que ustedes mismos. Pero está en sus manos que sean los mejores, o se vuelvan unos monstruos.
—No lo permitiremos, nosotros no lo permitiremos.
No, eso si no. Ellos no iban a sufrir el mismo destino. Fui testigo de cómo la Kiseki no Sedai se volvió una fuerza atroz donde cada uno de sus miembros se convirtió en un monstruo frío y cruel, sin sentimientos ni compasión, sediento de poder y fuerza, derrotando ferozmente a su adversario, destruyéndolo hasta dejarlo hecho pedazos. Ellos cometieron muchos errores, errores que los llevaron a la perdición.
Todos compartimos una mirada decidida, no íbamos a permitirlo. No íbamos a permitir que ellos sufrieran cometiendo los mismos errores. Ellos no lo iban a heredar. Nos encargaríamos de que ellos no llevaran la maldición de la Kiseki no Sedai. Ellos serían mucho mejor que los primeros sin volverse los monstruos que alguna vez fueron.