Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

El club de los corazones rotos por Momoka Black

[Reviews - 641]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Hola hola!!

Fans!!

Ando muy a prisa, al rato acomodo todo esto.

Antes q nada, las saludo agradeciendoles por sus comentarios tan bonitos de esta semana.

El muro de los corazones: MIK, sole, sabela, Mimi, Yuki100, Mizore Cross, Nanami Kuchiki, alevass, yue_kori, Aidualc, paolaefp, Megane Michiru-chan, MB, hanakae13, YukaSayamato, Chizu, y Sasunaru24sasuke.

Les dejo en suspenso, ya lo leeran.

 

 

Dos meses tuvieron que pasar para que Reo-san estuviese completamente despierto y ya un poco más repuesto. He de decir que cuando le tuvimos que decir que lo tuvimos que hacer pasar por muerto se puso muy triste pero lo aceptó ya que no podía arriesgarse a que le hicieran daño a su bebé de nueva cuenta.

Lo más grave del asunto fue que Reo-san quedó paralizado de la cintura hacía abajo, tenía sensibilidad pero no podía moverse. Se puso muy triste pero se repetía a si mismo que lo había hecho para salvar a los dos niños. Se alivió mucho cuando supo que su hijito estaba bien y a  salvo aunque debía pasar todo su embarazo en el hospital. Lo visitábamos a diario para que no se sintiera tan solo, bueno los niños se quedaban ahí y nos turnábamos los días enteros.

Seitaki-kun se la pasaba muy apegado a él y a su madre y estaba medio raro. Claro que eso se solucionaba cuando mi hijo estaba con él. Cabe decir que su madre y sus abuelos, luego de que Furihata-san se recuperara de su reciente crisis, estaban más apegados a él.

Después de ese incidente, Akashi-sama ha aumentado la seguridad y junto con su equipo especial han capturado a más cómplices de su ex mujer. Claro que hay más, y no podemos permitir que vuelvan a lastimarnos.

—Kuroko, debemos ir a casa en unos instantes. Hay algunas cosas que hay que traerle a Reo.

Asentí al llamado de Kagami-kun y ambos fuimos a la habitación donde estaba Reo-san junto con los niños y sus madres. Antes de llegar escuchamos las palabras fuertes de Reo-san y no perdimos tiempo en entrar. Lo vimos como si estuviera molesto y triste mientras abrazaba su apenas abultado vientre de casi tres meses mientras miraba enojado a Akashi-sama; el tío Midori los veía a ambos tratando de mediar la situación y los niños se fueron para el lado de Reo al igual que las madres y Furihata-san.

—¿Qué pasa? ¿Por qué están así?

—Lo que pasa, Taiga, es sobre una manera para que Reo pueda volver a caminar.- el pelirrojo mayor suspiró cansado mientras se sentaba en el sillón- Pero Reo no la acepta.

—Se trata de una intervención quirúrgica en la columna para reparar el daño. Ya la columna se ha desinflamado y con ello aumentan las posibilidades de éxito.-explicó el tío Midori- Pero lo que sucede es que Reo-chan no quiere operarse debido a que hay un riesgo leve en el bebé.

—No lo haré. No voy a hacerlo.- musitó el aludido viéndose muy agotado y ya casi rompiendo en llanto.- No…no quiero hacerlo…no lo haré si eso implica un riesgo para mi bebé. Prefiero quedarme postrado a dañar a mi bebé.

—En cierto punto él tiene razón. Pero tomemos en cuenta que cuando el bebé crezca la columna puede dañarse más.- el tío Hinata también tenía razón en ese aspecto pero Reo-san tenía más razón por proteger a su hijo.- ¿Qué podremos hacer, Midori?

—Veremos, lo que podemos hacer por mientras es tranquilizarnos todos.- dio una rápida escaneada al lugar y luego miró al pelirrojo mayor- Seitarou, tengo entendido que tienes unos contactos en América que son especialistas en este tipo de casos. Estoy seguro que ninguno de ellos se negará.

—Trataré de llamarlos hoy para saber que se puede hacer en este caso.- se acercó a Reo-san el cual aún seguía molesto para luego darle un beso en la frente.- Perdóname por ponerte en esta situación, Reo. Sé que esto es difícil para ti, pero lo hago por tu bien. Quiero verte caminar de nuevo, no quiero que te quedes postrado.

—P-pero aun puedo esperar. Por lo menos hasta que mi bebé nazca.- me sentí mal al verlo llorar, yo en su lugar haría lo mismo aunque Kagami-kun se enojara conmigo.- No quiero hacerle daño, aún es muy pequeñito e indefenso.

—Veremos qué hacer en cuanto venga el especialista y nos diga que es lo más viable.- las palabras del tío Hinata lograron calmar un poco las cosas.- Por lo pronto tienes que descansar, Reo-kun, necesitas reponerte.

Salimos todos de la habitación para que él pudiese descansar, excepto Seitaki-kun y los niños ya que quisieron quedarse un poco más para hacerle compañía y mimarlo a su gusto. Los adultos fuimos a la cafetería para comer algo y hablar de otros asuntos.

—Pobre Reocchi, no me imagino todo lo que debe estar sufriendo ahora.- gimoteó Kise-kun bebiendo un poco de agua mineral- No me lo pensaría dos veces en elegir a mi bebecchi si estuviese en su lugar.

—Tenemos que ser fuertes por Reo-san y su bebé.- murmuré mirando mi batido de vainilla y después a los demás los cuales me asintieron sin dudarlo.- Nos necesitan más que nunca.

—Kuroko tiene razón, ambos nos necesitan y debemos ayudarlos. Quiero que Reo-sempai vuelva a caminar pero tampoco quiero que su bebé salga lastimado.- Furihata-kun tenía razón en ello, le estaba eternamente agradecido a Reo-san y con nosotros por haber salvado a su pequeño hijo.

—El tío Mido-chan dijo que Akashi-sama traería a un especialista para lo de Reo-chan.- Takao-kun nos dio ánimos al recordarnos esto- Debemos confiar en que nos dirá algo bueno y hará que Reo-chan vuelva a caminar.

—Sí, Reo-nee debe volver a caminar. Y mientras el doc hace su trabajo nosotros haremos el nuestro.- Kotaro-san se abrazó de Miyaji-san restregando continuamente su mejilla contra la suya- ¿Verdad, Ki-chan?

—¡Suéltame, idiota!- el otro sacó una piña, de quien sabe dónde, y le dio con ella en la cabeza a Kotaro-san dejando que viera estrellitas y con los ojos en espiral.- Esto te pasa por andarme manoseando >0<

—No se enoje, sempai, que Kotaro-san le quiere mucho.

—¿Quieres que te dé con una piña, Takao? Eso se puede solucionar.

—Mejor me callo.

—Así está mejor.

—Kotaro es un idiota sin remedio, es un imbécil que piensa con los pies…-al parecer Hanamiya-san le echaba tierra a su amigo pero al final suspiró negando mientras sobaba su muy abultado estómago-está bien, está bien. A pesar de ser un auténtico imbécil, tiene buenos sentimientos.

—No te exaltes tanto, Makoto, eso no es bueno para nuestro hijo.- Kiyoshi-sempai le sobó el vientre-Vaya, está pateando mucho.

—¡No hagas que pateé, Kiyoshi! ¡Ya me duele!

—Será mejor que vayamos por los niños, debemos dejar a Reo descansar.

Asentimos por lo dicho por Himuro-san y cuando entramos a la habitación vimos a los niños dormidos en la cama con Reo-san. No tuvimos el corazón para moverlos de ahí sin despertarlos así que hicimos lo que consideramos mejor: sacamos nuestras cámaras y les tomamos muchas fotografías.

—Lleven a los niños para que descansen.- musitó Reo-san con los ojos cerrados y una débil sonrisa en su cara- La cama es un poco incómoda y la van a resentir mañana.

Lentamente pudimos tomar a nuestros hijos con cuidado de no despertarlos, pero al único que no pudimos despegar fue a Sorato-kun ya que estaba bien abrazado de la pancita de Reo-san. Furihata-kun batalló mucho para llevarse a Seitaki-kun, ya que se despertó,  pero le prometió traerle de nuevo y traerle a Reo-san rollitos de repollo de contrabando. Himuro-san se llevó a su otro mellizo y dijo que volvería por Sorato-kun en un par de horas a lo que Akashi-sama se iba a quedar a cuidar a Reo-san y al pequeño durmiente.

—Reo, ¿No te molesta?

—Para nada, Tat-chan, puedes dejarlo.- el aludido abrió levemente los ojos y sonrió al acariciar los cabellitos del pequeño dormido- Seita-chan, ¿Me traerías rollitos de repollo? *u*

—S-sí, tío Reo.- al parecer Reo-san notó los celos del pequeño pelirrojo y lo hizo para que disminuyeran ya que después del accidente el niño había cambiado drásticamente siendo demasiado apegado a Reo-san casi rayando en lo obsesivo. No lo culpo, ambos tuvieron que recibir terapias psicológicas para superar los posibles traumas del secuestro.

No sé por qué, pero tengo el mal presentimiento de que Seitaki-kun a raíz de este suceso haya desarrollado ya el ojo del emperador. Y temo porque lo active muy pronto.

 

Por la tarde, estábamos en la cocina preparando los rollitos de repollo para Reo-san y de alguna manera pensando en cómo llevárselos de contrabando ya que las enfermeras del hospital son muy quisquillosas. Tal vez debíamos llevar a Hanamiya-san para ponerlas a raya, con su genio ni se atreven a levantar las cabezas.

—Furihata-kun, hay algo de lo que quiero comentarte al respecto.

—Se trata de lo de los ojos de Seitaki, ¿Cierto?- él se me adelantó a mi pregunta llamando la atención de los otros- Él está desarrollando demasiado rápido el ojo del emperador.

—Lo notamos desde que ocurrió el secuestro: Seitakicchi ya no es el mismo.- gimoteó Kise-kun viendo al niño jugar solo con un juego de shogi que le regaló su abuelo por su último cumpleaños-Es como Akashicchi cuando estábamos en Teiko.

—A veces puedo distinguirle la mirada que Akashi tenía cuando aún era un sádico.- tembló Takao-kun y no solo él, todos nosotros-¿Creen que él…?

—Es probable, el hecho de que presenció el secuestro, lo sufrió viendo como torturaban a Reo y la razón por la que casi muere es una realidad de que el ojo del emperador despierte pronto en él.- Hanamiya-san frunció el ceño viendo al niño-Y temo porque cobre venganza cuando crezca.

—Mi hijo no es así, él no…

—No hay que dejar que eso pase, Furihata, porque si no hacemos algo para evitarlo se volverá peor que Akashi.- Izuki-sempai se abrazó de Nijimura-sempai mientras este fruncía su ceño.

—Si por lo que me contaste, Tetsuya, Akashi se volvió un monstruo después de salir de Teiko, no quiero saber en cómo se comportará su hijo- Nijimura-sempai negó con la cabeza- Cuando me enteré por boca de otros de lo que había pasado después de mi partida, me decepcioné mucho. Me sentí fatal y culpable por no haber sabido cómo manejar la situación, por dejarlos convertirse en unos monstruos.

—Pero podemos evitarlo, aún estamos a tiempo. Aun podemos evitarlo- Sakurai-kun sonrió con pesar- Porque si no hacemos algo en este tiempo lo vamos a lamentar en un futuro.

 

Me quedé con Furihata-kun, Kagami-kun, Takao-kun, Nebuya-san, Kotaro-san, Nijimura-sempai, Izuki-sempai y los hijos de los mencionados. Los otros fueron al hospital a darle una vuelta a Reo-san en lo que nosotros nos preparábamos para ir a pasar la noche en el hospital para el próximo relevo. Furihata-kun salió al jardín al recibir una llamada y mientras  verificaba que Kagami-kun preparara algo de comida y vigilaba que los niños, entiéndase por Seitaki-kun, Tora-kun, Kazuo-kun, Shuusei-kun y sus hermanitos, jugaran en paz,  Furihata-kun entró algo extrañado y confuso.

—¿Pasa algo, Furihata-kun?

—Era Mayuzumi-sempai, está cerca de la granja.

Escuché a Nigou ladrar cerca del jardín y tanto Furihata-kun como yo salimos a ver qué era lo que pasaba. Me sorprendí al ver a Mayuzumi-san lucir agitado con una rara mezcla de sentimientos en su mirada.

—Mayuzumi-san, ¿Qué hace por acá? Lo hacíamos en Kyoto con Akashi-kun.

Pregunté al momento de acercarnos a él para que luego este cayera de rodillas respirando de manera agitada y con lágrimas en sus ojos.

—L-lo siento, yo n-no puedo quedarme…ya n-no soy digno…

—¿De qué habla, Mayuzumi-sempai? ¿Por qué dice eso?

—C-cometí una atrocidad, yo…l-lo siento mucho.- de manera inesperada se puso de rodillas ante Furihata-kun –P-perdóname por esto, no quise, n-no quise hacerlo.

—Mayuzumi-san, ¿Qué pasa? ¿Qué fue lo que hizo?- honestamente ya me estaba preocupando por la actitud del mayor- ¿Por qué está disculpándose?

—P-porque m-me acosté con Seijuuro.-su susurró me dejó en shock al igual que Furihata-kun. Mayuzumi-san estaba deshecho en lágrimas y sollozos-N-no quise hacerlo, n-no supe que pasó…

Me quedé perplejo por lo que estaba diciendo. ¿Cómo que se acostó con Akashi-kun? ¿Cómo que no quiso hacerlo? ¿Qué fue lo que había pasado? Había algo que no me cuadraba, había algo más en su voz que decía que la cosa no acababa ahí.

Sentí un leve empujón que me hizo caer al suelo pero de la sorpresa pasé al terror al ver a Nebuya-san demasiado furioso el cual apretaba el cuello de Mayuzumi-san mientras lo sostenía en el aire con ambas manos en su cuello. Nunca lo había visto tan molesto, nunca en mi vida.

—¡Nebuya-san! ¡Suéltelo!- inútilmente traté de quitárselo, Nebuya-san es demasiado fuerte- ¡Va a matarlo!

—¡Eso es lo que quiero! ¡Matarlo! ¡Lo odio!- Mayuzumi-san tosía ahogándose tratando inútilmente de arañarle las manos para que lo soltara siendo víctima de la peor de sus miradas-¡Maldito! ¡Traidor! ¡Eres un maldito traidor! ¡Mereces estar muerto! ¡Vas a morir!

De otro empujón caí al suelo. Me levanté corriendo en dirección hacia la cocina para ir por ayuda porque si no hacía algo Nebuya-san iba a matar a Mayuzumi-san. Agitado y desesperado grité buscándolos hasta que minutos después acudieron Kagami-kun, Nijimura-sempai y Kotaro-san.

—¿Qué pasa, Kuroko? ¿Por qué gritas?

—¡Tienen que ayudarme! ¡Nebuya-san está ahorcando a Mayuzumi-san! ¡Lo va a matar!

El trio corrió junto conmigo de nueva cuenta hacia los jardines de la casa. Aterrado vi como Nebuya-san aun apretaba aun con furia el cuello del cuerpo ya laxo e inerte de Mayuzumi-san mientras Furihata-kun seguía en estado de shock y viendo de la misma manera que yo la escena. Las caras de Kagami-kun y de los otros eran de horror.

Sin pensárselo dos veces Nijimura-sempai se lanzó en dirección de Nebuya-san logrando desestabilizarlo y haciendo que arrojara lejos el cuerpo de Mayuzumi-san. Mientras Nijimura-sempai sometía a Nebuya-san con una de sus llaves yo corría en dirección a Mayuzumi-san en lo que Kotaro-san ayudaba a Furihata-kun.

—Mayuzumi-san, Mayuzumi-san despierta.- al voltearlo me llené de horror al ver su mirada entreabierta y vacía. Posé una de mis manos en su cuello y me aterré aún más cuando no sentí nada. Posé mi oreja en su pecho y solo pude confirmar que su corazón se había detenido-¡Kagami-kun! ¡Mayuzumi-san no tiene pulso y tampoco está respirando!

Kagami-kun corrió hasta donde estábamos para cerciorarse de lo que estaba diciendo. No perdió en acomodarlo para la reanimación y de inmediato comenzó  le dio un fuerte golpe en el centro del pecho para continuar con las compresiones de pecho en lo que yo le daba respiración de boca a boca. Escuché los gemidos y el llanto de Furihata-kun desde los brazos de Kotaro-san y viendo como Nebuya-san ya estaba totalmente noqueado gracias a Nijimura-sempai.

—¡Sempai! ¡Encienda el auto!-gritó Kagami-kun sin detenerse-¡Tenemos que llevarlo al hospital! ¡Avise al tío Midori!

Mi sempai asintió dejando a Nebuya-san ahí, luego de darle una patada, para encender el auto y poder llevar a Mayuzumi-san al hospital.

—Mayuzumi-san, no se muera. Por favor no se muera.

Musitaba mientras lo reanimábamos sin éxito. No quería pensar que Nebuya-san lo haya matado. No quería hacerlo. Escuché pasos venir hasta donde estábamos nosotros y vi a Takao-kun correr presuroso con un maletín amarillo en sus manos.

—Kagami, Kuroko, ¿Hace cuánto están haciendo eso?- de sus bolsillos sacó unas tijeras con las cuales rompió la camisa de Mayuzumi-san dejando su pecho visible aun cuando Kagami-kun seguía en lo suyo y posteriormente le colocaba unos cables con parches en el pecho.

—C-casi quince minutos.-musité bajito dándole otra insuflación. Takao-kun le hizo la seña a seña a Kagami-kun de detenerse y vimos como una línea totalmente plana se fijaba en el monitor, junto a un sonido sin detenerse,  que trajo Takao-kun: el corazón de Mayuzumi-san no estaba latiendo. Kagami-kun retomó de nuevo las compresiones aun con más fuerza en lo que Takao-kun tomaba unas paletas y encendía el desfibrilador.

—Kuroko, toma ese gel y ponle en las paletas.- rápidamente lo hice y Takao-kun las frotó entre sí.-Kagami, quítale las manos.- él así lo hizo y después Takao-kun puso las dos paletas en el pecho de Mayuzumi-san.-¡Despejen!

El cuerpo de Mayuzumi-san se sacudió por el choque eléctrico que recibió. Volteamos la vista al monitor y vimos la línea plana todavía. Takao-kun torció el gesto y volvió a colocar de nueva cuenta las paletas sobre el pecho de Mayuzumi-san.- Kuroko, aumenta la intensidad.- giré la manija donde lo indicaba asintiéndole a Takao-kun mientras este volvía a lo suyo- ¡Despejen!

Su cuerpo volvió a sacudirse y de nueva cuenta la línea seguía plana. Mis lágrimas salieron al ver que no lográbamos reanimar su corazón. Takao-kun me dijo que tomara las paletas un momento mientras Kagami-kun de nueva cuenta retomaba las compresiones sobre el pecho de Mayuzumi-san y Takao-kun sacaba una jeringa y sin perder tiempo la clavó directamente en el corazón de Mayuzumi-san vaciando su contenido de inmediato.

—Dame las paletas, Kuroko.-de nueva cuenta las cargó y las puso en el pecho de Mayuzumi-san.- ¡Despejen!- su cuerpo se estremeció pero su corazón no daba señales de vida. El sonido se escuchaba fuerte mientras la línea seguía plana.  

—Vamos, Mayuzumi-san, luche por su vida. No se rinda, sigua luchando.- le di dos insuflaciones más y Takao-kun recargó las paletas aumentando más la corriente para volver  a ponerlas en el pecho de Mayuzumi-san.

—¡Despejen!

Su cuerpo se sacudió aún más fuerte mientras veíamos la línea plana tomar ya forma y un sonido pausado nos indicaba que el corazón de Mayuzumi-san habia vuelto a latir. Lo escuché jadear por aire pero aún seguía inconsciente.

—Llevemoslo al hospital.

Kagami-kun levantó en brazos a Mayuzumi-san, en lo que Takao-kun llevaba el monitor, mientras yo le seguía por detrás seguido de Kotaro-san y de Furihata-kun.

 

 

Mayuzumi-san fue llevado de inmediato a terapia intensiva y el tío Midori, al saber todo, se puso como una fiera-luego de que nos informara que Mayuzumi-san estaba delicado de salud pero estable-. Akashi-sama estaba atónito y los demás al enterarse, incluido Reo-san. Los niños fueron llevados a un área infantil para que se entretuvieran en lo que los adultos hablábamos.

—Ese gorila imbécil me va a escuchar. ¡¿Cómo pudo matarlo, literalmente, cuando está esperando un niño?!

—¡¿Qué demonios?!

Gritamos todos demasiado alterados. Oh por todos los cielos: ¡¿Cómo que Mayuzumi-san espera un bebé?! ¡¡Un hijo de Akashi-kun!! Furihata-kun se puso más blanco para variar y Akashi-sama estaba con la cara en un mar de emociones.

—Tiene casi tres meses, y lo que le pasó fue peligroso: la caída que tuvo puede tener repercusiones en el desarrollo del feto.- el tío Midori suspiró tallándose los ojos- Rueguen porque la criatura nazca bien, y rueguen porque el chico no presente daño cerebral.-unos golpes en la puerta nos distrajeron-¡¿Quién demonios es?!

—M-Midori-sensei, le buscan.

La pobre enfermera dejó pasar a un hombre muy alto, como de la altura de Kagami-kun, rubio, guapo, con un tatuaje en el cuello, además de portar una bata mostrando que era un médico. Llevaba un maletín tipo portafolios en su mano y se dirigió hacia el tío Midori ignorando la cara de furia de este.-Midori-sensei, hace mucho que no nos vemos.

—Que chiste ni que nada, mocoso, tu que ni mandas ni una pobre postal.

—Lo lamento, sensei, no lo volveré a hacer.- se dirigió a Akashi-sama dándole sus saludos y Akashi-sama, con un cabeceo, le señaló a Reo-san. El rubio no tardó en ir a donde estaba el otro.

—Oigan, ¿Y este quien es?- musitó Nijimura-sempai frunciendo el ceño, luego de que el rubio mirara a Izuki-sempai con ojos depredadores.- Si se mete con mi esposo, lo castro.

—¿Usted es?

—Mucho gusto, Mibuchi-san, soy el Dr. Nash y estaré a cargo de su caso.

—Aquí hay algo que me huele muy raro, ¿Es mi idea o ese rubio mal teñido con cara de don Juan quiere algo más?- todos negamos ante la idea de Kotaro-san, ya que nos fuimos a un rincón-Dadas las circunstancias, este es el plan: Cuidaremos a Reo-nee de las garras del bastardín.

La verdadera tormenta apenas comienza, espero que Furihata-kun tome la decisión correcta y no haga nada de lo que se pueda arrepentir.

 

Notas finales:

Hasta aquí le dejo. ¿Qué les pareció? ¿Les gustó? No olviden sus reviews y nos leeremos la próxima semana.

El adelanto semanal:

-Mataremos a ese buey de Nash, lo mataremos por andar de caliente.

-No se esfuerce, esto es difícil para usted.

-No puedo, no puedo ser  tan ruin contigo.

-Esto me huele a guerra.

-Pobre debemos comprenderlo.

-Exijo que me digan dónde está la habitación de Mayuzumi Chihiro.

-Esta es la verdad, solo pido que no odien a mi bebito.

-Piénsalo, ¿Haría algo tan estúpido como esto pudiendo dejarlo de lado?

-Lo siento, estoy casado y con tres hijos. Ah, y con un marido muy sexy y posesivo.

-¡Waa! ¡En la madre estamos jodidos!

-¡Ocúltense todos! ¡Tienen que esconderse!

-Akashi-kun está en el hospital, y no está muy contento que digamos.

 

No se lo pierdan. Nos leeremos pronto.

Porfi denle like a la página

Momoka

Les saluda y desea un feliz inicio de semana

Momoka Black ♣♠♦♥

 

 

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).