Capitulo 4
-¡Capitán Hitsugaya!
Exclamo Uruhara sorprendido de verlo ahí, además era lo bastante observador para notar algo raro, Hitsugaya Toshirou se veía muy... Alterado.
-Uruhara Kiusuke, necesito un favor tuyo.
Dijo en un frio tono de voz. Uruhara asintió extrañado.
-Claro capitán Hitsugaya ¿qué necesita?
-Quiero que habrás la garganta para ir a hueco mundo sé muy bien que puedes hacerlo Uruhara Kiusuke.
-¿por qué?
-No hagas preguntas y solo hazlo y mucho cuidado con decirle a alguien.
-Pero la sociedad de alma lo considerara un traidor si se mueve sin autorización.
-Mira quién habla.
Dijo el peliblanco cruzándose de brazos.
-Touche! De acuerdo no preguntare más y lo haré.
Dijo Urujara sabiendo con una sola mirada al capitán peliblanco que lo tenía que hacer, que el otro necesitaba que lo hiciera.
-¿Pero está seguro de que lo que hace? Ir a hueco mundo solo puede ser un suicidio.
-no me importa si hay un bastardo al que puedo matar antes.
Dijo Hitsugaya apretando sus puños.
-Por favor piénselo capitán no se ve muy... Tranquilo.
-Uruhara, abrirás ese paso a las buenas o a las malas.
Le advirtió Hitsugaya. Uruhara sonrió sin miedo.
-Bien capitán Hitsugaya como usted quiera.
***
Hitsugaya vio con fría calma a los arrancar que lo rodeaban. Ulquiorra Cifer el cuarto espada estaba a su derecha, Grimmjow Jaggerjack a su izquierda, Yammy y Halibel estaban juntos enfrente de él, entre Ulquiorra y Grimmjow. Hitsugaya los miro a los cuatro con una frialdad aterrorizante pero los espadas disfrutaban ante la perspectiva de lucha, menos Halibel, la espada lucia ligeramente molesta de tener que estar ahí, no se sabía si por sus compañeros o por el pequeño capitán Shinigami.
-No tengo tiempo para tratar con escoria como ustedes, busquen al hijo de mala madre de Ichimaru de inmediato ante de que me los cargue también a ustedes.
Les ordeno en un tono bajo y frio capas de erizar al más valiente.
-Nunca llegaras donde el jefe Ichimaru, enano.
Se burlo Grimmjow. Hitsugaya quien no tenía nada de paciencia simplemente apretó su Zampakuto entre las manos y exclamó.
-Bankai! Ryūsenka.
Hitsugaya dirigió su contundente ataque contra sus cuatro enemigos, Ulquiorra y Grimmjow saltaron esquivando el ataque pero a Yammy y a Halibel les dio de lleno, la Espada paro parte del ataque con su Zampakuto, por lo que salvo la vida, aunque la mano que portaba la espada y su pies izquierdo quedaron congelados, Yammy no había salido tan bien estaba envuelto en hielo y antes de que alguien pudiera hacer algo, este estallo violentamente pulverizando al Decimo Espada.
Grimmjow y Ulquiorra molesto atacaron a la vez con sus mejores ataques, dispuestos a eliminar al pequeño de la faz de la tierra (o Hueco mundo...).
Hitsugaya esquivo a Grimmjow sin problemas, pero el ataque de Ulquiorra lo sorprendió, se preparo para recibirlo pero nunca llego el esperado golpe y cuando el ojiverde abrió sus ojos, se encontró a Gin frente a él, con su Zampakuto empuñado, Shinso empuñado. Había parado el ataque de Ulquiorra con su Zampakuto. Ulquiorra, Halibel y Grimmjow lo miraban asombrados y extrañados por la acción, pero Gin los ignoro volteándose con su odiosa sonrisa hacia Hitsugaya.
-Toushirou-chan.
Sonrió odiosamente. Hitsugaya sintió su sangre arder furioso.
-Bastardo, justo a ti te buscaba, te matare.
Dijo el peliblanco menor.
-Ryūsenka.
Dirigió el ataque que había acabado con la vida de Yammy contra Gin esta vez, no le importaba si después de eso los Espadas lo mataban, solo quería matar a Gin en ese momento. Con ese potente ataque lanzado por segunda vez, la segunda de sus flores que marcaban el límite de tiempo de su Bankai estallo, ahora solo quedaba una.
Gin había saltado esquivando el golpe por los pelos.
-Dispara hasta matar Shinso.
Gin Libero su Shinkai contra Hitsugaya, que con su espada desvió el ataque. Los otros tres Espadas se miraban entre sí, sin saber qué hacer.
-Maldito hijo de puta aunque muera aquí, te matare por lo que me hiciste.
Le juro Toushirou. Gin lo miro con su imperturbable sonrisa.
-Oh eso, recuerdo que gemías de una forma muy excitante.
Lo pico el ex-tercer capitán. Y eso para el Decimo Capitán fue como echarle gasolina al fuego, porque fue a por Gin segado de furia.
-Ryūsenka
Nuevamente Gin esquivo el ataque, pero esta vez no con tanta suerte, su mano izquierda se recubrió de hielo. Pero la tercera rosa estallo y el Bankai de Toushirou se sello. Gin se deshizo del hielo que cubría su brazo izquierdo y acercándose al pequeño capitán lo tomo del cuello mientras con su brazo derecho esgrimía su espada.
-te hubieses quedado en la sociedad de alma y hubieses vivido mas Hitsugaya Toushirou.
Le dijo Gin borrando su odiosa sonrisa y mirándolo serio. Hitsugaya lo miro sin miedo en sus verdes ojos esperando desafiante el golpe final.
-Dispara asta...
Pero antes de que Gin terminara de dar el comando a su espada, Ulquiorra exclamó sorprendido.
-Ese niño está en estado!
Dijo cuando al fin identifico el extraño reiatsu. De la impresión Gin lo soltó y Hitsugaya no perdió el tiempo tratando de clavarle su Zampakuto en el estomago, pero por instinto Gin desvió la espada con la propia.
-Es mío?
Pregunto confundido. Hitsugaya se sintió más rabioso si fuera posible.
-fuiste tu quien abuso de mi, claro que es tuyo, maldito cabron.-De mas esta decir que el peliblanco menor tenía un cabreo del demonio.-Te matare por lo que me hiciste, por lo que me robaste Ichimaru Gin.-Le juro Hitsugaya, alzó su espada directo hacia Gin, pero un golpe a sus espaldas lo dejo sin sentido. Había sido Grimmjow el que lo había golpeado, Hitsugaya cayó al suelo sin sentido mientras la espada caía en el suelo no muy lejos de él. Gin aun sorprendido se acercó a él y lo tomo en brazos.
-Que debemos hacer?
Pregunto Ulquiorra respetuosamente al segundo al mando de Aizen.
-Nada, yo me hago cargo de él.
Dijo Gin volviendo a su máscara con esa sonrisa tan falsa y odiosa. Tendría que hablar luego con Aizen pero esto lo cambiaba todo si el hijo que Hitsugaya Toushirou esperaba era suyo, entonces el pequeño peliblanco también le pertenecía ahora.
Continuara....