La Gravedad del Amor
IX
Me enamoro de ti
--Cuéntanos Shu, ¿Cómo es Rui? Ya salieron varias veces y la gira casi termina, ¿Pronto tendrán ‘la cita’? –inquiría un castaño con tomo acusador.
--Basta Hal, no molestes a Shu. –defendía un pelinegro al momento de dar un zape al castaño.
--Tranquilo Lu, la verdad también quería preguntarle lo mismo. Shu, empieza a cantar. Y ya sabes a lo que me refiero. –intervenía Hiro.
--¿Por qué me preguntan ahora? Vamos justo después de Nittle Grasper. –intentaba zafarse Shu.
--Ni lo intentes jovencito, si no te presionamos no dirás nada y sinceramente quiero estar preparado para cuando me pida tu mano. –bromeaba Hiro a lo que el castaño y el pelinegro rieron con suileza.
--¡Hiro!... bueno, él es muy lindo, divertido y a veces es muy apasionado… la música lo es todo para él, vive para ella y no le importa el no tener un contrato con alguna disquera. Siempre hablamos de lo que sentimos cuando escribimos y cuando cantamos. –decía el de ojos amatistas con ilusión.
--Valla, parece que es…
--Aburrido, ¿No hablan de algo más? –interrumpió el castaño a su amigo pelinegro.
--No es aburrido, es muy… Shu. ¿Qué contestarás cuando te pida ‘la cita’? –decía Hiro.
--Sobre eso… la pidió ayer, y, dije que sí. –decía Shu con un ligero sonrojo y tratando de no cruzar miradas con sus amigos.
Antes que Hal y Lu iniciaran con el bombardeo de preguntas Hiro habló.
--Shu… diviértete.
Con una enorme sonrisa Shu asintió. Hiro apresuró a todos a prepararse para su turno en el escenario y advirtió a Hal y Lu de no hacer más preguntas a Shu, quería que disfrutara de esos nervios previos a la primera cita. Sin duda sería esa noche, se escaparían como lo han estado haciendo, se divertirían y volverían con una nueva fecha para otra cita, así sería hasta que uno de los dos se decida por dar el paso y ser algo más.
Sonrío ante sus pensamientos, ya era hora que Shu se atreviera a amar de nuevo.
Te iré a buscar sin esperar
Que camben los semáforos al verde
Hoy encontraré
La forma de clavarte bien los dientes
Hiro sólo observaba el rostro iluminado de Shu, la entrevista estaba a punto de iniciar y su amigo seguía en las nubes. Cuando la conductora se proponía a hacer las preguntas directas, Hiro bajó a Shu de su nube.
--Su gira fue todo un éxito y las fans están más que contentas por tenerlos de regreso pero, lo que ahora importa de verdad es aclarar unos rumores, Shu ¿Es cierto que tú y Ryuichi de Nittle Grasper estuvieron en una relación amorosa?
La pregunta dejó a todos congelados. K estaba en busca de su arma pero antes que la sacara Shu contestó.
--Ryuichi y yo tenemos un vínculo profesional, nada más. –dijo Shu con seguridad.
--¿Qué me dices de Rui? Todos recordamos la canción que compartieron, además tus fans reaccionaron de manera positiva ante… ya sabes, te volviste un poco más inalcanzable para las féminas que te admiran. ¿Fue por Rui que tomaste esa decisión? –hablaba rápido la conductora ignorando olímpicamente el arma que apuntaba a su cabeza.
--Yo… sé que mis fans son lo mejor, es para mis fans que escribo canciones y canto porque me lo permiten, todo lo que soy, lo que somos; Bad Luck es lo que es gracias a ellos. –dijo Shu mirando a las fans que estaban presentes –Rui es un gran artista, su forma de difundir su música es admirable.
--Mi querido Shu, eso no fue lo que quería decir con la pregunta pero, tenemos una sorpresa para ti. –dijo la conductora para mostrar a un chico peliplateado con el fleco negro y de profundos ojos verdes –Con ustedes ¡Rui!
Desmigaré sin compasión
Tu corazón de dulce mandarina
Te daré un amor
Que ni siquiera en sueños tuviste nunca
Un café cargado para dos
(Ouoo…)
Y la noche va mucho mejor
Si poder evitarlo Shu se levanta y va a su encuentro, Rui lo recibió con una sonrisa y un gran abrazo, un ruido de fondo les hace ver que no estaban solos.
--¿Qué haces aquí? Creí que no te vería hasta el próximo mes… –decía Shu con alegría por la sorpresa.
--Yo también, de hecho me invitaron aquí para sustituir a una banda que canceló a última hora, pero creo que todos fue…
--¡Una sorpresa! –decía la conductora –Queríamos juntarlos para que los fans recordaran el dueto que presentaron en la gira.
Aunque la conductora repitiera lo de la sorpresa, Hiro, Suguru y K sabían que era una especie de trampa para obtener la exclusiva de la pareja que todo Japón quería conocer.
--Aprovechemos que están juntos y canten una canción. –pedía la conductora siendo apoyada por los fans presentes.
Luego de un intercambio de palabras y un sutil disparo, la conductora desistió, y fue Bad Luck quien cantó una de las nuevas canciones de su nuevo sencillo.
Me enamoro de ti
Me enamoro de ti
De tu forma de ser
Del olor de tu piel
Me enamoro de ti
Me enamoro de ti sin dudar
Durante la presentación, Shu y Rui no despegaron sus miradas, la canción estaba dirigida hacia él, no había duda. Rui sonreía, ¿Quién diría que alguien que canta canciones tan llenas de energía ocultara su corazón? Alguien lo había lastimado. No ha querido preguntarle, no tendría caso el hacer que recuerde su pasado si él quiere ser parte de su futuro.
Sería hoy. Hoy le pediría que fueran pareja. Después de la presentación lo secuestraría, iniciarían una cita improvisada y le pediría que fueran algo más, que fueran más cercanos, luego, luego no se contendría y le robaría un beso… un beso… probar esos labios, aunque suene tonto, probar los labios de Shu era su objetivo desde que le conoció. Volvió a sonreír, el sentimiento era mutuo.
Me enamoro de ti
Me enamoro de ti
Con tus ojos de miel
Y tu pálida piel
Me enamoro de ti
Me enamoro de ti hasta el final
Shu y Rui corrían lo más rápido que podían de la televisora, justo como el peliplateado lo planeó, secuestró a Shu. Después de más de una hora de carrera, se detuvieron a componer sus respiraciones cerca de un centro comercial.
Entraron al estar ya cerca, recorrieron los locales, compraron algunas cosas innecesarias, entraron a una tienda de música y compraron discos de varios artistas y bandas menos de ellos. Bromearon de varias cosas insignificantes y rieron como si nuca lo hubieran hecho… para ser una cita improvisada todo fue de maravilla.
En el azul del cielo tú
Escribirás mi nombre cada día
Yo me vestiré
De primavera llena de sonrisas
Convertir un sueño en realidad
(Ouoo…)
Es posible inténtalo y verás
Para no salir del ambiente informal e infraganti, cenaron en una cafetería que estaba en el segundo piso. Todo iba bien. Shu se distrajo un poco, pareció sorprenderse… su mirada no cambió, Rui estaba por preguntar cuando sintió que alguien se acercó a su mesa.
--Hola. –saludó un rubio de ojos dorados y aire arrogante según Rui.
--Hola. –contestó Shu con un cambio en su mirada.
--Hola. –dijo Rui para hacerse notar ante el rubio que no dejaba de mirar a Shu.
--Él es Rui, Rui él es Yuki. –presentaba Shu.
--Un gusto. –mintió el rubio, o eso creyó Rui.
--Igual. –contestó por cortesía Rui.
--Sólo quería saludar, ya debo irme. –decía el rubio –Por cierto, el pelo negro resalta tus ojos. Buena elección.
--Gracias Yuki. Adiós. –contestaba Shu.
--Adiós. –dijo Rui al aire.
Luego que el rubio se hubo marchado, Rui dejó que Shu pensara, le notó perdido en sus pensamientos y decidió no interrumpirle. Sonrió con desgana, “Todo iba tan bien…”.
Me enamoro de ti
Me enamoro de ti
De tu forma de ser
Del olor de tu piel
Me enamoro de ti
Me enamoro de ti sin dudar
Después de la cena, salieron del centro comercial. Shu seguía meditando algo. Rui intuyó quién podría ser el rubio que se encontraron, pero no quiso presionar. Condujo a Shu a un sitio de taxis.
--Sube, vallamos a tu departamento. Luego me iré a tomar una autobús para regresar a mi… casa.
--¿Qué? ¿Ya te vas? –preguntaba Shu desconcertado.
--Claro sólo venía al programa ese… más bien me pasé de tiempo.
--¿Te arrepientes?
--Para nada, fue fantástico el haberte visto, creí que tendrías más trabajo por eso del nuevo sencillo.
Ya en el departamento de Shu y Hiro, Shu entró a su cuarto que luego fue invadido por su amigo pelirrojo.
--A cantar, ¿Ya son pareja?
--No.
--¿Y eso? Todo apuntaba a de hoy no pasaban de ser pareja oficialmente.
--Pues fue genial, hicimos algunas compras, reímos y comimos… en la cena vi a Yuki, se acercó a nosotros y los presenté. Luego todo cambió, Rui me llevó a un sitio de taxis para venir a casa.
--Shu…
--¿Qué pasó? De pronto todo fue silencio.
--Shu, después del encuentro con Yuki… ¿Cómo reaccionó Rui?
--… Estuvo callado.
--¿Y tú?
--… no volvía a decir nada.
--…
--… lo arruiné ¿Cierto?
--…
--¿Hiro?
--…
--¿Y ahora qué hago?
--…
--¡Hiro!
Me enamoro de ti
De tu risa infantil
Con tus ojos, tu piel
Y tu boca de miel
Me enamoro de ti
Me enamoro de ti hasta el final
En una bar de la primera ciudad donde pasó la gira, un chico de cabello platinado, flequillo negro y profundos ojos verdes afinaba su guitarra, detrás de la barra un hombre mayor hacía inventario de las bebidas que había. A pesar de la hora tan temprana, un cliente llegó, era un encapuchado que se sentó cerca de la barra, pidió una cerveza y se acercó al músico.
--Sabes, me recuerdas a alguien… también es un músico. –inició el encapuchado.
--Mmmm… –respondía el guitarrista.
--Él era muy chico cuando inició su carrera, junto a un buen amigo llegaron a la cima en cuestión de nada. Fueron grandes en su área, tenían sueños que fueron alcanzando poco a poco. Eran algo bromistas, buscaban la manera de divertirse a falta de más amigos… un día, el amigo al que me recuerdas, conoció a alguien… importante.
>>Con esa persona descubrió los altibajos del amor. Vivió las ilusiones, sintió los deseos de que el sol volviera a salir, descubrió las sensaciones que alguien especial puede brindar.
>>Por desgracia, también conoció lo era la angustia, la decepción, las noches en vela y el llanto desgarrador… Antes de que su tierna alma se quebrase, su amigo le ayudó, al conocerlo tan bien, supo dónde curar, dónde reforzar, dónde ayudar… Fue un proceso largo y algo tortuoso pero, nunca le dejó solo.
>>El amigo que me recuerdas, salió adelante, dejó su primer amor en el pasado, y, conoció una nueva ilusión.
--No era necesario que vinieras hasta este lugar para decirme eso. –decía el guitarrista.
--Digamos que el amigo al que me recuerdas… está en casa torturándose, piensa que arruinó todo lo que tenía con su nueva ilusión. No ha querido salir ni para ir a la disquera.
--¿Qué no es en este momento donde entras tú?
--Bueno, digamos que no soy yo quien puede ayudarlo ahora.
--¿Por qué no Hiro?
--Porque Shu ha abierto a su corazón a otra persona y, si no dejo que esa persona influya en él… entonces jamás dejaré que alguien más se acerque a él.
Me enamoro de ti
Me enamoro de ti
Me enamoro de ti
Me enamoro de ti
Me enamoro de ti
Me enamoro de ti hasta el final
En el departamento de Shu y Hiro, Suguru y K intentaban abrir la puerta del cuarto de Shu.
--Abre la puerta Shu, si no trabajamos Thoma anulará el contrato que volvimos a firmar. –decía Suguru.
--Shu, si no abres yo me encargaré de derribar esta puerta. –amenazaba K.
--¡Váyanse! –gritaba Shu desde debajo de las cobijas de su cama.
--Shu, jamás haces este tipo de cosas, ya sal que tenemos que trabajar. –insistía Suguru.
--Corrección, jamás me habías visto. Hiro es quien siempre carga con esto ¿Dónde está Hiro?
--Salió a dar una vuelta, su aspecto daba miedo. –decía Suguru.
--¿Salió? ¿Sin decirme? –seguía gritando Shu.
--Lo obligué a salir. –decía K para evitar que Shu se soltara a llorar.
Un par de golpes se escuchaban en la puerta, Shu se extrañó, sus amigos solo gritaban, no tocaban. ¿Sería Hiro?
--¿Sí? –contestó por curiosidad.
--¿Puedo pasar?
--¿Quién? –seguía preguntando Shu, se paró al lado de la puerta para abrir un poco.
--Soy yo. –dijo Rui.
--Rui… ¿Qué haces aquí?
--Tenemos una cita.
--¿Cita? No recuerdo…
--Claro que sí, la última cita se quedó a medias.
Me enamoro de ti
Me enamoro de ti
Con tus ojos de miel
Y tu pálida piel
Me enamoro de ti
Me enamoro de ti hasta el final
--La verdad creí que saldríamos para continuar la cita no que sería en tu habitación… sólo los dos… encerrados. –decía Rui.
--Lo siento, K y Suguru están afuera, lo primero que harían si salgo es llevarme a la disquera. –decía Shu un poco apenado.
--Está bien, después de todo, estoy contigo que es lo que importa.
--Rui, lo siento. Arruiné lo del otro día. –decía cabizbajo Shu.
--Está bien, lo entiendo. No es fácil cuando te encuentras a tu pasado en la calle.
--Yo… siento que debo contarte. Verás…
--No tienes por qué.
--Pero…
--No me fui porque me molestara, me fui porque parecía que querías pensar. Debí explicarme.
--Rui…
--Sólo, dime, la canción de tu sencillo, ya la habías escrito y, era dedicada a él ¿Verdad?
--Rui… sí, la escribí hace tiempo más te aseguro que, al cantar esta canción, sólo pienso en ti… en nadie más que en ti.
--Sonará extraño pero, lo sé.
--Rui…
--Shu, déjame preguntarte algo… ¿Quieres ser mi pareja?
--Sí, sí, sí… claro que quiero. –contestaba ya un repuesto Shu mostrando así una esplendorosa sonrisa.
Me enamoro de ti
Me enamoro de ti
Con tu forma de ser
Del olor de tu piel
Me enamoro de ti
Me enamoro de ti sin dudar
El vocalista de Bad Luck volvió a caer en las redes del amor, hizo nuevos amigos y siguió haciendo lo que más le gustaba.
No hablo de él como el fin de su historia, Shu aún tiene muchas cosas que vivir y experimentar, muchas canciones por crear, muchas sensaciones que vivir.
Ésta fue sólo un fragmento de una larga y exitosa vida, sólo un punto de vista de lo que es la Gravedad del amor.
>Fin<