Nuestros Orgullos...
Serie: Yu Gi Oh!
Yakumo Kaiba Eiri
Nota: Bueno, los personajes de Yu Gi oh! No me pertenecen... solo los utilizo como forma de entretención para mi y para las personas que leerán esto (alguien lo leerá, cierto? ,o_o,)... solo me pertenece la trama y los personajes originales mientras que algunos de estos son tomados prestados de otros fics de distintas autoras (no se preocupes chicas se los devolveré sanos, salvos y vírgenes, aunque no aseguro lo de vírgenes XD)... Yaku-chan se une a la Campaña liderada por Katrinna Le Fay: No permitamos que el PLAGIO se lleve nuestro trabajo, así que si conoces una historia Robada, por favor denúnciala a sus respectivos dueños. No es justo que nuestras horas de dedicación se vayan a la basura y se vean inmiscuidas en una total falta de respeto para el Autor y los lectores. Entre más luchemos, más saldremos adelante. Muchas gracias Katrinna por prestar tus palabras y seamos muchos los que las gritemos. Ahora, sin más preámbulo, el fic...
Nuestros Orgullos...
Yakumo Kaiba Eiri
Capítulo 2
Kaiba salió del Instituto tan elegantemente como era todo en él. Pasó por el lado del estúpido grupito de Smile cuando sus ojos sin querer se toparon con los del cachorro rubio el cual, si es que Kaiba no lo imaginó, presentó un leve sonrojo. Seto sacudió la cabeza mientras se subía a la limusina, no debía pensar en esas cosas... una, por que eran prácticamente imposibles, dos, por que le hacía daño, y tres... por que no quería darse falsas esperanzas.
-¿A la Mansión, señor?- preguntó el chofer mientras se miraba al señor Kaiba a través del espejo retrovisor.
-No, a la compañía...- murmuró mientras que miraba a través de los vidrios poralizados.
-Señor... voy a decirle algo bajo el riesgo de ser despedido...- el CEO elevó una ceja- ¿olvidó que el señorito Mokuba le pidió que llegara temprano?- le miró con preocupación el chofer.
Seto parpadeó sorprendido. Era cierto... Mokuba se lo había pedido, pero él con lo cegado de celos que estaba por Anecuze lo único que deseaba era llegar pronto a la Corporación.
-Es cierto...-se mordió el labio inferior- solo conduce a la corporación... yo llamaré a Mokuba...-
-Si señor...- el chofer elevó el vidrio que le separaba de su jefe para luego suspirar con alivio. El demonio de los ojos azules de Domino City no había reaccionado mal para su suerte.
Mientras atrás Seto esperaba que su hermano contestara. Un repiquetear sobre su portafolio con su dedo índice demostraba que estaba impaciente.
-¿Aló?-
-¡Mokuba! ¿Por qué no contestabas?- preguntó enfadado el ojiazul.
-Es que no estaba en mi habitación, hermano... no me regañes...- dijo con voz suplicante.
-De acuerdo... Moki, voy a tener que pasar a la corporación...-
-¡¡pero Seto!! Yo tenía una sorpresa para ti...-dijo quejándose el pequeño.
-Voy a tratar de llegar temprano igual, ¿de acuerdo?- se escuchó un silencio- ¿de acuerdo, Mokuba?-
-Si hermano...- respondió de malagana este.- De acuerdo... no importa...- le volvió a hablar con su voz normal tranquilizando a su hermano mayor que pensaba se había enfadado- ¿sabes? Anecuze está ansioso por hablar contigo, me ha estado llamando todo el día para saber a que hora sales... parece que se le olvida a cada rato...-
-ja, no le creas nada, solo lo hace para fastidiarte...-sonrió con sorna el mayor.
-Y lo logra, de veras... tuve que apagar el teléfono en clase por que no dejaba de vibrar...- Seto sonrió más acentuadamente- bueno, Seto... te dejo...-
-Ok, Moki... nos vemos...-
-Bye-Bye, Seto!- y se cortó.
El castaño guardó el celular en el bolsillo y luego suspiró con alivio. Si no hubiera sido por el chofer no se habría acordado...
-A veces es inevitable depender de ciertas personas aunque te fastidie, Seto...-se dijo así mismo mientras se recostaba en el mullido asiento, tenía mucho sueño.
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El cachorro iba caminando junto a sus amigos rumbo a la fuente de sodas pues como ya habían terminado las clases de hoy no tenían nada que hacer.
-¡¡Hey, Joey!! ¿Vas a ir a ver a tu príncipe azul?- rió Bakura el cual tenía tomado por la cintura a un sonrojado Ryou. Joey se sonrojó fuertemente cuando pasó por su mente un par de ojos zafiros.
-Yoo... ¿Mi príncipe... azul?-preguntó sonrojado.
-Sii, aquel chico con el que chocaste ayer...-rió Duke. Joey suspiró aliviado.
-No, no voy a ir... ¿para que? Quizás luego me lo encuentre...- se encogió de hombros.
-Entonces, di donde vive para ir a echarle una mirada...- Marik, Bakura y Yami se relamieron los labios para luego ser golpeados por sus respectivos hikaris- ¡auch!
Joey sonrió mientras negaba con la cabeza mientras se sentaban en la fuente de sodas.
No iría... aunque....
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Seto llegó a Kaiba Corp. y subió su ascensor privado para luego cuando las puertas se abrieran en el piso correspondiente salir y...
- ¡¡¡¡Seeeeetooooo!!!!!!
Kaiba se vió con el ojiverde abrazado a su cuello cuando aún ni siquiera podía salir.
- ¡¡Anecuze, suéltame!!!!- exclamó molesto mientras le empujaba con la mano donde no llevaba su maletín.
Anecuze se bajó encantado y con una sonrisa mientras le tomaba la mano y le jalaba a su oficina.
- ¡¡Tengo mucho que contarte, Seto, mucho, mucho!!- decía con una sonrisa. El CEO enarcó una ceja elegantemente mientras se dejaba llevar ante la sorpresa de su secretaria y de las demás personas que allí estaban.
- De acuerdo, que nadie nos moleste, Marlen...- le dijo a su secretaria mientras pasaba.
- L-lo que usted diga, se-señor Kaiba...- la puerta de la oficina se cerró de golpe.
El castañito estaba muy emocionado, caminaba detrás de su escritorio con los ojitos brillantes mientras Seto sentado en el sillón de la oficina de su asistente gruñía bajo.
- ¿Vas a decirme de una maldita vez o no? ¬¬
- ¡Seto! Conocí a una persona genial *.*
- ¬¬# no me digas...- dijo por lo bajo molesto, pero el ojiverde no lo notó.
- Si, es un chico súper lindo y dulce, se quedó anoche en mi casa... ¿recuerdas que te dije que vendrían mis hermanos? No pudieron, pero me quedé con él... es un amor, te lo aseguro...
Anecuze estaba mirando a través ventanal dándole la espalda a Kaiba el que cada vez se ponía más furioso y ni siquiera podía ver la sonrisa maliciosa del ojiverde que le miraba a través del reflejo del vidrio. Ahora venía el toque final.
-... creo que estoy enamorado....
¡Páf!
Kaiba tenía a Anecuze sujeto por la camisa pegado al ventanal mirándole fríamente mientras anecuze ponía su cara más desconcertada mientras se carcajeaba por dentro.
- ¿Se-Seto?- preguntó con voz falsamente confundida.
- Aléjate de él...- fue todo lo que dijo Kaiba para luego soltarle y darle la espalda haciendo que Ane se mordiera la lengua para no comenzar a reírse en ese mismo instante.
- ¿De quién, Seto?- fue su inocente pregunta siendo fulminado por la mirada de Kaiba.
- De Wheeler...
Su asistente puso mirada totalmente impresionada.
- ¿Wheeler? ¿Conoces a Joey, Seto? ¡Kawaii!- palmeó feliz haciendo que un gran signo de enojo surgiera en la frente del CEO para no aguantar más y comenzar a reír de manera desesperada confundiendo a su jefe.- Ay, Seto... jajaja...
- ¬¬?
- Seto, tranquilo, tu cachorrito está a salvo de mis garras, no te preocupes...- le cerró un ojo riendo.
El ojiazul se sonrojó fuertemente... ¡Ese infeliz lo sabía todo!! ¡¡Le estaba tomando el pelo a él, a ÉL!! ¡¡EL GRAN SETO KAIBA!!!!
- Aeló...- fue su susurró homicida.
- ^^U Setito... (mira su reloj) Oh! las 6 de la tarde, se acaba mi turno... ¡Bye-Bye!- toma su chaqueta a la pasada y sale corriendo mientras que el CEO de Kaiba Corp. le mira alejarse con el ceño fruncido.
- Maldito Aeló...- se va sonrojado hasta su oficina.
+_+_+_+
Joey estaba en su habitación revisando sus cuadernos cuando de pronto escucha un ruido en el primer piso.
Baja con precaución y entra en la cocina, pero no ve a nadie... ya iba a salir cuando siente un golpe en el estómago.
- ¡Agh!- el rubio cayó al suelo y desde allí miró hacia arriba viendo a su padre. Hasta su nariz llegó el fuerte olor a alcohol que este despedía-... Pa-pá...- gimió.
- ¿A quién esperabas, puto? ¿A Papá Noel?- se carcajeó mientras Joey se levantaba afirmándose de la mesa.- ¿Qué haces aquí y no en el trabajo?
- Es jueves, papá... hoy no trabajo...
- Claro, menos dinero...- le vuelve a golpear, pero ésta vez Joey no cae-... ¿cuánto te pagaron en la mañana en los diarios?
Joey con un gesto de dolor saca un dinero de debajo de un tarro y se lo pasa a su padre.
- ¡¿Solo esto?! No sirves para nada!- le volvió a golpear mientras Joey gemía.
- No, papá... por favor... no más...
- Espera aquí, que voy a buscar la fusta....- y se comenzó a ir.
- No, Papá...- pero su padre no le escuchó.
Haciendo uso de sus últimas fuerzas Joey salió de la casa y comenzó a caminar a la deriva.
Se sujetaba del costado mientras caminaba. Las calles estaban oscuras a pesar de las luces de los postes. Al final comenzó a cruzar una calle y sintió un fuerte dolor para luego caer desmayado.
+_+_+_+
Kaiba había terminado algo tarde en Kaiba Corp. En ese momento había dado la orden a su chofer de llegar rápido a la Mansión, tenía un compromiso con su hermano y aunque ya estaba roto, esperaba poder cumplirlo aunque sea tarde.
Iba concentrado en su laptop cuando un fuerte frenazo hizo que la máquina cayera al piso de la Limusina apagándose. Un gran signo de enfado salió en la cabeza del genio ojiazul que no dudo en apretar el botón para conectar la comunicación con su sirviente para gritarle, pero cual sería su sorpresa al ver que no había nadie.
- ¿Qué demonios...?
Kaiba bajó de su limusina para ver como al frente de su limusina había un pequeño grupo de personas junto con su chofer (*). Se acercó algo curioso pero a la vez enojado.
- ¿Qué pasó?- preguntó enfadado. El chofer le miró algo asustado.
- Bueno... el joven Wheeler apareció de pronto... frené, pero igual pasé a golpearle...- dijo todo de una vez.
- ¡¿Qué??!!
El castaño apartó a todo el mundo y pudo ver efectivamente a su hermoso cachorro desmayado en frente de la limusina como recién golpeado por esta. El CEO de Kaiba Corp. sintió que toda la sangre se le iba a los pies mientras se agachaba a su lado y le pasaba delicadamente la mano por la mejilla encontrándola algo helada.
- No es posible...- susurró.
Pero el chofer había sido más rápido tomándole el pulso y viendo que estaba tranquilo y de que su cuerpo no demostraba heridas externas más que unos golpes (que dudaba fueran por el choque) le habló a su amo.
- Señor Kaiba... Hay que llevar al joven Wheeler a un hospital...
El castaño despertó de su ensoñación y asintió mientras tomaba entre sus brazos el cuerpo del rubio y entraba en su limusina dejando a todos los curiosos sin entretención.
Pronto partió la limusina muy apresurada, con un castaño totalmente desesperado en el interior.
+_+_+_+
Cuando Joey despertó se encontró en una hermosa y amplia habitación que, se dio cuenta de inmediato, no era la suya.
Su primer impulso fue ponerse de pie, pero un fuerte dolor abdominal se lo impidió por lo que mejor permaneció acostado.
- ¿Dónde estoy?- se preguntó mientras miraba su cuerpo vendado-... ¿qué hora será?
Miró y a su costado derecho en la mesita de noche pudo ver un hermoso reloj azul que decía que eran exactamente las 3:30 AM... pero ese reloj tenía algo raro... un logo en el fondo... KC...
- ¡¿KC?!!- exclamó Joey exaltado.
- Hasta que despertaste, perro...- habló Kaiba fríamente mientras abría la puerta y entraba en la habitación.
Estaba vestido con una bata larga de seda azul mientras se veían por debajo unos pantalones de pijama del mismo material, mientras usaba zapatillas de levantarse.
Joey, por el contrario, llevaba un pijama blanco en la parte de abajo y arriba iba desnudo, solo con vendas.
- Ka-Kaiba...- tartamudeó Joey sumamente sonrojado para luego fruncir el ceño.- ¿Qué hago en tu casa?
Una leve mueca se posó en el siempre estoico rostro del castaño mientras se sentaba con elegancia en un sillón un poco alejado de la cama, pero que le permitía ver todo el panorama.
- Primero lo primero... ¿Con quién te agarraste a golpes que estás tan magullado, perro?- preguntó frío.
Joey se sonrojó aún más al recordar la pelea con su padre. Lo último que necesitaba era que un ricachón engreído como Kaiba que se metía todos los días con él más encima supiera de su vida MÁS privada para tener más armas en su contra... no, no se lo diría, que pensase lo que quisiera...
- No es algo que te incumba...- fue su cortante respuesta, mientras se tapaba hasta los hombros con las sábanas al ver la mirada azulina sobre su torso. Seto gruñó levemente a la respuesta.
- Si que me incumbe... mira que ir a desmayarte en frente de mi limusina...- el ojimiel se sorprendió mucho.
- ¿Que yo qué...?- se quedó en silencio un instante ante la mirada escrutadora de Kaiba-... perdón, no fue mi intención...- fue su corto comentario.
Seto le miraba atentamente. Tan lindo... se veía tan indefenso e inocente.
Cuando iban en la limusina notó de que no estaba tan mal como quiso ver al comienzo. Con sus cursos de primeros auxilios pudo ver que solo eran golpes leves, y que más que nada se había desmayado por la impresión, por lo que hubo un cambio de planes y se dirigieron a la mansión en vez de al hospital, claro, llamando a su doctor privado.
Mokuba los había recibido muy preocupado, hasta al nivel de que olvidó de que se había decidido a ignorar a su hermano por dejarlo abandonado.
Al final el médico se había ido, dejándo a Joey durmiendo con receta de unos anti-inflamatorios y reposo.
De pronto Seto salió de su meditación al escuchar un gemido de Joey.
- ¿Qué haces?
- ¿Qué no ves?- puso una mueca de dolor-... me voy...- se estaba tratando de levantar.
El castaño rodó los ojos mientras se acercaba al rubio y le volvía a tirar a la cama ocasionando que este se quejase fuertemente.
- ¡Qué te pasa!
- No, qué te pasa a ti...- le respondió Kaiba-... necesitas reposo, te duele todo... no voy a dejar que te levantes...
- ¡Lo que yo haga o deje de hacer no es tu problema, es solo mío!!- le respondió Joey enfadado.
- ¿Y a mi qué?
-Claaaro, y a ti qué todo... a ti no te importa nada... y como no te importa nada me vas a dejar ir...- lo trata de empujar para poder salir pero Kaiba le pone una mano en el pecho pegándole a la cama.
- No te irás, te quedarás por lo menos hasta la mañana... luego serás todo lo irresponsable con tu cuerpo que quieras... no antes...- fue su cortante respuesta.
- ¡¡NO TE METAS EN MI VIDA!!!!! Yo hago lo que quiera!!!- le golpeó la mano, pero Seto le miró amenazantemente.
- No lo harás mientras yo esté aquí...- Joey se puso a llorar, nunca nadie le había tratado así... nunca nadie se había preocupado tan fervientemente por su seguridad... pero... no se puede confiar en Kaiba, quizás lo hacía para luego burlarse de él.
- ¡Suéltame, tú no eres nadie para...!
- Lo soy... soy tu dueño...- le tomó la barbilla y le besó fuertemente mirándole atentamente a los ojos.
Joey estaba perdido en esos zafiros... aún contra su voluntad sus ojos se cerraron disfrutando de ese beso hasta que Seto le soltó dejándole con los ojos cerrados y jadeante en la cama.
- Soy tu dueño... no me hagas amarrarte para tenerte quiero, cachorro...
Y se arregló la bata para luego salir de la habitación sin mirar atrás dejando a un confundido y avergonzado Joey.
El rubio se giró levemente cobijándose mientras por sus ojos mieles comenzaban a caer suaves lágrimas.
¿Por qué hacía eso Kaiba? ¿Para fastidiarlo? ¿Para restregarle en la cara lo que jamás tendría?
Y entre lágrimas y por qué’s, se quedó dormido.
+_+_+_+
Afuera de la habitación Seto se tocaba los labios mirando la nada y a la vez todo. Sus ojos perdidos en un punto muerto mientras que sus pensamientos eran un torbellino que ni siquiera le dejaban pensar algo fijo.
Se pronto una vocecita le despertó.
- ¿Seto? ¿Cómo está Joey?- preguntó Mokuba saliendo de su propia habitación y viendo a su hermano mayor afuera de su habitación la cual había cedido para el rubio.
- Yo... mejor... ya despertó, Moki...- le sonrió levemente.
- Me alegro...- le mira atentamente-... ¿pasa algo, niisan?-
Seto se sonrojó, nuevamente se había quedado mirando la nada.
- Ehh, no... ¿Qué va a pasar?
- Niisan...- tono de regaño de Moki que hizo que el castaño se sintiera como un niño que hace una travesura y le han descubierto.
- Nada, Moki, en serio...
- Vamos, Seto...- Moki le toma la mano y le jala hasta su habitación-... tengo toda la noche, cuéntame... ^^
- ¬¬ Tienes que dormir, mañana tienes clases...
- Niisan...- nuevamente tono de regaño.
- Está bien...- aceptó a regañadientes el mayor y se cerró al puerta del menor de los Kaibas.
+_+_+_+
Joey estaba durmiendo plácidamente cuando de pronto comenzó a escuchar unos leves pasos que iban y venían por la habitación.
Trató de opacarlos con la almohada, pero de pronto recordó donde estaba y se sentó de un salto ocasionándole un gemido.
- Ayayayay...- se quejó tocándose el costado.
Levantó al mirada y se topó con un Seto con apenas los pantalones del colegio, y con la demás ropa en la mano, que le miraba algo sorprendido. Joey se sonrojó fuertemente al verle de esa manera, pero su inconciente no pudo evitar pensar “¡Lástima no haber despertado un poco antes!” ocasionando de que se sonrojase aún más.
- ¿te desperté? Lo siento...- Seto camina hacia la salida.
- ¡Espera, Kaiba!- Joey el llamó. El CEO se giró levemente enarcando una ceja como preguntando “¿Qué?”-... yo... ¿yo no iré al instituto?
Seto enarcó ahora ambas cejas y puso una graciosa mueca.
- ¿En tu estado? Ni lo sueñes...
- ¬¬ Ni que me estuviese muriendo...
- Pero necesitas reposo, fin de la discusión...- se iba a ir cuando fue detenido nuevamente por la hermosa voz de su cachorro- ¿Ahora qué?
- Son las 7 AM...
- ¿Y?
- Yo tenía entendido de que te ibas a tu Corporación a las 5:30...- Kaiba posó una levísima sonrisa.
- ¿Y cómo sabes tú eso?
Joey abrió ampliamente sus ojos mientras se sonrojaba.
- Yo... este... eh...- cómo no saberlo si todos los días se levantaba un poco antes para verle llegar para luego irse a su trabajo de repartidor de diarios... obviamente que jamás lo diría-... pues, Mokuba me lo contó...- una mentirilla blanca no haría daño.
- Pues... mantuve a Mokuba despierto hasta las 5... por respeto a él (siempre se despierta conmigo) decidí no ir a la Corporación hoy...- esperen... ¿él le estaba dando una explicación al perro Wheeler?-... aunque no sea algo que te importe...- agrega comenzando a marcharse.
- ¡Espera!- Seto gruñe un poco sin voltear-... dijiste que hoy me podría ir... quiero ir a la preparatoria...
Kaiba le mira por sobre el hombro para luego sonreír maliciosamente.
- Claro, ve... tu uniforme está allí, todo manchado con sangre y sucio. Claro, tampoco tienes tus cuadernos... los pasarás a buscar?
Joey se sonrojó. Kaiba tenía razón, no podía ir.
- entonces.... me iré en el transcurso de la mañana...- dijo pasito.
El castaño vio su perfil triste y suspiró.
- En el armario hay uniformes y camisas, ocúpalos... abajo te daré un cuaderno...- se va cerrando la puerta dejando a un sorprendido Joey.
- Gra-gracias... Seto...- dice a la nada sonrojado para luego levantarse con cuidado y comenzar a vestirse.
Seto bajó hasta el comedor donde el esperaba sonriente Mokuba. Se sentó en su lugar mientras veía como la cocinera servía un tercer plato.
- ¿cómo sabías que bajaría a desayunar?- preguntó al pelinegro el cual rió.
- Los cachorros desvalidos tienen fuerte poder de convencimiento sobre ti, Niisan...- se carcajeó haciendo que el castaño se sonrojase fuertemente.
- ¡Mokuba!
Seto tomó su taza de té y comenzó a tomar un poco mientras que Mokuba dejaba su desayuno sin tocarlo.
- ¿Qué esperas?
- ^-^ a mi cuñado...
Seto se atoró manchando su uniforme con el té.
- ¡Seto! Qué descuidado eres...- se rió Moki mientras Seto se limpiaba sonrojado, pero quedó la mancha.
- recuérdame jamás volver a contarte algo...- susurró mientras se levantaba y volvía a su habitación a cambiar su uniforme.
Cuando entró vio un uniforme en la cama y el sonido de la ducha de su baño sonando por lo que supuso que el cachorro se estaba bañando.
Se cambio lanzando el sucio al canasto y salió, aún cuando su cerebro le gritaba que entrase a aquel baño.
No llevaba ni dos minutos sentado nuevamente con Mokuba cuando vieron como Joey bajaba a desayunar.
La verdad es que se veía hermoso, con el cabello húmedo cayendo por sus hombros y por su frente, sus ojitos brillantes, y sus pasos seguros, aunque su rostro hacía leves muecas de ves en cuando.
- ¡Joey!- le saludó Mokuba levantándose y yendo a abrazarlo con ternura y cuidado.
- ¡Chibi! ¿qué tal, Moki?
- Bien... ¿cómo te sientes tú?
- jajaja, he estado peor y también mejor... jajaja...
- No pierdan el tiempo y siéntense- ordenó Kaiba.
Ambos chicos asintieron sentándose cada uno a un lado de Seto (él estaba a la cabecera).
- ¿Quiere tostadas, señor?- preguntó la cocinera.
- Yo...- miró a Seto quién asintió-... muchas gracias, y dígame Joey, por favor...- le sonrió tiernamente.
- Está bien, señoriíto Joey...- le sirvió.
Estaban desayunando tranquilamente hasta que Joey habló.
- Por cierto, disculpa, Kaiba, use tu ducha... es que apestaba a medicamentos...- el CEO asintió quitándole importancia.
- ¿Y las vendas?
- Yo... me las quité...
Seto suspiró. Ya los tres habían acabado y la señora comenzó a recoger.
- Yo le ayudo...- se ofreció Joey levantándose, pero hizo una mueca por el movimiento.
Seto se levantó.
- Mokuba, ve a la limusina, nosotros vamos enseguida... Perro...- comenzó a caminar ha las escaleras.
- Pero...
- ¡Ahora!
Joey le siguió a regañadientes y cuando entró en la habitación en la que había dormido no vio a Kaiba.
- ¿Kaiba?
El ojiazul salió del baño con unas vendas limpias.
- Quítate la chaqueta y la camisa...
- Pero...- la mirada del CEO le hizo obedecer.
Seto le colocó la venda mientras el sonrojado Joey se dejaba hacer. El roce de aquellas manos con su piel le estaba acalorando, pero de pronto todo se detuvo.
- Vístete, vamos... aquí está tu cuaderno...- le dejó un cuaderno en el escritorio y salió de la habitación.
Joey se arregló y siguió al ricachón engreído hasta la salida de la Mansión donde les esperaba la limusina con Mokuba adentro.
- Vamos, que ya es tarde...- dijo el peque sonriendo.
Primero pasaron a dejar a Mokuba que le dio un beso en la mejilla a Joey y le cerró un ojo a Seto para luego despedirse de ambos con la mano.
Luego llegaron a la preparatoria donde entraron juntos.
Gracias a las vendas Joey ya no sentía casi nada de dolor e iba igual que siempre, con una pequeña diferencia.... al lado de Kaiba.
- Joey, ¿Qué haces con Kaiba?- le preguntó Tristan cuando les vio entrar juntos.
Joey se sonrojó fuertemente al comentario mientras que Seto hizo como que jamás le hubiera oído. Se sentó en su pupitre y sacó su laptop pasando de todos aquellos que allí estaban.
El rubio se sentó ignorando la pregunta de su amigo echándole una mirada al ojiazul para luego volverse a sus amigos y volver a la rutina... aunque esa mirada no fue la única del día...
Continuará...
Nota de Yakumo: Kiaaa!!!!!!!!!!!! Acabado!!! Este fic está acabado!!!!!!!!!!! *o* la verdad es que de este fic tenía el primer y el tercer (último) capítulo... me faltaba el del medio ;O;, pero ahora por fin lo he hecho!!!!!!!!!!!!!!!!! Está listo!!!!!!!!!!!!!!!!
Kurama: Ya era tiempo, más de un año...
Yakumo: U_U Si, gomen... pero ahora por lo menos está acabado... en una o dos semanas subo el tercer y último cáp...
Kurama: Pero falta el epílogo ¬____¬
Yakumo: ^^UU lo hago al tiro, no se me preocupen....
Kurama: ¬¬ Contigo, es mejor preocuparse...
Yakumo: ;O; no seas malo... por cierto... cuando comencé este fic todavía nuestros personajes originales no se nos enredaban... (Antul y Alistar: Luna Shinigami; Lucio: Kaede Sakuragi; Kae Yoshida: Sehren Kou; Anecuze Aeló; Yakumo) y yo colocaba como pareja de Ane a Lucio, pero ahora TIENE que ser Antul con Lucio y Anecuze con Alistar... así que... Kae, te quedaste con Mokuba...
Kae: ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡SIIIIIIIIIIIIIIIIIIII!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! *________* (abrazando a Mokuba y comenzando a besarlo fogosamente sonrojándolo)
Kaiba: ¡¡¡¡¡¡¡Suelta a mi hermano!!!!!!!!!!!!!!!
Yakumo: ¬¬ Déjalo... si al final se lo pasará bien igual XD... Bueno... el próximo capítulo ya estaba listo pero tuve que arreglarlo para que quedara bien ^^U... así que... ¡Nos vemos! Bye-Bye Nanoda!!!
Símbolos Raros XD:
(*) Sé que sonará repetitivo esto del atropello... ¿Por qué siempre atropella a Joey la limusina de Kaiba? ¿Será de que es el único automóvil de Domino City? ¿Será de que hay que hacer que el CEO cambie a un chofer más eficaz? ¿Será de que debemos pagarle a Joey unas clasecitas de ingenio a la hora de cruzar calles? ¿O será de que las autoras necesitamos más situaciones para colocar a Joey rendidito a los pies de Seto? XD
¡Muchas gracias a todas(os) las (los) que leen este y mis demás fanfics!!!
Gracias por esperarme:
Kaede Sakuragi: Kae-chan!!! (la abraza) casi siempre eres la primera en dejarme reviews en mis fics... ¡Muchas gracias! y respecto a los proyectos... ^^U ya no son 120 ni mucho menos... son más de 230... ^^U nos vemos, espero que te guste este cáp! Besos!
Shasier: ¿Quién ha negado alguna vez que este par no sea deseable? *o* son bellísimos... espero que este cáp te guste tanto como el anterior... perdón por la espera taaaaaaaaaan larga U_U, Kisses!
Shaina: Shaina bonita! (se cuelga de su cuello y le besa la mejilla) ^^ te agradezco los halagos, sobre todo por que este es un fic totalmente original *_* no basado en nada... por lo que si te gusta la trama es totalmente mío el premio XD Kurama: ¬¬ Tonta... Yakumo: ¬¬ Tú cállate... ^^U bueno, respecto al cumple de Joey... no puedo decir nada... tienes que esperar XD... Besitos!
Lilin-Sensei: ^^U gomen, ya te dejé en ascuas, no? (Yakumo se acerca a una pared y se da en la cabeza) ,@.@,... lo siento mucho... pero espero que te guste mucho... y perdón otra vez TT.TT... Bye-Bye Nanoda! Kisses for You!!
Yura-chan: TTOTT... pues... ya lo continúe... espero que te guste, preciosa nn besitos!
Edith: Hola, corazón!... supongo que ya no eres tan nuevita ^^U... pero, no te preocupes, apenas suba el cáp te enviaré un e-mail nnU... espero que te guste, linda... Bye-Bye Nanoda! (PD: A mi también me encantan cuando se hacen de rogar *o*)
Y a las que no dejaron review o lo dejarán pronto: No me maten!!! TT.TT ya actualicé y tendrán el final de la historia máximo la primera semana de Noviembre... ¡no me maten! TToTT
Muchos besitos, Bye-Bye Nanoda!