Una semana después...
Grimmjow
Hoy sera un buen dia para matar, la emoción de la batalla me mantiene inquieto. Llegamos al lugar donde se desarrollara la confrontación y vemos que la otra tribu esta presente también.
Ambos batallones están listos y esperan la señal de sus jefes, yo me encuentro entre el grupo de los arqueros junto al barbas de chivo de Starrk y otra gente experta en lo mismo que nosotros dos. Zangetsu levanta la mano, se que cuando la baje la batalla dara inicio; dos minutos después la baja gritando: a ellos, destrozenlos sin piedad. Todos corremos como en estampida; alisto mi arco y saco una flecha para ir deshaciendome de todo el se que se me atraviesa.
Sin darme cuenta alguien me ha atravesado con una lanza, maldito no se saldra con la suya si piensa matarme. Lo tomo del cuello y lo golpeo hasta ver como mi mano queda untada de su sangre y su rostro no es ni la mitad de como era antes; la sangre fluye por mi herida pero no me defalleceré tan facilmente porque soy muy fuerte. Yo soy Grimmjow Jeaguerjaques, la pantera de la tribu Coyote, y ninguna lanza sobre la faz de la tierra va acabar con mi vida.
Continuo peleando hasta que me libero de todos los que me asedian, aunque de repente pierdo el sentido y caigo inconsciente sobre el pasto.
Byakuya
Pertenezco al grupo de las lanzas junto con Renji, ambos nos hemos enfrentado a bastantes con valentía pero tenemos cietras heridas de menor importancia en los brazos y piernas.
Demostrare el valor que tiene mi familia, en esta batalla soy su representación. Asesinar no me genera ningun sentimiento de remordimiento ni atormenta mi conciencia, por ello no me duele ver como mis enemigos quedan empalados por mi lanza, mientras su sangre la mancha. Se que mi novio tampoco tiene problemas, es un gran guerrero, un hombre que no tiembla al enfrentarse a quienes se cruzan en su camino impidiendole el paso.
Me distraje viéndolo desenvolverse ante el combate y no me fije cuando una flecha me atraveso el pecho impidiéndome respirar con normalidad, caigo de rodillas sobre el fango y Renji corre hacia mi, asesina a todos los que me intentan atacar y llega hasta mi librandonos a los dos de quienes nos quieren acabar con nuestras vidas. Al terminar con ellos, me toma entre sus brazos y me llama a gritos, yo solo puedo sonreírle y luego cierro mis ojos.
Starrk
En cuanto vi a Grimmjow desplomarse lo lleve con los enfermeros de nuestra tribu para que se encarguen de el y su salud.
Regrese a la confrontación para vengar a mi amigo, y por defender mis propios ideales y convicciones. Es mi tribu la que atacan: por ello estoy iracundo y deseoso de derramar sangre enemiga, mi padre tiene razón cuando dice que uno debe defender aquello en lo que cree sin importar lo que haya que hacer.
Le demostrare a esa tribu quien es Coyote Starrk, principe de los Coyote, hijo del mejor jefe indio de todo el territorio de Texas. Cada vez que alguien cae por mis flechas agradezco a los dioses mis aciertos.
Pero el orgullo te descontrola de tus obligaciones y te hace pagar tu soberbia con un precio muy elevado. Siento como una lanza enemiga se introduce por mi espalda haciéndome perder el equilibrio y caer inconsciente al suelo lodoso.
Zangetsu
Mi hijo Starrk ha caído herido, lo llevo con los que pueden cuidar de el. Mi lanza es tan certera que me abro paso entre los cadaveres y enemigos que encuentro hasta que finalmente llego con Ray y Kasura
espero que hayas disfrutado ver como tu hijo era atravesado por la lanza de mi mejor guerrero, es para que te quede de escarmiento por rechazar a mi hija en tu familia. Ahora tu tribu se ahogara en su propia sangre, mientras nosotros celebramos sus muertes, y en cuanto a ti, te arrancare la cabeza y la llevare como trofeo para colocarla de adorno en mi tienda- dice de manera tan venenosa que me repudia
ya veremos quien le arranca la cabeza a quien- le respondo enfrentandolo.
Nuestra pelea se prolonga hasta que logro darle un golpe tan certero que queda moribundo
esto es por Starrk y mi tribu- le digo con odio un minuto antes de traspasarle el cuello con mi lanza y arrancarle la cabeza sin piedad, arrojándola lejos.
Esto no me da tiempo de reaccionar antes de sentir como me atraviesan el vientre con una daga rasgandome el interior abruptamente, una flecha detiene a mi agresor, y una lanza acaba con su vida. Aquel que intentó asesinarme fue Kasura, pero Kisuke y Shunsui la interceptaron a tiempo.
Aunque eso no evita que yo desfallezca mientras mantengo una mano en mi vientre sangrante y caiga perdiendo el sentido.
Jushiro
La batalla dejando a bastantes heridos y muertos, mi equipo y yo intervenimos tan pronto como podemos. ¿Porque tenia que haber una masacre? ¿Porqué recurrir a la violencia? Las guerras solo dejan pena y dolor en los corazones de quienes la viven o la presencian.