Era temprano, el profesor hatake kakashi leía aquel libro para sus alumnos hasta que se percató de un par de orejas puntiagudas que se aparecieron en su alumno rubio. Nadie lo notaba porque sus miradas iban sobre alumno uchiha que apareció con aquel aspecto tan distinto, siendo la atención de chicos y chicas.
-bien, si no van a atender la clase, será mejor que guarden sus cuadernos para recibir el examen – dijo el profesor obteniendo las miradas de todos sobre el
-¡¿qué?!... no profesor, por favor siga con la lectura…- pidieron sin percatarse de la cola esponjosa que acababa de aparecer, meneándose de un lado a otro
Sasuke dejó escapar un suspiro pesado, realmente se sentía fastidiado, ahora no solo tenía a un grupo de chicas, sino también a un grupo de chicos y eso cada vez lo estaba estresando más.
-y todo es por culpa de ese usuratonkachi – frunció sus cejas y giró la mirada hacia el lugar donde naruto se encontraba, sorprendiéndose al ver las orejas y cola de aquel rubio invocadas con la mirada hacia afuera. Se levantó sudando frío siendo nuevamente la atención de todos-…
-¿le sucede algo… señorito uchiha?
Aquel nombramiento de su profesor le sacó un tic en su ojo izquierdo, pero luego se le fue al volver a ver a naruto.
-no me encuentro bien, me iré a la enfermería – cogió sus cosas y sin esperar a que dijera algo el profesor, salió con prisa
El profesor dejo de observar por donde se había ido el uchiha para colocar su vista en su rubio alumno que se encontraba de pie mirando al igual que los demás aquella puerta.
-¿y naruto-kun, usted también me dirá que se encuentra mal?
-¿eh, yo? – obtuvo la atención de todos que parecía no gustarle aquello – no, no. Yo me encuentro bien jejeje
-entonces deshaga su invocación para seguir con la clase, entendido
–sí, claro kakashi-sensei
El profesor sonrió al ser escuchado para luego volver a abrir su libro y seguir con la lectura, mientras que naruto se encontraba con la cabeza aun en otro lado, exactamente sobre su rival.
-ya me decía que algo andaba con el teme, ese aspecto no es normal… aunque… debo admitir que se ve completamente apuesto…- su cola volvió a aparecer moviéndose de un lado a otro- ¡no! Ese maldito uchiha es horroroso… no, no y no, yo jamás consideraré al teme apuesto, no, ni aunque tuviera mil derrotas…- se cogió la cabeza frustrado- pero que cosas estoy diciendo, no debería de estar pensando que si se ve lindo o no, la cuestión es vencerlo, pedir la revancha y hacerlo caer. ¡Si, esa es la meta!- emitió un gruñido sin darse cuenta recibiendo un golpe en la cabeza
-será mejor que vaya a la dirección, naruto-kun… ahora
No hubo suplicas para hacer cambiar de opinión al profesor, volviendo a estar dentro de la oficina de la directora que lo veía con un tic en la ceja.
-otra vez aquí, mocoso. Acaso no te han enseñado a comportarte – soltó nuevamente enfadada para luego observar la puerta- ¿y el uchiha? Dile que pase de una vez
-el teme no está fuera, se encuentra en la enfermería, está mal
-¿cómo dices?- se comenzó a reír para sorpresa del rubio- estas bromeando verdad. No me vas a venir a decir que pelearon y le dejaste herido hasta llevarlo a la enfermería, porque eso sería imposible… menos aun viniendo de ti que ni siquiera logras darle un certero golpe al uchiha…- comenzó a carcajearse cada vez más fuerte
-¡es en serio! – Se levantó avergonzado por aquella humillación- sasuke se encuentra en la enfermería, está cambiado…
-hay, ya basta… deja de hacer bromas. ¿Sasuke uchiha en la enfermería? Por favor, es…jajaja… ese uchiha es nuestro as, con el solo podríamos ganar fácilmente las regionales
-¡puede siquiera escucharme, vieja!... sasuke tiene… – recibió en la frente un pisapapeles volador que le dejó marca - ouch… ¡¿pero qué le pasa?!
-soy la directora, así que ten más respeto…- dio un suspiro largo después de haberse reído- bien, si dices que… que sasuke se encuentra en la enfermería… se puede saber porqué
Naruto terminó por sobarse la frente, aun sin poder quitarse aquella marca rojiza – no lo sé realmente, pero el teme vino… cambiado… ¿Cómo decirlo?... sus ojos parecen más oscuros y brillantes… muy atrayentes- aparecieron sus orejas de zorro siendo visto por la directora con total atención mientras que el rubio seguía hablando sin percatarse- sus cabellos parecen abundantes como el pelaje de conejo… ¡no!... como esos gatos angora que dan ganas de acariciar, ¡si, como esos!…- su cola apareció moviéndose intranquila- su estatura no es la misma, es un poco más bajo…y su piel…- su cola se sacudió con fuerza dejando que se le escapara un gruñido- su magnífica piel es lo que quiero… - sus ojos se pusieron rojas
-naruto
Volvió a la realidad siendo mirado por la directora que se encontraba seria.
-desde cuando has comenzado a usar tu invocación de zorro sin parar
-¿cómo dice?
-que desde cuando no dejas de usar tu invocación
-eh… bueno…- trató de hacer memoria y realmente que no llegaba a la fecha adecuada. Siempre tendía a buscar peleas para así entrenarse y ser tan fuerte para ganar al uchiha- creo que hace más de un mes
-aahh, demonios – se cogió la cabeza para luego recordar algo y presionar el botón del teléfono- shizune, tráeme el expediente de sasuke uchiha y de naruto namikaze, entendido
-claro, directora stunade
Esperaron un rato y naruto había deshecho su invocación, sentado frente a la directora y sin dejar de observar aquellas bolitas de metal que le llamaba la atención.
-aquí está, directora tsunade – le entregó las carpetas a la rubia y salió sin decir mas
-ya me decía…- dijo chequeando la carpeta de información del uchiha- la invocación de sasuke es aún más especial de lo que creía – cogió la carpeta del namikaze y lo inspeccionó- pero el tuyo resulta muy extraño… aquí dice que heredas el zorro de desierto por tu padre… aunque con lo que acabo de ver…
La campana sonó y los alumnos comenzaron a hacer ruido por los pasillos ya que era la hora del receso, por lo que la rubia directora dejó salir al namikaze mientras que estudiaba todo aquello que pasaba en ambos muchachos.
-será que si es verdad que las invocaciones puedan entrar en celo- se preguntó tsunade mientras observaba ambas carpetas
La mayoría del alumnado se encontraba frente a la puerta de la enfermería, las chicas no paraban de conversar intranquilas y los chicos se encontraban algo nerviosos mirando de un lado a otro.
A una distancia de ellos, se encontraba naruto, observándolos confundidos, ya que había optado por ir a la enfermería y hablar con sasuke para que le sacara de dudas, pero con aquella multitud le sería imposible.
-grr…- gruñó sin querer mientras se volteaba- ese gato puede ser la atención de todos, me da igual. No me preocuparé por él.
Sus pasos se detuvieron al sentir un aroma que lo llamaba, dirigiendo su mirada en aquella parte de afuera del edificio de la escuela.
-… es solo la ventana de la enfermería- iba a desviar su mirada, pero se percató de unas orejas de gato que se asomaban junto con aquella cabellera esponjosa- ¿sasuke? – se sorprendió al ver al uchiha saliendo de la ventana de la enfermería, escalando por una parte del monumento esquinado con ayuda de sus filudas garras- ¿pero qué está haciendo ese teme?
Sasuke trepaba con algo de dificultad, aun así llego hasta la azotea, donde se metió agitando la cola.
Naruto hizo un sello de invocación, apareciéndole nuevamente las orejas y cola de zorro.
-no sé por qué salió así de la enfermería, pero ni crea que me quedaré con la curiosidad de saber lo que le pasa – saco sus garras y aunque sabía que no le resultaría tan fácil como aquel gato, buscó con la mirada el modo de treparse hasta llegar a la terraza- bien, aquí vamos – sonrió y comenzó a subirse al árbol para luego saltar sobre un conducto de ventilación que le hacía facilitar llegar a la cima, comenzando a subir entre brincos y agarres.