Sucedió entonces mientras caminaban entre las flores por aquel prado. Taemin se quedó mirando el lugar ensimismado
-Taebaby sucede algo-
-No es nada- le contesto con una sonrisa en la cara –Y bueno que era lo que tenías que decirme-
-No es conmigo que vas hablar sino con él- salió de entre los arboles Minho que se acercaba hasta ellos sobre su caballo
-Me traicionaste!!!- tratando de irse del lugar
-No bebe espera no es lo que crees yo me quedare junto a ti- No se trataba de un favor para Minho, sino para los mundo a pesar de todo él tenía que tratar de mantener el equilibrio, era su tarea para eso estaba en este mundo
Taemin cayó al suelo con lágrimas en los ojos se sentía traicionado y tenía miedo, mucho miedo del hombre que se aproximaba su verdugo, algo parecido a recibir una condena de muerte era lo que sentía al verlo a cercarse a ellos –Por..ppor favor no me dejes- casi resignado por la situación
-No lo hare Taebaby-
Minho se bajó del caballo. Ambos Key y Taemin se pusieron de pie, pero Taemin se escondió inmediatamente detrás de Key
-No te hare daño-
-Minho. No te creerá mucho no es obvio-
-Tienes razón- Apenas se veía Taemin detrás de Key –Podrías dejarnos un momento-
-La verdad Minho solo accedí por algo muy puntual, no dejare solo a Taemin-
-Esta bien- Minho se arrodillo ante ambos –Esta claro que lo que hice no tiene perdón, pero aun así me quiero disculpar por todo, por tenerte contra tu voluntad, por despertar en ti otros sentimientos, por ilusionarte, por hacer juramentos en vano, por violar…- no pudo continuar le dolía solo pronunciarlo
-PARA!!- grito Taemin –Por favor no lo digas- con el llanto ya corriendo por sus ojos –Por..por favor no-
-Lo se te hice mucho daño y merezco todo tu desprecio, aun así me disculpo, Perdón Taemin princesa de los humanos- Minho se sonrió –No, rey de los demonios- suspiro profundo –No volveré a cometer errores- se levantó del suelo y con el llanto en el borde de sus ojos –Taemin eres libre, puedes irte a tu reino llévate el caballo, vete y se feliz por favor-
Taemin lo miro sorprendido, no podía creer lo que escuchaba, después de rogar tanto por fin podía irse a su hogar, volver a sus tierra lejos de todo de esta pesadilla, hacer como si esto fuese un mal sueño, pero ¿podría? su corazón se estrujaba de dolor, era lo que quería pero....
–No puedes irte Taemin- se giró Key hacia Taemin, quien aún no reaccionaba, le tomo por los hombros y le rogó –No Minho no me puedes hacer esto- dirigiéndose a Minho
-Lo siento Key, es algo que ya lo decidí Taemin eres libre-
-No Taebaby- lo abrazo al igual que el con sus lágrimas desbordadas. Fueron más de unos minutos hasta que Key hablo conformado con la situación –Cuídate bebe estaré aquí si necesitas algo ya sabes…No no quiero- se volvieron abrazar y a llorar juntos.
-No te olvidare gracias por todo Key-
-Gracias a ti por sacarme de esa oscuridad- una sonrisa y Key secaba esas lágrimas rebeldes de Taemin
-Bueno tienes que irte-
-Si- Taemin se acercó al caballo y giro a ver a Minho este ya se había encaminado a pie. La mirada de odio que le regalo a sus espaldas, atemorizaba a cualquier alma.
Se sentía feliz de volver a su casa con su familia, pero a su vez triste porque tenía que dejar personas o más bien demonios importantes a Key era casi como su madre, protector confiable y además su primer amigo desde que llego ahí y su confesor desde el día uno, extrañaría su presencia, su compañía en todo momento.
Por Minho no quería sentir nada, no se merecía ni siquiera su odio porque eso sería percibir un mínimo de sentimientos hacia él y en esos momentos estaba en blanco, no quería agradecerle por dejarlo partir era algo poco a todo lo vivido, tampoco por la disculpa era algo que sentía falso, como si solo lo hizo por cumplir, tampoco quería discutir que le falto el te amo no te olvidare, pero jamás lo escucho, solo rememoro lo que quería olvidar.
No le importo en lo más mínimo lo vivido, fue simplemente una raya en el agua para él, que paso con todo lo que se dijeron las promesas solo fue nada –convéncete Taemin- se decía mentalmente
–Adiós- Se hecho andar sin mirar atrás, mientras Key solo lloraba al verlo partir, esta sería la última vez que vendría en buenos términos, la próxima vez sería diferente, desde hoy nacía un nuevo Taemin se decía mientras cabalgaba con fuerza hacia su libertad
Mientras caminaba unas lágrimas bajaban por sus mejillas hasta el suelo, no pudo sostenerse más en pie y el llanto desbocado salía sin parar
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–A..Adiós amor- terminando la frase en un susurro, por fin sabía lo que en realidad, se había enamorado de verdad de Taemin, no lloraba por su recuerdo de Hikari, ni por la sombra de su antiguo amor yacía en Taemin, lo había entendido unos meses antes cuando solo añoraba su sonrisa, su tono de voz, su mirada, sus caricias, sus besos y solo los de él, por eso se había recluido para pensar y aclarar su mente y sus sentimientos, por fin había llegado como una epifanía lo amaba de verdad, lo amaba con todo su ser, con todo su corazón y por lo mismo no tenía perdón a lo que había hecho, por lo mismo busco alguna forma de remediar en parte lo que había hecho y en su búsqueda encontró que la mejor forma de decir lo siento, era dejarlo ir, no podía hacerlo feliz como prometió, como podría si aquel que tanto amaba lo odiaba y no quería si quiera a cercarse a él, era algo obvio el daño ya estaba hecho
-Adiós mi querido príncipe Taemin gracias por darme tanto, gracias por hacerme amar nuevamente, fuiste mi ángel en la oscuridad, me diste tanto y yo…yo yo solo AHAAAAAAAA!!!!!- golpeo el suelo con rabia
Key que miraba a Minho a lo lejos descubrió lo que guardaba en su corazón ese demonio testarudo –Lo amas- se sonrió