Sasuke pov
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Este último tiempo verdaderamente ha sido muy duro, no tener a Naruto a mi lado, su sonrisa cada mañana, su alegría en la casa… realmente deprime y aunque eh tratado de ser fuerte, no sé si pueda aguantar mucho. No pierdo la esperanza de que despierte y nunca las perderé pero… algo en mi está fallando, lo noto en mi apariencia, en mi vestimenta y en el olor a trago que estoy llevado últimamente.
-Fuuu- Suspiro cansado mientras me tumbo a la cama, son las siete de la mañana y hasta penas llego a mi casa, algo mareado por la bebida que llevo en la sangre.
Lentamente me volteo para sostener mi cabeza un poco, tratando de apaciguar el dolor que se empieza a hacer presente… falta poco para que tenga que llevar a los gemelos a la escuela y después de eso cuidar a mis hijos… Ja mis hijos, la verdad no merezco tenerlos, me cuesta mirarlos al ver en ellos esa sonrisa tan típica que tenía mi rubio.
-Naru te extraño tanto- Digo al aire sintiendo como esas gotas salinas resbalan por mis mejillas- Despierta por favor, no soporto un minuto más sin ti.
***************** TIEMPO DESPUES ******************************
Un leve rayo de sol me pega en la cara por lo que abro los ojos encontrándome con un despertador que marcan las 12:01 PM – Dios me quede dormido – Menciono parándome de golpe – Los niños- Los tenía que llevar a la escuela a las 7:30… maldita sea porque me tiene que pasar esto a mí.
Salgo rápidamente de mi cuarto dirigiéndome a la zona donde están los cuartos de los niños entrando primero a la pieza de Akira pero grande fue mi sorpresa al encontrar todo ordenado y bien puesto y sin un rastro del niño, por lo que me dirijo ahora al cuarto de Asahi donde me encuentro todo exactamente igual.
-AKIRA… ASAHI… ¿Dónde están?- Les llamo pero inmediatamente noto el silencio que hay en la gran casa hasta que
-Buu buaaa *Sonido de llanto de bebe* -
Corro rápidamente al cuarto donde están los trillizos viendo como la niña le jala el cabello a su hermano mayor notando como falta mi tercer hijo- ¿Qué sucede? ¿Dónde está su hermano?- Les pregunto sabiendo que no voy a recibir respuesta por parte de ninguno por lo que les miro y sonrió, viendo en ellos a mi lindo Naru.
-Sí que te has vuelto buen padre- Dice Itachi, llegando por mi espalda con mi tercer pelirrojo
-¿Qué haces aquí?- -le pregunto sin dudar mientras que frunzo el ceño.
-Hola hermano, yo estoy bien ¿Y tú?- Me dice con sarcasmo
-No me vengas con idioteces – Le corto quitándole al bebe de las manos- ¿Dónde está Akira y Asahi?
-Tranquilo, Dei los a llevado al colegio y ahora mismo debe estar haciendo las compras de la casa
-…
-Tienes que mercar cada quince días, recuerda que estás viviendo con niños y ellos comen mucho y más que los trillizos están probando comida salada- Me aconsejo
-Eso ya lo sé, no me lo tienes que decir- le corte- ahora dime ¿Qué haces aquí?
-Fuu, la verdad es que desde que te mudaste de la casa, no sabes de ti, si entiendo que ese lugar te lo recuerde pero mama quiere ver a sus nietos y quiere saber si estas llevando bien el coma d…
-Dile que estoy bien, no se tiene que preocupar… Además ella los ve toda las tarde, le llevo a los menores y recoge a los gemelos, es suficiente con eso.
-Si pero también quiere saber de ti-
-Pues estoy bien
-Vamos Sasuke ella quiere hablar contigo, le duele verte así y yo sé que es duro el…
-¡NO! ¡Tú no sabes que es sentir que la persona que más amas muera cada segundo!, ¡No sabes que la impotencia que se siente saber que no puede hacer nada para ayudarle!, ¡No sabes que es sentirse solo!
-…
-Perdóname, no quería hablarte así- Me disculpe tras ver su silencio
-Tranquilo después de todo tienes razón… soy yo el que no debe meterse- Me dijo
-¿Sera que podrías cuidar un momento a los niños?- Le pedí para cambiar de tema
-Claro… ¿A dónde iras?- Pregunto pero inmediatamente se arrepintió
-Tranquilo, iré a darme un baño.
Sin más salí de la habitación dirigiéndome a la mía para darme un baño y tratar de renovarme.
Cuando estaba a punto de salir oí como sonaba la puerta del frente por lo que intuí que era Deidara pero antes Itachi toco a mi puerta.
-Sasuke ¿Ya estas listo?
-Si- Le conteste por lo que el paso- ¿Necesitas algo?
-mmm…
-Vamos ya suéltalo
-Pues… Es que Dei y yo queremos quedarnos con los trillizos y pues a ver si nos dejabas- Me dijo a lo que a mí me sorprendió - ¿Entonces qué dices? Sé que se los llevas a mamá y después te vas al hospital por lo que…
-Claro, los cuidan bien- Le interrumpí mientras me acomodaba el ultimo zapato- Me iré ahora si no te importa
-Está bien…- Respondió atónito
Baje a la planta baja notando como el rubio jugaba con los niños por lo que me despedí de ellos, dándole a cada uno un beso en la frente para después salir y coger un taxi.
Hace ya algún tiempo había dejado de conducir, más exactamente desde que empecé a beber, cada noche trataba de olvidar aquella frase que me informo que mi amor está en coma.
Itachi verdaderamente tiene razón, e descuidado todo y se preocupan por mí, lo sé pero n pueden hacer nada, hasta yo sé que lo único que me queda es esperar y tener esperanza
Cuando llegue al hospital, inmediatamente me dirigí a su habitación, donde sentía que mis fuerzas fallaban una vez más, que mi respiración se aceleraba y al mismo tiempo se entrecortaba, mis ojos trataban de brotar aquellas gotas salinas y mi garganta pedía un grito.
-¡Buenos días!- Le salude como siempre sabiendo que no recibiría respuesta
Me senté en la silla al lado de su cama empezándole a contar todo lo sucedido de ayer y hoy hasta que me venció el sueño
**************RATO DESPUES *********************
Siento que alguien me llama, por lo que pienso en desertar creyendo que es una enfermera.
-Naruto- Le llamo al verlo con los ojos abiertos y esa típica sonrisa tuya
-H-… -hol… a- Me saluda ampliando su sonrisa
-¡NARUTO! – Grito al final, lanzándome a abrazarlo dejando que todos mis sentimientos se desbocaran, llorando amargamente en su pecho sintiendo como una débil mano empezaba a sobar su cabello- ¡Debo estar soñando!- Le digo tras levantar mi cabeza y mirarle - ¿!Enserio estas despierto!?
-Si…- Me contesta
-¿Qué sucede Sasuke-San? ¿Por qué grita?- Pregunto el Doctor llegando con un grupo de enfermeras
-¡Naruto despertó!- Les dije viendo luego la mirada de todos
-¿Por qué no había llamado antes?- Me regaño acercándose a Naru para revisarlo
-Grite es suficiente- Le conteste en broma dándole permiso sin soltar la mano de mi rubio
Estoy tan feliz que hasta ganas de bromear me han dado.
-¿Cómo se siente Señor Uzumaki?- Le pregunto
-Me duele la vista, y tengo la garganta seca – Le dijo apretando mi agarre
-Es normal, después de todo a estado un buen tiempo dormido- Le comento- Ordenare que le traigan algo para quitarle esos pequeños malestares
-Gracias- Le respondió
-Sasuke, quieres informarle a tus familiares o lo hago yo- Me pregunto
-Hazlo tú, ahora no tengo tiempo de moverme de aquí- Le dije aun sin creerme que él estuviera despierto.
El doctor salió del cuarto sabiendo que iba a perder el tiempo si halaba conmigo y lo agradecía pero ahora era yo el que no sabía que hablar, estaba emocionado, triste, alegre y un montón de emociones que ahora mismo no sabría describir.
-Te extrañe- Fue lo único que pude decir tras ver como volvía a sonreírme.
-Lo se…
-Perdóname
-¿Por qué?
-No fui constante, poco a poco iba perdiendo la esperanza de volverte a ver despierto.
-Pero estas aquí… eso es lo que importa- Me dijo sonriendo pero de un momento a otro se puso serio- ¿Dónde están mis bebes? ¿Nacieron bien? ¿Cómo se llaman? ¿Quién los tiene ahora? ¿Cuántos días, meses o años tienen? ¿Q…
-Cálmate, ellos están bien- Le tranquilice- ¿Recuerdas todo?
-Si
-¿Cómo?
-No lo sé, simplemente sé que ha pasado tiempo pero no sé cuánto tiempo- Me dijo- Además tengo todo entumecido – se quejó frustrado
-Es normal, han pasado seis meses- Le conteste- Nuestro hijos están bien, la verdad no eh podido o no eh querido ponerle nombre, esperaba a que despertaras.
-Ya los quiere ver ¡Deben de estar hermosos! – Me dijo ilusionado
-Sí, todos tienen el cabello rojo y largo-
Todo el resto del día me quede hablándole de todo lo que había pasado en el tiempo en el que él estaba dormido, contando todo aquello que me paso, lo triste y sol que me sentía al saber que lo podía perder y aunque no quise el me obligo diciendo que era necesario para que yo me pudiera sentir tranquilo.
Habría seguido contándole si no hubiera llegado toda la familia de golpe llorando y sin creerse que él ya estaba despierto.
Prácticamente me arrinconaron al estar abrazando a Naru y llorándole en su regazo.
-¡Te extrañamos tanto!- gritaron los gemelos tirándosele encima sin dejar de llorar-
-Yo también- Le dijo- A todos
-Mira las tres cositas que te quieren conocer- Dijo Deidara aun llorando mientras cargaba a la niña
-Mis bebes- Le llamo Naru al tenerlo cerca- Como deseaba verlos, son preciosos
-Si – le dijo mi madre- Ahora dinos ¿Cómo se van a llamar?- le pregunto mi madre y sin Naru dudarlo respondió
-La niña, Karin, él bebe que tiene los ojos morado Nagato y el ultimo Gaara- Sonrió a lo que todos aplaudieron felicitándolo.
-Pues hay que bautizarlos – Dijo mi padre
-Sí, yo iré preparando todo y en ese tiempo Naru se recupera- Respondió emocionada mi madre.
El resto del rato hablaron todos mientras yo me dedicaba solamente a mirar contento, disfrutando de cada instante que pasaba… Cuando al fin del doctor llego y saco a todos yo me despedí de mi AMOR.
-No quiero que te vayas - -me dijo
-Y yo no quiero alejarme de ti- Le respondí acariciando su rostro- Pero tienes que descansar, ya vendré mañana
-Lo sé, pero te extrañare-
-Igual yo- Le dije acercándome hasta su rostro- No sabes cuánto eh esperado para besarte de nuevo
Sin más me le acerque para saborear esos esquicitos labios en un beso lento entregándole todos mis sentimientos pero pare en seco al oír cómo se reía entre nuestras bocas
-¿Qué sucede? – Pregunte sin entender nada
-Es solo que tu barba me pica- Dijo- Lo siento no quería dañar el jaja momento
Yo solo sonreí dándole otro beso, extrañaba esas risas
-Te amo- Le dije
-Yo mas
Estaba realmente feliz, no lo podía creer después de creer que había perdido toda esperanza por fin lo tengo de vuelta a mi lado, sin daños ni preocupaciones. Con la familia reunida y desbordante de felicidad, ahora si podría volver a ser el mismo y solo esperar a que tuviéramos un comienzo nuevo